El Carnaval (1 dic. 1906)

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At zualo Sardern

EL CARNAVAL REVISTA PUERTORRIQUEÑA

SUSORIPCION:

SATIRICO-LITERARIA, POLITICO-INDEPENDIENTE. | DIRECTOR

JOAQUIN —=

EDICION

second-class

7.

matter,

Apartado 434.

BARREIRO.

under

March,

A

AÑO

E.

.

Entered December 1, 1902, at San Juan, P. B. as

:

SAN

JUAN,

san rrónciaco 62.

ADMINISTRADOR :

Hs

2.000 ejemplares. .

Y

peon00 a

Act.

of

Congress

of

Teléfeno 299.

Circulación

P. R. DICIEMBRE

1? DE

1906.

a

NO SE PRESTA FUERA DE LA SALA.

REGALO AL

DEL

PARTIDO

Aquí tiene otro pájaro, Doctor.

Y ahora... déjenlo desplumar. 2% ms

en

isla.

toda

la

3, 1879.

PRESIDENTE REPUBLICANO.

N* 37.


EL CARNAVAL

AQUÍ

señores, va á pasar algo muy gordo. La venida del Presidente, suceso no registrado en la historia de la colonia. La derrota de los republicanos, cosa que no había acontecido desde

que tenemos

libertad y justicia para todok:

a visita del caballo matemático, rínquen. ¿l temblor

de tierra

que dá

de los otros

clases

en el

Parque

Bo-

días.

Los microbios del agua. El agua de los microbios. Y unas cuantas cosas más, todas en extremo morrocotudas, denotan bien á las claras, que nos esperan grandes calamidades. Yo temo que vaya á desaparecer la isla, de la noche á lamañana, sin

dar tiempo para nada. Y sería sensible que esto sucediera, cuando estamos en vísperas, puede

decirse,

de

la

ciudadanía

americana, del gobierno propio y tal vez, tal vez, de la independencia. No quiero pensar en las consecuencias de esta transformación.

Supónganse ustedes que dice Alhá: á la porra todo pájaro. Y así, con lo puesto solamente, tenemos que resentarnos ante el tribunal de

Dios. á darcuenta de nuestros actos.

Y se presenta, por ejemplo, el Dr. Gómez Brioso. Y le pregunta el Supremo Fuez : —¿Qué

ha

Rico? —Ayudar

hecho

Vd.

en

Puerto

á dos

pactos,

señor:

uno con Sagasta y otro con el portero

de

la

casa

del

Secretario del

Presidente del Partido Republicano Nacional de los Estados Unidos. —(íoad out.

Y aparece D. Tulio. —¿Qué hizo Vd., señor?

—Yo... además de ingeniería,

SR . Mr. Rossevelt desafiando los rigores del in-

vierno por salvar su candidatura.

de algunas obras

conseguí

que el Pre-

sidente de la República visitara la

-

isla vestido de dril blanco. —Al purgatorio.

Le toca el turno á Mr. Baiz.


EL

285

CARNANAL

—¿Y Vd. qué hizo?

el Sr. Rossy

—Juat yu sei? —¿Qué hizo Vd. en Puerto

—0h, yes! Mi espique hispanis veri bat, señor. Pero yo he sido

tensamente. Y entra Falcón. —Caballero, le dice el Padre eterno, tenga la bondad de soltar ese

mucha cosamienta in Poro

coco-_

Rico?

Rico.

—Bueno, vamos y"alante. Al oir esta expresión, saca cabeza Rossy.

la

—Todavía no es su turno, le dice el portero. Y sigue hablando Mr. Baiz:

que

hablar ex-

macaco.

—Toma, tame

tengo

Figueroa Maestre, sugé:

ese garrote.

—Hable ahora, ¿qué ha hecho Vd. . en Puerto Rico?

—Pues ya ve su Señoría.

dermelas

con los niños,

—Enten-

colocar en

throp, consultor de Mr. Post, consultor de Mr. Roosevelt, consultor

San Juan muchos profesores unionistas y recomendar paz y concordia después de las elecciones. Y se presenta Aurelio Barrio interrogando, ¿Qué le sirvo Licenciado? Falcón lo mira y váse. Sale Falcón y entra Celso. de los

y, además, señor, soy John R. Baiz.

Rios. Y como

—Yo he sido intérprete, agente general de compañías de seguros, reporter, Estado mayor del Gobernador civil, consultor del partido de la Unión, consultor de Mr. Winde todos los Jefes de Departamento —¿Es Vd. Mr. Baiz?

no

Celso de los Rios soy yo,

crean

—Pase, amigo queridísimo, que Vd. no tiene culpa de nada. Y aparecen los Doctores Barbosa y Veve. —(¿Vienen ustedes solos?

—Están ahí también D. Fidel, Besosa, Domenech y Mateo Fajardo. —Pasen ustedes al limbo.

tonto

está ahí

van á soltar, cuando

para

decir

de Mr. Roosevelt,

entre, si llego

á entrar, por las puertas del cielo. Lo

primero

que

me

dirán, será,

seguramente: “si Vd. tuviera vergiienza, después de lo que ha escrito

en

EL

CARNAVAL

las narices por aquí.”

no

Pero si llego á entrar, tedes que no salgo.

RUIZ

—Que se quede el Licenciado. Con

Residencia

tan

ustedes todas las indirectas que me

— Yes.

—Qiga señor... también D. Manolo Rossy.

me

cuando

no quiere

asomaba crean us-

ROGER.

que lo molesten.


EL CARNAVAL

FIESTAS

PRESIDENCIALES

ESCENAS

CALLEJERAS

—¿A cómo dá los huevos, señor? —¡Ay señora! no se venden. Es un regalo para el Presidente.

Por

esas

calles.

La misma tarde que llegó el Presidente me decía un unionista de los menos intransigentes, en la

puerta de “La Mallorquina”:

—Sabe usted lo quele dijo Roosevelt (porque los unionistas tratan al Presidente de tu) al Doctor Barbosa? ? —No señor. No sé nada. , —Pues ya verá: al saludarlo, le pregunto el Doctor ¿“estamos ó nó estamos incorporados”? —¡Ay,! querido|Doctor,—contestó sevelt,—ustedes se tienen la culpa de todo esto. ¿Por , no me avisaron con

quince

CIÓN?

días, siquiera, de anticipa-

Yo, como ustedes decían que eran

la mayoría y que no había temor de er, francamente me descuidé. ero no se apure que... lo que es en las próximas...!

Entonce, dije yo; no estamos tan

mal como parece.

ooo

Uf, uf, el Presidente me ha dejado sin fuerzas para nada. No he podido parar un momento en la oficina:

solicitado

de

la -Fortaleza;

del Comité Directivo; + de la Jefatura de la Policía; otra vez dela Fortalez; dela Cámara; del Consejo

Ejecutivo

y últimamente en la co-

misión de recibo.

Porque la verdad es que xo tenemos gente para nada. Si falto yo en el Partido... se acaba la unión. ooo

En la calle de la Tanca disputaban ayer dos individuos. Decía uno que el águila que coronaba el arco de triunfo de la Plaza de Colón, tenia pantalones.


287

EL CARNAVAL Sostenía el otro que lo que tenía el águila eran calzoncillos. Ya la cosa iba entrando en calor cuando llegó el amigo (Garavis y dijo: —Lo que tenía el águila eran deseos de mandar los organizadores de la fiesta. —Alah! exclamó un chusco que ha visto al amigo Casas trabajar en “Il Perro

Chico.”

—Eso mismo, dijo Garavís. *

¿A qué no saben ustedes que fué lo que mas le gustó al señor Presidente? —La actividad, finura «., del señor azministrador in partibus de

un gran periódico? —No señor. —¿La pera y demás accesorios de cierto diputado de. la izquierda?

