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El toque secreto de las recetas alemanas en Cali
En el tradicional barrio San Antonio de la ciudad de Cali, reconocido por su arquitectura colonial, gastronomía y muestra cultural y artesanal, un lugar de ensueño por sus maravillosas fachadas, puertas coloridas y calles empinadas, que lo convierten en un mirador y un punto de encuentro para propios y visitantes, justo ahí, está ubicada la Pastelería Alemana, atendida por su dueña la señora Indre Abstoss.
Detrás de una puerta de madera rústica, pero bien tallada, y hierro forjado, encontramos una casa adecuada como pastelería, que alberga vitrinas con tentadores postres, una galería con pinturas de reconocidos artistas y espacios acogedores que permiten pasar momentos agradables a sus visitantes mientras escuchan melodías de piano, sienten la brisa que atraviesa sus corredores o, si se sitúan en un amplio patio trasero, pueden disfrutar la observación de platanales, flores y muchas otras especies vegetales.
Indre Abstoss, pastelera de profesión, nos abrió las puertas de su acreditado y reconocido espacio para concedernos una entrevista, dada nuestra curiosidad por el toque secreto de sus postres alemanes, que ofrece en el lugar, así como por encargos y, además, en eventos del Colegio Alemán de Cali, como el Adventskaffee, en los que hemos tenido la oportunidad de probar estas exquisiteces.
Entre sus delicias se destacan tartas, como la de arándanos, mora, queso, Selva Negra, strudel de manzana y la tarta Príncipe de chocolate; galletas de coco, jengibre, mermelada, lengua de gato, queso parmesano y florentiner; pastelitos, como Bobbes, Emperador y Linzer; chocolates rellenos de café, menta, naranja, nibs de cacao, fleur de sel, amaretto, caramelo y picante, y panes, como el integral y el multigrano de centeno a base de linaza, chía, ajonjolí, semillas de girasol y avena.
Un legado de mamá
“Mi mamá me enseñó a cocinar, como buena alemana: prácticamente todas sabemos hacer tortas y galletas. Pero como yo quería adquirir más conocimientos culinarios comencé a adquirir libros de recetas. De ahí surgió mi idea de convertirme en una pastelera de profesión: ya llevo veinte años en este campo”, comenta Indre.
En las quermeses del Colegio Alemán de Cali comenzó a dar a conocer sus productos, disfrutados por diversos paladares, que terminaban encantados con sus tradicionales recetas. Fue así como inicialmente abrió su primer local en el norte de Cali, cerca de la avenida sexta, al interior de lo que conocíamos como Almacenes La 14, donde funcionó por diez años. Posteriormente, se mudó al barrio San Antonio, donde lleva tres años.
Los valores alemanes
Indre nació en España, vivió sus dos primeros años de vida en Alemania y posteriormente fue criada en Venezuela por sus padres alemanes. Sin embargo, llegó a Colombia para quedarse pues lleva veinte años en Cali.
“Mi madre siempre me inculcó la cultura alemana; de hecho, desde que mis tres hijos estaban en el vientre siempre les hablé en alemán y les he recalcado valores propios de esta cultura, como el honor de la palabra, la puntualidad, la disciplina y el orden”, evoca esta pastelera casada con un pastuso. Esta carismática mujer nos contó que de vez en cuando, en sus vacaciones, viaja a Alemania para visitar a sus familiares, pero, realmente, quienes lo hacen frecuentemente son sus hijos. Sin embargo, los más felices y ansiosos por venir a Colombia, en las épocas más frías de Alemania son sus padres, quienes además de disfrutar de la cálida brisa caleña, degustan sus postres, sintiéndose privilegiados al saber que están hechos por su hija.
Por Sebastian Grande Comunicador Organizacional Colegio Alemán de Cali