El programa “Vamos a Movernos” de Quiero ¡Vivir Sano! Fomenta la actividad física como un hábito que beneficia la salud integral, realizando diferentes actividades, proporcionando información y contribuyendo a la educación para la salud. Una de las actividades es organizar el Club “Vamos a Movernos” en tu comunidad, como una red de apoyo para empezar, practicar y reforzar el hábito de realizar actividad física. En la Biblia nos dice: “Uno solo puede ser vencido, pero dos pueden resistir. ¡La cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente!” Eclesiastés 4:12
ORGANIZA TU CLUB “VAMOS A MOVERNOS” Y EMPIEZA UNA AVENTURA PARA TU SALUD INTEGRAL. ¿Cómo organizar un Club “Vamos a Movernos”? 1. Nombra un coordinador del Club “Vamos a Movernos” para colaborar en la organización. Este trabajo es voluntario. 2. Anima a varias personas de tu comunidad que estén interesadas en su salud o que desean seguir reforzando un estilo de vida saludable, para reunirse con el propósito de realizar actividad física. Recuerda que la participación es voluntaria; se recomienda no cobrar por ser parte del Club “Vamos a Movernos” excepto actividades o materiales que se adquieran en común acuerdo. Te sugerimos utilizar una hoja de inscripción, compromiso y responsiva para cada uno de los participantes. 3. Determina un lugar al aire libre preferiblemente u otro lugar que designen juntos y un tiempo del día conveniente para todos, por lo menos una vez a la semana. Aunque, si es posible cinco días a la semana, es mucho mejor. 4. Organiza la actividad física que pueden realizar en el Club “Vamos a Movernos”. Por ejemplo: caminata, juegos deportivos, trotar, etc.
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Utiliza tu creatividad, o bien puedes apoyarte en la información y materiales en: http: // adventistas umn.org/ ministerios-de-la-salud/ , https:// www.facebook.com/ PromotoresdeSaludyEsperanzaQVS/ , http:// quierovivirsano.org https:// www.facebook.com/ quierovivirsano/ Contáctanos en: contacto@quierovivirsano.org o (01) 826 263-46-25 Ext 4626 Si tienes dudas de la actividad física que deben realizar los participantes del Club “Vamos a Movernos” consulta con un profesional de la salud. Te recomendamos animar a cada participante para que consulte con un médico antes de iniciar cualquier actividad física. 5. Realiza diferentes actividades de convivencia que fomenten el compañerismo. Por ejemplo: reunirse para tener un momento de reflexión espiritual, realizar una comida saludable, celebrar los cumpleaños, entre otras. 6. Utiliza los programas, materiales, la imagen y redes sociales oficiales de Quiero ¡Vivir Sano! El programa e imagen oficial para fomentar la actividad física de Quiero ¡Vivir Sano! es “Vamos a Movernos”. 7. Recuerda que la perseverancia y la confianza en Dios son claves para el éxito del Club “Vamos a Movernos” y para obtener resultados positivos en nuestra salud integral. “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” Filipenses 4:13 Te animamos a conformar el Club “Vamos a Movernos” en tu comunidad y participar activamente en él.
¿CÓMO IMPLEMENTAR LA ACTIVIDAD FÍSICA EN EL CLUB “VAMOS A MOVERNOS”? CLUB QUIERO ¡VIVIR SANO!
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1. Utilizando “Vamos a Movernos”, un programa de Quiero ¡Vivir Sano! que fomenta la actividad física, con el propósito de Honrar y Glorificar a Dios, cómo nos explica el Apóstol Pablo “Pues habéis sido comprados por precio. Por tanto, glorificad a Dios en vuestro cuerpo.” 1 Corintios 6:20. Claro está que la actividad física nos ayuda a prevenir, desacelerar y curar muchas de las enfermedades que están abatiendo a nuestra sociedad actualmente, tales como diabetes, cáncer, enfermedades cardiovasculares, sobrepeso y obesidad, depresión, entre otras. 2. Tomando en cuenta ocho datos importantes de la actividad física, basado en algunos criterios que publicó la Organización Mundial de la Salud y comentarios que fueron dichos hace más de 150 años.
