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(Sup\eme111to de la Tesis Político dcl Movimledo · Pro ftn~,io apróbacf.a por te. Quinta Asamblea Nocional celebroda .eot Ponce. Puerto IRko, el 1ro. de diciemlbre de 1963.)
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UNA' PUBLICACION DE EDITORIAL . . . ,CLAIUDA.D \,.
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· _San Juan, Puerto Rico, 1964
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INTRODUCCION Cuando en no-vi'e mbrc de 1959 se celebró en Ponce la Primera .A.samblea Nacional del Movllpiento Pro Independencia, se hizo un llamamiento a la resistencia. Se llamó al pueblo ¡puertorriqueño a hacer frente a la invasión económica del gran capital de Estados. Unidos, que aprovechándose de su preponderancia financiera, se apropiaba de la industria, penetraba arrolladoramente en el comercio y, en general, se introducía en las ramas de servicio de la economia, desplazando empresas nativas, y subordinando, cuando no eliminando por completo, a los profes4;>nales del país. Para aquel entonces, no eran muéhas las voces que alertaban al _pueblo de Puerto Rico frente al peligro inminente de que perdiera su patrimonio, y de que éste pasara a ser propiedad, casi exclusiva, de intereses corporativos extranjeros. Hoy, cuatro años más tarde, fuerzas de los más diversos campos dan muestras de la inquietud que provoca la arrolladora invasión económica. Este hecho solo, d.e por s_í, nos llena de optimismo. Porque pueblo que comienza a cobrar conciencia de sus problemas, adelanta con ello la,Initad del camino hacia las perentorias soluciones. Pero, si de un lado podemos- dar fe ·de esa ,preocupación alentadora, debemos co1nprender, de otra parte, que.no basta ]a ansiedad y la zozobra para vencer los males que acechan el . Sistema de Bibl_iotecas U.P .R. _Rio Ptedras
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-· progresb y desarollo del país. ·
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puertorr1q ~tua ~e Lrauucell ~11 !J~l'J Wclu~, cvllCl""~tus Y !Jre~:H~lues, que sucav~u1us mtereses J!al'tlcUlare::3 ue touas 1a::3 claties }.Jl'Ouuetoras ae ..t'uerto .n..1co: ue 1os ca!Juaustas e mum;tr1a1es nauvus, de 1as empresas agr1co1as y agr1cwtu1·es o.el ¡prus, ae los comer. c1autes puertorr1quenos, ae 1os qureros y campesmos, de los profesionales e mte1,ectua1es. .hil despl~zanuent.o o srmple retroceso de cuatqmer~ ae esos sectores, aeutro ael campo ae la proaucc1ón y la ecouomía, y el avance y predomnno de los mtereses absentlSt as, latuunrustas y corporac1omstas norteamericanos, son golpes .atentatorios contra ·l a supervivencia de .PuerLo Rico como naClon, de Puerto Rico como patria, de :Puerto lt1co como la tierra de los pucrtorr'lqueños. . , La preocupación que en la Primera Asamblea Nacional de noviembre de 1~5~ nos llevó a hacer el llamado a la resistencia, nos obJigó luego a ahondar en los problemas actuales. Resultado de ello es la Tesis Política que comenzó a cobrar contenido en la rrercera Asamblea Nacional, reunida en Arecibo en noviembre de 1961, y que después del proceso de un año de discusión se adoptó como base de la nueva doctrina de independencia por la Cuarta Asamblea Nacional, reunida en Bayamón en diciembre de 1962.
Importa ahora constatar si las tendencias políticas, económicas y sociales señaladas en la Tesis Política del }.;Iovimiento Pro Independencia, se verifican a la luz de los acontecimientos. Realizar ese examen, es la primera de -las tareas de esta Quinta Asamblea Nacional reunida en Ponce los días 30 de noviembre y lro. de diciembre d.e .1963. La segunda tarea es, la de concretar, a la luz de la realidad actual, la táctica que habrá de seguir el }.{ovinliento Pro Independencia.. DE LA CUARTA A LA QUINT_. ASAMBLEA NACIONAL
Cada día que pasa los hechos demuestran la veracidad de la Tesis Política del ~iovinriento Pro Independencia. Recordemos, si no, algunas afirmaciones claves. .e ~as Tésis Básicas l.-Apenas se encuentran sectores de la economía de Puerto l~ico en que no haya penetrado el capital norteamericano. El mo-6-
nopolio, la concentración de riqueza y el absentismo considerados antes, junto al latifundio, como males de la indust~ia azucarera, :resultan ser hoy la nota dominante de la economía en general. 2.-Difícilmente puede un pueblo mantener su preponderancia política, social y cultural si se le despoja ¿le su base económica. Si los puertorriqueños perdieran totalmente el control de su economía, pasarían .a plano secundario en la sociedad. De ¡permitirse la absorción imperialista en toda su magnitud, el proceso copduciría: a la desaparición de la nacionalidad puertorriqueña. 3.-Contrario a la teoría de los dirigentes del actual partido de gobierno, la presente situación de Puerto Rico no es producto simple d.e las fuerzas ciegas de la economía. A ello ha contribuído, en apreciable.y sustancial medida, la política gubernamental predominante. De ahí la responsabilidad que recae sobre los hombres que dirigen la colonia. Estos pretenden, hipócrita o cínicamente, que el pueblo puertorriqueño es quien más se beneficia de la actual situación, especialmente de la relación económica y ¡política con Estados U nidos. Lo opuesto es la ve.r dad: Quien políticamente se beneficia es Estados U nidos, y · económicamente, quien en grado superlativo se beneficia, es la plutocracia monopolista y absentista que ha hecho presa a Puerto Rico. . 4.-La creciente monopolización de las ramas de la economía de Puerto Rico va acompañada del . fenómeno de la inflación: aumento del precio de la tierra, de las viviendas, de los alimentos, etc. De ahí el caracter artificioso, y prácticamente efímero, de la tan decantada prosperidad. El llamado progreso que se dice reina en· esta tierra, no es producto de un auténtico desarrollo de las fuerzas productivas puertorriqueñas. Por el contrario, tales fuerzas han sido postergadas, y víctimas de la indefensión polítj.ca7 se ven hoy rezag~das, y cada día merma su dominio sobre la economía del país. 5.-La invasión de capital extranjero, las .subvenciones gubernamentales y la expansión jHmjtada del crédito, explican el relativo auge económico de los últimos años .. Lo ~ual hace evi- dente que es }Jroducto de la venta. ~el patr1m?n1o del p~e,blo, proceso que, de continuar en fo:·ma 1n1nterrump1da~ conducrr1a a la completa. asin1ilación econónuca cop Estados u nidos, lo que a la large conlleva la asimilaci~n ,política Y, cultural. Esto signif~ caría en concr.eto el traspaso total del pa1s, de manos puertorn' a maij.os . norteamericanas. ' queñas
