SUSORIPOION,
REVISTA PUERTORRIQUEÑA
EN LA ISLA:
np 9 ano 23332 33
PAGO
h OFICINAS: yu o 62. San Franelsc
SATIRICO-LITERARIA, POLITICO-INDEPENDIENTE DIRECTOR:
ADMINISTRADOR :
Joaquín E. Barreiro.
y ANTICIPADO.
Teléfeno 299.
Entered December 1”, 1902, at San Juan, P. R. ás* second-class matter, under Act. of Congress of March,
. Año VIII.
Apartado 434.
Francisto X. Arache.
San Juan,
Puerto +
De"
3,
Rico
| Circulación en isla.
1879.
28 de Julio
.
mis
de
Cartas
1907. ”
o que voy á decirte no es un cuento. Es el fruto de mil Srefleciones, á que el estudio de tu alma me ha llevado! resultado de mi exámen sério del estado de nuestros corazones, tan engañados hasta hoy ! Fué una desgracia que nos encontraramos: Cansado tá, de una vida de bohemio, sin verdaderas afecciones, sin familia; después de haber agotado los tesoros de cariño que tal vez hubo en tu alma, prodigándolos á un sin número de mujeres, la idea de tu soledad moral te estremeció y deseaste
las dulzuras de un hogar... Entonces
me
conociste.
:
El
sueño
tomó
cuerpo,
y
por
una sugestión fácil de concebir, en unafimaginación como la tuya, creiste ver en mi la encarnación del ideal que había de darte la felicidad soñada... Yo creyendo sinceramente, que tu corazón abrigaba un
verdadero afecto, que tus genialidades obedecían tan solo á la falta de un cariño único, apasionado, de otro corazón abnegado hasta el sacrificio que comprendiera el tuyo, correspondí A tu cariño... Muy poco tardé en convencerme de que solo podías darme, lo que de tus mil amores faciles te había quedado: un amor razonado, frío, sin ningún arran-
que de pasión, sin el menor
refinamiento de sensibilida ¡ Qué
desencanto! Luché con todas mis fuerzas. para impedir que me dominara el frío de muerte que tus cartas (¡que cartas!) iban acumulando en mi alma ¡yo creí amar un corazón hermoso, todo mío, y tá mismo te encargabas de mostrarme un corazón gastado, incapaz de darse todo, ni siquiera susceptible de encerrar Ó comprender sentimientos elevados! ¡Tu sabes que-hice cuanto pude, por asimilarme tus ideas, Ó hacerte comulgar en las mías! ¡Llegué, hasta á comprimir los latidos de mi corazón, cuanto sespeché que mis car-
tas pudieran
hastiarte! y ¡oh dolor! tuve que convencerme
de que no las entendías ¡yo te hablaba al alma, y ese, para tí, es un lenguaje extraño, cuya existencia, ni siquiera -S08pechabas! Tu
no
sentirla.
puedes
concebir
mi pena,
Pero imagínate,
que
porque
durante
tu
no eres capaz de
ausencia, unas
viruelas de esterilla me hubieran desfigurado, hasta el punto de que fuéra imposible reconocerme. ¿Comprendes ? ¿Como al recomendarle tanto, que tratara de parecer»
te siempre bella, porque no querías desilusionarte, no pensabas que tu alma y [perdóname que te lo diga] tu inteligencia tambien necesitaban adornos para mantener vivo mi amor? ] : Escucha: Para ti, las puertas de la felicidad, están siempre abiertas: Es muy fácil encontrar, quien llene aspiracio-
nes tan .. . cortas como las tuyas. Y créelo: Fué una desgracta
pa
que nos encontraramos, pe-
ro hubiera sido-una desgracia, infinitamente mayor, que no hubiera yo, visto
nos separa!
4
tiempo,
la
inmensidad sin limites
AZÚREA,
que
toda
la
.
516
EL CARNAVAL
Julio 28 de 1907
A pluma y á pelo= Dicen que para lo que hay que ver con un ojo basta. Y para lo que hay que oir les aseguro yo que sobran los dos oídos. Porque cuidado que se oyen bar-
baridades. Las. otras tardes me preguntó una señorita, á quien los cronistas han llamado inteligente más de una vez, y si no me equivoco hasta ilus-
trada. —Diga usted señor Barreiro. ropa queda en España?
Eu-
aborcho-
nado. Para
oir estas
cosas
me dije yo,
es preferible estar sordo. Y como si Dios me oyera, amanecí el viernes mas sordo que una
carreta vieja.
Que se quede tapado el oído derecho. ++»
Me queda expedito el izquierdo. Por el izquierdo me han dicho que en las próximas
elecciones va-
mos á perder á Puerto Arturo, que
entrar mas
la compañía de zarzuela que actúa ren Ponce, no es mejor que la que
Por ese oído me entró el discurso
fael del Valle irá al Consolidado y
Sordo
del oído
por donde
derecho
me solían
que era
disparates. de don Alberto F. Martinez, aconsejandome que tomara cincuenta acciones de la Nutriola. “Cincuenta acciones,
á cuenta
de
las cuales aboné diez pesos, que se fueron-para no volver. Por :ese oído, que permita Dios más núnca se. abra, me entró el diseurso aquel del teatro ponderando las ventajas de nuestra incorpora-
ción al partido Republicano Nacional. Por :ese. mismo oído me dijeron .
cogería miedo á los de la Guardia. ¡Y jugué al Perla Fina!
—No, señorita, España queda en Europa, le contesté casi
que los republicanos íbamos á ganar en las pasadas elecciones. Me alegro que se haya tapado para siempre. La última mala partida que me jugó el oído derecho fué la de Ponce. Por el me entró la noticia de que el “Perla Fina” iba á ganar en la Perla del Sud y como dicen que allí la Guardia Nacionales un “éxito seguro” yo me figuré queel Majestic le
trabaja en San Juan, que don Ra-
que el Gobernador está como chiva con eso del cementerio de Cataño. Me parece que para un solo oído es bastante decir. *..o
Me alegro mucho de ser medio sordo. Y quiera Dios, que todo lo puede,
que cuando llegue el casero me hable por el derecho, que ya yo me en-
cargaré de tapar el izquierdo.
4
=_ 77 ARA
CELSO DE LOS RIOS. .
517
del alma.
HA Aristides
Sarcia
Sémerx.
Y
Cempestades
ARAS y DIA S> sr cm
Todo infunde pavor. *Ningún celaje rasga la negra oscuridad del cielo; sobre las ondas, sin timón bogando, va mi barquilla 4 la merced del viento... Levántanse las olas turbulentas y con furia impetuosa el aire hendiendo, se estrellan en las peñas de la costa y parece que tiembla el firmamento! rebélase
iracundo
Jamás al cóndor
la vibracióndJel
trueno,
IO
Inútil pretensión! intimidó
ni pudo nunca el cazador impío hiriendo
el aire detener
su. vuelo!
JAI
El águila que habita en las alturas
AO
es más feliz entre los rudos vientos, que cuando está la inmensidad serena
La. OSOS
y es más brillante el esplendor del cielo! El sol radiante que en el éter cruza
dejando al paso su esplendor de fuego, vive feliz, porque
en su lumbre
toma
AIR
todo
contra el débil bajel en que navego, pretendiendo humillar mi altiva frente y domar los latidos de mi pecho.
