EL CARNAVAL ' Es
a
te
CN
ETA
TA
1
ANO
a
F
REVISTA DE LITERATURA Y ARTES Dedicada E D uc
A
A D
PUEBLOS
«FJ oAQUIN
Entered
Y
Pasto
in
SAN JUAN,
SUSCRIPCION:
E. BARREIRO.
pd ci oi OFICINAS: SAN
December 19, 1902, at San Juan,
Sexo.
ADMINISTRADOR.
FRANCISCO
P. R. as second-class
PUERTO
has. Ha: Un
ib
= o
LIBRES
45
Año 4.
DIRECTOR
LA
MUJER Y HAREIS |
al
Num. suelto 7
95.
matter, under Act. of Congress of March
RICO, FEBRERO
14 1904,
DED A BEATRIZ. En
tus hermosos
ojos soñadores
Hay algo que enamora y que fascina : Entre la lumbre de tu faz divina Pusieron
su caricia los. amores.
Tu edad es de esperanzas y de flores : Nada
turba tu calma peregrina,
Rosa
de Amor,
amada
golondrina
Que canta de la vida en los albores. Al llegar á tu bella Puerto Plata No he visto más simpática trigueña, Ni beldad más sencilla y elegante.
Alma sin tu absorción fuera insensata : En mi culto eres Sol con que se sueña
Y en mi respeto la Beatriz del Dante. FreLIx MATOS BERNIER.
NS
trimestre 70 “ S
3, 1879.
Núm. 7.
EL
CARNAVAL
PL
HR —
Pájaros.
Trio dé <A?
50
7
6
1 Aquello—eterna historia del arte—fué un estímulo para la inspiración y un motivo pa-
¿ÓN un país del Mediodía.—no recuerdo cual—y en la cúpula frondosa de un castaño—árbol
venerable,
patriarca
bosque—verificóse,
del
cierta tar-
de luminosa, un extraño concierto. Actores: un pinzón—ergui-
do caballerete de flamante pechera roja ; un jilguero—bulliufano con su jubón ceniciento, y
cioso doncel
un ruiseñor—meditabundo boza en capucha parda.
¿De dónde
venían?
artista
que se em-
Seguramente,
de
un
campo de flores, porque el primero ostentaba" un pétalo de rosa en el extremo de las alas; el
segundo
oprimía entre sus uñas la leve copa
blanca de la gentil madreselva, y en el pico del tercero titilaba una gota de miel.
¿Como se encontraban allí? Al azar, por instintivo impulso, en busca de ramaje para
el nido, de fresca brisa y amplia sombra;. esquivando la emboscada de arteras redes y la
artera acechanza de las aves de rapiña. . Se miraron con desconfianza, midiéndose unos á otros como hubieran podido medirse Tamberlick, Gayarre y Massini, juntos. In-
dudablemente, eran del gremio. . Cada cual se creía con un derecho exclusi*vo á la posesión de aquel castaño, que era, á la par, su teatro y su asilo. Pero no hubo ri-
ña, ni siquiera discusión.
En este
los
perfectos
peños
mucho
más
punto son que
los
hombres. : Los picos estaban cerrados. Sólo reinaba un silencio hostil, interrumpidoá veces por un murmullo del castaño—el árbol
comunica-
tivo por excelencia—á quien ya impacientaba el mutismo de sus huéspedes. La tarde descendía por la escala del crepúsculo. El sol envolvía el bosque en un ambiente de rosa y oro, donde revol los alados insectos como en un mar de luz, mos-
-
de su excelente voz de barítono.
Sucanto, plá-
cido himno
tenía el sabor
á la vida
de la leche recién
campestre,
ordeñada y el aroma
del ro-
mero: una estrofa de las églogas virgilianas. Entra en liza el gilguero,
vemente
las
plumas.
esponjando
sua-
“Cavatina ” amorosa,
estilo Bellini, de dulzura y. suavidad inefables. Al oirla, sintió el viejo patriarca que por sus fibras circulaba sangre nueva, y agitó las tu-
pidas hojas con primaverales arrestos.
El ruiseñor abarcaba toda la gama, desde el “fa” grave hasta el ““do”” sobreagudo, y su canto fué también otra gama de ritmos. ra,
á la vez, Anacreonte y Homero, Horacio y Vir-
gilio; ya lanzaba el dardo de la sática, ya se anvolvía en la clámide de la oda; ora soplaba
en la trompa épica, “ora discurría toronado de
juzmines
por las florestas del idilio.
