REVISTA PUERTORRIQUEÑA
la
SATIRICO-LITERARIA, POLITICO-INDEPENDIENTE. 2332
SUSORIPCION,
DIRECTOR:
. Año
ANTICIPADO.
VIII.
San Juan,
Puerto
PE
San
an
Rico
7 de Julio
de
+
Francisco
Teléfeno 299. Circulación
1907.
RX
A
AY
AY
toda
la
17.
$
MI AY
en isla.
Núm.
| XA
62.
Apartado 434.
Francisco X. Arache.
Entered December 1*, 1902, at San Juan, P. R. as second-class mattgr, under Act. of Congress of March, 3, 1879.
3
PAGO
ADMINISTRADOR
Joaquin E. Barreiro.
EN EL EXTRANJERO: Un semestre......... $3.
OFICINAS:
AMADA! AY
CY
ACC
CS
te te lo
De la intensa amargura de mi vida dí á probar, á mi pesar, la hiel, sentiste morir, y solo era que llevaste á los labios, una quimera de mi infinito dolor De mi dolor y de mi negra duda que es más honda que el mar;
que es más negra: que el dístico solemne del máximo poeta; que es imposible como el nirvana de la vida,
y desolada. como la llanura misma del olvido y la muerte LOPE
BELLO.
444
Julio 7 de 1907
EL CARNAVAI
_—A PLUMA
Y A PELO
No es de jugando la cosa, no. Al principio creí que se trataba de una guasa más ó menos japonesa y no le dí crédito por aquello de que no fueran los japoneses á cogerme como á un chino. Pero ya la cosa va pasando de
libertad á ochenta millones de ciudadanos no se arriará del sitio en
castaño oscuro.
Vivan!
Les aseguro á ustedes que anoche me acosté con un miedo atroz y tuve una pesadilla terrible. Soñé, que me habían hecho Gobernador de la isla y Capitán General. " " Juré el cargo por la mañana y á eso de las dos de la tarde se me presenta mi secretario particular, más pálido que una chinela y estrujando un papel entre los dedos, me dice temblando como azogado. —Mi Ge, ge general. ¿Qué te pasa muchacho ? —(Que—que—que nos declaró la guerra el Japón. —Caracoles, exclamé y me entró
Y por la Mansión Ejecutiva iban desfilando los más altos funciona-
una cosa así como especie
de
cani-
llera. En aquel
momento entraron
Jefes de Depacho y me mucho valor.
los
infundieron
Mi general, dijo el - Presidente del
que tan gallardamente ondea, mien-
tras quede un americano vivo. Vivan los Estados Unidos, mi General.
Y
un
vocerío
inmenso
rios de la administración,
repetía:
ofrecién-
dome su concurso decidido para repeler al enemigo. Llegaban telegramas de toda la isla. Y los alcaldes,
sobre todo los al-
caldes, me ofrecían incondicional apoyo. Pero, revienta una granada en el campo del Morro, y los más entusiastas y fervienmtes patriotas, tomaron las de villa diego, sopretexto de ir á ocupar sus puestos. Y no los he vuelto á ver hasta el domingo siguiente. Ya había pasado la guerra con grave descalabro para las armas nacionales. Y los. más americanizados aparecían con su meehoncito de pelo amarrado y hablándome en japonés.
Consejo. No hay que apurarse por medios días habiendo días enteros. —No vendrán; pero si llegaran á venir esos caras de ratones pelados, tendrán que pasar por encima de nuestros cadáveres. La gloriosa bandera que flamea en nuestras
—¿Pero ustedes no ...? —Que quiere usted, mi General. Si nos hubieran dado la ciudadanía ó el gobierno propio, ó la inde-
fortalezas, la que cubrió de gloria
Y como estos japoneses son tan espléndidos... Usted no sabe cuánto lo sentimos. ¡Pero que sueño! RUIZ ROGER.
á los soldados de la Unión, la que-
dió libertad'á noventa
millones de
ciudadanos. —Ochenta, señor Presidente, —Es igual, mi General, la que dió
pendencia.
Pero como ustedes no nos daban nada.
EL CARNAVAL
Julio
Descanse
en
7 de
1907
445
Po az
La prensa cubana nos trae una triste noticia. Doña Leonor Perez viuda de Marti, ha rendido en la vecina Republica la jornada de la vida. Era la madre de José Marti, del martir de “Dos
Rios” del yerbo
revolucionario que dió calor y vida á la insurrección cubana para constituir, independiente de España, una nueva nacionalidad, lejos, muy lejos de pensar la suerte que esperaba á la simpática República Jorque si algo hay simpático en el concierto de los pueblos libres, es, A República de Cuba sin la traba infame de la enmienda Plat. La madre del apóstol, ha rendido por fin la jornada
de la vida,
después de recorrer cual otra Dolorosa, la calle de la amargura que empezó con la prisión del altivo estudiante de Derecho, prolongándose más allá de la hecatombe de “Dos Rios” donde una de las más . grandes glorias de America, consagró su vida en aras de la patria. Muere la madre de Martí bajo la bandera cubana que aún ondea, y Dios quiera que ondee siempre, en el Morro y la “Cabaña.” Muere la ilustre dama en la tarde brumosa del 19 de Junio y su espiritu vá á traves del espacio inmenso á confundirse con el del hijo amado y á de cirle como dirigen los cubanos los Destinos de la patria.
Descanse enpaz la gran patriota.
$51.200
No fueron
La friolera de mil dos cientos pe-
sos ganará el asquerosamente célebre Mr. Duprey en la ejecución de .los sentenciados á la pena capital. Y además
se hará
acreedor
á la
estimación (palabras testuales) de los representantes de la ley. Mil dos cientos pesos, sin contar
los que vendrán después !
Se ha encariñado tanto con la profesión, el distinguido funcionario, que sería capaz de matar á.todos los confinados con una rebaja de un cincuenta por ciento:.: Y de ñapa á los Jefes. Pero no creo que los Jefes aceptarán ese honor. Y ahora que están arriba, menos. ***
.
Y que aficionado que sulió el jibarito de Ceiba-alta. E. á Y dicen que los jíbaros son tímiOS.
La gran sorpresa del cuatro de Julio era la Guardia Nacional. Todos esperábamos eso—Todos estábamos pendientes de los delenres de la patria.
;
Pero la Guardia Nacional no fué. Todo lo tenían preparado para la gran parada; pero á última hora parece que se recibió un cable de Washington, diciendo que las co-
sas con el Japón seestaban poniendo serias y desistieron de la gran parada. No es cosa de meterse en fiesta cuando la patria está en peligro.
Por eso no fueron. Pero no se crean: ya estaban ves-
tidos.
Junio
446 . ¡EL CARNAVAL
MAURA
—¿ Crees que esta leche le hará —Si es española no se la dés. Tenemos muy mala leche.
daño
La sociedad de los Siervos-yo no recuerdo ahora el verdadero nombre—tampoco asistió á la gran Y fueron los que dieron más
de 1907
Y. ALFONSO
¿Y ESO?
parada.
7
real.
al niño?
ce el año pasado á la manifestación. Esa es una institución puramen-
te americana
y nos sorprende ex-
traordinariamente que no haya concurrido á la fiesta del cuatro de Julio. ¿Qué pasa?