A
Es que
”
Io
OA
Julio 28 de 1907
calor y vida el universo entero! Qué, pues, importa, que el destino aciago me envuelva entre las brumas del misterio, si marcho
como
el astro
dejando, luminoso,
omnipotente
mi sendero?...
En vano luchará la humana especie por llevar á su inmundo estercolero, á las almas que austeras se remontan sin que la altura les produzca vértigos!
1
A
o
LAA
a
hijo.
pa
ENRIQUE MONTAÑO,
Li
furor...Deténganse las olas el mar á su rumor sereno)... sin rumbo'mi bajel navegue ondas, á merced del viento...
l
Cese el y vuelva mientras sobre las
EXE a sp AS
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Pe
e mI
JAN
La cólera imponente que desata como un castigo el huracán soberbio, es música divina para el ave que vive, solitaria, en el desierto...
518
EL CARNAVAL
Julio. 28 de 1907.
¡Hablando con “Perla Fina” de las carreras.
:
D
Si pensabas hacer esa mala partida, simo. Sin verguenza ?
¿porqué no me' lo avisaste,
—Has quedado á la altura de un borrico. —Pero señor...
—No me vengas ahora con lloriqueos, que ya sabemos pata que cojeas,
aquí de la
é”
EL CARNAVAL
Julio 28 de 1907
519
¿Y USTED?
Los que llegan
- ¿Y usted qué hace? le pregunté al rimer alcalde que encontré en “La Mallorquina”. —Pues ya verá: estaba en mi pueblo sin hacer nada y como la vagancia no conduce á nada bueno, resolví venir á la función de Mr. Post. Y aquí me tiene usted esperando á que se abra la función.
De Venezuela llegó en el vapor Philadelphia, nuestro distinguido ami-
¿Y
usted cree?
—Si señor habrá mucha gente. Yo creo que Mr. Post va á tener un lleno completo. —¡La función de Mr. Post!! El demonio son estos alcaldes para inventar términos nuevos.
No pagan nada Ustedes creerán que los alcaldes són gente q
do viene á
deja
oda
Pues no lo crean. son unos macetas.
Por ocho que, toman la retreta, se sientan
cuan-
la capital. Generalmente
ó diez que van al Parcerveza “Pabst”, y van hay cincuenta que no por no pagar los diez
centavos del sillón.
.
En esos ocho, entran los de Sali. nas,
Guayama,
Arecibo,
Vieques,
Cabo Rojo, Bayamón y Rio Piedras. Los otros por no gastar no han
ido ni al teatro siquiera.
Y eso que pagaba los gastos el pueblo de Puerto Rico.
(CAFE
HELADOS
*
xx
Se Sirven
go
el doctor
Francisco del Valle
Atiles, é quien hemos tenido el gus-
to
de
saludar
donde sabe
en
el,
veras.
esta redacción
que se le estima de * * *
Doña Inda, viuda de Hostos, la distinguida madre de nuestro particular amigo, el teniente Hos-
tos, se encuentra también entre no-
sotros después de haber pasado una larga temporada en la capital de Santo Domingo. ion en su regreso á tan estimable matrona sus simpáticas hijas las señoritas Luisita Amelia MaríaAngelina. y EL CARNAVAL se complace en saludarlas y espera que su pr en esta sea larga y hon de satisfacciones para la familia
Hostos.
+ *. +
Por el último viaje del “Philadel-
phia” el miércoles pasado simpático
amigo
Pedrito
llegó el García,
como se le llama amigablemente en esta su casa.
Viene dad del bíaido celente
a
de Caracas, de la culta CiU Avila poético, á donde ha. á solazar suespíritu el exjefe de “La Ninfa”
Bienvenido y mucha salud! -
MORGAN
DULCES
“Lonches
+
*
pe.
SODAMWATER
Rápidos”
|
DETA.M.AI2P.M.
21+-FORTALEZA, SAN JUAN, P. R. SE
RECIBEN _PARA
ORDENES,
DESPACHANDOSE
REUNIONES,
CON PRONTITUD"
GIRAS Y BANQUETES.
Frutas en sus Estaciones
Respectivas. e
ae
520
Julio 28 de 1907
EL CARNAVAL
NUESTROS Pocas
sentido
veces
INTELECTUALES
hemos
honradas
co-
mo hoy las páginas de
nuestra revista. Porque pocas veces se encuentra un hombre que reuna las condiciones de este distinguido puertorriqueño. Abogado de la Uni-
versidad de Valladolid
y enlaactualidad Juez de la Corte de Distrito de Guayama, es un verdadero prestigio en la magistratura puertorriqueña. No nos permite las condiciones de esta revista hacer la biugrafía de tan distinguido jurisconsulto.
Pero
ta decir que en los momentos
más
críti-
eos y para los trabajos más difíciles se ha contado siempre con Don Luis Muñoz Mo-
rales.
Y así
lo
vimos
ins-
ctor del censo en el istrito de Guayama á raiz del cambio de soberanía, miembro de
la Junta de síndicos de la Universidad de Pto. Rico, ete., ete.
LUIS MUÑOZ MORALES,
*
Se necesitaba para desempeñar el cargo de Juez de la Corte del Distrito de - yama á un abogado delalto io del Sr. Muñoz y fué llamado Mansión Ejecutiva siendo Mr. throp Gobernador de la isla, extraña
intervención,
mendaciones
Juez
Guaprestiála Winy sin
sin las.eco-
políticas que parecen
en estos casos cosa de rúbrica,
fué
nombrado para el difícil cargo prestando así un gran servicio á su
eL sacrificándose, pues el sueldo e Juez no alcanza ni con mucho á lo que le produce su bufete.
de la Corte
de Guayama +
*
+
Y no es solamente un ilustrado jurisconsulto y recto magistrado. Ahí están palaitando en el ambiente sus brillantes artículos abordando los más difíciles problemas del país y presentando soluciones prácticas para conjurarlos. EL CARNAVAL publica hoy su retrato como un humilde homenaje
de admiración
y simpatía
tinguido puertorriqueño.
al dis-
EL CARNAVAL
Julio 28 de 1907
AS Cu Ayer, estando
Retrato á solas, tu retrato
vino á llenar mi soledad constante— ¿estando
á solas, dije?—¡ qué insensato,
si de mí no te apartas un instante! Lo comparé al que oculto, dentro el pecho, sobre mi corazón llevo esculpido: aquél la vida en temporal deshecho, apenas éste, tu perfil querido: ¿Quién, en efecto, que-no fuera un dios, el mismo que te hiciera hermosa y pura pudiera remedar su criatura, y hacer que en una aparecierán dos? El Arte acaso? Pero ¿que? es el Arte? en sus raras
sublimes creaciones,
tan sólo alcanza modelar ficciones, de la gran Realidad, escasa parte. Sí, esos tus ojos son, esa tu frente á la que orla de imperial diadema
la cabellera undosa que ss extrema
* hasta tu talle de Afrodita ardiente... Sí, que al esa en cuanto
esos tus ojos son, esa tu boca beso sabe cual la miel hiblea; que fácil la palabra erea, á la vida espiritual provoca.
