- SEMANARIO >» LITERATURA, CIENCIAS x ARTES DEDICADO ESPEWALMENTE AL. BELLO SEXO Mapagiiez, 17 de Guero de 1897
, lie
Bomas
ó
0 “e extratina
| Ñ
AA gua
preparada Por MONAGAS
Artícnlo indispensable en el tocador de toda dama. de : bondad con los mejores importaJcs del extrangero.
buen
fermacóntico: gusto.
Compite. en
- Belleza del cabello. . Le
obtendréis
ado
el
Agua de Quinina,
preparada Por MONAGAS
-
No mancha, estirpa la caspa y su uso continuado fortifica el cabello, detenienio su caida al par que le comunica un ar oma delicado. : —
DE VENTA.
C. J. Monacas Y €? y entodas las farmacias bien surtidas.
la
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na
>zo
o.
ds lectores,
Su _ procedimiento es es
O
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4
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AGENTE
“EN
Pa.
DE PARIS BLANCA:
Crónicas para LA REVISTA
PADEMOISELLE
Y
Bonheur
Alice
artista por
Jo (fué contratada como
M.
ACHA Marchand, director de Eldorado, - cómprometiéndose á pagarle mensualmente mil doscientos francos por cantar operetas. -
Mademoiselle
no solo
Alice Bonheur
es buena actriz, sino también deliciosa mu jer; y M. Marchand juzgó que exhibiendo las hechuras de la mujer
: ;
pudor, sino por sobra de miedo á que las . . ¿por honradas ! despidan del teatro El iniciador de las Evás teatrales— sezún ha referido Georges Montoryueil en un curioso libro—fué Lisbonne, el célebre Lisbonne de las visitas azademicidas de Achille Leroy, y de otras extravagancias.
podría sacar.más
- partido que oyéndola cantar. M. Marchand, que es un empresario convencido, varió el papel de la actriz, dándole uno sencillísimo; tan sencillo que sólo
consistía en salir á las tablas y desnudarse bonitamente
“Protestó la actriz.
3 e
El director, acos-
tumbralo 4 los déshabillés jalants, mantuvo
sus derechos.
Y la actriz acudió
á los tri-
bunales.
El papel que se me ha dado—arguye
Alice
en
Bonheur—consiste
cantando un couplet libertino,
desnudarse,
Es un pa-
pel depresiyo para mi dignidad de
artista,
Su carácter, que no tien= nada de artístico, consiste en. una exhibición á la cual no es
posible obligar á una joven que se contra _tó para cantar, sin que pudiera preveer semejantes
exigencias....
Observe: el lector que
- Alice
Bonheur protesta
mademoiselle
en nombre
de su
dignidad.de
artista, no de su dignidad de
E
hora de que se dictamine sobre ña. Porque son muchas las artistas ileran de ropa, no por falta de
JOrque; conocedora del medio amate en. que vive; ha. tenido miedo á la ... prada, fisa: del boulevard.
El templo fué un café-concierto de la Butte: la sacerdotisa, una muchacha rubia como las candelas y fresca como un ramo de flores recien cortadas, Blanche Cavelli de nom-
bre. Todo París corrió á verla, excitado: por una afección morbosa á escudriñar lo -
prohibido, y la desnudez de Blanche Cave-
Eva Ii vistió 4 muchos Lisbonnes ... La todo s 2 4 de la Butte arrastró en pus de sí 1,s Adanes
parisienses, llevando procesio -
nalmeate unas ligas á guisa de pendón. ..; Cavelli, répercutien-
y el éxito de Blanche
do de teatro en teatro, le dió imitadoras en casi todos los de París.
M. Marchand creyó, pues,
que recla-
maba una cosa legislada por el uso. la
“argumentación
Pero
de Alice Bonheur
no .
tiene, 4 mi juicio, vueltáde hoja ...ni sk quiera hoja de parra, El fallo que dará de tribunal preocupa vivamente al mundo los teatros, y se comprende
: el tribunal va
4 fallar-si lo que se alquila es el arte Ó la El derecho
de
Mademoiselle
Alice
Bonheur es tan perfeeto'como el mío si mé E E escribiera Lopez:
«Habiendo llegado á mi noticia los , de secretos encantosde usted, he resuélto acuerdo con: los redactorés de La REvIsTa
VIDA NUEVA Y yo sé cuál la causa
de tus suspiros es!
Becquer.
Sé—es en vano negar ! —que aquella noche
Mirabas inefable -
Ignoro qué visión arrobadora en la sombra formarse, que se inclinó tu frente
4 Viste ocultar su grama al tímido capullo;
- y luego al sol feraz Ce lamañana, lucir, ya rosa, .su perfume, ufana, del florido jardín gala y orgullo ?
con pensativo afán +
Vagando distraida entre tus flores en cierta hermosa tarde, mirabas á dos rosas que la brisa
¿No viste á la avecilla voladora dejar la paz del silencioso nido;
y con vuélo atrevido, cruzar la inmensidad con voz sonora
?
|.
unía en beso amante; y, más rojas que ellas,
te senti suspirar
Ya se expande el perfumede tu alma;
á incógnita región volar quisieras : a
Sientes perdida la virgínea calma es que llegó la edad de las quimeras...
