Teoria, practica y desafíos que enfrentan las ciudades ante la dinámica económica mundial

Page 1

SUELO, ESTRUCTURA Y MOVILIDAD URBANA


Universidad Autónoma de Ciudad Juárez Ricardo Duarte Jáquez Rector David Ramírez Perea Secretario General Manuel Loera de la Rosa Secretario Académico Erick Sánchez Flores Director del Instituto de Arquitectura, Diseño y Arte Ramón Chavira Director General de Difusión Cultural y Divulgación Científica


Un i v ersi dad Au tónom a de C i udad Juár ez

SUELO, ESTRUCTURA Y MOVILIDAD URBANA

Javier Chávez Coordinador

Elvira Maycotte Pansza Directora de la colección Colección: Desafíos de la planificación ante la creciente complejidad urbana

Volumen 2


DR © Javier CHÁVEZ, Roberto EIBENSCHUTZ HARTMAN, Guadalupe Margarita GONZÁLEZ HERNÁNDEZ, Jesús QUINTANA y Josep ROCA, Martha ROSAS, José Esteban HERNÁNDEZ, Guillermo OLIVERA y Marcos Antonio RODRÍGUEZ, Luis Hernando GÓMEZ OSPINA, Alma Angélica RODRÍGUEZ, Carmen VENEGAS, Luis Herrera TERRAZAS, Gabriel GARCÍA MORENO, Ángeles LÓPEZ NÓRES, Ramón LEOPOLDO MORENO, María del Carmen MACÍAS, Gerardo GUZMÁN y María Dolores ANDRADE

© 2014 Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, Avenida Plutarco Elías Calles #1210, Fovissste Chamizal C.P. 32310 Ciudad Juárez, Chihuahua, México Tel : +52 (656) 688 2100 al 09

ISBN de la colección: 978-607-520-078-1 ISBN del volumen 2: Primera edición, 2014 Impreso en México / Printed in Mexico http://www2.uacj.mx/publicaciones/ Apoyado con recursos PIFI La edición, diseño y producción editorial de este documento estuvo a cargo de la Dirección General de Difusión Cultural y Divulgación Científica, a través de la Subdirección de Publicaciones Diseño de cubierta y diagramación: Karla María Rascón González


C ontenido PRESENTACIÓN

08

RETOS Y DESAFÍOS DE LA COMPLEJIDAD URBANA Roberto Eibenschutz Hartman Universidad Autónoma Metropolitana

10

TEORÍA, PRÁCTICA Y DESAFÍOS QUE ENFRENTAN LAS CIUDADES ANTE LA DINÁMICA ECONÓMICA MUNDIAL Guadalupe Margarita González Hernández

21

1.

ESTIMACIÓN DE ELEMENTOS DE CALIDAD DE ZONA. Caso Residencial Barcelona Jesús Quintana y Josep Roca Universidad de Sonora y Universidad Politécnica de Cataluña

31

2.

OCUPACIÓN Y TRANSFORMACIÓN DEL TERRITORIO EN EL MUNICIPIO DE OTZOLOTEPEC, A PARTIR DE LA EXPROPIACIÓN DE HACIENDAS (1924–1935) Martha Rosas Universidad Autónoma del Estado de México

53

3.

LA POLÍTICA AGRARIA EN EL PROCESO DE OCUPACIÓN DEL ÁREA PERIURBANA DE GUANAJUATO, 1992–2010. José Esteban Hernández Colegio de Michoacán

70

4.

LA INCORPORACIÓN DE SUELO SOCIAL AL DESARROLLO URBANO DE CUERNAVACA, MORELOS Y SUS EFECTOS EN LOS MERCADOS DE SUELO REGULAR E IRREGULAR Guillermo Olivera y Marcos Antonio Rodríguez Universidad Nacional Autónoma de México

93

5.

LA CONFIGURACIÓN URBANA Y REGIONAL DESDE LOS PROCESOS DE ESTRUCTURACIÓN SOCIAL Luis Hernando Gómez Ospina Universidad Nacional Autónoma de México

114

6.