Tanta poesía, belleza tanta,
avergonzáron
de tal inodo al bestial engendro, que huyó con oablícuo vuelo á su covacha, lanzandó grazni-
dos insoportables—ejemplo para los Zoilos. El arte es
una fiebre,
pero
en
la música
lo es más, y aquellos pájaros se hallaban animados por ese fuego divino, que, según los antiguos paganos,
de «losídioses.
eleva á los hombres al nivel
Comenzó
Admiradores de Euterpe,
el trio de las aves.
“dilettantis”” refina-
dísimos, ¿no habeis oido jamás un concierto de picos arpados, en la mitad de un bosque, al
caer el sol? Pues.... avergonzaos: no habéis oido ni visto nada. : Qué trinos tan dulces! ¡cuánto gorgorito moroso! ¡que arpegios y escalas cromátiicas tan: bien dibujados! La Patti no lo hubiera hecho mejor. Y aquel concierto al aire libre,
grande
como
la
Naturaleza,
selvático
Las flores nocturnas aguardaban con án-
como el bosque que le servía de escenario, “tendría el privilegio—;¡ oh felices cantantes! —de fio ser tratado por ningún periódico. A Pero viene la noche. El gilguero y el pin-
e—y clavó en los inmóviles artistas una
bajo el ala..... Sólo el ruiseñor—única ave canora á quién no amilanan las tinieblas—siguió derrochando
sus coseletes de deslumbrante pedre-
sia los besos de la noche.... En ex ' í presentóse én escena un murciéla$", «uante animalucho llegado de no sé
2
ra cesaran pueriles rivalidades. Y se formó léliga del genio contra el enemigo común. El pinzón, más vivo que los demás, se lanzó el primero, desplegando todos los recursos
a
llena
0
de
hiel—verdadera
mirada
de
a
no
'z4. “don”
canta;
más algún
fabu-
-Lafontaine—ha descubierto que del sarcasmo—como todos los
¡. "econocer que el huraño avechucho L'
«¡1[Aaravilla el aguijón
polo obtuvo
cargado de bi-
un efecto contraprodu-
zón, vencidos
notas
por el sueño,
triunfales
inclinan la cabeza
y al aparecer la luna,
la cantando la “Casta diva” de Norma.
La luna apa
saludó-
al rasgo del artista,
envió al ruiseñor una gota de rocio—líquido diamante, que cómo imperial diadema ornó la cabeza del pajarillo, reflejando en sus facetas las luces del cielo.
EUGENIO ASTOL.
37
Ls
EL CARNAVAL
D.Santiago ——
R. Palmer
>=
>
PRESIDENTE DEL PARTIDO FEDERAL AMERICANO QUE ACABA PROPONER AL PARTIDO REPUBLICANO LA UNION DE LOS PUERTORRIQUEÑOS.
a
er
E
DEL sala
parecía
más
-
Eran
primos.
en el suelo
El tenía quince
El era moreno,
de
Pp
suntuosa iluminada d
ojos
años,
—¿Estás brava, eh? - —Y
A “cajada. 1-
ella Y
.—Ya
y cabellogímes
Cerca de ellos, hundido en un gran sillón, Lom los espejuelos calados, la abuela leía a.
5 «periódicos.
Dejó la niña, para arreglarse el ppt: el libroí en su regazo, abierto por la página
que leía, «y el niño con un
movimiento
rápido,
antes que ella pudiera impedirlo, se lo cerró.
—Y are mpezaste—dijo ella enojada, me voy, y fué á sentarse junto á su abuela, 5 a siguió riendo. 'o te vayas, no te voy á mortificar más, ven. qe case...
|E
ojeaba su libro,
afectando
no
¡0-00
'0S
al fin soltó
el
una car-
en
son ustedes muy grandes abuela con un tono muy ) estaba
bien
cuando
muy mal hecho.
eranps
s niños quedaron sorprendidos y
_Ala/mañana siguiente en el sofá. Laabuela, su gran sillón,
estudiaban sentaqu de ellos
leía los nerifddicos, se a:
tó y salió de la sala.
—¿Te acuerdas—dijo él—lo que abdelt 6 jo ayer, que es malo —¡Ah....
que nos besemos?
sí!