' Sé que suspiras sin saber la causa;
y que candentes caen Jas lágrimas que viertes, sobre el libro no
que apenas te distrae; y sé que aquel bordado
está sin terminar.
* Vé: la iculdn de. ensueños. de la mente
con su encanto convida: Esla patria ideal, donde se siente;
El misterioso oásis dela vida 1. e
encontrar.á la maf
aen
¿co de sus zapatos.
3
no
Yo los envid - como ellos. Es
ya ¿qué me traer
soy feliz
Keyes”...
baranda del
enla
apo
Solo,
el hue-
:
bal-
-+con, distraía mi vista con la gente que cru-
escritas
las páginas
HE
zaba la calle
del libro de mi vida.
en el pasado
Dejaba
año todo un cementeriode ilusiones; y so- -
bre ellas, empero,
otras
se levantan
que
-1897 se encargará de resolver. «¡Ay! que las ilusiones del alma, hoy bellas. hermono sean
sísimas
amarillenta
mañana
ho-
...
jarasca á merced de los vientos
Augusto MALARET. Sabana-Grande.
Ensimismado en su idea, La que madura y exorna
Con visos de la certeza.
Al cabo de diez minutos
Y cuando á la casa llega, Saluda con parsimonia
A la referida vieja, A quien expone el objeto De su visita, así: “Vea
Lo que traigo entre mis manos: => Unas diminutas piedras
Que me propongo ablandar
Si usted ayuda me presta.” Préguató : — (¿De qué mudo? “on ahinco la longeva: Pida usted lo que le falte, Quiero ver esa rareza-Gustosamente el mendigo El ofrecimiento acepta, intervalos
Y entre cortos
CUENTO POPULAR Un
mendigo
caminaba
Con una mochila á cuestas Pensando en su desventura Y
llorando sus tristezas.
Diez horas consecutivas , Des que á la calle
Habían
saliera
ya transcurrido,
Y ni una mísera
perra
Como premio á sus afanes Llevaba en la taldriquera, —“Una
limosna,
decía,
¡Me mata el hambre
mas negra!”
los ojos de la
cara ¿o
-
Bastante arroz y ¿nanteca, Logrando con
- Poner
tanta
cosa
la ulla casi llena.
Después de treiuta minutos El
mendigo,
con
cautela,
Apartó la olla del fuego
Y pidió un plato á la vieja, Quien sin tardanza lo trajo -. Con una cuchara nueva, Y al hombre ls dijo: “ahora
Enséñeme usted las piedras.”
moneda.”
la inteligencia.
Y así exclama: es imposible Que por no comer me muera” Y al instante se le ocurre Una salvadora idea: 'Fuese á la márgen del río, - La sucia mochila suelta Y de entre las más menudas Escoje unas cuantas piedras. E
ajos,
tomates,
Y hartarse al hambriento deja
En situación tan luctuosa Aguza
Perejil,
pena,
—*“Dios le ampare, buen hermano, Le decían, no hay
pimienta,
Jamón, cebulla,
-—'Bajaron, dijo el mendigo, Al fondo de la cazuela.”
Y aunque todos le miraban Con
Pidió á la mujer, candela, Una olla, agua, sal, tocino,
Tutti contentta, enseguida
Fué á visitar 4 una vieja De las que, sino son brujas,
De las brujas son adeptas. - Camina el hombre y camina
No lo duda Con
la mujer
todo lo que cocido
En Ja olla el féiego hubiera.
Quedando de ello tan limpia
Cual de polvo y hojas secas.
os Las calles -y los pase :
torme
operación Después de la Transcurrida
una
> E
* Pr
Movió el mendigo las piedras Las cuales hicieron ruido.
Al chocar conla cazuela
Y exclamó, al-verlas tan duras,
Como dudando, la vieja:
—¿Por qué no se han. ablandado Según usted
—Porque
prometiera?”
le faltó la carne
- BLANCA, que venga usted á exhibirse desnu-
LAS ISLAS ROSAS
do en la playa de Mayagijez.”
(De Rromrrrx.)