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6.-Esa sería la culminación del proceso, si no confligieran los genUinos intereses puertorriqueños y los intereses monopolistas norteamericanos. Pero lo cierto es, que los hechos mismos imponen el conflicto, y éste, lejos de aminorar se intensifica. En términos generales, las dos fuerzas, no empece su poderío desjgual, chocan inevitablemente: de un lado, los intereses de Puerto Rico como nacionalidad, y de otro lado, los intereses de Estados U nidos como poder preponderante en lo .económico, en lo político y en lo militar. Ese antagonismo, en alguna medida se hace evidente, en los múltiples cam.pos de relaciones de Puerto Rico y Estados U nidos. Las reformas~ reajustes y cambios implantados hasta ahora, no resuelven el conflicto. Esa realidad sustenta y da razón de ser a la lucha de independencia. 7.-De ahí la nueva interpretación que la lucha de independencia merece al Movimiento Pro Independencia. Esa lucha es justamente, producto de una realidad económica insoslayable, además de ser resultado de un determinado desarrollo histórico. Por tanto, la lucha de independencia se manifestará en Puerto Rico mientras exista la realidad colonial qu.e la prohija, y desaparecerá solamente cuando el conflicto que la genera haya sido superado, es decir, cuando se reconozca a Puerto Rico el derecho a constituírsc, libre y democráticamente, en un estado soberano dentro de la familia de estados que integran la Organización de las Nacion~s Unidas. Nueva Evidencia Las anteriores tesis, que constituyen la piedra angular de la Tesis Política del Movimiento Pro -mdependencia, se v.en comprobadas eada día por los hechos. Veamos algunos de esos hechos, registrados en el curso del presente año de 1963. . · . 1. En una de sus ediciones de mayo, la conocida revista U. S. News and World Rep.ort decía: ''Puerto Rico continúa siendo un imán para las corporaciones norteamericanas. De las cien 1nayores corporaciones ·n orteamericanas, 20 poseen por lo menos una fábrica en Puerto Rico." 2. El Gobierno no cesa en su propósito de atraer más ~orpo raciones extranj.e ras 3: Puerto Rico. El New York Times -del~ -de octubre contiene nueva evidencia de su persistente campana en la búsqueda de inversionistas. En un anuncio de una plana de dicho periódico se promueve el follet_o Puert~ Rico '63 p~bli- · .cado .p or la Administración de Fom~nto Industrial.· En el nnsmo
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se pron1ct.e a los "1nnnufactm·cros un pro1ncdio de 30 por ciento de ganancias ~ sobre sus inversiones ". · 3. Sin embargo, la teoría ilusoria que inspira la política de industrinli7.nción colonial está hncicnclo crisis. El Director Eje~ cutivo de la Asociació11 de Inrlnstrinles, Sr. Ramóu F. Calderón, así lo arhnit.c cuando <li,io, en EL MUNDO dr.l 4 de octnhre : "Es 1nenestcr arlqnidr eonsciencia de lo~ pcli~ros inherentes de una econon1ía cxclns ivntnente dt\pcndicnte de o"peraciones iudustriales que son ~n ctn·salcs de en1prcsns tnntriccs de Estados Uniuos.'"· 4. El carácter precario de 11nn c~ou o1nín industrial basada. en suctu·salcs de grandes corporaciones norte:unericanas , estú sim1do r econocido por los que ayer sostenían lo contrario. Pero hay algo más : La experiencia .está dCinostrando el caritetcr ilusorio de esa política industrial. En la r evista Time del 28 de junio de 1959, la AdJninistración de Fomento pron1ctín tener 2,500 fábricas en produccióu para el afio 1975. Un afio más tarde, el j.cfe de esa dependencia gubernan1ental se reafirn1nbn en el objetivo, y aseguraba que sutnarín a la produccióu 120 fábricas adicionales cada año. Para 1nediados de ] 96J, el j efe de Pon1ento no habla ya de 2,500 fábricas para el afio 1975, si no de 1750, o sea, 750 f:.íbrü~as n1enos de las que Re augura ba.n hace cinco añoR. 5. La crisis del progr:una de industrialización colonial la puso en evidencia el Director ]~j ccutivo de la Asociación de Industriales, Sr. Ra1nóu F. Calderón, cuando declaró en El Mundo del ·4 de octubre: ''Del total de 1,225 fábricas prp1novidas por Fomento y que llegaron a co1nenzar op~raciones, 408 han descontinuado operaciones aquí, o sen, 33 por ciento rlel total. De las que han descontinuado operaciones, el 90 por ciento eran sucursales de firmas matrices establecidas en E stados Unidos . .. De las 817 fábricas ~)romovjdas por Fomento que contin1ían abiertas y operando, 623 son sucursales de con1pañías 1natrices que radican· en Estados Unidos, o sea, una proporción del 76 por ciento del total." 6. Evidencia adicional del estancamiento en ()Ue lln caído el ])rograma de industrialización colonial lo dió la Cámara de Comercio y la Asociación rlc Industriales en un Manifiesto conjunto, publicaclo por El Mundo el 28 de octubre. Se rlice en el mis1no: , "En lo auc va de año fiscal, Fo1nento ha promovido sólo 14 fá' bricas, cifra m~y inferior a la proyectada. Han cerrado sus puertas, hasta ]a fecha, 430 industrias y Fomento tiene ltoy 1nás de -9,.
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120 edificios industriales vacíos.'' 7. Fomento alega que en las fábricas promovidas por ellos trabajan alrededor de 60,000 personas. Lo que generalmente no muestran las estadísticas oficiales, es que se trata de qperarias en m1 60 por ciento. Es decir que, más de 30,000 de los empleos ereados por el programa de industrialización colonial, han sido . cubiertos por mujeres. Esta tendencia continúa, mientras que de otro lado, bajan las fuentes de empleo masculino. ' 8. Contrario a la propaganda gubernamental, el desempleo no ha ído decreciendo, sino aumentando. Esto resulta doblemente grave, puesto que, como es sabido, más de medio millón de puerto.r riqueños se vieron forzados a emigrar de su tierra durante los .años de 1945 a 1959. Un estudio del Departamento del Trabajo . de Estados U nidos, publicado por El Mundo el 9 de s~tiembre, presenta el siguiente cuadro ascendente dé la tasa de desempleo en Puerto Rico: 1961 once por ciento; 1962, trece por ciento; 1~3, catorce por ciento. · · 9~ Lo anterior es sólo el promedio con relación a l~ fuerza obrera total. En. regiones y pu~blos específicos, las cifras son · mucho más alarmantes. Por ejemplo: En Ponce y Mayaguez, es más del14 por ciento. En Aguadilla es 18 por ciento. En :-J\recibo es ~1 por ciento. En Humacao es .23 ;por ciento. En Guayama es ~O por ciento. Aden1ás, en 10 de cada 12 poblaciones, el desempleo ha amnentado. Se dan cifras tan altas como las siguientes: Caguas, 18 por ciento; Manati, 22 por ciento; Yauco, 20 por ciento; · Naguabo, 23 por ciento; Toa Alta, 25 por ciento; Toa Baja, 20 por ciento; Vega Alta, 24 por ciento. · 10. El mantenimiento de una· alta tasa de desempleo, crónico y estacional, se explica sólo por la creciente dependencia en la ayuda de bienestar social. De acuerdo con información de El Mundo del 9 de septiembr.e, 850,000 personas dependen, total o · parcialmente, del "mantengo". El mismo periódico reveló el.día 20 de noviembre que la mitad ~e los habitantes de Barranqmtas reciben ayudada de bienestar público. Situación similar ocm·re ·€n la generalidad de las poblaciones, fuera de las grandes ciuda~ des, especialn1ente en toda la zona montaños~. A lo anterior suma la revelación de la División de Bienestar Público en Imparcial del 11 de noviembre, sobr~ la existencia de po~· .lo menos 85,000 familias, la quinta pal~te del total de las familias -del país, que viven .e n situaci9u _d e ¡penuria extrema.