Arco

de triunfo

—No señor. —¿“Cuba por Dentro” del amigo Canales? —No señor. —¿El agua del acueducto? —No señor. —¿El piso de la casa Consistorial? —No señor. —¿La Cámara homogénea? —Tampoco. s —¿El artículo ““El bilingie”” que aparece en este número? —Menos. —Diga usted, pues, que es lo que

más le gustó al —Lo

Presidente.

que más le

gustó, fué

el re-

trato del Nuevo Cid Campeador que se exhibe en la calle de San José. No solamente le gustó, sino que dispuso sea enviado al Museo Nacional.

Bien sabía yo que ese era un cuadro de mérito.

en la Plaza

de Colón.


EL CARNAVAL

Nos alegramos.

Los

La alegría vuelve á reinar en el hogar feliz de los esposos Arruza. a gravedad del tierno infante ue constituye el encanto de aquella casa, ha desaparecido, gracias á los esfuerzos de la ciencia. Saben los esposos Arruza

celebramos esta noticia.

cuanto

No era malo Superintenden-

te de telégrafos, ha renunciado.

El Sr. Magiiigan era un buen empleado. Y aunque nosotros desearíamos ver ese cargo desempañado por un puertorriqueño, fuera republicano ó unionista, sentimos que haya re-

nunciado Mr. Magiiigan.

Porque era un funcionario inteligente y activo. Y porque casi tenemos

dad, de que esa por

un

ciones.

la seguri-

vacante se cubrirá

continental...

Han resultado e En Ponce, que fué bló;

y en

Caguas,

e epi donde más hadonde

también

habló bastante, ha hecho el Presidente de la República magníficas declaraciones.

Dijo que estaba seguro de trabajar por la ciudadanía; una cosa

——e_—_——

El Sr. Magiiigan,

ofrecimientos.

sin

condi-

que dicho sea en honor de la verdad. todavía no sabemos si nos conviene Ó no nos conviene.

Y con respecto al home rule, (Mr. Baiz que lo traduzca) dice el Presidente que es cuestión de tiempo. Los más optimistas calculan doscientos años.

Es decir, que los hijos de los hijos de nuestros nietos, tendrán gobierno propio, si es que en ese interregno no hay. un safarrancho y pasamos, en virtud de cualquier tratado, á ser propiedad inmueble de los alemanes ó de los japoneses, en cuyo caso el Sr. Presidente no queda obligado á nada.

Presidente á caballo, como un ciudadano cualquiera.


EL

CARNAVAL

289

UN LIBRO NOTABLE Don Eugenio M* de Hostos, el gran pensador y filósofo americano, que dejó gra-

ta y universal

memoria de su gran talento y

amor á la humanidad, acaba de publicar una obra filosó fic omoral, llamada

á prestar con su

sana

doctrina

un gran bien ála sociedad. Titúlase

este

Presidente Roosevelt leyendo á los Secretarios de Despacho el mensaje en que aconsejaba al Congreso las reformas para Puerto Rico.

libro * Moral Social,” y en él se > hace un estudio completo de la sociedad y de los organismos, individuo, familia, etc. que la constituyen. La “Moral Social, ” que encie"e

rrá un caudal inmenso de sabiduría

y que desde sus primeras páginas cautiva por su grandeza de miras,

debiera ser el libro de lectura de los niños y el catecismo de la humani-

dad, puesto que en él se llega al completo conocimiento de las relaciones

utilidad,

que de necesidad,

individuo

derecho y deber

gratitud,

querido amigo, que trae del viejo mundo las mejores impresiones. Entre

cosas,

el amigo

Al-

Cinzano (Torino.)

La redacción de EL CARNANAL8aluda cariñosamente al excelente amigo y agradece las noticias que nos trae del Papa

ligan al

con la sociedad, y de los

deberes que se desprenden

otras

'aro tuvo el gusto de saludar al Papa y nos asegura que la salud del Santo Padre continúa sin novedad, desde quetoma el Vermouth

Déjese de eso

de estas

relaciones, tales como el de trabajo, obediencia, sacrificio, cooperación, abnegación, obligación y el deber de los deberes, Ó sea el de

cumplirlos todos, cualquiera que sea el momento en que se presente á activar nuestros impulsos ó á pedir el fallo de la conciencia. Y, por

Hemos leido las cartitas que los jefes de los partidos políticos dirigen á Mr. Hamill.

Son en extremo originales. Pero mejor sería que. no las publicara. *

EA

último, en este libro se hace un de-

tenido estudio de las relaciones de la moral con las actividades de la vida. (De la revista madrileña

tro Tiempo.”)

»

*“Nues-

No se exponga á

la crítica, Coro-

nel, no se exponga á la erítica.

¿Quién se atreve á negar una car-

ta cuando sesolicita conh empeño?

Y Vd. no negará que las solicitó. **

Alvaro

Trigo

Después de un largo paseo por Europa ha regresado á la isla, este

Después de las cartitas, no creo yo ni en la felicitación del Presidente de la República. ¡Las cosas de Mr. Hamill!


EL

CARNAVAL

y

Una felicidad

TEATRALES Por ahí ha debido

empezar

compañía de zarzuela. Y no se vería obligada MiB Pd

la

á rectiA

*.**

Ya ven que no tenemos prejuicios. Porque no los tenemos, decimos ue en “El

perro

chico, ” “El

rey

el valor” y en otras obras del mis-

Una de las grandes calamidades que nos ha traido la nueva dominación—y conste que ha traido muchas—es los días de fiesta. ¡Que hay que dar gracias á Dios,

¡día de fiesta.

Que hay que plantar árboles, día

de fiesta.

Que

los yanquis desembarcaron por Guánica, día de fiesta. Que en la guerra por la independencia, ó en la guerra con cualquier otra nación, cuando se ha querido abusar, mueren unos cuantos americanos, día de fiesta. Que hubo hambre en los Estados Unidos, día de fiesta.

Que no hubo hambre, fies-

ta también.

Que el Presidente llega la isla, día de fiesta. Y

tería,

así, por cualquier

nos

apestillan

fiesta nacional, con sus consecuencias.

Las

consecuencias

á

ton-

una

todas

son:

ue no se reparte correspon-

encia, que no se da clase en las

escuelas,

que se cierran

las oficinas. En uná palabra, que se lesionan graveMr. Loeb, Secretario particular de Roosevelt y uno mente los intereses del púde los que más ha luchado por su reelección. blico. Aún no hemos podido comprenmo género, han resultado ustedes der, por qué cuando vino el Presine de aplauso. aplauso que nole regateamos. dente, se paralizaron los trabajos . * *. 0 en la oficina de correos. Desde el otro día estoy por decir Nos parece que no tiene nada que ver una cosa con la otra. ue el Sr. Mayoquí, como maestro sctor y concertador, es de lo meNo se honra al pueblo americano jor que ha venido aquí. Y lo deciyendo en comparsa á recibir al Presidente. mos hoy para que se vea que no nos gusta regatear méritos á quien Se le honra, sí, atendiendo como los tiene.

Y no decimos nada de Casas y Realito, porque nadie pone en duda el mérito de esos artistas. No es de ahora su reputación. Pero no vengan los entusiastas á

retender hacer pasar por-artistas os que no son más que aficionados. Las cosas claras y el chocolate

espeso.

Dios manda

á

los

servicios

públi-

cos, evitando todo motívo de queja. Pero generalmente los funcionarios públicos, y los de correos sobre todo, se figuran que la Nación son ellos. Y están en un gran error. El último ciudadano está por encima del más encumbrado funcionario público. Porque los funcionarios no son


EL CARNAVAL más que simples servidores del pueblo. Menos

bajo.

fiestas

Cuestión

y más

amor

al tra-

electoral (Para

EL

CarnavaL.)

Con la escoba de la Unión,

Barreiro, nos han barrido,

Porque esta vez se ha vendido

La escoba de la opinión.

E imperiosa nos exije Traspasar la propiedad. Negocia el agricultor, El industrial, el casero Y ante el oder del dinero

Se arrodilla hasta el amor.