Sus lntradas
al
ff A
se encontraron;
co:
vimiento irreflexivo unieron sus lal primera vez se besaron ruborizados y
hacerle
>e
trataba de levan-
El le echó los brazos al cuello, y riendo se besaron en las mejillas, con la inocencia con que se besarían 1 ngeles.
gros, labios rojos como sangFe, y dientes des. > Ea . Pao lumbradores. Ella rubia, de ojos azules y boca de rosa y nieve.
y,
cogiéndole la barba,
tarle la eabeza para obligarla á mirarlo. Ella contenía la risa;
blanco, grandes manchas lumi rojas y azules. $e! Sentados en un sofá, cada uno dón un bro en la mano, los dos niños estudiaban. trece.
>
NATURATED
por el sol de la mañana que hacía: resplandecer el dorado de los muebles y arrojaba por
los vidrios de colores,
y
NS
== La
DE
-
a
A
EL CARNAVAL |
IA 3 h y
LE
Cate.
Figura una planicie de esmeraldas; y, al soplo de la brisa, se cimbrea su talle esbelto, y en el aire ondea
lírica de plumones, 6 A Bruyére ha dicho la verdad: ““Estar con aquella á quien se ama; eso basta.” Podemos aplicar al Amor lo que Homero
piés
dice
son
del
delicados,
destino:
“Sus
porque anda,
cual guirnalda.
El sol le envía manantial de gualda; su jugo es dulce como miel hiblea; y, al sér generador
que dichas crea,
el bien lo acoje en su anchurosa falda.
no sobre el suelo, sino sobre las ca-
bezas de los hombres.” El amor yla razón se la vida del hombre. El amor es bueno y de larga
el amor
reparten
resistencia,
es dulce y no cree en el mal,
es más poderoso el amor, diclama
que la muerte, WMéladípides.
el amor
por eso danos
¡la luz que les depare
“¿Cuando hablo contigo, dice Milton, olvido el tiempo, las estaciones y sus cambios; todos me agradan igualmente. Dulce es el soplo de la aurora y es dulce su salida, con el cántico arrobador de las madrugadoras
dir
sobre
lumbrantes frutos y las
aveci-
cuando comienza á difun-
esta tierra
sobre la
deliciosa
hierba,
los
sus rayos
y dulce
des-
árboles,
flores chispeantes de rocío;
rra fértil queda embalsamada ves aguaceros,
la tie-
después de sua-
es la aproximación
de
del cielo, su cortejo de estrellas.””
*“Pero ni el soplo de la aurora al levantarsé con el cántico arrobador de las madrugadoavecillas,
nila
salida
del sol,
sobre
esta
tierra deliciosa, nilas hierbas, ni los frutos, ni las flores chispeantes de rocío, ni los perfumes después de la lluvia, ni la tarde encanta-
¡dora y apacible, nila callada noche cón sus ¡aves
de
o vuelo,
ni los
eos á la luz de
la luna ó al centelleante nada es dulce sin tí.”
A
1
reflejo de las estrellas,
va habla, como lo hace á menu-
: do, enamombre de millares de personas cuandolo dide; “Ella es mía; y soy tan rico, pose-
yendo tal joya, como si fuese dueño de veinte OS cuyas arenas fuesen perlas, néctarel Y oro puro las rocas.” amor verdadero ennoblece
vale
ADA.
heb=r-amado y
no haber amado
ás
'lÉina mujer ha
perdido lo nunca,
: siempre.
que se
dice Te-
sido elogiada de
pr era m ás encantadora que lo fué EliAHD Es por Steele, era 1 istruirse.”
cuando
dijo que
E, el verdadero amor se desarrolla 188
A
MARIANO
nueva aurora!
RIERA
PALMER.
SERENATA.
los
la tarde apacible y encantadora; luego viene la callada noche, con sus aves melancólicas. y econ su hermosa luna rodeada por las pedrerías
-ras
Aviva la esperanza hora tras hora;
y en él buscan los pobres borincanos
Ni
llas; grato es el sol
Es el reyde los frutos antillanos por las grandes riquezas que elabora y pasan de una mano á otras manos.
profundo con el tiempo. - Un
mujer verdaderamente unidos ara el otro, puesto que viviry
jónÑ LUBOOK.
t Una noche de verano verdaderamente hermosa, porque todas las estrellas irradiaban su fulgor, y la luna gradualmente por Orieñte aparecía
swis¿Pdando realce á tu figura =—reclinada en el balcón,
bién me acuerdo del saludo cariñoso
que
me
diste?
que mis carnes y mi sangre y mi alma conmovió.