Y no obstante, mj bién, tú no eres esa, la que ahora
alegra mi desierta alcoba,
la que llena de flores, en mi mesa de tí la amada,
la apariencia roba.
Le falta vida, la expresión airada que dá el enojo á tu mirada altiva,
y el dulce dejo de tu voz callada cuando te rindes del placer cautiva
Sea, en principio, bendecido el Arte, que pretende dar vida á Galatea, y Dios, á su manera triunía, aparte, en tu imagen de Venus Citerea. L.
AFAR.
521
522
EL CARNAVAL
Julio
28 de 1907
LOS DERROTADOS
Maldito sea el queso y que suerte más ¡Doscientos peso! ¡ Y dormir en la plaza del mercado!
perra la mía.
CHOCOLATES SUPERIORES. Los mejores que se elaboran. E. FRANCO, Mayaguez, Puertto Rico. Pídanse en todas partes. |
Agentes en San Juan:-Aboy, Vidal « Co.
Julio 28 de 1907.
EL CARNAVAI
JH dilio. | El mar cantaba ásperamente
en las rocas; el cocal bajo
la brisa marina se lamentaba en un zumbido confuso. - Sobre la raya curva del horizante flotaba el humo de un vapor distante. El alma del enamorado volaba, volaba hacia el horizonte marino, amplio y secreto. como si fuera una de aquellas aves marinas que hacían su caza de peces con revoloteos ra alas en el alma,
cautelosos. Era como si se sintiecomo si alma, prisionera por los
vulgares vínculos del cuerpo, quisiera volar lejos, lejos. ... ¿A dónde? Tal vez á aquel celaje rubio que era
en la lejanía, sobre las olas verdes, una pincelada de ilusión? ¿Hacia el trasatlántico que regaba sobre el mar,
en la distancia remota, sobre la estela de espumas sollozantes, su opaca huella de humo,:su respiración nausenbunda y espesa? ¿Era hacia
una
incógnita ribera florida,
sobre cuyas arenas de oro se alzara busto de sangre ó de armiño?
petu intenso de huir á otros
No
el sueño
como un ar-
lo sabía.
Pero el ím-
parajes subía del fondo de su
corazón como una ola trémula y ardiente.
—¿No es triste, decía á su compañera, permanecer en la playa monótona, cuando e+n m án sitio debe de existir
cuanto anhela mi esperanza?
¿Ne
es un deber del hom-
bre inquirir sin cesar la fórmula de la dicha? ¿Entre ese monte verde y esta playa sonora de espumas, puede encontrar mi felicidad? Quisiera huir á otros sitios, á otros climas, no sé á dónde, á un paraje en que sepa cómo sonríe la vida. ¿Debe ser nuestra vida como una espera con-
tinua y larga de la muerte, de la tumba?......
El mar cantaba en las rocas, desparramando por la ribera sus randas sollozantes de espuma. Y era su canto como una invitación al éxodo. La compañera inclinaba su frente bajo la pesadumbre de la interpelación, como una pecadora vencida por el arrepentimiento. Sus cabellos obscuros eran sobre su faz como una corona triste. El la miraba; y cuando ella alzó la frente, vió que en sus ojos temblaban dos lágrimas. Y entonces comprendió ... .Comprendió que el misterio de la vida sonreiría para él solo sobre aquellos labios; que la lámpara de la dicha estaba encendida en aquellos ojos; y al gustar las lágrimas deliciosamente salobres de la mujer, sintió que había arribado á la ribera deseada y que junto á él dorecía el arbusto de la felicidad, en floresde sangre y de armiño. JESUS SEMPRUM
523
En
EL-UARNAVAL
,
Julio 28 de 1907
Camíno del hipódromo
? —Oye, Perla Fina, ¿de dónde te has traídos esos andares? —No
confunda, caballero,
no confunda.
PA
Julio 28 de 1907
EL CARNAVAL
525
-
que hacía aun amable la vida, nos torna hoscos y sombríos.
He
mi dulce amiga C. A.
disecado
crueldad la fría ma
de
sufrimiento
y
de
al-
pasión,
puesto que ello te -confortará sóbre todas las cosas, Amate á tí mismo, y Á á tus mujeres
ne,
tusamigos, de visión y
sacerdotisas
bailarinas
...
de
y ama decar-
bruma
ó
tono
_ RUBEN
DARIO
Déjame amar en tí, alma-azucena la postrera
ilusión!... Deja
que ame
en tí, ensueño hecho mujer
la mila-
grosa resurrección
ideales, perdidos
de los.
muertos
ya en las brumas
del recuerdo!..
Deja que entre las yertas cenizas del pasado brote esta última floración de rosas!...Rosas pálidas del amor, marchitas y
Ah!...Los cármenes
sonrientes
enfermas...
de otros dias
pasión con la '
lucidez
del razonar me con-
* dujo fatalmente á esta conclusión penosa: fué amarte una demencia
insensata.
la
vida,
Yo, pobre visionario de
debo
renunciar á ese qui-
mérico ensueño de venturas imposibles. Nos separan distancias infranqueables. : Como el Albatros caído de las ce-
lestes alturas, debo arrastrar peno-
samente por la árida tierra de la realidad esas enormes alas de la ilusión, tan poderosas en el eter azul y tan inútiles en el fango impuro. Y he de ver desvanecidos mis sue-
-
ños, esas divinas embriagueces, como leves volutas de humo, como
blanquecinas
nieblas
barridas por
el soplo airado de las tormentas; y,
y floridos!...Arrasados pensando en tí, como en la sombra fueron sin piedad -por el simoun de fugitiva de una felicidad anhelada la vida. siempre y jamás gozada, será mi Tu conoces esta esta extraña hisrenunciación suprema, dolorosa y toria. Algo muy doloroso y muy ' triste cual un adios á la vida en triste que solloza en lo más hondo pues juventud; y habrá en ella la de mi alma sin consuelo. eróica resignación de los mártires Ha sido una desgracia para mi en el minuto final del sacrificio. evcontrarte tan bella en el solitario ITL camino de mi vida sin objeto; y, eo«mo en la Humorada del glorioso Sufriré el tormento sin nombre poeta de “El Tren Expreso”, hede tus miradas, tan intensas y lumos llegado á la cita, yo, muy temminosas, que parece que acarician prano: tú, demasiado tarde. y queman á la vez; y aunque tu desNo me culpes, pues. Recriminaal den, mil veces más horrible que una Destino, que, ciego y fatal, torció artera puñalada, me aleje de esas de tal desdichada suerte las rutas risueñas playas á que había abormisteriosas de nuestras vidas...Y dado confiada la fragil navecilla sé conpasiva con esta pobre alma de mis sueños, semejante á esas de sufrimiento y de pasión!... flores que brotan al borde de las . Amor!..:Amistad....Simpatía...No tumbas, vivirá mi amor en este importa el nombre. Yo solo quiero pobre corazón, silenciosa. y desolaun rincón de tu pensamiento; un da Tebaida del dolor. gesto misericorpioso, un suspiro, Y será el secreto consuelode una sonrisa, una mirada que sea infortunio, amarte á despecho ( para esta lóbrega noche de mi alma todos y de todo, en un tibio pe como apacible luz de un: amanecer de luna, en el vago respland sereno. una estrella lejana, en la harmonía 1% errante de las brisas, en todas esas cosas sin formas y sin nombre, que He meditado largamente; y disihablan á los sentidos el vago lenpada aquella dulce somnolencia del guaje de las almas tristes........ espíritu, la vuelta á la realidad, - DP a » arrancando brusca de la mente lo
Sd
Y ama, ama siempre, dulce
mi
implacable del análisis; y
A
A
Julio 28'de 1907
526! EL CARNAVAL
3
CUENTO
DELA
LAS NARANJAS
Freire
al bueno del teniente
retirado,
era
no
por causa de su esposa, ta en el bolsillo;
poder
nunca,
tener una pese-
desde que
cometiera la
imprudencia de confiarle la dirección del gasto
casero, no
Siquiera
le quedaba
antes,
mensualidades,
un cuarto.