EL ESPACIO PÚBLICO URBANO, A PARTIR DE LAS DIMENSIONES FÍSICO URBANA Y SOCIO CULTURAL Alma Angélica Rodríguez Universidad Autónoma de Ciudad Juárez

136


Teoría, práctica y desafíos que enfrentan las ciudades ante la dinámica económica mundial

Guadalupe Margarita González Hernández

A

manera de introducción, es muy importante aclarar algunas cosas de la visión que se va a presentar aquí: una visión desde un punto de vista socioeconómico siempre van a relacionar las variables económicas con el desarrollo de la ciudad. Mi formación tiene que ver un poco con sociología y concretamente con la economía, por lo tanto, siempre voy a estar relacionando, en este caso, la economía y la sociología urbana. Hay infinidad de posturas teóricas, desde mi punto de vista es importante plantear que vamos a trabajar con tres posturas teóricas de forma general; en realidad no existen como tal, sino más bien hay una infinidad de escuelas teóricas. Con base en la búsqueda de ciertas afinidades con ciertos intersticios teóricos se pueden dibujar tres posturas, no estoy diciendo precisamente que voy a tener una postura específica al respecto, pero para explicar un poco el impacto que ha tenido la economía o los factores económicos y sociales en el desarrollo de las ciudades es importante plantear estas tres posturas.

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

21


En primer lugar, está una postura que todo mundo la llama como la liberal y su desarrollo hacia la neoliberal en términos económicos; todo mundo hemos escuchado que la implantación del modelo neoliberal es prácticamente desde los años ochenta, pero tiene lógicamente un desarrollo teórico. Sobre todo en economía la influencia ha sido muy fuerte; en forma general puedo decir que esta postura siempre habla del mercado, el lugar donde se mezclan los actores pero sobre todo los factores productivos. Es donde entra la oferta y la demanda; sobre todo tiene que ver con que no debe haber un ente autónomo externo para influir en esas ofertas y demandas en su versión neoliberal. En la versión liberal se habla incluso de una mano invisible que ayuda a que el mercado esté en equilibrio pero, en su versión neoliberal ya desarrollada, sobre todo en el siglo xx, habla incluso de que puede haber un ente autónomo pero solamente para gestionar o para acomodar un poco los ciertos desequilibrios temporales que pudiera tener el mercado. En este caso como lo voy a plantear, desde este momento pudiera ser un estado gestor, un estado que puede ayudar a que la libertad del mercado; del libre comercio, del flujo de personas o libre flujo de servicios pueda llevarse en total equilibrio. La posición liberal concibe a la ciudad como una organización económica donde se enfrentan los factores productivos a través del mercado y se lleva a cabo un equilibrio de intercambio entre bienes servicios personas y factores productivos a través de la oferta y la demanda. Una segunda vertiente tiene que ver con la actitud crítica, donde se desarrollan posturas que van desde la marxista hasta la escuela crítica de Frankfurt. En el caso de la posición crítica, las ciudades se conciben como la expresión más fina de la acumulación de capital; reflejo de una relación social que tiene que ver con los factores productivos: el capital y el trabajo. En el papel del estado hay un ente que no es autónomo sino que es una institución desarrollada para la acumulación de capital que en este caso es el estado capitalista. Entonces el estado capitalista también depende de la correlación de fuerzas pero el estado capitalista va a buscar la manera de que siempre se lleve a cabo la acumulación de capital y también va a ser el ente que pueda controlar los conflictos sociales desarrollados, precisamente, de la extracción del plusvalor. Una tercera postura tiene que ver con el valor, le llamé postura cultural. Tiene que ver con todos aquellos estudios y todas aquellas escuelas que le dan una predominancia a todos los factores que no son precisamente los económicos; sino más bien a la expresión de factores sociales, culturales, identitarios. Conciben a la ciudad como una expresión de las manifestaciones comunitarias, de organización social, política e incluso cultural. Entonces, en esta postura se considera al estado como un agente e incluso otras escuelas de la misma postura lo consideran como un estado actor; lógicamente este estado agente actor tiene una posición distinta en el proceso socioeconómico de la ciudad. Para tratar de darnos una idea de cómo funcionan las ciudades en términos económicos, a nivel actual, quisiera hacer un repaso, llamémosle histórico, a una posición de la ciudad o al papel de la ciudad en una época anterior pero no tan lejana. Estamos hablando sobre todo del siglo xx, principalmente en los países europeos y angloamericanos: lo que es Estados Unidos y Canadá, en especial después de la segunda guerra mundial. Se presentó, concretamente, después de la crisis de 1929; en una época a la que todo mundo en economía le llama la época del estado benefactor. Quisiera partir, en términos históricos, desde esa posición, en el sentido de que la ciudad cumplió un papel muy importante en esa época. Pero las