A lo cual contBStaría yo:
y
“Efectivamente, amigo Lopez, tengo mis encantos, —aunque me esté mal el decirlo. Pero ámi me nombró La Revist a
ae
los tribunale Puerto Rico me darían razón, com s de. o los tribunales franceses la darán á la actriz. . Porque—prescindiendo de cier tas con-
*
*
pe E
EU o BES
E.
teatro de la Renaissance, Musa
Edmond
Heredia,
representada:
Haracourt,
ad hoc en
el
oyó el saludo de
por los
Coppée,
Catulle
Theuriet y Edmont
Mendés,
Kostand, cu-
aplaudidísimo soneto dice así:
“En ce temps sans beanuté, serle encor ¿0 nous restes, * pále,
Sachant descendre,
Ceindre un bandean,
un grand escalier clair,
porter un lys.- brandír un fer,
Reine de l'attitude et princesse du geste,
En ce temps sans folie, ardente, tu proteátes ! Tu dis des vers. Tu meurs dVamour: Ton vol se peri. Tu tends des bras de réve, et puis des bras de Chair, Et quand Phédre paraít nous sommes tous incestes, Avides de souffrir, tu Pajoutas des coenrs; - Nous avons vu couler—car ils coulent, tes pleurs! — Toutes les larmes de nos ámes sur tes joues.
Shekspeare aux bagues dle tes duigts.”
partes la muerte de madame
en
toilas
Furtado Hei.
ne, cuya vida era ejemplo de obras miseri_cordiosas.. o Y a estaba ciega, y' no pod ía ver las .. — penas; pero las olfate aba, como olfatea el de San Bernarde al homb re per-
Pia
A
dido en las nieves de los “ve ntisqueros, como él, corría 4 salvarlas. .
y,
ce temps sans beauté , Que dijbelleza moral o el poeta
en
vé un caso raro de |
17 de
a
Diciembre.
Luis
BONAFOUX.
(Prohibida la reproducción)
ides
inuestra vida,
tan
están
interesantes de
en
mí pasand
o - La noche-buena fuéme ind i: ferente ; los demás dias en extrem sin sentirlas.
diosos.
o
,
- 1896 se aleja sin haber
odido realizar
los sueños de la juventud, siones,
que
fueron
—
fasti-
Y cuántas ilu=
bellas, hermosísimas,
>
soñ hoy amarillenta hojarasc a á merced de los vientos | : - El sol, cumpliendo su co mp romiso diario, había pagado su tri but o. Las sombras de la noche empe zaban á oscurecer . la tierra y, como
lcónde mi casa veía chiquillos que, satisfechos, unos ju'gaban muñecas, y mira ban e cuantos
Con estas alegrías de la esc ena fué 4 mezclarse la tri causó
OS últimos y primeros dias del año, esas efemér
de cost bre, salían lus estrellas por su mismo orientum e. Un aire fres. co que corría me recordab año, _ Era el atre de los reya la navidad del es. ds esde el ba
Mais aussi tu sais bien, Sara Tu sens furtivement se poser,h, que quelquefois quand tu jones. Les lévres de
steza que
e
NOCHE DE REYES.
*
de flores que fué levantado
la
Manuel FERNANDEZ JUNCOS ,
barato, -
La gran trágica, sentada en un. tron o
2 :
Nueva vida
franca-
La coronación de Saarh Bernhard t Y la muerte de la señora F urtado - Heine han sido en esta semana -.los más importantes * acontecimientos del mundo femenino.
=>
E
os darán las islas rosas, Bañadas por los clásicos Leteos.
sideraciones de moralidad públic presario de Alice Bonheur, puesto a—el emá pedirle “mente, iba á resultar eso muy ,
:
Donde en coro feliz can tan las aves, Y al olvido y la paz pre side el sueño. ' Partid, todos partid los que implacable Sintais de la Neurosis el veneno:
Y si pleiteábamos,
luna ¡;—y,
q
Os presiente mi amor, vírgen Bosques frondosos de perfum es playas, es llenos,
.”
pedirle la
.
lia nave 6 frágil barquichu elo, Que aún se encuentran Amé ricas dormidas" Y Eldorados por nadie des cubiertus. -
BLANCA para escribir crónicas en Parí s, para lucir mis bellas formas en la playa no de Mayagúiez
cosas, podría
al
Partid; del mar sobre las ond as bellas, En amp
cielo señalando los tres Sañtos
con placer la conversación
e al." eyes. Vía
de la aleg
'“Los' niños. són siempre: re ra: yos de sol,” escribía Vic tor Hugo. chiquillería.
en un
cielo todo azul.
llega el ruido del mundo,
.A
sus
Viven
oidos
no
¿ Qué me traerán los Reyes? o oí preguntar. Yo quiero bombones, dec ía uno. Y yo juguetes como éstos, gritaba Otro - Aquél ínt
imo coloquio me kh mar impensadamente con lord By tima
que estos pequeñuelos en hombres!”
se € me
La charla cesó, dormirían Pensando en y los 1 lo que: E JS A y ape
Pg
NS
e
Eva
8 E
con
el
se:inclinan los ánimos á lanzar estas ó se-
E imágenes que
nte conmovida. _mejantes exclamaciones:
Natura contempla hon
Con la electricidad hablo, alumbro
¡qué mujer tan progresista ! ¡qué alma tan noble! ¡qué digna de imitación: La Revista BLanca se enorgullece hoy ostentando en su primera página el retrato de tan distinguida puerto-riqueña.
y des-
morono las montañas, Con el pincel copio los paisajes de los
campos, las
nubes
del
cielo, las cascadas, los torrentes. la luz del sol y el centelleo de un rayo de luna sobre las ondas del mar, que es mi esclavo
en el éter
los
geroglíficos
de
Leo
estrellas y
LOS
subyuyo con una varilla el rayo que mata. ¡Podo
lo puedo!