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11. Ciertame;nte, este cuadro es 1nuy distinto al que pinta la propaganda, gubernamental. El total de obreros eiDJ?leados por la industria en todas sus ramas, apenas sobrepasa la cifra de cien mil. Y si difícil es 1a vida paí·a los obreros industriales, mucho más penosa es para el resto de la fuerza obrera integrada por 700,000 personas. Si bien las condiciones de vida hán mejorado durante la última década, no se justifica el pavonearse por haber alcanzado un ingreso per cápita de $700 al año. Se traté;t de un promedio coil el que se 1pretende ocultar la desigualdad económica, cada día más creciente. 12. El alza de un 3 por ciento anual en el índice del costo de vida, es práctican1ente una regla. ·Enlo que respecta a alimentos, el aumento es de 4 por ciento anualmente. Y en lo que se refiere a alimentos producidos en el país, el ¡promedio anual de aumento es de casi 7 por ciento. En el curso del presente año (hasta el mes de abril, de acuerdo con el Negociado de Estadísticas), el costo de vida ha aumentado 11 por ciento sobre 1958. Si como base se uti-liza el1948, entonces el aun1ento registrado es de 35 por ciento.. 13. En términos del valor adquisitivo del dólar, la situacióu es la siguiente: Los 100 centavos d.e hoy adquieren lo que en 1958 se compraba con 90 c·entavos. Si la comparación se hace con llll período n1ás lejano, se descubre que el valor adquisitivo del dólar de 1963 es igual a 74 centavos del dólar de 1948. Y si se va todav.ía más lejos, se descubre que el dólar de hoy vale menos de la mitad del dólar de 1941. · . 14. El salario promedio de Puerto Rico es a penas una tercera parte del salario promedio d~ Estados U nidos. El costo de vida en. Puerto Rico es, sin embargo, 1nás alto que el costo de vida en Estados U nidos. De ahí que el1nismo dólar que en térmi~ nos de poder adquisitivo vale 96 centavos Estados Unidos, en Puerto Rico vale 90 centavos. Y lo que es todavía más significativo: mientras el dólar del norteamericano ha ído bajando últimamente a razón de cuatro centavos en un lapso de cinco años, el d61ar del puertorriqueño ha bajado, en ténninos de poder adquisitivo, diez centavos durante ese misn1o término. 15. A base de evidencia presentada por la comentarista de asuntos financieros Sylvia Porter, ajustándola al riivel de salarios prevalecientes en Puerto Riqo, he aQuí el contraste entre un obrero industrial norteamericano y un obrero industria.! ¡puertorriqueño: Mientras el obrero norteamericano trabaja 5 minutos:
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adquirir una libra de pan, ·ei ·o brero puertorriqueño trabaja 111Dlllutos por .ui IDlSma .llura ae pan. J.Vllentras el norteamer1cano trauaJa 7 nunutos para adqmnr un htro cte leche, el puertorriqueno neces1ta el Importe de 15 minutos de trabajo para coll\Prar un lltro de leche. MJ.entras el norteamericano trabaJa 17 nnnutos para adquir!r 10 libras de papas, el puertorriqueño tiene que trabajar 48 minutos para consegmr el importe de 10 libras de papas. Y. así ocurre en el caso de todos los artículos indispensables para . VlVlr. , 16. Lo anterior es lo que define, lo que significa, explotación ~olonial. Los a¡pologistas del imperialismo y los fariseos colonialistas, repiten día y noche, en persistente propaganda, que Estados U nidos no obtiene beneficios de Puerto Ri~o. Y durante más de 60 años han pretendido convencer a los puertoniqueños, d.e que E stados Unidos no tiene interés en mantener su dominio en Puerto Rico, y que lejos de beneficiarse los ~orteamericános de esta situación, son los puertorriqueños los que se benefician. Todo lo cual es una burda mentira, la que contribuyen a encubrir los propagandist?-s a sueldo y de1nás servidores de los grandes intereses corporacionistas, entre los cuales se encuentran puertorliqueños descastados que ta1nbién se benefician de la e~lotación rl~ su pueblo. , 17. Si bien en alguna medida Puerto Rico depende de Estados Unidos, no es menos cierto que ta1nbién Estados lTnidos depende de Puerto Rico. Bajo relaciones recíprocas, esto no tendría nada de particular, ya que en el mundo contemporáneo se reconoce generalmente la interdependencia de las nacionalidades, lo mi~mo grandes que pequeñas. Lo que hace injusta para Puerto Rico esa relación, es el ·carácter colonial de la misma. Esa desigualdad es la que ·permite a Estados U nidos beneficiarse en grado superlativo de la indefensión de Puerto R.ico. Tales beneficios se realizan €n tres niveles: (1) Puerto Rico como mercado de Estados Umdos; (2) Pue¡-t_o Rico como fuente de superganancias para los inversionistas de Estados U nidos; y (3) Puerto Rico como base naval, nrilitar y aérea y centro de reclutamiento para sus fuerzas armadas. .. ]8. En cuanto al úlfiiuo ele esos puntos, la situación no ha cambiado en el cm·so del año. El D~partamento de Guerra de Estados ,u nidos sigue en posesión de ah·ededÓr del 13 por ciento <lel territorio cultivable puertorriqueño. El peligro de exterminio
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atómico, planteado en el notable Manifiesto de septiembre de 1~1 por 1~ profesores e intelectuales, sigue vigente. Ji;n reportaje publicado por El Mundo del22 de febrero; bajo la firma de Ralph Ober, se confirma la razón de la denuncia. En el misn1o se llama a Ramey Field "carretera militar de Latinoamérica, Europa y Africa", y se añade: "La base es en realidad un enorme compuesto de 14 lugares diferentes en la costa Norte y Oeste de la Isla. Las instalaciones se extienden desde Río Piedras hasta Aguada.'' Es decir, Puerto Rico, al igual que la martirizada Isl.a de Vieques, en la que la Marina se ha apropiado de 26,000 de las 33,000 cuerdas de su territorio, es sencillamente, una base militar~ na\al •v aérea de Estados Unidos. · 19. En cuanto al segundo de los puntos, Puerto Rico como fuente de superganancias para los inversionistas de Estados Un~ dos, basta señalar que la tasa de ganancias del inv:ersionista norteamericano en Puerto Rico es de, por los menos, -28 por ciento anual en promedio, mientras en Estados U nidos. no sube _del 13 por ciento. El caso de la Commonw€alth Refining Oil Co. es un ejemplo concreto y elocuente. En los primeros seis meses de 1961 esa co11)oración obtuvo, de acuerdo con información de El Imparcial del 10 de julio de ese año, la suma de $6,100.00, o sea, un beneficio neto de más de un.millón de dólares al mes. Tal nivel de grulancias ha ¡p ersistido, como lo demuesb:·a una información publicada por El M\mdo el 30 ele enero del presente añq, en la que se dice: ''La.Commonwealth Oil Reñnning Co. an1.mció que las "Ventas de su r efinería en el sur de Puerto R.ico para el año 1962 llegaron a un nivel récord ... " Pal'a ese mismo tiempo se anunció la expansión de la refinería hasta alcanzar la c-apacidad ele 100 mil barriles de producción al día. En el curso del año pasado, el pabimonio de los accionistas aumentó de $4J ,895,000 a $50,594t000. Oh·os ~jemplos : los llamados :i\'Iolinos de Puerto Rico. que es una compañía subsidiaria de Nebraska Consolidated Milis Co., al p oco tiempo de iniciai' sus operaciones, en julio ele 1961, informó gan ancias. después del pago de contribuciones, montantes a cerca de tm millón de dólares. más del doble del año anterior. según infor mación de El Mundo del 9 de :iulio de 1962. E se mismo año, e122 de non enlbre. el rnsmo periódico informó que 532 empresas, exentas de c on h1.hucion e~. ohtuvieron benefi cjos de 1961. montante~ a ~8 milln11es de dólares. Es en hase a eRa experiencia. que la A..d.m:i.ni~-tración de F omento e:ar;:lntiza ganancias ele hasta 30 -13-