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

22


ciudades, dependiendo del papel de la organización mundial en términos de la producción industrial, se fueron diferenciando; sobre todo en esa época del periodo del estado benefactor, principalmente en Europa. En Estados Unidos fue a partir de 1929, pero mucho más en América Latina. Me voy a enfocar principalmente en América Latina, ya que después de la segunda guerra mundial, en la organización económica mundial hubo una división internacional del trabajo; así se le llamó debido al papel que cumplen en la producción mundial en términos de bienes y servicios. En todo caso, hubo muchas clasificaciones para los países en esta situación: unos les llamaron países desarrollados, otros países en desarrollo y así en esa tónica. Les voy a llamar países desarrollados y países subdesarrollados. ¿Por qué países subdesarrollados? Los países subdesarrollados cumplieron una función de proveedores. De acuerdo con la organización mundial cumplieron esa función que fue determinada, en cierto modo, por la dependencia económica en la producción. Ese papel lo cumplieron, sobre todo, después de la segunda guerra mundial con la oferta de bienes y servicios básicos; pero principalmente por la exportación de materias primas. Pero no es precisamente la diferencia lo que plantea la teoría del desarrollo, no es que posteriormente los países no vayan en un camino hacia donde todos tienen que seguir para llegar a la meta del desarrollo. No, en realidad la división internacional del trabajo provoca que el papel que cumplen en el mercado no les permita llegar al desarrollo sino que intensifica sus funciones. Quizá desarrollan las funciones que los países desarrollados les determinan a través del mercado o del comercio mundial. Entonces, desde mi posición, no son países en desarrollo sino países subdesarrollados. Bueno, también existe una concepción mucho más compleja pero por falta de tiempo me es imposible explicarla; creo que para fines de la plática es suficiente. En este caso es muy importante, para el análisis de las ciudades, entender como fue desarrollándose la teoría con base en la realidad económica, social y política del papel que cumplían los países a nivel mundial. Por lo pronto en términos teóricos, sobre todo en lo que es la disciplina de la economía y enfocado a los estudios urbanos, un poco a la sociología. En ese periodo, sobre todo en la economía, se desarrolló todo lo que tenía que ver con la centralidad, las teorías enfocadas un poco en la centralidad y la periferia. Pero no podemos negar que, lógicamente, hubo corrientes teóricas principales o dominantes que influyeron fuertemente. La mayoría de los estudios se enfocaron en la centralidad, ya lo explicaba alguien más. Entonces se planteaba, en cierto modo, que las ciudades fueron organizadas –en términos teóricos– a través de nodos o centros donde se medía la centralidad en términos de actividad, en términos de empleo, en términos de consumo y de ahí se derivaban otros nodos o centros de menor jerarquía. Se buscaba, en cierto modo, el acceso a los recursos de bienes y servicios; por parte de la población. Entonces la mayoría de los estudios se circunscribieron a eso; hubo distintas centralidades, aquí solamente menciono algunas relacionadas con el empleo, el consumo, la accesibilidad a bienes y servicios o la accesibilidad a servicios sobre todo que ofrece la ciudad. También se ha hablado últimamente de la centralidad de los imaginarios urbanos; pero es muy importante mencionar que en todas estos estudios que se referían a la ciudad, sobre todo a la estructura urbana. Debe considerarse que a través de los centros se podía distribuir o se podía acceder a

