Exposición Cientifica

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EXPOSICIÓN DE GÉNESIS 1 AL 11 Explicación de los orígenes del universo y la vida

Reflexión sobre la importancia de una explicación sobre los orígenes Cualquier cosmovisión necesita contestar la más primordial de las preguntas que el ser humano se hace: ¿De dónde venimos? La Biblia es la cosmovisión más completa y Dios en su infinita sabiduría comenzó su revelación escrita explicándonos de dónde venimos. Llevó a Moisés a escribir 11 capítulos que explican mejor que cualquier otra cosmovisión, con muchos detalles sobre lo que sucedió desde el principio hasta el segundo comienzo de la humanidad después del diluvio. El propósito de esta exposición bíblica es equipar al creyente con la verdad literal de la Biblia, explicada en lenguaje científico, que hoy maneja un joven al terminar la secundaria.

Reflexión sobre el origen de las teorías sobre los orígenes Solo hay dos teorías metafísicas que explican el origen del universo y de la vida. Ninguna ciencia es capaz de verificar la veracidad de estas teorías, porque el conocimiento humano es muy limitado ante la realidad visible y observable. La ciencia es incapaz de verificar el origen del universo y de la vida. La ciencia tiene enormes limitaciones, para llevarnos a la verdad profunda de las cosas. La más antigua es la de la creación instantánea de todo por parte de Dios. Pero Caín enseñó a su descendencia que no fue un Dios, sino muchos dioses los que trajeron todo a la existencia, dando nacimiento al politeísmo. Por esta raíz histórica es que las religiones más antiguas son la monoteísta y la politeísta. Ambas creen en la creación intencional de una persona o personas que trajeron todo lo visible a la existencia.


En los 46 siglos que tenemos de registros históricos, la teoría de la creación fue siempre la predominante. La descendencia de Set siempre se mantuvo en comunión con el Dios verdadero, porque su papá Adán así les enseñó durante 800 años. Esta comunión solo era posible invocándolo, porque los descendientes de Adán nacemos separados de Dios. Esta generación que invocaba al Dios verdadero, siempre tuvo claro que la creación había sido en 6 días de 24 horas. Todo fue creado instantáneamente y totalmente terminado y perfecto. Adán vio a Enoc, a Matusalén y a Lamec, el papá de Noé. Adán pudo contarle a 8 generaciones subsiguientes sobre el jardín del Edén y de sus encuentros diarios con su Hacedor. Todas estas generaciones mantuvieron la tradición oral sobre la existencia de Dios y de sus actos creadores. Haber oído a Adán fue fundamental para la fe en Dios por parte de todas estas personas. De la misma manera, Caín alejó a su descendencia del conocimiento del Dios verdadero y les mintió, al decirles que los astros del cielo eran los dioses que gobiernan a los hombres. Este es el comienzo de la astrología. En resumen, siempre ha existido un pequeño remanente que invoca al Dios verdadero, aun mucho antes que Moisés comenzara la formación de una nación gobernada directamente por la revelación directa y visible de Dios a Adán. La teoría de la Evolución es un invento humano que surgió como respuesta de una casta de científicos rebeldes contra Dios, acicateados por los abusos de una Iglesia que se desvió de su misión redentora. Y lleva apenas 150 años, pero ya la ciencia demostró que es una teoría falsa, porque contradice principios científicos verificados por el método científico. Así las cosas, a comienzos del presente milenio solo queda en pié la teoría de siempre: La Creación. Sin embargo, en los medios, en las escuelas y universidades se sigue manejando como verdadera a la Evolución. Es una premisa que no se discute y se da por cierta. Tenemos que combatirla con firme mansedumbre, llenos de argumentos científicos.

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Explicaciones científicas sobre el proceso de la creación divina La ciencia verificada de los últimos 100 años nos permite hoy ofrecer a los jóvenes estudiantes y a los adultos explicaciones que complementan el escueto e intrigante relato de Dios a Moisés en Génesis. Tenemos que diferenciar entre la especulación científica y la ciencia verificada. Por ejemplo, todo lo que nos enseñan los cosmólogos es especulación científica. En cambio, lo que nos enseñan los biólogos moleculares con el genoma humano es ciencia aplicada, previamente experimentada y verificada. En nuestro caso, solo vamos a usar ciencia verificada, la que tiene evidencias empíricas que apoyan su veracidad. Vamos a examinar cada pasaje de Génesis 1 al 11 y vamos a explicarlos en lenguaje científico de hoy.

Posibles usos de este material de estudio en nuestras iglesias En casi todas nuestras iglesias tenemos escuela dominical con el grupo de jóvenes que estudian los últimos años de secundaria o comenzando la universidad. Me parece que este grupo de creyentes jóvenes es el prioritario en nuestras congregaciones. También es un material adecuado para grupos de estudio bíblico en las casas. Y por supuesto puede ser usado para organizar un sermón, aplicando la homilética correcta.

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Explicación del origen del mundo visible Génesis 1: 1 “En el principio creó Dios los cielos y la tierra.” Dios afirma que hubo un comienzo. Esto quiere decir que antes de aquel principio ya existía Dios. También significa que Dios trajo el tiempo a la existencia. También queda implícita la verdad de que Dios no habita en el cosmos inmenso que creó al comienzo, ni está sujetado por el tiempo. Lo anterior quiere decir que Dios está por fuera de su creación y es una persona autónoma que no está sujetada ni al tiempo, ni al espacio, ni a la materia. La Biblia niega la teoría panteísta de que Dios y su creación son la misma cosa. Ellos, los panteístas, creen que todos somos un pedacito de Dios. A la larga todos somos dioses, que en algún momento nos fusionamos con la divinidad universal. Todos nosotros somos seres creados y por ende dependientes del gran Hacedor. Esta verdad cósmica es la raíz de la antropología correcta. El humanismo nos ha tratado de engañar afirmando que somos autónomos, que no rendimos cuentas a un ser superior. Esta falsa antropología ha llevado a muchas culturas a endiosar al hombre. Alejandro pretendió ser un dios. Julio César también. Napoleón fue un dios para los franceses del siglo XIX. Hoy endiosamos a cantantes, actores y deportistas. Ningún niño hoy quiere ser como Abraham, José, Moisés, David o Daniel. Hoy quieren ser como Shakira, Madona o Messi. La palabra Elohim fue reemplazada por Dios en castellano. Y en hebreo Elohim es un sustantivo plural. Lo anterior quiere decir que dentro de Dios hay más de una persona. Lástima que no hayamos conservado los diferentes nombres con los que Dios se reveló a Moisés, porque en hebreo cada nombre contiene un atributo divino. Elohim significa fuerza infinita y fidelidad total. Con estos dos atributos se reveló por primera vez a nosotros. Si Dios no es todopoderoso y fiel, estaríamos frente a un dios insuficiente y temible, que podría usar su poder de manera caprichosa e imprevisible. El Dios verdadero es todopoderoso y su manera de actuar ante su creación es previsible. 4


Los dioses paganos son insuficientes y veleidosos. Algunos dioses son malos y otros buenos. En este panteón de dioses insuficientes e infieles hay permanentes luchas para alcanzar ciertos objetivos o anhelos. En cambio, el Dios de la Biblia es totalmente suficiente y totalmente fiel. Adán experimentó estos atributos de manera directa y vio durante 930 años la fidelidad de Dios, a pesar de haber pecado. La combinación de las palabras “los cielos y la tierra” es una manera de decir el espacio y la materia. La materia ocupa un espacio. La materia tiene masa. Los eruditos han llegado a la conclusión de que esta frase inicial de este primer verso bíblico es un enunciado de carácter general, una gran afirmación fundamental, cuyo desarrollo progresivo se explica en los siguientes 55 versos de los capítulos 1 y 2. A partir del verso 2, Dios empieza a explicar algunos detalles de cómo y en qué orden creó todas las cosas visibles. Para el científico agnóstico este primer verso es un gran desafío a su inteligencia limitada, que es incapaz de concebir que antes de este principio nada visible existía. Nuestra mente no es capaz de imaginarse la nada. Como mínimo nos imaginamos un espacio. Pero la nada es eso: Nada. Lamentablemente, estos científicos prefirieron aceptar la hipótesis de Aristóteles que llegó a la conclusión de que el cosmos es atemporal, es decir eterno. Para Aristóteles su dios es la materia eterna. Porque cualquier causa que haya originado este cosmos es un dios todopoderoso. Es muy interesante saber que Aristóteles llegó a esta conclusión porque rechazó la conclusión filosófica de su maestro Platón, que le enseñó que el universo visible fue hecho por el universo de las ideas, en el que se diseñó y se trajo a la existencia lo visible. Platón estuvo muy cerca de la verdad bíblica en su especulación filosófica. Génesis 1: 2 “Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.” La materia estaba incompleta. Si algo está vacío, no puede estar desordenado. Esta expresión lo que nos quiere decir es que nuestro planeta estaba incompleto y 5


faltaban muchas cosas adicionales al agua que ya había sido creada. El agua es una de las formas de la materia, porque tiene masa y ocupa un espacio. En los versos 6 al 8 descubrimos que nuestro planeta estaba cubierto por dos capas de agua. La de encima que es vapor de agua atrapado en un pabellón de nubes, y debajo de este pabellón un inmenso océano que tapaba toda superficie seca, que estaba debajo de varios kilómetros de agua. Por lo tanto, el planeta elegido por Dios en el inmenso cosmos que acaba de comenzar a llenar, era solamente una gran masa esférica con dos capas de agua en estado gaseoso y líquido, y la futura porción de tierra seca estaba en el fondo del océano. Las tinieblas es una manera de decirnos que todo el cosmos estaba sumido en la oscuridad, porque la luz no había sido creada todavía. También puede referirse a la oscuridad que reina debajo de aquel océano. Es muy interesante que aparezca la expresión el Espíritu de Dios, que se movía sobre la esfera acuática que acababa de crear. ¿Por qué se movía una de las personas del Dios creador sobre la faz de las aguas? ¿Para protegerla? ¿Para contemplarla lleno de gozo? ¿Para pensar cuál opción iba a ejecutar como diseñador perfecto y todopoderoso? Cuando un artista comienza a pintar un cuadro necesita detenerse por momentos, contemplar los primeros trazos y decidir que va a hacer enseguida. Este verso ha sido interpretado de diversas maneras por los eruditos. Los que creyeron a comienzos del siglo XX que Darwin había descubierto la verdad sobre el origen de la vida, interpretaron este verso como un período de tiempo muy largo en el que Satanás introdujo un desorden destructivo, que desordenó y vació nuestro planeta. De esta manera pudieron acomodar el relato bíblico a los miles de millones de años que la teoría que la Evolución necesita. También llegaron a la conclusión de que en este intervalo fue que desaparecieron los dinosaurios.

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Pero esta interpretación irrespeta la verdad que este capítulo 1 enseña: Nada ni nadie se interpuso en el proceso creativo de Dios, durante los 6 días de la creación. Más adelante refutaremos con mayor soporte bíblico esta verdad que Dios repite 6 veces en este capítulo 1. Descartada esta primera interpretación que quiso congraciarse con las hipótesis evolucionistas, los eruditos más ortodoxos han llegado a la conclusión de que el verdadero significado de este intrigante verso es que cuando Dios ordenó con el poder de su palabra que nacieran la materia, el espacio y el tiempo, creó nuestro planeta y el agua en dos estados: Vapor y líquida. El hielo solo surgió después del diluvio, como lo veremos más adelante. La cosmología moderna no ha podido encontrar un planeta parecido. La Biblia deja implícito que la Tierra es el planeta especial de Dios, en el que Él quiso demostrar todas sus habilidades creativas y artesanales. Esta fue la primera elección que Dios hizo en la historia. Dios eligió nuestro hogar en el cosmos. La segunda elección recayó sobre Enoc, al que Dios se lo llevó directo al cielo sin morir físicamente. La tercera elección recayó sobre Noé, la cuarta sobre Sem y la quinta sobre Abraham. Y este proceso soberano de la elección divina continúa a lo largo del relato bíblico, siendo una de las doctrinas más difíciles de comprender. Pero es una realidad contundente: Dios elige y nosotros somos sujetos de su elección. Génesis 1: 3, 4 “Y dijo Dios: Sea la luz, y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas.” La Física moderna descubrió que la luz es el conjunto de ondas electromagnéticas que recorren todo el cosmos. Estas ondas son los rayos X, los infrarrojos, los ultravioleta, los gamma, las ondas de radio y por supuesto las ondas de luz visible al ojo humano. Lo anterior significa que en el cosmos hay varios tipos de luz y la mayoría no los puede ver el ojo humano. La palabra luz implica movimiento, implica fuerza o energía. El Creador sigue llenando el cosmos que trajo a la existencia. Además de la materia que tiene masa, Elohim trajo a la existencia la luz que son ondas sin masa. Ondas que se desplazan por todo el cosmos a velocidades superiores a la materia.

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Por lo tanto, lo que Dios nos está enseñando en este pasaje es que él creó el espectro electromagnético que se mueve por todo el cosmos. En el espectro electromagnético viajan todas las sustancias que no tienen masa, como es el caso de todas las ondas electromagnéticas. Interesante entender algo de física básica para poder interpretar correctamente este pasaje. El espacio restante que no ocupa el espectro electromagnético es la oscuridad. Científicamente hablando, la oscuridad es la ausencia de luz u ondas electromagnéticas, que es posible si la temperatura del espacio es del cero absoluto, que equivale a 273 grados Celsius por debajo de cero. Pero en realidad el espacio tiene una temperatura más alta, lo que nos permite concluir que aunque nosotros veamos oscuro el espacio en una noche estrellada, la verdad es que en ese espacio hay alguna cantidad pequeña de ondas electromagnéticas en movimiento, y por ser pequeña esta cantidad de ondas, lo que vemos es oscuridad. ¡Qué misterio! En conclusión, al final de este primer día Dios creó el espectro electromagnético, que es la energía sin masa, que es el complemento perfecto de la materia, dejando para el cuarto día la creación de las estrellas. Génesis 1: 5 “Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas Noche. Y fue la tarde y la mañana un día.” Estas dos frases cortas son muy intrigantes, porque ya Dios nos ha hecho una comparación entre la luz y las tinieblas. Con estas nuevas frases le puso nombre a dos fenómenos cósmicos, y nos anticipa que su planeta elegido gira sobre sí mismo, de manera que cada 12 horas la mitad recibe luz (la mañana), mientras que la otra mitad está en tinieblas (la tarde). Es una manera sencilla para explicarnos que Él dispuso que su planeta predilecto tuviera luz durante la mitad de un día y oscuridad durante la otra mitad. Pero también nos está informando que en estas primeras 24 horas terrestres él llamó a la existencia a todo el universo, comenzando con nuestro planeta, que inicialmente era un cuerpo cubierto de agua, y que en este mismo día creó la luz,

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que es energía que se mueve mediante ondas que no tienen masa, y que complementa la materia. Así las cosas, al finalizar el primer día de su creación tenemos al planeta Tierra en movimiento rotatorio que dura 24 horas, girando en el espacio, que ya está lleno del espectro electromagnético. Este lenguaje sencillo de Génesis esconde en el significado de cada palabra en hebreo muchas verdades que el lector desprevenido no logra capturar. He aquí una razón para estudiar de manera expositiva toda la Biblia. Génesis 1: 6 – 8 “Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. Y llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.” En estos versos, nuestro Creador nos explica que dedicó todo el segundo día a construir y equipar nuestra atmósfera, para colocar a los seres vivos. Ya no aparece el verbo crear, sino el verbo hacer en pasado, porque todos los componentes físicos y químicos ya existían el primer día. Dios está ejerciendo como el mejor artesano cósmico construyendo la atmósfera adecuada para albergar la vida. La ciencia moderna ha comprobado que la atmósfera terrestre es inmensamente compleja, repleta de pequeños detalles físicos, químicos y electromagnéticos, que permiten la supervivencia de plantas, animales y el ser humano. El equilibrio entre estos componentes de la atmósfera es tan delicado, que los expertos saben que un pequeño cambio entre ellos acabaría con la vida. La atmósfera de nuestro hogar cósmico está tan bien afinada, que la posibilidad de que haya surgido por accidente es imposible matemáticamente hablando. Son 15 componentes físicos que van desde el nitrógeno y oxígeno hasta el vapor de agua, que reaccionan juntos de manera constante. Los primeros 6 kilómetros de altura contienen la mayor cantidad de la masa atmosférica y en los primeros 30 kilómetros está el 97% de esta masa.

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Pero nuestra atmósfera es gobernada por componentes invisibles como la gravedad y la energía electromagnética, que ponen en movimiento los componentes físicos de maneras que la ciencia todavía no comprende. Intentemos por un momento imaginarnos a Dios organizando este balance tan delicado entre los 15 componentes atmosféricos. La persona todopoderosa gastó 24 horas para terminar esta maravilla para nosotros, sus criaturas. La palabra original en hebreo para describir la masa de agua que estaba encima se traduce más fielmente como pabellón. Esto significa que la capa de nubes que protegía al planeta cubría todo el planeta, y gracias a este pabellón el clima era cálido en todas partes. Se ha replicado en laboratorio este tipo de atmósfera y se comprobó que la luz solar es rosada en vez de la amarilla actual. En conchas de nácar sepultadas a muchos metros encontraron gotas de agua que al examinarlas tenían 30% de oxígeno, cuando hoy solo tenemos entre 18 y 21% de oxígeno en la atmósfera. Se llegó a la conclusión de que estas gotas existieron antes del diluvio. Con esta mayor cantidad de oxígeno, la presión atmosférica se duplica y la vegetación es gigantesca comparada con la actual. La conclusión a la que han llegado los científicos es que esta atmósfera pre diluviana, protegía perfectamente nuestro planeta de las ondas electromagnéticas dañinas que recorren el cosmos. Dios hizo una atmósfera fielmente protectora, y esta fue la causa para que los seres humanos vivieran 900 y más años, antes del diluvio. Cuando un niño se sienta a armar un rompecabezas de cientos de componentes, gasta muchos días hasta terminarlo. Dios nos armó esta atmósfera en solo 24 horas, y los científicos todavía no conocen cómo funciona esta espectacular cámara de gas que nos permite respirar, crecer y movernos. Llevan más de 100 años estudiándola y no podrán descubrir todos sus secretos. Los científicos son como estos niños, tratando de entender cómo funciona la atmósfera que Dios llamó “Cielos”. En el NT Pablo nos dice que Dios habita en el tercer cielo.