Soy casi un
A mi distinguido
Dios.
TANDO
EL TIEMPO
fico
Yo Pr e sa; pero adivino adónde
la isla misteriovoy. Tu poder,
por las profundidades
cielo;
todolo que
creas con
tido afirmar hoy, que las enfermedades infecciosas son producidas por elementos vivos, tan pequeños que se designan con el nombre genésico de “microbios”. Usted cariñoso amigo me aconsejaba estenderme algó más y tratar sobre las ca» .
las arrojo á la sima del olvido; y de todo lo que fué tu grande obra, no dejo huella ninguna. ¡Quizá dentro de algumos siglos un Dios, en verdad que eres un
Dios bien
pequeño, cuando llar mi grandeza!
ries; pero yo obedecia á un sabio
aun no has podido humip
del buen doctor Sancho que me
ocupa, porque todo lo que
É—— >
leer más de cinco minutos
CLICHE
del que
clase
darle un folleto de la
nos
fuese hacerle era mucho pre-
:
tender.
Hoy más en condiciones, y ayudado por la lectura de los trabajos de los repu-
¿
4 Hubo un instante en Mayagilez en que se dudaba del éxito para el alumibrado ados médicos A. F Plicque, Jaen Louis que espléndidamente ilumina hoy múestras - Petit, Galippe. Harris y otros, con mi escalles, paseos y edificios dos, debido,
periencia de siete años de práctica, bien puedo sin¡temor á cansar su atención, dedicarle estas cuartillas; seguro de que uno verá
públicos y ' priva-
por una inde, á la
crfsis eco-
nómica porque atravesaba la sociedad, que no pudo colocar todas las acciones; y por otra, á la glacial indiferencia co'n que cier-
usted en ellos otra cosa que el deseo vehemente que me anima á demos
no ha sembrado usted en terreno :
tas prestigiosas individualidades miraron el proyecto. Tal estado de cusas llegó 4
conocimiento de Zoté prendimiento que ]
que sus lecciones han sido provel
y
grande mi deseo, de ser útil dad.
con ocho acciones, ments Raso tarios,
1
Les dientes son causa de i
.
- ——Laprimera dientes es la form; ;
Do,
:
po
form!
A
414
*
consejo
decía era
preciso ser muy lacónico con el público al .
QUIARA.
NUESTRI
aprecia-
es permi-
numerosas de los patólogos nos
Arranco tus ideas del cerebro y
... ¡Si eres
con los
como anuncio, comenzaba por aconsejar el cuidado de los dientes puesto que “gracias á las observaciones cada día más
tu has amon-
habré barrido hasta tu nombre!
fo-
En aquel pobre folleto que daba al público
tonado en eternos siglos dé lucha y desesperación.
pequeño
Vera y Quiñones; al primero de estos debo muy sabios consejos y conservo como reliquia su estimadísima carta «nimándome á emprender una escursión por la Isla.
Todo lo puedes, dices, y, sinembar-
go, yo destruyo
publiqué mi
“La Boca” consulté con usted
bles é ilustrados doctores Sancho, Lopez,
mármol estatuas que imitan tu propia hechura; trasladas al lienzo las bellezas de la creación y reinas, en fin, sobre todas las cosas.
.
amigoel Dr: Vivoni
á la vez que lo hice
con ser tan grande, ya lo fralo. Sr más fuerte que tu. Bus se con el pensamiento del
DIENTES
*
tas y creo
.
sentidos, porque
le mis ensueños,
y la veía cerca
Mariano RIERA: PALMER.
enga-
A
Volveré á ablandar las piedras.”
; hasta sentía el alien-
>
halan las lores sus perfumes,
ió
to que se escapaba de sus lábios como ex-
las ideas el
e.
————_ > ————
letamente
ñadora la ilu _yo hablaba co
O, Gi. >
Prepárela usted: mañana
a -
Para echar á la cazuela;
7
q
lA TI
Y entre delíquios á mi alma viene,
Y me deslumbra con su luz tan pura!
¡Quiéreme! pues yo juro amartéComo se adura por la vez primera
uno de esos hermosos dias en que
la Felicidad parece
como que
aban-
Con ese aljro que no sé pintarte
Con los destellos que mi amor quisiera,
HAdona su palacio construido allá sobre el monte de La Dicha y adornado con ilusiones de almas
sensiblemente
das, creí que esa deidad
Ella
por quien tanto
velo que
paulatinamente
cubre
mi
la. mano,
una
porvenir,
que
la magnitud
£
20n de nuevo
más dorada y de
porque.allí
re-
. tad decisiva, enérgica, imperiosa: la de ser feliz. Natura con todas sus galas adornaban el ideal de mis ensueños y embele-
busqué aprecompañera,
y la flor, la vida, la esperanza,
el encanto,
ser tan dichoso, eras...... tú.