DATO NÚMERO 1 La actividad física es cualquier movimiento que realicemos con nuestro cuerpo. Se considera actividad física cualquier movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos, con el consiguiente consumo de energía. Ello incluye los deportes, el ejercicio y otras actividades, tales como el juego, el caminar, las tareas domésticas o la jardinería. Nuestro cuerpo está acostumbrado a realizar el esfuerzo mínimo necesario, por lo que si queremos aprovechar al máximo todos los beneficios de la actividad física debemos hacer que nuestros músculos y articulaciones trabajen más de lo normal. “Las ventajas obtenidas por el trabajo físico, darán equilibrio a una persona, e impedirán que su mente sea recargada. El trabajo recaerá sobre los músculos y aliviará el cerebro cansado... Se requiere un cuerpo sano para un intelecto sano.” Consejos para los Maestros, pág. 274
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DATO NÚMERO 2 La inactividad física es el cuarto factor de riesgo más importante de mortalidad mundial. Un 6% de las muertes mundiales son atribuidas a la inactividad física. Solo la superan la hipertensión (presión alta) (13%) y el consumo de tabaco (9%), y la iguala la hiperglucemia (azúcar en la sangre) (6%). Además, la inactividad física es la principal causa de aproximadamente un 21–25% de los cánceres de colon y mama, un 27% de los casos de diabetes y un 30% de los casos de cardiopatía isquémica. La falta de actividad física aumenta el apetito propiciando así a la persona a padecer obesidad, iniciando así una cadena de complicaciones derivadas de dicho problema. “La inacción es causa fecunda de enfermedades. El ejercicio aviva y regula la circulación de la sangre; pero en la ociosidad la sangre no circula con libertad, ni se efectúa su renovación, tan necesaria para la vida y la salud.” Ministerio de la Curación, pág.182
DATO NÚMERO 3 La actividad física regular ayuda a mantener una mente y un cuerpo sano Las personas físicamente activas tienen: • Menor frecuencia de: cardiopatía coronaria, hipertensión arterial, accidentes cerebro vasculares, diabetes, cáncer de colon y mama, y depresión. • Menos riesgo de caídas y fracturas vertebrales o de la cadera. • Más probabilidades de mantener un peso saludable. “El alumno que estudia constantemente sus libros, y hace poco ejercicio al aire libre, se perjudica a sí mismo. Un ejercicio equilibrado de los diversos
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órganos y facultades del cuerpo, es esencial para el mejor funcionamiento de los mismos. Hay pérdida de la fuerza física y mental cuando el cerebro está constantemente recargado mientras los otros órganos quedan inactivos.” Consejos para los Maestros, pág. 281 “No se puede conservar la salud a menos de que se dedique una parte de cada día al ejercicio muscular al aire libre.” Christian Temperance and Bible Hygiene, 82, 83. Conducción del Niño, pág. 321
DATO NÚMERO 4 La actividad física es beneficiosa, tanto si es de intensidad moderada como si es vigorosa. La intensidad se refiere al ritmo al que se realiza la actividad, es decir, «el esfuerzo que uno pone en realizar la actividad». La intensidad de las diferentes formas de actividad física varía según las personas. Dependiendo de la forma física de cada uno, algunos ejemplos de actividad física moderada serían caminar a paso ligero o realizar las tareas domésticas. Algunos ejemplos de actividad física vigorosa serían: correr, andar en bicicleta rápido, nadar rápido o mover grandes pesos. Siempre hay que tomar en cuenta que un tipo de actividad física que es beneficiosa para una persona puede no serlo para otra. Cada persona conoce sus propias limitaciones y debe apegar a eso su actividad física. “Los de hábitos sedentarios [...] debieran hacer ejercicio físico, [...] La salud debe ser un incentivo suficiente para unir el trabajo físico al mental.” Consejos para los Maestros, pág. 276
DATO NÚMERO 5 La actividad física en el grupo de 5 a 17 años. CLUB QUIERO ¡VIVIR SANO!