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por ciento sobre el capital invertido, y que tal promesa es el inayor de los mcentivos que esgnmen para atraer .a Puerto Rico más sucursales de corporaciones norteamericanas. 20. Resta aliora presentar nueva evidencia sobre el beneficio que Estados U nidos recibe de I)uerto Rico por su condición de mercado de n1onopolio. En anuncio gubernamental publicado por el New York Times del 23 de octubre, se dice que Puerto Rico ., compra ahora a Estados U nidos más que España, Portugal, Irlanda, Austria, Dinamarca, Finlandia, Suecia y N oruega juntos". Puerto Rico es actualmente el segundo mercado en importancia de Estados Unidos en el Hemisferio y el quinto mercado en ilnportancia del mundo. El año pasado, Puerto Rico v.endió a Estados U nidos mercancías por :valor de $802 millones mientras compró mercancías por valor de $941 millones. Las últimas cifras elevan las importancione_s, para el año en curso, a más de mil millones de dólares. El desbalance entre lo que se com¡pra y lo que se vende persiste. y todavía es mayor en el caso .de las exportaciones de Puerto Rico a paises extranjeros, fuera de Estados Unidos, en cuyo caso el desbalancc ascendió el año pasado a $177 millones. Los beneficios que Estados U'n idos recibe, como ·consecuencia rl e las compras de Puerto Rico, se reconocen en el anuncio citado en el pá1Tafo anterior. En el nri.smo se dice: "El ingreso por tales compras se disenrina a través de los estados. El Sur recibe $288 millones. Los estados del Mediano Oeste, $255 millones. Los estados ~le la costa del Este suplen $256 millones en mercancías. California, W áshington y Oregón realizan ventas por valor de $93 millones en el mercado puertorriqueño. _ 21. Ese dominio d~ n1onopolio que ejerce Estados Unidos sobre el 1nercado de Puerto Rico ha traído como consecuencia nuevos desenvolvimientos. Tal es el caso de la invasión de tiendas en cadena y de 1~ distribución de los productos por las corpora-ciones manufactureras directamente, con la consiguiente eliminación de las empresas intermediarias. En .e l curso de este año se ha visto que no se trata sólo de la desaparición del comercio detallista, sino también de mayoristas y empresas representativas del alto comercio puertorriqueño. Véase el -problema tal y como lo infor:r;nó El Imparcial del 14 de julio: "Comercio protesta de fabricantes de Estados Unidos ... Varias firmas comerciales del país han dentmciado ante la Cá1nara de Comercio y ante el De-14-
partamento de Justicia la práctica ·establecida en los últimos meses por casas manufactureras norteamericana, q~iándoles la rtWresentación sin previo a viso ... '' De otro lado, El Mundo del día 13 de agosto daba cuenta del problema, en los siguientes términos: ''Crea pánico cancelaciones de R.eg;>resentaciones en Puerto Rico por fábricas de Estados Unidos ... La alarma ha crmdido en - el alto con1ercio de San Juan debido a las muchas y repetidas cancelaciones de representaciones de firmas manufactureras norteamericanas que se han hecho sin previo aviso.'' . 22. El 23 de julio del año .pasado, El Mundo dió cuenta-. de un discurso del entonces Presidente d.e la Cámara de Representantes, Lic. Ernesto Rámos -Antonini, 'en el cual declaró que ya no eran necesarias más. inversiones, especialmente en el comercio, donde ·'ya tenemos la experiencia y la saturación suficiente". Y añadió que toda nueva inversión extranJera no tenía otro objetivo. que el de desplazar al capital nativo, sin amnentar empleos .. . Pero esa voz de alerta, de quien pocas semanas después habría . de morir, no fué suficiente para dar rm cesgo a la situación. De entonces acá, lejos ·ae disminuir, la voracidad n1onopolista del comercio extranjero ha ido en arunento creciente. Nuevas cadenas han aparecido junto a las ya conocidas de .W oolworth, Franklin 's, Bellas Hess, Kresge, Grand U nion, Lerner Shops, Thom MeAn . .. A principios de año se inauguró la nueva cadena de tiendas Baker 's. Ellro. de octubre, El Mundo dió cuenta de la inauguración de la primera de una serie de tiendas Zayre. ·Para esos mismos dias, la cadena de restoranes Dobbs House anunció que a los dos establecimientos que tiene funcionando, añadiría dos más en el· curso del año. El 29 d.e agosto se anunciaba en EL MUNDO la inauguración de un tercer establecimiento·de Bargain Town: supennercado, mueblería, ferrete1ia enseres del hogar en un edificio de 135,000 pies cuadrados, enclavado en u~ terreno de ocho cuerdas de .extensión. El mismo periódico anunciaba el 16 de octubre, la próxima construcción de otra tienda Sears en un edificio de 100,000 pies cuadrados. Para ese mismo . tiempo, Pueblo Supermarkets anunciaba la inauguración de· su décimo establecimiento. Y así ha seguido avanzando el comercio· monopolizador de las grandes corporaciones norteamericanas, sin gue en lugar -alguno se haya fijado el .mítico "paralelo 38" que supuestamente íba a asegurar la vida al comercio puertorriqueño. Esta situación llevó·al Presidente de la Cámara de Comercio a -preguntarse El Mundo del 9 de octubre: "~Está el comerci()l
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puertorriqueño en condiciones de afrontar y resistir airosamente la competencia del nuevo tipo de negocios que ha surgido en los últimos años y que, respaldado por grandes fuerzas económicas, se ha esta.blBcido en la Isla~'' Y se vió \obligado a responder: ''Yo diría que la pelea es desigual.'' Lo que en verdad es una manera . nniy suave de pintar una situación · que es· sumamente grave, con1o lo demuestran los siguientes·datos ¡publicados por El Mundo del lO de octubre: "En los tres meses de. julio, agosto y septiembre de 1963 hubo 21 quiebras de negocios .. .. _El total de quiebras durante los primeros nueve meses de 1_~63 fue 50, casi dos veces mayor que clm·antc el nrismo período del año anterior. La mitad de las quiebras, tanto de. éste como deL año anterior, fueron sufridas por el comercio detallista.'' 23. Ese alarmante_proceso de concentración y monopolización del c01nercio no se limita a las ramas de alimentos y mercancía seca. El problmna se manifiesta igualmente en el negocio de farInacias, lo que n1ovió al Presidente del Colegio de Farmacéuticos, Sr. Esteban Amador, a declarar en EL MUNDO. a principios de año: ''Debemos fonnar el pulpo de farmacias de Puerto Rico para salvarnos de las tiendas fabulosas que se están abriendo en nuestro país y la cadena de n1odernas fai·macias, que con capi tal norteamericano, se está comenzando a fomentar a lo largo de la Isla/' 24. El ~)roceso se manifiesta igualmente en la industria de la construcción, lo que llevó al Ingeniero Salvador Padilla, Vicepresidente del Colegio de Ingenieros, a n1anifestar ~n EL MUNDO del 7 de octubre, lo siguiente: "Quiero señalar que a menos que no se adopten medidas enérgicas y rápidas, los pequeños y medianos constructores del país están abocactos a desaparecer ante la con1petencia de los grandes constructores que están afluyendo a la Isla acaparando los posibles terrenos urbanizables y logrando las 111ejores y más mnplias fuentes de financiamiento, reduciendo así la habilidad ele nuestros· construc,tores para competir con ellos." 25. El problema no consiste tan sólo en la invasión de nuevas empresas. Lo grave es que la prepondera11cia financiera de las corporaciones invasoras absorben a las empresas puertorriqueñas. Tal es el caso de las Galletas Sultana, hoy simple división de la National Biscuit Co. Tal es el caso de ciertas marcas de ron, en la actualidad propiedad de la Se~grams. - Ta1 es el caso de los l1elados Payco, en1presa puertorrk{ueña absorbida en el curso de este año por una gran corporación norteamericana. Pero tales -16-
casos, son s~lo algunos ejemplos conocidos. El proceso continúa. Así tenen1os que el12 de febrero informaba EL MUNDO: ~'La Continental Baking Co. de Nueva York gestiona el control de las ,panaderías'' de Puerto ~.ico. La cadena de supermercados Grand Union posee la Panan1er1can Bakery. Por su parte, Pueblo Super·nlarkets absorbió a la Holsum Bakers a mediados de este año. 26. Ese ' proc~so de concentración está en pleno desarrollo en las industrias del ¡)an, muebles, cemento, abonos, petróleo y stLcs derivados, química, helado, cerv.eza, envases de cartón, galletas, leche y sus"derivados y otras ramas de la producción. Todo lo cual llevó al economista del Banco Gubernamental, Sr. Jorge Freyre, a declarar en El Trimestre Económico, edición de octubre a diciembre de 1962, revista de economía que se publica en México: ''Los intereses absentistas (en Puerto Rico) están tomando el control de las principales empresas de un buen número de industrias manufactureras orientadas hacia el mercado local, y en la mayoría d.e los sectores esta tendencia ha ído a¡parejada a un incremento e:q el grado de concentración de la industria. Los procesos mediante los cuales se l1a generalizado este cambio estructural en determinadas industrias manufactureras, han sido la adquisi,ción de plantas locales y la creación de nuevas empresas ~bsentistas ... '' 27. El proceso de concentración y 1nonopolización, lejos de haber disminuído, se ha intensificado en la industria azucarera ·en el curso de las últimas dos décadas. El Presidente de la Cámara de Representantes, Ernesto Ramos Antonini. manifestó en una Convención de Futuros Ag-ricultores, según El Mundo del 28 de mayo de 1962: ''La Central Aéuirre posee como dueña unas 17,976 cuerdas de terreno, ha tomado 8,817 cuerdas en arrendamiento a los arrricultores y por ~Contrato de Administración' utiliza 7,150 cuerdas, para un total de 33,944 cuerdas." R.eveló también en esa ocasión. que en el curso de los últimos diez años el en1pleo proDledio de homhres en la agricultu1·a se redujo de 200,000 a 120 000 señalando además el hecl1o de que los hombres entre las ed~de~ . de 20 a 44 años abandonaban los ·campos en busca de mejores · oportunidades de trabajo. . _ 28. El proceso de concentración en la industlia azucarera se aceleró cuando en julio de 1961 la Eastern Sugar Associates. con Ja sanción y respaldo del Gohierno, vendió sus uropie~ades (Centrales Canóvanas, Jtmcos. Fajardo. Cavev y Cag-uas, más 18,000 cuerdas de tierra) a C. Brcw.er & Co. 'A las tierras que posee en propiedad, esa corporación ahsentista ha smnado las que en 1