:
- - -¡despertaré! Enrique
—_——
es-
decirle con aquel acento de que ama por primera vez y será mi vida, amor de mis
la sorpresa
mi
Aun sueño.
sado ante sus encantos que desafiaban las
4 sus plantas y
á
el alma de aquella modesta casita de aquel
una volun-
ue caer
impelía
vd
Vuelto de miasombro
de inefables venturas. Alseducirmeelalma,
plendida aurora, no pude menos
Enuno de esos tuve
suradamente el rostro de
cielo
aulas y los matices nacarados de una
me
de reeonocerme.
más dulce ilusión que un ser inocente, be-
había impreso en todo mi ser
de un
firmamento cuando luce sus millares
dores.
cora-
prometía en un
*
acercarme á la casita—palácio, y tenía curiosidad por conocer sus dichosos mora-
despertaba á la voz de la
llo y compasivo me
.
dilatada que el
se amaban con locura, Poderosa atracción
mi en brillante realique mi
unbi-
sidiá la felicidad, allí vivían dos seres que
E
Soñó que era amada.
dijo,
inteligen-
refulgente que el sol, más
pa
2.
me
jo del arte, de un obrero de la
léjos,
soberbio palacio, y la veía
fuó
penetrara en elia por las dilataciones que 005 la falta de atmósfera le ocasionara, soñó lo que voy á relatar y queá pesar de ser un
“sueño tórnase para
del
lontanan-
mi vista y alcanzaba
las facultades iuvisibie
le-
en
á-lo
que nos dá el ambiente en que vivimos, y estrellas, y todo ¿porqué?
como aletargada por fluido
y
punta
cia; más esa humilde vivienda crecía ante
nio que nos trasporta momentáneamente á distancias dilatadas, y subió, subió á
¿perdiendo
de
za una humilde casita, el hogar de
oculto géque
tomó
pausadamente
Divisé
mira:
tan inesperadas que cual efluvios del ambiente llegaban hasta mí con halagadoras
incomensurable,
me
vantando
venturas
esperanzas, volóen alas de ese
-
¡Porque es tan grande, cual mi fé que espera Y
enamora-.
sión, y mi fantasía al choque de
>
¡Porque es tan bello, como tu al mirarte!
suspiro me dirigía una mirada de compa-
una altura tan
A
« Hay algo en ti que sin cesar me augura Tranquila dicha que á mi amor conviene,
e
pe
ds
cerebro; y con amante súplica así le decía:
.
ao
AX
sIMON.,
A
CROMOS EL HOMBRE .
Yo no puédo
talas
decir de donde vengo
A
mis pupilas, la luz hi- ni adónde voy; pero mi poderes grande en is sentidos, las flores ' el mundo. ¡Si! Domino á las fieras en los 'me.p s galanas y olorosas; al- bosques y á los peces en el mar. Las'olas go así como, un coro > de música angelical respetan el bajel en que navego, y mi voz.
_recró mis oidos, y creí que volvía al mun-. hace temblar hasta las águilas que surcan do dela realidad. Era uma sujeción infi-. el espacio. Imito el canto de ki : ar el alma volvía á vuelo con el pensamiento á reg 4
dl
250
aquí
El
Negrón
Riera Palmer,
:
Zevo
Gandía,
Sanjurjo
(José),
ce
Ho:
E
Quiara.
Gonzalez
Malaret —Augusto—M atos nión
O,
:
y Gauthier—Rodulfo.
Bouix
na á más cumplida enhorabue Nuestra ; : Blanca, La Revista por su bello número de Navidad. E | NU»
| ?
La Revista
:
A
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RA 5 pp
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Mercantil
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ibiré
de die:
ae
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unta
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ap
E la
de
Y así me habló:
;
de Cristian, llegó á nuestfas: manos el pri-
a
- mer número de La Revista Blanca, corres-
pondiente al 1? de Enero de 1897. “Trae una elegante portada, bellamente dibujada é impresa en la litografía del
Comoregalo de Año Nuevoá -Bolentín. una: bonita los suscriptores, lo acompaña:
A
danza,
e
de don
Simon
titulada
Madera,
0 | Mis Amores. El texto contiene trabajos muy
a
1n
o
E: -
tas, y está. ilustrado
tro amgo
y poe-
Riera Palmer
retratos,
“Tiene
el
nues-
director,
una ver-
)
el ta-
Siempre
Y salió el poeta-notario
de la triste Y.... >
alcoba, y el enfermo cerró los 0jOs,
¡siguió soñando! ...... Las deudas del corazón no son á plazo fijo: el Juez de la gratitud las prorroga ¡mento de nosotros saldar.
