Revista Htanca=—
La
de
mo
o
Ciencias
Piferaflura Y ÁRTES
Dedicado al bello sexo
—
Año 1.
—Qúm. 38 —
Bagagiiez, 11 de Hbril de 1897
Eantazres ==>:
Buscáronle el corazón ¡ Y el pecho estaba vacío !
mn.» : z
qx
¡Todo la.drestruye el tiempo!: Termina
a'S
-
:
Y en pequeñez la grandeza. 2
Ab
,
:
con la belleza,
Convierte en humo la gloria
a
»
js
0
0
?
:
_
d
ñ
|
2
ai o
En :
|
Cuándo la lucha se enciende
ee
a
corazones amantes,
| .
as — ” El dolor fabrica lágrim ; Para que el fuego se apague. Mariano
RIERA
PALMER
FE 23 1
«Después de morirsu hijo,
+8
.
on
*-'
que murió
A una madre
-:
3871 GRAN
UN
«¡Era un gran hombre"
SONETO
es
¿PARECE un hombre de genio:
útil para
bondadoso, fuerte, maguánimo,
0
RO
VIC
o
<
ES
Ria e
ojos, exclama:
llorosos
.
ES
los
y enjugándos
muerto.
ramente está
HOMBRE
<a r
Ads
as destructor, embota las garrE
Tiempo
tierra Su por enci- — del leon y haz que consuma la ¿vImillos os ra luciente; arranca los agud su €n ma del ecéano, dora con los rayos de de la quijada del tigre feroz y quéma de, itud mult la de tes fren les ión ¡lustrac propia sangre al Fenix «ecular.
todos.
Como el alba, apareciendo
rrama billante claridad, aporta una ideas, lráenos en tu vuelo rápido tristes y al s glo que le espera, cumple su misión: alegres estaciones y disson á tu antojo wata de engrandecer los espiritus; de dismundo inmenso y a el progreso Y eS gh Tiempo tuyas! del dese
minuir las miserias:
feliz si consigue que se piense algo más se sufra algo menos ¿1 reórs que le van á coronar?
Escribas,
le Wsilban.
Pues
de todas sus efímeras delicias 56'0 te proes: hibo el más odioso de los crímen la tersa uen surq Que tus horas, no frente de miamugo. que no traces ¿0 ella
Y
sabios,
dos le zilban a la vez,
tra algarab a. or o miniestro, le silban: “Si es orad
poeta. sin
El
ción!
sus
babean
y la
brazos. cou la freute erguida
sacude una an-
Y de vez en cuando
torcha,
les:
A
desiama
Eva!
glo
que á sus
piós y en
la oscuridad,
y rando al odio, aJumbra de reports E
nus
del
:
ias
ala
sveos.
go
entra
¡ rar90 54 , contempo Entre sus vivi . va sembrando racioñes 0 : ROS
viviettios
afrenta.
las
a
la a
en el
puente del navio:
para
doma los vientos y las corrientes eeinén la proa hacia distintos puntos, y, para lle: gar mejor al puerto, dijórase que se desvían de él El hace lo mismo, y oye vituperios
é imprecaciones:
la
igor aticha.
ne todo lo sabe, lo deuvuncia todo: si se dirige hacia el Norte, comete un error: si se dirige hacia el Sur. »e “equivoca : sl
d
:
se encueutra con la tempestad, e alegran !
¡cuánto se “**-
E
bar
dra
va
pado,
bien le sirve ie brújula, 5,¡ piloto, se asila los mariuos,
»
ty
A
A,
¿
4
E
-
involuntariamente
: En
de dice:
la
novela
segunda
¡Coro
En de
la
Mmisina
1S!
¿JUMP
corta
e
uea
columna,
colu
m le:m | wo de un jurado; “mie .e
1
e
<a
don-
2
putisté fnaglr eta. luase:
r.. gto fangio pudiste “¿Como Sa a ; linea uina Y ice
,
10%
ScasE En e: prosents milulero. las169 han" —silguIéubes
en la "> erratas
v recoge la Elny progreso e: el fin que pers.iguo * e]
¡6
de tus injul As
ERKAT
mirada
, ,. serena. contempla trauquilamente el ideal y persa
iempo
piedad
sin
Traducidode W. Sha: 3peare.
cruzado .de
pié.
lanreles, de
4 desuecho
caduco; cantos.
mientreS
embargo,
obra
mis predilecto vivirá eternamente jover:20 l
causa indigna-
falso, moustruoso,
absurdo,
Perono!
si
en coro: ¡Es
exclaman
es poeta, todos
perfeccion para las e lades futurasic
.
de
¡20
inmaculadoEn tu carrera, comoun
produciendo
e
pasar
déjale
líneas con tu yetusto cincel:
retóricos. la aristocracia. el populacho,sinietos-
di
:]
3 donde
en ,
|
.S
di-
1 la ciu
.
be darlo + luz ete ; adleasedel: ci der Oeste ynjur ado en la Ciud de:u bro miem
:
(
17% d linea Oeste ; he dado a E a i En A otro € pe usted -PoES un ló — > dice: e :uami, * Jóbe: 1 mlo pega untar oe em
ldi18:4 memh
. zo in Do Ad0m iov tziccióntros .
AS
Se suplica encarecidamente á nues
agentes de la Isla, que todo el importe de. las suscripciones á este Semanario que
Bajo tan enorme peso. al fin dobla la cabeza ; van pasando tus años y muere.-. Entouces la envidia, ese demonio vi-
tengan recaudado, nos lo remitan con toda. brevedad, para atender. á las múltiples Et atenciones que sobre nosotros pesan.
los ojus cuida de clavarlo bien en él ataud, escucha para espiar si verdadeseinclina,
gerán nuestra súplica, por lo cual les anti E cipamos las gracias.
gilante, se le acerca, la reconoce, le cierra
:
No dudamos que dichos agentes aco»
:
974
RA PUERTORRIQUEÑA
amigo, le , mi.ni..amigo,;, .. + Tranquilicesé ,psted 2 de, Caraman-ChiO
RO
A
2
UE
Fisiense, sino upa _adve-
a.clase de las q , «QuieSen ser títulos 4.4 cambiode sus yEnas títulos cua ren O sersobre las les piensa establecer un dotes, :
-
e
derecho «| proteccionismo, americano... La
un reclamo, Publicidad de sus. amoresse.es paga como cualquier otro, que adero París,á notautseo a línea; y París,el verd
“ocupa poco ni mucho de los devaneos de la princesa; ,como . tampoco se ocupa de las demi-monilaines que son en París Jo mismo que en todas partes, con iguales escán-
la
cuantoá
En
motas
dalos y con iguales
publicidad del duelo Pini-Thomeguex, per-, mítame usted recordarle que no ts la pri-
m'ra vez que se da á tales asuntos, así en Francia como en vtras paites.
el New- York Herald de huy
Vea
usted
cablegra-
con
mas relativos al famoso puyilato de los bo-
Fitzsimmons y Corbett, para el xeadores pugilato se labrico expresatente un cual > inmenso circo con capacidad bastante para
la muchedumbre Je ahciunados, que fueron trenes ue
de todas partes en
recreo.
No
el París artificial con er Paris que vive para que vive para dentro ; el el Paris que vive en el
hay que confundir el Paris verdadero; era, con e | Paris arís flotante, con
taller, pensandoy sintiendo, - Pur lo demás, alguien
lo ha dicho:
solo hay podredumbre y basura en el orí-
en de la vida, En medio del camino, bajo el sol, el putrefacto cuerpo hichase de hermosas existencias; las buñigas, sobre
los secós
yerbajos
ocultan”
maravillosas
Enla iutección del pus, y ¡ ponsoña de la corrompida sangre, ¿uájanse las formas que cantá nuestra ilu-
conjuntione s. en
sión. No preguntemos de dónde vienen, ni pot qué es tan bella la flor que echa sus
- raices en el iniiundo pudridero.