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Por fuera de este cielo terrestre no puede haber vida física. Y por fuera del tercer cielo de Dios tampoco hay vida gloriosa. Allá iremos los justificados después del milenio, cuando Jesucristo le entregue su Reino al Padre y comience el Estado Eterno. Nuestro Creador es desde el comienzo todo un poeta que nos da pistas sobre la similitud entre su tercer cielo y el cielo terrestre que construyó para todos nosotros. A Dios le encantan las realidades paralelas entre su cielo y el nuestro. Por eso la poesía hebrea está llena de paralelismos. Y vuelve a insistir que se gastó 24 horas, una tarde y una mañana para armar la atmósfera. No cabe en el texto la posibilidad de que fuesen miles de millones de años. Por primera vez aparece la corta expresión “Y fue así.” Es una manera de decir que nadie se interpuso o alteró lo que Dios hizo. Al final del capítulo vamos a examinar el significado de esta reiterativa afirmación divina. Génesis 1: 9, 10 “Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas Mares. Y vio Dios que era bueno.” Nuestro Hacedor es una persona ordenada, que va organizando toda su creación bajo la ley de “causa – efecto”. Unas cosas sustentan a otras. Sin agua en estado líquido es imposible la vida. Sin luz y sin atmósfera tampoco. Pero el planeta era solo una esfera con agua líquida, un pabellón de nubes que cubría todo el planeta y en medio de estas dos masas de agua una atmósfera llena gases propicios para la vida. En este tercer día Dios hace emerger una porción de tierra seca, construyendo el primer continente. ¿Se imaginan el cataclismo tan portentoso que fue que una gigantesca porción de tierra subiera del fondo del mar y sobrepasara el nivel del mar? Parece que al comienzo y hasta el diluvio, solo hubo un continente y un océano. Los historiadores más antiguos hablan de un continente que se hundió en un cataclismo. Platón, aseguró que se trataba de una historia verídica. 11


Durante el diluvio Dios fracturó las profundidades de planeta y de allí emergieron inmensas masas de agua que ayudaron al agua que cayó de las nubes a cubrir la poca tierra seca en solo 150 días. Es muy interesante comprobar que Dios bautizó a su planeta favorito “Tierra” y así se quedó. De las pocas cosas que el hombre moderno ha respetado del relato bíblico. La traducción al castellano no diferencia entre tierra en minúscula y Tierra en mayúscula. En esta exposición vamos a usar tierra cuando se refiere a la superficie seca y Tierra cuando se refiere al planeta. Génesis 1: 11 – 13 “Después dijo Dios: Produzca la Tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la Tierra. Y fue así. Produjo, pues, la Tierra hierba verde, hierba que da semilla según su naturaleza, y árbol que da fruto, cuya semilla está en él, según su género. Y vio Dios que era bueno. Y fue la tarde y la mañana el día tercero.” Es muy interesante ver cómo en este pasaje Dios se torna incisivo y reiterativo, como anticipándose a los que algún día negarían que la vida es hechura directa suya. Dios no apeló a procesos evolutivos para traer las distintas formas de vida a su existencia. En solo 24 horas el primer pedazo de tierra seca que emergió del fondo marino, fue llenado por vegetación ya madura y lista para reproducirse. ¿Nos alcanzamos a imaginar la velocidad con la que tuvieron que acontecer todos estos fenómenos naturales? En solo 24 horas surgió el primer continente y fue llenado por miles de millones árboles con sus frutos, arbustos con hojas comestibles, flores de todas las formas, tamaños y colores. Con estas afirmaciones Dios nos está diciendo que la vida vegetal solo puede reproducirse dentro de su mismo género. Una semilla de trigo solo puede dar vida a nuevas ramas de trigo. Una semilla de manzana solo podrá dar vida a nuevos árboles de manzanas. Los evolucionistas nos quisieron enseñar que esta sencilla afirmación de Dios no era verdad y dedujeron que la naturaleza era capaz de dar vida de una especie o género a otra especie o género. Del pez al reptil. Del simio al hombre. La selección natural 12


solo es capaz de modificar atributos de cada especie, pero no puede brincar de una especie a otra. La Biología molecular así lo demostró en 1974. La creación está sujetada a los límites que su Creador le impuso en su diseño. La naturaleza no es todopoderosa, como lo creen nuestros indígenas y los científicos que niegan la existencia de Dios. Hoy en día sabemos que la teoría de la Evolución es falsa. Y podemos confiar en esta profunda verdad bíblica que Dios le enseñó a Moisés hace 3,460 años. En el tercer día de la creación Dios hizo emerger el primer continente debajo de las aguas y lo llenó con la primera forma de vida: Los vegetales, negando de esta manera la hipótesis evolucionista que cree que la primera forma de vida surgió en un medio acuoso, donde por accidente nació la primera célula. Dios afirma que la primera forma de vida fue su mundo vegetal y no comenzó con una célula o una semilla. De un solo golpe y en pocas horas llenó el primer continente con flores, arbustos, pastos, árboles pequeños y otros gigantescos. Miles de millones de ejemplares que fueron puestos por el Creador ya maduros y con frutos. Dios creó una vegetación madura desde el comienzo, porque pocas horas después los animales y Adán necesitarían alimento para vivir y disfrutar. Esto es lo que podemos llamar creación instantánea. Génesis 1: 14 – 19 “Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos, para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la Tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la Tierra, y para señorear en el día y en la noche, para separar la luz de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno. Y fue la tarde y la mañana el día cuarto.” Este pasaje nos enseña que solo hasta el cuarto día Dios hizo el Sol que es el cuerpo que emite ondas de luz visible, con la intensidad precisa que necesita la vegetación que acaba de crear, para que la fotosíntesis pudiera existir. Pero tenemos que

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recordar que la luz existía desde el 2º día, pues el espectro electromagnético recorría todo el cosmos. La distancia entre el Sol y la Tierra es la precisa para que la luz solar sustente la vida. Los planetas más cercanos y más lejanos no reciben la intensidad precisa que exige la vida. La fotosíntesis es el proceso mediante el cual la vegetación convierte la luz visible y algunas partículas inorgánicas, como el CO2, en alimento, que es materia orgánica para poder sustentar al resto de los seres vivos que todavía no han sido creados en este momento del cuarto día de la creación. Un argumento científico muy poderoso para negar la existencia de millones de años en el proceso creativo es que sin luz visible y sin atmósfera las plantas morirían en pocos meses. Según el relato bíblico, las plantas estuvieron sin luz solar unas pocas horas entre el tercer y el cuarto día. Todo lo anterior nos permite reforzar la veracidad de la creación instantánea en pocas horas. La otra verdad científica comprobada que nos enseña este pasaje es que las lumbreras puestas por Dios en el firmamento le sirven al ser humano para medir el tiempo. El tiempo es algo indispensable para medir la velocidad a la que se mueve nuestro planeta en relación con el Sol y con las lumbreras que vemos de noche. Es maravilloso comprobar que las lumbreras que una persona puede ver cada noche, se mueven cada día a una velocidad constante, de manera que cada año vuelven al mismo sitio. Esto quiere decir que podemos medir cada año con las lumbreras que vemos de noche, sin necesidad de recurrir al Sol. La gente en la antigüedad sabía en qué época del año estaba al mirar sobre el horizonte cuáles lumbreras estaban y a qué altura. Qué lástima que nosotros hayamos perdido esta habilidad y dependamos de relojes y calendarios para conocer en qué día y hora estamos. 14


El año medido con la ayuda de las lumbreras que podemos ver dura 365 días, 6 horas, 9 minutos y 9.76 segundos; mientras que el año solar mide 365 días, 5 horas, 48 minutos y 45.25 segundos. Por lo tanto, existe una diferencia entre las dos mediciones de 20 minutos y 24.51 segundos. ¿Cuál de las dos medidas es más exacta? Es fascinante que nuestro año no sea preciso ni exacto, porque depende del parámetro con el que lo midamos. Los navegantes usaron durante milenios las lumbreras para saber la dirección en que avanzan y la latitud en que estaban. La estrella polar jugaba un papel importante en este método. Los creyentes sabemos que todo el firmamento nos lo llenó el Creador de lumbreras para medir el tiempo, pero también para deleitarnos acostados sobre el césped una noche sin nubes. ¡Cuán generoso es nuestro Creador! Nos llenó el firmamento de estrellas para alumbrarnos, para alegrarnos la vida durante las noches. La luz eléctrica solo fue descubierta y sujetada con tecnología en el siglo XIX. Esto quiere decir que durante más de 5,600 años los seres humanos fueron alumbrados durante las noches por las lumbreras de Dios que podemos apreciar directamente en una noche sin nubes. Qué lástima que al vivir en ciudades llenas de luz eléctrica hayamos perdido esta fantasía que no cuesta un peso. En cambio nos vamos a cine de noche a ver fantasías humanas. Nosotros los modernos hemos perdido el contacto cotidiano con la creación, porque vivimos una realidad virtual en Internet y la TV. ¡Vivimos en mundo virtual inventado por nosotros! ¿No les parece triste y lamentable? Génesis 1: 20 – 23 “Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la Tierra, en la abierta expansión de los cielos. Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. Y Dios los bendijo diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los

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mares, y multiplíquense las aves en la Tierra. Y fue la tarde y la mañana el día quinto.” Con la vegetación y la luz del Sol, estaba todo preparado para traer a la existencia a los primeros animales, que los ubicó en el mar y en los ríos. Y simultáneamente creó las aves. Nuevamente Dios insiste en la limitación que impuso en toda forma de vida, cuya reproducción solo puede darse dentro de su mismo género. De una ballena solo puede nacer un ballenato. De un águila solo pueden nacer aguiluchos. Pero en este pasaje hay algo nuevo que no dijo cuando creó la vegetación. Dios bendijo a esta nueva forma de vida animal. Uno de los significados de bendición es dar poder, otorgar un privilegio, asignar una responsabilidad honrosa. Dios les dio el poder de procrearse sexualmente y les ordenó que se multiplicaran. Estos animales tenían que participar de manera activa en la procreación de cada especie. La reproducción mediante la unión sexual de un macho con una hembra es necesaria para procrear en el mundo animal. En cambio el mundo vegetal se reproduce por polinización que hacen insectos y aves al pasear de planta en planta. También al caer la semilla al piso, ser pisada por animales y germinar. En el mundo vegetal existe un grado muy pequeño de voluntad. Evidentemente existe un mayor grado de voluntad en el mundo animal, que por instinto copulan en el período preciso para dar lugar a la multiplicación de la especie. La locomoción es otro atributo que no tiene el mundo vegetal. Dios no dijo nada sobre el alimento de estos animales marinos y las aves. Hoy sabemos que el océano está repleto de comida de tamaño microscópico, llamado kril. Génesis 1: 24, 25 “Luego dijo Dios: Produzca la Tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la Tierra según su especie. Y fue así. E hizo Dios animales de la Tierra según su género, y ganado según su género, y todo animal que se arrastra sobre la Tierra según su especie. Y vio Dios que era bueno.” 16


Cuando Dios insiste en alguna verdad hasta parecernos cansón, es porque quiere llamar nuestra atención. Dios no dejó duda que la teoría de la Evolución de las especies mediante el proceso de la selección natural es imposible, porque Él así lo quiso. Dios no deja nada al azar. Nuestro Soberano se anticipa a cualquier eventualidad futura del hombre y deja clara su doctrina, para que el creyente con suficiente fe no tambalee frente a las mentiras seudocientíficas. Pero nuevamente en este pasaje Dios agrega algo nuevo: Creó el ganado. En esta categoría caben todos los animales domésticos, que facilitarían la vida del ser humano. No hay animales domésticos en el agua. Todos son terrestres. Es mentira que los perros son una evolución de lobos y perros salvajes. Dios creó cada especie totalmente definida desde el comienzo. La selección natural lo que permite es el surgimiento de nuevos tipos de perros o ganado, cuando el hombre cruza perros distintos o toros y vacas distintos. Es mentira que el hombre tuvo que domesticar animales. Dios se los entregó domesticados desde el comienzo. La otra reflexión pertinente que podemos hacer es que la Biología moderna nos ha permitido descubrir que todos los seres vivos están hechos de los mismos materiales que se encuentran en la tierra. La química de los seres vivos comienza y termina en los elementos químicos del polvo del planeta. En términos teológicos podemos decir que crear, que es hacer algo de la nada, no es lo mismo que producir o hacer, que significa que Dios diseñó y trajo a la existencia instantánea muchísimos animales a partir del polvo terrestre que creó el primer día. Por eso es que no se utiliza el verbo crear sino producir. Finalmente, es necesario mencionar que Dios lleva a Moisés a escribir de manera separada la palabra serpiente, en plural, lo que nos quiere decir que este animal no es ni una bestia, ni un animal de la tierra, ni un animal que se arrastra sobre la tierra. Las serpientes eran animales diferentes y al quedar mencionados como el único género con nombre propio, Dios quiere llamar nuestra atención, para eventos que acontecerán más adelante. 17


Génesis 1: 26 – 28 “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la Tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la Tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la Tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la Tierra.” Este pasaje nos revela varias verdades nuevas, que antes no había dicho el Creador. La primera es que Dios utiliza un verbo diferente cuando decidió traer al ser humano a la existencia. Empleó el verbo hacer, mientras que anteriormente dio la orden a las aguas de producir seres vivientes. También le ordenó a la tierra firme y seca producir otros seres vivientes. Este verbo significa que Dios se involucró de manera directa y personal, cual artesano, en la hechura del ser humano. He aquí la primera muestra del amor especial que Dios tiene por nosotros. He aquí la primera evidencia de su intención de hacer a alguien parecido a Él, con el fin de entablar una relación directa. La otra revelación intrigante es que Dios ordenó a Moisés escribir el verbo en plural: “Hagamos…”. Esta es la segunda pista en este capítulo sobre la realidad de que en Dios hay más de una persona. Elohim fue la primera pista. Desde el comienzo Dios quiso que supiéramos que en Él habita más de una persona. Y cuando hizo a Adán, parece que hablaron entre sí estas personas divinas y se pusieron de acuerdo en hacerlo a semejanza de ellos. La trinidad divina es una evidencia de que Dios es una persona que le encanta entablar relaciones. ¡Qué misterio tan espectacular! Otra vez la traducción en castellano reemplaza con la palabra Dios un nuevo nombre de Dios: Jehová, que significa el auto existente, el eterno, el “Yo soy el que soy”. Con este nombre fue que Dios se dio a conocer a Moisés en la zarza que ardía pero no se consumía. El nombre de Jehová guarda una relación especial con el ser humano. Por eso es tan usado en el AT.

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La afirmación “a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza” es tan profunda, que es sin duda el principio sobre el cual debe fundamentarse la ciencia de la Antropología. Por lo tanto, toda la Antropología moderna es incorrecta porque asume que el ser humano es un animal más evolucionado que los demás, sujetados a sus genes y pasiones, en el que no hay un espíritu capaz de gobernar sus inclinaciones naturales. No vamos a entrar en los detalles de lo que es la semejanza del hombre con Dios, porque para ello es primero indispensable estudiar los atributos divinos y con base en éstos establecer cuáles son los nuestros. La Antropología bíblica es un tema que amerita un espacio aparte. En este pasaje también queda claro uno de los propósitos que Dios estableció para el ser humano: Señorear al resto de la creación. Y como nos regaló una voluntad superior a la del resto de los seres vivos, entonces queda implícito que debemos usar esta capacidad para planear, organizar y ejecutar cuando usamos el mundo vegetal o animal. El auge explorador e investigador del siglo XIX y comienzos del XX por parte de avezados y atrevidos aventureros de USA y Europa, dio cabal cumplimiento a esta orden de señorear toda la Tierra. Nunca antes en la historia una civilización había llegado a todos los rincones del planeta. Los chinos y los vikingos llegaron lejos de sus tierras, pero nunca señorearon todo el planeta, sino una parte de éste. La otra verdad nueva es que Dios nos diseñó como varón y hembra. Al estar esta afirmación dentro de la frase en la que Dios reitera que fuimos hechos a su imagen y semejanza, algunos eruditos judíos han concluido que dentro de la naturaleza divina también existen los dos sexos. Pero Jesucristo afirma con claridad que el cielo no hay matrimonio ni procreación sexual. Pero lo más sorprendente de este pasaje es que por primera vez Dios le habló a la primera pareja y les reveló los dos primeros propósitos por los cuales lo trajo a la existencia: Multiplicarse y señorear la enorme y hermosa finca que les dejó. Dios siempre toma la iniciativa frente al ser humano y nos da sus santas y sabias instrucciones. Dios nunca le ha arrebatado al hombre estas dos capacidades que le regaló: Multiplicarse y señorear. Dios es fiel a pesar de que nosotros somos infieles. ¡Qué alivio reconocer este atributo divino! 19


Es evidente que Dios delegó parte de su autoridad y soberanía a partir de este momento de la creación. Los seres humanos, ejerciendo su voluntad, tienen autoridad delegada por el Creador. Y aunque la primera pareja pecó, esta autoridad no le fue cancelada. Por esta verdad bíblica es que vemos tanta codicia, egoísmo y maldad en nuestros países, porque la inmensa mayoría de las personas con autoridad la ejercen violando los principios divinos; abusando de sus empleados, acumulando demasiado para sí mismos y dejando las migajas para los demás. Estos gobernantes de todas las épocas algún rendirán cuentas por su malvada mayordomía al dueño absoluto de toda la creación. Génesis 1: 29 – 31 “Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la Tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. Y a toda bestia de la Tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la Tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así. Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.” Este pasaje, que es una orden divina muy clara, nunca tuvo importancia dentro la Iglesia, porque desde hace siglos sabemos que algunos animales comen carne y casi todas las personas también. Este es uno de los pasajes que le ayudaron a malos exégetas del siglo IV y V a concluir que el método correcto para interpretar la Biblia es el alegórico y no el gramatical e histórico. Durante 1,000 años la Iglesia alegorizó la Biblia y llevó a las ovejas a doctrinas falsas. Según los alegoristas, este pasaje parece ser una equivocación de Dios. La única manera de aceptarlo es buscando un significado espiritual escondido en estas palabras. Pero cuando los buenos exégetas de los últimos 150 años tuvieron que enfrentar a Darwin y sus discípulos, comenzaron a investigar y llegaron a la conclusión de que antes del primer pecado, el diseño divino de animales y personas era distinto al que hoy conocemos.

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Esta orden divina de que todo el mundo animal y nosotros fuésemos vegetarianos perduró hasta el diluvio. Dios introdujo cambios profundos en ambos después del diluvio, como lo veremos más adelante. Los animales y el ser humano no éramos como somos hoy. Esta conclusión reafirmó también que Dios se revela al hombre de manera progresiva. Esto quiere decir que Dios incrementa pasaje tras pasaje las verdades que quiso que nosotros conociéramos. Lo hemos comprobado en este primer capítulo de Génesis. En la medida que avanza el proceso creativo, Dios va revelándole a Moisés nuevas verdades, que nos ayudan a comprender mejor el carácter y la voluntad de Dios. La otra verdad es que con el tiempo los diseños divinos y las reglas de juego entre los animales y el hombre cambian, usualmente por la desobediencia humana, y Dios en su misericordia toma la iniciativa introduciendo cambios para que nuestra supervivencia sea posible. Esta realidad la podremos ver varias veces en estos 11 capítulos que estamos estudiando. Por esto es que el cristianismo es superior al judaísmo. Porque en el NT hay nuevas verdades de Dios que no fueron reveladas en el AT. Por esto es que siempre debemos interpretar el AT con la ayuda del NT, que es superior en revelación. Nunca debemos sacar doctrinas del AT sin validarlas con las del NT. Científicos cristianos norteamericanos han descubierto espectaculares realidades del mundo antes del diluvio, como ya lo mencionamos sobre la clase de atmósfera inicial. Poco a poco iremos contando algunos de estos descubrimientos científicos. Este pasaje tiene unas implicaciones muy importantes para todos nosotros: 1. Al principio, el planeta Tierra fue diseñado para que nadie matara a nadie. No existía la cadena alimenticia. Todos los animales y el hombre comían vegetales. Matar para comer no formaba parte del diseño original. 2. Nuestro paladar y nuestro sistema digestivo fueron diseñados para disfrutar y comer exclusivamente vegetales. Igual en todos los animales. En el milenio regresaremos a este estado original de cosas.

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3. Todos los dinosaurios, leones, cocodrilos y todas las bestias gigantes comían exclusivamente hierba verde. 4. Antes del diluvio la atmósfera tenía 30% de oxígeno y el doble de la presión atmosférica. La luz solar que la espesa capa de nubes dejaba entrar era de color rosado y el clima era templado en todo el globo. No había nieve en el único continente, ni en ninguna otra parte. 5. Esta atmósfera propiciaba un mundo vegetal gigante. Han logrado recrear esta atmósfera en laboratorios y un arbusto de tomate alcanza los 5 metros de altura y produce toneladas de fruta en cada cosecha. La comida alcanzaba para todos y no había conflictos por escasez. 6. La longevidad humana era 10 veces mayor que la actual, como lo registran las genealogías pre diluvianas. Este tema lo examinaremos más adelante.

Otras afirmaciones divinas en el capítulo 1 En varios pasajes Dios dice que vio todo lo que estaba haciendo y comprobó que era bueno, bueno en gran manera. Un Dios todopoderoso no tiene por qué crear o hacer algo imperfecto. La armonía en este mundo adámico era plena y feliz. La otra afirmación interesante que se repite en este capítulo 1 es: “Y fue así”. Esta es una manera de afirmar que nada ni nadie se interpuso entre la voluntad de Dios y su creación. Esta frase repetida 6 veces es una reiteración divina de que Satanás no se había rebelado todavía contra su Creador. En el cielo también existía armonía y los ángeles obedecían a Dios. Esta rebelión angelical ocurrió años después y fue la que propició la caída de Adán y Eva. Génesis 2: 1 “Fueron, pues, acabados los cielos y la Tierra, y todo el ejército de ellos.” Esta sencilla frase es una rotunda negativa a cualquier proceso evolutivo de la vida. Dios acabó su acto creador de la nada en 6 días de 24 horas. A partir de este momento se dedicó a sustentar su creación. 22


Dios creó todo perfecto, hermoso, y lo más importante: Armonía entre todas las criaturas. La lucha por la existencia no existía en la creación terrestre, porque había suficiente comida para todos. La Biología genética logró descubrir hace apenas 40 años la razón por la cual cada individuo de cada género o especie es único y ligeramente diferente de sus congéneres: La información codificada en el ADN que gobierna la materia viva ofrece miles de millones de combinaciones posibles cuando un hombre y una mujer procrean un bebé, y el ADN del bebé es diferente al de su papá y al de su mamá. Dios quiso que cada persona fuera diferente de las demás. Cada persona es única y especial delante de su Creador. Cada uno de nosotros está llamado por Dios para ser su hijo y entablar una relación íntima, personal y única con Él. ¡Cada uno de nosotros es un tesoro único y especial para Dios! De Adán y Eva salieron los europeos, los asiáticos y los africanos. La única raza humana va presentando modificaciones genéticas en cada individuo que nace. Y el medio ambiente contribuye a acentuar estas modificaciones. El exceso de Sol torna la piel más oscura, mientras que su escasez la torna muy clara y pálida. Estas modificaciones genéticas en todos los seres vivos no son evidencia de una evolución en cada especie, pues son apenas modificaciones por la inmensa cantidad de combinaciones dentro del ADN a través del tiempo. Este proceso de modificaciones genéticas dentro de cada especie es el proceso descubierto en el siglo XIX por Wallace, que lo bautizó “selección natural”. El error de Wallace fue creer que este proceso es infinitamente poderoso y por ende capaz de brincar de una especie a otra. Esta hipótesis que otorga poder infinito a la naturaleza fue usado por Darwin para escribir su famoso libro sobre la evolución de todas las especies vivas mediante el proceso de la selección natural. La Biología genética ha comprobado que la selección natural no es capaz de brincar de una especie a otra especie. La hipótesis de Wallace resultó ser falsa, pero esta nueva verdad solo fue demostrada en 1974, 120 años después.