+
Julio 7 de 1907.
t
LA
EL CarNAvar
447
PRESEA
SN la penumbra triste de aquella tarde de invierno,
los dos amantes charlaban en voz queda como dos pájaros que se arrullaran en un nido impregnado de embriagadores perfumes. Ella, con la cabeza reclinada en el hombro del amado,
le
contaba
su
historia;
historia
breve,
llena
de
ac-
cidentes vulgares; sin otra novedad que su caída dolorosa y triste en brazos de un desconocido, que apagó su hambre, de un día dejando caer sobre su regazo ya impuro, unas cuancas monedas, marchándose para siempre. —Cuéntame, cuéntame eso, angel mío, replicó el amante. ¿Cómo fué tu caída?
—Ya lo has oído. Tenía hambre, mi madre se moría y mis hermanitos tiritaban de frío. Salí á la calle, y siendo. virgen me ofrecí como mujer. El desconocido me: llevó. consigo y dejé mi inocencia en el lecho frío de la infamia á cambio de unos cuantos centavos. —¿Y no recuerdas ningún incidente de esá noche triste? Quedó
pensativa
—Sí,
si tengo
—Y.
ágil,
un
un
momento
recuerdo
vivaracha,
y
luego
dijo
con
viveza.
de esa noche....
dándole
un
beso
apasionado
al
amado, se fué en busca de lo que ella llamaba presa de su vida hetaira. Volvió poco después y puso ante los ojos del . joven una moneda antigua que el desconocido le 'había.
dado
equivocadamente
junto con
minuto de amor. —Cielos ¡mi moneda!
frente á su amada, lla moneda
antigua,
exclamó
alborozado tan
las otras él;
al pagarle aquel
y jubiloso
besó
por haber encontrado
estimada
en
'aque-
y querida. LORENZO
: la
DESPRADEL.
448
EL
CARNAVAL
PLENA
GUERRA
IA COSA
IATA
A óS
0 A
EN
Julio 7 de 1907
A la guerra me voy
A
AI
te lo vengo á decir, ya tengo el uniforme
A
y me voy á vestir.
Si muero cuéntaselo y disle que porque no
Adiós, padre, que me voy
á luchar con el Japón. ¿Te vas á callar? muñeco,
de
E
6 te doy un bofetón.
en algún"combatel á mi querer, : me han matado pude correr.
—Soldadote nacional * atiende á la que te adora. —Estoy leyendo los cables. Perdóneme usted, señora.
J ulio 7 ¿de 1907
,
. Ya el acorazado “Olimpia” asoma en los horizontes. ¿cuando hará los uniformes ese don Rosendo Montes?
Don Fano, si va por casa, Dígale á la: madre mía Que se acuerde del sombrero Que está en la sombrerería.
Bellísima trigueña, Imágen del candor,
Soldados á las armas Sin miedo ni temor.
Dos arrogantes figuras . — Que por su garbo y su sal Merecen ser oficiales De la Guardia Nacional,
449
450
Julio 7 de 1907
EL UARNAVAL
Lo de los maestros Ante todo confieso que soy repu-
citemos
á los profesores nombra-
dos, entre los cuales tenemos gos estimadísimos.
ami-
blicano disciplinado.
Pero como los republicanos pensamos con nuestra cabeza, sin que nadie nos escomulgue, como les pasó á los unionistas de Utuado; que, dicho sea entre paréntesis, están bien escomulgados, confesamos
DIALOGANDO Á
o
honradamente que no encontramos
bien lo hecho por la Junta local de San Juan. Demasiado sabemos que todos los profesores hombrados son 'excelentes personas, todos competentes y en extremo amables; pero desde el punto de vista político, el paso dado por la Junta escolar de San Juan, nos parece contraproducente. Si los republicanos estuviéramos
<4m.
YY
in
en mayoría en la isla, en buena hora
que tomáramos esa actitud; pero habiendo sido derrotados en toda la línea, no estamos en condiciones
de fungir de cajas. Y además ¿qué tienen que ver las profesoras con la política ? Sobre este asunto nosotros tene-
mos un criterio particularísimo: cremos que 'los intereses de la enseñanza están por encima de los intereses de la política. La señora Rosselló, que acabamos de dejar cesante los republicanos sin tener en cuenta sus excelentes notas, ha hecho más bien á San Juan, educando como ella sabe ha-
cerlo á la generación que sube, que todos los republicanos juntos: Y
lo
que decimos de la señora Rosse-
116, lo decimos de la señoritas Trias, Infante, Mascaró y Ortiz €. Por ese camino no vamos á ninguna parte. ¿Que los unionistas hacen lo mismo, que dejan cesantes á profesores, tan competentes como las señoritas Rubio Taberna, Aponte £a?
Eswerdad.
Pero nosotros no de-
bemos imitar lo malo.
—¿Y cree usted, que eso de la guerra con el Japón será un hecho? —Las
cosas,
verdaderamente, se
están poniendo serias. Y si losjaponeses siguen apechando ... —¿Qué pasará?
—No sé lo que pasará. Pero pueden pasar muchas cosas. Todo, menos lo que pasó con España. —Es decir que .. .—Que nuestra escuadra sale para el pacífico. Pero-como los japoneses no lo son; impedirán la llegada de los grandesacorazados. Después nos caerán encima y vamos á estar llevando chucho hasta que se cansen. —¿Entonces nuestro poderío naval, nuestro gran ejército, nuestros millones, nuestra....?
—Ríase usted de todo madeja se enreda,
eso, si la
—¿Pero usted cree que se enrede ? el criterio de que las —Hombre.... ¿y por qué tanto enseñanza deben seinterés ? completo de la polí—Ay amigo mio, ¿no ve Ud. que * " esto no se haga esta- . pertenezco á la Guardia Nacional ? —¡Entonces quizás no haya remos mal, muy mal. Lo dicho no obsta para que feli- guerra!
Sostenemo cuestiones de - pararse por tica. Y mientras
Tu lio Junio 7 de 1907
EL CARNAVAL
LOS NUEVOS
Sin duda alguna, con estos fuerte, sana, vigorosa ..... Vista hace fé.
juegos
457
METODOS
atleticos
se llegará
4 formar
una
raza
EL CARNAVAL
Julio 7 de 1907
f
an
Is
CUENTO
EL
e
MÚSICO
(Este
Era tímido
como
prontos
cnento, tan
todos
siempre
hermoso
los hijos á.
eo-
del
chuparse
el
dedo y rascarse la cabeza cuando un extraño les dirige la palabra. Nadie se
ocupaba
en
verlo
crecer,
y menos
en
pensar que algán día pudiera ser útil 4 su madre. negado como era para el trabajo.
Sin saber cómo ni por qné, sólo la música le cautivaba. La endemoniada le seguía á todas partes y desde muy chiquito. Mil veces, al llevar las vacas al prado, tomaba su cesta pará recoger
hierbas, y mil veces : casa vacía. —Madre, madre,
la cesta
llegaba
á
¡qué cosas cantaban
en la selva! El niño
venía
entusiasmado;
madre le decía:
pero
;
la
;
—¡Yo te daré qué cantar, descuida! Y le daba másica con un zurriago. Lloraba el chiquilio, gritaba y prometía no volverlo 4 hacer. Pero, á pesar de todo, á pesar de los golpes que le encendían la piel, pensaba en aquella maravillosa música de la selva. Los pinos, las - hayas, los olmos, los mirlos, las
oropéndolas, cantaba.
el bosque entero, tocaba,
¡Y qué maravilla de música!