Bién me acuerdo; parecías con tu rubia cabellera y tu blanco traje largo una mágica visión. Desde entónces, —ya hace días— tú no sabes vírgen puta, la pasión con que te amo
.
y qué mucho gozo yó. contemplando en mi memori tu retrato iluminado,
eo
tu adorable imagen bella, que es mi encanto, mi alegría, mi tesoro y mi fortuna, y mi única ilusión.
MANUEL N. YORDAN.
+
EL
799
CARNAVAL
<>”
EN
CARNAVAL. qe lla noche de carnaval
donde todo el mun-
do tenía derecho á ser feliz, siquiera aquél instante no mas, en el aturdimiénsb RA ya demasiado. ¡Como
había
puesto
bella plaza de Colón,
su
la bu-
A zana! Las sillas del paseo, los atriles de los músicos, la elegante balconada del paseo, las estatuas de hierro, todo hubo de sufrir la acometida y caía sobre los cabe.Mos de las elegantes, sobre sus trages y
sombreros, vos de fueron
cas
una lluvia de confettis
arroz. Aquellos implacables con
que
y pol-
alegres mozos, las pobres chi-*
solo se defendían
con
los
aba-
de
colores,
papelillos,
chorros de agua perfumada, petardos, risas, sorpresas.... y el suelo se cubría
una mujer
ba sobre sus cabellos, fettis de
colores,
esos
no lleva-
los brillantes conpapelillos
pinta-
dos, redondos y graciosos que gustan tanto á las mujeres porque ellas saben que es una coquetería, algo elegante que adorna y alegra el color de su cabellos,
ese
santuario
hombres
pocas
veces se penetra
siempre
vitadla á bailar si la han hecho estar sentada mientras las demás, sus compañeras y amigas, se aturden en el cadencioso compás de la danza; ponéos á su lado
en un
momento
de peligro;
cian, y esa mujer no olvidará nunca vuesfisonomía y os le-
vantará en el altar de sus sentimientos, otro altar de gratitud, de eternos recuerdos y quien sabe, si también de amor. almas de mujeres,
en este
abismos
proceso de donde
unos
escuchan rumores sordos y otros, música, yo tengo mis ideas; me importa poco, quien piense lo contrario.
Ni Cuando volvió á pasar por mi lado la chica de rostro severo y feo, yo arrojé
Creo que dirían ¡Sí! ¿Por qué no habían
la pobre diendo.
limosna
las lineas que constituyen la belleza física, hacía más ingrato el conjunto.... quien " sabe si no fué simpática á nadie en aque-
defendédila
cuando los demas la insultan óla despre-
pedíá
la naturaleza no se detuvo á perfeccionar
para los
vulgares!
llos que
jugado carnaval
sagrado
en
Sed galante con una mujer; hacedla una fineza en un paseo, en un tranvía; in-
y la belleza artística del peinado. Pregúntales si, llevarían todo el año, de buena gana, los traviesos papelillos.
con la pobre chica? Era fea, verdad, y cierta severidad en aquél rostro donde
4
¡Cuán
En este análisis,
con los despojos de la alegre fiesta. Y sin embargo,
jer.
tro nombre ni vuestra
nicos, del encarnizado ataque.
Serpentinas'
to del placer y la alegría. * Hay cosas raras en el alma de la mu-
sobre
sus cabellos un
puñado de papeli-
un amigo. que
Quise hacer
tal vez
]
Y, toda su alma de mujer á sus ojos,
estaba pi-
porque
brillaron
se asomó de alegría,
y plegando graciosamente sus labios, me -dijo de un modo que nunca olvidaré. “Gracias, muchas gracias joven.” J. E. LEVIS.
EL CARNAVAL
A TROVA. A JOSÉ LIMON
DE ARCE,
Cuando la inspiración—eco divino Que viene al alma de no sé qué cielo— Determina en mi espíritu el anhelo De exhalarse en los trémulos de un trino,
Entonces yo bendigo mi destino que alejado del mundo y sin recelo soy como el ave, poseedor del vuelo, Y, volando, á las cumbres me avecino.