Asi París.
..;
No preguntemos por qué
és tán bella. Es bella... .. y basta.
Luis BONAF OUX
18 de Marzo.
E
Se
CREPUSCULO A m|
buen
>
amigo Andrés dl ari,
. Rojiza luz que se extingue;
sombra que avanza y s* extiende, agonia encantadora, nácimiento que entristece ; Primer beso que la noche
imprime al cielo en oriente, último esplendor del dia que brilla en ocaso y muere;
Murmurio armonioso y blando de cristalina corriente,
rumores de verdes hojas,
suspiro del aura ténue;
Vibraciones que del alto campanario se desprenden € impelidas por el aire lejos, muy lejos, se pierden ;
Misteriosa incertidumbre, vacilación que conmueve, conjunto que embriaga el alma
con su belleza solemne; No sé porqué al contemplaros mi corazón se estremece ! solo sé que en ese instante
en que las sombrassé acrecen,
Y en quela luz del crepúsculo pausada se desvanece, fuerza extraña y poderosa
mi pensamiento detiene, Como se detiene cuando
- me preguntosi la muerte
es principio de otra vida
ó eslabón de la presente. |
3. RAMOS BRANS
Íque NE
De bordo Blanca
por Venecia, por Florencia, por Roma. Ahora está en Farís, luego irá á España; y en todas paftes es aplaudida, mimada; y los
a
vera, ha pasado por. Budapest, por Viena, ee
La Revista
AS
Cronicas para
que nunca, paseando por la calle, como - bestia en celo, las malas vergiienzas de su amor adúltero. Y así, con su amante á la
e
44d
3873
STCY
escandalizado— de-
ciame ayer un señor
mora-
" lista —París está moralmen= te intransitable. Ese bailable Friné. del teatro Folies Ber-
gére, es una .vergiienza.... mujeres, casi ó sin casi,
en
trajes paradisiacos; una Ve-
nus al natural...
; luces de
Bengala
há-
bilmente combinadas para destacar morbideces. -..¡Qué escándalo! ¿Y qué me dice usted de las discusiones sobre
las
ventajas ó desventaja.
ne
de las medias
gras; sobre si tal ó cual color destaca mejor ó peor las lineas de la bién modelada
pierna;
sobre la preferencia
blanca, de seda,
floreada
de
y
la
media
bordada
con
color de rosa ? ¿Sabe usted qué bajos usarán las señoras este verano? Bajos á la diablesse rouge, bajos encarnados. Todo
rojo, en llamas,
como
el infierno....;¡Y
qué serie de trajes para lucutos
dia!
Traje para
el
mismo
ir al Bois de Boulogne;
traje para los saloncillos ; traje para comer;
traje para el teatro; traje para
¿Dón-
do vamos á parar con tantos trajes femeninos? ¡Y cada traje representa una fortuna Hasta los hombres se contagian. Ya sabrá usted que el príncipe Al-
bert de Touret Taxis gasta al año mil pesos en trajes;
tos pares
de botas, y así de
Esto es
. Roma
capital de los Snobs
quince
mil corbatas, doscien-
lo demás.
decadente, la
moderna
En aquel momento pasó un vendedor
de La Presse con las últimas
“Dícese que Dios al formar á. la criatura, tomó'un poco de tierra y soplo encima. No fué Dios, sino el Diablo, quien sopló á mi
madre para crearla”
Y de una mujer tan
abominable, cortesana casada, esposa infiel y mala hija, ha dicho Eugene Tardieu que no pedrá dar un paso en París sin recabar el homenaje de la curiosidad pública; que
París favorecerá sus amoríos; y que la multitud la saludará con admiración: Paris, amigo mio, sólo rinde culto al oropel.
Observe usted las ovaciones
Ville lumiére rinde á la actriz Anna
que
la
Held
porque ha vuelto de New- York con bañeras de plata, donde se baña en leche,. y con velocípedos de plata, y con un leonci-
llo que le regaló uno de sus admiradores la moral
no se fué
de Gre-*
cia, al ménos se ha ido
yankees.
Si
de París,
Ernest
Blum ha publicado una curivusa nota de una demi mondaine:— Pagado á madame X...., mi procesa, 500 francos.— Recibidode A . 1,000 francos para pagar dicha
cuenta —Págedo el mes de mamá y l: pensión de mi hermano,
bidode G.. 4
mi
familia,
165
para
francos.—Reci.-
ayudarme á sostener
1 ,200
francos. —Pagado
el
trimestre al casero —Kecibido el importe deA
...ceJ
y de T..
.—Recobrado
el trimestre del joven casero, que por ciertoes amigo de A ,.—Pagado á madame...., mi costurera, 3,000 francos. —Por haber dado celos
4áA...., 4]J..... yá Too,
para pagar dicha cuenta, 10,000 francos.— Recibido mi manguito de cibelina, cuyo precio ignoro.
¡ Lo
noticias;. y - besaba. el indanor !
compré mientras me
en letras gordas: Regreso de Rigo y la princesa de Uhimay. —Vea usted, ¡qué vengilenza | ¡Qué escándalo ! ¡Qué indignidad |! Esa princesa, fugada con un cualquiera, que vuelve á
— Sí, es un escándalo, siguió diciendo el moralista. ¿Y que -me dice usted del duelo: Pini- Thomeguex con asistencia de cuatrocientos y tantos espectadores? ¿ Dónde se ha visto cosa parecida? ¿No
vuelve?
iñoralidad y el escándalo ?
París, donde está su esposo....¿Y cómo Más
enamorada
y cocandalóa
a todo esto
un descocado culto á la
A
atrocidades
o
les dice
como la siguiente, contra su propia madre:
a
ciar con ella, y ella
e
reporters se disputan el honor de conferen-
876
Pe
que anía el salón en **- Porque varóbil'dn la puerta os con el dormitorio, DO: 'éncoutrábam
¡3
me detuvieron, y sobre todo cuando escuché asombrado pronunciar en alta voz el
¡ Pana-
siguiente:
sacramental: vocablo <<.
o
Tambien hay una flor que se intimida Ante el aura sutil; entre las hierbas escondida
Tambien
........-
partidor esperaba
és»
.
mañana, y el recon impaciencia que
abriera para: dejar. su artículo de fé. Lanzé una carcajada y me tiré de la cama al comprender
la realidad.
La violeta es asi.
..
.oo»o
¡Tudo
$ E
El rubor es asi.
ad
"detóovo!!.... ..
Se tiñen de carmin, en las niñas cándidas y buenas
Por eso la que guarda mis amores Tiembla
muda
ante
mí:
Porque así son las niñas v las flores Y mi niña es asi?
había sido un sueño.
Antonio F. GRILO, Enrique
SIMON ——
A
—
DE AMOR
SALMOS A
¿ELLA
ES ASÍ !
M....
Traducido por Don Carlos
Casanova,
1
—¿ Por qué cuando te miro sia enojos,
Y me voy hácia tí,
Bajas al suelo tus tranquilos ojos 1 —orque yo soy ast.
—¿Porqué cuando despliegas entreagravios 'Pus labios de rubí. Cárdenos tiemblan tus amantes labios ?
. —Purque yo soy así.
—¿Por qué al mirarme con callado anhelo Te separas de mí, Y reclinas la frente en tu pañuelo ?
" — —Porque yo soy ass.
—Y por qué no me miras cual te miro Ss
Cuando me
miro en tí?
¿ Y por qué no suspiras cual suspiro? ¿ Y por qué eres asi?
— Porque en el alma mis amores llevo Porque los guardo allí;
Porque quiero mirarte y no me atrevo;
- Porque yo soy ass.