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

23


bienes y servicios; a ciertos factores en forma relativamente homogénea del resto de la zona urbana. Entonces era muy importante el principio de la universalidad, donde se planteaba que los habitantes de la ciudad tenían acceso de forma igualitaria; así se localizaran en un nodo o en un centro específico todos los bienes y servicios. Esto es muy importante porque coincide precisamente con el periodo del estado del bienestar social o del periodo de estar bien. También se plantea, en términos políticos y en términos sociales, la universalidad de los derechos, la igualdad de las personas; pero sobre todo el acceso a servicios que tienen que ver con su desarrollo y calidad social. Desde un punto de vista, más o menos relacionado con la planificación urbana, tal como se plantean en estas posturas los países desarrollados, se percibe una gran necesidad de planificar cuando se habla de centralidad. Sobre todo en cuanto al acceso a los bienes y servicios, lógicamente se planifica dónde se pueden localizar determinados centros o dónde están ubicados de acuerdo a ciertos factores. En este caso, también los proyectos de estructura urbana están relacionados, otra vez, con la dinámica económica. Sobre todo se relaciona con el periodo de desarrollo que se está llevando a cabo en el caso de la planificación urbana. Es precisamente en este periodo cuando se hacen predominantes todos aquellos planes con la intención de llevar un mejor orden a la ciudad. Estos rasgos que estoy planteando no son los únicos, son los dominantes. Hubo, por lo menos en términos de planificación urbana, lo que se llamaron proyectos de intervención urbana. Esto se presentó cuando se empezaron a identificar en la ciudad ciertas manifestaciones de desigualdad social. En realidad las ciudades siempre han presentado espacios fragmentados, espacios desiguales simplemente. En términos teóricos incluso, sobre todo desde una postura liberal, la ciudad como manifestación de las relaciones del mercado debe estar en equilibrio; por lo tanto, se presentan dos tipos de modelos, sobre todo en los países desarrollados. Quizá el más conocido, tiene que ver con el modelo angloamericano; aquel donde el centro económico está en el distrito central de negocios. De ahí a las zonas periféricas van determinándose las actividades de acuerdo a la renta del uso del suelo y, sobre todo, al costo de traslado para ir al centro. Lógicamente, en los países de Norteamérica, pero en especial en los Estados Unidos empieza a haber una especie de zonificación de la ciudad; en términos de que en el centro se localizaban las actividades económicas. Las más rentables y las que requerían de un contacto cara a cara como los servicios; como el comercio y la industria, que solamente requería un factor productivo como la mano de obra o también ciertos recursos naturales, se localizaba lo más cerca posible de estos. Entonces la industria empezaba a desplazarse hacia la periferia; lo mismo que las zonas residenciales. Así, resultaba más fácil trasladar a los trabajadores hacia el centro o hacia el centro industrial que trasladar las actividades lo más cerca posible de los trabajadores. En términos de costo era más fácil que los trabajadores tuvieran movilidad. En cuanto se da esa organización empieza a nivel real en las ciudades norteamericanas un proceso de suburbanización. Ese proceso trae un cambio en la estructura urbana; en el sentido de que las actividades de comercio y las de servicios empiezan a seguir a la población en la periferia. Pero es muy importante determinar que este proceso de suburbanización no fue homogéneo, sino que principalmente se dio entre la población de altos ingresos; creándose un proceso de segregación donde la población de bajo ingreso se queda en el centro de la

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

24


ciudad. En la periferia o en los suburbios están los grupos de altos ingresos; por lo tanto, algunos de sus representantes empiezan a involucrarse –con una visión más social– en estas corrientes teóricas sobre economía. Se introducen conceptos ya, de fragmentación social; pero sobre todo conceptos de segregación socioespacial. En el caso de los países europeos, se plantearon programas de intervención o planificación urbanas, un tanto más centralizadas a diferencia del modelo norteamericano; determinado un poco por el libre mercado de la oferta y la demanda, del suelo, de trabajo, del capital y aspectos similares. En el caso del modelo europeo, éste es más centralizado; determinado lógica y parcialmente por la renta del suelo, donde el costo es más alto. Pero, sobre todo con una visión social mucho más amplia en términos de la participación ciudadana o los grupos sociales que tienen una cierta posición política, social, cultural. En este caso, algo muy importante en las ciudades europeas tiene que ver la actividad turística como un ente detonador para cierto desarrollo de actividades comerciales y de servicios. En la década de los ochenta y noventa, se empieza a dar, precisamente por la expansión muy normal en las ciudades, un proceso de suburbanización y de elitización, como le llaman algunos autores europeos, presentado especialmente en los centros –que ellos llaman centros históricos– muy distintos a los distritos de negocios de las ciudades norteamericanas, donde, desde el punto de vista de su modelo, la centralidad es de tipo económica. En cambio en el modelo europeo, en realidad la centralidad es la gran concentración, no solo de actividades económicas si no también políticas, sociales y culturales. En la ciudad europea esa es la parte vertebral de la ciudad; en este caso en los ochenta, sobre todo en los noventa, empieza a verse una expansión muy fuerte en las ciudades europeas. Lo que sucede es que en los centros históricos empiezan procesos de renovación; en muchas ciudades, no en todas, existen las excepciones lógicamente, empiezan a cambiar los comportamientos. Esto se da principalmente en términos de la posesión de la tenencia para ciertos grupos. Hay ciudades donde se empieza a dar también un proceso de segregación en favor de los grupos de ingresos altos; empiezan a vivir en los centros históricos, por eso se le llama proceso de elitización en los centros. En América Latina, principalmente, las condiciones son totalmente distintas para el desarrollo de las ciudades, pues cumplen una función distinta en la organización mundial, principalmente en términos de división internacional del trabajo. En este caso, las funciones de las ciudades son distintas, a raíz de esa división internacional del trabajo. En primer lugar, sobre todo por un impulso en el proceso de industrialización, las grandes ciudades se convierten en la zona de atracción para zonas marginadas o con pocas posibilidades de desarrollo. En las capitales de los países latinoamericanos se concentra el capital extranjero para el desarrollo de actividades industriales que tienen que ver con la producción de bienes de consumo e intermedios. Entonces las grandes ciudades tienen una expansión urbana muy fuerte; un crecimiento económico también muy fuerte. Es ahí donde se da lo que se llama explosión demográfica urbana de los países de América Latina pero realmente tiene que ver con las ciudades capitales. Bueno, México es la expresión más evidente en América Latina, pero lógicamente también están Sao Paulo en Brasil y Buenos Aires en Argentina. En este caso, las ciudades de pronto tienen grandes masas de pobladores; sobre todo migraciones rurales y urbanas. De las pequeñas y medianas poblaciones llegan migrantes a las grandes ciudades; atraí-