Si tal influencia ha roto Ese convencionalismo, ¿Por qué no ha de ser lo mismo? Con el derecho del voto?

Hoy, en virtud de esos tratos,

El Presidente en automóvil, sin sogas ni policías

¿Que eso resulta en desdoro Del honor y de la fé Política? Bien, ¿y qué?

¡El oro siempre es A oro!

La dignidad se abarata,

Como el plátano y el ñame, y á la voz de toma y dame Sólo de ganar se trata. ¿Que eso implica corrupción

Be costumbres? ¡Tonter ía! Toda barriga vacía Aspira á la ocupación! Ley de la necesidad Es la ley que al mundo rige,

que impidan al pueblo saludarlo.

Han podido conseguir, Unos, un par de zapatos, Quien, un flus de casimir.

Otros cod más ambiciones, O más amigos del oro, Objetaron que al Tesoro Debían sus contribuciones.

Hasta aquí sólo he apuntodo

Las compras en efectivo Pues el capital pasivo Hará frente á lo fiado,

Que consiste en colocar

A veinte mil pretendientes, De alguaciles y escribientes, Con el dinero insular.


292

EL CARNAVAL

Se unieron muchos en ánsias De desmedida ambición, Y tales extravagancias Ha de cargarlas la Unión A pérdidas y ganancias! ROMPE

OLAS.

A nuestros lectores La visita del Presidente, y otros achaques de menor cuantía, nos hizo atrasar la publicación de un número de EL CARNAVAL. Y en honor de la verdad, pensábamos pasarlo por alto.

Pero

de

Paulino

Galguera,

que ya

6 de Europa y está al frente “La Primavera,” me dijo un

..

“La

Porque créanlo ustedes, algunos

suscritores no merecen ni los anuncios.

Fué un éxito el estreno de la obra

Nota tríste El amigo Elpidio Batista, á quien se profesa en esta casa un cariño fraternal, pasa por el inmenso dolor de haber perdido á un hermano queridísimo, cuando se dirigía con

rumbo á Puerto Rico.

La muerte es traidora. *

Los que compartimos con el noble y leal amigo las satisfacciones en las horas de alegría, estamos

también con él en los días de dolor.

Losada

y Agrin-

sonis, representada el jueves en el Teatro Municipal. El público, que es en este caso y en todos los casos, el supremo crítaco, premió con nutridos aplausos

los esfuerzos de los autores de “La

Cantaora.” Puede que los más exigentes hayan visto algunos lunares en “La Algunos detalles tan

- Cantaora.”

jusignificantes que no vale la pena

de señalarlos.

Vaya para los dos queridos ami£08, nuestra

sincera ¡elicitación.

Evaristo Sexto, Este querido amigo ha residencia en

por

algún

fijado

su

Cáguas, abandonando

tiempo

sus

numerosos

amigos de San Juan.

Va á trabajar y á ganar dinero en la simpática ciudad del Turabo. Evaristo Sexto, que es un amigo de grandes méritos, se conquistará en la sociedad cagiieña las mismas

simpatías

que supo

San Juan.

conquistar en

¿A QUE NO?

Ya se sabe que esto no va con las

suscritoras. Para cumplidoras, las muchachas. Pero con algunos muchachos... ni á la gloria. Y después 'si uno no paga, todo son murmuraciones!

Cantaora”

de los Sres. Pérez

tanto amoscado:

—Usted tiene que publicar los dos números que faltan. —Pero si quedan pocos días. —No importa. —Y tengo muchos recibos pendientes de cobro. —No importa. Y así es que me veo obligado á publicar una edición doble, profusamente ilustrada, todo por no disgustar al amigo Galguera.

:

A qué los Estados Unidos nocontestan al ultimatum del Japón con una declaración de guerra?

Los Estados Unidos no hacen eso. Si se tratara de intervenir por humanidad en los asuntos de una nación débil.

|

Ya eso sería otracosa. Pero con el Japón no se meten. No es por miedo, es porque no endienden el idioma.

COMERCIAL. Cadierno Barea y Co., es el

bre de una nueva razón

sustituye á la antigua

social

nom-

que

casa Cadier-

no López y Ca., y de la que forman parte elementos tan prestigiosos

como

don

Segundo

y don Manuel

Cadierno y don Rafael Barea. Les deseamos los mejores negocios.


EL CARNAVAL

NO ES BROMA A pesar del pico que le cuesta al pais estamos contentos de la visita del Presidente. Así,

cuando

estos carneros

ame-

293

ricanos, que vienen aquí á tomarnos el pelo llevando fotografías de negritos desnudos, sucios y asquerOSOs, por qué no esperan para retratarlos á que los bañen y aseen ; poniéndole al pié el enfático título de “natives bois”, sabrá el

Presidente á

qué atenerse. Y sabrá que Puerto

Rico,

á pesar de la ley Foraker, es mas culto —_muchos tados de

que 8la

Unión.

Por eso alegramos

nos del

viaje del Presidente.

:

Agradecidos. Con

atenta

dedicatoria hemos

Palacio donde se celebraron las primeras conferencias, promovidas por Roosevelt,

para concertaf la paz entre Rusia

En “El Gallo de Oro” contrar los figurines.

patrones

pueden ende

nuestros

que

acaba de publiestimado amigo Don

Juan Canales.

No hemos tenido tiempo de leerlo, Por eso nos limitamos á acusar

recibo y á darle las más expresivas

gracias por su obsequio.

Cachet político. Amo

tanto las democracias

que

aborrezco el Triunfo: y tanto aborrezco las aristocracias que amo la Derrota.

Porque la derrota, como las desgracias ó catástrofes, tiene la virtud de dejar á un mismo nivel de situación

Ó autoridad

moral

á to-

dos los que la sufren; mientras que el triunfo como las ejeeuitorias de grandeza, tiende á mantener distancias y grados de valer entre los políticos. El triunfo busca hacia arriba: ídolos, próceres. dioses. La derrota promueve y esta—

blece una completa nivelación. Por eso que los leaders del Partido vencedor están muy por encima de sus correligionarios de filas; y por eso es que también, los leaders republicanos, están donde siempre han estado Ó han debido estar; á

la misma

altura

de todos y cada

uno de los republicanos simples. :

De esto y de lo que se ha visto y

se ha de ver se deduce que aquí en Puerto Rico desastresignifica avance y victoria retroceso. Y que no se pataleología.....

diga

que

esto

es

Por encargo,

F. FIGUEROA MAESTRE. dd ia

|

un

tro,” libro

y Japón.

car nuestro

Ya lo saben ustedes.

recibio

ejemplar de Cuba por den-.


294

EL

CARNAVAL

A

¿Se puede saber? Como cien personas—por que eso sí hay aquí mucha gente curiosa— nos han preguntado de qué fué vestido á la recepción el Comisionado del Interior.

¿ : ' f $

z dez

%

E PR

Nosotros no lo sabemos.

Unos dicen que iba vestido de escocés; otros, que de musulmán

y no

falta quien haya visto en el traje del alto funcionario, al mismo Poncio Pilatos. Pero un republicano prominente,

. A,

.

q

L

l

ue por a e de estar incorporaos, conoce los usos y costumbres de todos los Estados y Territorios

.

ES

:

e

a

||

Po

de la Unión, me aseguró que el simático Comisionado del Interior iba vestido de saltamontesyá la antigua usanza.

¡Pero vaya

un traje para recep-

ciones presidenciales!

Mr. Roosevell,

O

A

AAA

qa”

Si no fuera por aquello de llevar parte del muslo á la intemperie,

cualquiera torero

lo confundiría

de

aldea,

después

con

de una

SA

Atiende, amigo Virgilio y

na el

Como si dijéramos “El Garboso”

un

en carácter.

2

perdo-

tratamiento: aquíse presentó

unionista* de

Cataño

con

una

queja contra el comisario de aquel

El mismo Garboso de “El rey del valor.” No se vuelva usted á poner esos andaribeles, Sr. Comisionado.

poblado.