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arriendo le ha traspasado la Autoridadae Tierras, más las tierras de los colonos que administra por contrato. Todo .ello suma un total de 51000 cuerdas del suelo cultivable de Puerto Rico. · 29. Es~s dos grandes corporaciones azucareras, Central Agui- · rre y Brewer & Co., forman, Jm;to a ~a Guánica Central, l~s tres grandes pulpos absentistas y latifundistas q~e controlan la Industria azucarera en proporción n1ucho mayor que antes de 1940. La decantada reforn1a agraria prometida hace un cuarto de siglof ha arrojado, co1no sus principales resultados: una concentración aún mayor de capital monopolista, un más rápido desalojo de agricultores, y ha sido, además, factor contribuyente de la emigración campesina a la ciudad. Como consecuencia, ha decaído , la producción agrícola para el mercado nacional, se ha intensificado la pauperización del campo y se han exa;>andido lof? arrabales en las grandes ciudades, especialmente en San Juan. 30. El desalojo de agricultores en general, y en particular de colonos cañBros, ha ído .ocurriendo en forma cada vez más rápida. El 15 de enero del año en curso, informaba El Mundo: '·Eu 1953 había 1lll total de 19,833 fincas de azúcar en Puerto Rico, pero para 1960 ese total se había reducido a menos de 15,000." El 11 de septiembre, ese mismo periódico dió a conocer el dato de que los colonos cañeros se habían reducido a 13,378 en 1963. Eso significa que en la última década ha desaparecido la tercera parte de los agricultores de caña de Puerto Rico. La situación es aún 1nás grave. si se toma· en éuenta que esos ·trece mil y ¡pico de agricultores de caña que restan cultivan, en un 95 por ciento1 fincas de 1nenos de 25 cuerdas. 31. Puerto Rico ha venido perdiendo un promedio de $40 1nillones por zafra, de acuerdo con cifras autorizadas por la Asociacjón de Productores de Azúcar, según información de El Mundo del 12 de julio del presente año. La pérdida se achaca a la baja. producción de caña, a su bajo rendimiento y a otras causas. Míeniras la fase fabril de la industria . h~ recibido las ventajas de la mecanización, no se ha avanzado en los métodos de cultivo y corte de la caña. Las grandes corporaciones han pretendido mantener la industria echando el peso de una mayor explotación sobre colono~ y trabajadores azuca:·eros. Mientras tanto, el proceso de desaloJQ de Centrales ha continuado, a tal J>unto que han desaparecido 13 en los últin1os 16 años, la~ últimas tres (Gua.ma.ní, de Guayama; Plazuela, de Barceloneta. y Juanita, de Bayamón) en el clu·so ele este año. 32. Las medidas que p1·oyect~ el Gobierno para hacer frente -18-
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a la crisis de la industria azucarera .están encaminadas a favorecer a los intereses corporacionistas absentistas y latifundistas como lo comprueba la sigwente cita textual del Informe Bird, rendido por el Comité del Gobernador: "Es nuestra opinión que (\.U la operación de las centrales, la Autoridad de Tierras no ha probado nada. Pregtmtamos muy seriamente si con tal resultado de operaciones, si está justificada en manejar las centrales. Hay muchas desventajas en la operación por una agencia del gobierno ... N os otros, por lo tanto, recon1endamos como sigue: (a) La venta de las centrales azucareras de la Autoridad de Tierras, ·a empresas privadas. . . (e) La aclministración de las Fincas de Ganancia Proporcional de la Autoridad en el area de Arecibo, Barceloneta y Toa; en el sector de Fajardo y en el suroeste, que se den, respectivamente, bajo un contrato de administración, a la empresa que compre la Central Ca1nbalache y a C. Brewer P. R. Inc., en el area de Fajardo, y a South Puerto Rico en el suroeste." Tales recomendaciones, así como otras enmarcadas en el Informe Bird fueron denunciadas en la Asamblea _de Agricultores por su Presidente, Oreste Ramos, según El Mundo delll de noviembre. El líder agrícola condeno especialmente la proposición de que los agricultores entreguen sus tiertas, previo contrato de administración, a las grandes cor¡poraciones, afirmando que ello conduciría a la desaparición de los agricultores, o a su transformación en "meras figuras decorativas". , 33. Ese proceso de concentracióli tiene lugar también en otra rama de la econo1nía agrícola que en los últimos tiempos ha superado a la producción azucarera: la ganadería y producción de leche. Habiendo absorbido a tres de las principales compañías pasteUl·izadoras, la Borden, 1ma compañía absentista, controlaba ya en julio de 1961 la quinta ])arte de la ,p roducción lechera y el 34 por ciento de la distribución en .el Area MetrO¡p olitana de la Capital. El 5 de marzo del presente año, la Borden inaug1u·ó lo que en información de El MUNDO de ese día se llama: ''la n1ás grande y moderna planta de pasteurización de Puerto Rico". 34. La explotación industrial de -la piña fue entregada por la Autoridad de Tierras a otra gran co11Joración norteamericana, la Stockely Van Camp. De otro lado, se abrió campo a la siembra y explotación industrial de tomate para beneficio de otra de las grandes corporaciones, la Libbys. Esta invade a nuestro mercado nacional con su producción de tom-a te fresco, lo que ha provocado la ruina de centenares de pequeños y mecpanos agricultores. A esto se une el contínuo abarrotan1iento ( dtmlping) de vegetales -19-
• frescos y congelados que se exportan de Estados U nidos ( zanahorias; repollos, lechugas, chinas, rábanos, étc.) y que siembra la desolación en los campos de Puerto Rico. · . 35. Todo este rápido proceso de cambio que se registra en la economía colonial, está transformando a los agricultores, (luego ·que éstos traspasan sus propiedades a las corporaciones) en rentistas, mientras, de otro lado, transforma a un gran número de trabajadores en personas semiparasitarias que viv.en del bien~ estar público. Esta situación, junto a la existencia de una burocracia que suma casi 100,000 ¡personas, produce las condiciones que haoon posible la perpetuación de una maquinaria política como gobierno colonial. Más que el destino y la supervivencia del país, lo que importa a los jefes de esa maquinaria política es continuar -en el poder, tal y como lo han estado por casi un cuarto de siglo. 36. Todo este cuadro pasa desapercibido para los que p:resumen de científicos sociales y no son otra cosa que apologistas del imperialismo y fariseos de la colonia. Los apóstoles del fals·o progreso se hallan especialmente encastillados en la Administración de Fomento y en la Junta de Planificación. Estos últimos acostumbran hacer púbico todos los meses m1os llamados ''indicadores económicos", que, de acuerdo con sus ~alaces teorías, supuestamente COlnprueban el bienestar reinante. Tales cifras sólo miden el 1nonto de la producción, el núm.e ro de edificios eonstruídos, los turistas inscritos en hoteles, el dinero depositado en los ba.Úcos, etc. Pero no nos dicen nada de la propiedad que pasa de manos puertorriqueñas a manos extranjeras: del por ciento, cada vez mayor, de la ~Jroducción y de las empresas de servicios, que cae bajo el· control norteamericano; del proceso de concentración y n1onopolización que se manifiesta en todas las ramas de la econon1ía; del desalojo de a~ricultores y la desaparición de empresas nativas; del abandono de los campos y del crecimiento de los arrabales ... En fin, no dicen nada del peligro, cada vez más inminente, · de que los puertorriqueños se transformen en parias en su propia tierra, y la posesión de su patria, y de su patrimonio todo, pase a poder ele extranjeros. 37. I...~a deuda pública, qne a m.c diados del presente año había . llegado a $243,850,000, se elevaría a $297 millones en el curso del segm1do semestre, según El Imparcial del, 29 de junio. De otro lado, de acuerdo -con datos revelados por el Presidente de la Comisión de l-Iqcienda de la Cán1ara de R,epresentantes, Sr. Sigfredo V élez G onzález, publicados por El Mundo del 8 de febrero del año en clu·so, el total de la deuda fública ascenderá-en 1964 a -20-