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

25


dos por el desarrollo que provocan las inversiones extranjeras sobre todo. Aunque ya se traía un modelo de estructura urbana desde el periodo colonial, tal como se ha mencionado, en realidad, en este periodo se pierde totalmente el control. Yo pongo en duda eso de controlar la ciudad pero después comentaré porque, es imposible, de cierto modo, planificar las ciudades debido al impacto de las grandes migraciones rurales e interurbanas. No existe en este periodo un modelo estandarizado de una estructura urbana; no es posible en las ciudades sobre todo de América Latina. Claro, tiene que ver mucho el papel del estado en este caso, a diferencia de los países europeos. En los países en desarrollo el estado cumple un papel muy importante en términos del bienestar; crea todo un sistema de protección y seguridad social. Sí, uno de los objetivos es mejorar las condiciones sociales de su población pero en realidad también se trataba de llevar a cabo una estabilidad en el proceso de acumulación de capital. Se trataba de mejorar las condiciones de trabajo con el fin de que no hubiese movimientos –revoluciones– sociales; eso es muy importante porque del otro lado estaba la competencia que es el bloque socialista. Entonces, en el caso de América Latina se dio también un proceso similar de protección y seguridad social pero no fue tan fuerte, tan evidente como el que se llevó a cabo en los países europeos. También se dieron todos estos procesos de seguridad social en lo que llamo la clase trabajadora; sobre todo en sectores donde se requería, como fue concretamente la burocracia, en este caso una parte muy pequeña, por cierto. Las cantidades y los objetivos fueron muy distintos a los de los países desarrollados. En este caso los recursos, por parte del estado también tienen, igual que los países desarrollados, el objetivo de llevar a cabo el proceso de acumulación de capital. Si para eso es necesario ceder un poco de los recursos a la fuerza de trabajo con el fin de que se lleve a cabo dicho proceso y de que no halla movimientos sociales, se podía ceder entonces. Al estado de los países subdesarrollados se le llamó un Estado Subsidiario, en el sentido de que el estado contribuye a ciertas actividades sociales y económicas, con el fin de llevar a cabola garantización del proceso de acumulación de capital. En cierto modo, lógicamente los ingresos del Estado van con ese objetivo, lo cual el aseguramiento de este proceso. Una muy buena parte del ingreso se caracteriza por destinarlo a la infraestructura que lleve a una captación con cierta seguridad para los capitales extranjeros. Se espera que los capitales inviertan en los países de América Latina. En este caso, la clase dominante siempre está dependiendo económica, política y socialmente del capital extranjero. En términos políticos permite para la clase política, que representa la clase dominante, una disociación con la población en general. ¿Qué significa esto? Los intereses de la población de los países en desarrollo realmente no están en la agenda política, económica, cultural y social de la clase dirigente y de la clase dominante. Esto va a resultar después muy importante porque en los procesos de participación ciudadana, y política, hay una disociación de los intereses; solamente se crean ciertos mecanismos de control social. Uno de estos mecanismos es muy clásico aquí en México: el clientelismo; es un mecanismo de control social donde se desarrollan ciertas necesidades políticas de la sociedad pero nunca están en verdadera conexión con la clase dominante y con la clase política. En términos urbanos esto afecta, como hay una disociación de los intereses, es lógico que la planificación en América Latina, concretamente en México, también tenga una diso-