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La frase “todo el ejército de ellos” al final de este verso, puede estar haciendo referencia a que también hay ejércitos en los cielos, lo que significa que también hay otros seres inteligentes en el cielo, donde Dios habita. Dios es un escritor al que le encanta el suspenso y nos va dando pistas para dejarnos intrigados y más adelante nos muestra su verdad. Génesis 2: 2 – 3 “Y acabó Dios en el séptimo día la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.” Dios no necesita reposar, porque no se cansa. Los eruditos en el lenguaje llaman a este tipo de pasajes “antropomorfismo”, porque se hace un paralelo entre una condición humana y la de Dios. Pasajes en los que el escritor habla de las manos de Dios, el brazo fuerte de Dios, que Dios se arrepintió, son antropomorfismos. Es un estilo literario que le facilita al lector entender una verdad que Dios quiere transmitir. Es un paralelismo válido que la da mucha fuerza al pasaje. Me parece que el estilo literario de Dios demanda de cada lector que usemos la inteligencia que nos regaló. Leer la Biblia nos exige concentración y corazón dispuesto. Examinar cada frase y enmarcarla dentro de su contexto. Dios se guardó muchos secretos en su revelación. Pero los que nos reveló son más que suficientes para que le creamos, lo obedezcamos y le amemos con convicción. En este paralelismo Dios le está diciendo al hombre que Él diseñó el ciclo biológico vital del ser humano en 7 días, uno para descansar y los otros 6 para trabajar. Dios no está dando ejemplo y quiere que nosotros hagamos lo mismo que Él hizo. Y aparece una nueva palabra: Santificar. Con este nuevo verbo, Dios está reiterando la importancia que tiene respetar este ciclo de 7 días. Quien lo respete, está siendo bendecido. Es interesante que toda cultura viva bajo el ciclo de 7 días. Otra enseñanza que respetamos del Dios de la Biblia. Esta orden divina fue transmitida por los hijos de Noé a todas las culturas. Y nuevamente comienza Dios afirmando que él acabó toda su creación en 6 días. Después de tanta reiteración divina sobre la creación rápida e instantánea, cuesta trabajo descubrir creyentes que quieren conciliar el relato de la creación con los 24


miles de millones de años de la Evolución. Espero que este estudio expositivo de Génesis reafirme la fe del estudiante en la exactitud gramatical e histórica de la Creación. Génesis 2: 4 – 6 “Estos son los orígenes de los cielos y de la Tierra cuando fueron creados, el día que Jehová Dios hizo la Tierra y los cielos, y toda planta del campo antes que fuese en la tierra, y toda hierba del campo antes que naciese; porque Jehová Dios aún no había hecho llover sobre la Tierra, sino que subía de la tierra un vapor, el cual regaba toda la faz de la tierra. Dios le está reiterando a Moisés que todo el capítulo 1 es preciso y exacto, así no sea suficientemente exhaustivo para todos. Dios quiere que le creamos, así no entendamos cabalmente todo lo que leemos sobre su muy breve y poco detallado relato sobre los 6 días de su creación. Desde el comienzo Dios demanda de cada uno de nosotros fe en Él. Y le reveló otra evidencia que demuestra que su creación original era distinta a la que Moisés conoció. El pabellón de nubes no soltaba lluvia y la superficie seca del primer continente era nutrida por agua subterránea. Imagínense: agua tibia llena de sales minerales disueltas en el subsuelo, siendo más nutritiva que el agua que cae de las nubes. El ciclo hidrológico (lluvia-evaporación-condensación) era distinto antes del diluvio. La vegetación estaba mejor alimentada y por eso era gigante. Recordemos que este pabellón de nubes era mucho más abundante y grueso que el de hoy, protegiendo a la atmósfera de los dañinos rayos del espectro electromagnético, como son los gamma y los ultravioleta. La vida estaba totalmente protegida, la vegetación gigante, y los seres humanos vivieron muchísimos más años, como lo registra la primera genealogía en Génesis 5. No es una coincidencia que los inventores del riego por goteo hayan sido los judíos, que al estudiar este pasaje descubrieron un principio de la vida vegetal: Es más eficaz nutrir cada planta con gotitas que lleguen directo a la raíz, en vez de gastar inmensas cantidades de agua que mojen las hojas, el tallo y solo una pequeña parte llegue a la raíz. 25


Gracias a este descubrimiento es que los judíos del siglo XX convirtieron el desierto de Judea en un jardín lleno de frutales. Dios siempre generoso dándonos pistas tecnológicas en su revelación escrita. ¡Qué necios han sido algunos hombres de ciencia al burlarse de la Biblia! Génesis 2: 7 “Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.” Ni siquiera Adán supo esta verdad. Espectacular revelación dada a Moisés de cómo y con qué nos hizo el Creador. La ciencia moderna comprobó la exactitud de esta verdad bíblica. Nuestro cuerpo está compuesto por los mismos componentes del planeta: Minerales como el calcio, el fósforo y el potasio; más gases como el hidrógeno, nitrógeno, oxígeno y un componente clave: el carbono, y el agua, que es la más abundante. Pero lo que la ciencia no puede explicar y ha intentado negar, es que Dios infundió aliento de vida, para que Adán se convirtiera en alguien vivo. La vida del hombre proviene del aliento de Dios. Es increíble que la ciencia trate de ignorar esta verdad, que verificamos cuando morimos físicamente. El cuerpo sin vida está ahí, porque el aliento de vida Dios lo saca del hombre. Por eso hablamos de “expirar”. Cuando alguien resucita es porque Dios devuelve su aliento de vida al cuerpo muerto. Sin este aliento de vida, que solo proviene de Dios, no tenemos vida. La vida es propiedad divina. ¡Somos criaturas que pertenecemos a nuestro Hacedor! El verbo soplar significa que este aliento de vida salió del interior de Dios. Por esto es que debe regresar a su dueño, cuando morimos. Regresamos a rendir cuentas a nuestro dueño y Hacedor. En este aliento divino es que reside nuestra semejanza al Creador. En este aliento es que están la voluntad, la inteligencia, la capacidad para pensar y escribir, la capacidad para tener ideas abstractas como las matemáticas y la música.

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¡Qué necios son los científicos que están intentando regresar a la vida a los cuerpos congelados de millonarios que dejaron pagada su cámara criogénica desde los años 60 del siglo pasado! ¡Qué necios son los que están tratando de clonar seres humanos! Están desafiando a Elohim. Génesis 2: 8, 9 “Y Jehová Dios plantó un huerto en Edén, al oriente; y puso allí al hombre que había formado. Y Jehová Dios hizo nacer de la tierra todo árbol delicioso a la vista, y bueno para comer; también el árbol de la vida en medio del huerto, y el árbol de la ciencia del bien y del mal.” Este pasaje incluye dos elementos nuevos en la creación: el árbol de la vida y el de la ciencia del bien y del mal. En algún momento surgió el mal en una creación inicialmente perfecta, sin defecto. Y Dios lo colocó dentro del Edén y prohibió a Adán comer de este árbol misterioso. En toda su revelación escrita Dios nos da muy pocos detalles sobre cuándo surgió el mal. Isaías 14: 3 – 23 nos aporta alguna luz sobre este primer pecado cometido por un ángel que quiso destronar al Altísimo. La soberbia lleva a la codicia y la codicia a la desobediencia y rebeldía. Jesús utilizó parte de este pasaje para describir la caída de Satanás, en Lucas 10: 18. A estas alturas de la revelación divina no tenemos todavía suficiente información para profundizar sobre este asunto del origen del mal dentro de la creación. Este es un tema o doctrina que exige mucho espacio y análisis bíblico de muchos pasajes. Lo importante es que Dios hizo un sitio especial en Edén, con dos árboles muy especiales. Al comerlos, Adán tendría acceso a la vida y a discernir entre lo bueno y lo malo. Lo anterior nos permite afirmar que Adán era diferente a nosotros, pues no poseía la capacidad de intuir ni conocer lo malo. Los teólogos hablan de que Adán y Eva eran inocentes. Su mente original no tenía malas ideas. Su semejanza con Dios era mayor que la nuestra. Adán amaba fielmente a Eva. Adán usaba la creación de manera bondadosa e inteligente.

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Y por vez primera surge una prohibición a Adán. La libertad humana tiene límites frente a Dios. Nuestra voluntad debe tener la opción de elegir. Una voluntad sin opciones es una ilusión. La libertad o libre albedrío debe tener alternativas para que realmente la podamos ejercitar. Cuando una persona está en una prisión, descubre que no puede ejercitar su libertad. Y es lo peor que le puede acontecer a cualquier persona. Adán y Eva tenían que disfrutar plenamente de su libertad y Dios, que es perfecto, les otorgó opciones para elegir. Podemos aceptar como literales estos dos árboles. En Apocalipsis, cuando Juan nos describe el Estado Eterno que vendrá después del milenio de Jesucristo, vuelve a aparecer el árbol de la vida. El Dios de la vida no necesita contarnos mitos para niños. Él nos habla como adultos. En pasajes posteriores vamos a recibir nueva información, que nos permitirá ahondar en este misterioso e intrigante asunto. Génesis 2: 10 – 14 “Y salía de Edén un río para regar el huerto, y de allí se repartía en cuatro brazos. El nombre de uno era Pisón; éste es el que rodea toda la tierra de Havila, donde hay oro; y el oro de aquella tierra es bueno; hay allí también bedelio y ónice. El nombre del segundo río es Gihón; éste es el que rodea toda la tierra de Cus. Y el nombre del tercer río es Hidekel; éste es el que va al oriente de Asiria. Y el cuarto río es el Éufrates.” Moisés vivió 2,380 años después de Adán, unos 720 años después del diluvio. El Éufrates es el único río que queda de aquel río original del Edén. Por esto es que Dios no necesita decirle a Moisés dónde está ni que tierra circunda. Los otros tres brazos del río original desaparecieron con el diluvio, pero para Moisés debieron ser familiares los nombres de Cus y Havila. Para nosotros son familiares Asiria y Éufrates. Con este pasaje Dios nos está informando que el Edén fue un sitio real, con una ubicación geográfica precisa, con fronteras concretas. Otra evidencia que nos permite confiar en la veracidad de todo este relato.

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Qué triste que en alguna época la Iglesia consideró que este era un pasaje mitológico. La interpretación alegórica de la Biblia corrompió el entendimiento de millones de creyentes, guiados por mediocres pastores y maestros. La humanidad ha hecho muchos chistes malos con el jardín de Edén. Génesis 2: 15 – 17 “Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase. Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.” Nuevamente tenemos que entender que Dios le está revelando a Moisés lo que sucedió cuando hablaba con Adán, y lo llevó a escribir un resumen muy breve de lo que pasó. Así es casi todo el estilo bíblico: Breve y conciso. Personalmente, estoy persuadido que Dios le explicó a Adán con gran detalle la orden de no comer de aquel fruto y también debió explicarle el significado de morir. Solo de esta manera Dios estaba ejercitando su justicia santa y compasiva con el primer ser humano. La Biblia no contiene todos los detalles históricos de cada evento, porque si así fuera, no alcanzarían todas las bibliotecas para contenerlos. Cuando cualquiera de nosotros estudia la Biblia, descubre que morir tiene un solo significado: Separación. Por lo tanto, hay dos tipos de muerte en el ser humano: 1 Cuando nuestro cuerpo y el aliento de vida de Dios se separan, ocurre nuestra muerte física. 2. Cuando el aliento de vida se separa del Dios de la vida, ocurre nuestra muerte espiritual. Adán debió comprender cabalmente que Dios le advirtió que ambas muertes le sobrevendrían si comía del fruto del árbol prohibido. Su primera muerte, aconteció inmediatamente después que desobedeció y comió del fruto: Su aliento de vida o su espíritu fue separado de la presencia y comunión permanente que gozaba con Dios. ¡Qué tragedia!

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Su segunda muerte, la física, ocurrió cuando tenía 930 años de edad. Dios, que es misericordioso le dio muchos cientos de años a Adán para arrepentirse de su pecado. La otra verdad que aparece por primera vez es que la primera tarea que Dios asignó al hombre fue labrar y cuidar el huerto donde lo puso. Durante siglos, la tradición de la Iglesia nos enseñó que el trabajo es un castigo de Dios. Este pasaje niega esta tradición. Además, gobernar o señorear involucra un esfuerzo personal y colectivo del ser humano frente al resto de la creación. Tomar la leche del ganado, hacer el queso y otros derivados, involucra esfuerzos, que dignifican nuestra vida. El gran éxito transformador del cristianismo que surgió con la Reforma, radicó en interpretar correctamente que el trabajo es un privilegio y una bendición otorgadas por Dios al ser humano. Con Calvino surgió lo que se llamó la ética protestante que permitió a los países que adoptaron el credo reformado, convertirse en las naciones más ricas y poderosas de la Tierra en apenas 200 años (Gran Bretaña, Países Bajos, Alemania, Suiza, parte de Francia y Escandinavia). En cambio, el cristianismo que se quedó con el catolicismo, perdió su supremacía (España), porque su ética era inferior a la de las naciones protestantes. Dios galardona a las naciones que le obedecen y lo honran. Génesis 2: 18, 19 “Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él. Jehová Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos, y los trajo a Adán para que viese cómo los había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales vivientes, ese es su nombre.” Este pasaje tiene un fuerte sentido del humor por parte de Dios, porque Dios le está diciendo a Moisés que se le olvidó crear algo que acabe con la soledad parcial de Adán. Y además le insinúa que tal vez uno de los animales pueda ser esta ayuda idónea. Un Dios que hizo en 6 días todo este espectacular universo, que en solo 24 horas construyó la maravillosa atmósfera terrestre y que hizo con el poder de su palabra 30


esta infinidad de flores distintas y hermosas, no se le podía olvidar detalle alguno, y menos un detalle tan importante con su criatura más amada: Adán. Sugerirle a Moisés que los animales podría ser la ayuda idónea de Adán es sin duda una broma un poco fuerte. Dios es el creador del lenguaje verbal, del lenguaje musical, de los ángeles invisibles, y también es el inventor del sentido del humor, de las bromas que nos invitan a reflexionar y a meditar sobre algo importante. Es un estilo literario que rompe con el tono serio, y acaba la monotonía, para reaccionar frente al relato. Así nos mantenemos alertas cuando leemos. Al poco tiempo que Adán comenzó a cuidar el huerto, y labrarlo, fue necesario que Dios le encomendara nuevas responsabilidades. Entonces le trajo poco a poco a los miles de animales, para que después de mirarlos y examinarlos, le pusiera nombre a cada uno. Otra evidencia de la autoridad del ser humano sobre el resto de los seres vivos. Es falsa la creencia de que la “Madre Tierra” es un ser vivo, como lo creen los indígenas americanos. Dios nos entregó su espectacular creación mineral, vegetal y animal para usarla en beneficio de muchos. El problema es nuestra codicia, que es la raíz de todos nuestros males. La codicia nos conduce a abusar muchas veces de la creación. Esta tarea de poner nombres demuestra una capacidad exclusiva del ser humano: Poseer desde el principio un lenguaje abstracto. Casi todos los animales tienen la capacidad de emitir sonidos codificados que les permiten un grado elemental de comunicación. Pero no tienen la capacidad de tener un alfabeto, millones de palabras y una gramática. Podemos imaginarnos este tiempo de ponerle nombre a los animales: Adán analizando a cada uno: Dinosaurios, mamuts, cocodrilos, elefantes, leones. Me imagino que más de una vez Adán le pidió ayuda a Dios para que le sugiriera algún nombre. Debieron ser varios meses de divertido trabajo. La ciencia no tiene una explicación satisfactoria sobre el origen de los idiomas. Es un misterio sin solución. Pero la Biblia afirma que la primera pareja recibió 31


instantáneamente la capacidad para entender el lenguaje mediante el cual su Creador les dio las primeras instrucciones de vida. Hablar, escribir y leer; observar, analizar, diseñar e inventar cosas nuevas son atributos exclusivos de los humanos. Es mentira que los primeros hombres eran salvajes ignorantes. El primer hombre fue igual de inteligente que el hombre moderno. Además, este primer hombre fue hecho inocente, incapaz de pensar mal. Y lo más importante: Adán disfrutaba de la presencia diaria, cara a cara, de su Hacedor. Dios le revela a Moisés que los animales fueron hechos con los mismos componentes físicos que el hombre. La Química orgánica nos permitió verificar esta verdad. La Química de los seres vivos es muy parecida. El cerdo es un animal muy parecido a nosotros y las válvulas de su corazón son usadas por los cirujanos en trasplantes coronarios. Pero en ningún momento Dios deja la impresión de que los animales tienen el aliento de vida que infundió a Adán. Esta es la pequeña pero crucial diferencia entre ellos y nosotros. El ADN de un chimpancé es 98% idéntico al del hombre. Esta pequeña diferencia del 2% permite a algunos evolucionistas insistir en que somos simios más evolucionados. Pero como la ciencia es incapaz de examinar el aliento de vida divino, entonces llega a conclusiones materialistas que son falsas. La ciencia siempre tropieza frente a las verdades inmateriales que Dios inculcó en nosotros, porque el método científico no puede medirlas. Y en vez de ser humilde, el científico toma la decisión de negar la existencia de lo invisible. Génesis 2: 20 “Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y a todo ganado del campo; más para Adán no se halló ayuda idónea para él.” ¿Cuánto tiempo gastó Adán en ponerle nombre a toda bestia, ave y ganado? ¿Meses o años? No lo sabemos. Lo que sí sabemos es que debió ser una tarea muy entretenida, en la que el primer ser humano, hecho directamente por Dios, sin ayuda del proceso sexual de la reproducción, ejerció de manera exhaustiva su ingenio y su capacidad de inventar palabras nuevas.

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Cuando terminó esta importante tarea, Dios continúa con su refinado sentido del humor frente a Moisés y le confirma que Adán no encontró en algún animal un buen compañero. Ni el caballo, ni el perro, ni el gato lo son. Esta frase también nos confirma que Eva fue hecha varios meses o años después de Adán. Sin embargo, hoy hay personas que prefieren a una mascota, o a un caballo, antes que a un familiar en dificultades. Conozco personas que le pagan tiquete en primera clase a su gato para llevarlo de vacaciones, en vez de regalar este dinero a una familia pobre que con este dinero comería durante 6 meses. He escuchado a muchas personas decir que el Dios de la Biblia es muy bravo, muy serio, muy solemne. Estos dos pasajes sobre la soledad de Adán demuestran que desde el principio Dios le enseñó a Moisés a bromear con elegancia e ingenio. ¿Por qué hay cristianos tan serios y solemnes? Génesis 2: 21, 22 “Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.” A partir de este pasaje Dios termina su broma que comenzó en el verso 18, retorna a su lenguaje serio pero sencillo y muy claro; y le cuenta a Moisés cómo creó a la primera mujer de la historia. Por primera vez Dios nos cuenta cómo anestesió a Adán y realizó la primera cirugía exitosa y les anunció a los futuros médicos que pueden tomar parte de algunos tejidos humanos para trasplantar y curar, sin matar al donante. También les anunció que nuestros tejidos pueden ser abiertos y vueltos a cerrar con instrumentos adecuados. El principio de la Medicina está en este pasaje. Mientras que Adán fue hecho directamente del polvo terrestre, Eva fue hecha de la carne de Adán. Pero Dios insertó una pequeña modificación en Eva y le colocó un gameto de mayor tamaño, para que la procreación sexual fuera posible. Este gameto, que es el óvulo, solo tiene un par de cromosomas XX, mientras que el gameto de Adán tiene un par de cromosomas XY.

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Estos cambios solo fueron detectados por la Biología molecular hace unos 50 años. Hasta ese entonces era un misterio el proceso sobre cómo se define el sexo en el momento de la fecundación. Sin duda Dios se esforzó al hacer a Eva, pues la hizo mucho más hermosa, más tierna, y más delicada en sus maneras. ¡Gracias Señor por las mujeres! Pero la verdad más profunda que contiene este pasaje es que la mujer tiene la misma dignidad y status que el varón delante de Dios. Y también es el primer anuncio de la inextricable relación de una pareja de varón y hembra. Génesis 2: 23 – 25 “Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada. Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne. Y estaban ambos desnudos, Adán y su mujer, y no se avergonzaban.” Adán canta de emoción al ver a su lado, después de despertar de la anestesia, a tan hermosa pareja. Y guiado por Dios se convierte en profeta y teólogo al anunciar la naturaleza íntima del vínculo matrimonial. Es un lazo más fuerte que el de padres e hijos, y necesario para la multiplicación del género humano y su crianza. Los hijos de una pareja son una sola carne de ambos. Es tan importante para Dios el matrimonio entre un varón y una mujer, que posteriormente declara que Él es el marido de Israel. Jesucristo le prometió a su Iglesia casarse con ella en la Jerusalén celestial, en vísperas del milenio. Desde el principio Dios diseñó al ser humano para ser monógamo. La poligamia y el homosexualismo son consecuencias de la muerte espiritual de Adán y Eva, cuando desobedecieron. Todos los procesos de corrupción o degradación en el planeta comenzaron a partir del primer pecado. Este asunto tan importante lo examinaremos en el capítulo 3. Esta muerte espiritual la heredamos todas las personas y la única manera de recuperar la comunión con Dios es naciendo de nuevo, tal y como Jesús le enseña a Nicodemo. Dios reitera el estado de inocencia de la primera pareja, diciéndole a Moisés que andaban desnudos en un clima tibio las 24 horas, gracias a aquella atmósfera 34


especial y diferente. La malicia no había entrado al corazón humano. Este atributo humano original nos cuesta aceptarlo y entenderlo, porque nos parece imposible. Pero dudar de la veracidad de este relato de Dios a Moisés, es cuestionar la omnipotencia y la fidelidad de Dios. Si un solo pasaje de la Biblia es dudoso o mentira, entonces no tenemos por qué aceptarla como la revelación escrita del Creador del universo. La tradición de la Iglesia durante siglos decía que la desobediencia de Adán y Eva fue tener relaciones sexuales. Esta tradición trastoca todo el significado gramatical de estos primeros dos capítulos de Génesis. Esta tradición es maliciosamente infantil. Pero perduró durante siglos en muchas partes, lo que degradó de manera grave la santidad del vínculo matrimonial, el gozo de la relación sexual, y el disfrute de la intimidad de toda pareja. Hasta hace pocos años los sacerdotes les enseñaban a las mujeres casadas que el sexo solo debe ejercerse para procrear. Esta enseñanza corrompió la verdad bíblica y deterioró la calidad de millones matrimonios en muchas partes durante siglos. Y todo por no interpretar gramatical e históricamente la Biblia.

