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De vuelta al discurso creativo, este hilo conductor permite seguir adelante en el dialogo poético entre física y metafísica, entre lo científico y lo que se define como espiritual, en el sentido de que sus elementos se validan a través del empirismo23 y de una coherencia lógica a partir, obviamente, de la aceptación de sus premisas. Desde luego, aunque haya elegido basar mi investigación en fuentes que ocupan un lenguaje descriptivo y tienen relatos históricos, filosóficos y médicos que abarcan milenios, no puedo dejar de relevar que esta separación sigue manteniéndose muy marcada: en el mundo real, esas dos visiones no dialogan.

Sin embargo, una frase que se encuentra en “René Descartes: El método de las figuras” escrito por Pablo Chiuminatto, parece corroborar un intento de acercamiento. En el libro dedicado al filosofo, Chiuminatto hace un cambio de paradigma interesante al analizar a Descartes no por su planteamientos filosófico sino que por sus cualidades de autor y de intelectual en relación con su forma de expresarse al comunicarse con su lector, no limitándose al solo texto sino problematizando el uso de las imagines. Desde luego en el libro -que en portada añade el paratexto “Imaginario visual e ilustración científica”- se lee la frase siguiente: “Cualquier tipo de imagen tiene un coeficiente conceptual que puede ser transmitido por el coeficiente eidético (de idea) que lo sustenta. De este modo, podemos decir que tanto la descripción (écfrasis) como la figura dibujada a partir de aquella descripción, sea científica o literaria, significa en cuanto a imagen: representa ideas, conceptos. Así sucede desde las imágenes a las palabras y de estas a las palabras.” (24) Quizás pudiera ser que Esho-funi (la obra) sea definible como la representación visual de un dialogo que jamás ha podido darse.

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¿Qué es el aura?

Según el sitio www.metafisicachile.cl “Se le llama aura a un conjunto de fuerzas electromagnéticas de densidades variables que salen de los cuerpos físicos, vitales, etéreos, mentales, emocionales y espirituales. Estas partículas de energía permanecen en suspensión alrededor de nuestro cuerpo en forma de cubierta oval. Esta cubierta áurica sobresale del cuerpo en un promedio de 1 mt alrededor de nosotros, extendiéndose por encima de la cabeza, y mas allá de los pies, hundiéndose en el suelo.” (25)

23 buscar definición de … 24 Chiuminatto, Pablo, “René Déscartes, El metodo de las figuras, imaginario visual e ilustración cientifica” Santiago de Chile, Orjikh Ed. 2013, pág. 44 citando Cf. G. Careri, “L’ecfrasi fra parola e pittura” en “Ecfrasi: modelli ed esempi fra medioevo e rinascimento” G. Venturi y M. Farnetti (eds.) Roma, Bulzoni, 2004 pag. 391 25 En la web: http://www.metafisicachile.cl/aura.html. Además del texto mencionado se lee “Algunos

Los metafísicos identifican diferentes niveles de aura: el de “la salud”, que está estrictamente relacionado con el cuerpo y que no sobresale mas allá de unos pocos centímetros sobre la superficie del cuerpo; el nivel del “cuerpo astral”, que está relacionado con la naturaleza emocional y puede alcanzar hasta 25 y 40 centímetros sobre la superficie de la piel (hay que destacar que ese cuerpo emitiría las frecuencias que se leen a través del color) y finalmente el del “cuerpo mental” que estaría relacionando con el desarrollo intelectual del sujeto y que sería definitivamente el más amplio. Todo esto no terminaría aquí ya que la armonía entre los niveles permitiría el nacimiento de ulteriores capas, que interactuando se influenciarían unas con otras, creando dominantes de frecuencias que connotarían las tendencias vitales en las cuales se encuentra un ser vivo en un determinado momento.

Barbara Ann Brennan, una destacada figura del mundo de la medicina alternativa internacional, en su libro “Háganse la luz"26 aclara mejor: “El campo energético humano se compone de siete niveles (…).Cada nivel penetra en el cuerpo y se extiende al exterior desde la piel. Cada nivel sucesivo posee una «frecuencia más alta» o una «octava más». Cada uno se extiende desde la piel varios centímetros más lejos que el nivel de frecuencia inmediatamente inferior. Los niveles impares son campos estructurados de rayos fijos de una luz brillante. (…) Los niveles pares -segundo, cuarto y sextoestán llenos de una sustancia/energía sin forma. (…) Es el nivel no estructurado del campo energético lo que se ha relacionado con el plasma y el llamado bioplasma27. El bioplasma presente en los tres niveles no estructurados se compone de varios colores, una densidad aparente, e intensidad. Este bioplasma circula por las lineas de los niveles estructurados. Tiene una correlación directa con nuestras emociones”.

miembros de la comunidad científica han llamado al aura, campo de energía; otros, los hombres de la religión, forma espiritual; y los estudiosos del esoterismo, cuerpo astral. Respecto a los motivos por lo que se le ha llamado, al aura, de tan diversas maneras; cada grupo ha emitido su opinión de acuerdo a sus estudios.” 26 Brennan Barbara Ann, Hágase la Luz - (Light Emerging. The Journey of Personal Healing) Traducción Jordi Vidal, Biblioteca del Nuevo Tiempo. Rosario, Argentina, 1993 pág. 18 27 La Brennan destaca: “Recuerde que éstos son términos no científicos que utilizamos aquí porque la experimentación no ha demostrado aún de qué se trata. Pero, a falta de un término mejor, emplearemos la palabra bioplasma.”