+. ¡La última mata de romero producía su canción; los/ gorriones que piaban en la zarza
nían una
ju
á
la
cabaña
melodía especial:
noche, los mil ruidos
del
¡Y, por
campo,
la
en
el
él el
viento mismo se placía en silvar 6 gril-
SL
quede
noche
corría
aque-
llos campos y la.aldea, contando las estrellas del cielo para no dormirse Ó entreteniéndose en hablar con los pájaros, había ¡cuántas veces! visto la camisilla blanca de Yanko, que se acercaba furtivamente á la posada. Pero Yanko no entraba, agazapábase junto á las jóvenes que bailaban el obertass. De cuando en cuando se dejaba oir la voz de un chiquillo, que gritaba: “¡Ou-ha!”” En tanto que las botas pateaban sordamente el suelo desigual y resonaban las voces argentinas de las muchachas, el violín, vibrando dulcemente, ““Comeremos, beberemos y estaremos alegres”, decía, y el bajo, con su voz grave, resonaba también: “Comeremos, beberemos y estaremos alegres.” Las ventanas brillaban
iluminadas,
las
puertas
tem-
blaban, gemían, cantaban también. Yanko escucha. ¡Qué no hubiera €l dado por un violín que tenía una voz tan delicada y tan alegre! Y acabó por construirse uno con ramas y crín de caballo. Pero su violín no tenía lós. fuertes sones del violín del: mesón: vibraba dulcemente, débil como el zambido de moscas Ó moscardones. No por eso dejaba él de arañarlo todo. el santo día, á costa de mil reprimendas y pescozones maternales. Su aspecto era el de una manzana verde. Pero tal era su naturaleza: cada vez más flaco, su vientre se abultaba mas y más, la pelambre siempre revuelta, indisciplinada, sus ojos siempre
grandes llenos de lágrimas, las mejillas
te-
sueño de la tierra, componían para un concierto misterioso! Si lo enviaban 4 aventar el trigo, ñir en los hielos.
WMA
El guarda,
mo célebre, consagró la fama naciente del futuro autor de Quo VADIS.)
campo,
A
DELASEMANA
AS
YANKO
il
«
hundidas que daba pena verlas. ¡Pobre Yanko! Su deseo de tener un violín, su honrado deseo, qué caro llegó á salirle. :
El lacayo del propietario,
antiguo se-
for de la comarca, poseía un violín que tocaba algunas tardes en el patio para
divertir á las señoras
criadas.
se deslizaba entre las matas
Yanko
hasta co-
EL CARNAVAL
Julio 7 de 1907
DELIA A a altruista y distinguida dama Cecilia Domiíngez de Bruno. La felicidades un objeto que se compra con la moneda del sutrimiento y el dolor,
Era una de esas tardes fria y nebulosos del mes de enero, Un viento monótono y. glacial, hacía crujir en los jardines las ramas de los árboles, y una lluvia menuda . azotaba los empañados cristales de las ventanas, y los rostros de los transeuntes.....* Delia se aproximó con paso vacilente, al portal de una easa de rica apariencia. Trémula de frío, sobrecogida y tímida, se detuvo en el dintel de aquella gran :puertá que ostentaba en el frontis. un escudo de armas, descifrable
tan
so-
lo para los versados en heráldica. Delia era una joven desgraciada,
que, víctima de la seducción de un
malvado, quedó abandonada con un niño de corta edad. Vivía en un
451
se muere de hambre!—¡A buena hora !—exclamó la criada:—cuando ya la señora va á dirijirse á la capilla, para rezar sus acostumbradas oraciones !—Pues déjeme Ud. entrar que quiero hablar con ella misma Está
bien,
pase Ud.,
aunque
*
me
parece que será inútil, porque ella no va á perder su devoción por hacer limosnas—Probaremos,—dijo Delia;—y avanzando hácia la puerta principal del salón, penetró en este, á tiempo
que
la aristocrática
dama se disponía á salir con diree-
ción á un oratorio.—Qué
se le ocu-
rre á Ud. buena mujer ?—preguntó la vanidosa señora, con tono desdeñoso y altanero. Pues, se me ocurre señora, que tengo un hijo pequeño, un pedazo de mi corazón, que agoniza de hambre y de frío.y vengo á implorar la caridad; deme Ud. cualquier cosa para llevarle, que Dios se lo recompensará. — Pero, —¿cómo?—
exclamó la dama soltando una carcajada—¿cómo una mujer joven, suburbios de la ciudad, luchando cual Ud., sale á pedir por las calles con el hambre y la desnudez, vienen vez de ganar con su trabajo lo do á su hijo próximo á sueumbir que necesita para vivir ?—Darle á minado por la anemia. Ud. limosna, sería pretejer la vaAquel día, dejando su pequeño al gancia, fomentar el vicio y eso escuidado de una vecina, se resolvió + toy yo muy lejos de hacerlo; vaya, á efectuar una salida para implovaya Ud. con Dios y| mañana porar la caridad pública, pues nada drá ganar lo que necesita para que tenía que darle á aquella infeliz su hijo no muera de hambre! criatura que lloraba de hambre. Delia, la pobre Delia, nada repliDelia recorrió, casi maquinalcó; amargas lágrimas rodaron por mente, una parte de la ciudad, sin sus pálidas mejillas, y con su vista atreverse á pedir á nadie, por teinclinada al suelo sin atréverse:á mor á no ser socorrida. Al ver la fijarla en el lozano rostro de aquerica mansión, tuvo la idea de enlla mujer inhumana, se dirijió al trar. vestíbulo y salió con paso torpe de Por fin se resuelve, y tira del coraquel soberbio edificio, llena de dodón de la campanilla. Esta vibró lor, de vergiienza y desesperación. por algunos segundos, perdiéndose El consejo de aquella burguesa, su eco argentino en el rico artesoholgaba por completo. nado del espacioso vestíbulo. A Delia había buscado trabajo, inpoco apareció una criada de rostro fructuosamente, por toda la ciuavinagrado y modales ásperos, dad y sus cercanías, y, desconsoquien dirigiéndola una mirada imlada, sin esperanzas, volvía á su pertinente y burlona, la preguntó, pocilga. sin llevarnada para'aquella poniendo la mano sobre el dorado tierna criatura que dormitaba entre picaporte.—¿Qué se la ofrece á Ud., los harapos que constituían su mi.señora ?—Vengo,—dijo aquella desventurada—á pedir en nombre del serable albergue. De pronto sintió que sus fuerzas cielo; algo para darle á mi hijo que miserable sotabanco,
en uno de los
452
Julio
EL CARNAVAL.
la abandonaban y vacilando sobre sus piernas, en extremo débiles, hubiera caido á no ser por la proximidad de un póste que la sirvió de apoyo. Un elegante carruaje, que venía en aquella misma dirección, hizo alto á corta distancia. Parece que aquella mujer próxima á desmayarse, había llamado -la ' atención de dos personas que iban en el interior de la berlina.—Edmundo, bajemos á socorrerla—dijo asomando la cabeza por la portezuela, una encantadora joven, gentil y graciosa como un angel:—Si,—bajemos—contestó un hombre desde el fondo del carruaje.—Tu sabes que no tengo más voluntad pue la tua.—Y uniendo la acción á la palara, puso el pié en el estribo, presentando su mano vigorosa á su angelical compañera. Ambos ya en tierra,
se dirijieron asidos
zo hácia la desventurada
del bra-
Delia....
7 de
1907
que sienten presto los suaves impulsos Me la Caridad ! AGUSTINA GUFFAIN
VDA.
DE
DOITTAN.