Dice queaquella autoridad ha dejado sin faroles las calles del Tren y

FT

A —Ák

atacando |

. Sr, Alcalde de Bayamón.

un

novillada.

ES

a

VERDAD

La tiple señora Vehíalcanzó, cantando la romanza de “El cabo primero” un verdadero triunfo la noche del jueves.

Se hizo aplaudir y aquel aplauso fué sincero, espontáneo.

Pero la señora Vehi, no debe dormirse en los laureles que empieza á conquistar. Puede subir muy alto, estudiando. Estudiando mucho.

+

Mr. Roosevelt aconsejando á los eleciore


EL

CARNAVAL

295

faroles vuelvan á alumbrar calles donde viven personas

decentes y señoritas

muy

esas muy

simpá-

ticas.

Yo

supuse quetu ignorarias.eso

del alumbrado.

Y

le dije al

unionista:

vayase

tranquilo que tan pronto el alcalde de Bayamón se entere se alumbran

esas calles por que se alumbran.

De paseo Ayer embarcó para Caracas nuestro estimado amigo el Sr. de Diego.

lo la

candidatura

El representante á la Cámara por Arecibo estará en San Juan antes de abrirse las sesiones de la próxima legislatura.

demócrata.

Le deseamos

D=

gratas

en la tierra venezolana.

impresiones

>

delas Flores, con grave

vecindario. Parece

que

perjuicio del

le oyeron al ahijado

que el Presidente de la Republic: pensaba visitar sus dominios y dis-

A

puso colocar todos los faroles en la

plaza para recibirlo dignamente. No me parece mala laidea.

Pero

en vista de que Roosevelt no se dignó ir á Cataño, conviene que los

EDUARDO VALERO, En Cienfuegos, importanteciudad.

de la isla de Cuba, ha fallecido el señor Valero músico mayor que fué del Batallón de Valladolid de guarnición en Puerto Rico en tiempo de la dominación española. El señor Valero era muy conocido y muy estimado en esta capital.

Los cables dicen queel ministerio español ha dimitido. Cualquiera le mete el «diente en España á la cuestión religiosa,

Subirá Maura el beatífico.

Y ya verán ustedes si es capaz de

ores de Pittsburg que voten su candidatura. .

4

rretender que se traslade 4 Madrid la Santa Sede. Porque á Maura se le ocurren cosas muy peregrinas.


EL CARNAVAL

AMOR

PATRIO.

:

do errante por calles de ciudades

extranjeras oía á alguno hablar el idioma de mi país, se me saltaba de placer el corazón; me parecía que había oído hablar Áá mi padre. Y siempre que bajo la- influencia de climas rigurosos veía en un jardin crecer una morera, con que terneza abrazaba y besaba aquella planta,

La casa donde nacimos, el país donde fuimos á la escuela, los lugares donde dimos nuestros primeros pasos, ape árbol que vimos crecer, aquel prado donde cogíamos margaritas y violetas, cuanto hay de más querido, y que tanto deseamos ver después que estamos léjos.

la cual formando

¡Oh, patria!: En ella hay recuerdos tan dulces. Ella alimenta: vivos Ó6 cubre muertos á nuestros padres, á los compañeros de nuestros juegos, á nuestros conocidos; allí se oye aquella lengua en la cual nuestra madre

tros

sufrimientos,

que nos enseñó á llamar

avenidas,

Si alguna

vez encontrares

á un des-

terrado no lo desprecies; celo, socórrelo, haz que

nos consoló en nues-

primeros

largas

me parecíala belleza y riqueza á los campos de Italia. ¡Infeliz de aquel que, á la fuerza, tiene que separarse de la patria!

en tu tierra otra

y en

compadéencuentre

patria, otros

her-

manos, para reponer aquella patria que dejó y que tanto amaba.

á nuestro

padre en la tierra, como también aquel Padre, que está en el cielo; la lengua en que por vez primer: pronunciamos el nombre de los que nos dieron el ser; la lengua en que recibimos los primeros consejos, nuestra primera instrucción, las primeras palabras amorosas. ¡Cuán natural es amar á la patria! Tam-

CESAR ———

CANTU.

A

LO MERECE. El Ledo. don

Federico Sehroder,

uno de los nuevos abogados americanos que conocen el Derecho, ha sido nombrado juez municipal de bién la golondrina vuelve á su nido : Fajardo. :

de las lejanas tierras donde el invierno pasara. Nunca se siente más el amor á la Patria que cuando se está obligado á alejarse de ella, ¿No te-ha sucedido alguna vez que hayas tenido que estar le-

Es un nombramiento merecido y por ello felicitamos aljoven letrado.

jos

de,tu tierra natal, y á la vez de

tus

padres?

y Canet y seguramente quedará ter-

Al

regresar,

como se

sacudia con regocijo tu corazón, cómo tratabas de mirar hacia adelante, para ver cuanto antes la torre y el campanario de la ciudad donde naciste. ¡Piensa en aquel que está separado por montes y por mares,

sin en-

contrar á;sus conocidos, sin ver jamás á un amigo, á los parientes, al sacerdote al cual pedimos tantas veces consejos, sin acudir á la llamada de la campana, ála iglesia vecina, á cantar himnos é invocar á Dios! ¡Oh! como se fija la vista sobre las montañas, 6 en el cielo, hacia el lado de nuestra patria! De qué

gran precio nos parece tódo lo

nos trae un

recuerdo

de ella!

que

Yo

heprobado esta amargura; y, cuan-

CASTELAR, Ya empezó á editarse el libro del amigo y compañero señor Dalmau minadoen los últimos días dediciembre. Constará de doscienta páginas y va

ilustrado

con

varios

retratos

del gran tribuno español. La obra del amigo Dalmau pera con vivo interés. ——_———

se es-

AAA

TRIUNFANTE. Rafael Martinez, un puertorrique-

ño que honra ásu país, acaba de obtener en Albany. un triunfo esPR pléndido. La prensa americana, que no gusta mucho de hacer insticia á los prertorriqneños,

dedica

artínez grandes elogios,

al

amigo

Le enviamos en estas líneas nues-

tra sincera felicitación.


EL CARNAVAL Le

LA FIESTA CONSEJOS

PARA

A

DEL NIÑOS

:

ARBOL

DE 7 A 100 AÑOS

hará lo que le conviene: un horno para carbón ó un cercado para ustedes.

A

_ Vamos, niños, á sembrar, á perpetuar la especie,

que si otro sembró chinitas para, que ustedes comiesen

; ] es muy) justo que pepitas :

(de chinas)

:

pa a

ustedes siembren.

=> al

a

z

Y

Aeo Po

y

EY

Y mientras tanto, el nativo, el que vive á la intemperie y dobla su cuerpo al surco donde la semilla prende y da sazonados frutos para que coman ustedes y la pandilla de zánganos

que hacia al presupuesto ascienden;

-

¡deÉ Ss

Y

¿nuestro jíbaro! de hambre

107)

y casi desnudo muere,

explotado por los jaibas de los sociales burdeles esos contritos que ahora,

7 Po

'Luego vendrá el tio Sam, ¡el amo! ¡Don Yo! ¡ese! y'con chinales y finca

y bien repletos, pretenden que gracias se dén á Dios

cyando Dios gracias no quiere,

mientras sepa que no están en este mundo de infieles repartidas por igual las penas y las mercedes.

>

¡EL Dicen

que

POBRE! cuando

Mr.

¡El pobre!

El caso Pittingil

menos.

en

verdad

|

nó era para |

leyó á la Corte Federal el cableEsas noticias siempre son sensi. grama en que lo renuriciaban dió — bles. muestras evidentes de una gran Y cuando no se esperan más toatec n, davía. 1


; EL CARNAVAL

298

¿Que hay de eso?