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

26


ciación de esos intereses. En este caso la planificación y la política urbana van de acuerdo al proceso de acumulación de capital, no de acuerdo a las necesidades de hacer una ciudad que mejore las condiciones de vida de su población, utilizado como un mecanismo que legitima los intereses de la clase dominante, que no necesariamente la nacional, sino la extranjera. A finales de la década de los sesenta, concretamente en los setenta, hay muchos acontecimientos; por ejemplo la crisis del petróleo, que en realidad es una crisis estructural del capitalismo, producto que los neoliberales ponen de pretexto respecto al Estado gastando demasiado en la clase trabajadora. Esos sistemas de protección para seguridad social son demasiado costosos, por lo tanto, se convierte en uno de los causantes de la crisis estructural. Luego, es necesario que se retire de la economía, pues se encuentra en una crisis interna al descender la tasa de ganancias. En toda esa área controlada por el Estado, es necesario que el capital empiece a invertir, crear nuevos mercados y nuevas áreas de inversión. El Estado debe retirarse de la economía y, por lo tanto, empezar un nuevo planteamiento neoliberal; es un proyecto en todas las dimensiones ideológicas, económicas, políticas y culturales. En este caso, lo primero que se plantea es la liberación de la economía del yugo estatal, asimismo, la dedicación para gestar, crear las condiciones de rentabilidad en el mercado. Todo aquello donde el Estado no debe cumplir funciones, debe de ser para el capital, se crea aparte y vuelve a manifestarse la ideología de la libertad y la individualidad. En el periodo anterior, aunque siempre estuvo latente, se manifestaba el principio de la universalidad, es decir, todos tenían derechos. En este caso, se empiezan a desarrollar otros tipos de habilidades personales a partir de la idea del desarrollo individual, de acuerdo a las capacidades y habilidades de las personas, se va a llegar a un mejor estado de desarrollo económico. Su importancia radica con el impulso de la individualidad donde empiezan a surgir conceptos, como la diferencia, pero no se reconoce o se hace a un lado un poco la desigualdad. Somos diferentes, pero no es conveniente que digamos ser desiguales; también está la crisis del Estado, que debe sanear sus finanzas y dedicarse exactamente a lo que debe ser. Ahí cumplen un papel muy importante los organismos supranacionales, en términos de que ellos son los responsables de atender un país en crisis; sobre todo en América Latina. Lo que significa es que deben existir los organismos supranacionales mismos que controlan y determinan qué tipo de políticas hay que llevar a cabo. Pero no solo son políticas económicas, hay que llevar esto lógicamente a todos los ámbitos en este periodo de los setenta y ochenta. Algunos países seguimos en crisis, en realidad tiene que ver mucho con controles, no solamente por parte de ciudades, ni del Estado. Ya no son aptos los mecanismos de un estado subsidiado; ahora los controles son de un orden supranacional, como es el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, etcétera. Al mismo tiempo, debido a la rentabilidad, y la necesidad de nuevos mercados es imprescindible que cambien los comportamientos del consumo para que las actividades económicas puedan crear sus propias estrategias que modifiquen el consumo de la población, con el fin de crear nuevas áreas de rentabilidad. Siempre han cambiado los comportamientos del consumo pero ahora son más intensos y más rápidos. Finalmente, debido a la promulgación de la ideología de la libertad y de la individualidad, es muy importante, para esta política neoliberal, que empiecen a surgir grupos sociales y que, principalmente tengan el principio de la participación. Antes el Estado controlaba un poco las actividades políticas, culturales y sociales, pero al retirarse el