Las Vírgenes de las Rocas Deliciosa, deliciosísima lectura la de esas páginas impregnadas de místico perfume, de gracia doliente i suave, evocatriz de.un sueño ignoto en el país de la Quimera. A la hora en que el Tedio canta solemne de profundis á las muertas alegrías en la quietud augusta del silencia, yo he leido este libro. I el Sueño, enemigo de la Realidad, cortó el hilo corpóreo que une las cosas tangibles con las co-
sas incorpóreae, sumida entonces el alma en esas vaguedades que se acrecen henchidas de voluptuosidad intensa. ¡Cuánto he amado
¡Cuántolo amo,
á D'Anunzio!
como Veinte minutos después, la elepropias las delicadezas de su espígante berlina se detenía frente á un . ritu, admirando las concepciones mísero cuarto de una calle desierta. de su jenio poderoso! —Bajad,—señora,—dijo la bella Fuerza i Belleza. He aquí resudesconocida con un metal de voz mido el ideal del que dice : dulce y cadencioso.—Tomad esta “El mundo, como aparece hoi, es manta para que envolváis á vuesun don magnífico de los pocos á los tro hijo, id por él; el cochero os muchos, de los libres 4 los esclavos, ayudará. Iréis á nuestra casa; allí de los que piensan i sienten a aquenada os faltará, y terminarán llos que deben trabajar. vuestros sufrimientos!—Gracias, “* He reconocido como la más alacias—murmuró Delia asombratas de mis ambiciones, el deseo de a de tanta bondad y del favor aportar cualquier ornamento, de inesperado con queera tratada.— ¿Cómo yo Os podré pagar, señora ? añadir algún valor nuevo á este humano mundo que eternamente —Ya me habéis pagado; mi mayor se acrece en belleza i en dolor.” recompensa es la satisfacción de haber hecho una buena obra. I hecha realidad el ansia noble, Delia regresó al coche conduciencincela mármoles ijemmas; ¡en las do, con ayuda del auriga, á su pefinísimas paredes de un ánfora griequeñuelo que permanecía sumido ga aprisiona la esencia del verso, en ese sueño letárgico de los que peregrina flor cultivada en los jarse duermen con hambre. dines del artista divino. Símbolo de aspiraciones excelsas, Ella había contado en breves pade una vida urdida en las sombras labras á aquella feliz pareja, una del misterio i reproducida en una parte de su historia, conmoviendo visión tríplice i única, tal la hermosus nobles corazones, y encontró una protección tan valiosa como sa creación de esas tres vírjenes pálidas, solitarias en el “gran clausinesperada; justa recompensa de su virtud y de sus acerbos dolores.
¡ Benditas sean las almas blancas
sintiendo
tro florido de junquillos i violetas, en la árida cumbre de las rocas,
EL CARNAVAL
Julio 7 de 1907 4583
agurdando ansiosas á Aquel que debía venir.” Tras la cancela del jardín cerrado, Massimilia, Violante y Anatolia encarnan una sublime
trinidad ;
el ideal perfecto del Artista en gloriosa ascención á lo Infinito...! ***
Ah! En el silencio de las horas muertas yo os conocí, beatrices increadas, bellas cual ninguna en la apoteosis del Amor y del Deseo. Yo os conocí. 1 vuestras palabras,
vuestras
acciones,
vuestros
jestos, gratos fueron á mi alma. Entonces ví, como el árbol de la Vida, exangiie
i mustio, tornábase
rico de joven savia, de vistosas i fragantes flores. I tomar el Ideal formas ignoradas, haciendo nacer jérmenes de nueva vida, pródigos en futuros bienes. " I en las interioridades del espíritu, un dístico
famoso
infundir
un
sentimiento innoto, el deseo de la alegría i la felicidad. $
¡Salud,
oh
tú,
*
+
altísimo
Poeta!
Por el verbo elocuente de tus rimas,
or la aristocracia de tu jesto, por a jerarquía de tu estirpe impériosa i altiva, loado seas.
Ahora i por siempre.
MERCEDES
MOTA.
No tiene abuela Ya saben ustedes el concepto que nos merece el ex-comisionado de Educación. Pero nunca creímos que su respetable calva llegara hasta el colmo. Porque el colmo de la calvicie— por no decir el colmo de otra cosa —es echárselas de en sentante de Puerto Rico 'en la puelvión de Jamestown, sin nadie haberle dado esa representación. Yo comprendo que es la influencia del medio. Acostumbrados los Jefes de Departamento á hacer lo que les da la gana, habrá creido el
Sr. D. Rolando,
ral del mundo
la cosa más
natu-
investirse de esa re-
presentación.
Y al sentirse investido, le embistió al primer reporter americano que le salió al paso, pensando que la cosa no pasaría de allí. Pero los reporters son el diablo en todas partes. Y lo que dijo Mr. Falkner lo llevaron al periódico y el periódico vino á Puerto Rico y aquí se descubrió el pastel. astel muy mal liado, por cierto. Representante de Puerto Rico en la Exposición, ¡adios! Y acuérdate de que Washington fué grande, 'por no haber mentido nunca, según dicen ustedes.
No está bien Encontramos todos
los
muy
ciudadanos,
natural sean
que Ó no
sean americanos, tomen parte en la fiesta del 4 de Julio.
Y en todas las fiestas naciunales. Nos parece bien hasta que los niños de Beneficencia concurran á esos espectáculos, con sus fusiles de palo, como cualquier Guardia Nacional.
Pero lo que no encontramos bien, lo que nos parece censurable,es que á las niñas de la escuela de caridad se les obligue á esas marchas y contramarchas, sufriendo los rigores
de la estación, con notorio perjuicio de su salud. Eso es no tener caridad con esas infelices criaturas,
que no han
co-
metido otro delito que ser pobres, ¡muy pobres ! +
*
+
Luego mueren los niños asilados y los doctores se alarman preguntando: ¿qué les pasa á estos muchachos ? ¿qué epidemia será esta ? Y no es epidemia, señores: es el sol y el agua que aguantan los pobrecitos en las procesiones cívicas. Ya que no con los niños, tengan siquiera compasión con las niñas! on las pobres niñas huérfanas.
10
y
Ss o
o
rel
0.
9
a
ME)
A >
<
a “SOIOQBSUIS QIBOD9L Á
“sozolour sodurorj ue opuesued “e £eusop Ou “LOPeqon] ue.LS p
SÑ
u9Iq dp B[[ruuos QIQUIS
S
-UQAJULD OZUIPLW
PE
e
? N
NS
,
ISSO
NT IE LA e na
Z
S
e —
Julio 7 de 1907 EL CARNAVAL 454
x
4
456
EL
Julio 7 de 1907
CARNAVAL
SS El, CUATRO DE JULIO 4— ¿No una
02 recuerdas,
tarde
Enterraron
en Boston
á mi hermano infeliz.
que murió en tierra extraña
Si yo fuera Mr. Lord, á estas ho-
Licí?
de sol...
Era de Octubre
¡pero
esa
muy
negra!”
tarde
Cuando recuerdo
¡extraña siempre
para los nobles hijos de este suelo! las lagrimas asoman á mis ojos, y la tristeza me
tortura,
y siento
que sube con el llanto á mis pupilas todo el rencor que atesoré en el pecho. A
¡Mipobre Julio! Amaba á su Borinquen como
saben
amar
- Lo que haríayó
los hijos buenos;
no como los traidores, que la patria colocan bajo el pié del extranjero.
ras ya habría renunciado el cargo
de asistant comisioner of Education
Yo no soportaba ese desaire. Porque han de saber ustedes que hace mucho tiempo que Mr. Lord le tira al puesto de Comisionado. Y después de tanta lucha, pospo-
nerlo, es cosa de enguabinar á cual-
quiera. Pero estos gran cachaza. Y les hacen Y les hacen Y se quedan
*
**e
¡El pobre niño!