$
Era víspera de los santos reyes, día que |
despierta en nuestra imaginación un. mundo
de reci.erdos
Yo debia estar en vaje de'ño
tus de
poñtrie el sdl
: :N Pe
an-
lo
héreme 23%
ies Pb mélio AURA e el cual oy al vedetible jamélgo sobre
á la señorita Adela Astol. : Son laudables los esfuerzos que hace
as UA A EN Ño Pédro me había didlib. ++
de un organo literario, digno de su adelan-
pues se solibiard añ tobo.
pués, que nuestros escriutran á La Revis:a Blanca, y la isla E
Y como ño Pedro era
z onda
!
cou una suscripción
es son nuestros deseos.
o
cabalgaba
mi molida
humanidad,
,
del aládad «Haberái cojetes aries
AM
A s preciso,
-
indefinidamente. Ya llegará, pues, Riera amigo, el mo-
dadera novedad: el retrato del inolvidable Monge) y una (José delM" mismo, Derechoinédita «Justo: poesia A dedicada la empresa de La Revista por dotar al pais
a
pos 2
con: A
_primero:el de su gallardo
ES
di-
bue-
2o8 de, nuestros primeros prosistas-
a-
E
lento tuvo que luchar para vencer.
señora Rivié
:
> AS
á su con-
escritor.
— Valor, compañero!
Por conducto de su distinguida agen-
te, nuestra respetable amiga
coa
: aquel- que en Y aquí. está el joven Cierra ocasión, por cierto memorable, viéndome enfermo y triste, pudo contemplar junto á su lecho abandonado. la atrayente ictón
:
a
el 518 y la prosa, Besar
curso de las letras estando en camá y con ej Animo abatido profundamente, y al ver : . s redactada la bieñ la firma que autorizaba
Bogrigues, Vi de p “e Abg 1vi8rn. O A Angelis, Sama, Valle Ati'es —Francisco— —Pelegrín—Bran, Victoria Monge, López Ceste
ye an php
Y
Coll y Toste, Casanova; Rodríguez Ca-
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ad
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pzas de ero pa
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Banda
La Revista
A
texto ustenta.las A
Bonafoux,de Diego, Ana Ruqué, Domínguez (José de Jesns), Róura y (Orven,
- brero,
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-
:
E
_Paurto-Rico.
en
PARA
»u- género,
en
realizado
ROSARIOS —
mejor de
hacen de dicho número “la obra
cuantas se. han
108
-—
for,
de las hojas como el perfume de una
to
remune-
>?
no le
gugustaba que que le lea a dále ¿con
tr6pi cía, tras mil uelas á mi-ro batey de la casa de: mi anfitrión.
al
-
:
y dis-
hombre. estaré—dfeleal santo endén
manganillas, yo, dále que
pro
NS
Ss
llegué : .
—Hospédese —dijo, un chiquillo em-
:
_absesos adeno-flegmón ú osteoperiostitis.á
que En estas afecciones tan comunes apar a: diario vemos, se halla la lesión en el ya sea piorrea alveolar ó dentario; to carie, desde donde parte la infección.
.mayor parte de,
las formas
La
subagudas
e en muela cariada les he curado su] fiebr muy poco tiempo.
y
Continuará
Ó
LA
de lesiones tan fu-
La asersion que
tiles en apariencia como la carie de un diente. la periostitis alveolo-dentaria se petproduzca frecuentemente marcada turbación de la salud general, no debe sorJus hechos de ese género no prendernos. La forma son tan raros en la práctica.
más frecuente es
casi siempre la forma
desperezamiento
y la misma
crónica en que todos los accidentes, fiebre perturbaciones gastro-intestinales, fatiga,
caquexia,
PRENSA
RICO ACUINALDO
agudas, subagudas y
“ crónicas para evitar todo ' error de diag nóstico. La segunda forma de infección de orígen dentario, la general, es al contrario, mucho menos conocida.
3
k
e
e crónicas de las osteoperiostitis y sobr s, ñosa todo de las adenitis pueden ser enga pero basta estar prevenido de su existencia para proceder á un examen minucioso del aparato dentario en todas las afeccio-
nes peri-maxilares
Arturo BLAGGL
El Noticiero A Grata sorpresa Pos ha:traido el
nú-
Director,
don
mero 25 de lla Revista BLANCA con que obsequiara el día del Año Nuevo á sus fa-
vorecedores su
¡lustrado
Mariano Riera Palmer. " La edición extraordinaria es induda—
blemente el más (rico aguinaldo literario numerosos cerseá sus que ha podido lectores, pues en sus
treinta páginas
bri-
a Nan primorasaptente el talento y la plumsu de nuestros escritores regionalistas, y á
frente, con el retrato del amigo Director de la interesante publicación, los retratosla tambien «le varios colaboradores y el de
señorita/ Utuadeña María
Sureda.