Un vistazo final al capítulo 2. Este capítulo es una ampliación rica en detalles del capítulo 1, haciendo un énfasis particular en la primera pareja humana. Es muy importante reconocer que Dios afirma 4 veces que culminó su obra creadora, y 3 veces afirma que en estos 6 días hizo toda su obra creadora. La muerte de una estrella y el nacimiento de otros cuerpos celestes son apenas procesos cósmicos que demuestran que el universo avanza hacia el desorden y el caos final, como lo veremos en el capítulo 3. El significado de que Dios descansó a partir del 7º día, incluye la verdad de que el género humano comenzó a recibir autoridad delegada por su Hacedor, para señorear el planeta Tierra, porque el resto del universo está fuera de su alcance.

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Explicación del origen del mal en el universo Génesis 3: 1 – 3 “Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto? Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis.” Lo primero que tenemos que percatarnos es que Dios rompe el hilo del relato de manera abrupta y comienza otro relato, presentándonos al animal más astuto del campo, que está conviviendo con el hombre en un Jardín bueno en gran manera. El calificativo astuto tiene una connotación negativa. Es la segunda palabra negativa de la Biblia, después de la palabra “mal” cuando describió al árbol prohibido. La palabra serpiente es el único nombre propio mencionado cuando Dios hizo los animales terrestres. No mencionó las vacas, las ovejas, ni las gallinas. Solo a las serpientes. ¿Por qué? Todos los animales fueron hechos buenos en gran manera, incluyendo a las serpientes, en 1: 24. Es intrigante ver que cuando Adán recibió autoridad divina para gobernar a los animales, no menciona a las serpientes, en el verso 26 y 28 del capítulo 1. Las omisiones o silencios de Dios en su revelación son importantes y nos dejan perplejos. Así las cosas, no cabe duda que algo malo sucediera en el tiempo transcurrido entre este verso y el 24 del capítulo 1, cuando Dios hizo las serpientes. Lo malo que haya acontecido es un misterio que Dios no quiso revelarle ni a Adán ni a Moisés. Si la serpiente era un animal como los demás, Eva se hubiera quedado petrificada de la sorpresa de que le hablara en su idioma. Pero Eva reaccionó de manera normal a la tramposa pregunta. Esto nos permite deducir que Eva sabía con quién hablaba y le pareció natural conversar con la serpiente. La deducción de algunos teólogos es que uno de los ángeles, que no forman parte de la creación visible de Dios y que fueron creados en algún momento durante o antes 36


de los 6 días, y que son seres inteligentes y con voluntad como nosotros; se rebeló contra su Hacedor y quiso destronarlo, como lo da a entender Jesús en Lucas 10: 18, refiriéndose al pasaje de Isaías 14: 12. Génesis 6: 2 nos enseña que ángeles caídos se encarnaron y tuvieron sexo con mujeres, y de estas uniones antinaturales nacieron hijos, como lo precisa el verso 4. ¿Adán y Eva conocían a los ángeles y hablaban con ellos? La cosmovisión bíblica nos enseña que el origen del mal no reside en Dios, como otras religiones sí lo enseñan. El origen del mal se dio en una rebelión angelical que quiso destronar a su Creador. Dios separó a este grupo rebelde y no les dio la oportunidad de ser redimido. Para los ángeles caídos no hubo una segunda oportunidad, como lo enseña Judas. Quedan entonces varias preguntas sin respuestas claras, lo que obliga al exégeta y al teólogo a deducir y especular. Los creyentes comunes nos debemos gozar con fe en estos misterios que intencionalmente Dios se guardó para sí mismo. A nuestro Dios le encanta dejarnos en suspenso e intrigados, como otra manera de manifestarnos su majestuosa superioridad sobre toda su creación. Vivir la vida por fe significa avanzar debajo de Dios, aferrados a su mano en medio de algunas incertidumbres, pero con las certezas fundamentales incrustadas en nuestro corazón, sabiendo que tenemos entrada a su reino por toda la eternidad. El relato nos dice que la serpiente adquirió o tenía la capacidad para hablar con Eva y le puso una trampa a una persona que no tenía la capacidad para discernir entre la mentira y la verdad. Fue una batalla dialéctica desigual, entre un ángel rebelde que se encarnó en la serpiente y una mujer incapaz de distinguir entre lo bueno y lo malo, porque Dios la hizo inocente. La pregunta que Satanás le hace a Eva es tramposa, porque acusa a Dios de prohibirle algo a Eva, sugiriendo que está mal hecho que Dios limite su libertad para hacer de todo, sin fronteras. 37


La respuesta de Eva le agrega algo a lo dicho por Dios a Adán: Que no debían tocar el fruto, como un paso previo a comerlo. Esta adición demuestra que Adán y Eva habían conversado sobre esta única prohibición y habían llegado a la conclusión de que ni siquiera debían tocarlo. Génesis 3: 4, 5 “Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.” Con estas dos afirmaciones tan categóricas, Eva cayó en el engaño. Su ingenuidad inocente fue derrotada por la maldad mentirosa de Satanás. Lástima que Eva no haya esperado para verificar con Dios estas dos afirmaciones. ¿Por qué no esperó al menos unas horas para consultarle? Uno de los principios fundamentales de la vida es que verifiquemos lo que escuchamos o leemos, antes de tomar cualquier decisión. Esto es lo que siempre debe hacer un buen gerente al frente de las decisiones que afectarán a miles de personas. Los vendedores y la publicidad nos seducen con sutiles verdades a medias, que son mentiras disfrazadas como Satanás hizo con Eva. Inmensas masas de familias sobreviven endeudadas con 3 tarjetas de crédito, para poder comprar cualquier antojo. No reflexionan al menos un día para consultar con el cónyuge, o sencillamente reflexionar sobre la necesidad de meterse en este gasto. Vemos tanta gente hoy engañada por las mentiras de la sociedad de consumo. Jóvenes que se sienten infelices si no tienen unos zapatos de cierta marca, o que hurtan o roban para tener un auto de cierto modelo. Génesis 3: 6, 7 “Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y el árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual así comió como ella. Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higueras y se hicieron delantales.”

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Eva codició ser sabia como Dios y desobedeció a su Hacedor. La codicia es la raíz de todos nuestros pecados. El amor al dinero es fuente de muchos dolores. Viene a mi mente lo que sucede cuando una niña de 6 años es seducida por un padrastro pedófilo y abusa sexualmente de ella. Me parece que es similar lo que hizo Satanás a Eva. Nos queda sin respuesta el por qué Adán aceptó comer de la mano de su mujer sin protestar, sin cuestionar. Es una pregunta que espero hacerle a Adán cuando me vea con él durante el milenio. Inmediatamente después que comieron perdieron su estado de inocencia y corrieron a tapar su desnudez con hojas del arbusto que da higos o brevas. Debieron ser mucho más grandes aquellas hojas que las de las brevas de hoy, para que Eva pudiera cubrirse su hermoso torso y sus bellas caderas. Otra evidencia de que la vegetación era de mayor tamaño que la de hoy, gracias a aquella atmósfera diferente que Dios hizo. Es interesante leer que cuando sus ojos fueron abiertos al conocimiento del mal, entonces murieron espiritualmente, como nos lo va a mostrar el siguiente pasaje. Génesis 3: 8 – 10 “Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y la mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto. Más Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? Y él respondió: Oí tu voz en el huerto y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí.” Dios se paseaba por su huerto. Parece que era una actividad cotidiana del Señor. La comunión de la primera pareja con su Hacedor era diaria, cotidiana y se hablaban como nos hablamos hoy las personas. Adán y Eva veían a Dios, lo escuchaban de manera audible y conversaban con él. No sabemos bajo qué figura Dios se manifestó a Adán y Eva. La primera evidencia de la muerte espiritual de Adán y Eva es que corrieron a esconderse cuando Dios se manifestó en el huerto. Es lo que hacemos hoy cuando hurtamos o robamos, porque sabemos que estamos haciendo algo malo.

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La pregunta del Señor es retórica, porque Él sí sabía dónde estaban. Por esto es que Adán, que sabía de retórica, le contesta lo que Dios quiere oír: Tengo miedo de ti Señor. Ya conozco la diferencia entre el bien y el mal. La comunión de Adán y Eva con Dios se acabó. Sus sentimientos de culpa los hicieron esconderse de su presencia. Y todos nosotros nacemos muertos espiritualmente, como lo veremos más adelante. En esta verdad Dios nos enseña el principio fundamental de la herencia. Cada uno hereda de sus ascendientes cosas buenas y otras malas, tanto a escala espiritual como material. Génesis 3: 11 “Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol del que yo te mandé no comieses? Nuestro Dios es tan compasivo, que en vez de regañar a Adán por su estupidez, le hace nuevamente otra pregunta retórica. Un Dios santo y justo hubiera podido matar a la primera pareja y comenzar de nuevo, dando cumplimiento a la consecuencia anunciada a Adán de que moriría el día que comiera del fruto prohibido. Dios puede matarnos físicamente cuando Él así lo quiera. Pero su misericordia lo detiene. Dios sabe que Eva fue seducida y engañada por un ángel caído, astuto y más inteligente que ella. El ser humano no fue el que originó el mal. La primera pareja fue víctima del primer enemigo de Dios, que es una criatura creada por Él, que quiso destronarlo. La inteligencia dotada de voluntad y libertad es una combinación peligrosa en las criaturas de Dios. Por esta verdad es que los ángeles caídos no tuvieron una segunda oportunidad y fueron condenados a prisiones eternas. Ser el iniciador de un proceso pecaminoso es muy grave delante de un Dios santo. En cambio, Adán y Eva y su descendencia si tuvieron y tenemos una nueva oportunidad de ser reconciliados y rescatados para regresar al paraíso inicial que Adán y Eva disfrutaron. Esta verdad es el hilo conductor de toda la revelación escrita por Dios en la Biblia. Génesis 3: 12 “Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí.” 40


Esta frase nos muestra un principio antropológico contundente: La primera reacción de toda persona cuando es pillada en un pecado o delito, es echarle la culpa a otro. Si los sicólogos aceptaran esta verdad antropológica, sus terapias tendrían un buen comienzo. Pero estos profesionales parten del principio de que cualquier paciente es víctima inocente, a la que hay que ayudar a liberarse de sus ataduras heredadas. Para los sicólogos y nuestros sistemas jurídicos los drogadictos son víctimas que necesitan ayuda. No son pecadores que necesitan ser llevados al arrepentimiento, para poder comenzar una auténtica regeneración de su conducta. ¡Qué necia es la cosmovisión humanista! Adán les echó la culpa a Dios y a su esposa. Él pretende ser una víctima inocente. Así somos todos desde pequeñitos. Cuando un niño es pillado por su madre desobedeciéndole, su reacción es correr, esconderse o echarle la culpa a la mamá, o a cualquier otra causa. Nos cuesta mucho trabajo reconocer que somos culpables. Esta respuesta de Adán es la segunda evidencia de su muerte espiritual. Génesis 3: 13 “Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí.” Es interesante que Dios no le contestara a Adán su necia respuesta. Se dirige a Eva y le pregunta: ¿Qué pasó? El principio antropológico queda reafirmado, cuando Eva, no reconoce su culpa, y se la echa a Satanás. Nuevamente Dios se muestra compasivo y no regaña con dureza a Eva. Los silencios de Dios son siempre muy significativos. Génesis 3: 14, 15 “Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.” Muy revelador que Dios no les pregunta a la serpiente ni a Satanás, sino que de manera inmediata le dicta su santa sentencia: 41


1. La serpiente, que no se arrastraba sobre el piso, ahora lo hará. Esto significa que Dios efectuó una transformación anatómica instantánea en este animal. 2. La serpiente, que no comía polvo, ahora lo comerá. Esto significa que Dios efectuó una transformación instantánea en su sistema digestivo. 3. La serpiente quedó maldita a partir de esta sentencia. 4. A Satanás, que usó a la serpiente para engañar a Eva, le profetiza enemistad eterna entre Eva y él; y ésta continuará entre ambos bandos: los seres humanos y los demonios. 5. A Satanás le profetiza que un descendiente de Eva lo herirá en la cabeza y que Satanás herirá a este descendiente de Eva en el talón. Algunos eruditos deducen que la serpiente original debió ser un animal muy especial y muy diferente al actual, y además cercano a la primera pareja. Satanás ya había pecado contra Dios, como lo enseña Isaías 14: 12 – 19. Por esto es que Dios no le da la oportunidad de contestar preguntas. Lo sentenció con ira santa. La profecía anunciada en el punto 5 amerita una larga explicación, con base en futuras revelaciones que Dios anunciará después. En esta exposición nos limitaremos a decir que se refiere a la muerte y resurrección de Jesucristo. Es la primera profecía redentora de la Biblia. Es la primera luz de esperanza para una humanidad que de aquí en adelante se hundirá en el lago cenagoso de sus miles de millones de pecados. Génesis 3: 16 “A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos: y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti.” Tengamos presente que a Eva ya le anunció que uno de sus hijos en el futuro derrotará a Satanás. Este anuncio es una bendición reivindicativa del género humano contra el ser angelical que los engañó. Un Dios justo no dejará semejante pecado impune.

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Pero el pecado de Eva no puede quedar sin castigo. Así lo exige la santidad de Dios. Las maldiciones que recibieron Eva y por herencia todas las mujeres son: 1. Los dolores durante los 9 meses de cada embarazo se aumentarán. 2. El proceso del parto será doloroso. 3. La igualdad emocional que Eva tenía frente a su esposo, la perdió y de aquí en adelante todas las mujeres tendrán un desbalance emocional y sicológico frente a su pareja masculina. 4. Esta desbalance sicológico será aprovechado por el varón para enseñorearse de su pareja. Eso es lo que hacemos todos los pecadores: Sacar ventaja. La semilla del mal ya fue adquirida voluntaria y conscientemente por la primera pareja. De este momento en adelante en la historia humana todos pecaremos contra los demás; y de manera especial con nuestro círculo más íntimo, que es nuestra familia. El hombre en todas las culturas se ha aprovechado de la desventaja emocional que Dios inculcó en las mujeres, para abusar de ellas. Todavía en nuestra cultura humanista, las mujeres ganan salarios inferiores a los de los hombres, aunque ocupen el mismo rango de cargo. La mujer trata de sacar ventaja y manipula al varón con sus hermosos atributos físicos y se presta para convertirse en un objeto sexual. Esta conducta lo que logra es reafirmar e incentivar los abusos masculinos. De nada han servido casi 100 años de feminismo para restaurar la igualdad emocional de la mujer. Es un decreto divino, que no ha podido ser anulado. Un buen esposo creyente debe evitar el aprovecharse de su esposa y Dios nos ordena a cada esposo creyente que las tratemos como a un vaso más frágil que nosotros; con ternura, con gentileza, con amor sacrificial. Pero tenemos que reconocer que seguimos pecando contra nuestras esposas. Nuestra naturaleza pecaminosa a veces salta sobre nosotros y nos hace pecar. 43


Génesis 3: 17 – 19 “Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la Tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida. Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo. Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.” Los últimos decretos recaen sobre Adán y todos los varones: 1. El suelo del cual obtenía Adán su alimento, empezará a deteriorarse de manera irreversible. Pero esta maldición también incluye a todos los animales al comer una vegetación que comenzó a corromperse. Comenzaron instantáneamente unos procesos químicos en el subsuelo y en la atmósfera, que rompieron el perfecto equilibrio inicial. 2. Mientras que labrar el huerto del Edén fue un placer, cultivar el suelo fuera de este jardín perfecto será una tarea dispendiosa y a veces frustrante. Esto significa un cambio mental y emocional en el varón frente a sus responsabilidades como gobernante del planeta. Este cambio alteró su percepción sobre el trabajo. La mente de Adán fue dañada por su muerte espiritual. 3. La vegetación no tenía ni espinos ni cardos. De manera instantánea Dios realizó cambios y le colocó espinas a las hermosas y olorosas rosas que Adán le llevaba a Eva cada mañana al desayuno. En este momento comenzó a nacer la mala hierba en medio de la buena. El trigo junto a la cizaña. Toda la creación comenzó a envejecer. En la Física moderna esta ley del envejecimiento la llamamos Entropía, que dice que todo nace, crece y muere. La muerte en la Física se llama desorden y caos, porque hasta los planetas y las estrellas padecen esta maldición. 4. Dios le reitera a Adán que su dieta seguirá siendo solo de vegetales. 5. Le anunció que algún día su cuerpo se deteriorará tanto que morirá. Comenzó el proceso de envejecimiento en todos los seres vivos.

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Génesis 3: 20 “Y llamó Adán el nombre de su mujer, Eva, por cuanto ella era madre de todos los vivientes.” Muchos pasamos esta frase sin analizarla. Y es profundamente importante, porque en ella Dios reitera que todo el género humano comenzó con una sola pareja. No es cierto que Dios creó al mismo tiempo varias parejas en distintas partes del planeta, como una manera para justificar los distintos rasgos negros, blancos o asiáticos de la gente. Otro argumento sesgado es que Dios hizo al menos a dos parejas, para que Caín y Set se pudieran casar con primas y no con hermanas, lo cual es pecado. Pero este argumento contiene un error, porque la prohibición de casarse con parientes cercanos es una orden divina en los tiempos de Moisés. Recordemos que la revelación de Dios progresa, cambiando pactos y normas, y aumenta su revelación escrita con el tiempo. No es cierto que la supuesta raza blanca provenga de un simio más evolucionado que el simio que dio origen evolutivo a los negros o a los asiáticos. El racismo moderno tiene su origen en estas falsas creencias evolutivas. Este racismo contaminó a la Iglesia en USA, donde hasta hace pocas décadas no permitían que los negros entraran en las iglesias de los blancos. Estos creyentes no respetaron la verdad bíblica de que todos somos iguales delante de Dios y por supuesto delante de los demás. Muchos creyentes europeos y norteamericanos siguen considerándose superiores a sus hermanos de color negro; cuando la verdad es que las sociedades donde practican mayoritariamente los principios bíblicos, obtienen mejores resultados sociales y económicos. Por eso es que USA se convirtió en 150 años en el imperio más exitoso de toda la historia, sin haber declarado guerras de conquista a los otros imperios o naciones. El éxito norteamericano tiene su origen en el respeto a la Biblia, que tuvieron las mayorías durante casi 200 años. Génesis 3: 21 “Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió.”