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Este grupo debería realizar al menos 60 minutos diarios de actividad física moderada o vigorosa. Si se superan esos 60 minutos se obtendrán más beneficios para la salud. En estas edades los muchachos están en desarrollo por lo que es necesario que fortalezcan sus cuerpos y los mantengan funcionando de manera adecuada para el buen desarrollo de todas sus facultades físicas, mentales, sociales y espirituales. Consulta el documento Programa de Fomento a la Actividad Física “Vamos a Movernos” de Quiero ¡Vivir Sano! en: http: // adventistas umn.org/ ministerios-de-la-salud/ “El primero y constante cuidado de los padres debiera ser velar para que sus hijos tengan organismos firmes, que sean hombres y mujeres sanos. Es imposible alcanzar este propósito sin el ejercicio físico.” Conducción del Niño, pág. 320
DATO NÚMERO 6 La actividad física en el grupo de 18 a 64 años. Los adultos de 18 a 64 años deberían realizar como mínimo 150 minutos semanales de actividad física de intensidad moderada, o 75 minutos de actividad física vigorosa, o alguna combinación equivalente de actividades moderadas y vigorosas. Todas las actividades deberían ser realizadas en periodos de al menos 10 minutos cada uno. Consulta el documento Programa de Fomento a la Actividad Física “Vamos a Movernos” de Quiero ¡Vivir Sano! en: http: // adventistas umn.org/ ministerios-de-lasalud/ Son muy raros los padecimientos en los que está contraindicada la actividad física, pero incluso en estos es indispensable la actividad física. Hay que buscar el ejercicio adecuado para para cada persona. “El tiempo dedicado al ejercicio físico no está perdido.” Consejos para los Maestros, pág. 281
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DATO NÚMERO 7 La actividad física en los mayores de 65 años. Las principales recomendaciones para este grupo son las mismas que para el anterior. Además, los ancianos con escasa movilidad deben realizar actividades físicas para mejorar el equilibrio y evitar las caídas, al menos 3 días por semana. Cuando no puedan realizar la cantidad recomendada por problemas de salud, deben mantenerse tan activos como se lo permitan sus capacidades y su estado de salud. Consulta el documento Programa de Fomento a la Actividad Física “Vamos a Movernos” de Quiero ¡Vivir Sano! en: http: // adventistas umn.org/ ministerios-de-la-salud/ Si se padece alguna enfermedad que dificulte la actividad física se deberá consultar previamente con su médico para valorar el tipo en intensidad de la actividad física a realizar. “La inactividad debilita el organismo. Dios creó a los hombres y mujeres para ser activos y útiles”. The Signs of the Times, 19 de agosto de 1875. Conducción del Niño, pág. 318 Nota importante: Estas recomendaciones son pertinentes para todos los adultos sanos. A no ser que haya afecciones médicas que lo contraindiquen, estas recomendaciones se aplican a todas las personas, independientemente del sexo, raza, etnia o nivel de ingresos. Asimismo, se aplican a las personas con enfermedades no transmisibles crónicas no relacionadas con la movilidad, como la hipertensión o la diabetes, y también pueden ser válidas para los adultos con discapacidad. Antes de iniciar cualquier ejercicio físico se recomienda consultar con un médico.
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DATO NÚMERO 8 Siempre será mejor hacer alguna actividad que ninguna. Las personas inactivas deben comenzar realizando pequeñas cantidades de actividad física, e incrementar gradualmente su duración, frecuencia e intensidad. Los adultos inactivos, ancianos o con limitaciones impuestas por su enfermedad obtendrán beneficios adicionales al aumentar su actividad. Las embarazadas, las mujeres con partos recientes y las personas con problemas cardiacos pueden necesitar precauciones adicionales y tener que buscar asesoramiento médico antes de intentar alcanzar los niveles recomendados de actividad física. Aun cuando se dificulte la actividad física, hay que buscar la manera de poder mantenernos activos por lo menos realizando las actividades diarias para que el cuerpo pueda funcionar de manera adecuada. “Debieran dedicarse horas previamente señaladas para un trabajo manual de alguna clase, algo que ponga en actividad todo el organismo.” Christian Temperance and Bible Hygiene, 82, 83. Conducción del Niño, pág. 321 Organiza tu Club “Vamos a Movernos” para fomentar la actividad física en tu comunidad, invita a tus amigos y participa en las diferentes actividades. Porque yo quiero vivir sano para honra y gloria de Dios, ¿y tú?
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