Ade-
regalo evolucionan lentamente sin sospecharse. más toman parte del espléndido es Más raramente se observan infeccio= “una danza para piano titulada Mis amor ra. : Made autor es don Simón cny nes de marcha aguda; pero estas infeccio exsu de n razó en as Ese bello conjunto lo completa una nes importa conocerl exquisita impresión en escogido. papel satrema gravedad. tinádo y dos portadas elegantemente lito —1*— | fadas. “He visto, —escribe el doctor Jean : graf Vaya, pues, nuestra cordial felicita-ois Petit, —una infinidad de
tumores en
_quijadas, que habían sido tratados lar-
y
ción lal distinguido compañero
tiempo con cataplasmas y emplastos, sin
ltado y
obtuve
la curación
wince dias haciéndole ao
en ocho
arrancar al en-
una muela que tenía afectada por la Seria inutil recordar ejemplos.
gran puñado de gracias por su valigsoaguinlaldo. el cual tiene ya su sitio da PPe-. áfico ferencia en nuestro estante bibliogr
puertárriqueño. :
OS
Be; no hay quien no los haya ob-
práctica; pero lo que sl adfiebres regulares o irregude frio, acompañadas de .
ó
Riera y un
La Democracia -
Hemor
recibido el número extraordi-
vo por nario publigado el día de Año mue nuestro esltimado cólega LA bcarie de un diente. PR la quininaá en- BLANCA, del Mayagúez. da impresión, 1 “Bnen papel, esmera batacados de una
con esputos hayan si-
va- - tura variada y escogidisim ginas, retratos de escri iforentes forextraer una ños y algo chic, Salgo es
ola durante
Sn
359 ==
óme
éste la
:
todo está muv bien usted
á
le gusta esto
plumástico y que entiende en
el Don
Ricardo.
por una
parálisis
siendo
é escenas
mortal.
¡
¡qué
manera
tan conmovedoras!
versación ?
de yen-
cer las 'asperezas de tan difícil papel! Indudablemente Ortega es un actor
—Pues ya, lo creo!
Y don Pedro, alegre y satisfecho, gri-
que merece la corona de los elegidos. Sele aplaudió mucho y se le hizo sa-— liv repetidas veces al pálco escénico.
pulmón : vivan los santos reyes! vivan! -respondieron todos. añadi :
tó á todo ¡Que ¡Que Y yo
»espausivo, juer-
Jovial,
guista y maniroto en el primer acto, apare- . ció en el segundo viejo, pálido y herido
don Monche? —¿Que le ha parecio, Y
que diremos del Sr. Ortega? Bordo
¿Y
habló:
Que
su
quien el público estima y aplaude por talento artístico y p or su salero.
la hospi-
¡CAMALEON! noche del 14.
-— Viva el señor Comisario del Barrio, y antiguo miliciano, y rico estanciero don
escaló la escena :
la
Nadie esperaba tau graude sorpresa.
Pedro de Soto Mayor!....
¡Que viva!-gritó la concurrencia. ¡Vivan los Santos rosarios!
Pues
señor:
óyense
los armoniosos
acordes de la música y cuando éstos espi-
ran ,aparece por delante del telón el Sr. Ortega trajeado de fracy nos dice que va á empezar la diablura-cómico-bufa Y dicho y hecho, y como por obra de magia, ¡zás! telón afriba y sale de una ha-_ cuba un viejecito cou una palmatoria,
de ivaaaaa!-añadieron.....»...
Y clavé espuelas á mi valiente jaca en dirección al pueblo , Ramón Maria TORRES. +
San Sebastián.
¡Buena
bla gangosamente, ríe y canta.
voz la del Sr. Ortega!, por que era este” viejo de la paimatnria.—Váse (como-4k segunds eu los dramas) y transcurrido un
AN 0
AAA
N la noche del dia diez del corriente,
¿ra
una escasísima concurrencia subró
escena, el drama de don José Eche-
garay, cuyo titulo es Vida alegrey muerte traste. La compañía del
una pica en Flandes;
puso
señor Ortega
porque
el drama es
- Edurillo de pelar. La comida allmirablemente :
“representada.
No comieron los actores
mentirijillas. Fuentes de carnes, ensaladas, bermouth-champagne, vinos, y hasta
E
marino.
Es una coqueta, si señor, y a%-
da mais. Mirase al éspejo, hab:a leconarramujan cho dengue y les la esquela que desde la calle. ¡Un amante barbián! Pues
bien, la pizpireta señora se canta una m9: lodia, sale y se trasforma en el
E
de
abajo
lo que se cuela en 'la habitación de da
Vamos, que
nada
públi-
diremos
queestá ¿ps siempre. queá gran sabe rosos , se escab de¡papeles
e
los
ñora Pildain, Bonafé . y € n.ensus: respectivos papele > IDÓS O o
Este
-
E
'engulleron de lo lindo y con arte; porque señora Ricart,
0%
y su cabellera rubia la mujer del otro, el
en el cantgor.
es muy dificil comer delante de un EY Cue ieneel estómago repleto.
ee
mismo marino, el mismo viejo, y €l mishase mísimo Sr. Ortega, el del frac. Marc el Otelo con su maleta, Y exhibe su garbo
me pareció que el criado sirvió á los co-
mensales dulces en almibar.
a
de
aparece un marino de voz potente, celoso gruñón á quien burla su esposa que es, e
amanto es un granuja, muy. pr
el aes¡Dulcinea de cabellos rubiós. - Lleg
el. y poso que es la esposa, y el amante marino, y el viejo y el del frac y Se arma la de Dios es Cristo. Suenan tiros, huye
¿la infame, persíguela el Otelo, oscapaite0óblura te y acaBlAPS ba“lamásdia meroso el amanAid chisto
251. A
huñándo las riendas de mi 'corcel indómito.