Mi corazón frenético la adora ella meadora á mí, Y ora
Yo soy el trovador que la enam la niña es ast.
“Sus mejillas rosadas y serenas
HEN1O
mi corazón tan gozoso como
] vuelo primaveral
de las
golondri-
primero de Mk:
nas, como el murmulla
. fuente cuando cae sobre el musgo y llega la: de rayo 4 ser arroyo, como el postrer estrella. dichosa de haber. contemplado, palideciendo, el sol matinal. Mi corazón
esplende
y
se
pregunta
hiesi acaso no «s el escudo sonoro, que,
para re el guerrero vencedor con su lanza ninme recordar la batalla; si mo es el mar so, mecido ensuna ola; si
no es el
misme
sol, si no es el caos, abismo de luz,
si no
es todas las cunas en que palpita el porqUe venir, y todo los brazos maternos mecen á-los recien=nacidos. Aduéñate de mi corazón tal como se ofrece átí; ó mejor, déjalo verterse €n otu corazón y penetraren él.como en herb sa llanura, en donde, temblando, as
rayos.
vibran los a
soy la vid joven, la temblorosa ané-
mona, todo cuanto flvrece y no espera
muerte al florecer,
"Pú eres el espacio, el vértigo
+
de lo
todo infinito, el torbellino de los ensueños,
cuanto hace germinar y vivir; eres el á te-la rrible Amor, cuya sonrisa impide
=
-
Es fundir en un a0a sentimiénto la
vi
voluntad y anhelode dos almas que nacen para comprenderse; es sellar con caracteres
q m
indelebles'un convenio que no es
pacto de
el
miento, con cuyo motivo besar no
es sólo
d
- la razón y brota directamente del sentiAS
fidente colocado en uno de los extremos del salón, lo que impedía que la numerosa/ concurrrencia que á la espléndida fiesta
sona ú objeto determinado,
culto 4 Baco en la sala contígua, pudiese
adorable desvarío.
—cuando
¡Bésame con el beso
pétalos de sus labios entreabiertos,
los
.c..o
lo que
sus brazos alabastrinos, y
me
Dicen
que
fué una
conmoción.
eléctrica
aplicada
besó en
¿Por ¿Clase
de
una
inmensidad
q por perder la razón había ni
conocimiento
de
les que
había limitado
4 contemplarla,
como
me
se
contempla y acarician esos sueños dorados
que existen solamente en las profundidades del alma, 6 .en:la
artista!
Debí
ponerme
creadora
.
muy
e?
t
ecoon.
y comprendo ,sús
sus 'salutacionés en
que impera
bese
del
al saludarse se
:
altar, y.
besaram.
á los fie-.:
¿Qué
del Espiritu Santo, cuando prohibió estas
me
fiesta
C
torpe fué el pontífice Inocencio 1IT, y que mal tradujo á los que hablaban por boca
besado? -¡ que
y durante la
....o..o..
los santos padres recomendaban
unían áela para atreverse 'á cometer. una acción que ella misma quizá no hubiera podido justificar! Aun ignorábamos hasta nuestros nombres,
..
.
_En el rito de la Iglesia
mo-
relaciones
o
entre nosotros, existe el
-
qué me
o
de tu boca, -
del amor.
choque, no;
Fué, una corriente
á
dinamita. ¡Casi estuve mentáneamente!
un
fué
a
acción de gracia, el beso ha.formado parte de todas las creencias místicas, y se ha constituido un culto especial en la religión .
la acción de besar, es cho-
no
ooo
Así dijo él poeta,
los astros al enviarles
la boca. car, pero aquello
:
mente del
pálido, porque
los latidos de mi corazón subían anudando
mi garganta, é impidiendo la' libre respi- ración.
manifestaciones de simpatía,
so
de inmoralidad y escándalo? Mas . ¿cómo calificar el
bido?
pretexto E beso reci-
>... También los asesinos de César le be-
saron antes de sepultar en su
cuerpo
los
agudos puñales que le privaron de -la vida en las mismas gradas del Senado
y
al pié
_de la estatua de Pompeyo; el infortunado
capitán' del matalor de Goliath asesinó 4 Amasa: despues de haberlo besado, y hasta el mismo Judas al entregar á su Divino Maestro tuvo la debilidad de besarlo.... '
Un nar de sentimientos $ ideas en Su beso me embriagóen tal extremo, - + contradas se desbordaba en mi ser: aquel que tuve intención de gritar, reunir: 4 los comensales de la fiesta, i1unque me Juzga: -beso que se interponía' para siempre en la sen loco, y delatar á la,que impunemente
“maltrataba mis sentiniientos despertando en ellos un
mundo
desconocido:
LODOS. --.-
0
EA
Recordé que según, el Código
Bos
a
penal,
el beso sin consentimiento constituye una” injuriade gravedad, y, retrocedí ante la enormidad del acto que iba á cometer,: porque al fin y al cabo, ¿qué es besar?
*
continuidad de.un vivir tranquilo y apacible como el que acostumbraba, que me -
de; emo. ceaía el derecho de exigir
p
ese
rar, y desde los idólatras que besaban á
de
acercando cari-
ñosamente mi rostro al suyo,
entregar
“anhelos, porque besar,es sinónimode ado
- permitía admirar dos hileras de blánquísimos dientes, me ciñó el cuello con uno
|
Mitad del alma mia.....--
Apareció una jóven esplendorosamen-
con
se gabe 'hacerlo—es
besar
al motivo que nos impulsa á cometer
:
te bella, y dirigiéndose hacia mi
porque
nuestro libre. albedrío, nuestra vida entera
momentos, rendía
en esos
- observarme.
*
la acción de acercar los lábios :á una pez-
E encontraba sentado en un con-
asistía, y qué
8
mayores espe-
ranzas, que causaba en mí un, vació Imposible de llenar, requerfa *tiná' explicación.
Rápido como mi pensamiento tomé una de.
sus manos para implorar una sola palabra
qué me hiciera comprender,.. :. cuando tres golpes dde eE parecer con fuerza
> |
AS
Mas vibrante que la copa que cae sobre el. mármol de los templos consagrados, resuena mi corazón; como una lira que
tiembla al inquieto juguetear de un niño, mi corazón se extremece. Esque ignora lo que el amor le exije, y exclama: “Ordena”
á tudo cuanto el amor no se atreve
exigirle.
ré cuan piadosa fué para mí la vida cuaniio me concedió tu amor,
Tu amor es más las
penetrante
ondas,
más
que
el
harmonioso
que su solluzo, más atrayente que su
cese de plañirse al verte.
Camina á la luz dal sol, para que brile con mayor luz. Siéntate á la sombra, para que se
consuele de no ver el sol.
Quisiera ser la tumba
pro:
para
que en
mis rumas floreciera tu amor
Quisiera ser la noche para cunvertirmc en dia á tuerza de amarte ser.eterno
para
cada
noche
morir de tu amor y revacer en él cad: aurora
,
2
Quisiera ser la nada para convertirme en el universo por tu amor. IX Deja pasar los dias como:esos
Ce aves que
se saludan
con
y se olvidan al instante Deja pasar los años
vuelos
una
sonrisa
Sonrie para que los hom-
Eres mi destinc, y siegas mis dias como una suntuosa cosecha, Los llevas través de la inmensidai de tus sueños,
Deja pasar los siwlos como el agua de
los rios, siempre movediza,
siempre seme-
la que
no
á y
mis dias se adormecen'en tu sexo, como las olas fatigadas en torno de la nave. que las separa,
: X!I
¿
Mi amor es como un do por los relámpagos,
Mi amor
cielo
como
de oro destrozada en barquilla despedazada
desgarra-
un
brazalete
el combate, como por la tempestad.
se arrastra,
dando
alaridos
en mi curazón Con
gritos semejantes al
cuándo se oculta amor
el
sol
del
cuervo
en invierno,
se desespera.
mi
E
¿ Quién le dirá: cállate? ¿Quién le consulará en su dolor, para q1e duerma como tierno infante en los surcos ? .Roberto
como esas. nubes
en que retumba el trueno, y en la que no pensamos apenas las ha disipado el sol. jante, nunca la misma,
,
Arranca las flores para que su muerte
fundidad.