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Este es otro pasaje que pasamos por alto. Y es importante porque registra el primer derramamiento de sangre animal de la historia. Y fue Dios mismo el que mató al menos a un animal para vestir con su piel a la pareja desobediente. Dios tuvo que derramar sangre de un animal para cubrir el pecado inicial de Adán y Eva. Adán y Eva debieron morir, según el anuncio hecho a Adán en 2: 16, 17. Pero la compasión de Dios lo llevó a encontrar un sustituto. Un inocente pagó con su muerte para cubrir o tapar la consecuencia del primer pecado. Esta corta sentencia divina, que fue un hecho real, es un anuncio profético de que algún día otro inocente moriría por todo el género humano. ¿Si vemos cómo a Dios le encanta el suspenso y la intriga? Nuestro Dios nos muestra un fino sentido del humor, lleno de inteligencia. Por esto es que la manera correcta de estudiar la Biblia es mediante este método expositivo, que escudriña despacio cada frase. Durante siglos Dios demandó a Israel el sacrificio de animales para otorgar el perdón de los pecados. De esta manera siguió nuestro Dios perdonando pecados, exigiendo el sacrificio de víctimas inocentes. Cuando uno revisa la historia de las diferentes culturas, encuentra que en todas se hacían sacrificios de sangre a sus dioses falsos. Y en algunos casos, como aztecas y mayas, incluían sacrificios de personas. En opinión de los eruditos, esta es una evidencia histórica adicional que apunta a que todos provenimos de Adán y Eva, que transmitieron a Caín esta enseñanza, el fundador del paganismo astral, que lleno de rabia y amargura contra su Hacedor, decidió negarlo a sus descendientes. Caín fue el primer apóstata de la historia. Y enseñó a su descendencia a sacrificar animales a los dioses falsos (demonios) para aplacar su ira. Génesis 3: 22 – 24 “Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de la que fue tomado. Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.” 46


Definitivamente a Dios le encanta el suspenso, pues solo hasta ahora nos menciona la existencia de los ángeles, que puso al oriente del Edén a cuidar el acceso al árbol de la vida. Estos querubines son ángeles que obedecen a Dios. Ahora si podemos entender y reafirmar que la serpiente fue poseída por Satanás, un ángel que cayó en desobediencia al querer destronar a Dios. Este poder de los ángeles de entrar en seres corporales, es un misterio. En el caso del hombre puede ser viable cuando alguien de manera voluntaria invita a Satanás a su vida. En su estilo progresivo de contarnos poco a poco su verdad, 2,600 años después, cuando andaban en el desierto del Sinaí, Jehová puso en Israel dos querubines a cuidar el acceso al arca del pacto y el lugar santísimo del tabernáculo. Hasta los más pequeños detalles de la Biblia tienen un significado profundo que es un deleite descubrir cuando nos proponemos estudiarla a fondo. Todo en La Palabra tiene una correlación de causa y efecto; de realidad histórica que anuncia un evento futuro. ¿Existe algún libro que supere en riquezas a la revelación de Dios? Estoy persuadido que Dios quiso contarnos así las cosas, para que nos pongamos de rodillas ante su majestad soberana, llena de amor compasivo por todos nosotros. Estudiar la Biblia es toda una aventura intelectual y emocional. La otra realidad importante que nos muestra este pasaje es que Adán y Eva ya no habitan un mundo perfecto. Ahora comienzan a vivir las consecuencias de su tonta desobediencia, en un planeta que comienza a deteriorarse por culpa del primer pecado. Poco a poco nos irá mostrando el Creador en estos primeros pasajes de Génesis evidencias de este proceso de corrupción irreversible, que es una de las leyes fundamentales de la Biología y la Física: Todo en este universo avanza hacia el desorden y finalmente al caos o muerte. La otra reflexión que podemos extraer de este pasaje es que la futura muerte física de Adán, Eva y todos sus hijos es consecuencia directa del primer pecado. Pablo en Romanos desarrolla magistralmente la teología de esta sentencia divina. 47


¿Para qué vivir cientos de años en un mundo que se corrompe, que va hacia el desorden y el caos? Si adoptamos esta perspectiva de nuestra vida, podemos concluir como Pablo, que es mejor morir físicamente para estar cara a cara con Jesucristo, en vez de vivir esta vida agridulce, llena de sinsabores y frustraciones. Lo único que justifica vivir esta vida terrenal es trabajar en los asuntos de la Iglesia de Jesucristo. Así las cosas, la cosmovisión bíblica nos enseña que la muerte física es un evento necesario e indispensable para entrar a disfrutar de la vida eterna con nuestro Hacedor. La excepción a esta regla serán los raptados por Jesucristo antes de que comience la semana 70ª de Daniel, que Jesús llamó “La Tribulación”. ¡Ojala nos toque a nosotros! Un cristiano imbuido, sumergido en la cosmovisión bíblica, no debe temerle a su muerte, pues sabe que es la puerta para entrar a la mejor etapa de su existencia. No logro entender por qué la gente llora cuando un creyente muere. ¿Será que no tienen la certeza del cielo?

Una reflexión sobre estos primeros tres capítulos de Génesis Todas las filosofías humanas intentan contestar de una manera racional y clara la gran pregunta sobre el origen del universo y de nosotros como especie. Esta inclinación humana a tratar de contestar esta pregunta es otra evidencia de que somos semejantes al Creador y que nuestra mente y nuestro corazón necesitan tener esta respuesta primordial. Dios nos ofrece una respuesta bastante racional y sencilla en los capítulos 1 y 2. Evidentemente para el filósofo y el teólogo, este relato breve no contesta todas las preguntas que quisiéramos, para satisfacer nuestra curiosidad de saberlo todo, comprenderlo plenamente hasta dominarlo. Esto es lo que los hombres de ciencia han intentado, pero no han logrado, porque el conocimiento científico siempre es incompleto, frente a las cosas visibles. La segunda gran pregunta de toda escuela filosófica es ¿cómo surgió el mal? ¿Cuál es la naturaleza del mal? 48


El capítulo 3 contesta de manera racional esta segunda pregunta fundamental que toda cosmovisión debe responder. Pero nuestro Creador no permite ni permitirá que sus criaturas lo comprendan todo sobre su persona y su obra creadora. Si con lo poco que nos reveló y con la inteligencia que nos dotó, la mayoría se ha rebelado contra su existencia y autoridad, ¿podemos imaginarnos lo que sería si Dios nos hubiera dado acceso al conocimiento pleno? Mi conclusión personal es que los misterios que Dios se reservó son el ingrediente principal para que caminemos con fe en su persona y en su obra. Un creyente maduro debe actuar como un científico. Mantenerse contento con lo que descubre al estudiar la Biblia y reconocer con humilde mansedumbre que no podemos conocerlo todo. Esta actitud refuerza nuestra dependencia de nuestro Dios.

Resumen de la cosmovisión bíblica con base en los tres primeros capítulos de Génesis. En solo 80 versos, Moisés escribió las respuestas a las preguntas primordiales de todo ser humano. La cosmovisión que hasta ahora hemos empezado a estudiar, nos enseña que: 1. La causa que dio origen al cosmos y a la vida es una persona todopoderosa, que es eterna, es decir no tiene ni principio ni final; y que no habita dentro de su creación. 2. Toda la creación fue hecha de la nada en solo 6 días de 24 horas, y cada cosa y animal estaba maduro y completo desde el principio, listo para reproducirse dentro de cada especie o género. 3. Nuestro planeta fue hecho antes que el Sol, la Luna y el resto de astros, lo que significa que para Dios la Tierra es un lugar especialmente elegido para albergar las formas de vida que el Creador quiso.

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4. La armonía y el equilibrio eran plenos al comienzo, entre todas las cosas y criaturas. Nada se degradaba. Entre los animales ninguno se comía a otro. Tampoco el hombre comía carne. Todos comían vegetales. 5. Dios es una persona a la que le gusta relacionarse. Por lo tanto creó una especie inteligente e invisible como Él: Los ángeles. Y también quiso entablar una relación con una criatura hecha a su imagen y semejanza, a la que asignó la responsabilidad de gobernar al resto de la creación visible: El ser humano. Dios es un número plural de personas dentro de su esencia divina. Hasta ahora podemos decir que hay dos. 6. Todo el género humano proviene de una sola pareja: Adán y Eva. 7. En este universo armonioso y bueno en gran manera, en algún momento después que Dios terminó su creación, un ángel desobedeció, llevado por la codicia, e incitó a la primera pareja a hacer lo mismo: Desobedecer a Dios, engañándolos al decirles que si lo hacían serían como Dios. Estos dos momentos de desobediencia de las dos criaturas inteligentes del universo dieron nacimiento al mal en el mundo invisible que Dios habita, así como en el mundo visible que el hombre habita. 8. El mal no está dentro de la persona de Dios. El mal es una consecuencia de la desobediencia de los dos tipos de criaturas inteligentes y semejantes a su Creador. 9. Como consecuencia de la desobediencia de un ángel y de la primera pareja, Dios efectuó una serie de modificaciones en su creación. La más importante y universal de todas fue que todo comenzó a dañarse, a envejecer y a morir. 10. La consecuencia más gravosa sobre la mujer fue que algo se corrompió en su mente y perdió su equilibrio sicológico que la llevó a depender emocionalmente de su marido. Este desequilibrio traerá conflictos y abusos entre las parejas. 11. La consecuencia más gravosa sobre el varón, fue que su trabajo diario de gobernar la creación en calidad de mayordomo de Dios, se convirtió en una

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tarea llena de obstáculos, con sinsabores; generando frustración y conflictos entre los varones. 12. Dios profetizó que algún día un descendiente de la mujer derrotará a Satanás y como figura de este evento futuro mató a un animal inocente para cubrir la desnudez de Adán y Eva, cubriendo de esta manera, la vergüenza de su primer pecado.

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Comienzos de la historia de las naciones Génesis 4 y 5 Génesis 4: 1 “Conoció Adán a su mujer Eva, la cual concibió y dio a luz a Caín, y dijo: Por voluntad de Jehová he adquirido varón.” Esta frase de Eva apunta a su reconciliación con su Hacedor, mediante el reconocimiento expreso de que es el poder de Dios el que le permitió tener hijos. Si Eva no estuviera arrepentida y reconciliada, nunca hubiera expresado esta frase llena de gratitud hacia Jehová. La gente no arrepentida es incapaz de reconocer el poder amoroso de Dios sobre ellos. Génesis 4: 2 “Después dio a luz a su hermano Abel. Y Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra.” Este pasaje nos enseña que Dios inculca en cada persona talentos y gustos por alguna actividad. Comienza también a verse el concepto de especialización en el trabajo. Desempeñar un oficio de manera excelente demanda dedicación exclusiva. Desempeñar dos o más funciones al mismo tiempo no permite realizarlas bien. Jesús reafirma esta idea cuando nos dice que es imposible servir a dos señores simultáneamente. Esta realidad demuestra las limitaciones de cada uno de nosotros. Nuestros talentos solo nos permiten hacer una cosa bien al mismo tiempo. Cuando nos embarcamos en varias tareas simultáneas, normalmente mostramos desempeño mediocre en alguna de ellas. Génesis 4: 3 – 5 “Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y su ofrenda; pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante.” En este pasaje Dios nos muestra la importancia de nuestra actitud frente a Él. 52


La condición de nuestro corazón es lo que más pesa delante de un Dios que todo lo ve. ¿Por qué miró con desagrado la ofrenda de Caín? No lo sabemos. Pero la reacción de Caín, cuando supo que Dios estaba triste por su ofrenda nos da una pista. Dios le hizo saber a Caín que no le agradaba la actitud de su corazón. El significado de este verbo del castellano antiguo “ensañarse” es la clave de este pasaje. Ensañarse viene del latín “insania” y significa irritarse, enfurecerse, y querer hacerle daño al indefenso. Por lo tanto, la reacción de Caín evidencia una condición de su corazón muy enferma. ¿Cómo llegó Caín a esta condición? No lo sabemos, pero por lo que conocemos de historia humana y ejemplos cercanos de los que hemos sido testigos; podemos afirmar que Caín se inclinó desde muy joven al mal y desechó hacer lo bueno. Todos sabemos de “ovejas negras” en cada familia. Y Caín fue desde el comienzo una oveja negra. Cuando Dios le deja saber a Caín su desagrado con su condición pecaminosa, su intención fue que Caín cayera de rodillas y se arrepintiera. Dios habló con Caín directamente y a pesar de ello, Caín persistió en su equivocada conducta, y usó su libertad para rechazar esta invitación divina, que siempre está a disposición de todas las personas. Este pasaje nos muestra de manera dramática y trágica, lo crucial de la responsabilidad humana en cada decisión de nuestras vidas. Caín ejemplifica el caso de millones de individuos que no se arrepienten a pesar de sufrir las consecuencias de sus múltiples pecados. Presos que en las cárceles que siguen asesinando, robando y violando. Políticos y gamonales que abusan de este poder otorgado por los ciudadanos, robando con sus compinches miles de millones de los impuestos pagados por millones de contribuyentes. Los pillan, los enjuician, los meten a la cárcel y siguen diciendo que son inocentes y no devuelven si quiera una parte de lo robado.

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Es un misterio el por qué unos cuantos sí somos llevados al arrepentimiento, y somos reconciliados por nuestro Dios santo y compasivo; mientras que otros persisten en sus delitos y pecados. Desde este pasaje, Dios nos invita a que reflexionemos sobre este misterio de su soberanía sobre cada una de sus criaturas y nuestra responsabilidad al ejercitar nuestra libertad al tomar decisiones. Génesis 4: 6, 7 “Entonces Jehová dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado, y por qué ha decaído tu semblante? Si bien hicieres, ¿no serás exaltado? Y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será tu deseo, y tú te enseñorearás de él.” Este es un pasaje de profundo significado, en el que Dios nos está enseñando que como hijos de Adán, nacemos con nuestra mente corrompida y defectuosa, que nos inclina hacia lo malo; pero también el Señor nos ha dado la fuerza de la voluntad y la inteligencia para vencer la tentación y ser exaltados por nuestro Dios. Al revisar otras traducciones de este pasaje, nos queda claro que Dios afirma que cada persona tiene el poder divino en su fuerza de voluntad para vencer la tentación. En cambio, la cosmovisión humanista nos ha inculcado la mentira de que los seres humanos somos gobernados por nuestras inclinaciones genéticas, porque a la larga somos animales evolucionados, con cerebros que conservan fuerza primitivas que nos llevan a matar como un mecanismo de supervivencia. Por eso es que hoy no hay pecadores, sino víctimas de sus incorrectas inclinaciones genéticas y culturales. Con este pasaje Dios nos anticipó hace ya 3,500 años, que a pesar de nuestra condición espiritual caída, Él nos regaló el poder para tomar la decisión correcta, que es hacer lo bueno. Pero cada cual es libre de rechazar este poder y dejarse arrastrar por nuestra naturaleza pecaminosa. Génesis 4: 8 “Y dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos al campo y aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo mató.”

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No sabemos cuánto tiempo transcurrió entre la charla de Caín con Dios y este pasaje. Pudieron ser días o semanas. Lo evidente es que Caín no quiso atender la invitación divina y dio rienda suelta a su ensañamiento. Caín representa a las miles de millones de personas que viendo a Dios en su creación, y en sus advertencias compasivas, persisten en dar rienda suelta a sus pasiones. Aprovechemos este momento para revisar nuestra vida personal. ¿Guardamos todavía algún rencor contra nuestros papás, o algún hermano o un ex socio, o peor aún contra nuestro cónyuge? Conozco muchas mujeres llenas de amargura contra sus cónyuges. Muchas veces estos rencores viejos ya están en nuestro subconsciente y nos gobiernan, sin darnos cuenta. Hay millones de hijos resentidos contra una madre o un padre y esta amargura gobierna su conducta y sus anhelos. Todos deberíamos ser humildes y dejarnos revisar esta parte subconsciente por un buen consejero bíblico, que nos puede ayudar a liberarnos. Jesús nos enseña que cuando tenemos acceso a la verdad, que es su amor incondicional que siempre está listo para perdonar, seremos libres. Conozco algunos cristianos que no son libres, porque mantienen perdones retenidos, que amargan su corazón y envilecen sus pensamientos y su conducta. Génesis 4: 9 – 12 “Y Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano? Y Él le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra, que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano. Cuando labres la tierra, no te volverá a dar su fuerza; errante y extranjero serás en la tierra.” Caín ya es esclavo de su enorme acumulación de pecados desde su juventud. Con este asesinato sella su destino terrenal y eterno, porque pudo haberse arrepentido, llorado delante de Dios y suplicarle por su perdón y ayuda.

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Pero no lo hizo. Su respuesta a Dios es cínica y desafiante. Botó a la basura una nueva oportunidad para ser reconciliado con Dios. ¡Qué tragedia! Y ésta se repite millones de veces cada día hoy en todas las naciones. Cuando una persona llega al asesinato premeditado, antes acarició, soñó y diseñó un plan, y en todo este proceso cometió muchos pecados. ¡Qué alivio saber que fui llevado al arrepentimiento, perdonado y reconciliado! Y sobrevino sobre Caín una maldición particular: Toda tierra que labrase no volvería a ser fértil y le tocaría trasladarse en cada cosecha a nuevas tierras. Esto lo convertirá en un nómada. Los gitanos modernos son de los pocos nómadas que subsisten y son extranjeros en todas partes. Todos somos testigos de lo trágico que es para estos gitanos su vida. Caín no volvería a disfrutar de la paz de un hogar, al tener la obligación de moverse para poder alimentarse. Este pasaje está lleno de frases retóricas de parte y parte. Cuando Caín le dice a Dios que si acaso es él guarda de su hermano, está refiriéndose a que él no es un vigilante de las ovejas; porque no es un pastor como sí lo era Abel. Cuando Dios dice que la tierra abrió su boca para recibir la sangre de Abel está apelando a la figura retórica. ¡Dios es todo un poeta! Y por eso algunos de sus profetas fueron maravillosos poetas. Para interpretar correctamente muchos pasajes de la Biblia hay que conocer las diferentes figuras del lenguaje, que Dios nos incrustó como uno de los varios talentos que nos regaló. Ignorar las figuras del lenguaje puede llevarnos a fanatismos peligrosos. Jerónimo, uno de los padres de la Iglesia latina que vivió en el siglo IV, se castró al estudiar el pasaje de Mateo en el que Jesús nos dice que es mejor cortarse una mano, o sacarse un ojo para no pecar, y entrar manco o ciego al reino de los cielos. Aquí Jesús usa una figura que se llama hipérbole, que es exagerar con un ejemplo muy dramático para que el lector entienda el principio que está enseñando. En este caso Jerónimo apeló al método hiperliteral, que fue característico de los fariseos,

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que se extravían en el ejemplo y no ven el principio divino detrás del dramático ejemplo. Pablo era uno de ellos. Lamentablemente, este gravísimo error de juicio al usar su inteligencia, lo llevó al otro extremo y Jerónimo, que fue un mal exégeta y un peor hermeneuta, sistematizó el método alegórico, que comenzó a usar toda a Iglesia, hasta que Lutero gritó a Roma que el método correcto es el gramatical que respeta el contexto histórico del pasaje. Las diferencias entre el catolicismo y el protestantismo surgen en la interpretación de la Biblia, y empeoran cuando la Iglesia de Roma se colocó por encima de la revelación escrita y se enseñoreó de toda Europa. Génesis 4: 13 – 15 “Y dijo Caín a Jehová: Grande es mi castigo para ser soportado. He aquí me echas hoy de la tierra, y de tu presencia me esconderé, y seré errante y extranjero en la tierra; y sucederá que cualquiera que me hallare, me matará. Y le respondió Jehová: Ciertamente cualquiera que matare a Caín, siete veces será castigado. Entonces Jehová puso señal en Caín, para que no lo matase cualquiera que lo hallare.” Cuando Caín dice que cualquiera lo puede matar, está diciéndonos que en aquel momento ya habitaban el planeta muchas personas. Si tomamos en cuenta que el próximo capítulo nos informa que Adán tenía 130 años cuando fue papá de Set, nos queda claro que junto con Caín y Abel, la primera pareja tuvo muchos hijos e hijas, antes y después de que naciera Set. Adán y Eva fueron hechos adultos desde el comienzo. Pudieron procrear desde el año 1, y en 130 años, una pareja puede tener muchos hijos e hijas. La especulación de algunos teólogos de que Adán y Eva son apenas una figura de las muchas parejas que Dios colocó en la Tierra desde el principio, pasan por alto que todos tuvieron que haber pecado al mismo tiempo, para que las maldiciones recayeran sobre toda la humanidad. De lo contrario, Dios sería injusto con las parejas que alejadas de Adán y Eva no desobedecieron. Y teológicamente hablando esto es imposible.