ESTA

No lo creemos. Pero nos aseguran que en las invitaciones que se pasaron á varias señoritas profesoras, se aconsejaba que no llevaran vestidos de colores chillones á la recepción. Repetimos que ne creemos esto. Porque la última profesora puertorriqueña puede dar clase de buen gusto á todos los ciudadanos americanos. Pero si eso es verdad, no deja de ser una parejería. Que no han debido soportar las señoritas profesoras.

MISS

profesora

ame-

ricana, cuyo nombre encabeza estas

Miss Wells es lo mejor de lo poco que los Estados

mandado

Unidos

ha

á Puerto Rico.

_Por eso, sin dúda, se quería morir. Pero ya no se muere, gracias á Dios.

Pronto

tendremos

verla de nuevo

lo exhiben. gusta; pero el animalito.

—a—

CONVENDRIA. Vamos á ver, simpáticos Delegados ¿cual de ustedes se atreve á presentar un proyecto de ley creando una lotería puertorriqueña? ¿No creen ustedes que convendría Yo creo que sí. Y el que lo consiga cuente con mi

voto para las próximas

líneas está fuera de peligro. Con toda el alma lo celebramos. bueno

debe deestar

Ya “El Perro Chico” crecidito. Porque cuidado que El perrito es bonito, nolo exhiban tanto. Se va adescomponer Y sería lástima. Porque gusta.

eso?

WELLS

Ya la simpática

BUENO

el

placer de

al frente

de sus cla-

ses de dibujo, enseñando con su gran ilustración y educando con su gran ejemplo á los niños puertorriqueños. Hee

También la señora Clooper, otra

distinguida dama americana, está fuera de peligro. Para ambas nuestra calurosa felicitación.

elecciones.

YA EMPIEZAN. Sabemos

que

no

es

uno

sólo el

que aspira á la Secretaría de la Cámara.

No

respetan

de ese destino está

Bernier.

El señor Matos

que el

al frente

señor

Matos

Bernier, que

**

No se ocupen de eso. Tengan un poco de paciencia que ya habrá sitio para todosen el Con solidado. Y sinolo hay, tengan paciencia también.

Rafael Martínez

Nadal

En el tren de esta mañana

DIOS LO QUIERA. Nos aseguran que un simpático Delegado á la Cámara, presentará

en las primeras sesiones un proyec-

to de ley estableciendo las peleas de gallos. Quizás este año pase. ¡Como la Cámara es homogénea! Sabemos que el amigo Chuchú está muy interesado en este asunto.

Y nosotros también,

ha

puesto su pluma y su verbo al servicio de la causa unionista.

ha sa-

lido para la bella ciudad del Oeste nuestro querido amigo é ilustrado compañero don Rafael Martínez Nadal. Motivos de salud obligan al Sr. Martínez á ausontarse deSan Juan,

donde tantas y tan merecidas simpatías ha sabido conquistarse. Al despedir cariñosamente al cultísimo

escrítor

y camarada,

seamos con toda más Pr. salud.

nuestra

le de-

alma el

restablecimiento

de su ;


EL

299.

CARNAVAL

La petición de indulto,

y dijo: “Poco tiempo. Es decir; los indultará... después de ahorcados.

Llenas del mejor deseo, varias distinguidas damas de la sociedad arecibeña, solicitaron del Presidente

el indulto de los reos condenados á la última pena. Esa exposición condensaba la aspiración unánime de la sociedad puertorriqueña, que

ve con

horror

levantarse el patíbulo, para privar de la vida á séres humanos. En esa exposición latía el alma de aquel pueblo que se apiñaba en calles y plazas, para ver pasar y saludar con

cariño

al primer

magis-

trado de la nación americana. Y el primer magistrado leyó la exposición, reflexionó un momento,

Muy

bien $

Mr. Pittingil, el Fiscal de la Corte Federal, ha renunciado. Antes de ahora ha debido tomar esa resolución el Sr. Pittingil. Desde que “La Correspondencia,” con más razón que Dios, puso las peras á cuarto al Fiscal federal, estaba el Sr. Pittingil de más, en ese puesto.

Y aunque un poco tarde, le felicitamos por haber renunciado.

Presidente

Roosevelt

despidiéndose de sus amigos ,antes abandonar

de el

continente.

+ Acertado

nombramiento

La Srta. Petra Mirabal, puertoriqueña que desempeñó el año pasado el cargo de profesora de bordados en la Escuela Industrial de Ponce, ha sido contratada este año

para igual cargo.

Si todos los profesores que contrate el Departamento de Educación para las escuelas de- Artes Oficios, tuvieran la capacidad de la Srta. Mirabal, no habría que temer nada por el fracaso de esas escuelas. . Pero, desgraciadamente, de esas entran muy pocas en libra. * Son nones y no llegan á tres.


EL El

CARNAVAL

do de Santurce una palma real que

recibimiento

Digo yo que, si cada vez que el Presidente de la República sale á dar una vuelta por los alrededores de Casa Blanca, hay que ensogar lo

no fuera conducida, en hombros ó en carretilla, á la residencia del Gobernador. ¡Cuánta frondosidad!

Aquellos gallardetes que al leve - i¡mpulso de la brisa se agitaban

en la fa-

chada del palacio, resultaban deliciosos.

Y de un gusto artístico insuperable. +»: A

Hagamos al alumbrado

co.

justicia eléctri-

La combinación de

bombillas estuvo

bien

dispuesta. Tambien estaba ar-

tísticamente arreglado, lo que llamábamos en tiempo de la ominosa, el Salón del trono.

Despacho del Presidente en Casa

las calles y plazas por donde pase el Emperador, no debe ser muy floja la partida del presupuesto destinada á cañamos. Pero que la calle de Allen (Allen quiere decir Fortaleza en castellano) ofrecía un excelente golpe de vista, es indudable. Debido todo al gusto artístico de nuestro Excelentísimo Ayuntamiento. Aquellos doscientos retratos de Roosevelt con la inscripción **21 de

Noviembre de 1906,” con el aguilu-

cho simbólico y colgados de otras tantas estacas, parecían crucifijos.

Nunca me había inspirado tanta pena el Presidente de la República. *k

Lcdo.

Santoní

Hemos tenido el gusto de ver en San Juan al delegado á la Cámara par el Distrito de Arecibo. Viene alegre como unas

pascuas,

y á juzgar por sus movimientos, parece dispuesto á no estarse quieto en las

Cámaras.

Ya se sabe que el Sr. Santoni

*.'P

La entrada del régio Alcázar, antes Santa Catalina y hoy Mansión Ejecutiva, parecía una selva vírgen, aunque tambien se podía con-

fundir con la entrada

Es verdad que las cosas se hicieron precipitadamente. Blanca. ¡Y comoesla primera vez que un pájaro de estos pasa por la isla! Pero de todos los festejos lo que más le gustó al Presidente fué la función de gala, que la compañía de zarzuela preparó en su honor.

de la Cate-

dral en un domingo de Ramos.

No ha quedado en todo el pobla-

á

cada rato arma un revulá en el se-

no de la. mayoría. Pero tenga presente, Santoni amigo, que en la próxima legislatura no se puede abusar. Una cosa es con guitarra y otra cosa es con violín. Y esta vez es con violín.


301

EL CARNAVAL

¡Qué

sí sabe!

El Gobernador no pensaba embarcarse ahora, Pero tan pronto salió la comisión

unionista,

el Gobernador

lla-

mó á la señora,—porque han de saber ustedes que el Gobernador lo consulta

todo

con

la señora, en lo

cual hace perfectamente,—y le dijo: —¿Sabes, mujer,

4 lo que vino esta

gente? —No lo puedo sospechar.