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

27


empiezan a surgir por el control que se tiene de éstas, la necesidad de intervenir y aportar modelos alternativos para la organización social comunitaria de todo tipo. Es ahí donde empiezan a surgir agentes y actores que tienen que ver con el nuevo proyecto neoliberal. Ya no surge solamente la gobernabilidad como una especie de equilibrio entre los intereses de cada uno de los actores relacionados en la sociedad, sino incluso en la economía surge la gobernanza como una forma de mecanismo de los grupos, incluso contrarios a los intereses del capital. En este caso ¿cómo influye en las ciudades esta nueva etapa? En términos económicos, ¿cómo afecta a las ciudades? En primer lugar, el punto es abrir nuevos mercados de rentabilidad, la planificación urbana se convierte en un mecanismo idóneo para abrir esos nuevos mercados y se empiezan a dar otros proyectos de intervención urbana con ese fin. Todas aquellas propiedades que tienen que ver con una propiedad estatal, tienen que ser liberados, y entrar al mercado, asimismo, todas aquellas áreas en la ciudad, que tienen un cierto potencial para la rentabilidad, también tienen que integrarse, ser liberadas, y entrar al mercado. Hay pues, varios tipos de proyecto de intervención urbana, pero el objetivo es que la ciudad se convierta en un área atractiva para la inversión, sobre todo extranjera. Ahora las inversiones se dan en un ámbito multinacional o supranacional, a diferencia del periodo anterior. En realidad, ahora las políticas son muy importantes para la implantación de este tipo de programas, aunque las estrategias sean las mismas. Ya no hay una distinción en la forma, llevar a cabo un programa de planificación en México es muy similar al que pudiera llevarse en Italia. Podríamos preguntarnos por qué. Los organismos controladores de capital a nivel mundial son ya multinacionales, no tienen nacionalidad. Hay pues, varios tipos de intervención urbana pero a diferencia de los anteriores, donde el proyecto era un principio de universalidad, aquí el principio es la planificación estratégica donde ciertos sectores se localizan como rentables. Hay que crearles las condiciones para que el capital extranjero nacional, el capital en sí, pueda invertir ahí. Los proyectos de intervención urbana tienen, en esta época neoliberal, el objetivo de crear las condiciones para que el capital invierta. Para ello, el Estado tiene que intervenir pero, ahora no interviene apoyando a la fuerza de trabajo como factor productivo, no, ahora como un gestor donde invierte en infraestructura urbana –otra vez– para rentabilizar el capital. Además, como ya no hay un bloque socialista de competencia, es necesario hacer a un lado los intereses sociales. Aunque la clase trabajadora es importante, es necesario revitalizar el capital y garantizar su acumulación. La ciudad cumple un papel muy importante porque además, se vuelve prácticamente el único lugar donde se van a llevar a cabo las inversiones. Sobre todo porque, además, las inversiones ya no se dan solo en el ámbito productivo, sino que algunas son de tipo especulativo o inversiones en el ámbito de los servicios o de los comercios. Así, los proyectos de intervención urbana van con ese fin; en este caso hay varios actores muy importantes: lógicamente el capital, el estado que debe crear las condiciones para atraer el capital y otros organismos como la Unesco. Quizás esto causa extrañeza, pero otros organismos empiezan a involucrarse, y combinarse con factores ya no solamente económicos para atraer al capital, sino que se involucran otros aspectos como los culturales, especialmente los sociales, para rentabilizar al capital. Ahora, como el estado ya no está en el sistema de protección –en términos de llevar

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

28


un desarrollo económico homogéneo– es muy importante que las ciudades empiecen a competir entre ellas por los recursos. Pero, tomando en cuenta que ya son recursos transnacionales, insisto, las ciudades deben competir por ellos. Para eso hay fondos orientados a determinar las actividades que se desarrollen a través de un proyecto de intervención urbana. La mayoría de esos proyectos tienen que ser distintivos, en otras palabras, las ciudades empiezan a buscar la manera de ser únicas para no competir abiertamente con otras ciudades; sin embargo, son únicas en términos de ofrecer ciertas características específicas para el capital. Ahí surge el papel importante de la planificación urbana con otros aportes desde la academia. Introducir ciertos aportes culturales, sociales, distintivos, identitarios de la sociedad, de la ciudad, para hacerla competitiva. Se empiezan a crear los imaginarios, también de manera dominante como rentables. Las ciudades se distinguen con base en la creación de una imagen o al aprovechar ciertos imaginarios sociales urbanos para hacerlas distintivas. El éxito de las ciudades depende del papel que cumplan en la economía o el papel que quieran desarrollar. Así, hay ciudades globales –Nueva York, Tokio, París, Londres– pero también otras que pueden ser turísticas. Designación de motes y etiquetas: ciudades creativas, ciudades del entretenimiento, ciudades del conocimiento, todas de acuerdo con la idea de hacerlas distintivas, especializarlas en determinadas cosas para atraer al capital, ciudades del turismo, ciudades culturales, ciudades deportivas, etcétera. Todo este proceso se basa, lógicamente, en el proyecto de intervención urbana. Algunas consecuencias son evidentes, sobreviene la fragmentación, no solamente del espacio público, sino también una fragmentación social. En realidad, el modelo anterior del estado subsidiario en América Latina jamás disminuyó o acabó con las desigualdades sociales; menos aún con la distribución desigual de la riqueza. En este caso la fragmentación del espacio social, del espacio urbano, no se ha terminado; pero además, esta nueva ideología de hacernos distintivos, de representar la diferencia, de ser único, lógicamente trae una serie de conflictos. En realidad, el conflicto por el espacio público y el espacio urbano, siempre se ha dado, pero se intensifica como producto de la inversión dedicada a determinados espacios urbanos e intensifica las desigualdades. Para rentabilizar esos imaginarios, lógicamente en términos físicos, los lugares –también en términos no tangibles– los espacios empiezan a privatizarse. No solo hay creación de espacios semiprivados, sino también de los públicos. Podemos concluir al respecto, en primer lugar, la predominancia del capital especulativo, pero sobre todo la predominancia del capital destinado al desarrollo de la ciencia y la tecnología, lógicamente va a trasladar y a orientar determinados lugares del mundo que se especialicen en eso. Naturalmente, las ciudades que van desarrollando estas habilidades, van a ser las beneficiadas por parte del capital. Luego, a las ciudades les trae también una serie de conflictos derivados de la estructura en la relación entre capital y trabajo. Algo muy importante en este caso, todas aquellas políticas destinadas a la creación del empleo y sobre todo del empleo urbano, realmente no tienen cabida en la nueva dinámica mundial, principalmente por que no se trata de fomentarlo. En realidad, el empleo no es necesario en este momento para el capital, pues prácticamente va a necesitar el que le permita desarrollar la ciencia y la tecnología, en particular, desarrollar actividades especulativas. La manifestación del desempleo, del sub empleo y todas las manifestaciones, van a se-