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la suma de $303,180,000. Esto no .incluye bonos por valor de , muchos millones de dólares en1itidos por instrumentalidades gubernamentales, tales como la Autoridad de Fuentes Fluviales y la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados. De otro lado, las obligaciones hipotecarias sobre fincas rústicas y urbanas· inscri- · tas en el Registro de la Propiedad, montaban, para el año fiscal de 1960-61, a más de mil millones de dólares; exactan1ente a $1,086,167,046. En última instancia, los grandes intereses que paga el pueblo puertorriqueño sobre s.u deuda pública y privada va a engrosar las arcas de los banqueros norteamericanos, y en gene.ral, del capital financiero de Estados Unidos. 38. De acuerdo con cálculos razonables las inversiones de eapital de Estados U nidos en Puerto Rico ascienden a mil millones de dólares, cifra que es prácticamente equivalente al valor tasado de la propiedad en Puerto Rico. Tales inversiones reportan, en ganancias e intereses, alrededor de $200 millones anuales, estimado que peca más de conservador que de e'x agerado. 39. Por otro lado está el cuadro que -refleja el panorama :social de nuestro país en estos momentos. La tasa de divorcios ba llegado a uno por cada cuatro n1ntrimonios. Las lacras sociales, ccon1o la prostitución, las enfermedades Yenéreas, la delincuencia juvenil, las drogas y el robo; tnunentan. El 7 de julio del presente año, El Mundo daba cuenta de un aillllento de 53 ¡por ciento en los casos de sífilis en adolescentes. El1nismo periódico ha infornlado que se calcula en 15,000 el nú1nero de adictos, a ch·ogas. Y asi mis1no, el 4 de septie1nbr.e publicó la siguiente inforn1ación: ''Durante el año fiscal de 19"61-62, el número total de intervenciones realizadas por la Policía asceclió a 13,254, encontrándose que unn. alta concentración de estas faltas fueron con1etidas por jóven es entre los 14 y los 17 años. Las intervenciones entre estas eda des ascendieron a 9,294, cifra que representa .e l 70 por ciento del total.'' 40. Los 1nedios 'más hnportantes de con1unicación pública se hallan ta1nbién, en grandísin1a 1nedicla, en 1nanos de corporaciones nortea1nericanas. N o sólo han penetrado el campo ele la ¡prensa, de la radio y de la televisión, estableciendo nu.evas empresas competitivas, sino que también han ido desplazando y apoderándose de algunas tradicionales empresas pue1'torriqueñas. Hace varios años, la T ele-visora W APA pasó a poder ele una cadena de Estados U'n idos, y ahora, a mediados del mes pasado, la cor¡poJ•ación Hearst adqtúrió a radio WAPA. Las en1presas de ''El Mundo" (periódico radio y televisión) han quedado estrechalnente vinculadas a u~a cadena de periódicos nortea1nericanos por -21\
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vil:·tud del matrimonio de su Presidenta y el Presidente de Kinght Syndicate. . . 41. Esos últimos acontecimientos moVIeron a El Imparcial del 23 de noviembre de 1963, a editorializar como sigue: ''Si los dirigentes que disponen de nuestro destino no reac~iona.n rápidamente, en pocos años seremos ~oras teros en nuestra pro.p1a Isla .. . N u estro periódico ha permanecido alerta contantemente, martillando a los oídos sordos de los líderes que bregan con el destino del país la alru·n1a de que nuestra riqueza está s_iendo suplantada, lenta pero inmisericordemente, por la absentista. Y que ya es hora de volver grupas hacia los rescates que ya no se pueden aplazar más. La riqueza y la economí~ de la Isla . van siendo acaparadas en todos los campos. Parece existir la conjura de despojar de su r esistencia vital al país. El absentismo se ha apoder ado de la tierra, de las industrias, de las factorías, del comercio, de los hoteles, de los periódicos, de la radio, de la construcción, del seguro, de los empaques alin1enticios, de la siembra de ciertos frutos, de la producción láctea, de los abonos, de los refrescos, de la joyería, del pan y las galletas, de los ¡parques de estacionar velúculos, de las boleras y, para cubrir aún más el copo, el absentismo no ha tenido tapujos en atacar el negocio de préstamos usuTarios . . . ~ ·A dónde va la Isla, si los dirig-entes que se han apqderado de su destino no presentan batalla :para detener el éxodo de lo que es propio~" · ·, _ 42. Esa es la pregt~lta que se-hace El Imparcial, pr-eocupado hondamente por el d~stino de Puerto Rico . . Como vanguardia patriótica puertorriqueña, que tal es el Movimiento Pro Indep-endencia, estamos con1prometidos a dar a esa pregunta una cabal y radical respuesta. Por lo pronto, comeüzamos por decir a nuestro pueblo: ¡Despierta! ~sa es la consigna clave de este momento: ¡Despierta boricua 1 Defiende lo tuyo! • NUESTRA POLITICA COMO VANGUARDIA PATRIOTICA. La lucha de independencia de Puerto Rico·, tal y como la ha venido orientando el Movimiento Pro Independencia, en su carácter de vanguardia_patrióticá, es la úriica respuesta' correcta a la política de engaño, "de ficciones y de falsedades, que se ha entronizado en nuestro país. Véanse algunos de los lineamientos generales de esa política colonial.
La Política Colonial l. La ~ituación en que ha desembocado nuestro pueblo · es, -22..
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hasta ~ierto punto, resultado de unas afirmaciones simplistas, ·defenffi:das por el gobernador. Entre éstas, piedra angular de toda .su ~eor1a Y ?ase de su actuación política, fue la que expuso en una s~ne de arhcul9s. en febrero de 1946 en El Mundo, y que dice así: • El status p.olit1co es, en el caso peculiar de Puerto Rico un problema. p~lí~ico ..... Pero no es, como en otras partes, un problema econom.1co., Tamaña separación entre lo econónuco y lo político es rm absurdo. De .e ntonces acá, los acontecimientos han comprobado con creces, que el régimen político colonial se sustenta sobre un régimen económico colonial, y viceversa. . 2. De lo anterior se extrajo, como consecuencia, el dictado político, centro de la táctica electoral en 1940, de que "el status no está en issue ''. Se dijo entonces, que la cuestión a dirimirsc en las elecciones era la de rescatar para el pueblo el poder polít ico que detentaban las grandes corporaciones nortca1nericanas. De ahl las coñsignas de ''no Yendas tu vo_to" y "verguenza contra dinero'''. Inspirados en el lema de ''pan, tierra y libertad", los trabajadores y campesinos y -las clases medias empobreci9-as, Ji.. braron rma batalla cívica enaltecedora. Para aquel entonces, el pueblo entendió el verdadero significado de la frase "el status no está en issue " . La ·e ntendió. tal y ·como expresan sus. palabras, es decir: el resultado de tales elecciones, y de cualesqlúera otras elecciones regulares, no altera, por sí mismo, lu condición políticn. colonial de Puerto Rico. Y fiel a .e sa correcta interpretación lünitativa, el entonces nuevo partido prometió que, una vez en el poder, encararía la solución del status con1o ¡problema de todos los puertorriqueños, por encima de prejuicios partidistas. 3. Sin en1bargo, se ·negó a las elecciones de 1944, y no se había encarado debidamente el problema político colonial. Volvi6 a imponerse el dictado de "el status no está en issue", ya p~rn. entonces, con una interpretación más lata. Se le dió al mismo el sentido de que el desarrollo económico requería posponer toda discusión sobre el status político. - De esa interpretación acon1odaticia se !ué ,iJnponiendo, · primero, a trás corrales, luego más abiertan1ente, y ÍÍ11ahnt ntc, en forma abierta la tesis del E stado Libre Asociado como solu-· ción final al proble1na de status. Corno consecuencia, en el partido de gobier~o ocurrió lm desprendhnieJ.?-to, que luego_ fué _base para la creación del Partido Independentista Puertorr1queno. 4. Como resultado de su tercer triunfo electoral, el PPD desechó el vieJ· o dictado de que el statu~ no estaba en issue en las . , el supuest o carac , t er " p1eb.ISCit.. .J.~a rio • '' d elecciones y proclamo_ . e 1as -23-