Del terruño hermoso
con el “cuatro” evocaba los recuerdos. Y del “cuatro” de Julio, muchas veces brotó un himno
magnífico y sereno,
para cantar de Washinton la gloria, para cantar la gloria de un gran pueblo ¿que fué grande
hasta
ayer.
¡Aguila
altiva,
pronto caerás en el abismo horrendo! *
.*
Yaenel lecho de muerte, deestemodo
me escribió el infeliz: “mí “cuatro” lego á quien sepa encontrar entre sus cuerdas la que hace despertar el sentimiento, la que, enérgica y grave, cante altiva la colosal parts de aquel genio
que hizo libres á míseros colonos
en el nombre sublime del Derecho.” * *
Cruzó el “*cuatro * de Julio el mar Atlante
y en un altar secillo lo conservo. ¡Trovadores, venid! Que vuestras manos hagan vibrarsuscuerdas. Quesu acento evoque las escenas de otros días, dulces pasadas en el lar riqueño, y la epopeya que sirvió de base á la vida política de un pueblo. CA
Y ¿no venís?
queyael
Sinduda os hancontado
“cuatro” de Julio está deshécho,
y que sus cuerdas, rotas, enmohecidas, no vuelven á lanzar dulces acentos, desde que hubo traidores que la patria ataron á los piés del extranjero, desde que un pueblo grande ya no es grande
y varodando hácia el abismo horrendo. JOSÉ
MERCADO. (MOMO)
tienen
la
una cosa de estas. otras cosas peores, tan frescos.
¡Qué
Y en Boston, en sus noches de nostalgia,
solía tocar el “cuatro,” ese instrumento que gime y canta, que solloza y rie en el tranquilo' hogar puertorriqueño.
amercanos
horror!
Dice un estimado colega local. “Ha sido condenada hoy á pagar $5 de multa, la individua Ricarda Franco, porque el sábado por
la noche
vendieron
á un
niña
llamada María Anglada.” ¡Cinco pesos por vender á una niña! Y por vender á una vieja ¿qué multa impondría el señor Juez ? Aunque hay viejas que se le puede pagar al que se las lleve. ¡Y ni pagando!
¿Y el nombre? Se habló mucho en estos días de que don Rolando Falkner iba á encargarse de la dirección de un periódico.—¡una gran revista ame.ricana!
Porque
todo
Estados Unidos.
es
grande
en
los
Pero nadie ha dicho el nombre de esa revista. Y como nosotros creemos que don Rolando, por su ilustración no tiene condiciones para dirigir un listín mercantil, sostenemos que el super-hombre que dió la coba á los maestros nativos una buena temporada, irá á limpiarse las uñas, que las debe llevar sucias, en el seno del hogar; Ó á sembrar batatas que es para lo único que serve. ¡ Dirigir una revista ! ¡ Pues no es nada !
,
EL
Julio 7 de 1907: 459
CARNAVAL
locarse bajo las ventanas
Una voz dura, soñolienta, sale del rin-
abiertas de la
cón de la cocina y grita encolerizada. —¿Quién anda ahí?
cocina, desde donde podía contemplar á gusto pared alma
el famoso violín colgado en la enfrente de la puerta. Toda el del rapazuelo se le iba por los
ojos,
tocar
no
hubiera
osado
Yanko
Y, sinembargo,
Un
*
en torno
al niño,
dradas ción!
para
repetía con
mayor tono de seguridad:
“No hay na-
die; vé, Yanko.””
de nuevo
resplande-
cienre.
el niño
y se adelantó
habi-
toda
la casa,
con
¡qué
atolonrevolu-
**
se encuentra de alcalde, que ha-
bían de juzgar al infantil malhechor. Ambos miraron al chicuelo, que, todo asustado,
el sucio
dedo
en la buca,
no
sabía lo que podían quererle ni por qué lo habían llevado ante aquellos señores . . ¿Cómo juzgar á semejante mocoso, que no alcanza diez años y apenas puede tenerse en pié? ¿Mandarlo á la cárcel?...¡Vaya! Preciso es un poco de compasión para los niños. ¡Que le coja
el guarda y le aplique que no se le ocurra y se acabó! ¡Se acabÚ!
el
vergajo
para
ir de nuevo á robar,
Llamaron á Stacha, el guarda rural.
decirle:
se fué volando y el ruiseñor
Levantóse
por
Al otro día, Yanko pié frente aljuez y al
*
como
La
¡Dios mío!
"perros ladran, las luces corren
“No, Yanko, no vayas,” y prevenirlo contra la seducción. Pero la calandria
El violín brillaba
rasca la pared.
Se oyen juramentos, golpes, sollozos de un niño, un grito, ¡Ay, Dios mío! Los
lo codicia-
Una noche de luna clarísima no había nadie en la cocina, Mucho tiempo hacía viajaban los amos por el extranjero; la casa estaba desierta y el lacayo se entretenía con la señora camarera en la parte opuesta del edificio. Yanko, oculto entre las ramas, contemplaba por la puerta, abierta de par en par, el objeto de sus mayores ansias. Sí, una clara y serena noche. En el jardín, cerca del estanque, el ruiseñor multiplicaba sus trinos, y ya lánguido, ya persuasivo, le repetía: “Anda, anda, vé.” -Una honrada calandria revoloteaba
fósforo
tación se ilumina toda luego.
ba; hubiera querido tenerlo un instante en sus manos, mirarlo de cerca. El corazoncillo del niño saltaba al solo pensamiento de tal dicha. e
pero la yoz
—¿Quién anda ahí?
nunca,
porque para él aquello'era una reliquia tan santa como las de la iglesia, algo inaceesible.
retiene el aliento;
repite con insistencia:
—Llévatelo y dale para quese acuerde, Stacha meneó su cabeza;¡estúpida y salvaje, cogió 4 Yanko bajo el brazo y se lo llevó á la granja. =>” El niño no comprondió lo que era aquello, Ó tal vez se llenó de espanto. El caso es que no dijo una palabra; miró no más á Stacha como una tórtola
precaución, mientras el ruiseñor insistía
herida.
en sus dos notas ciaras, sonoras: *“Vé, Yanko, vé.” La camisucha se acercó másá la puer-
Cuando el guarda lo hubo tierra,
¿Sabía lo que leiban quitándole
á hacer?
tendido
la camisilla y
por resta-
los negros rama-
llándole el vergajo en sus oidos. fué cuando Yanko gritó: *¡Mamá, mamá!”
jes. El pecho del niño se dilataba en el umbral, su respiración era fatigosa,
guarda caía sobre su pobre, cuerpecillo,
ta.
Ya no la tapaban
precipitada.
Un momento más y la ca-,
misucha blanca va 4 desaparecer toda en la cocina; ya no queda en el umbral iluminado
sino una
piernecilla desnuda,
temblorosa ... la camisa ha desaparecida. En vano revoloteas aún, calandria, y repites: “No, no.” Yanko está ya en la cocina. Un ligero sonido vibra quejumbroso y' dulce en la. obscuridad, como si al-
guien
hubiera
rozado
violín, y de pronto qe
las cuerdas
Y cada vez que el palo del despiadado gritaba; “¡Mamá!” Pero ya más dulce, más débilmente; tanto que yo no sé á cuál de los golpes el niño se calló y no volvió á llamar á su madre. ¡Pobre violín roto! á
del4%
¡Bárbaro, infame Stacha, ga á los niños!
que así pe-
¡Y éste, que era tan débil, tan chiquito! Apenas le quedaba. vida!
Llególa madre, recogió al pequeñoy tuvo que llevárselo á casa.
.