—Pues á que le demos el consolidado, ¿qué te parece? —Me parece que tu no tienes necesidad de meterte —Pero hija, algo

Y vean ustrdes las ventajas de repartir esas reliquias. Al llegar Don Teodoro al rio que queda más cerca de Utuado se atascó el automóvil; cosa extraña, porque esos animalas no se atascan nunca. Ya en mitad del rio se antojó el Presidente de comer sardinas gallegas y bacalao á la serenata. A aquella hora, con el rio erecido, atascado el automóvil y sin avisar á nadie, era un problema complacer al Presidente.

en ese jamón. le tenemos que

dar á estos amigos. —Perfectamente, pero no te metas tu en eso. Los políticos son como los enamorados. Y el que se mete en sus chismes pierde. —¿Que me aconsejas, pues?

—Que nos embarquemos el miércoles y deja á Post que se entienda con ellos. Y sin pensar más nada, llamaron á la sirvienta que recogiera los corotos y ya los tienen ustedes camino de los Estados Unidos. Este Gobernador es el gran hombre!

Lean y piensen En otra parte de este número verán ustedes

un anuncio

del

Banco

Industrial. Si lo leen con detenimiento, verán

las grandes ventajas que reporta á los pobres esa institución bancaria.

Pensamos

más

dustrial.

Por

ocuparnos

detenimiento

hoy nos

del

luego

con

Banco

In-

limitamos

¡Á reco- -

mendar la lectura del anuncio.

¡Camará! Quince mil retratos del Presiden-

te repartieron los unionistas, al decir de uno:¡de los mas prominentes jefes de la Unión.

Pero entonces,

comó

Dios no le

falta á nadie,—apareció la Providencia en forma de jíbaro adolescente,—un

niño

de

doce

á catorce

años, mal vestido y peor calzado luciendo en el ojal de la blusa el retrato del Presidente. Llegaba á todo correr con unas macarelas, pues sardinas gallegas «no, se pudieron

conseguir,

y al empuñarlas

Don Teodoro se fijó en el botoncito. Se fijó y se entusiaAmó exclamando muy sonreído: “He aquíun ciudadano que me dará su voto.” Y agregó, mientras mezclaba el pan con las macarelas: “este ha sido el mejor lunch que he tomado en Puerto Rico. ” Pero no fué capaz de brindarle una macarela siquiera al pobre jibarito que se sentía feliz levanilb en el ojal de la blusa el retrato del Presidente de la República. Esto que parece una novela es un hecho histórico contado por un ciudadano de la Florida. _———

': Verán

ustedes

Ya tenemos un yanqui de Direetor general de la Red telefónica. Y como es un yanqui el jefe, no habrá un solo individuo que se queje del mal servicio. ¿ Porque :semos así: todo lo que hacen los yanquis, resulta siempre os lo único que saben hacer esos ciudadanos, es cobrar buenos sueldos y reventar á los subalternos.


EL CARNAVAL

Un

¡Gracias á Dios! Así habrán exclamado sos Whintrop

cuando

los espo-

se vieron

bres del Presidente.

li-

Porque al Gobernador de la isla le pasa con el Presidente, lo mismo, exactamente igual, que á los alcaldes de los pueblos con el Gobernador: Le hacen muchisimas fiestas ero están dando la fiesta á todos os demonios, mientras el Gober-

nador permanece en el pueblo. Además, ya sabe que el pejegrande se come siempre al chiquito. La prueba está en que, mientras estuvo aquí Mr. Rooselvet, nadie hablaba de Mr. Whmtrop. Ni Mr. Baiz que no lo afloja un momento.

derrotado triunfante.

El amigo Aldea Nazario que cuando se pone la chistera no hay quien

le tosa, ha sido nombrado con buen sueldo para un destino en el “Asilo de niños” de Santurce. Es un derrotado que triunfa. Y por ello lo felicitamos. * * *

Y como el amigo

Aldea no sola-

mente es un obrero distinguido, 6 era, mejor dicho, sino que tambien

es un periodista de mérito. le suplicamos investigue, ahora que va á ser

empleado

de

ese

estableci-

miento, qué es lo que pasa con los niños de ese asilo. Esperamos oir la autorizada palabra del señor Aldea Nazario.

Ay,mí madre! con mil testigos Con el tiempo y un palito será necesario pedir á nuestros ediles que pongan un puesto de burundangas en Puerto Arturo para

regularizar

el

precio

de

todos esos tubérculos que en el limpísimo mercado de esta ciudad, están poco menos que por las nubes. Horror, terror, furor!...

¡si se

ni berengenas, ni tomates;

casi

come oro! Desde que entró en prosperidad esta isla, el jíbaro ya no siembra arroz, ni habichuelas, se puede decir que ni la Coliche .ama; porque, cuidado que están escasas

las terneras

y

cara

la

carne! De gallinas, no digamos:

una

señora del gallo vale 75, 80 centavos y más;

un pollo....,

Mr. Roosevelt en la campaña electoral.

si no

son las viudas, no hay quién lo coma, Y es natural que esto suceda. Todo Mayagiez;

como

quien

dice,

del

nos viene de Isabela, Aguadilla,

extranjero,

mangos,

guineos,

chi-

nas, etc. Es claro! Aquí encuentra buen acomodo la jibarería de los campos de Puerto Rico, amén de la que emigra huyéndole á la prosperidad decantada por el gobierno en sus estadísticas oficiales. Porque es lo que el pobre gíbaro dice: A contribuciones y á multas se nos quiere hacer; adelantar; á expolio vivo se nos quiere hacer sudar la anemia que nos invade; á _macanazos policiacos, recluir cuando. protestamos. Y mientras haya barrilles que arrastrar, fondas donde colocarnos, barajas para jugar y Capital donde se gaste en un minuto lo que el Ayuntamiento debió


H

EL

CARNAVAL

308

haber invertido en purrones para la basura...... ¡viva la capital, viva la comodidad del trabajo escaso y bien remunerado, y reviéntense los que están en una clase que aquí se llama media y ni disponemos del Tesoro

para

gastar

lo

que

nada

nos

cuesta,

ni

nos

hemos

de la vergiienza para vivir estafando á la humanidad Justicia y de la honradez, burlando (Ó no burlando) la seria y no anarquista vigilancia

idónea Y

así

Vamos

que

de la

del Gobierno! palante,

como

Resultado; que entre el retazos, las majaderías de dad

despojado

á nombre

encuentra

muy

se

dice

tifus, el la Junta

cómodo

ahora.

cólera á de Sani-

dictar

leyes,

disponiendo del bolsillo ageno; los caseros que quieren

ha-

cerse ricos en un año; los mierobios

que

cen

pare-

haberse

he

cho

SOCIOS

los

médicos

b

ticarios.

de

y due-

ños de ataudes. sepultureros y

demás de es

amigos

la el

familia.... acabose.

No

diremos

“apaga

y

monos

como

eg

uso

V

COS-

A

tumbre;

sino,

“TÁmOnos,

ya

vá-

esta

que

apa-

g20.

En resumen: que tendremos que

armar

cruzada

Roosevelt

contra

rezcan

los

íntimo.—Su

ultimo retrato después

quien

artículos

il “Tierra”

que

tiene la culpa de que el jíbaro no siembre, y se

viva

estudie

reventando,

el

como

que los

mis

americano.

tiempo”

aleunos Eso

es:

palabras

Con

quiero

esto

decir

vo.

en

de

sen-

dentro

de

una

de

aleunos

visita

á

la

dicando

días

ñ

£

(

na

E

lo

de

Ya

a

verá

que

lo

aseguran

Nos

la comisión

de

organizar

para una

pnecanicas,

Escuela

de Artes y Oficios para ocuparnos nuevamente de este fracasado esta blecimiento. L

mogenea

cuenta

dentro

se enca-

vive.

miembros elevarán

cuelas,

“DOCO

días.

viraremos

se

propósito,

á

Y

nombrada NÑo se tomen

aquí

asunto.