elecciones. U nn: vez establecido el Estado Libre Asociado en 1952 se cHó a las elecciones generales la interpretación de que la~ 11Üs1nas constittúan tula ratificación "plebiscitaria" a la política del partido de gobierno con r elación al status. Y al registrarse las bajas sucesivas, en las ~lecciones de 1956 y 1960, de la votación en apoyo al PIP, se pretendió convencer al mundo de que -el fracaso electoral de ese partido·significaba que el pueblo puerto~ rriqueño repudiaba la independencia. 5. La Independencia no ha estado nunca, ni puede ser asunto a dirhnirse, .e u ninguna clase de elecciones. La independencia con1o so Ctefine en nuestra Tesi-s Política, ''es la capacidad de un~ nación para hacer por sí n1isma sus decisiones fundamentales". Por eso sostenemos que '·la Independencia es premisa básica de la autodeterminación'·'. Ese es un derecho inalienable de toda nación. Y asÍ es reconocido por el 111Ulldo entero ¡por las declaraciones y acuerdos de la OrganizaCión de Naciones U ni das. Huyendo n esa realidad, el partido de gobierno ha estado evadiendo por nuis de dos décadas la r esponsabilidad histórica de liquidar el coloniaje en Puerto Rico de 1nanera que el pueblo pueda asumir los derechos y deberes de la soberanía. Eso ha exigido una laborde zapn, una continua. campañn de mentiras, de amedrentamiento~ de presiones econó1nicas y políticas, y de compra de conciencias., Todo ello se ha pretendido justificar a base del limitado territoricr. de nuestro país y de la escasez de r ecm'sos naturales. Pero tales alegncion e no son nada más que cortinas de humo ·¡para encubrir el servicio que prestan a los intereses económicos, políticos y militares de Estado Unidos. . 6. Para n1a.ntener su preponderancia, esa política colonialista. tiene que, contínuan1ente, alhnentar al pueblo con algunas ilusiones. Tal es el caso, prilncro, de las promesas consecutivas de ' ' resolver .e l problen1a del status'', y luego de constituír el Estado Libre Asociado, y después de venirse abajo la alegación falaz de que con ello habían1os "dejado de s.er colonia", las promesas ilu~ sorias sobre su "crecimiento" y ., culminación". Tal fué el casa ' de la resolución legislativa de marzo de 1959 solicitando del Congreso de Estados U nidos, entre otros cosas, el derecho a cobrar arbitrios sobre artículos producidos para consumo y exportación. a Estados U nidos; la oportunidad de incluírse o ~x.cluírse a Puerto Rico de los tratados comerciales que finne Washington; y asuJnir graduahneute los poderes que ejercen ciertas agencias fede- ~ rales en Puerto Rico. Tales demandas sirvieron de ba~e al'Proyecto .. F ernós-Mm"ray. ~ -24- . '•
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7. Después de un largo y vejaminoso proceso, ~quellas débiles y tímidas enmiendas se hicieron sal y agua. Lo único que se salvó ~del naufragio fué lo relat~vo a la apelación de casos a la Corte , Supren1a de Estados Unidos, lo cual no tiene absolutamente ningún significado con1o logro autonómico_. La otra enmienda, 1notivo de un refcréndnm'innecesario desde .el punto le vista práctico, fue la concerniente a la determinación del margen prestatario. Pero, de hecho, el línrite de nuestra deuda pública sigue siendo deter1ninado por los que prestan, que son los grandes intereses financieros de WaU Street. Por tanto, la conclusión que expusimos al pueblo en aquel~a ocasión, estaba completamente justificala: Se trataba de un nuevo y cínico intento de conformar a los puertorriqueños con cuentecitas de colores. , 8. Después del estrepitoso fracaso del· Proyecto Fernós-Murray, el partido de gobierno y el gobernador, trataron de echar ·tierra nucvan1entc sobre el status. A tal fin, aprobaron una su-puesta ''Ley de Plebiscito" que entraría en vigor tan pronto lo demandara un 10 .por ciento del electorado. La burda maniobra no resultó efectiva. De ahí que, sorpresivamente, vino el intereanlbio de cartas ~uñoz-Kennedy, y, como resultado, el intento de aprobar una nueva "Ley ele Plebiscito". También esta segunda maniobra fracasó rotunda1nente, no sin antes haberse hecho claro ,. en las vü;tas, que lo primordial en Pue~·to Rico es la cuestión de la soberanía. . 9. Rindiéndose al cla1nor de la .opinión tpública, a-m1que en . mínima medida, la Asamblea Legislativa echó a un lado el proyecto dél espúreo plebiscito, y .el 3 de diciembre de 1962 aprobó una resolución .proponiendo al Congreso de Estados Unidos m1 1 ' procediimento para establecer el ulterior status político final". En uno de sus puntos d~manda el ''reconocimiento y reafirmación de la soberanía del pueblo de Puerto E,ico, para que no pueda quedar duda sobre su capacidad para pactar en términos ele igual-·· dad jurídica:". , · 10. Nuestra resis Política define la soberanía como "la suprema autoridad inalienable ele un pueblo para gobernarse a sí misIno", e iníned.iata1nente añade: "Reconocer la soberanía de Puerto Rico requiere renunciar, sin condiciones ni reservas de clase alguna, a los poderes que el Congreso de Estados U nidos ejerce sobr·e ·nuestro ¡país.'' Coincidiendo con esa definición, el Colegio de Abogados aprobó su histórica declaración del 3 de febrero de 1963, la que proclama: "Pueblo soberano es aquel ~n el que reside la fu~nte última de poder. En el caso nuestro, esto significa· que -25-
. el Congreso de los Estados Uuidü"s deberá renunciar a todo poder sobre Puer~o Rico, transfiriéndolo al pueblo puertorriqueño. La decisión del pueblo al escoger una de las fórrp.ulas q alternativas~ será así inequívoca expresión de su póder soberano." 11. Finalmente, la· odisea de puro carácter colonialista-terminó en el más 4orroroso desaire que baya sufrido la Legisl~tura, · el gobernador y el Partido Popular. De ahí que en la actualidad, el problen1a del status político se halle al nivel de princj¡pios de siglo, cuando, verificada la invasión y conquista, .se pla:qteó la · n ecesidad de liD estudio. Pretender confrontar al pueblo de Puerto Rico con un estudio más, 65 años después de la proclama del General Miles prometiendo a lqs ·puertorriqueños las ''bendiciones de la democracia y de la lib~rtad", es faltar el respeto .a la. inteligencia de nuestro pueblo. . . · ' . .
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. La Unica Respuesta :
Es preciso que el pueblo ¡puertorriqueño dé a la polltica colonial imperante la respuesta que merece. Esa respuesta es, en interés del pueblo puertorriqueño, la que presenta, en su ca.r ácter de vanguardia patriótica, el ~iovimjento Pro Independencia de Puerto Rico. 1. Illmediante después de las elecciones de 1960, el gobcrna- · do1·, hizo un viaje á Estados Unidos y habló en un banquete de 1nversionistas y grandes financieros en el Hotel Comodoro de N u eva York. En esa ocasión se vanaglorió de que la ''democracia'' .. en nuestro país había llegado a su cuh:pinación, consistiendo ésta. en que se había canalizado en un ' 'sistema de dos partidos '', igual que en Estados Unidos. Se reconoció así oficialmente, lo que desde su propio nacimiento venía denunciando el Movimiento Pro Independencia: la congelación del juego electoral en Puerto Rico. · 2. En nuestra Tesis Política se expone claramen"te la situación: ''La legislación en vigor garantiza la congelación del proceso electoral en la colonia, de modo que el mismo sea p1onopolizado en absoluto por los dos partidos que integr an la coalición colonialista: el Partido Popular y su leal oposición pagada., el Partido E stadista Republicano. A1nbas colectividades gozan con exclusividad det subsidio di~·ecto del gobierno y comparten una burocracia legislativa y electoral que sirve de base a la política de patronazgo .en que se fundan las 111aquinarias políticas dentro de esta perversión de la democracia que tenen1os en Puerto Rico. El proceso electoral colonial, por el hecho mismo de su fosilización, ha . perdido, en_gran . -26-
medida, el atractivo que tenía para las grandes rnasas del pueblo. .En el pasado, competían en las elecciones, cada cuatro años, un nú1nero de partidos que, indepenclientCinente de sus vacilaciones y vicios ideológicGs, eran producto de los puertorriqueños, respondían a fenómenos políticos autóctonos y los dirigían políticos del país. Hoy sólo quedan dos partidos viejos, carcomidos por la buroeratización y el patronazgo, y que en creciente rnedida se convierten en apéndices ele las dos corporaciones que en Estados u ·n idos im1gen de partidos políticos.'' 3. Tanto el gobierno de Estados Unidos con1o su regimeu -pelele en Puerto Rico saben muy bien que frente a toda la angusiiosa realidad política, económica, social y cultural de nuest~·o país, Ja Yohu1tad nacional "empieza a despertar. Lo vieron con claridad en las vistas celebradas en Washington por el Sub-cornité de Terri· torios de la Cá1nara de R.e presentantes nortean1erican~, donde portavoces de diversas clases, agrupaciones y sectores puertorri-. queños levantaron la consignad~ la soberanía y la rápid~ solución del status ~Jolítico con1o aspiración unánime del pueblo. Es claro que la corriente n1undial, intensificada en los últimos años, de extirpar el colonialisn1o de una vez y ¡para siempre en todos los rincones del planeta, necesariamente impulsa esa consolidación de la voluntad nacional del pueblo puertorriqueño, y brinda uu fornlidable apoyo al recla1no de sobera~ía de nuestra. patria. Por otro lado, las n1aquinarias que controlan los partidos subsidiados por la colonia, el PPD y el PER tienen en común el iuterés de posponer la solución del status político, porque saben que no hay alternativa posible alguna a la independencia, y _que una vez ¡planteado el problema, la única salida que existe es el reconocimiento de la plena soberanía, que es equivalente a la independencia. Unos y otros, los grandes y pequeños intereses que conspiran para tnantener el statu quo en Puerto Rico, saben muy bien que el Independentis1no puertorriqueño ha superado ya la crisis que deternlinó la decadencia y colapso final del PIP en los últimos años de la decada de los cincuenta. Han visto renacer con nuevos brios, más amplias perspectivas y enfoques rnás ¡prácticos y correctos, una nueva vang·uardia patriótica de nuestro pueblo, que es el ~Iovinuento Pro Independencia de Puerto Rico. Han tenido que enfrentarse, nacional e internacionahnente, a la ofensiva despleg-ada 1)01' ,e} MPI en todos los ámbitos. Desafiados dentro y fuera del país, desenmascarados en sus tnaniobras polí-· ticas, aquí y en el extranjero, trata1~ de ha_llar medios para dividir n los luchadores de la independencia,. y aislarlos y separarlos del