460... Er CARNAVAL
Julio 7 de 1907
Al otro día, Yanko no se levantó. tercero' agonizaba tranquilamente bre un jergón. |
Venía la noche;
vol-
—¿ Qué, hijo mío ?—preguntó la buena mujer, sofocada por el llanto. —¿ Verdad, madre, que Dios me dará un violín en el cielo? —¡Sí, hijo mío, sí ! Paz á Yanko. ENRIQUE SIENKIEWICZ.
Sones
de
flauta
muchachas
partían
de la; orilla
. El rústico violín de Yanko
yacía á los piésde la cama,
DE MIS RECORTES
Y bastaba para comprenderlo así verle entonces delante de su
EL MODELO
cuadro,
¡ Qué hermosa mujer !—decía Luis —¡ Mira qué talle, qué redondez de curvas, qué...! Volvería loco á un santo de piedra, porque enloquecer á santos de carne y hueso—si hubiese alguno—no me ha parecido,
|
| y] |
La cara del niño se iluminó súbitamente y sus labios blancos murmuraron: —¡Madrecita!.
vían del campo con sus haces de heno y cantaban, cantaban la canción de los campos: “Ay, sobre el verde trigo.” del arroyo.
las
Al so-
ni ahora,
ni antes, ni nunca,
calle
Carretas,
tarea
muy difícil para mujeres de esta clase. Tales palabras eran pronunciadas por mi amigo casi al oido de la protagonista, una criatura de diez y nueve años, morena como la virgen de una leyenda árabe posbelta como una estátua griega. Deliciosa imágen que aún veo desaparecer por un angostísimo portal de la de
mientras
murmuraba por lo bajo:
Luis
—Esta mujer acabará por, asesi-
narme. Hace un mes que la sigo, la enamoro, la asedio y... nada. Ni siquiera se toma el trabajo de contestarme.
Tratado superficialmente, como se trata á la generalidad de los hombres y como por desgracia se juzga á los hombres también, Luis es un calavera, un perdido, según llaman á cuantos tienen la franqueza de sus faltas los que la cometen á oscuras y tapándose la cara con el pañuelo;
pero en justicia, es mi
amigo un muchacho vehemente, entusiasta, con mucha sangre en
que él titulaba
Carne
de
son tipos gastados,
in-
venta. Allí pasaba una hora y otra buscando actitudes, gesto y expresión para las abocetadas figuras de su obra, á las que pretendía dar vida con los.colores esparcidos sobre su paleta y con las ideas amontonadas en su cerebro. Lucha contínua, incesante, penosa, al término de la cual salía de su estudio risueño unas veces, desesperado las más de ellas. —Figúrate—me decía aquella misma tarde y á poco tiempo de abandonar á la mujeranteriormente descrita—figúrate que cuando llego al término de mi obra, tropiezo con un obstáculo invencible: -la figura principal del cuadro, la esclava árabe. No hallo modelo á propósito; todos los que vienen á mi estudio
servibles. Yo necesito algo nuevo, una carne que, al verse desnuda, sienta los pudores de la desnudez, Pero un pudor verdadero. El pudor fingido es como la luzartificial, uniforme y opaco. Nuestro diálogo fué interrumpido por
otro
pintor,
las venas y muchas energías en el
jeto de mantener
A
una
subordina todos, abmte todos sus deseos, á ; ¡ola ambición: la gloria. Ser un pintor célebre, he aquí el objeto eal y exclusivo de su existencia.
el cual, una
vez
enterado de las pretensiones de Luis, le dijo: -—Tengo lo que buscas; una muchacha verdaderamente honrada que sirve de modelo á escaso número de pintores con el exclusivo obcolección
á su madre y á
de hermanitos,
á los
cuales te recomiendo por si te ocurre
de
no
pintar algún día la Degollación
los inocentes.
admite
Esa
muchacha
requiebros, ni proposi$
Julio 7 de 1907 461.
EL CARNAVAL
ciones, ni nada. Es una hermosa estátua que representa su papel y cobra cinco pesetas por hora. Si te conviene en estas condiciones, melo, te la mandaré.
dí-
—¡No ha de convenirme !—exclamó Luis, despidiéndose de su amigo.—Mándamela mañanatemprano. Y añadió cuando estuvimos solos: —De ser cierto lo que ha dicho Juan, mi triunto en la Exposición es seguro. Daré vida á esa imagen si lo permite, entre otra que juega al escondite por los rincones de mi pensamiente;
la
de
la
acabamos de abandonar.
mujer
que
kx %
A la mañana siguiente estaba yo en casa de Luis. Tenía deseos de conocer
á-la
nueva
modelo,
avis
rara en los anales secretos de la pintura. Luis, delante de su cuadro, contemplaba la figura principal del mismo;
una
mancha
pálida,
bos-
quejo embrionario quegestaba trabajosamente en la imaginación del pintor,
en
esa
gigantesca
donde se moldean
matriz
las eternas con-
cepciones del arte.
damaron á la puerta. —Está abierta—gritó “Luis.—Que entre quien sea. La puerta se abrió de golpe y en su dintel apareció una mujer, á cu-
ya vista retrocedió mi amigo
dos
pasos. Era ella, la mujer por tanto tiem-
po perseguida, la cual, sin darse por enterada del asombro que producía, avanzó hacia nosotros y dijo: —Don Juan me ha mandado venir. —¿ Sí?—repuso Luis que no acertaba á coordinar una idea.—En efecto... él me dijo... ¿Usted viene acaso...? —A servir de modelo—contestó ella—y espero que usted me diga lo
que debo
Y pasó á desnudarse detrás del biombo que Luis tenía ¡preparado al efecto. : —¡Es imposible!—murmuró mi amigo en voz baja.—No tendré serenidad bastante para hacer nada delante de ella. Dile que se vaya.
—Aguarda—exclamé
tua viviente, fué á colocarse de pié,
con las manos cruzadas sobre el vientre, los cabellos sueltos y la hechicera cabeza recostada en el hombro, encima de la tarima puesta enfrente del cuadro.
Luis, pálido, tembloroso, le dirigió una mirada ambrienta é inde-
cisa.
Ella levantaba entonces los
ojos y comprendió aquella mirada. Al comprenderla se puso encendida y una lágrima resbaló por sus pérpedos, mientras un imperceptile temblor agitaba su cuerpo. Era en aquel momento la verdadera imágen de la esclava, sujeta á su argolla, roja de vergiienza ante las miradas del comprador, sometida á las determinaciones de su capricho... Aquella imágen, trasladada al
lienzo,
*
representaba
el triunfo
para el artista. Y el artista apareció en tal instante. Todos los deseos que brillaban en los ojos de Luis huyeron
por ceder el paso á una llamarada
tranquila y profunda; y mi amigo, mirando sin conmoverse á aquella mujer, dijo mientras aboceraba tranquilamente la figura : : —Vuélvase Vd. un poco hacia la derecha. EH En los ojos de Luis ya no brillaba más que un-deseo. :
El de robar
para su cuadro todos
los encantos de aquella espléndida naturaleza de mujer. JOAQUIN
hacer.
—Mauy sencillo—replicó Luis, con voz entrecortada.—¿ Ve Vd. esa figura ?—y señalaba la principal del cuadro.—Pues de ese modo... en la misma actitud. —Está bien—dijo la muchacha.
yo.
La muchacha salía de detrás del biombo completamente desnuda. Hermosa y tranquila, sin mirarnos, con la pasividad de una está-
DICENTA.
O
Se vende en la calle Serra, Santurce, una casa de altos sobre solar
ropio de 360 metros cuadrados,
Por
$ 2.300.