TIEMPO

POCO

tido

de la reelección.

una

á

la 1

que

el señor

son.

es-

Smnara

exposición deben

esas

ho-

seria,

ser

las :

y

1n-

dando

escuelas

Matienzo

en

lo

que ha parado su obra: el proyecto de ley más simpático de todos los presentados en la pasada legislaa

=

tura. AY

AAA

Be

d


EL

Oh,

CARNAVAL

los anarquistas !

pechosa; digan lo que quieran los ordenancistas que dan por bueno todo lo que emane del gobierno. A no estar en Puerto

Rieo y pre-

sumir que debe ser la democracia

Veremos

algo nuevo en Puerto

Rico, decíamos nosotros cuando se

dijo por ahí que vendrían, ó que vi. KIéron, unos anarquistas italianos,

cuya venida coincidía con la llegada-del Presidente. Desde en principio pusimos en

que aquí se gasta parecida á la que dicen ser tan pura cuando

se fabri-

ca en la nación que nos rige, creeríase, Ó pudiérase creer, que aquí el gobierno ha tratado de ganar indulgencia con camándulas anar-

>

gb

pues

allá,

en

tierras

del

(vulgo caras) por este peñón rodea-

-Zar, acostumbran los acólitos del emperador fraguar complots para echárselas de celosos guardianes que lo averiguan todo, conjuran

inevitable la captura, supo-

dando por resultado algunos fusila-

duda

que

los pajarracos de bom-

ba y puñales asomaran

su gaita

do por todas partes def ágna, dondesería niendo, como es lógico suponer, por muy abnegados que sean

señores de

la dinamita,

que los

siempre

desearán una puerta de escape, por mucho que su consigna sea matar y morir.

Puede sí, pensábamos para inter

nos,

que algún

anarquista del ron

que se necesita

demostrar cultura,

se tome más tragos de los convenientes y arme alguna gresca intespestiva en momentos precisamente mucha cultura, ante los huéspedes que nos habían de visitar y ños vi. sitaron; pero, gente de esa, rivales

de reyes y aristócratas

que se ha-

cen oir á tiro limpio ?.... nones!

lo

que es esa,

no viene á Puerto Rico.

de

de

Y cuidado que se tomaron precauciones que no nos abstenemos tachar

exageradas.

No

alde dijo Leopoldo Cano:

en

“Con sublime habilidad

un soldado, poco á poco, queriendo pintar á un loco

retrató la

Porque,

humanidad

lo que es una quijota-

da.... lo fué ese alarde de vigilancia

y ese

cordón

sanitario

que

hizo

aparecer ála masa común como 808-

atentados,

mientos,

apresan

á infelices ete:

algunos presos en la Sibe-

ria y algunas

recompensas á favor

de jefes y celadores de policía; Ah: y un voto de gracia para los gue salvaron la preciosa vida del nperador! Aquí, por fortuna, da de eso.

no sucede na-


EL Pero eso sí; si se llega á acercar un pobrete al Presidente 6 á alguno de la comitiva, de seguro que se encuentra de la

305

0JO

(melo foticos

con los benemé-

( , £

Por lo demás, todo pasó “sin novedad,” en paz y gracia de ese que ña-

Y

r

<>

y)

revólveres rita.

CARNAVAL

man Dios.

Gracías,

señor.

El Presidente deseó hablar espa-

ñol.

Pero desistió de su propósito por algunas dificultades de la pronunciación. Mas vale así. Porque si algo desencanta, son estos novísimos

regeneradores ha-

blando el idioma de Cervantes. En inglés son más aceptables. Nosotros le

decidos idioma.

De

por

quedamos muy

haber

lo bueno

agra-

respetado

el

res empleados americanos.

Aquí ha venido lo mejor de casa.” Gracias, Sr. Presidente. Muchísimas gracias. Ya sabemos que aquel Mr. Elliot del Interior,

dilla.

Ni de otros muéhos empleados que “limpian, fijan y dan esplendor.” En lo de limpiar, una especialidad.

sobre todo, son

Gracias, Sr. Presidente; muchísimas gracias por el honor que nos dispensa.

Y dígame: ya que son tan buenos ¿no le convendría llevárselos?

lo mejor.

Dicen que dijo el Presidente: . “Yo he tenido especial cuidado en mandar á Puerto Rico los mejo-

del Departamento tenía desperdicio.

cación, es una. verdadera alhaja. Vale la pena de conservarlos en alcohol para que no se descompongan. Y nada queremos decir de un fiscal que andaba suelto por Agua-

no

Y este Mr. Falkener del de Edu-

¿ ENGUAS , POLÍTI

A

A

AKÁA

¡Lo quieren! Jefes

prominentes

del

partido

unionista visitaron al Gobernador la víspera de su viaje para decirle que necesitan el Consolidado. Esto nos lo dijo un unionista. Y nosotros creemos que la pretensión no puede ser más justa.

Porque, francamente, del triunfo

si después

no consiguen

A S - ese Departamento, no veo

po?

yo las ventajas de triun-

É

far.

Estar en el poder y no - poder disponer de un destino, es cosa que no resulta.

: **.

Y si D. Rafael del Valle

va á ese Departamento, como hay Dios que me coloco. d Así, republicano y toO.


EL CARNAVAL LA GRAN Hay pático todos,

que confesar que el ilustre Roosevelt, como le dicen ha

dicho

una

gran

VERDAD Presidente de la República, el sim-

ver-

dad, cuando dijo que de todo lo que ha tomado en Pto. Rico; y ha tomado mucho, nada le ha agradado tanto como los licores de Blanco y Compañía. Cuando

uno

de

los

reporters

le preguntó: —¿Y de nuestras bebidas, qué Opina el Presidente? —Le diré:—contestó Roosevelt.—Yo no he tomado más que los licores de Blanco y Co., y puedo afirmar que ¿l ron es superior, El moscatel superior, El anís superior, El vino superior, Y ellos, superiores también. —¿Y no cree el Preside::te que un país que tiene y toma esos licores puede disfrutar... —Del Gobierno propio?. Indudablemente... tiempo.

or ahora sigan bebiendo de estas marcas de llegar á la americanización. —La Constitución sigue siempre á... —A la bandera, ¿verdad? —No

señor:

Y que

*

de

es la mejor manera

algunos

'

sé yo cuantas cosas más,

Muy señores mios: no es una obligación ir á las recepciones. Pero si se va, se debe ir como Dios y la etiqueta mandan. Y esto va también

con las damas.

Muchas distinguidas señoritas, sobre todo americanas, se presenta-

%

Y apropósito de la recepción. ¡Qué de cosas ridículas vimos en la Mansión Ejecutiva! . Individuos que disfrutan de buen sueldo y pueden comprar un frac, se presentaron de chaqueta corta como si se tratara, por ejemplo, de a entierro de angelito. tros iban de mucha etiqueta y con sombrero de paja. l

Vimos

es cuestión

todas eminentemente ridículas.

fueron, por fin, los que la comisión de recibo? que hubo chismes y enesa tontería. *

amarillos,

que

eso

á la bebida.

¿Quién recibió? ¿Quiénes formaron Cuidado redos por

Pero

con

zapatitos

ron con vestidos de muselina de cin-

eo centavos vara con cuatro

ó cin-

co lavadas y muy mal planchados. Es que, cómoel Presidente entró así, vestido á lo Director de EL CARNAVAL, todos se han creído autorizados para presentarse en la recepción de cualquier manera. Poco á poco: Eso no lo puede hacer mas que yo y el Presidente de la Republica. Ya lo saben para otra vez.


EL

307

CARNAVAL

Así se hace A cumplido y atento no hay quien ld» gane á nuestro Gobernador. Aún no ha llegado á Washington el Presidente de la República, y ya está en cumino el Sr. Winthrop, la señora y el Secretario particular, para corresponder á la visita que nos acaban de hacer el primer maistrado y la primera magistrada

mo cualquier cocinero ¿verdad, D. Joaquín ? Yo no me atreví á objetarla, porue para una cocinera, un cocinero ebe ser algo así como la primera

persona de la Santísima Trinidad.