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a}ueblo. De ahí que al1ora, después que tanto vilipendiaron al Partido Independentista Puertorriqueño, pretenden resucitarlo rier tamentc no para que ocupe un lugar de combate efectivo·po; la· independencia, sino para que, consciente o ipconscientemente sirva a sus bastardos intereses antipatrióticos. Por eso, no cab~ otra posición para los independentistas puertorriqueños, que el repudio de todo intento de utili~ar lo ·sagrada caúsa de la indel)endencia como señuelo para atraer a las elecciones coloniales a un sector del pueblo. · . · · 4. La posición del lviovimiento Pro Independéncia ha sido claran1ente expresada: Repudiamos las elecciones, no por tratarse de elecciones, sino por ser coloniales. Nuestra Tesis Política se expresa en la siguiente forma: ''Participar o no participar en elecciones, referéndums, plebiscitos o cualquier otro medio de consulta, para un 1novilniento de liberación nacional, es una cuestión ¡)roccsal. Y las cuestiones procesales, a diferencia d.e las cuestiones de principios, son materia de la estrategia y de la táctica. E s decir. que, .en determinadas condiciones, lo con;-ecto para un movinliento de liberación nacional, y lo que ha de co.n tribuir al desarrollo de sus fuerzas, no es la participacjón electoral, sino el repudio activo y militante. A la lu7. de t oda la .evidencia, tal es1 incuestionablemente, el caso presente de .Puerto Rico en vísperas . del próximo año, que .es año de elecciones generales. 5. El Movimiento Pro Independencia llevará a cabo la más intensa campaña, exhortando a nuestro pueblo a que se levante en Huelga Electoral. De hecho, lo _que existe en nuestro país es un sistema de dos partidos que han secuest;rado la voluntad popular . Y mientras prevalezca esa situación, ningún ciq.dadano que sea verdader o creyente en la democracia, debe presta.rse a ser cómplice de .tamaño crimen contra la democracia. Salta a la vista que el Partido Estadista Republicano no r epresenta oposición algunae De hecho, a lo que. aspira ese ¡p artido es a servir, de manera mucho más incondicional, a los intereses políticos, económicos y 'militares de E stados u ·nidos. Luego, su oposición al Partido Popular no es por haber hecho poco .en beneficio del (pUeblo y de sus tradicionales ideales de libertad, sino por haber hecho demasiado, de acuerdo con ese partido y con los intereses que representa. Se trata, pues, de una leal oposición pagada, de puro carácter antipuertorriqueño, que pretende arrastrar a nuestro pueblo hacia la llamada estadidad, que no es otra cosa que el suicidio nacional. A la luz de estos hechos, se h ace evidente que la verdadera oposición que existe en estos momentos en Purto Rico es la que, .en . \
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.algrma 1i1edida, concuerda con las posiciones del Movinúento Pro Independencia. El objetivo central ele nuestra campaña será desenmascarar el carácter puran1ente colonial de las elecciones. La forma más efectiva de lograrlo ~s rehusando particip~r en la. maquinaria oficial que tiene concu1cado el sufragio. :M negarnos a votar .e n tales elecciones, por farsas y por viciadas, el Movimiento Pro Independ~ncia llama al pueblo puertorriqueño a dar una patriótica demostración de su alta capacidad ciudadana y ancestral espíritu democrático, claudo la espalda a los colegios electorales. Repudiamos el voto recortado, el voto tullido, el voto que 1~0 es expresión de la soberanía del ¡pueblo. Por eso lanzamos la consigna: ¡No más votos que nada deciden! Votemos en la calle , por lUl voto completo! . 7. Ese será el sentido y el propósito de nuesti·a ca1npaña elec·toral. Ello servirá para presentar al pueb1o la verdadera configuración de las elecciones. En la contienda" se vertí con toda claridad: De un lado, la coalición de los dos grupos de líderes viejos, cuyo principal interés es repartirse elJ)resupuesto; y del otro, el Movimiento Pro Independencia, vanguardia patriótica puertorriqueña, . planteando el problema central de Puerto Rico: la· necesich1cl im¡)ostergable de rcabar y obteru·la soberanía. E·s a .e s la consigna : ¡De espaldas a los colegios elec.t orales 1 Votemos en hL calle por la soberanía! · 8. En su progra1na electoral de 1960, el viejo liderato del Partido Popular, que es el partido del gobierno colonial, manife~tó su "preocupación" por el problema del desen1pleo crónico. Expresó ., preocupación" por el aumento constante del precio de la tierra. Expresó "preocupación" por el creciente número ·ele los adictos a drogas y otras lacras sociales. Y también expr.~só '' prev- r- ' cupación" ~)or la excesiva concentración ele riquezas, por el predominio del capital nortea1nericano en d_e trimento del capital puertorriqueño, y por el entronizamiento de los monopolios. Pero todo ello se quedó en ''preocunación", no sólo porque ese liderato viejo,. carcomido y vencido car ece ele voluntad y de valor para · encararse a los más serios problen1as del pafs, sino tan1bién porque - el gobierno que encabezan carece ele los poderes de soberanía que son indispensables para hacer frente y resolver tales problen1as. Si así se reconoce, entonces se comprenderá que la. única salicla, jnmediata a que puede recurrir nu~stro pueblo para demandar la sólución de sus 1nás perentorios problCinas, es la que seña11ri. su vanguardia patriótica, el Movinriento Pro Independencia: repu7 rliar las elecciones por estar viciadas de impoteneia colonia1. Y n.l ..:29-
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, nsi hacerlo, se estará abogando lJOl: elecciones libres Y qemocráticns, las cu'a ics sólo pueden ser pos1ble cuando un pueblo goza de . lQs poder es y atributos de la soberanía. 9. E l voto . d.e un capitalista en un coleg1o electoral.no. contribuirá a defender sus interef?eS frente a la preponderancia financiera nor teamericana. Tampoco el voto de un comerciante ay udará. a defender su e1npresa de la ruinosa competencia de los grandes 1nonopolios corporacionistas. Tampoco el voto de 1m agricultor favorecerá la salvación de su patrimonio, amenazado por el avance arrollador ele las corporaciones latifundistas. T ampoco el voto de un obrer o significar ¿¡ mayor r econocimiento de sus der echos. Ningún· voto que en las ;próximas elecciones se deposite en los colegios elector ales, contribuirá -~- resolver nuestros probl~mas vitales. De ahí que, en las próximas elecciones, la única manera jnteligeutc de votar z qne ser:í t::unbién la manera patriótica de votar, es In de dar la espalda a los colegios electorales y votar en la calle. Concr etamente, postulan1os como programa el que se desprende de la Segunda P arte de nuestra t esis política (Progr anut de Libera ción Nacional) y del cual, por mandato de esta Quinta Asmublcu Nacional del l\11~1, la :Misión Nacional deber á coneretur las buses minjmas en que s.e funde ]a campaña de ]{uelga E lectoral. E n esa forma, el programa que postulamos, r esponde a lo~ intereses ¡particuar es de todas las clases ( capi talistas, jndustriales, comerciantes, ugTlcultores, profesionales, obrer os y cmnpesinos), y al n1is1no tiernpo persigue la reconquista y defe11sa de los intereses generales de Puerto Rico. Por eso, lanzan1os desde ahora la consigna: ¡No más farsas electorales! ¡IndeP~?dencia ahora! . . .
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