Burlaos á placer, almas enanas, Mientras de arriba mi cantar os reta
A escalar estas cúspides galanas.... ¡ Mientras al distinguir vuestra silueta Os da mi compasión las más lozanas Flores de mi corona de poeta!.... JOSÉ DE J. ESTEVES.
'
4
A
mi
Hija.
Fuiste en mis penas ideal consuelo; Dulce elixír para mi alma herida, Y eres hoy mi ilusión, hija querida, Mi dorada ilusión en este suelo. Eres iris y estrella de mi cielo; Eres visión y aurora de mi vida;
Perla brillante que soñé perdida En un regazo en donde no hay desvelo. Fulguras en mi amor, como
la estrellá
Que en la amplitud firmamtntal se admira Como de Dios incomparable huella. Y eres límpido espejo en que se mira De mi esperanza la odalisca bella Que es á ún tiempo la musa de mi lira. CARLOS GARCIA
DE
LA NOCEDA.
in de ele
-
CARNAVAL
batalla presenta dor:
un espectáculo desola-
aquí un muerto,
allá un
se queja amargamente; ra apagar
la sed
que
herido que
y pide
agua
lo domina,
atormenta, que le mata;
que
pale
állá á lo lejos el
vencedor. Las dianas atruenan, suenan las músicas, y los alegres sonidos filar-
mónicos
son
la oración
heridos que expiran
fúnebre
de-los
en el campo,
anega-
dos en su propia sangre. A lo lejos se divisa uná mujer. Esla anciana madre que busca al hijo, que tal vez ya no existe; es la tierna madre
de un soldado.
Recorre el campo, reconoce los cadáveres uno por uno, para ver si encuentra el de su hijo.... Mas no le halla. ¡Virgen
santísima!,
exclama
de
ese no es mi hijo. —Sí,
madre
mía, si:
yo soy su hijo;
estoy herido.... Tráigame Vd. un poquito de agua para calmar la sed que me
mata más que la herida.
— Corro, hijo de mis entrañas, corro en busca de agua.... ¿oyes? ya vuelvo.
Y la anciana
se
dirige
á una
casucha que á lo lejos se ve. cuentra
Se
agua.
dirige
á otra,
pobre
Y
tampoco
no enhalla
el
agua que tanto desea.... Corre la pobre madre hasta el pueblo vecino, y regresa al campo
Jo!
con el agua en
busca
de
su hi-
41 Pero este no pareció.
—Dios mío ¿qué es de mi hijo? exclama la madre desesperada. Pasa un oficial del ejército vencedor, y le dice la anciana:
¿Señor!
¿podrá
us-
ted decirme á qué parte ha sido trasladado el herido que estaba aquí? Sí, señora, murió ya, y á esta hora ya debe estar incinerado. La anciana duda aun, se cree engañada, y con un jarro de fresca agua en la mano, recorre el campo en busca del hijo de sus entrañas. ALBERTO
ARIAS
SANCHEZ.
o ¿7 20 ama
Ya los ecos lejanos del cañón suenan. El combate ha terminado. El campo de
ma
nda Td
LA MADRE DEL SOLDADO.
mi:
EL
EL
LETRADOS
Jesus FISCAL
ter
PUERTORRIQUEÑOS.
María DE
LA
CORTE
Apenas se le conoce. Así huye de la popalaridad. Discípulo del gran edúucacionista don Eugenio María de Hostos heredó todas las virtudes del maestro á la vez que adquirió una sólida instrucción. Con el rico caudal de su inteligencia,
anduvo errante por la tierra de Quisqueya, hástá que la suerte, veleidosa y esquiva con los buenos, le trajo de nuevo á las playas borinqueñas. Es Carlos Manuel Landrau, á la vez buen
maestro,
un excelente
pa-
triota, .
Fué de los pocos que aquí defendieron la “Liga de patriotas,'”? que implica-
“ba la verdadera E
a
DE
SAN
JUAN.
torriqueños para recabar derechos conculcadcos, apareciendo ante el mundo co-
Carlos Mamel Landran.
un
Rossy
DE DISTRITO
MAESTROS PUERTORRIQUEÑOS
que
CARNAVAL
unión de todos los puer-
mo hombres dignos de la libertad que reclamábamos. Descansaba la “Liga de patriotas” sobre la base de la educación de que tan necesitados estamos en-todos los órdenes de la humana actividad y respondía al más elevado fin patriótico. La
pluma
de
Landrau
escribió
en
aquellos días luminosos artículos llenos de sana doctrina y de valientes conceptos. Pertenece
al número
de los que in-
terrogan al corazón y siguen linea inflexible del deber. Donde
que deen,
sean
quiera
las
siempre la
que esté, cualesquiera
circunstancias
que
lo ro-
estará cumpliendo con su deber.