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¿Por qué nos cuesta tanto aceptar el relato bíblico? Algunos lo consideran insuficiente y entonces se ponen en la tarea de deducir y especular. No logran aceptar que Dios quiso guardarse muchos detalles secretos en medio de su relato. La otra mentira lamentable que dice Caín es que se va a esconder de la presencia de Dios. Es una manera de decirle a Dios que no quiere volver a tener una relación con su Hacedor. ¿Alcanzamos a entender cuánta rebeldía, rabia y rencor habían en Caín? Y todos conocemos a muchos “caínes” a nuestro alrededor. Caín le anuncia a Dios que si alguien lo mata, entonces Dios será parcialmente culpable. Y nuestro Señor, lleno de compasión por personas como Caín, le coloca un sello visible para proteger su vida. Me cuesta mucho trabajo entender la testarudez de Caín, que nuevamente ve cómo su Hacedor lo protege de ser asesinado y no se pone de rodillas arrepentido y lleno de gratitud. Es intrigante que Dios vuelva a mencionar el número 7. La semana de 7 días como ciclo vital del ser humano y 7 veces el castigo para el que asesine a Caín. Los teólogos han llegado a la conclusión de que 7 simboliza la plenitud de Dios en este mundo visible. Génesis 4: 16 “Salió, pues, Caín de delante de Jehová, y habitó en la tierra de Nod, al oriente de Edén.” Adán fue el primero en ser enviado al oriente del Edén. Caín también tomó esta dirección. Posiblemente no podían tomar al occidente, porque allí quedaría el océano. La arqueología ha demostrado que los restos de culturas humanas más antiguas están en Mesopotamia, que es este lugar donde estuvo Edén. Han intentado encontrar restos de culturas en otros lugares que sean más antiguos y no han podido. Otra evidencia de la veracidad del relato bíblico. Nod despareció con el diluvio y por esto no la han encontrado. Génesis 4: 17 – 22 “Y conoció Caín a su mujer, la cual concibió y dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad, y llamó el nombre de la ciudad del nombre de su hijo, Enoc. Y a Enoc le nació Irad, e Irad engendró a Mehujael, y Mehujael engendró a Metusael, y Metusael engendró a Lamec. Y Lamec tomó para sí dos mujeres; el nombre de la 58


una fue Ada, y el nombre de la otra, Zila. Y Ada dio a luz a Jabal, el cual fue padre de los que habitan en tiendas y crían ganados. Y el nombre de su hermano fue Jubal, el cual fue padre de todos los que tocan arpa y flauta. Y Zila también dio a luz a Tubal-caín, artífice de toda obra de bronce y de hierro; y la hermana de Tubalcaín fue Naama.” Caín se casó con una hermana. El deterioro genético decretado por Dios apenas comenzaba. La Biología molecular ha demostrado que las combinaciones de genes avanzan hacia su degradación. Se ha comprobado que una mutación genética ocurre en cada 10 millones de combinaciones de genes. La corrupción genética avanza despacio, pero inexorablemente. Mientras la Evolución planteó en 1859 que la vida evolucionó hacia especies más complejas y superiores; la Biología moderna demostró en 1974 que todas las formas de vida avanzan hacia su corrupción genética, tal y como lo afirma Dios en el capítulo 3 de Génesis. Si Dios quiso que de una sola pareja naciera toda la humanidad, es evidente que para Él no era pecado en aquel momento que dentro de la primera familia se casaran entre hermanos y primos. El proceso de degeneración genética apenas comenzaba. Dios es el único que sabe cuándo cambiar las reglas de juego en sus criaturas. ¡Él es soberano sobre toda sus criaturas! La prohibición divina para casarse entre parientes cercanos solo fue decretada por Dios al mismo Moisés cuando andaban por el desierto antes de entrar a conquistar la tierra prometida a Abraham. Ya habían transcurrido más de 2,000 años entre Adán y Moisés. Enoc significa iniciación. Buen nombre para el primer hijo de Caín, que así nombró la primera ciudad que fundó, para dejar de ser agricultor y aliviar de alguna manera su maldición particular. Sagaz e inteligente este Caín. Entre Caín y Lamec hay 6 generaciones. Y esta 6ª violó la orden divina de que un hombre debía casarse con una sola mujer, como lo hizo el mismo Caín. Este pasaje nos enseña que la generación de Caín fue la que primero pobló el oriente del Edén y el planeta. Los rebeldes que se escondieron de la presencia de Jehová 59


tomaron la delantera y a pesar de su condición desobediente, Dios los bendijo con talentos para inventar artes y oficios fundamentales en toda civilización. He aquí una poderosa evidencia de uno de los atributos más cruciales de Dios para el hombre: Fiel. Un Dios fiel que mantiene sus bendiciones terrenales a pesar de que le damos la espalda. Un Dios que no le quitó la autoridad que delegó al hombre para que señoreara el planeta. Este pasaje también nos dice que es mentira que los hombres primitivos primero aprendieron a manipular y transformar las rocas y el lodo y que mucho tiempo después aprendieron a hacer metales de la tierra. No existieron las tan mencionadas “edad de piedra” ni la “edad del bronce”. Desde el comienzo Dios equipó a todos los seres humanos con el poder de inventar, investigar y construir soluciones que le facilitan la vida. Y Dios nos regaló la capacidad para disfrutar de un lenguaje espectacular: El lenguaje de la música. El ser humano es capaz de inventar buena y mala música. Este lenguaje es semejante al verbal y escrito, porque ciertas combinaciones de letras producen palabras obscenas y otras combinaciones producen palabras hermosas. Igual en la música: La combinación de ciertas notas junto con más o menos ritmo, producen música que eleva nuestro espíritu. Otras combinaciones producen mala música, como el rock. El desarrollo de la música en los últimos 60 años es otra evidencia de que todo en nuestra vida avanza hacia el desorden y el caos. Todos estamos contaminados por la mala música y no nos gusta la música de Mozart, de Hendel, de Bach. Nuestra capacidad musical se ha corrompido de manera irreversible. Es mentira la tan mentada evolución de la especie humana. La ciencia y la historia nos demuestran que vivimos el proceso inverso: Degradación y corrupción paulatina, lenta, e inexorable. Todas las hipótesis evolucionistas son meras especulaciones de los humanistas, sin evidencias arqueológicas sólidas.

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Caín fue un ser urbano, que prefirió vivir entre ladrillos y madera, en vez de dormir sobre el pasto mirando las estrellas. Y sus tataranietos organizaron los primeros conciertos de la historia en la ciudad de Enoc. ¡Cuántas mentiras nos han contado en estos últimos 150 años para reforzar la teoría de la Evolución! Finalmente, es pertinente mencionar que en este pasaje Moisés fue llevado a escribir los nombres de varias mujeres, hijas y nietas de Adán y Eva. En la Biblia rara vez se mencionan los nombres de las mujeres en las genealogías. Por esto es intrigante que aparezcan tantos nombres femeninos. Génesis 4: 23,24 “Y dijo Lamec a sus mujeres: Ada y Zila, oíd mi voz; mujeres de Lamec, escuchad mi dicho: Que un varón mataré por mi herida, y un joven por mi golpe. Si siete veces será vengado Caín, Lamec en verdad setenta veces siete lo será.” Otras traducciones al castellano escriben el verbo matar en pasado. Y parece que es la manera correcta, porque el cínico comentario de Lamec dice a sus mujeres que ya mató a un hombre y que si alguien viene a tomar venganza, entonces matará de nuevo. La maldad de Lamec es patente. Pone en aviso a sus mujeres que estén tranquilas porque él está alerta para volver a matar, si atacan a alguien de la familia. Y su descaro es inmenso al afirmar que si su tatarabuelo Caín tiene la promesa de Dios de ser vengado 7 veces, entonces él tendría que serlo muchísimas veces más. Tenemos que tener cuidado al reconocer que estamos leyendo un texto que ha sido traducido del “Textus Receptus”. Y el castellano es una lengua que ha sufrido muchas modificaciones en estos 5 siglos. Cuando uno lee el Quijote en el castellano original de Cervantes, comprueba que no entiende casi nada, porque las palabras eran muy distintas y se han incorporado muchas nuevas en estos 500 años de mezcla del castellano con otros idiomas. En pasajes complejos o difíciles necesitamos apoyarnos en los exégetas, que son los que leen en hebreo y en griego y los únicos capacitados para traducir la Biblia a otros idiomas. 61


Cuando no entendamos algo, busquemos otras traducciones y vayamos al texto original en hebreo o griego y con la ayuda de un diccionario tal vez podremos entender mejor. Otro camino es ir directo a exégetas respetados y leer sus interpretaciones sobre estos pasajes difíciles. Seamos siempre humildes frente al relato bíblico y no nos apresuremos a dictar sentencia. Entender la Biblia es toda una aventura intelectual, parecida a la de cualquier otra disciplina. En la medida que más estudias Matemáticas o Física, más entiendes toda la disciplina y más te gozas con este entendimiento. Lutero invirtió 8 horas diarias entre 1505 y 1517, estudiando griego y hebreo, teología de la Iglesia, y otras disciplinas conexas, para poder escribir sus 95 tesis; que fueron apenas el comienzo de su revolución teológica que dividió para siempre a la Iglesia de Jesucristo. Lutero estudió la Biblia hasta 1522 cuando publicó su traducción al alemán. Lutero invirtió casi 50,000 horas de su vida en estudiar la Biblia, para adquirir la autoridad que casi todos le reconocieron. Cualquiera de nosotros de pronto le dedica 5 horas a la semana a estudiar la Biblia. Para llegar a estudiarla 50,000 horas, necesitaríamos 192 años de vida. Y Lutero apenas logró discernir unas cuantas doctrinas bíblicas, pues no alcanzó a escudriñarlas todas. Su ejemplo es una invitación a ser humildes frente a lo que entendemos y sabemos de la revelación escrita de Dios. Génesis 4: 25, 26 “Y conoció de nuevo Adán a su mujer, la cual dio a luz un hijo, y llamó su nombre Set. Porque Dios (dijo ella) me ha sustituido otro hijo en lugar de Abel, a quien mató Caín. Y a Set también le nació un hijo, y llamó su nombre Enós. Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová.” Dios, en su soberanía sobre los hombres, comenzó a organizar el linaje que siempre lo ha invocado. Este es el linaje del cual tenía que nacer el Mesías redentor prometido en Génesis 3: 15. La primera generación de Adán, por la línea de Caín, había caído en su propio pantano del pecado y su corrupción se agravaba con cada nueva generación. 62


Dios no podía dejar así este delicado asunto. Y levantó a Set y a Enós, para que su nombre santo no fuese borrado de la memoria de la humanidad. En este pasaje podemos ver la influencia de Adán y Eva, que criaron a Set en el conocimiento del Creador. Queda en evidencia que la primera pareja se arrepintió y fue reconciliada con Dios. Nuevamente, la clave para entender cabalmente este texto, es ir al verbo clave: Invocar. Viene del latín “invocare” que significa suplicar ayuda con vehemencia, estando dispuesto a someterse al que nos puede ayudar. Por lo tanto, aquel que invoca a una persona diferente a Dios es un tonto, pues se quiere someter al que lo puede ayudar. ¡Qué hermosa verdad nos transmite este verbo invocar a Dios! Salto de alegría al comprobar la regeneración integral de Adán y Eva como padres y abuelos. Transmitieron fiel y apasionadamente toda su experiencia personal con Jehová y con autoridad lograron que este linaje de Set y Enós comenzara nuevamente a invocar el nombre de su Creador. Set y Enós no disfrutaron de la presencia directa de Dios, igual que nosotros, y fueron enseñados por sus padres y abuelos a suplicar a su Hacedor por ayuda para caminar en santidad. Espero que a estas alturas de este estudio cada estudiante compruebe la importancia de escudriñar e investigar cada pasaje de manera similar a cuando nos toca entender una ecuación matemática, para poder entender alguno de los axiomas de la única ciencia exacta del universo. Si no aprendemos a interpretar cada fórmula matemática, nos rajan en el examen y nos toca repetir el curso hasta entender. Me parece que así debemos hacerlo con la Biblia. No avanzar hasta no entender cabalmente un pasaje. Los herejes siempre han sido malos intérpretes del texto bíblico, y llenos de orgullo e ignorancia se han atrevido a dictar sentencia sobre algunos pasajes y se inventan doctrinas que contradicen a otros textos.

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Una reflexión sobre el capítulo 4 Así como el capítulo 3 nos muestra el origen del mal y el comienzo de la degradación de toda la creación, confirmada por la ley de la Entropía, enunciada en la misma época que Darwin lanzó su teoría sobre la Evolución de los animales a través del proceso de la selección natural; este capítulo 4 nos enseña que la corrupción del planeta y de la condición humana se agravaba con el transcurrir de los años. Toda la creación avanza hacia abajo, nunca hacia arriba; nunca hacia una evolución que mejore al hombre, ni al planeta ni al cosmos. Toda la creación avanza hacia su final, en un lento proceso de deterioro molecular, genético y moral. Pero lo más importante de este capítulo es que aunque Dios delegó en el género humano el gobierno de la Tierra, Él sigue ejerciendo su soberanía, cuando en su perfección y justicia santa lo considere pertinente. Dio nos va modificando las reglas del juego de la vida, según lo dicte su soberanía llena de sabiduría infinita y amor compasivo. Los famosos pactos bíblicos son la evidencia de cómo nuestro Soberano va ajustando el marco ético de la humanidad. Casarse entre hermanos era necesario en los tiempos de Adán. Dios prohibió este tipo de matrimonios 2,300 años después, ordenando a Moisés sus leyes morales y civiles. El humanismo nos vendió la mentira de la autonomía humana. La verdad es que somos criaturas dependientes de un Dios todopoderoso, santo, amoroso y compasivo. Génesis 5: 1, 2 “Este es el libro de las generaciones de Adán. El día en que creó Dios al hombre, a semejanza de Dios los hizo. Varón y hembra los creó; y los bendijo, y llamó el nombre de ellos Adán, el día en que fueron creados. Este pasaje insiste en que hizo una pareja con sexos complementarios para la procreación. Además nos deja ver que el nombre Adán es un nombre que se aplica a todos los seres humanos. Otras traducciones cambiaron la palabra Adán por “hombre” y en otras “seres humanos”.

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Nunca olvidemos que estamos leyendo castellano de hace 500 años y su estilo de escribir es diferente al actual. Y este estilo antiguo nos puede llevar a confusiones, a menos que escudriñemos bien el texto. Tenemos que recordar que la inerrancia bíblica es en el idioma original, porque los traductores pueden incurrir en errores. Génesis 5: 3 – 32 “Y vivió Adán 130 años, y engendró un hijo a su imagen y semejanza, conforme a su imagen, y llamó su nombre Set. Y fueron los días de Adán después que engendró a Set, 800 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días que vivió Adán 930 años; y murió. Vivió Set 105 años, y engendró a Enós. Y vivió Set, después que engendró a Enós, 807 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Set 912 años; y murió. Vivió Enós 90 años, y engendró a Cainán. Y vivió Enós, después que engendró a Cainán, 815 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Enós 905 años; y murió. Vivió Cainán 70 años, y engendró a Mahalaleel. Y vivió Cainán. Después que engendró a Mahalaleel, 840 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Cainán 910 años; y murió. Vivió Mahalaleel 65 años, y engendró a Jared. Y vivió Mahalaleel, después que engendró a Jared, 830 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Mahalaleel 895 años; y murió. Vivió Jared 162 años, y engendró a Enoc. Y vivió Jared, después que engendró a Enoc, 800 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Jared 962 años; y murió. Vivió Enoc 65 años, y engendró a Matusalén. Y caminó Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, 300 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Enoc 365 años. Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios. Vivió Matusalén 187 años, y engendró a Lamec. Y vivió Matusalén, después que engendró a Lamec, 782 años, y engendró hijos e hijas. Fueron, pues, todos los días de Matusalén 969 años; y murió. Vivió Lamec 182 años, y engendró un hijo; y llamó su nombre Noé, diciendo: Este nos aliviará de nuestras obras y del trabajo de nuestras manos, a causa de la tierra que Jehová maldijo. Y vivió Lamec, después que engendró a Noé, 595 años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Lamec 777 años; y murió. Y siendo Noé de 500 años, engendró a Sem, a Cam y a Jafet.” Nuevamente nuestro Dios rompe el estilo que traía y ahora lleva a Moisés a escribir como un notario y abogado. Este texto se parece en estilo al de una escritura de 65


compraventa de una casa, porque se repiten las mismas palabras, en el mismo orden en cada frase, porque lo que importa es la precisión en el registro de las edades de cada persona, del nombre de un hijo varón, a qué edad del papá nació este hijo y a qué edad murió el padre. Intrigante que solo se menciona un hijo varón, nunca el de una mujer. Muchos de estos hombres debieron tener primero a una mujer antes que a un varón, pero solo quedó el registro de un hijo, que no necesariamente fue el primogénito. Como lo podemos verificar en otras genealogías bíblicas, Dios quiso dejar un registro histórico del los ascendientes del Mesías que habría de nacer en Belén en el futuro. Por esta razón es que Caín no cabe en esta genealogía, a pesar de haber sido el primogénito de Adán. Al ir sumando los años registrados, podemos comprobar que Matusalén murió el año en que Dios mandó el diluvio. Podemos ver que Adán alcanzó a conocer a Lamec, el papá de Noé. Imagínense: Adán vio creer a la novena generación. Todas estas 10 generaciones de varones tuvieron hijos e hijas. Los expertos en Demografía, que es una ciencia relativamente nueva, que usa la rama de la Estadística, que es Matemática aplicada, calcularon que en el momento en que comenzó el diluvio pudieron estar viviendo unos 1,500 millones de personas. En solo 1,656 años la población mundial pasó de 2 personas a este montón de gente. Hoy en día somos 7,000 millones. Lo más sorprendente de este largo pasaje estilo notarial, y que le aporta gran novedad al registro es que Enoc no murió, porque se lo llevó Dios, puesto que Enoc caminó con Dios. Dios había sentenciado que todos los seres humanos morirían como consecuencia del primer pecado de Adán y Eva. Todos nacemos muertos espiritualmente y la única manera de recuperar esta conexión con el Creador es invocándolo. Y todos morimos físicamente, con una excepción hasta ahora: Enoc. Con esta ruptura a la norma divina de nuestra muerte, lo que Dios nos está diciendo una vez más es que Él es soberano sobre toda su creación y puede interrumpir sus reglas cuando le plazca. Y así lo hizo con Enoc. 66


Aquí vemos que Dios tiene un estilo muy singular de recalcar sus atributos: Usando ejemplos históricos. Por esto es que decimos que Dios se revela de manera progresiva. Dios no usa el estilo de los teólogos, que a veces enredan las cosas con su lenguaje sofisticado. Dios es sencillo, gentil, manso, compasivo y misericordioso. Dios advierte, ruega, manda mensajeros, reitera sus advertencias, pero no asusta ni amenaza. Dios quiere que todos seamos capaces de entender su mensaje, aún aquellos que no saben leer, que al escuchar entenderán y obedecerán, si tienen su corazón dispuesto. Finalmente, la tradición de la Iglesia nos enseñó por generaciones que estas edades mencionadas en este pasaje no pueden aceptarse de manera literal, sino simbólica, porque es imposible que el ser humano viva más de 80 años y a lo sumo 120 años. Ya hemos dicho que las condiciones atmosféricas antes del diluvio eran muy diferentes. El pabellón de nubes impedía que los rayos ultravioleta del Sol entraran. La luz que entraba era de color rosado. La presión atmosférica era el doble. No caía agua de las nubes, pues el suelo era regado por agua subterránea que alimentaba las plantas. El clima global era constantemente templado y no había estaciones. La vegetación era gigantesca, unas 10 veces mayor que la actual. La abundancia de alimento era la norma. No existía la cadena alimenticia porque por diseño divino todos los seres vivos eran vegetarianos. Dinosaurios, cocodrilos, mamuts, leones y todos los animales solo comían pasto. Esta atmósfera inicial fue la causante de la larga edad de estas primeras 11 generaciones, de Adán a Sem, hijo de Noé. Cuando estudiemos los actores geológicos y las consecuencias atmosféricas del diluvio, podremos ahondar aún más en este intrigante tema de la edad de los hombres pre diluvianos.

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El origen del primer juicio de Dios Génesis 6: 1, 2 “Aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la Tierra, y les nacieron hijos e hijas, que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas.” Nuevamente Moisés es guiado a cambiar el tono y estilo del relato bíblico, para dar comienzo a un detalle que aconteció en algún momento en estas generaciones pre diluvianas. Los hijos de Dios que menciona este pasaje son ángeles caídos que decidieron poseer a las hijas de Caín, así como a las hijas de los hijos de Set. 2ª de Pedro 2: 4 y Judas 6 son pasajes del NT que nos ayudan a interpretar este pasaje. Leamos ambos. Estos ángeles abandonaron su morada y se encarnaron en hombres, para poder poseer a mujeres. Y la sentencia divina fue inmediata, pues fueron encarcelados en un lugar que Pedro llama “Tartarus”. Son los únicos ángeles que están prisioneros, esperando ser lanzados al lago de fuego y azufre; al finalizar el milenio de Jesucristo. Así como Satanás entró en la serpiente, los ángeles caídos pueden entrar en los cuerpos de los hombres que los invoquen. Un acuerdo entre estas dos voluntades hace posible esta fusión antinatural. Hemos visto por la TV a grupos que adoran a Satanás en público. Sus manifestaciones verbales y corporales son singulares y confiesan que él es su amo. Podemos imaginarnos la degeneración moral de aquellos tiempos. Los hijos de Caín invocando demonios y siendo poseídos. Algunas hijas de Caín y de Set teniendo sexo con ellos. Estas 11 generaciones pecaron de manera masiva y desafiante contra Dios. Génesis 6: 3 “Y dijo Jehová: No contendrá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; más serán sus días 120 años.” Esto es un decreto o una sentencia divina. El Espíritu Santo trató de llevar al arrepentimiento a estas generaciones iniciales, pero éstas no aceptaron la invitación.

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La predicación de Enoc y Noé no tuvo el resultado esperado, como lo confirma Judas 14 y 1ª de Pedro 3: 20. Leamos para entender. Los 120 años hacen referencia al plazo para que llegara el día de este primer juicio sobre la humanidad. Y también puede referirse a un nuevo límite de vida que tendrán los hombres post diluvianos. En efecto, hoy podemos comprobar que los más longevos se acercan a los 120 años de vida. Ambas realidades demuestran que Dios es soberano y nadie tiene la posibilidad de anular los decretos divinos. Dios cambió con este decreto las reglas de juego iniciales para el planeta y para todas sus criaturas. Nos dará nuevos detalles más adelante. Génesis 6: 4 “Había gigantes en la Tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre.” He aquí otra evidencia del gigantismo pre diluviano. Los hijos de algunos matrimonios normales fueron gigantes, así como los hijos de las uniones antinaturales de los hombres poseídos por demonios con mujeres. Y estos gigantes fueron los primeros famosos de la historia. Igual hoy, cuando los gigantes famosos son los deportistas, actores, cantantes y políticos corrompidos por los empresarios más ricos, para decretar leyes que los favorezcan. Enoc y Noé fueron recibidos como unos tontos que proclamaron la invitación al arrepentimiento. Se mofaron de ambos y de su mensaje santo. Igual hoy, en el que los que proclaman santidad con su ejemplo y con la Biblia, son ridiculizados y arrinconados. Génesis 6: 5 – 7 “Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la Tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la Tierra, y le dolió en su corazón. Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la Tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho.”

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¡Cuánta emoción contiene este pasaje! Dios abre su corazón a Moisés y le expresa cómo se siente frente a la desobediencia pervertida de la mayoría de sus criaturas inteligentes. Y en su santa justicia decretó el primer juicio universal sobre su creación. Como soberano puede hacer con sus criaturas lo que le plazca. Pero su santidad, su justicia y su misericordia lo detienen. En este pasaje Dios le reveló a Moisés sus sentimientos, pero todavía no le ha comunicado a Noé su decisión. Esto viene más adelante. Y su decreto de juicio fue anunciado 120 años antes de que ocurriera, pues guarda la esperanza de que se arrepientan para poder anular su juicio, como sí sucedió con los ninivitas cuando Jonás les anunció la destrucción de la gran ciudad. El caos y el desenfreno moral eran grotescos. Muchos poseídos por demonios llevaron al abismo a millones en todas las ciudades. Las 1,500 millones de personas vivas en aquel entonces iban a morir sepultadas por agua. Como hasta aquel momento nunca había llovido, casi nadie creyó a la advertencia de Noé. Dios esperó 120 años a que toda una civilización, que hablaba una misma lengua, que sabían que provenían de Adán y Eva, se arrepintiera y se apartar de su estúpido camino. Qué tan grande y generosa es a misericordia de Dios. Pero son más grandes la necedad y la estupidez humanas. Génesis 6: 8 “Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.” Esta corta pero impresionante sentencia tenemos que interpretarla a la luz del pasaje en Hebreos 11: 7. Nuevamente, al aceptar que la revelación de Dios progresa con el tiempo, y que el AT hay que interpretarlo a partir del NT, Hebreos 11: 7 nos arroja la suficiente claridad sobre lo que significa que Noé halló gracia ante los ojos del Creador.