cuando
su
recibía
mujer
le
las
permitía
quedarse con medio duro, que el bravo exteniente
derrochaba
pueblo bebiendo nos
en el
casino
en compañía
amigos,.«on
los cuales
del
de algurecordaba
tiempos mejores ; ahora ella se encargaba del surtido y no le permitía
la menor
distracción monetaria: Y es que Saturia tenía un hijo, y este hijo Máximo, iba 4 ser pronto un hombre, circunstancia que la obligaba á economizar, con objeto de aumentar la parte que más tarde había de heredar el muchaeho. Por eso, hallando disculpa al motivo justificado de su avaricia, trataba de *“*“padre egoista y. desnaturalizado” al pobre de Freire, cuando éste
le pedía algo extraordinario, **pensión”” da 25 céntimos
sobre
la
de peseta que
le tenía asignada para tabaco, y que le tenía que pedirletodas las mañanas para evitar cualquier olvido, más ó menos voluntario de la codiciosa tesorera. Un día, Freire estaba bastante satisiecho. Su hijo había obtenido un premio. sn los exámenes y, á la legítima
alegría
del
padre,
uníase
el placer
de
que se sentía poseído el viejo militar al verse con dos pesetas y media an el bol-
sillo del chaleco,
procedentes de un ver-
dadero abyso del entusiasmo maternal ante el éxito alcanzado por el estu-
diante.
E.
AGA
VTA
—Quicro ofrecer con esto una taza de café 4 los amigos que me felicitan por el
triunfo de Máximo. No había medio de resistirse 4 seme-
jante argnmento. ya conmovida,
La señora de Fretre,
acabó por
dejarse enter-
necer, 11 El teniente se dirigió
e
casino, ante el cual no se atrevía 4 pasar hacía algún tiempo porque siempre lo convidaban á tomar algo, viéndose
I
Lo que apuraba
SEMANA
4 toda
prisa :al
obligado
á no
aceptar por temor
á no
corresponder como quisiera. Iba 4 resucitar antiguas memorias, á hablar de sus campañas de Africa, de Bilbao, de Montejurra, donde ganara las dos estrellas, juntamente con un balazo en una pierna de que había curado felízmente.
:
Dobló la esquina de la plaza y ya veía verdejear, como una tierra de promi-
sión.
los chumbos
polvorientos
en
los
tiestos que orlaban el terrado del casino, cuando de pronto encaró con él un hombre
miserablemente
vestido,
cuya
fisonomía aviejada despertaba en él un confuso y lejano recuerdo.
Aquel hombre hizo un saludo y deteniéndole,
—Buenos —¿Quién
militar,
dijo:
días, mi teniente. eres tú?
Paréceme conocerte.
Te he visto en alguna parte. —Es verdad, mi teniente. Estuve con usted en el Norte, hasta que me ocurrió aquella fatalidad...
'
—¡Ah!
¡ah!
dijo
Freire
en
tono
de
zumba, ahora me acuerdo. Eres Juan Rábago, de la tercera del segundo de Estella, 4 quien tuve. que echar de la
compañía
por faltas graves
á la disci-
plina Para tí no bastaba la prisión ni el calabozo...Habías de dormir siempre fuera del cuarte!l.,. —¿Qué le había de hacer mi teniente?
—¡Sí, sí, las mujeres!
Ellas te llevaron
muy lejos, no hay duda. Las mujeres no, mi teniente. Una mujer sola, que me quería como la quería yo... Empezé que cumpliese el tiempo de servicio y cuando quedé libre nos casamos.
.
--¡Menos mal!
dre de famiiia? feliz?
'
¿De suerte que eres pa- -
Y, vamos
4 ver:
¿eres
:
—Desgraciadamente,
no, mi teniente.
Mi mujer, una inmejorable campañera, y muy trabajadora, enfermó; mi hijo, que es un buen jornalero, está en el hospital; y yo mismo no valgo nada. Ganaba con mucho trabajo seis duros en una casa de comercio, cuyo dueño
—
CARNAVAL
me
empleaba
_Julio 28 de 1907 527 en
el
acarreo
de
El teniente tomó la palabra: —Amigo mío, acabo de encontrará su padre en la callo. Recordé que había sido uno de los mejores soldados de mi compañía, una cabeza un poco caliente otro tiempo—y lo pagó bien caro el pobre!—pero hombre de bien á carta cabal, 4 quien holgué mucho de estrechar de nuevo la mano, y quise estrechar
mercan-
cías desde la estación; pero el comerciante acaba de quebrar y estoy en la calle. No tengo en casa ni un céntimo... y había prometido á mi hijo llevarle hoy unas naranjas ai hospital. ¡El po-
bre
manifestó
tantos
deseos
de ellas!
Pero no voy, por no llegar allá con las manos vacías. Freire se retorcía febriimente la perilla, lo que era en él indicio de profunda
emoción.
también
Su mirada se fijó primero en
la puerta del café, después en el soldado y luego en el camarero que limpiaba
las mesas
en el
terrado
del casi-
no. Entretanto, con la mano que le quedaba libre inquiría en el fondo del bofsillo del chaleco, dando vueltas á alguna
—Mi quiero
cosa.
- Por
hijo está que el
último
tuyo
11I
Cuando
exclamó;
hoy muy
contento; no
esté triste. Aquí
tie-
nes para comprarle las naranjas. Y esto diciendo, volvió rápidamente la espalda, dejando alsoldado suspenso y se dirigió á casa. Juan Rébago sintió la mano del teniente deslizarse en su bolsillo, donde encontró medio duro en plata, aquel medio duro tanto tiempo codiciado por Freire y que éste alcanzara con tanto trabajo. El soldado, viendo que se alejaba, le.
siguió corriendo
hasta
que le alcanzó.
—;¡Mi teniente! ¡Mi teniente! Freire continuaba andando. Así que Rábago lo detuvo, quiso darle las gracias, pero el teniente no le dejó terminar la frase. —¡Vete, y déjame en paz! Te está es-: perando tu hijo.