Por algo ha sido discípulo de Hostos. Muchos elementos como Carlos Manuel Landrau necesita el magisterio puertorriqueño. CELSO DE LOS RIOS.
EL CARNAVAL
<Q
hi AMOR Y PSIQUIS. mas que ventura,
sar un
monstruo,
tirano
de
hombres
y
de dioses, y en desierta roca, engalanada tu hermosúra con los atavíos de boda, te exponen
las deidades
implacables
que
con tus hechizos agravias. *PPsíquis. .Alma inocente, sobre el siniestro tálamo, arrullada por la onda, se rinde al sueño, .como el sentenciado á muerte en su última noche terrenal. Y despierta en encantado palacio, servida por invisibles ninfas que adivinan sus deseos. Allá laha conducido, mientras dor-
mía, el blando Zéfiro sobre las dulces plumas de sus alas, por mandato de Amor, que sin ella encuentra tétricos los cielos y llena de hastío la vida inmortal.
Amor es tu'reposo, fementido
mónstruo.
Psíquis, En
y nó el
la tiniebla de
la noche será tuyo y dormirá en tus brazO$5 mas al primer, claror del día, huirá ae
lecho,
sin dejarte
jamás saber que
quien te ama es el hijo de Venus. Amar
lo
desconocido
es
tormento
atroz; la dicha sin luz, cuando se siente eñ el corazón el ardimiento de un sol,
ET
mano
el:
acierto, y una gota de cálido óleo cae so-': bre aquella frente, coronada por sus! besos.
Huye
airado el Amor,
el encantado
El oráculo predice que has de despo-
reconoce'|
su
palacio,
su roca solitaria.
desvanécese ¡|
y Psíquis vuelve á |
En vano perlas de dolor
dan sus ojos bellos para implorar la misericordia de la rencorosa Venus. Por mandato de la diosa baja Psíquis al Averno, á recibir de la mujer de Plutón la caja letal que le está vedado abrir. Y Psíquis recibe el alevoso don, en cuyo misterio supone encerrarse el secreto de
la eterna
beldad
de las diosas.
La
cu-
riosidad la tienta con su afan irresistible. Entreabre la caja funesta, y al punto hálito maligno, tosigoso humo que de ella se escapa, la sume en profundísimo letargo, precursor de la muerte. Pero Amor la salva. Contra su pecho amante la estrecha, y en vuelo triun-
fal, á través de legiones de nubes que á su paso se
inclinan;
y por
entre
enjam-
bre de estrellas que iluminan festivas la hazañosa victoria, léyala el alado ce” quistador al sacro Olimpo, y allí la la como su esposa inmortal! ¡Psíquis! ¡Tunombre es almé historia el sublime poema de la tr, guración por el amor! NICANOR BOLET
Ti
e
pp” sor la juven-
y
niño
quién
14
del
:
á
pierde
3
o
mismo
asalteador de corazones.
pasión
feliz,
E
el pecho
la
divino,
y
[e
en
de
esposo
A
indómita
la llama
su
emocionada
Xt
prendiste
de
ella ante la radiante hermosura
.
y
túrbase
is y
tal;
mor-
Y la|
AAN
do sola hermosísima
castigo.
A
SIQUIS! tu nombre quiere decir Alma, y tu historia es el poema de la divinización por el Amor. Diste envidia á la mas bella de las diosas, sien-
parece
princesa enamorada durante el sueño: . del misterioso amante, alumbra su pre- ] ciosa faz con la claridad de una lámpara;
a
PROBLEMA.
debe su origen al vicio, ó si éste ha sido originado por aquella.
Me explicaré antes de que algun mo-
La
virtud y el vicio combaten
ince-
santemente: á sus impulsos: contrarios, se mueven las sociedades en todas direc“ciones; los efectos de esa lucha continuada constituyen los bienes y los males qué goza y sufre la humanidad: el progreso de ésta, se constituye con los re-
sultados de ese diario y frenético combate, en
que cada
combatiente
esgrime
to-
das las armas de que dispone. Ahora bien: Siendo la virtud y el vi* cio los motores que ponen en movimien-
-—toála máquina humana, se desea saber, cuál de los dos actuó primero en la humanidad.