Quisiera
que
bres duden de las lágrimas.
Más tarde, cansado de vivir, recorda-
de
>
- Detente cerca de la fuente para
sea más dulce.
vHl
perfume
-
—
———
A
AA
SCHEFFER ——
¡No fo digo poz mal!
recuerda
las nubes que se volcaron «n ellas, HH Deja pasar la muerte como un extraño sueño, y no te espante su helado besa -
7
que no olvidarás nunca, pues Que nous reunirá para siempre,
Xx
)
sonrisa
ún sol
- Tú eres la que no sabe llorar, y sonfie
dolorida por haberme inmolado.
por
rara
nues-
aun en aquelios de índole reservada.
Por lo general, muestrase este indivi-
provisto de grandes apariencias dé
tio
A
y servilismo, que ocultan perfec-
tamente todas las malas mañas de ur so-
Recorre los inacabables senderos
pasos.
que
bez: estas lín as, lo insultaá Y. impune: mente y se entrometeen todos sus asuntos,
eternamente claro el oceano.
tus
un tipo tan vulgar,
sonriendo
de mi vida entera, como absorvería
- selvas, para que ellas gocen
Es
comcidencia se cortará unossolo de
atrajo
me
Tú eres la que se apoderó
,
la conocen perfectamente.
tros lectores ne no haya tropezado en su camino con semejante personaje. Escudado él con la muletall t que exica-
Tú eres la ¡ue me sonreías antes que Noli nacido, y cuya á la tierra ;
1
Rorurrs
de las
al ruido de
lemnísimo
malcriao.
- —Mire V. ño Fulano—le dice de buenas á primeras—V. lo que debía /de Jasel *
Y
877 A A Ha
Y
UN
bellos que embalsaman, florecen mis dolores y me parecen tan odoríferos como la
betas coronadas de flores.
ES? negra sombra de tus cabellos. joven tu de " Como el ritmo exquisito paso, la muerte huye ante mí, y me parece
tl
Parece tu beso un trémulo anillo que os. hubiera coloc ado
la suerte
labi
en mis
tu joven paso.
mí
en
yo mismo tu beso, tan hondamente
ha penetrado,
olvido,
el
temas
No
sumos la eternidad
muerte:
nuestros labios se unieron,
en ellos el esplendor q: todos los soles.
mi corazón ; la hierba en
palpita
re ha tornado celosos
HI
mi Caminas en la sol edad inmensa de
destino, y me parece q ue la
de los hombres,
muchedumbre
todo el esplendor de
con
tencia sus sueños, se espacia en mi exis
Soy
un
como
las
por
cielo cruzado
como
adelante,
aves, y tiendo los brazos una copá en que verterías la paz
embria-
gadora del amor. alma “Tus canciones tiemblan en mi lleno está antes de tú cantarlas ; mi oido”
tú te del ritmo de tus pasos en tanto que donde “ocultas aún en el lejano: hori.onte, sonrien las estrellas al ve r caer
a
Po
-sobre
tu
voz.
Anhelarían oirla 4 través de la mia.
-
cantus ojos, y mi voz no dirá jamás lo que
ta la tuya, porqué guardo en mí el silencio de nuestra dichá. a
pS id
a felicidad,
cambio mia, la que se desvaneció anteel es-
plendor embriagantede mi ensueño. | Como el lijero collar de tu airoso cuello, los-dias del pasado pasan ante mí, y
me parecen -collar. . :
transparentes
como
diría al triste invierno: ¿Porqué no ries al verme tan dichoso? Semejan las tumbas
alas de paloma, y mi alma es como el bra.zo de los vendimiadores. -No
doncellas.
á las
escuches cantar
Soy yo quien canta, y toda la natura re-”.nace en las harmonías de mis ensueños, y las fuentes fluyen más suavemente
cuando -
paso, para oir como deliro. VI bren
los
dormirás
agabanzos,
-
no
para
verme venir, para que pose en ti mi mirada como una flor, y pueda abrazar tu frente con mi mirada.
Dormirás para no ver palpitar mi amor como un alma en torno á tus cabellos y hacer una
clara aureola á tu radiante rostro.
para que tus ojos no dén
Dormirás
cerrados
envidia á los ojos
para
siempre,
paso.
VMm
ha convertido mis
Mi amor
+
alas en
ensueños y mis esperañzas en collares. Me:
á su conduce hacia lo que amo y me. deja toda una voz, y €s la voz que
lado.
Oigo
mano,
y es la mano
mi vida he ansiado apurar.
lijero «ser llevado por
tu
lijero
“selvas no se muestren celosas de tu
nuestra
felicidad que es lazy es paz. Soy el alma que me diste en dela
pe inmenso anillo. Camino hacia horizontes siempre claros ; los combates me parecen auroras; y
dicho de los muertos, y para que las temblorosas
Mas norevelaré lo que me han
Soy nuestra TM
eE
Y
si yo les dijera tu amor, el río y el murmullo del trigo temblarían al soplo que se es: de tu corazón.
mi corazón. gozoso. como que el: rosal ha disemi-
Dormirás á la hora en que se entrea -
1V
AS
AR
sus rayos
Los mismos rios sonoros, el murmullo acalladel trigo bajo la caricia del viento, rían sus voces, si les dijera cuan dulce es
capa e
tu frente.
v
nado sus rosas, mi corazón ufano como la ónda en quela luna durmió toda la noche, mi corazón ébrio como el sol que ha aspirado en el rocío el alma de las flores, mi corazón loco que encanta el amor, y cuya locura estrecha el mundo como un
temas la después que
no
y que
de
mecedor
No escuches cantar los ruiseñores, escucha
taSoy el éxtasis con que me has alen ido vert do y la locura que tus ojos han
en los mios.
el ritmo
como
tan atractiva
y Soy
mí,
Debo reservar su dulzura para
Comolas flores perfumadasde tus ca-
.
AA Cubriaga como vino nuevo que hierve en
un
que
Estrecho una
aguardaba
sendero luminoso
que me había desterrado la desgracia.
para
de, :
878 Mas vibrante que la copa que cae sobre.el mármol de los templos consagrados, resuena mi corazón ; como una lira que
tiembla al inquieto juguetear de un niño,
mi corazón se extremece. Esque ignora lo que el amor le exije, y exclama: “Urdena” á todo cuanto el amor no se atreve exigirle. E vit Más tarde, cansado de vivir, recorda-
ré cuan piadosa fué para mí la vida cuancio me concedió tu amor. Tu amor es más penetrante que el perfume de las ondas, más harmonioso que su solluzo, más atrayente que sú profundidad. «Quisiera ser la tumba para que en
mis ruinas floreciera tu amor
Quisiera ser la noche para convertir-
mc en dia á tuerza de amarte Quisiera ser eterno para
cada
noche
morir de tu amor y reuacer en él cad: aurora Quisiera ser la nada para convertirme
en el universo por tu amor. IX Deja pasar los dias.comoesos
Ce aves que
se saludan
con
vuelos
una
sonrisa
Detente cerca de la fuente para
Camina á la luz dal sol, para que bri-
lle con mayor luz. Siéntate á la sombra,
como esas
Deja pasar los siglos coms el agua de los rios, Siempre movediza,
siempre seme-
jánte, nunca la misma, la que
se
sea más dulce. Sonrie para que los hombres duden de las lágrimas. Eres mi destinc, y sieyas mis dias como una suntuosa
cosecha,
Los
través de la inmensidad de tus mis dias se adormecen
en
llevas
sexo,
y
como
que
las separa,
XII
á
sueños,
tu
las olas fatigadas en torno de la nave :
Mi amor es como un
cielo
desgarra-
do por los relámpayos, como un brazalete de oro
destrozado
en
el
combate,
como
barquilla despedazada por la tempestad. Mi amor
se arrastra,
dando
alaridos
en mi curazón Con gritos semejantes al del cuervo cundo se oculta el sul en invierno, mi amor se desespera.