Apartado, 986.
AOS
San Juan.
462
EL
Julio 7 de 1907
CARNAVAL.
¡Sí la llego á soltar ...!
La satisfacción se manifestaba en todos los semblantes de tal manera, que hasta logs unionistas parecían, por lo alegres y satisfechos, verdaderos republicanos incorporados.
La
gran parada fué.... una gran
parada!
Pero ción
de
lo que más llamó la atenlos
estranjeros,
fué...
los
“ciudadanos en coa Y los ciudadanos á pié. Como quinientos coches iban en la procesión cívica. *
*
+
Cada año hay más entusiasmo por la patriótica fiesta. . Cómo no hemos de entusiasmarnos con la independencia de los Estados Unidos!
¡Pero qué de muchos ciudadanos En la misma redacción del perióco he leido el cablegrama ¡Caracoles!
iban en coches!
Pero no se puede dar la noticia.
¿Ustedes ven que parece una bola? Pues no es una bola. He leido el cablegrama en la misma redacción del periódico. ¡Ochenta y seis mil pesos! Nada, nada, yo lo digo. Si no lo digo reviento.
El Comisionado del Interior ha recibido ochenta y seis mil pesos pon armamento y municlones de a Guardia Nacional.
;
—(Qué les parece de la noticia? —Pues,
sencillamente:
descomunal.
una
bola
—¡Verdad es que parece una bola! Y sinembargo... no es bola. ll
¡ DESCOMUNAL! Una prueba evidente de que cada día estamos
más
americanizados,
fué el entusiasmo con que los ciudadanos de Puerto Rico celebramos el cuatro de Julio, fecha memorable de la independencia de los Estados Unidos of América. *. .
Valioso obsequio Los señores Villar y Pizá, que como
saben
ustedes
venden
un ron
superiorísimo, han tenido la atención de obsequiarnos con una caja de su excelente producto. Veinticuatro botellas de ron “El Morro” queno tiene nada que envidiar al mejor brandy. Es verdad que se vende, y se vende porque lo vale, á peso la botella. Ni un centavo menos, me ha dicho Conde. Y selo digo á ustedes para que no regateen.
Agradecemos mucho el valioso obsequio. Pero me parece que con esta caja voy á adquirir el único vicio que me faltaba.
¿Quién se resiste ante una botella de ese ron que está diciendo: bebedme? Y como á mi no me gusta que me rueguen! Y dígame, amigo Conde, ¿encuanto se acabe esta se puede girar por otra?
*
Julio 7 de 1907 463
EL CARNAVAL Sin
abusar,
hay una
se entiende, pero no
que la
deje *de tomar.
“as más reservadas dicen que la toman por prescripción facultativa.
Lo cierto es queno se puede vivir
sin beber cerveza Pabst,
Siempre el Rey
¡Rayos y truenos! Y así quiere prepararnos esta gente para el gobierno propio. ¡Con triquitraques! ¡Rayos y truenos! Que venga un chiquilicuatro á re-
ventar un cañónazo barbas
de
un
en las mismas
ciudadano
tiene tres bemoles
pacífico,
y un sostenido.
¡Y quéjese uno á los guardias! Cómo es el cuatro da Julio, ni caso hacen. ¡Rayos y truenos! En mi tiempo . .. Pero qué estoy hablando yo de mi tiempo, si entonces no habíamás cuatro, que el que el que tocaban los jíbaros. ¡Rayos y truenos!
No parece sino que en España no hay otro asunto de que tratar más que de la personalidad del rey. No llega. una revista. ilustrada á nuestra mesa de redacción, en que no aparezca la; simpática figura de Alfonso XIII. Porque eso sí tiene el rey, es una e muy simpática. Mas por simpática que sea, al fin, carga la figura del rey. Buena es la gallina, y siles dan á ustedes gallina todos los días, aeabará por repugnarles.
Es horrible eso Y no es en un
te, es en todos
S Cuatro
de
Julio,
cuatro
de
Ju-
——
Menos mal k Es verdad que esto no tiene nom-
re.
Yo meesplico que dejen cesante á los profesores si son del partido contrario. Pero con las profesoras no veo la razón de proceder de ese modo.
Si dijéramos
veza “ Pabst””
¿Y
grandísimo sinver-
ida ¡Rayos y truenos!
que no
toman cer-
Pero es precisamente todo locontrario,
periódicos
los
¡lus-
trados de la. Penífíbula. Siquiera un día más que otro, mándennos la reina, distinguidos compañeros. - Ya la reina... menos mal.
—Pata de giiícharo.
—Tú madre, giúenza.
del rey.
periódico solamen-
Que
fueron
QUE? ustedes á
Aguirre,
que se comieron un chivo asado, que se dieron unos cuantos matracazos y que regresaron á Guayama. Está bien, 4migo Lefebre, pero no veo que eso sea motivo para un artículo modernista. Y largo que le ha salido! k
*
*
Pero á quién se le ocurre mandarme ese artículo antes de almor-
las jue reas s *lstase se enen todas as lala] quiera; pero nó me las amigo Lefebre. ¡Me da una hambre!
ue
Sapiba,
E EXE
464
.
Julio
—JHunie
EL CARNAVAL
7 de 1907
ENTRE BESda 2
lc
o
so...
—¿No le decia 4 usted que el cuatro de Julio iba á ser un —Castigo de Dios por no celebrar la fiesta de San Juan.
Aecdntla visita Hiémos
tenido
el gusto
de salu-
dará las simpátigas señoritas Digma Rivera y Dolores Quiñones, de
Río Grande,
qué'han venido
4 San
desastre?
Juan con motivoxde las fiestas del cuatro de Julio. Cuando circule nuestra revista ya estarán en el pintoresco pueblo. Deseamos que lleven las más gratas impresiones.
Julio 7 de 1907
EL CARNAVAL
sentaron sobre todos nosotros su más enloquecedora y embriagante plática. Recuerdo todavía la. conversación ingeniosa de Carmelo; la serenidad de lof juicios de Medina; la música profundamente conmove-
En plena juerga Era
en
los días
verde
nos
de junio. El
ción
últimos
atraía
magnífica.
ya impresionados
del mes
con
Hácia
atrac-
él
fuímos
favorablemente;
dora
qué los jóvenes amigos á quienes vide la vida.
selvas y los bosques; de los
deseado
dora,
asilo de las almas superiores, salimos
alegres
y
bromistas
señaló en su cuento un
los
es-
tilista puertorriqueño.
al palo,
como
estilan
atildada y la pleta.
n
alegrías,
agompañado
de al-
cuya
iodada
que
for la
brisa
nos regálaba el mar
iña Marcolina,
E
Como la pluma de Palés,
la mia
les de da tri-
plásticas
en aquellas latitu-
nal” junto á unos
enfodados
man-
gles nos volvimos en; medió de las más gratas impresiones y con el
dejo agradable de ún “gran díg de
sombra
comó envalentonado
acaricigdos
Agui-
dos á los pristinos de la fiesta. La admiramos y lá quisimos todos con exagerados entusiasmos... Y por la tarde, alegres, después de retratarnos de “Guardia Nacio-
fiesta.
ridiana que apenas se dejaba sentir por entre aquel espesísimo ramaje; de espaldas á un muntecillo que pronto se destacaba, seco, esteplgmeo;
de
un barrio “El Coguí”. Mon “El Coquí” una niña: y esa
des, fué uno, de los encantos suma-
bienechora; teniendo por luz la me-
ril y cobarde,
Dos
artes
Cinzano puro; Miuncheu, Pabs y el Cogñac, hicieron. nuestras delicias y calorizaron nuestras débiles cabezas, en tanfbh nos íbamUbs há.cia una frondosísima ceiba, 'histórica desde esa fecha como la cei-
bajó
más
gueña, qUe perfuma; la” graciosa gitanilla que sirve de modelo á las
asados aquellas todo lo dispues-
mente.