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

29


guir en las ciudades. Si no se modifica el actual estado de la economía, pues todas aquellas actividades o políticas que posibiliten la creación del empleo, no estarán insertas en la dinámica económica mundial. Se trata de rentabilizar el capital con base en las nuevas tecnologías y nuevos flujos de capital especulativo. Todo aquel proyecto que tiene como base al empleo, simplemente no está inserto en la nueva dinámica; a esto hay que añadirle que el Estado, en su función de gestor, sigue invirtiendo en infraestructura urbana. Aunque esto último se haya disminuido fuertemente, el gasto social en realidad sigue comprometido; principalmente por que el capital –en la búsqueda de la rentabilidad– va a ir hacia aquel lugar donde se le garanticen las condiciones idóneas. En esa búsqueda, el objetivo del capital no es crear un impacto de bienestar social, es rentabilizarse. Por lo tanto, el Estado que invierte va a crear las condiciones al capital, y endeudarse para ponerle la infraestructura. Pero, si el capital considera que ya en esa actividad no hay rentabilidad, se va a otro destino. En este esquema, los estados siguen teniendo deudas, pero por un gasto social, sino porque sigue destinándose a la infraestructura urbana. En cierta forma, todos aquellos proyectos de intervención urbana estarán en la lógica de evitar la migración del capital; el Estado tratará de retenerlo, creándole las condiciones para que este ahí. Finalmente, se siguen intensificando las desigualdades sociales y espaciales, pero a diferencia de un periodo anterior cuando, mayormente se dio en los países subdesarrollados, ahora es en todo el territorio, en todo el mundo. Ya se ven las manifestaciones sociales, movimientos sociales, conflictos sociales que no solo se dan en los países subdesarrollados. Son casi todo el tiempo-producto, precisamente de la concentración y centralización de la riqueza en un grupo muy pequeño de capitalistas. Lógicamente, en términos espaciales hay una mayor fragmentación del espacio, una mayor exclusión. La distinción implica ser diferente del otro; todos aquellos grupos sociales e individuos que no cumplan las características de esa distinción simplemente están excluidos de los intereses del capital. Las implicaciones para las ciencias, las disciplinas y los estudios urbanos tiene que ver un poco con volver a la crítica. Un autor chileno, Adrián Gorelik1, decía que dejemos la imaginación académica y volvamos al imaginario del urbano. Creo, en el sentido de hacer un poco de crítica, que debemos reflexionar sobre cuál ha sido nuestro papel como aportadores en términos, incluso, ideológicos; en el papel de los planes y los proyectos de intervención urbana. El capital se ha aprovechado de todos aquellos aportes, todos aquellos que tienen que ver con el resalte de los factores identitarios culturales y sociales; el capital se ha aprovechado para rentabilizarlos. En todos los nuevos proyectos que ya tienen, prácticamente desde mediados de la década de los noventa, aquellos donde se impulsan las artes, la cultura y la identidad han sido fuertemente impulsados en los proyectos de intervención urbana. Incluso, algunos impuestos a través de ciertas etiquetas como “Patrimonios culturales de la humanidad”, como “Pueblos mágicos”, son etiquetas que, en cierto modo, su objetivo es rentabilizar el capital. Han utilizado aportes por parte de la academia para rentabilizarlos; entonces, en este caso es muy importante volver a la crítica, ver nuestro papel.

1 Nota del coordinador: De acuerdo con “Siglo XxI editores”, Adrián Gorelik nació en Mercedes, Argentina (1957). http://www.sigloxxieditores.com.ar/fichaAutor.php?idAutor=1057 (marzo, 2014).

Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

30


Suelo, Estructura y Movilidad Urbana

256


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.