¿ Quién le dirá: cállate ? 4Qiién le Aa en su dolor, pira q 1e duerma
“como tierno infante en los surcos ? Roberto SCHEFFER
nubes
en que retumba el trueno, y en la que no pensamos apenas las ha disipado el sol.
para que
consuele de no ver el sol. Arranca las flores para que su muerte
y se olvidan al instante
Deja pasar los años
que
cese de plañirse al verte.
—
——
A
A
———_—
as
¡Mo Lo digo pormal!
no recuerda
-las nubes que se volcaron «n ellas, Deja pasar la muerte como un extra-
ño sueño, -y no te espante su helado beso que no olvidarás nunca, pues qe NUS Freu- Pons nirá para siempre,
Tú
eres la ¡ue me sonreías antes que
hubiese nacido, y cuya 4. la tierra
sonrisa
me
atrajo
:
Tú eres la que se apoderó
sonriendo
de mi vida entera, como absorvería eternamente claro el oceano.
Recorre los palas
senderos
gocen
al
tros lectores ue no haya tropezado
en su
camino con semejante personaje. Escudado
él con
la muletill : que ejica-
beza estas lín as, lo insultaá Y.
impuúne-t
mente y se entromete en todos sus asuntos, en aquelios de indole reservada. Por lo genera!, mueéstrase este indivi-
ún sol aun
Tú eres la que no sabe llorar, y sontie dolorida por haberme inmolado. XI - selvas, per que ellas
la conocen perfectamente.
Es un tino tan vulgar, que por rara coincidencia se contará uno solo de nues-
de las
ruido de
provisto de grandes apariencias de idez y servilismo, que ocultan perfécnte todas las malas . mañas
de un so-
sio malcriao. - —Mire V. fio Fulano—le dice
mad primeras—V. lo -. debía
É:
/ bue-
877 Muerte que calme su
sed, y cuya. voz em-
|
» —. Comolas flores perfimadas. de tus ca-
bellos que embalsaman, florecen mis dolores y me parecen tan odoríferos como la
briaga como vino nuevo que hierve en cubetas coronadas de flores.
negra sombra de tus cabellos.
H1
Parece tu beso un trémulo anillo que la suerte
hubiera colocado
en mis
Debo reservar su dulzura para
labios,
mí,
y soy
yo mismo tu beso, tan hondamente
en
mí
ha penetrado, Soy el éxtasis con que me has alentado y la locura
que
tus
ojos
han
No escuches cantar los ruiseñores, escucha mi corazón; mi corazón gozoso.como la hierba en -que el rosal ha disemi-
vertido
en los mios, No
temas
muerte:
el
olvido,
sumos la eternidad
nuestros labios se unieron, de
no
temas
después y
que
Como el ritmo exquisito de tu joven paso, la muerte huye ante mí, y me parece tan atractiva como el ritmo mecedor de tu joven paso. v
la
que
palpita
nado
sus
rosas,
mo la ónda
en
quela luna
durmió .toda sol
que ha aspirado en el rocío el alma
de
las
todos los soles.
flores, mi corazón loco que encanta el amor,
MM
y cuya locura estrecha el
soledad
inmenso anillo.
inmensa
de
mi
hombres,
con
todo
el esplendor
de
sus sueños, se espacia en.mi existencia
Soy aves,
como
y tiendo
un
cielo cruzado
los
una copa en que
brazos
por
adelante,
verterías la
paz
las
como
embrid-
gadora del amor. Tus canciones tiemblan en mi antes de tú cantarlas; mi oido está
alma lleno
del ritmo de tus pasos; en tanto que tú te ocultas aún en
el
lejano hori.onte,
sonrien las estrellas al ver caer
donde
ros
; los combates me parecen auroras;
Soy yo quieñ canta, y toda la nace en las harmonías de mis
natura
re-.
ensueños, y
las fuentes fluyen más suavemente
e
cuando .
paso, para oir como deliíro,
VI 1
Dormirás á la hora en que se entrea -
Los mismos rios sonoros, -el murmullo
del trigo bajo la caricia del o rían sus voces, si les dijera cuan
ce
es
Anhelarían oirla á través de la mia.
Y
voz.
si yo les dijera tu amor, el río y el murmu-. llo del trigo temblarían al ana
que se es-
capa de tu corazón. Mas no revelaré lo que me han
dicho
tus ojos, y mi voz no dirájjamás lo que canta la tuya, porque guardo en mí el silencio ,a
X
Soy nuestra” misma. djelicidas, n uéestra felicidad que es luz y es paz. Soy el alma que me diste en. cambio de la mia, la que se desvaneció ante el es-
plendor embriagantede mi ensueño. Como el lijero collar de tu airoso cue-
llo, los dias del pasado
pasan
me parecen transparentes
soltar:
y:
verme tan dichoso? Sémejan las tumbas alas de paloma, y mi alma es como el bra.zo de los vendimiadores. : -<No escuches cantar á -las doncellas.
sus rayos
IV
de nuestra dich4..
un
. diría al triste invierno: ¿ Porqué no ries al
sobre tu frente.
. tu
mundo como
Camino hacia horizontes siempre clá-
destino, y me parece que la muchedumbre de los
ébrio
co-
el
la
corazón
ufano como
en
mi
corazón
en ellos el esplendor que ha tornado celosos
-.Caminas
la noche,
mi
ante
como
tu
mí,
y
lijero
bren los agabanzos, dormirás para no verme venir, para que pose en ti mi mirada como una flor, y pueda abrazar tu frente con mi mirada.
Dormirás para no ver palpitar mi amor cono un alma en torno á tus cabellos y hacer una clara aureola á tu radiante rostro. Dormirás
para que tus
envidia á los ojos
cerrados
ojos
para
no
dén
siempre,
.de los muertos, y para que las temblorosas
selvas no se muestren celosas de tu qero paso.
VII “Mi amor ha convertido mis alas en' ensueños y mis esperanzas en collares. Meconduce hacia lo que amo y me. deja á su lado. Oigo una voz, y esla voz que toda mi vida he ansiado apurar. Estrecho una mano, y es la mano que aguardaba para ser llevado por
que me CA
un
sendero
luminoso
desterrado la desgracia.
de
878
Mas vibrante que la copa que cae so-
bre el mármol de los templos consagrados, resuena mi corazón;
como
una
lira que
tiembla al inquieto juguetear de mi corazón: se extremece.
un niño,
Esque
“Ur-
á todo cuanto el amor no se atreve
exigirle.
VIH
.
ré cuan piadosa fué para mí la vida cuanio Tu
amor
perfume
de
es más
penetrante
las ondas,
más
que
el
harmonioso
que su sollozo, más atrayente que sú
pro-
fundidad.
Quisiera ser la: tumba
para
que
en
mis ruimas floreciera tu amor Quisiera ser la noche para convertirme en dia á tuerza de amarte
Quisiera ser eterno para
cada
noche
morir de tu amor y reuacer en él cad: au-
rora
> Quisiera ser la nada para convertirme
Deja pasar los dias como: esos vuelos saludan
con
Siéntate
á
la
' sombra,
para
que
se
Arranca las flores para que su muerte
sea más dulce.