Eché pié 4 tierra; subí
trada, víme á Don Pedro, fumaso y revestido de
esa
seriedad
Y así, en versos lbfimabled. 6: indige:
precipitada=
mente las escaleras, y á la puerta
ribles—pero
deen-
en la personalidad de un comisario de barrio en toda regla, como lo era el incom-
.parable Don Periquito.
rebosantes- de religiosa -un- .
ción-—continúa el introito que dura media horita que 'nos parece medio siglo.
en boca,
característica
=
.
Sinembargo:
preciso
es confesar, á
pesar de todo, que para el alma del poeta, yo no sé qué de inexplicable existe en
aquel ritmo, acumpasado y monótono co- .
¡Don Monche!—dijo mi visitado. "mo el deprofundis, en aquellas notas, pro—Don Pedro ¡qué caminos!—exclamé longadas como un quejido, y que repercuabrazándole. ten en los aires con dejos melancólicos, —Tiene aigunos degreos: Hay que haciéndonos pensar en cosas muy tristes. dir deséchando, porque sino trayendo á nuestra mente, si estamos en Amén-Jesús!. el mundo solos, la memoria amarga del Pero Don Mon, alléguese ar soberao. Y penetramos en la sala. o.
Oo
rosario
cantado.
por
entre esas
abruptas montañas, ni puede medir en toda su extensión la religiosidad de nuestro pueblo, ni
la
poesía
que
sús costumbres
encierra, Vedlo sinó: A un lado de la sala, una mesa pequeña cubierta de un lienzo blanco; sobre
-la mesa, la imágen de los magos, representada por tres ginetes labrados de tosca madera, y encerrados en pintajarreado nicho, y en derredor de éste,
de
para ciertos corazones, los actos
una
Frente por frente del improvisado
al-
mas ale-
gres de la vida, traen, como secuela, horribles pesares y profundos sinsabores.
Y acabó el primer tercio, que resultó.
lo que dicen ciertos estilistas que quieren evitar en sus escritos, esto es: ser demasiado extenso. Y hasta me pareció extenso Don pe riquito.. : E
¿Don Pancho?
*
x
E
¡Vedlo acompañado de
'su magra consorte, ambos con
la risa
en
eieaoas
ta-
- ¡Momento histórico, . el moniento
de
alfombra * los labios, y en sus manos
- de perfumadas flores, alumbrado todo por el resplandor macilento de unas cuantas velas en contínuo chisporrotear. .
mortificante
¡Ay! yo no sé por qué estraños. Jl:
o
Quien no haya tenido ocasión de asistir á un
hogar vacío y el recuerdo dichas que huyeron.
zas de café prieto!
apurar el sabroso líquido!
:
.
Consumado por el café su turno, es de
tos en.los que— llegado el oportuno
ver á los viejos echarseen sus jamacas, y . echar en sus bocas las mascaduras, y es de mo- .
mento—se
coro
tar, vénse, una tras otra, dos filas de asienarrellenan
los
cantores,
abigarrado, inarmónico, que mata el gusto y nos revienta el tímpano,
Cada fila, por lo regular, creo que se compone de dos mujeres á cada lado, y en -medio de ellas, un
hombre
dotado
de un:
vozarrón tremendo, y al cual llaman la guía. . Llega el momento solemne: acláranse
los pechos; de modo inevitable,
todos,
co-
mo movidos por un mismo secreto impulso, llevan sus pañuelos hasta cubrir un lado de la cara, y comienza el rosario con el alabao.
«Alabado
y cosalaado
. Sea el devino sarcamento,
Que en tfise puso Jesús Por librarnos ,
q. sostento.”
admirar á las mozas y mozos del barrio, decirse al oido mil setretos, como la mielé del hibla, dulces, contarse mil pcia =
dirigirse miradas cuya espresión
se
oculta
entre la nube formada por encaas de *
JUMAaSsos.
:
Tránscurren dos horas entre charla incesante y escupir sempiterno, y al cabo de ellas, sigue el rosario con su segundo tercio; y asi, entre cantar á boca batiente,
tomar café del bueno, fumar de acordar los pormenores de
lo lindo y E
futuras
bodas.
canta el pierre en un vecino jigilero, se
duermen los papás, lanzan las 'fulgores últimos, y los tres reyes, desde su angosto. nicho, saludan la: aurora del nue“yO e.
-