—Mt teniente,
sólo le pido
una cosa:
¡hágame el favor de venir conmigo! —¿Para qué? —Ya sabe usted...Hay eosas que: no pueden ocultarse...Mi hijo sabe que us-
té6d me echó
de
la
No por
compañía.
eso me tiene menos respeto; pero conozco que le duele estar persuadido de
Dígale
que fuí mal soldado. teniente,
que yo no
me
usted,
portaba
mal
mi
en
el tiempo que estuve bajo sus Órdenes. ¡Vamos hombre, bueno! —¡Bueno, conmovido. Freire repuso allá! las naranjas, los dos enCompradas el hospital. en juntos traron El enfermo, viendo á su padreen com-
pañía de un desconacido, mirada interrogadora.
la de su hijo.
—¡Mi teniente! exclamó Rábago. Los ojos del enfermo centellearon. Se sentó en lacama y abrazndo á su padre murmuró: —¡Ya estoy curado!
le dirigió una
Freire llegó á su casa, ya ha-
bía pasado la hora del almuerzo. Los acontecimientos de aquella mañana lo habían emocionado bastante. La mujer notando cierta desusada palidez en su fisonomía, le acusó. de habor. bebido de más.
—¡Bebido!....E
indignado
jante soposición,
le
contó
cón la
seme-
inversión
que había dado al dinero. La esposa: por el momento no dijo nada; pero al siguiente día, cuando el teniente despertó se encontró en el .sillo otro medio duro, —¡Saturia! ¡Saturia! gritó entonces el buefi veterano. ¿Cómo es esto? ¿Pues no me encuentro
en el bolsillo
el medio
du-
ro que he dado ayer.? —El de ayer, no, Es- otro. ¿Luego ha obtenido un nuevo premio Máximo? > —Freire, tu eres muy goloso, pero nuestras economías no corren peligro aunque glerrochemos, algo....en tusnaranjas.
X.
- CASTELAR Ya está sobre nuestro de Dalmau
Canet,
con
pupitre el libro una
dedicatoria
que no merecemos. Por eso la agradecemos más. La obra está muy bien editada en los
talleres del “Boletín
Mercantil”,
y por
lo que hemos leído parece quese trata de un estudio acabado del gran tribuno
del político
más
discutido
de algunos
años á esta parte. Leeremos el libro de Dalmau con verdadero interés y lo juzgaremos con toda imparcialidad.
528
EL CARNAVAL
Jul
z
O
/,
ñO
7,
E
Vd. una habitación para dos personas ? “ma en toda la ciudad. >
io 28 de 1907
EL CARNAVAL
Julio 28 de 1907
CINERARIA. En la soledad de la montaña, durante mi fuga de asceta solitario, yo evoqué tu recuerdo. Y tu sombra, cariñosa y bella, agena á las amenazas de la muerte, se presentó, ante mí, Yo te llamé sobre el sencillo mármol de tu sepulero doloro80 y nunca apareciste. Y cuando vago en el silencio salvaje de los montes y huyo del engañoso trato
de
lós
hombres,
tu
pre-
sencia de improviso me consuela. ¡Oh dulce deidad de mis recuerdos tristes! El blanco cendal de tus formas indecisas se destaca sobre el negro funeral de la honda noche. Tu belleza intocada ya no es la nerviosa sensitiva de otros tiempos: es algo así
que arroba
el alma
ráfaga de admiración
celeste,
dulzura
vibrante
encantadora,
en
una de
las espléndidas bellezas invisibles y muy distinta del amor carnal de las mujeres. El manantial vecino se escuchaba
por entre los guepertas peñascos, con su cantar de una agradable nota, única y eterna, interrumpiendo sólo el solemne silencio de las som. bras; mientras la brisa fría se desli-
zaba como un beso dado á hurtadillas al niño que se duerme. Con célica bondad, nunca sentida en los dorados palacios de los hombres, la alta arboleda me cubría y perpetuábase en mi alma la dulce impresión de un maternal cariño. La visión de la adorada
muerta
flotaba por entre el obscuro bejucal, y junto á un lecho de dormidas
anémonas.
de las flores
El no imitado montañesas
aroma
esparcía
sobre mi sér baño fragante, mientras
en ademán
callado,
lleno
de
dulzuras inefables, la fantástica aparición vertió sobre mi frente el bálsamo divino del consuelo. Su mudo silencio parecía decirme: qué quieres? á quién buscas por los agrestes peñascos y las frondas? Es mi recuerdo? Yo, no obstante tu olvido, te adoro siempre; lloro con tus desdichas
si estás
triste y
sufro con los puñales que en tu pecho la perfidia clava. Adios, viajero infortunado de la vida. Dioste pro-
529
teja” dijo, y desapareció en un hilo flotante de la gloria. ¿Será ilusión no más de mis sentidos ó realidad palpable lo que ví? Quién sabe! Un sueño acaso, una impresión sagrada de esas que no se sienten en el tumulto enorme de
las urbes. Ah! que para sentir la dulce calma y vislumbrar la luz:del . más allá huir es preciso á la sencilla vida y al solitario desierto de las selvas. Allí se transfigurael hombre; el amargor perenne de la vida se torna en el júbilo sereno q pro curan las admiraciones nobles; la arquitectura de los bosques y el
huraño pudor de
aguas
sui
las rasgan el vélo triple de la frivolidad y la mentira. «Y entonces se
vé á la grandeza increada en todo
su esplendor
la harmonía
inalcanzable;
extrasensible
se Oye
de
la
música natural, muy más preciosa
que las recamadas
brillantecesde
artísticas orquestas, y el* : miento sutil y fervoroso Siles atrevido en alas de la fe, jta-
do cual Psiquis, rasgando
cio y sorprendiendo el cielo.
el
E
Profunda cavilación había segui-
de á la suave presencia de mi
ama-
da; no parecía sino que la flor de mi
idea,
ya
convencida de la inu-
tilidad de las cosas pa
caba el recuerdo de pa rtunios, anublados en la 0 aga de amores traicionados, le mis músculos forzudos se habían robustecido cual cíclope viril, Rasgó la luna el manto de los cielogy y envióme la imágen de la muerta; contele mi dicha y mi vic-
toria,
díjome
otros mundos
ella
sus cuitas
de
y á la tenue lumbre
desu pálida silueta me sentí dichoso. Cuando la aurora vino, una ráfa-
ga del bullicio que ierta bajó á mi mente en sensación dolorosa, como de niños que al nacer el primer
ay!de dolor,
ó de cosas
creadas que no quieren sufrir el gor de la existencia.
in
a
En el crugido inicial de la vida
que despierta hay la angustia póstuma del héroe que,al dar su sangre por salvar la patria, piensa en la
“triste oríandad
de sus hijuelos!
PEDRO M. ARCHAMBAULT.
530
EL
28 Julio 2-4 de 1907
CARNAVAL
Estudiantes puertorriqueños “]
Hace pocos días lo saludamos, por su regreso al país, á pasar los meses de vacaciones.: Hoy publicamos
su
retrato,
como
tributo
de
justicia y verdadero afecto. De justicia, porque en la bandera de
EL
CARNAVAL
hay
escrito este
lema: emulación y estímulo. Y aunque Jaimito no hecesita de estímulos, porque los tiene de sobra en los triunfos
obtenidos,
los han
menester otros que ño siguen, desgraciadamente,
el ejemplo del estu-
diante de Michigán.