—Sonrie para que los hom-
Eres mi destinc, y siegas inis dias co-
mo una suntuosa cosecha, Los llevas través de la inmensidad de tus sueños, mis dias se adormecen
una
sonrisa
como esas
Deja pasar los siylos como el agua de los rios, siempre movediza, siempre seme-
seo,
como
que
barquilla despedazada por la tempestad. Mi amor se arrastra, en mi curazón
dando
alaridos
Con gritos semejantes al del
cuervo
cuán o
se. oculta
se
le consolará
como
el
sol
en
desespera.
mi
-
le dirá: ea
invierno,
cállate?
su dolor, pira
¿Quién
q 1e duerma
tierno infante en los súrcos ?
Roberto SCHEFFER —
no
pensamos apenas las ha disipado el sol,
tu
á y
XI : Mi amor es couio un cielo desgarra- do por los-relámpagos, ,eomo um, brazalete de oro destrozado. en el combate, como
nubes
en que retumba el trueno, y en la que
en
las olas fatigadas en torno de la nave las separa,
se olvidan al instante Deja pasar los años
qe
consuele de no ver el sol.
¿ Quién
IX se
lle con mayor luz. *
amor
en el universo por tu amor.
Ce aves que
fuente para
bres duden de las lágrimas.
Más tarde, cansado de vivir, recorda-
me concedió tu amor,
cerca de la
Camina á la luz dal sol, para que bri-
ignora
lo que el amor le exije, y exclama: dena”
Detente
cese de plañirse al verte.
a>
A —Á
¡Do Lo digo poz mal!
jante, nunca la misina, la que no recuérda las nubes que se volcaron «n ellas,
l)eja pasar la muerte como un extraño sueño, y no te espante su helado beso que no olvidarás nunca, : nirá
para
Tú
pues que nos reu-
siempre.
eres la ¡ue
Xx
coincidencia se cortará uno solo de
nues-
me sonreías antes que
tros lectores vue no haya tropezado
en su
camino con: semejante
hubiese nacido, y cuya
sonrisa me atrajo
á la tierra
: Tú eres la que se apoderó
de etélha
'
sonriendo
i vida entera, como absorvería ún sol
mente claro el oceano. Tú eres la que no sabe llorar, y sonfie dolorida por haberme inmolado.
XI pasos.
personaje.
gocen
de las
al ruido de
.
Escudado él con la muletall 1 que ba:
bez: estas líu as, lo insultaá Y. impune-
mente y se entrometeen todos sus asuntos,
aun en aquelios de índole reservada.
Por lo general, muéstrase este indivi-
duo provisto de grandes apariencias ds candidez y servilismo, que ocultan perféc-
tamente todas las malas
- Recorre los inacabables senderos
selvas, para que ellas tus
Y. EDES la conocen perfectamente. Es un tino tan vulgar, que por rara
lemnísimo
malcriao.
mañas
de un so-
—Mire V. ño Fulano—le des e buenas á primeras—V. lo que debía /de jasel A
877
y”
E
Muerte que calme sy
briaga como
sed,
vino nuevo que hierve en cu-
en mis
yo mismo tu beso, ha penetrado,
y soy
tan hondamente
en
mí
No
temas
el
olvido,
no
sumos la eternidad
temas
después
la
Soy
como
aves, y tiendo
un
los brazos
una copa en que
gadora del
cielo
cruzado
verterías la
las
embria-
cantarlas;
en
mi oido
mi
alma
está
lleno
el
sonrien las estrellas al ver caer sobre tu frente. IV
v
corazón;
mi
la hierba
en
nado
rosas,
sus
corazón
que mi
en
mi
el
tu voz.
Anhelarían oirla á través de la mia.
y
si yo les dijera tu amor, el río y el murmu-
llo del trigo temblarían al soplo que se es. capa de tu corazón.
Mas no revelaré lo que me han dicho tus ojos, y mi voz no dirá jamás lo que canta la tuya, porque guardo en mí el silencio .de nuestra dichá.
corazón
corazón
ufano
durmió
ébrio
r
disemi-
1
co-
toda
co
el
sol
C
que ha aspirado en el rocío el alma
de
las
Í
mi corazón loco que encanta el amor,
un .
1
diría al triste invierno:
1
¿ Porqué no ries al
:
zo de los vendimiadores. No escuches cantar
: á las
doncellas.
nace en las harmonías de
mis
ensueños, y
re-.
cuando .
Vo:
EA
Dormirás á la hora en que se entrea-.
bren
los
verme
agabanzos,
venir,
para
dormirás
que
pose
en
para ti mi
nó
mira-
du como una flor, y pueda abra zar tu frente con mi mirada.
Dormirás para no ver palpitar mi amor
como un alma en torno
hacer una
á
tus
cabellos
y .
clara aureola á tu radiante rostro.
Dormirás
para que tus
envidia á los Gjos cerrados de los muertos,
ojos
no
dén
para siempre,
y para que las temblorosas
selvas no se muestren celosas de tu _Aijero paso.
:
Vi
cambio
ensueños y mis esperanzas en collares. Me
de la mia, la que se desvaneció ante el es-
plendor embriagantede mi ensueño, Como el lijero collar de tu airoso cue-
conduce hacia lo que amo y me. deja á su lado. Oigo una voz, y esla voz que toda mi vida he ansiado apurar. Estrecho una
llo, los dias del pasado
mano, y es la mano
pasan
me parecen transparentes collar.
Mi amor
ante
como
tu
mí, y lijero
r
Camino hacia horizontes siempre claros; lus combates me parecen auroras.; y
nuestra
Soy nuestra misma. Aa felicidad que es luz y-es paz. Soy el alma que me diste en
4
como
paso, para oir como deliro,
|
del trigo bajo la caricia del viento, acallarían sus voces, si les dijera cuan dulce es
ha-
que la luna
sus ray os
Los mismos rios sonoros, el ata
gozoso .como
rosal
las fuentes fluyen más suavemente
donde
hori. onte,
lejano
de
Soy yo quien canta, y toda la natura
del ritmo de tus pasos; en tanto que tú te ocultas aún en
mecedor
verme tan dichoso * Semejan las tumbas alas de paloma, y mi alma es como el bra-
amor.
"Tus canciones tiemblan antes de tú
paz
d €
el ritmo
inmenso anillo.
como
«adelante,
tan atractiva como tu joven paso,
y cuya locura estrecha el mundo como
de mi
por
n
l
flores,
de los hombres, con todo el esplendor de sus sueños, se espacia en mi existencia :
1
joven
la noche,
muchedumbre
destino, y me parece que la
exquisito de tu
la
paso, la muerte huye ante mí, y me parece
mo la ónda
que
HI en la soledad inmensa
negra sombra de tus cabellos.
t
mi
nuestros labios se unieron, y que palpita en ellos el esplendor que ha tornado celosos todos los soles.
Caminas
t
como
No escuches cantar los ruiseñores, escucha
Soy el éxtasis con que me has alentado y la locura que tus ojos han vertido en los mios. muerte:
==
bellos que embalsaman, florecen mis dolo- + Como el ritmo
labios.
mí,
Debo reservar su dulzura para
z
res y me parecen tan odoríferos
Il Parece tu beso un trémulo anillo que hubiera colocado
z
Como las Horez perfumadas de tus ca- .
y cuya-voz em-
betas coronadas de flores.
la suerte
A
ser llevado por
ha
convertido mis
un
que
alas en'
aguardaba
sendero
luminoso
que.me había desterrado la desgracia.
para de
|
Pos dosmuertos
O
a
— j Y el señor cura
—El señor cura acaba de salir Ce aquí. — Entonces nos iremos con
1 magnífico, se ostenta-
ba el féretro en mitad de
la iglesia.