cubana,
Pa-
fPaternidadymiás com-
como que sal como esos esa bellísima Marcola.
tos todos y cada uno separada-
ba
eminente
se niega á pintarfiatura tan difícil
nuestros
guna docena Genios en el horno encéndido de brasas benéficas, á devorar cual fuimos debidamente
del
Existe en las cercanías
rge
campesinos en los días de sus incoJoras
atmósfera,
hermoseádo pgr la corrección
Carmelo y hermanos nos esperaban como suele esperarse á los Czares. En finura y afectos; en : cordialidad y demostraciones de sinceridad, creo nos quedábamos muy cortos. Aquello era lo indecible. Ellos habían preparado un chivo (y me acordé de Luis) muy bien frito
comentarios,
lés, donde se manifestaba grande en la creación¿maravillosa defeus arquitectónicas estrofas: conjunto
que
notable
los
infinito por las escalas del arte; los versos, “Imposible y “Granada” saturando como de chispazos de brillantitos las ondas etéreas que sustanciaban nuestra fresca y repara-
,
pájaros
ese
Simón;
dable.reserva de Julio en viaje á lo
En marcha al barrio “Aguirre”; buscando esa, única verdad de las y las flores, buscando
de
siempre elevados de Paco; la agra-
sitábamos periódicamente, sentían como nosotros la nieve de los inevitables desengaños
465.
¿
*
E. LEFEBRE. e
scaiciia
*
+
PUNTOS LITERARIOS -
Efta semangno hemos recibido, una sola composición que merezca bes ia de figurar en esta sec-
desde muy cerca; ¿entrerlos vapores, ció del periódico. Ms del vino y las notas de la amúsida >anece q málos” los per todos ¿a
las posiciones fotográficas, phsamos una hora én que el 'arte y sus'
más exquisitas manifestaciones 4 +
en A >
>
han, ingresádo en la G Nicional. + : ps
- Esrpara lo único que sirven.
;
19,
> +
lo
1
466
EL CARNAVAL
Hale
DE REGRESO. '
Pep'ta
Han regresadoode Humacao, los
hermanos: Acosta, condenados á la última a por asegigato en primer
Se ha fijado el dia 6 de agosto para su ejecución. Los tres serán mismo dia.
ahorcados
en el
Tres cientos pesos ganará el ver-
7 de 1907
Conte.
Está en San Juan y hemos tenido el gusto de saludará tan excelente amiga. Viene Pepita á convalecer de la enfermedad que acaba de pasar y á descansar de las tareas escolares. Que pase dias felices en esta ciu* dad son nuestros fervientes deseos.
dugo en esa mañana. ooo
Notas
>
Esta vez ho se quedará mi ami-
go sin una soga para recueflo, Son tres sogas. *
ESCUELA DESVERÁNO. Nnestro
distinga»
amigo
don
los niños y jóvenes de esta ci pasen a og sin pro ' sus estudios,h ie bierto bajó” competente di n una Escuela de adas de itmete un éxito á agy Acompañan amigo los don Fer-
o
Rodil, on Rafael W. Ramirez, don Antonio Trujillo y dos señoritas profesoras cuyos hombres no CONOCemos. El pueblo de San Juan cortesponde al'esfuerzo de tan hermoso cuerpo de preceptores pues la matrícula aumenta diariamente. há
4
»
el que solo se
...!
*
sabe lo que se
a, premia la e.
bor de los ri pletos.
con llenos com-
Nose puede ser muy exigente, ami-
go Boricua. Y por lo que á mí respecta, puede la corista de punta reirse todas las noches hasta que se canse. Sitodo lo malo que hicieran fuera Mn
Anoche fué el- beneficio de la Sra Vehí. La aplaudida tiple que ha conquistado én San Juan, muchos y muy merecidas simpatías, añadió un nuevo laurel á su corona de triunfos. a
do Cofichita, Morales F
de nuestras más distingui
Lo celebramos
de las
pr.
cho.
A
puertorriqueñas ge cursa con
la saluda conel cariño a
*
Las obras que han subido á la escena—creo que todavía los cronistas emplean este bdo de lo más escogido y el público,
a,
da Er Cansado
con los
Pero es lo cierto que los artistas, con raras excepciones, se están portando bien. Ya quisiéramos que durara mucho tiemdo la temporada teatral.
- En el vapor “Carolina” ha llega-
Y la re
María
del tornavoz. Por algo dicen que
reireg,
- aprovecha pi res en uno de los buenos tes de los Estados Unidos... e nchita o pasar las vag, ciongs.
que seria
De los Estados
guitas y una
me importa
Carreras se ría Ó esté
ríe
Carlos V. Urrutia que ho quiere que
-
A mí no
teatrales
1
pap.
E 5
*ce
es donde
irifodos los figurines rones que.netesite.
:e
a -
»
Oro”
'
E
. ¿
br
+,
E
1
Allen No. 25.
MARIENTHAL H. LAGER,
B.
MARZEN
B. M. «€
EXPORT
La mejor cerveza alemana importada por primera vez en Pto. Rico. La más recomendable por sus condiciones tónicas.
“La Escalduna”
Fábrica de pasta para sopa. Calle
de
San
Puerta
Tierra.
:
Euskalduna
Oficinas:
Tetuan
*
38,
Agentes,
Sucres.
receptores en San Juan, Sucesores de 7). Lomba y Ca.
de
Agustin,
Telegrafo:
Unicos
Unicos Y
BIER
de M. Lomba
y Compañía
«
«.
«
Lo —
“EL ROS DE ORO
EL
GALLO
Apatftado 1051.
7
SANBUAN,
Constamte
surtido
DE
ORO
FORTALEZA 2 '
A
r
o 309
P. R*
-
Ela
en
sombréros adornados para peñoras y señoritas. Gorras para caballeros y niños. Artículos para toda clase de bordados. Música impresa : : : San Francisco No. 42,
Dr.
F.
Matanzo
OCULISTA
Consultorio para. afecciones de los ojos: Tetuan 64 (cerca del Teatro.) Horas de censultas de 9 á 12 a.m. Gratis á Tos pobres de 8 á 9a. m.
CARMEN BELÉN BARBOSA
w»
:
Profesora de Piano y Solfeo : ¿San José 31.
6440 Child's Coverallor Creeping
EN
Apron, One 'Size. Variado surtido en tegidos de todas clases. Especialidad en género de hilo y lana. Depósito de los: patrones “May Manton's” que se envían á 15 centavos franco de porte á toda la isla. Fíjese en nuestra página de modas y solicitelas en “El Gallo de Oro.””
LCDO. JACINTO TEXIDOR Abogado
y Notario San José +
No..8,
.
*
Du
*
É
z
j
48
Y
UY
m5 33 Y 2
A
M
2
e,
> > 4 27%
2 10
y Y
E
a z
A
Y.
én e] DL o
SN
1
IO
Ba
2
"Y
a
Y
Skirt. Empire
MANTON Mar By Desiox
á A v A. a
Sa
wi
Gored Seven 5544
Bolero 55 6
MODAS ULTIMAS
*
v
5658
5677
Desión
Br
Mar
Straight
MANTOM,
Skirt.
Blouse or Jumper.
P laited
Over
AN