Tributo de verdadero atecto, porque en esta casa se ha profesado siempre un gran cariño al futuro Licenciado.
Nuestros deseos son verlo ya con la toga
=-
JAIME
SIFRE.
sisniemos La Comisión de festejo de Ponce, para
celebrar
la entrada
americanos por el puerto de
Ye
nos el programa. Creemos nosotros que hasta la fecha, no hay mayor motivo de entusiasmo por la entrada de los americanos. Mejor sería que se celebrara la sa-
lida de los españoles.
De este modo comprenderían los yankees, que si la suerte. velidosa cambiaba algún día la 'suerte del aís, (que todo cabe en lo posible). case
Porque
eso
¿Que nos esperan grandes empre- . sas en lo futuro?
¿Que nuestros hijos, y los hijós de
Agradecemos mucho esa atención.
uerto
de defen-
ñola ha sido fatal; fatalísima para toda la América. Pero no la ha mejorado mucho la dominación americana.
los
Guáni-
ca, ha tenido la atención de enviar-
- supartida.
y en condiciones
dernos en la primera causa que se nos siga por libelo. Andaremos con cuidado, procurando no meter la pata, hasta que Jaimito regrese con su título «de abogado. Ya le falta poco tiempo.
ted 6 E
hay que
decirlas
cosas claras: lA dominación espa-
nuestros hijos,!serán los ciudadanos
más felices de la tierra”?
En eso estamos de acuerdo;
mas
si yo fuera padre no me entusias-
maría mucho pensar que mi hijo podía ser hasta prestamista, mien-
tras yo daba
contrar
el piojo por no en-
quien me
por el rabo.
fiara
una
gata
AAA
Es verdad que yo no tengo hijos y no sé por lo tanto á que extremos conduce el cariño paternal.
Pero bueno
miesemos.
sería que todos
co-
EL
Julio 28 de 1907 581
CARNAVAL
LAS
$ > o
a Y]
ES S
A:
A
SUSCRIT
ORAS
de
532
24% Julio 21 de 1907
EL CARNAVAL.
El Corazón del Drago CUENTO.
« Desde la noche en que el terrible dragón, rampando
sobrelos muros
del castillo, golpeó con su hocico monstruoso las coloreadas vidrieras del aposento de la princesita, aquella era la primera en que todos descansaban tranquilos y sosegados ¡al fin!
después de la angus-
tiosa zozobra de tantos días. Diestros y arrojados cazadores, aguijoneados en su empeño heroico por el cuantioso premio ofrecido á son de tambores y trompetas en
todos Tos contornos, habian conse-
guido clavar agudo arpón en el vientre ¡verdoso de la bestia que durante tanto tiempo sembró el terror por toda la Aquitania. Su hediondo cuerpo, relleno de paja, sería colgado en el crucero de la catedral medio acabada, y sucorazón de fiera satánica, consagrado como ex voto, adornaría clavado sobre el muro la capilla del Santo Caballero, triunfador de aquel otro dragón rojo no menos espantoso, que tanto hizo sufrir la cristiandad entera.
Hundida, derribada sobre el gran lecho señorial, la princesa Isabel yacía presa de extraña dolencia desi a dia en que las fulgurantes OJOS del dragón se fijaron en sus _ azules pupílas dilatadas por el terror. Ni exorcismos, ni rogativas, ni los brebajes del médico judío, tan sabio y experto en combatir hechizos y calenturas malignas, habían servido para nada. La princesa se consumía lentamente, con las mejillas macilentas, la mirada tris-
te y el respirar anheloso. n la antecámara musitaba sus rezos medio dormido un fraile, y sobre_el altar lucían los cirios arrancando pálidos destellos á las gemas multicoleros que esmaltaban el ancho cáliz de oro, lleno hasta los bordes de a bendita en donde yacía, hasta llevarle á la capilla de San Jorge, el corazón de
la fiera.
La princesa, con los ojos medios
entornados, contemplaba á través
del velo de sus pestañas, atraída por extraña fascinación, el cáliz de oro en cuyo'ancho seno percibíanse crepitaciones confusas, vagos zumbidos que, prolongándose sobre un ritmo
monótono,
formaban
extra-
ñiás armonías, algo así como rumor del boscaje movido por
brisa al caer de la tarde.
el la
Del fondo
de la santa copa exhalábase un vaho caliente y perfumado que poco á poco iba esparciéndose por los ámbitos del camarín; aromas de verbena y de claveles oreados por lluvia de tormenta; olores campesinos suaves y tibios que acariciaban el rostro pálido de la princesa Isabel, cada vez más dominada por la irresistible atracción del áureo cáliz que resplandecía con fulgores de gloria. De pronto, sobre los bordes del cáliz, entre vapores luminosos, surgió el corazón sangriento, que con-
trayendo'
sus
supremo
latido,
rugosas fibras en un saltó
rebotando
sobre los albos paños del altar y vino á caer á los pies del lechoseñorial, dejando un rastro de anchas gotas bermejas. La princesa Isabel quiso incorporarse y gritar, pero volvió á caer lívida y tremante, mientras del co. razón del drago seexhalaban vavos zambidos, extrañas armonías, aromas
cálidos, arrullos amorosos
de
la Voz del Misterio
LUIs PARIS.
Anita Soto, Los hombres de EL CARNAVAL son dichosos. Digan lo que digan los que solo se fijan en las desgracias de los hombres de EL CARNAVAL. Anita, la gentil Anita, la bellisima Anita. vecina de nosotros celebró sus dias el viernes, y nos invitó
á que participaramos
de sus ale-
ías y accedimos á la invitaeión e Anita. Dicho se está con esto que
mos horas
agradabilísimas y que
no somos tan desgraciados hombres de El CARNAVAL,
los
EL CARNAVAL
Julio 28 de 1907
“Ecos de la Propaganda”
(1)
[Fragmento]
La -oposición
digna, en política,
ha dado en todos los tiempos,
sus
resultados favorables á la causa de
la Libertad y del Progreso. No así la intransigencia y el absolutismo que pervierten la Moral, y
traen
como consecuencia
lógica
de sus falaces prácticas, el derrumbamiento del orden social-político que es el trofeo de civilización que pueden
ostentar
como
divisa
los
paises cultos. No hay que esforzar la memoria para demostrarlo. - De la encarnizada lucha sostenida entre lasideas democráticas y los privilegios de la nobleza en estado de exaltación por su misma caducidad, surgió, allá en el pasado siglo (XVIII) la revolución francesa, que es la epoya más grandiosa que cuentan os siglos del Cristianismo y que registran las páginas de la historia moderna. Suprimid la demagogia, esa neu. rosis de los pueblos, eseestado morboso de los cerebros volcánicos, esa
descomposición total de la racionalidad, esa fatalísima anarquía del espíritu que tiende á devastarlo y arruinarlo todo; suprimid la demagogia francesa y no podrán los
mismos cadalsos cubiertos de sangre coagulada como témpanos, acusar á Vergniaud, á Desmoulins, á Robespierre, á Danton, á Marat, á Saint Just—el fanático de la re-
miento de la verdad y la dulce influencia de las virtudes públicas, sin cuya cooperación no serviría de nada al hombre la perpetua lucha que sostiene por una perfecta civilización. La desidia en política da frutos de servidumbre.