Dios, el pobre difunto emprendió
taban
charlaban y se reían, como si
á dúo el Miserere, mientras el órga-
los borlones de las colgaduras
que cubrían las paredes, y se
estremecían
los flecos de cristal que circuían
paras, como silas
alas
invisibles
célicos espíritus los tocasen
go de Dios flotaba
allí, bajo á
de
los corazones
respeto.
— Espiral«s de incienso
indiferentes un vago temor y un mecían
esparcíanse por todas partes,
más
religioso
brotando
los
acólitos,
envolviendo
en olorosa niebla á los amigos del
pálidos y sérios, sobre
los Al-
la inmensa
inspirando
que
lám-
apenas:
bóveda,
de los turíbulos
las
difunto,
los escaños.
Por
los cristales de colores de una de las ven-
tanas, cerníase un rayo de sol que ba el altar é iluminaba
escala.
el rostro,
lánguido
y gnsangrentado, del Cristo que
moría en
la cruz.
A fuera, en el porche, mal envuelto en sarga negra y atado fuertemente á dos
varas infl=xibles, veíase
un
ataud,
custo-
diado por cuatro ó seis campesinos, absor- tos y mudós ante la grandeza del muerto rico. lJentro de aquel ataud yacía el ca_Qáverde un hombre,
de uno de esos bohe-
mios obscuros, que no han gustado jamás de los placeres de la vida, y que mueren de dolor ó de hambre en el portal de una casa,
con la resignación de los mártires. :
Cuando terminó la ceremonia,el muer-
to ¿lustre salió de la iglesia altivo, arrogan-
16,
orgulloso de su alta jerarquía en la tie-
- rra. El cortejo destiló por entre la multi. tud de curiosos que llenaban la calle. Mo-
entos después uno de los campesinos pre4 un molzavete que despojaba al lo de sus luctuosos atavios,
á buen
trote el camino del cementerio. Deteníase á veces, aguardaba 3 que sobre el féretro
luego, temeroso, avergon-ado, marcha cuidando de no
de
flores
y
seguia
su
confundirse con la
muchedumbre de enlutados señorones que aquel peno-
so caminar hácia el último asilo, fuese para
ellos la más grata diversión.
Al penetrar los dos muertos en el campo-santo,
los
enterradores,
-ansiosos
de
propina, corrieron hacia el ataud adornado
con argollas y filetes de plata, y le hajaron al fon:lo del sepulcro,erguid: entre árboles copiosos y cruces humildes, mientras el ataud forrado de sarya neyra, yacia ¡nse-
pulto al borde de la fosa común, 111 Muchos
dias rodaron
al
abismo
del
tiempo, y ya nadie se acordaba de aquellos dos hombres que tan distintos papeles habían desempeñado en el teatro del mundo.
Blancas
florecillas
brotaron
espontáneas
en la sepultura del bohemio; tristes y melancólicas, cual si sus tallosse nutrieran
con la savia de amargura que
I
música
á otra parte. : Como le habían arrojado de la casa de
aristócrata cayese una lluvia
no, de acuerdo con las voces, pedía misericordia con notas que parecían lamentos,
Ca
váyanse ustedes con la
Algunas coronas de cuñutillos y perlas se destacaban sobre el ataud, adornado con filetes y argollas de plata. A su alrededor brillaban las luces de los cirios como estrellas de oro. Tres sacerdotes revestidos con luengas capas de tisú, can-
Temblaban
difunto
que está á la puerta. —Sí;
MPONENTE,
?
los
dolores
más agudos y más hondos habían acumu lado durante una vida escabrosa, en el corazón
de aquel infeliz.
Los rayos del sol calentaban aquella sepultura; y el rocío de la noche temblaba sobre los pétalos de aquellas florecillas tan
pudorosas, que se estremecían cuando el céfiro las estampaba un suave y perfumado ósculo de amistad, Entretanto, el ángel
de piedra, de hi-
nojos en la cúspide del mausoleo, bajo las frondas de los árboles,
inútilmente
pedía
al cielo un rayo de sol para los restos del vanhidoso, que en toda su vida no se había acordado del Dios justo, del buen Dios, que reserva su misericordia
Y
para cuando las almas cumplen en la tierra.
su
castigo
su misión :
José. E. GONZALEZ QUIARA
379
era dilse pal campo; polque lo que es
aquí,
Sueños, delirios, falsedad, mentira,
-
y nolo digo pol mal, lo que V. Jase es gas-
Deslealtad y traición, y horror, y crímen.
Y pobre de V. si, en uso de su perfec-
Ciega la humanidad ! —Proscritas gimen
tal cualtos y adquiril malos vicios,
..paseo al importu-
to derecho, manda á
uo consejero; porque entonces éste, gesticulando
grita de
un energúmeno,
como
manera que todo el mundo pueda oirlo: — ¡ Asús, compae, no
tenga
tanto
ge-
A V. no se le pué dal ni un con— nio!. sejo!.... deseguía se pone bravo !. .. ¡Va-.si eslo que yo siempre mos, hombre desagraesíns está el enfielhe dicho!.. . ¡de mi palte, y no lo digo pol no lleno!. . Pues pol mal, ya pué V. andal pol ahí hecho un pelcío,
que
no
le
daré....
los buenos
ni
El círculo maldito es en que gira
La virtud, la inocencia : El vicio entre sus antrós no se oculta
:
Ni teme el criminal á la conciencia !
Se ostenta la injusticia,
El desenfreno á la razón insulta, Y, dejando su abismo, . Buscan
la luz, el odio, la avaricia,
La torpe envidia y duro escepticismo !
Que renegando el hombre del tesoro Noble del alm3. con di lirio infausto
Levanta altares al becerro de oro Y el corazón le ofrece en holocausto ! !
dias!... Y se vá tan satisfecho, renegando del Estalla Tempestad !|—Entre tus nieblas Sepulta tanto horror y crimen tanto ; mundo y de los hombres desagraesíos que, Oculta el mundo á lios con tus tinieblas ; según él, vénse en mala situación porque Que esta mansión de llanto no escuchan el consejo que desinteresadaQue ves agonizante, mente les ofrece, y que, eso síÍ,....»m0 lo Este antro del pecado y los dolores, dice por mal Enrique
Marzo 1897.
DECORO
No puede ser de un Dios la obra gigante -
-
LIRA EXTRANJERA ]
Baña, huracán, mi frente
Con tu soplo de fuego: Retumbé en
airadu
los espacics;
el trueno
gima hirviente
De la convulsa mar+el hondo
seno;
Que al rugir con fragor los aquilones LA
TEMPESTAD
Esella! es ella!... Vedla Ya desata Su manto tenebroso—El pecho mio A su aliento ae fuego se dilata,
Y el peso que lo oprime indómito sacude -- Ven, sombrío
Retratan en su furia pavorosa
:
La ardiente tempestad de mis
pasiones !!
Siento placer por eso ante tus rojas Claridades sinietras ; Por eso entusiasmado es que me miras.
Cuando grande y colérica te muestras; Embriagarme de gozo ante tus iras!
Angel de destrucción; que tu sublime. . Colérico poder calma mi anhelo!
Tempestad de mi ¿lma, vé, acompaña
Tiemble la tierra y se oscurezca el cielo !
El estallar del trueno y de los vientos. Mezcla su ardiente soplo al que se inflama
Ven!
..y al abrir tus pavorosas alas
Genio de las tormentas, levantaos !
Eterna noche cubra el firmamento! El mundo desquiciado vuelva al cáos, Y de Dios á la ira l La humanidad culpada, Y entera la creación, torne á la nada !!