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“Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.” Noé le creyó a Dios, siempre lo reconoció como su Hacedor, como el todopoderoso y en consecuencia le obedecía. Esta fe obediente de Noé es la clave de nuestra reconciliación con Dios. Creer significa obedecer. Noé gastó 100 años construyendo el arca. Todos podemos imaginarnos a los vecinos de Noé burlándose del loco que estaba construyendo un barco con las medidas exactas que Dios le dio. Imagínense: ¡Un barco en tierra firme! Porque en algún momento Dios traerá un aguacero monumental. Nunca había llovido. La gente no sabía lo que era la lluvia. Pero Noé le creyó a Dios y no perdió tiempo. Con su testimonio condenó a 1,500 millones de incrédulos. Nuestra entrada al cielo es por gracia, que la recibimos de Dios, que nos capacita para obedecerle por fe. Y fe es la certeza de lo que esperamos, nuestra convicción de aquello que no vemos. Y esta fe es también un regalo de Dios, porque nuestra naturaleza pecaminosa es incapaz de creerle al invisible. Una reflexión sobre e tiempo que gastó Noé con sus hijos construyendo el arca. Noé comenzó solo, porque su hijo mayor, Sem, nació 98 años antes del diluvio (Génesis 11: 10). Claro que Noé pudo contratar vecinos suyos y pagarles por su ayuda. Hoy en día, la construcción de un barco tan grande como el que construyó Noé; requiere varios años en el que participan varios cientos de técnicos expertos en distintos oficios. ¿Con qué herramientas cortaron la madera? ¿Con cuáles instrumentos de medición midieron y encajaron las miles de piezas que conformaron el arca? ¿Con qué tipo de puntillas o clavos unieron las tablas y sus respectivos soportes? El silencio que guarda el relato sobre cómo construyó el arca, nos deja implícito el hecho de que en los tiempos de Noé ya dominaban las técnicas metalúrgicas. Tubalcaín, hijo de Lamec y de Zila, sexto descendiente de Caín, fue el inventor de la metalurgia, según lo leímos en Génesis 4: 22. 71


Es evidente que en aquella época el ser humano dominaba la ingeniería y la arquitectura, disciplinas indispensables para construir el arca. Pero lo importante de este pasaje es entender que fue la fe de Noé, la que demostró durante toda su vida, la que llevó a Dios a elegirlo para salvarlo del diluvio. Y dios nos equipa con dones y talentos para fortalecer nuestra fe para caminar en esta vida llena de sinsabores. A Noé lo equipó con recursos físicos y ayudantes talentosos que con sus habilidades le ayudaron a construir un barco gigantesco. Génesis 6: 9 – 12 “Estas son las generaciones de Noé: Noé, varón justo, era perfecto en sus generaciones; con Dios caminó Noé. Y engendró Noé tres hijos: a Sem, a Cam y a Jafet. Y se corrompió la Tierra delante de Dios, y estaba la Tierra llena de violencia. Y miró Dios la Tierra, y he aquí que estaba corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la Tierra.” En este pasaje Dios nos quiere mostrar un contraste entre Noé y las demás familias del planeta. Y usa la exageración para hacer la comparación. La palabra perfecto es una exageración para calificar a una persona, porque todos somos pecaminosos y aún los más santos pecan de vez en cuando. La violencia corrompió la primera civilización. Cada individuo se había desviado del camino señalado por el Creador. Solo la familia de Noé invocaba a Elohim, a Jehová. Si hacemos una comparación cuantitativa de la maldad de aquella época y la nuestra, podemos decir que si solo 8 personas hallaron gracia delante de Dios entre 1,500 millones; hoy serían solo 40 personas, porque somos 7,000 millones. La gracia de Dios a través de Jesucristo y la obra regeneradora del Espíritu Santo en la Iglesia ha logrado que cientos de millones de hoy seamos vistos con gracia por nuestro Dios. Demos gracias a Jehová porque en estos tiempos ha derramado su gracia salvadora de manera muchísimo más abundante que en la época de Noé. Génesis 6: 13 – 17 “Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí yo los destruiré con la tierra. Hazte un arca de madera de gofer; harás aposentos en el arca, y la calafatearás con brea por dentro y por fuera. Y de esta manera la harás: de 300 72


codos de longitud del arca, de 50 codos su anchura, y de 30 codos su altura. Una ventana harás al arca, y la acabarás a un codo de elevación por la parte d arriba; y pondrás la puerta del arca a su lado; y le harás piso bajo, segundo y tercero. Y he aquí que yo traigo un diluvio de aguas sobre la tierra, para destruir toda carne en que haya espíritu de vida debajo del cielo; todo lo que hay en la tierra morirá.” Primero le abrió su corazón a Moisés al manifestarle lo triste que estaba con la violencia y la corrupción de casi toda su creación, en los versos 5 al 7. Ahora notifica a Noé con lujo de detalles su plan mediante el cual va a juzgar a la humanidad. Lo primero que le cuenta es que va a poner fin a todo ser vivo y le explica el por qué. Y le precisa que también va a destruir el primer continente al mismo tiempo que toda forma de vida. El cataclismo será monumental y total. Ningún rincón se librará de este juicio divino. Lo segundo que le explica es cómo y con cuáles dimensiones y con qué diseño interior debe hacer un arca o barco. La instrucción de calafatear la madera con brea, significa que el petróleo era un producto conocido y usado. La brea es un residuo del petróleo de alta densidad, que hoy seguimos usando para impermeabilizar techos y otras superficies expuestas a las duras condiciones climáticas. Por lo tanto, es mentira la hipótesis de que el petróleo se formó de los sedimentos orgánicos que se acumularon a lo largo de miles de millones de años, gracias a los miles de millones de animales y vegetales sepultados, que con la presión y la temperatura adecuados formaron el petróleo de manera lenta en miles de millones de años. Dios mismo hizo el petróleo desde el comienzo de su creación, colocando los pozos subterráneos, de los cuales brotaba la brea y otras formas de petróleo, que seguramente servían para alumbrar en las noches. Lo tercero que le informa es la manera cómo va a poner fin a toda este corrompido estado de cosas. Nuestro Dios es una persona que nos explica con sencillez y claridad las cosas importantes. Es bondadoso y gentil. Y nos avisa con mucho tiempo de anticipación lo 73


que piensa hacer. En este caso fueron 120 años entre este anuncio a Noé y el día que desató el diluvio. Y finalmente le hace una precisión a Noé: Los animales marinos, que no están encima de la porción de tierra seca, no padecerán con la misma intensidad, pues el diluvio los afectará parcialmente. Leamos la parte final de verso 17. Ahora veamos con detalle el asunto de las dimensiones del arca: 1. 135 metros de largo x 22.50 metros de ancho x 13.50 metros d alto = 41,006 metros cúbicos de capacidad para salvar a animales terrestres y aves. 2. Los paleontólogos han comprobado que la mayoría de los dinosaurios eran del tamaño de un perro. Solo unos pocos eran grandes cuando llegaban a su edad adulta. 3. Los biólogos y paleontólogos han contabilizado 39,000 especies de animales terrestres y aves, sumando las vivas y las que se han extinguido. Por lo tanto, en el arca tenían que caber al menos 78,000 animales. 4. En 41,000 M3 caben 125,000 animales del tamaño de una oveja. 5. Las parejas que entraron pudieron ser jóvenes y por ende los adultos gigantes no entraron en el arca. Un mamut joven o un elefante pequeño no son más grandes que un caballo. Queda entonces comprobado que había espacio de sobra en el arca de Noé para salvar a todos los animales. Génesis 6: 18 – 22 “Mas estableceré mi pacto contigo, y entrarás en el arca tú y tus hijos, tu mujer, y las mujeres de tus hijos contigo. Y de todo lo que vive, de toda carne, dos de cada especie meterás en el arca, para que tengan vida contigo; macho y hembra serán. De las aves según su especie, y de las bestias según su especie, de todo reptil de la tierra según su especie, dos de cada especie entrarán contigo, para que tengan vida. Y toma contigo de todo alimento que se come, y almacénalo, y servirá de sustento para ti y para ellos. Y lo hizo así Noé, hizo conforme a todo lo que Dios le mandó.”

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¡Qué gran alivio recibió Noé al saber que él, su familia y al menos dos parejas de todos los animales terrestres y aves seguirían con vida! Los animales marinos no serán exterminados, pues muchos sobrevivirán debajo del agua. Noé comprueba con este anuncio que su Dios es compasivo y misericordioso; pues mantendrá con vida a cada especie, para que continúen con su reproducción después del cataclismo que se avecina. En medio de su santa y justa ira, el Creador ejerce su misericordia. Siempre es así. Este es el primer pacto de salvación que Dios decretó en la historia del hombre. Perecieron todos, con excepción de 4 matrimonios y unos 80,000 animales. La fe obediente de Noé es impresionante. No se dejó amedrentar por las burlas de sus vecinos. Resistió más de 100 años y no dudó. Por esto es que el autor de Hebreos dice que con su fe condenó al mundo antiguo. El ejemplo de Noé nos debe servir a cada uno de nosotros para resistir las burlas de que somos objeto. Si él resistió 100 años, nosotros podemos resistir 40 o 50. Génesis 7: 1 – 5 “Dijo luego Jehová a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca; porque a ti he visto justo delante de mí en esta generación. De todo animal limpio tomarás 7 parejas, macho y su hembra; mas de los animales que no son limpios, una pareja, el macho y su hembra. También de las aves de los cielos, 7 parejas, macho y hembra, para conservar viva la especie sobre la faz de la Tierra. Porque pasados aún 7 días, yo haré llover sobre la tierra 40 días y 40 noches; y raeré de sobre la faz de la tierra a todo ser viviente que hice. E hizo Noé conforme a todo lo que le mandó Jehová.” Vemos que Dios estuvo en permanente contacto durante estos 100 años con Noé. El breve relato nos informa de algunas de estas conversaciones. Pero debieron ser muchas más, para fortalecer la fe de Noé. Le confirma que lo ha justificado y que está feliz al ver su fe obediente durante más de 100 años. Dios aprovecha cada contacto para ampliarle y precisarle las instrucciones a su fiel siervo. Por primera vez aparece el concepto divino de animales limpios y sucios. 75


Si leemos Génesis 8: 20 descubrimos que los animales limpios son los que Dios acepta como sacrificios. Los demás no sirven para pedir perdón y recibir la paga del pecado, que es la muerte. Por esta razón es que Dios le ordena a Noé tomar 7 parejas de los limpios. ¡Cuánta teología nos enseña Dios mediante estos sencillos ejemplos! Estas instrucciones las dio Dios 7 días antes del diluvio. Nos podemos imaginar a Noé proclamando a sus congéneres la urgencia de que se arrepintieran. Pero nadie atendió este último y dramático llamado. Noé no logró salvar a una persona, porque nadie quiso arrepentirse. Noé es un buen ejemplo de que ninguno de nosotros debe frustrarse cuando nuestra tarea evangelizadora no produce resultados. Es impresionante la precisión que Dios le da a Noé, al informarle que el cataclismo durará 40 días completos. Nuestro Dios es una persona que nos comunica muchas cosas importantes con precisión, para que sigamos obedientemente sus sabias instrucciones. Génesis 7: 6 – 10 “Era Noé de 600 años cuando el diluvio de las aguas vino sobre la tierra. Y por causa de las aguas del diluvio entró Noé al arca, y con él sus hijos, su mujer, y las mujeres de sus hijos. De los animales limpios, y de las aves, y de todo lo que se arrastra sobre la tierra, de dos en dos entraron con Noé en el arca; macho y hembra, como mandó Dios a Noé. Y sucedió que al séptimo día las aguas del diluvio vinieron sobre la Tierra.” Al darnos la edad de Noé, nos está reafirmando que este cataclismo tuvo una fecha concreta, que no es una figura o alegoría para ilustrarnos. El diluvio fue un evento real en la historia. Otra realidad que es reiterada es que Noé y sus hijos solo tenían una esposa, obedeciendo ellos la orden divina del matrimonio monógamo. Así lo revela Dios en el verso 13 de este capítulo. Pedro confirma que solo 8 se salvaron dentro del arca. Otra evidencia de la fe obediente de la familia de Noé. Génesis 7: 11, 12 “El año 600 de la vida de Noé, en el mes segundo, a los 17 días del mes, aquel día fueron rotas todas las fuentes del grande abismo, y las cataratas de los cielos fueron abiertas, y hubo lluvia sobre la tierra 40 días y 40 noches.” 76


A Dios solo le faltó informarnos la hora del día 17 en que comenzó el diluvio. Para Moisés quedó claro que la fecha fue en el segundo mes del año, el día 17, que corresponde en nuestro calendario, a nuestro mes de mayo. Pero los meses judíos comienzan el día 15 de nuestros meses, el día 17 correspondió al 2 de junio. Espectacular la precisión cronológica divina. Y así son todas las fechas y cronologías que Dios reveló en la Biblia. Son reales, nunca simbólicas. Siempre que Dios ofrece este tipo de detalles en su revelación, nos quiere decir que está contándonos sobre un evento o sitio real en la historia. Frente a estos detalles tan precisos, el intérprete no puede alegorizar o espiritualizar el pasaje. Solo le queda la opción de aceptarlo como literal. La nueva realidad que aconteció al comenzar el diluvio fue que buena parte del agua vino de las profundidades del planeta. Dios fracturó el fondo marino, del que emergió no solo agua, sino también lava y gases; que empezaron a trastornar la atmósfera y cambiaron la configuración de la masa de tierra firme sobre la que habitó Noé. Esta fractura del continente original dio comienzo a nuevas masas de tierra firme, así como al hundimiento de al menos una parte de la existente. Surgieron del fondo marino partes de los nuevos continentes, con nuevos ríos y montañas. La incalculable cantidad de agua que cayó del pabellón de nubes transformó este pabellón, que a partir de este momento dejó filtrar los rayos nocivos provenientes del espectro electromagnético. La luz dentro de esta atmósfera dejó de ser rosada, para tornarse amarilla. La presión atmosférica comenzó a disminuir, porque la combinación de gases del centro de la Tierra con los gases de la atmósfera comenzó a disminuir el oxígeno, que bajó del 30% al 20% que tenemos hoy. El eje norte – sur del globo terráqueo fue movido por el Creador, dando comienzo a las 4 estaciones. El clima templado y uniforme en todo el planeta desapareció. Comenzaron a surgir las masas de nieve permanentes en los extremos sur y norte del planeta.

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Desapareció el hogar protector que permitió que las personas anteriores al diluvio vivieran 900 años. Durante el diluvio Dios estuvo actuando, configurando de manera cuidadosa el nuevo hogar que le tocaría disfrutar a Noé. Lamentablemente, por tanto pecado, el deterioro avanza con el tiempo. Nuestro clima hoy es mucho más degradado que el clima del tiempo antiguo. Pero en medio de esta degradación gradual de todo el planeta sabemos que Dios tiene el control diario de nuestro hogar planetario. ¡Cuánto alivio, cuánta paz interior, tiene el creyente en la majestuosa soberanía del Dios de la Biblia! Génesis 7: 13 – 16 “En este mismo día entraron Noé, y Sem, Cam y Jafet hijos de Noé, la mujer de Noé, y las tres mujeres de sus hijos, con él en el arca; ellos, y todos los animales silvestres según sus especies, y todo reptil que se arrastra sobre la tierra según su especie, y toda ave según su especie, y todo pájaro de toda especie. Vinieron, pues, con Noé al arca, de dos en dos de toda carne en que había espíritu de vida. Y los que vinieron, macho y hembra de toda carne vinieron, como le había mandado Dios; y Jehová cerró la puerta.” Hasta el detalle más pequeño pero importante es revelado a Moisés, diciéndole que Dios mismo cerró la puerta del arca, porque Noé adentro y con miles de animales no pudo hacerlo. Dios reitera que todo aconteció como Él lo ordenó. Insiste en que cada pareja de animales entró al arca. Dinosaurios, mamuts, bisontes, vacas, ovejas, jirafas, leones, tigres, osos, gallinas, caballos, perros, gatos, loros, águilas, cóndores, serpientes, micos y orangutanes. En cambio, los delfines, las ballenas, los tiburones y las focas siguieron dentro del gran océano. Recordemos que hasta este momento de la historia, todos los seres vivos eran vegetarianos, porque así los diseñó Dios al principio. Dios también le precisa a Moisés que los 4 varones que fueron salvados tenían cada uno una sola esposa. Dios nos enseña muchas verdades santas mediante el buen ejemplo o el mal ejemplo. Adán solo tuvo a Eva. En cambio, Lamec, descendiente de Caín tuvo dos esposas. Los 4 sobrevivientes del diluvio tuvieron solo una esposa cada uno. 78


Cuando cualquier estudiante juicioso de la Biblia suma los años de la genealogía de Adán hasta los 600 años de Noé, descubre que el diluvio ocurrió en el año 1656, contados a partir del primer día de la creación. Desde que el cosmos y la Tierra fueron traídos a su existencia, hasta este momento, solo han transcurrido 1,656 años. Esta revelación bíblica está en total oposición a los miles de millones de años de la teoría de la Evolución. La genealogía revelada por Dios a Moisés tiene varios propósitos. El primero es que podamos saber cuántos años trascurrieron entre el día que Adán fue hecho por Dios hasta cuando comenzó el diluvio. El segundo es comenzar a dejar constancia notarial del linaje del cual proviene el Mesías. Si Jesús no tiene un linaje claro e indiscutible en la historia bíblica, entonces sus enemigos podrán alegar que no es un personaje real; herejía que proclamaron los gnósticos en el siglo II. El racionalismo europeo del siglo XVIII retomó esta herejía y del racionalismo viene Charles Darwin, que con su teoría de la Evolución de las especies, puso a la defensiva a la Iglesia que defiende la Biblia, como la palabra inspirada por Dios. Génesis 7: 17 – 23 “Y fue el diluvio 40 días sobre la tierra; y las aguas crecieron, y alzaron el arca, y se elevó sobre la tierra. Y subieron las aguas y crecieron en gran manera sobre la tierra; y flotaba el arca sobre la superficie de las aguas. Y las aguas subieron mucho sobre la tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos, fueron cubiertos. 15 codos más alto subieron las aguas, después que fueron cubiertos los montes. Y murió toda carne que se mueve sobre la tierra, así de aves como de ganado y de bestias, y de todo reptil que se arrastra sobre la tierra, y todo hombre. Todo lo que tenía aliento de vida en sus narices, todo lo que había en la tierra, murió. Así fue destruido todo ser que vivía sobre la faz de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, los reptiles, y las aves del cielo; y fueron raídos de la tierra, y quedó solamente Noé, y los que con él estaban en el arca.” En este pasaje Dios le está enseñando a Moisés que el diluvio fue universal. Solo sobrevivieron los que estaban en el arca y algunos animales submarinos. Es mentira la teoría de que el diluvio fue un fenómeno local. 79


Y Dios nos sigue dando detalles que fortalecen la fe del creyente, al decirnos que la montaña más alta fue cubierta casi 7 metros por el nuevo océano que tapó toda la superficie terrestre. No nos debe quedar duda alguna sobre el exterminio decretado y ejecutado por un Dios santo sobre una humanidad que se corrompió deliberadamente, en abierta y desafiante rebelión contra su Hacedor. Dios insiste que toda forma de vida terrestre murió, con excepción de los que iban con Noé en el arca protectora de la vida. Al no mencionar los animales marinos, nos está diciendo que éstos no padecieron el exterminio de sus congéneres terrestres. Recordemos que los silencios de Dios también nos dicen verdades importantes. Imaginemos por un momento a los miles de millones de seres vivos que murieron y quedaron sepultados. Estos son los fósiles que hoy encuentran los arqueólogos, que apenas han desenterrado unos 250,000 ejemplares. ¿Cómo fue posible que este gigantesco bote de 135 x 22.50 x 13.50 metros no se volteara en un océano embravecido, en el que aguas de abajo y aguas de arriba generaron olas gigantescas durante 40 días? Los ingenieros navales e hidráulicos del siglo XX se tomaron la molestia de hacer una réplica a escala del arca de Noé y junto a ésta colocaron réplicas de barcos modernos, en un gigantesco estanque tipo laboratorio, en el que simularon un cataclismo en el que las aguas subían del fondo y caían de arriba, tal y como lo describe este capítulo. Todos los barcos se hundieron, menos el arca, demostrando que las dimensiones son las ideales para flotar sin volcarse. ¿Nos puede quedar alguna duda sobre la veracidad y exactitud del relato de Dios? Solo un Dios omnisciente sabía las dimensiones precisas de un barco que sobreviviría al diluvio. Frente a estas evidencias empíricas, totalmente demostrables por científicos, el creyente debe saltar de alegría en su corazón, porque sabe que el único Dios verdadero fue el que inspiró a Moisés a escribir cosas que ningún científico puede saber.