Porque sería de gran conveniencia tener conocimiento de si es que la moral
ralizante me excomulgue.' Sería de gran conveniencia saber, repetimos, sies que la virtud surgió á consecuencia de los extragos que hacia el vicio, y para oponerle un dipue á su
desarrollo,
es que el vicio apareció fren-
te á la virtud,
con el deliberado propósi-
to de contrariarla.
Es algo fuerte
ción de ambos
aceptar que
la apari-
contendientes fué simul-
tánea, por que en ese caso, algun principio fundamental pierde gran parte de su autoridad. Nosotros encontramos bastante difícil el problema,
que
hay
pero estamos seguros de
muchos
que lo resolverán
con
suma rapidez y facilidad.
L. DONES. Bautizo
» PUNTOS LITERARIOS. q e
Suspendemos esta sección interín regresa nuestro Director de los pueblos de la isla.
+ A VUELA PLUMA. + A la amabilidad del amigo
-D. José Torres,
ueño libro titulado “Manual del magnetizador,”” extractado
de las sabias lecciones Pietro D"Amico.
Este curioso
del
conocido
Profesor
libro se vende á 10 centavos
Duránte la temporada de carnaval, perma-
necerá en San Juan esta encantadora trigue-
“Vuelve
andioro
un cariñoso
a,
á estar entre ;
cuyo
saludo de
A
nosotros el querido
encabeza
estas
las 5 .
Nos
alegramos
stinguida familia Navajas Se
Valen-
amigo don Juan EL CARNAVAL en
agentes
La ausencia de nuestro Director no altera en nada la marcha administrativa.
Toda la correspondencia debe jida á nombr+ del Sr. Barreiro.
venir diri-
Las fiestas del carnaval, no están este año tan animadas como se esperaba. :
Los mismos
representantes
á la Cámara
confiesan que el año anterior se han:
divertido
mas que este año. Sin duda, Mr. Hunt debe estar en el secre-
to de este fenómeno.
No encontramos adjetivo apropiado para calificar la que dió nuestro querido amigo el ilustrado jurisconsulto Don José de Diego en la noche del viernes en el Ateneo. El tema no podía en verdad ser más simlos nutridos auditorio.
La idea
todos
quí ” saludamos afectuosamente.
-
nuestros
en San-
Blasina
pático, y desarrollado con la elocuencia de que dispone el Sr. de Diego, tenía que recabar
Cardona
nombre
se verificó
Francisca
Brillante conferencia
- Pepita Roig
José Vidal
solemnida,
niña
tín, hija de nuestro querido Valentín, representante de Santurce.
en esta redacción.
fa, á quien envíamos bienvenida.
grar
No hay efecto sin causa.
Libro útil debemos un teórico práctico
Con
turce el dela
ha fijado
te su residencia en San Júan, des: una larga temporada en Rio
los
aplausos
de la unión
con
que.
lo premió
el
vive en el corazónide
puertorriqueños
y
al
fin
llegará
á
cristalizar en hermosa realidad para bien de la patria. Hostos sembró la semilla y más afortunado que el labrador de la parábola, empieza á dar el fruto apetecido. Pa ¡Muñoz y Matienzo fueron también de los que contribuyeron al fracaso de Hostos, y ahora proclaman la unión. j _Asisucederá con los que ahora la combaten. :
__EL-CARNAVAL
Nictor SUCESOR
Husté DE
G.
TFISADO:
Expléndido surtido en Joyas de alta novedad. Relojes.
de
todas
Brillantes
clases y objetos de arte regalos. garantizados sin defectos,
Lentes y espejuelos Plaza
CIRUJANO
LA
ESTADOS
DE
PENNSYLVANIA,
UNIDOS DE AMERICA
Ofrece á sus amigos
y
al público
en gene-
ral, su GRAN GABINETE DENTAL, donde encontrarán siempre los ULTIMOS ADELANTOS para la práctica dela MODERNA CIRUJIA Y PROSTESIA DENTAL. Especialidad en trabajos ortodónticos ó sea corrección de las irregularidades .de los dientes, y EXTRACCIONES bajo la influencia de anes-
tésicos locales y generales, entre estos el reconotido PROTÓXIDO, DE NITRÓGENO, esto es GAS HILARANTE.