La Brennan sigue luego: “El segundo nivel va asociado a sus sentimientos o emociones sobre sí mismo. Cada movimiento de energía que se produce aquí tiene correlación con un sentimiento que usted posee sobre sí mismo. Los colores vivos de energía nebulosa se relacionan con los sentimientos positivos hacia uno mismo. Los tonos más oscuros y sucios se relacionan con los sentimientos negativos hacia uno mismo. En este nivel se pueden encontrar todos los colores. (…) Si da libre curso a los sentimientos que tiene sobre sí mismo, sean negativos o positivos, el aura se mantendrá equilibrada. Y los sentimientos negativos y las energías negativas asociados a sus sentimientos se liberarán y se transformarán. Si se resiste a tener emociones sobre sí mismo, interrumpirá el flujo de energía en el segundo nivel que corresponde a esas emociones. Y su segundo nivel se estancará y provocará, con el tiempo, nubes oscuras, sucias y descargadas, de varios colores, relativas a los sentimientos que usted no experimenta hacia sí mismo28 .

En la practica entonces, con el uso de la cámara Kirlian que induce un intenso campo eléctrico en el que se posiciona una película fotográfica y el objeto por analizar, se da, en fin, una situación extremadamente peculiar donde, revelando el campo eléctrico al cual se somete un cuerpo, se obtiene una imagen coloreada que, aún si se presta a interpretaciones sumamente aleatorias, es aceptada desde una visión metafísica. La cámara podrá entonces revelar la frecuencia de ese campo magnético, relacionado con las emociones que revelará lo que podríamos llamar: los “colores de nuestras tendencias emocionales” que aunque no se puedan considerar ciencia exacta, tendrían que caracterizarse más o menos por lo siguiente: Rojo: actividad, fuerza de voluntad, emociones expresivas y gran vitalidad pero también conflicto y desafío; un rojo intenso significa hiperactividad. Naranja: creatividad, potencial artístico, inteligencia activa. Vibra más lentamente que el rojo y combina actividad y pensamiento. Amarillo: actividad a nivel mental. Indica condiciones óptimas para un perfecto funcionamiento de nuestra capacidad intelectual. Verde: señala el centro y el equilibrio. Azul: seguridad, tranquilidad. La mente puede penetrar en dimensiones más elevadas de aquella relacionadas exclusivamente con el estado emotivo. Violeta: intuición, transformación. Este color señala una energía psíquica que rechaza la violencia y la confrontación. Blanco: espiritualidad (en el sentido de no estar relacionado con el cuerpo), actividad mística, concentración, energía.

28 IBIDEM Brennan pág. 20

Diversos colores en las auras

Entonces, aunque no sean visibles a los ojos del ser humano, así como las estrellas los seres vivos emiten colores que pueden ser revelados a través aparatos específicos. Si la química de las estrellas define sus colores, en los seres humanos estos colores serían efecto de sus emociones. Es sin embargo interesante destacar como ambos sistemas están compuestos por más o menos los mismos elementos químicos y luego veremos como emociones y química están relacionadas.

El calcio y el fósforo hacen parte del esqueleto, el sodio participa del control de los líquidos del cuerpo, el magnesio es uno de los participantes en la realización del metabolismo celular, el hierro forma parte de la hemoglobina en la sangre. Estos elementos, que representan algunos de lo más importantes componentes de nuestro cuerpo, están presentes en la química estelar. Algo se aprecia también en el espectro del Sol expuesto más arriba. Gracias a la biorresonancia29 , explica Sergio Córdova destacada figura de la medicina alternativa en Chile30 , que revela las frecuencias atómicas de los componentes, junto a una importante cantidad de otros parámetros, es posible identificar también la cantidad de elementos químicos presentes en nuestro cuerpo. Los átomos de la materia se comportan en ciertos experimentos de física experimental como ondas y en otros como partículas, lo mismo que pasa con la luz. Cada átomo, electrón, protón, gluón y cada sub-partícula que los físicos han identificado tienen el mismo comportamiento: la materia tiene una dualidad de comportamiento a la cual no se sustrae la materia de la cual estamos compuestos. El equipo de biorresonancia detecta el comportamiento ondulatorio que emiten nuestras más remotas partículas, en todas sus frecuencias y las miles ondas

29 En la web: http://biorresonancia.com/cefiro/documentos/20.pdf 30 En la web: http://www.ohanichile.com/conocenos/staff/sergio-cordova-valle/

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