Y me fuí pensando, que Á veces las cocineras discurren como los jefes de Estado.

e la Nación.

Y luego dirán que no son cumplidos los americanos.

El Presidente es muy simpático. Pero aquí necesitamos algo más que simpatías. ————N

El Gobernador, la Gobernadora y el Secretario permanecerán en los

Estados Unidos hasta

el dia 10 de

Enero. Mr. Post se encarzará, en tanto, de escribir el mensaje á la Cámara homogénea,

aconsejando que

haya

paz y concordia. Se usegura que Mr. Whinthrop traerá la ciudadanía. Y el gobierno propio... lo irá á buscar Mr. Post.

¿Y

qué más?

—Qué simpático es el Presidente dice todo el mundo. —¿ Has

visto cómo se reía?

—¿Te fijaste cómo saludaba? —Iba de pié en el automóvil. —Y con el sombrero en la mano. —Vestido de blanco como otro cualquiera. En fin.

que todos

convienen

en

que el Presidente de la República es una persona muy agradable. Esta mañana me decía la cocime-

Retrato

de

Roosevelt

antes de ser

Presidente de la República. --_— —

EL BILINGUE

ra de casa, que además de ser o.

nista hace una carne méchada que da la hora. —¿Ha

visto Vd., D. Barreiro,

simpático es el Presidente? —$Sí que lo es, muchacha, lo es. —¿Vió Vd. cómo se reía? —Sí, econ toda la boca.

fqué

sí/que

—Y qué sencillo para vestir:

eo-

OS hay de dos clases: el que va á los Estados Unidos, y el que se desarrolla en la tierruca,

sin co-

nocer á la tierra donde se habla inglés, más que por referencia. Estudiaremos cada uno de estos dos grupos por separado, y llamaremos al primero “bilingiie por contagio,” e


y

al segundo

nidad.”

“bilingiie

EL

CARNAVAL

por

afi-

El “bilingiie por contagio” marcha á los Estados Unidos á los 18 620 años—y á veces después de cumplidos los 25. Llega á Nueva York y se hospeda en un boarding latino de la calle catorce,

en donde

hay hospedadados doce ó veinte jóvenes de distintas partes de la América latina, los cuales, aunque ápenas hablan inglés á pesarde haber estado allí uno ó dos años,: creen muy chic hablar castellano usando de vez en cuando alguna

palabra inglesa con pronunciación española (aunque no exista tal pa-

labra en el diccionario de la lengua castellana) y se han acostumbrado á ello de tal modo que inconscientemente no hablan inglés ni castellano,

sino

¡jeringonza

bilingúie.

Nuestro “bilingiie por contagio” está hospedado en ese boarding cuatro ó cinco semanas, al cabo de las

cuales

se marcha á alguna pobla-

ción del interior, en la cual

está el

colegio á que va destinado. Llega nuestro personaje á dicha población, y traba inmediatamente amistad con media docena de latinos que también allí estudian, los cuales ya habían sido iniciados por los del hoarding de Nueva York en el arte de la jeringonza bilingiie, en cuyo conocimiento han excedido, con creces, á sus maestros. Nuestro personaje tiene amistad íntima con los bilingiies, del colegio, con los cuales anda siempre; á penas se junta con los americanos, y al cabo de dos años

regresa

á la Isla, des-

ués de haberse perfeccionado en el idifha inglés, según dicen sus papás á los amigos, al participarles el has regreso del niño. lega por fin el niño á Puerto Rico, y desde que desembarca advierten sus padres que se le ha olvidado por completo el español. “Demi una cup de café con tosta do”, dice á su madre

durante el de-

sayuno, pues el pobrecico eree que “cup” en inglés es copa en español, y se le ha olvidado lo poco que saía de pronombres y género de los nombres. A los pocos días de es>

tar en Puerto Rico veen un periódico un anuncio de una casa de comercio que solicita un corresponsal, y, sin pararse en chiquitas, escribe una solicitud que comienza poeo más Ó menos en los siguientes términos:

“Querido

señor: Sabiendo

que necesita usted un corresponsal, por la presente hago aplicación para esa posición” (ésta es una fórmula que el bilingiie había visto usada en inglés con bastante freeuencia, y que tradujo á su jeringonza). Demás está decir que el “¿querido señor”, al acabar de leer el primer párrafo, echa la carta al cesto de la basura, sin mirar siquiera el nombre del insigne bilingúe. Pocos días después averigua el papá de nuestro personaje que á su niño, que él creía se había perfeccionado en el idioma inglés, no lo podían entender los americanos que

con él habían tratado de hablar en

ese idioma, y se convence de que el nene no hablaba inglés ni español, sino jeringonza, que era lo único que había aprendido en el colegio. ¿so si, volvió ásu país afeitado y con una “ay mi madre” de tremendas proporciones, y cualquiera lo tomaba por un continental. Pero el “bilingiie porafinidad” es más

gracioso

aún.

Admira

á

los

americanos y los imita en todo lo que puede. Se ha afeitado el mostacho. usa sombrero de panamácon gasa blanca muy abultada, y no

viste más

que

de blanco,

Está

aprendiendo inglés, y se regocija en hablar (Ó tratar de hablar) esa lengua delante de propios y extrañas.

Eso sí, sabe decir *“all right”, “good morning”, y “how do you do”, cuyas frases, sobre todo

le sirven para todo.

la primera,

A nuestro “bilingiie por afinidad” le nombran repórter de uno de nuestros diarios, y á los pocos días leemos en el desdichado diario noticias como la siguiente: “uncablegrama ha sido recibido de Nueva York, dando

cuenta. ....”;

“una

confe-

rencia será dada en los salones del Ateneo porel señor don... .”; “el

S :pervisor de Elecciones ha salido

para la isla. ...” (aunque en la ley


EL

CARNAVAL

el título de este funcionario es supe-

rintendente, que es palabra castellana, nuestro bilingúe la hace ““supervisor”, que á él le suena mejor por ser más inglesa). .En fin, nuestro “bilingiie por afinidad” se ha inglesado de “tal manera que hace pocos días mé dijo que iba á la grosería de Luiña- 4 comprar un frasco de olivas para su madre en leyes, que estaba

enferma

y. presentaba

síntomas de insanidad; y yo dije para mi capote, ¡lástima grande queá tu madre en leyes no le dé la insanidad por no dejarte hueso sano, y así acabar con tus bilingúiidades y falta de seso!

p. PITO.

- ¡PUNTOS LITERARIOS M. M.—Rineon.

Ya el Presidente se fué. Y aunque no se fuera, con esos versos no iba á conseguir nada. Ahora bien, si Vd. pretendía hacerle pasar un mal rato leyendo tanto disparate. puede mandarselos

á Washington.

W.—Peñuelas. ¡Un-desengaño! Por poca cosa se apura. Peor sería que se repitiera Vd. la escena de la Sebastián. Eso sería horrible.

calle

de

con San

PALESTINA.—Adjuntas.

“Ayudadme á morir, vivir no quiero si la ingrata desdeña mi querer.” Si señor: pónganle la vela y que se

vaya

á escribir

versos

al otro

mundo. Ayudadme á morir vivir noquiero si la ingrata desdeña mi querer;

que es la vida sin ella un sacrificio un eterno sufrir, eruel padecer.” Lo dicho: póngale la vela y recenle las letanías para que se muera cuanto antes. INSIPIDO.—San Juan. No son insipidos los versos.

Pero que trae Vd.

manera

de señalar

se

es nombre

de

RICARDO.—Ponce. Primeramente

gato. Y después,

ese

lo que Vd. escribe no

lo entiende nadie.

Vaya con el modernismo que Vd.

se gasta. GEDEON.—Ponce.

Mr. Teodoro Roosevelt, al regresar de la Isla de Cuba, después de la guerra.

Todo eso es de interés particular. Ya sabe Vd. lo demás. Se me olvidaba decirle que eso no es un soneto.

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