Tempestad ! apresúrate ; el vacío Sin límite y sin fin tu imperio sea;
Y del mal el espíritu sómbrío,
Sin el mundo ni el cielo, denada y sin poder se vea !
Con tus roncos acentos
:
De la divina cólera
Con la celeste llama ; Y cuando rotos los secretos lazos
...
De este mundo maldito
- Los orbes se desprendan á pedazos, Castigo á tanto error, tanto delito:
Cuando la voz de las pasiones calle, Y en los helados brazos de la nada La humanidad batalle, — - |. Muriendo, agradecido,
Bendeciré tu cólera sagrada ! Heraclio (Venezolano)
M.
DE 5
LA
GUARDIA A
+:
¿
382 ==
ieras que me he educado en el mundo de las idealidades, de los sueños color de ro-. sa, y que no son exujerados mis propósitos.
Pero
tu
alma insetisible,
de materialismo,
no sabe
con
Pero hija, si yo no gusto
estúpidos
y
ridícaios
tines, que los. tengo rotos,
Por eso me
interrogas tan duramente, sin expresión ni agudeza, como pudiera hacerlo un imbécil. —
tus
— ¿Lo entiendes ?. cd Si ! (Horando y) — Pues, ahora, á zurcirme los caice-
abrumada
encariñarse
lo espiritual, con lo delicado.
percer todos idilios.
C. MARTINEZ Aguadilla,
de lo ri-
ROLDAN
1897
dículo, — Eso, tú, que vives en consorcio con el vil metal, con el tanto por ciento, con
CRON INEA
los cobros y giros, — Para algo soy padre de familia. — Lo que no quita para que tengas gusto estético y expresiones almibaradas cuando hables con tu mujercita,
— Si es que el tiempo
no está
eso mi para otros embelescos por el
para estilo
—No así piensas cuando pasas las horas junto á Jacinta. —La trato contorme se merece: como
> X un
periódico
leí lo
si-
guiente:
á unaE
¡ Valiente respuesta que nada me ranquiliza |! Quien pasa las horas junto á una joven, burlando la ausencia
un abanico
Pues
Clotilde.
has
cio de este mundo.”
tiempo
visiones,
—Ven ahora á dulcificar de nuevo á mentirme
tus
querida frases,
Y si nó, vamos
á
ver ¿que le decias la otra noche á esa incauta que
tanto Ipodias,
y que tan. poa
tiene el sentido?.... —Muy
poca cosa que
la comprome-
tiera, un asunto que para ti ha pasado sapercibido. — ¿ Cuál es, dime, cual ?
abanico,
La noticia me
focos de luz y poesía. .
visto
pinta-
das ocho miniaturas de célebres pintores. Además la montura está adornada de bri. llantes, lo cual expli:a el excepcional pre
de continuo.
en un
cuyo precio -ha
montado en marfil, y en el que hay
vertido. —Pero... ¿quién te ha dicho... . — Aquellos que no pueden mentirme, que están bien despiertos, que te vigilan
llamabas luceros,
Jay
pasado de medio millón de francos. Se trata de un abanico estilo Imperio,
tú, corazón de fiera, tenorio per-
¿lus ojos, no? E mismos, los que
americano
Goul, acaba de regalar á su prometida Catalina Clemons
de sus tu-
tores, algo quiere, algo propone, alyo conspira. . Eso haces tú, hombre infiel, marido áspero, bruzal, descontentadizo. —Si,
'* Uno de los hijos del riquísimo
de-
— Solo la decía que tratara de sacarte
el demonio de la poesía del cuerpo,porque
con tus musas, tus baladas, tus sonetos, tus rimas y tus pamplinas, me tienes loco,
desesperado, violento y dispuesto á entor-
el
más
milion
de
del
hizo reflexionar! Es
el colmo del derroche! dio
valioso
Gtoul con ese me:
francos,
pudo
hambre áe millones de criaturas
matar
el
para
las
cuales el mundo no tiene una lágrima ni una Lio de compación. riste es
pensar
(
que en las
rias del siglo SIX, se hombre
.do, adquiere per medio
millon
postrime-
pes
de francos
un abanico con adornos de brillantes!
Si Goul hubiera oido los lamentos de
_ Ana Pericier, no habría cometido
la locu-
ra de dar un tesoro por semejante bagatela. Ana Periciercon tres hijos amémicos, desfallecidos de
hambre,
sucumbió
en el
fondo de su choza, sin que los potentados del mundo
la dirigieran
una palabra de
consuelo. Porque la ¡nfnensa mayoría de
-
era de?
|
Fragmento
1
... .Extenuado, leproso y mal vescon
tido le ví cruzar
la cabeza
inclinada
hácia el suelo y atisbando, alguna que otra
vez, de reojo, al que pasaba por su lado con el fin de recojer las miradas de conmisce-. ración que se le dirigían, únicas
A que se
juzgaba acreedor. 'Todo su cuerpo parecía
ae
:
Pone ser! ls Caminas por el mundo como un espíritu errante. Estás en la alborestencia
de
la vida,
y careces del calorcito del regazo materno.
una ruina ambulante: de su faz, de su caTú necesitas, como la inocente. aveheza, de sus vestidos, de sus zapatos Y, cilla, que traigan á tus labios el alimento. bien podía asegurarse que hasta de su alma, habíanse evaporado los arrobadores eflu- - que nutre y el agua que refresca; pero te su pevios de lo bello, de lo puro, de lo ideal, de falta, quien, como la paloma paraapetec ido el tí para queña cría, solicite o inefable. ¡ Desventurado joven! La carretela grano. Caminas sin brújula por el mar de la “del vicio arrastrada por los Centauros de prila crápula y la molicie, lo habían precipi- vida, y te estrellarás al chocar en el mer bajo 6 arrecife. tado vertiginosamente en el abismo inson| Un séquito de sombras te rodea, no dable dela nada! hay luz que alumbre tu sendero, y sucumMariano RIERA PALMER. birás en las zarzas del camino. La sociedad : Pero,. .... qué digo? guarda en su seno seres Caritativos; la re-
Suero
de Quiñones
al desvalido; la moral nos inclina á separar
Con cincelado arnés, yelmo de oro
y cota azul ceñida á la gorguera,
Acaso algún día lucirá en tu á caer. Oriente, angelito de la tierra, el sol de tu ¡Que Dios te bendiga! felicidad. José
alto:el lanzón, caida la visera,
don Suero oprime su caballo moro.
(ESCENAS
hácia el noble adalid vuelve la vista. Y al mirar su blasón de plata y gules, suspira: ven un corazón en llamas
sE Habana,
ffmientras exista.”
AlfredoM. AGUAYO Enero de 1394 í
a
INTIMAS)
4
Luciendo el chapirón de seda y tules, dulce cohorte.de agraciadas damas
y esta divisa al pié:
CARDONA
conyugal
Diálogo
y sin cesar, la fuerte rodillera
hiere la barda con ru nor sonoro.
VIDAL
Arecibo.
Agudas astas de robusto toro coronan la hiperbólica cimera, -
está próximo
del borde del abismo al que
SONETO
la diestra
ligion nos enseña que tendamos
o
—¿ Me quieres?.... —Es tan prosaica esa: pregunta, que desaliento antes que amor. Yo infunde me quiero, sí;
las
pero nó
gares, los giros
- tancialidades,
repeticiones
vul-
pedrestes.
Algo
las insubs-
manoseados,
las frases
que huela 4 perfume
de
rosa,
revele chispazos de ingenio;
algo
algo que
que. en—
cante como la cadencia de la poesía, es lo que me conmueve, lo que me subyuga, loque me fascina ... —Romántica
estás.
a
—Si tuvieras más perspicacia que 4 - fatuidad, más talento que palabrerías, su
AN
Don
pr.
As
——
E
”
A un huerfanito.