La indiferencia esteriliza el espíritu de los pueblos y les reduce á la postración, que degrada tanto como el vicio, Es preciso que los pueblos se convenzan de que su intervención en las cuestiones del Estado, es necesaria. Su soberanía no es cierta,
mientras no puede llegar á,este grado de perfección social. : ¿Cómo llega á este fin? Con la práctica de las virtudes cívicas y el respeto á las ideas... FELIX
vida práctica, el necesario conoci-
(1) Obra publicada en Caracas-1889imprenta de “La Patria.' Página 75.
MATOS
BERNIER.
Hogar en Ujuado La Srta. Maria Figueroa Maestre, hermana de nuestro amigo el Ledo. Figueroa Maestre, contrajo matrimonio canonico en Utuado,
con el comerciante de aquella Ciudad Don Mamuel Fernández Garcia, distinguido joven español de aquella población. Deseamos felicidad á la pareja.
volución, como le llama Lamartine
á- Mirabeau, el gran orador, y á toda aquella legión de hombres randes que regaron á torrentes as ideas que habían de reformar las instituciones europeas y levantar muy alto la soberana y espléndida concepción de la democracia, que se llama República. De la severa contienda de las ideas brota siempre la filosofía de la inteligencia, la experiencia de la
533
Muchas felicidades Benito Carril, á quien profesamos verdadero afecto y Mercedes Miranda, la ilustrada colaboradora de “La Verdad” nos participan en atenta tarjeta su efectuado enlace y nos ofrecen su casa en el pintoresco Versalles. :
Al darles las gracias más expre-
sivas
por su
atención,
deseamos
para. el nuevo hogar toda suerte de
venturas y dichas. Los dos son buenos y tienen derecho á ser felices. Y lo serán seguramente.
5384
EL CARNAVAL
Julio 28 de 1907
El Amor y las Mujeres
otra vez, socaliñeramente, ha- degranado por los vientos la canción del desaliento.
VII
Al contemplarle extremecimiento
Es domingo, mi buena Hortensia. Un
día
tediose,
melancólico,
gris.
Entre la pasada atmósferay bajo el
ancho cielo plomizo, brumoso, som-
nervioso
camino.
á un músico ambulante que entona
Era
onozco la letra que me charlo-
tea con habla membranzas:
idílica amadas
re-
que el vuelo refrenaban a y mi diccha al contemplar, leron
(9
nuestros
Y se retúéercen
nombres
...!
las
cuerdas del iguitarrillo entre sus dedos febriles. Es un mozo de tez cetrina, tostado por el sol de los mediodías caniculares; con ojos inmensos, y soñadores, que evocan á los piferari de la campiña napolitana. ¡Pobre bohemio! No sé por qué su canción se armoniza con mi idiosincracia de mu-
jer desgraciada, dada á todas las quimeras, á todos los soñares. Por la empinada cuesta ha descendido el mancebo magistral, cantándo siempre la canción de los dolientes recuerdos, seguido por alborozado enjambre de pilluelos. Ha entrado en la ciudad, acicalado de limpio, con un gran chambergo, todo nuevo, y un morral terciado á la espalda. Se me parece á los bandidos calabreses, tal y como Dumas y La-
martine describiéronles en sus narraciones
de vida
nómade,
á tra-
Se ha detenido por fin bajo mi ventana y sus ojos me han conten-
" plado un momento.
.
¡Quéembriagadora dulzura tiene a
- en los ojos!
Está muy palido y jadeante, peto,
así y todo, hase erguido con
gallar-
día caballeresca, se ha descubierto
con
inimitable
gracia
mi
' él,
Hortensia
el
mancebo
aquel que enjaezara nuestros brindones y guiáranos por el bosque en
las tardes de estío, por la época de las vacaciones.
te enajenara con sus promesas rosadas, de barbilindo que da toda el alma en el primor de un beso. Aquel que llegaste á querer con la ciega demencia de las mozuelas de
quince abriles.
cimbreando,
vés de las florestas italianas.
todo
Aquel de rostro de querubín que
oscuras golondrinas nidos á colgar n el ala 4 sus cristales
¿. ¡no volverán
recorrido
niestro. Después ha proseguido su
brío, unos alegres hombres siguen viejísima canción.
ha
cuerpo y he visto como sus ojos han fulgurado con relampagueo si-
y mirando
¡Pobrecillo!
Sus
ojos garzos
ha-
blan de todas las humanas pesadumbres y la música de sus canciones conmueve toda el alma. Al reconocerme he visto sus claros ojos de ensueño anegados de lá.grimas. Al contemplarme te habrá recordado con
desesperación
y evocado
la visión radiante de su pasado. Por allá ha templado el guitarrillo y preludiado ha la música de los recuerdos dolientes, sagrados, benditos... Son las mismas canciones con-
que,
en la
amor,
ventura
de
tu
te adormeció
él,
tantas
primer
ve-
ces, cubriéndote de besos á la sombra bienhechora de1os bosques,
¡Oh, cómo olvidamos las mujeres!
¡Qué elástica nuestra. conciencia en materia de amores y programas!
Pronto vas á casarte. El te sigue adorando. No olvida el idilio embriagante de la montaña ni tus promesas preñadas dei titudes.
Su mirada
lo ha predicho.
Está, pues, prevenida; no sea que
te halles con él en el caminode su triste
ques
peregrinar.
Evoca sus arran-
de iracundia á la idea de que
pudiera poseerte otro hombre, que no fuera él. En fin, y termino. Está muy gallardo y parece muy valiente.
Al marcharse recuerdo que me sa-
EL CARNAVAL
Julio 28 de 1907
ludó con el magistral y apuesto continente de un trovador de la edad clásica de antaño. Después ha proseguido rumbo, calle abajo, cantando siempre la melodía gimiente de los pobres ena-
Y concluyó
535
temprano,locual
es
muy del gusto decierto público soñoliento. : Anoche
dieron
la
repetición
de
“El Anillo de Hierro” y un brillante acto de concierto. Era el beneficio
morados que han sufrido mucho, hasta perderse en lá amplitud de
del simpático tenor don José Vigil: La Compañía estuvo generalmen-
cuesta con su dolorosa
te bien y el público....mal. : Para esta noche se prepara el estreno de una obra del repertorio
una vieja alameda
sombreada,
á
voz de tro-
vador bohemio. ' De seguro que te reirás de todo esto. Así somos todas las mujeres. ¡Ahi tienes tá una
alma de ensue-
ño en los linderos del envilecimiento y
perdida ya
honrados mujer!
¡
para los
amores
por la ingratitud de una
raciada
la que se tope con
él en su camino!
selecto del género
Rosa;
también
“El Tirador de Palomás”. La
compañía
filigrana
|
se despide del pú-
blico de la de la capital para AreBuen éxito.