Modicidad en los precios. dy Todo garantizado. HORAS DE OFICINAS: De 8 de la mañana á 5 de la tarde Teléfono número
SAN FRANCISCO
44
San Juan P. R
AJA
SUCESOR
PARIS DE
Y
Diaz.
LL
ABOGADOS-NOTARIOS Ejercen ante la Corte Federal, Tribun Supremo y Cortes de Distrito, prestando se
cios notariales en toda la Isla y ocupánd además de concesión de franquicias y de tod: género de gestiones ante las oficinas del G bierno y Municipales. Su bufete se halla es
blecida en San
Juan calle de
La
Allen núm.
SAN
FRANCISCO,
En este acreditado
51.
establecimiento, se eni
cuentra el mejor y mas completo surtido d Artículos de novedad y fantasía, en Quincall
-.,
ete.
Colosal surtido dad, recibidas de
en Postales, París,
última
nov:
y especialidad en
WE. ACUDID A LA
MADRID.
33.
Rgca
preparadas á capricho.
SASTRE
LONDRES,
Herminio
Perfumería,
176.
ANGEL DE
»
JACINTO
DENTISTA
UNIVERSIDAD
J2
con cristales de
principal,
Doctor J. Lorenzo Casalduc DE
para |
1
ROCA. . q
LUIS FREIRE BARBOSA. ABOGADO.
PEDRAJO.
DESPACHO,
a SOL 89.
|
PP
mo
Acaba
local
de abrir su gran sastrería en el mis-
de
su
antecesor
'“señor
Pedrajo,”
Antonio
con un magnífico surtido en toda clase de casimires, merinos, franelas, alpacas, driles de hilo. blancos, piqués, ete.
Corte inglés, francés, americano y español. Se hacen trajes y abrigos para señoras y señoritas de los llamados CORTE DE SASTRE. PRECIOS
a
SIN COMPETENCIA.
1Francisco 36, primer piso. San Juan, Puerto Rico.
Figueroa.
|
SASTRERIA. —
479
A L L E y —79.
Corte 4 la última did
Precios limitados. JE Prontitud en el despacho. nen centrados
La sastrería and solicitada por de juventud elegante.
EL
Ledo, Figueroa Maestre ABOGADO
Los
Muchachos.
QUINCALLA
AMERICANO.
CARNAVAL.
Y FERRETERIA
SÚRTIDO/RENOV ADO POR TODOS LOS VAPORES.
Ofrece sus servicios
en
San Juan y
SUCESORES DE A. MAYOL Y
el Distrito de Arecibo.
/
La Nueva Central
MIGUEL.
DE
ANDRES DULCERIA, Gran
Gran establecimiento de provisiones finas, licores y confituras do todas procedencias.
Y REPOSTERÍA
de turrones
almendrados
y
Cristo 23, San Juan Pto. Rico.
galletas finas. San Francisco 77.
Se sirven toda ramo.
PADIN.
PLA.
CONFITERÍA
surtido
clase de encargos E
Excelentes tabacos de Utuado y Jayuya.
en dicho
Teléfono
BOX
157.
CIRUJANO
administran
y
arriendan
fincas
Dulcería
San
Ofrece sus servicios profesionales.
Francisco
77.
de Don Andrés Plá.
Paris | |
mm
==
*
-17—LUNA-—17.
Bazar... mum
mm
FORTALEZA
Ultima novedad en objetos de fantasía. Surtido completo de perfumería fina. SOMBREROS última moda,
capas
27.
Azahares, coronas, velos, rasos blancos y todo lo necesario para el
ajuar de novia.
de
Bordados y encajes finos.
paño. Cuellos de encaje. Golas de gasa con caidas largas. Gasas lisas y bordadas para trajes.
8
DENTISTA.
á
precios convencionales. Informarán
408.
Jacinto Naranjo
OJO! Se
CA.
FORTALEZA 32.—San Juan, P. R.
Aplicaciones de todas clases.
POSTALES ARTISTICAS, as
Tarjetas expresamente preparadas para fotograñas.
e
To-
do acabado de traer de Paris.
AN
oo
Ss.
VISITAD EL PARIS BGAZAR.