Los Obreros
- La Compañía La Compañía que actúa en nues-
tro coliseo nos deleitó el jueves pasado con la zarzuela cómica “Campanone”, repetición que obtuvo esta vez éxito igual 4 su estreno. Exceptuando, por supuesto, la asistencia que fué escasa. Fueron justamente aplaudidos el concertante del primer acto y en el tercer acto el terceto de tiple y tenor muy bien cantado por las señoras Ramirez y Vehí y por el Sr. Vigil; el gracioso duo deese acto de
don Pánfilo y Campanone Srs. Mo-
rales y Real lué repetido y de consiguiente muy aplaudido. obra en general gustó.
RON
PIDA Y
nos obeequias la
compañía con la pequeña
cibo.
ARTURO CÓRDOVA.
EXIJA
chico “La Cuna”
y la repetición del “Cuñao de Rosa” una salada parodia del “Puñao de
LA
La sociedad de Instrucción y Re-
creo “Círculo Puertorriqueño”, formado por una, ación de honrados obreros, celebró el jueves pasado su instalacion. con una excelente velada y un bonito baile. para los cuales tuvo la atencion de invitarnos.
organizados como
EN
se deseaba y ho
faltó en ellos la nota culta y añimada que debe informar los actos de ese género. El Discurso de resúmen del señor P. Timothée, sobretodo, fué jugoso y agradable. ¡Norabuena!
SAN
MARCA
FIJESE
,
Ambos actos resultaron tan bien
ESTA
LUIS
LEGITIMA FIRMA
Alvarez Hermanos, +
536
EL
CARNAVAI
LOS
Julio 28 de 1907.
ANDES
.
Cual se vé la escultórica serpiente de Laoconte en mármoles desnudos,
los Andes trenzan sus nerviosos nudos en el cuerpo de todo un continente. Horror dantesco estremecer se siente
por sobre ese tropel de héroes membrudos, que se alzan con graníticos escudos y eon cascos de plata refulgente. *
La angustia de cada héroe es infinita, porque quiere gritar, retiembla, salta, se parte de dolor.... pero no grita; y sólo deja, extático y sombrío, rodar, desde su cúspide más alta, la silenciosa lágrima de un río.... JOSÉ
En Bayamón Esta noche echará el resto la juventud de Bayamón. En los salones de la Colonia Es-
SANTOS
CHOCANO.
Este querido amigo se quiere casar, y ya sabemos que todo el que aspira á unirse siente dolores.
pañola de aquel pueblo, se dará es-
¿Y qué?
ta noche un baile, que según nuestras noticias ha de quedar esplén-
dido.
Alla iremos.
Parece que el Gobernador rria á la policía.
Enfermos Lo estuvieron en Bayamón don Virgilio Dávila y el doctor Fossas. El primero, alcalde de dicho pueblo, estuvo
en la reunión
'convoca-
le
tiene ti-
No-sé porqué se nos antoja que le ha puesto la proa á la institución que dirije Mr. Hamill. ] ¿Y qué pretende
Mr.
Post?
Ya sabemos que hay grandes lunares en el cuerpo de la policía, que debiera
hacer una verdadera selección. ¿Pero da por Mr. Post, y claro, después de cfee el gobernador que está retribuido los discursos de Pérez Avilez, y del un hombre con treinta pesos de sueldo” alcalde de Manatí, y de lo que dijo No se quien dijo que volveríamos á la el de Quebradilla, a. ey, había de sacar Virgilio la, ale policía municipal.
calde de Bayamón? Una enfermedad. $ El segundo, el doctor Fossas...
Pero
nosotros
Post, que
es
no
hombre
en semejante cosa.
creemos
que
Mr.
de talento, piense
Julio 28 de 1907
EL CARNAVAL
537
re es avaro para guardarlo á los
“Fusilamientos en Bogotá”
uenos.
buen
amigo
el escritor Roo,
ha
obse-
tenido la amabilidad
de
Hicieron bieh
quiarnos con un interesante pu
to cuyo título es el de estas Hemos
leído con
todo
líneas.
Por telegrama que recibimos el jueves, nos enteramos con verdadera satisfacción de que los excursionistas que fueron á Ponce no tomaron otra cerveza que la Pabts. y Hicieron perfectamente.
el deteni-
miento posible la publicación de referencia. Y á la verdad, nosabemos
que admirar sorprendente mirables
más si la galanura del estilo ó las ad-
cuanto
irrefutables
razo-
nes q. con verdadero lujo de conocimientos expone
todas
páginas
Cordido
Roo,
de su panfleto
contra de la siempre odidsa
—
en
en
A las señoras y señoritas
pena :
de muerte. : Nos figuramos á Cordido Roo un filósofo á lo Tolstoy. Predicador del bien y de la moral, sería capaz de llegar á la muerte con una sonrisa de triunfo siempre que aquella fuera consecuencia de sus doctrinas
Se acaban de recibir por el último vapor en el Bazar de A. F. Kohl un
gran surtido de faldas de etamina,
bordadas, última moda, en 36 distintos estilos, desde
místico-socialistas. Y, así, tal vez se consideraría no un vencido, sino
cómo un mártir... . Cordido Roo, tiene : fuertemente
una
prosa cortada
ESPERESE
á trechos como un mármol á golpe . de explosión, tal como su estilo un si nó
En. “El Gallo de Oro”
es
del egotismo de los hombres superiores, nos figuramos que debe ver las multitudes con aires de gran señor y con un ay! de lástima en los labios, como quien mirara un rebaño de ovejas, con destino al esquilamiento. .... : Breve y sincero en todos los párrafos, Cordido Roo hace brillar ante los ojos del lector el chispazo de luz de dos floretes que se eruza-
y patrones que necesite.
15” Allen No. 25.
Dr.
DE
Plaza
un millón
San
de gracias por su recuerdo amable se honra
acusando
recibo «de
y se gran
alegría un aplauso de“ quien siem-
LA
DE PENSILVANIA
Baldorioty Juan,
EXTRAQQIONES
EL CARNA-
“Fusilamientos en Bogotá” complace en “tributarle con
Valdés
VEINTICINCO AÑOS DE PRACTICA.
fumado, pero con espinas.
VAL
Alvarez
UNIVERSIDAD
irónico, vedado, pero certero, per-
dedicatoria fina.
A.
DENTISTA
habrán herido muchos al recorrer las páginas de un libro bello; pero Al buen amigo ausente
es donde
puede conseguir todos los figurines
ran para herir con presteza, así, brevemente, pero muy hondo, se
y íu
$15.
.
irreductible,
debe ser su alma, con
$6 hasta
¡Es la última novedad en vestir! ¿Lo.queréjs saber? Una visita, pués, á U. S. Bazar.
de
Puerro
SIN
Castro Rico.
I¡!DOLOR !!
A
*
+
LAREARRIAAA
Nuestro
venezolano don J. A. Cordido
De8á411%
E) HORAS DE OFICINA: bo se
538
EL CARNAVAL
Julio 9284e 1907
a
DE REGRESO
'
ñy
|
Ñ
1
—Apure caballero, que lo deja el tren. — —Eso me faltaba: Perder los cuartos y quedarme
¡Si me cojierén en otra!
LA
FLOR
MERCANCIAS,
QUINCALLA
MUEBRES J. Bonnin e
£« Co.
DE Y
MAYO
FERRETERIA
A
en tierra.
EN
GENERAL.
PLAZOS. Caguas,
-P,
R-
j