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Génesis 7: 24 – 8: 1 – 3 “Y prevalecieron las aguas sobre la tierra 150 días. Y se acordó Dios de Noé, y de todos los animales, y de todas las bestias que estaban con él en el arca; e hizo pasar Dios un viento sobre la tierra, y disminuyeron las aguas. Y se cerraron las fuentes del abismo y las cataratas de los cielos; y la lluvia de los cielos fue detenida. Y las aguas decrecían gradualmente de sobre la tierra; y se retiraron las aguas al cabo de 150 días.” Durante 150 días el nivel del agua creció hasta cubrir todos los montes más altos. Y el Soberano de toda la creación ordenó a un viento que comenzara a disminuir el nivel del agua. Dios le reconfirma a Moisés que dejó de salir agua, gases y lava del fondo marino, así como también dejó de caer agua de arriba. El proceso de evaporación del agua devolvió mucha agua a la atmósfera en estado de vapor. Agua en estado gaseoso, retenida en las nubes. Se recuperó una parte del pabellón protector. El agua continuó bajando su nivel durante 150 días, para un total de 300 días desde que comenzó el diluvio. Génesis 8: 4 – 9 “Y reposó el arca en el mes séptimo, a los 17 días del mes, sobre los montes de Ararat. Y las aguas fueron decreciendo hasta el mes décimo; en el décimo, al primero del mes, se descubrieron las cimas de los montes. Sucedió que al cabo de 40 días abrió Noé la ventana del arca que había hecho, y envió un cuervo, el cual salió, y estuvo yendo y volviendo hasta que las aguas se secaron sobre la tierra. Envió también de sí una paloma, para ver si las aguas se habían retirado de sobre la faz de la tierra. Y no halló la paloma donde sentar la planta de su pie, y volvió a él al arca, porque las aguas estaban aún sobre la faz de toda la tierra. Entonces él extendió su mano, y tomándola, la hizo entrar consigo al arca.” El diluvio comenzó el día 17 del segundo mes y el arca tocó tierra firme el día 17 del mes séptimo. Cinco meses exactos de 30 días, para un total de 150 días. Y el agua siguió disminuyendo su nivel hasta el décimo mes, cuando las cimas de los montes quedaron al descubierto.

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Pero solo hasta el mes décimo, 64 días después que le arca reposó, es que las partes más altas de las montañas quedaron al descubierto. El cuervo es un animal salvaje, mientras que la paloma es doméstica. El cuervo fue y regresó al arca varias veces hasta que ya no regresó. En cambio, la paloma salió y regresó. El cuervo pudo encontrar alimento en las partes más altas de las montañas, pero no así la paloma. Las bestias son independientes del hombre, mientras que los domésticos viven cerca del hombre y dependen de él. Este pasaje es otra breve evidencia que Dios nos dejó que desde el principio Él hizo a los animales distintos; mientras que los evolucionistas creen que todos los animales provienen uno del otro. Génesis 8: 10 – 19 “Esperó aún otros 7 días, y volvió a enviar la paloma fuera del arca. Y la paloma volvió a él a la hora de la tarde; y he aquí que traía una hoja de olivo en el pico; y entendió Noé que las aguas se habían retirado de sobre la tierra. Y esperó aún otros 7 días, y envió la paloma, la cual no volvió ya más a él. Y sucedió que en el año 601 de Noé, en el mes primero, el día primero del mes, las aguas se secaron sobre la tierra; y quitó Noé la cubierta del arca, y miró, y he aquí que la faz de la tierra estaba seca. Y en el mes segundo, a los 27 días del mes, se secó la tierra. Entonces habló Dios a Noé, diciendo: Sal del arca tú, y tu mujer, y tus hijos, y las mujeres de tus hijos contigo. Todos los animales que están contigo de toda carne, de aves y de bestias y de todo reptil que se arrastra sobre la tierra, y fructifiquen y multiplíquense sobre la tierra. Entonces salió Noé, y sus hijos, y su mujer, y las mujeres de sus hijos con él. Todos los animales, y todo reptil y toda ave, todo lo que se mueve sobre la tierra según sus especies, salieron del arca.” Noé salió por orden directa y expresa de Dios del arca este día 27 del mes 2º, del año 601y entró al arca el día 17 del mes 2º del año anterior. Noé y todos los animales estuvieron en el arca durante un año y 10 días. El año judío es de 360 días. El año profético es de 360 días. Esta realidad es muy importante respetarla en la interpretación bíblica. Insisto en que cuando Dios nos suministra fechas, nos está diciendo que el evento ocurrió en un momento concreto y específico de la historia. Es imposible alegorizar el pasaje. 82


Queda una pregunta muy importante por contestar. ¿Cuánto alimento metió Noé en el arca para sustentar a 78,000 animales? Recordemos que quedó un espacio equivalente al de 47,000 ovejas, para almacenar alimentos vegetales. Son 15,418 metros cúbicos para alimentos. La densidad de los vegetales es menor que la del agua; por lo tanto, el arca pudo almacenar hasta 17,131,000 kilos de frutas, verduras y pastos. Pero si se compacta el pasto, el tonelaje sería el doble. Si Noé tenía la tecnología para construir semejante barco tan grande, debió tener el conocimiento para compactar y almacenar alimento vegetal dentro del arca. Adicionalmente, el viaje debió ser muy agitado. Algunos biólogos plantean la hipótesis de que para evitar las molestias digestivas y de mareos de estos viajeros, Dios alteró el biorritmo de los animales y muchos fueron inducidos a hibernar por la oscuridad casi permanente del arca que solo tenía una ventana. Los osos y otros animales en la oscuridad del invierno hibernan y no comen. Noé y las otras 7 personas necesitaban unos 8 kilos diarios de frutas y verduras. Los alimentos necesarios para ellos durante 370 días ascienden a 2,960 kilos. Esta cantidad es apenas una pequeña fracción de las más de 30 toneladas de pastos compactados. Así las cosas, es perfectamente factible que en el arca cupiera todo el alimento que estos 78,000 viajeros necesitaron. Solo llovió durante 40 días. Durante estos 40 días brotó agua desde el fondo del mar. El nivel del agua subió varios miles de metros, hasta tapar los picos más altos. La cantidad de agua adicional que entró al océano fue incalculable. El cataclismo fue el desastre natural más mortífero de nuestra historia. El tsunami que afectó al sur de Asia en diciembre del 2004 mató 300,000 personas y movió el eje de la Tierra 0.4 grados. El diluvio que Dios mandó mató 1,500 millones de personas y miles de millones de animales, y movió el eje de la Tierra 24 grados. Este cambio en el eje terrestre cambió el clima templado para dar comienzo a las estaciones. Emergieron nuevos continentes desde el fondo marino y en los extremos norte y sur emergieron los polos. 83


La ciencia moderna nos permite saber que el eje norte-sur del planeta se bambolea entre los 22.1 y los 24.5 grados de inclinación. Nadie murió dentro del arca durante 370 días. La salvación de Dios siempre es perfecta e irreversible. Todo creyente que ha nacido de nuevo y lo demuestra con su fe obediente, está dentro del arca universal de los justificados y su esperanza es firme e inconmovible. El arca es una figura histórica de la salvación eterna de Dios para sus escogidos, que nos guarda en arca perfecta que es nuestro Señor Jesucristo. Noé no tomó la iniciativa de salir, a pesar de que tuvo evidencias de que la tierra estaba seca. Noé esperó instrucciones de Dios. Portentosa la confianza de Noé en su Hacedor. Cuánta paciencia y fe obediente nos demuestra Noé. Ojala todos tuviéramos la paciencia y la confianza de Noé en nuestro Dios y Señor. Otro detalle que no podemos pasar por alto es que la paloma trajo una ramita de olivo en su pico. Esta realidad nos demuestra que en los últimos 156 días, a partir del momento en que Dios le informa a Moisés que los montes más altos quedaron al descubierto, la vegetación volvió a renacer rápidamente. En las nuevas porciones de tierra firme que Dios hizo emerger del fondo marino fracturado, Dios hizo nacer nuevas plantas. Nunca se nos olvide que en toda catástrofe Dios está metiendo su mano compasiva y poderosa, haciendo milagros que restauran las cosas o que impiden eventos más mortíferos. Siempre debemos tener presente que la soberanía de Jehová sobre su creación es permanente, porque su amor compasivo lo impulsa a aliviar y restaurar.

Cuál es la manera de comenzar la nueva vida Génesis 8: 20 – 22 “Y edificó Noé un altar a Jehová, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocausto en el altar. Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del 84


hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo ser viviente, como he hecho. Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.” Noé, sus tres hijos y sus respectivas esposas, son los únicos seres humanos que quedaron del cataclismo más devastador que nuestro planeta Tierra ha padecido. Dios eligió a Noé para que la civilización tenga un nuevo comienzo. Elohim hubiera podido hacer una nueva pareja como Adán y Eva, pero su atributo misericordioso lo llevó a elegir a una pareja con sus hijos para comenzar por segunda vez. Los hijos de Noé nacieron después que le fue anunciado que el planeta sería destruido. Su salvación fue por ser propiedad de Noé, sin mérito individual. Nuestra salvación es por pura gracia divina, sin que exista mérito alguno en la persona salvada. Y Noé nos enseña con su ejemplo cuál debe ser la manera cómo cualquier creyente debe comenzar la nueva vida después de haber recibido el regalo de la salvación: Dando gracias mediante un sacrificio sincero lleno de gratitud al Salvador. Después de la muerte del Cordero perfecto, que es Jesucristo, el sacrificio perfecto delante de Jehová, ya no necesitamos sacrificar ritualmente animales, porque el sacrificio del creyente debe ser íntimo y personal: Rendir su voluntad a su Salvador. Y ahora entendemos por qué Dios ordenó a Noé meter 7 parejas de animales limpios al arca: Para poder hacer el holocausto de acción de gracias, sin poner en peligro la subsistencia de estas especies. La alegría de Jehová fue profunda y muy emotiva, lo que lo llevó a dictar otra sentencia: No volverá a destruir a todo ser viviente. Y a pesar de la maldad humana, Él seguirá siendo fiel con sus bendiciones naturales, dando fruto la tierra, y manteniendo todo el ciclo vital del planeta. En este pasaje Dios se manifiesta como el sustentador de todo nuestro planeta y de todas sus formas de vida. Todo el poder que vemos en el planeta, es el poder del Creador y dueño soberano manifestado de manera visible. 85


El paganismo animista de nuestros indígenas americanos atribuye el poder del Creador a la “Madre Tierra”. Caen en el mismo error de los panteístas budistas que creen que todo lo creado es divino y poderoso, porque Dios y su creación son la misma cosa. Venerar a la creación, conduce a los paganos a no usarla, a no investigarla, a no quererla sujetar para su beneficio. Por este sencillo error en su cosmovisión, es que todas estas culturas paganas como las de los indígenas americanos y las de casi todas las tribus africanas, siempre han vivido en el atraso científico y tecnológico y en la pobreza. En cambio, las naciones que adoptaron la cosmovisión bíblica de Génesis, que nos afirma que Dios nos dio el poder y la autoridad para gobernar todo el planeta, terminaron siendo las naciones más prósperas de la historia. Estas naciones son: Alemania, Suiza, Holanda, Bélgica, Francia, Reino Unido, USA, Canadá y Australia. En estas naciones cristianas bíblicas fue donde nació la investigación científica, se desarrolló la tecnología y se construyeron sociedades incluyentes e igualitarias, entre los siglos XVIII y hasta mediados del siglo XX. Lamentablemente, estas naciones comenzaron a abandonar la cosmovisión cristiana bíblica después de la 2ª guerra mundial, y ahora adoptaron la cosmovisión humanista y materialista, lo que las ha conducido a la crisis generalizada y aguda que vienen padeciendo desde hace unos 25 años. Este cambio en su cosmovisión las llevó al pragmatismo codicioso, que premia la especulación financiera por encima del trabajo que transforma ideas en productos y servicios tangibles. Regresando al pasaje bíblico, por primera vez aparece que habrá frío y que habrá verano e invierno. El clima terrestre comenzó a cambiar. Las 4 estaciones son consecuencia de la inclinación de la Tierra hasta 24.5 grados sobre su eje vertical norte-sur. Por lo tanto, las estaciones son una consecuencia directa del diluvio, porque así lo decretó Dios. Del clima templado y sin estaciones antes del diluvio, que protegía y propiciaba aquel pabellón de nubes que dejaba filtrar luz rosada que no contiene rayos dañinos; la Tierra comenzó a recibir luz amarilla que sí contiene rayos dañinos para la vida. 86


Del clima templado se pasó a las estaciones, porque el eje terrestre sur-norte fue dramáticamente movido. ¡Qué alivio tener un Dios que en medio de su santidad, se compadece de nosotros y se mantiene fiel con sus bendiciones! Lamentablemente la mayoría no percibe ni valora esta conducta divina. Comienza una nueva civilización post diluviana Génesis 9: 1, 2 “Bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, y llenad la tierra. El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos, en todo lo que se mueva sobre la tierra, y en todos los peces del mar; en vuestra mano son entregados.” Dios le repite a Noé la orden que dio a Adán, pero le revela una nueva y dramática realidad: La amistad entre los seres humanos y la mayoría de los animales se acabó. Y para proteger al hombre de este nuevo peligro en esta incipiente civilización post diluviana, inculcó en estos animales temor y miedo delante de cualquier ser humano. En el lenguaje de la Biología, Dios nos está diciendo que Él modificó la dieta de algunos animales, que a partir de este momento en adelante comerían carne de otros animales y si pudieran comerían carne humana. Por esto les inculcó un temor hacia el hombre. En cada cambio en su creación Dios siempre protegiendo al ser humano, que es la criatura que más ama. Este temor animal hacia nosotros también es una reafirmación divina de la superioridad del hombre sobre el resto de los seres vivos. ¿Por qué modificó Dios la dieta de estos animales que eran vegetarianos y comían exclusivamente pasto? Porque la nueva atmósfera ya no permite el gigantismo en el mundo vegetal. El pabellón protector de nubes perdió la mayor parte de su capa protectora, quedando solo una parte delgada de nubes. Comenzaría una etapa de insuficiencia de pastos y para sobrevivir algunos animales deberían comenzar a comer carne.

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Y así como Dios inculcó temor en los animales que ahora fueron transformados en carnívoros, también autorizó a Noé y a su descendencia a matar animales, entregándolos en sus manos. Así comenzó la cadena alimenticia, que introdujo al planeta en una etapa llena de crueldad para poder sobrevivir. Si mis amigos lectores, la maldición de la cadena alimenticia es consecuencia de los miles de millones de pecados que 1,500 millones de personas cometieron contra su Creador durante 1,656 años. Sin duda, después del diluvio, el planeta y la vida avanzaron de manera más rápida hacia su deterioro y corrupción. Una vez más la ley de causa-efecto se cumple en la vida. La maldición del diluvio trajo nuevas consecuencias terribles sobre la Tierra. Las relaciones entre los seres vivos empeoraron. La ley de la entropía se cumple inexorablemente. Todo cambio en nuestro planeta es hacia abajo. De lo mejor a lo peor. Sin embargo, Darwin y sus discípulos nos lograron convencer de que en la vida todos los cambios son de lo elemental hacia lo complejo, de lo inferior a lo superior. Algunos dinosaurios fueron convertidos por Dios en carnívoros, así como los grandes gatos, los cocodrilos, y algunas aves. Igual aconteció en el océano, donde algunos peces fueron instantáneamente convertidos en carnívoros. Afortunadamente, muchos animales grandes siguieron siendo vegetarianos, como los elefantes, los mamuts, los bisontes, y los caballos. Y estos cambios fueron instantáneos, así como su creación inicial fue instantánea. Elohim, que significa fuerza infinita, no necesita de miles de millones de años para transformar su creación, porque los ajustes a esta nueva atmósfera más dañina tenían que ser instantáneos, pues en caso contrario muchas especies morirían de hambre en pocos meses. Recordemos que esta nueva atmósfera perdió la mitad de su presión atmosférica, y perdió casi la mitad del oxígeno. Estas dos pérdidas llevaron a la muerte lenta a 88


varios animales terrestres gigantescos, que no pudieron transportar a la misma velocidad el menor oxígeno que respiraban a sus inmensos tejidos a través de su sistema circulatorio. Los dinosaurios y muchas otras especies no se pudieron adaptar a esta nueva atmósfera con menos oxígeno y la mitad de la presión atmosférica. Se extinguieron casi la mitad de las especies durante y después del diluvio: Unas 18,000. Y quedaron vivas otras 18,000. Esta realidad nos la enseña la Biología. Pero sin duda fue esta nueva cadena alimenticia la que llevó a la extinción a las dos parejas de casi 18,000 especies. Poca vegetación, poco pasto, que necesitaban semanas para crecer después del diluvio, incentivaron la primera matanza colectiva de la historia. En los siguientes años se fueron configurando las nuevas masas continentales, producto de las profundas fracturas del fondo marino durante el diluvio, que cada año se separaban unas de las otras, a razón de unos pocos centímetros cada año. En Paluxy, Texas, encontraron huellas de dinosaurios al lado de huellas de personas. Esta es una evidencia de que ambas especies convivieron simultáneamente. Esta evidencia se conserva en un museo. La superioridad humana sobre los animales permite al hombre exterminar a muchas especies. Con seguridad este triste hecho se repitió durante los primeros años post diluvianos, porque los árboles frutales necesitan meses y años para darnos frutas. Y la matanza se sigue repitiendo hoy. Los grupos ambientalistas lo saben muy bien. Génesis 9: 3 – 7 “Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he dado todo. Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis. Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre. El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre. Mas vosotros fructificad y multiplicaos; procread abundantemente en la tierra, y multiplicaos en ella.”

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El creador y soberano sigue anunciando cambios súbitos en su creación sujetada a su infinito poder. Noé y sus descendientes pasaron de ser vegetarianos a ser herbívoros. El ser humano ahora comerá carne. Y nos advierte que comamos carne sin su sangre, porque en ella está la vida del animal. Está demostrado que si comemos sangre, nos hace daño. Está demostrado que si comemos todos los días carne, la probabilidad de desarrollar un cáncer se triplica, frente a los que comen poca carne. Así lo demuestran los estudios de epidemiología de varios países en América, Europa y Asia. Una vez más queda en evidencia que las condiciones de vida empeoraron dramáticamente después del diluvio. La ciencia de la nutrición nos ha demostrado que la alimentación más saludable, para tener una mejor calidad de vida en la etapa adulta es comer más vegetales que carne. Comer granos enteros en vez de harinas industriales llenas de conservantes y azúcar. Consumir el azúcar natural que Dios nos regaló en sus frutas, en vez del azúcar que nosotros extraemos de la remolacha o la caña. En este dramático pasaje nuestro Hacedor comienza a establecer nuevas reglas de juego de carácter moral. Cuando Caín mató a Abel, Dios le perdonó la vida y lo protegió para que otros no lo mataran. Lamec, el descendiente de Caín se ufanó de haber matado a varios y no haber sido ajusticiado. Ahora Dios le ordena a Noé que establezca un nuevo patrón moral. Todo asesino debe ser ajusticiado por la sociedad, pues así lo demanda Dios. Algunos teólogos afirman que a partir de este momento Dios ordena al ser humano establecer gobiernos que mantengan el orden y protejan a sus ciudadanos. Al decirles a estos 4 varones que de aquí en adelante hay que enjuiciar a los asesinos, que si son hallados culpables hay que ejecutarlos; está dando la primera directriz de carácter judicial de la nueva sociedad.

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Antes del diluvio todos los seres humanos fueron un solo clan, hablando el mismo idioma, habitando un mismo continente, sin necesidad de gobernantes ni autoridades civiles. Y es muy interesante que Dios le diga a Moisés que también demandará al animal que se atreva a matar a un ser humano. Sin duda, Dios puede exterminar a una especie carnívora que amenace al hombre. He aquí otra causal para explicar el exterminio de algunas especies carnívoras, como fue el caso de las parejas de dinosaurios carnívoros que fueron aniquilados por otros animales y el ser humano. Y finaliza Dios reiterando a los 8 salvados del diluvio que fructifiquen y se multipliquen, que llenen el planeta. Génesis 9: 8 – 17 “Y habló Dios a Noé y a sus hijos con él, diciendo: He aquí que yo establezco mi pacto con vosotros, y con vuestros descendientes después de vosotros; y con todo ser viviente que está con vosotros; aves, animales, y toda bestia de la tierra que está con vosotros, desde todos los que salieron del arca hasta todo animal de la tierra. Estableceré mi pacto con vosotros, y no exterminaré ya más toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra. Y dijo Dios: Esta es la señal del pacto que yo establezco entre mí y vosotros y todo ser viviente que está con vosotros, por siglos perpetuos: Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por señal del pacto entre mí y la tierra. Y sucederá que cuando haga venir nubes sobre la tierra, se dejará ver entonces mi arco en las nubes. Y me acordaré del pacto mío, que hay entre mi y vosotros y todo ser viviente de toda carne; y no habrá más diluvio de aguas para destruir toda carne. Estará el arco en las nubes, y lo veré, y me acordaré del pacto perpetuo entre Dios y todo ser viviente, con toda carne que hay sobre la tierra. Dijo, pues, Dios a Noé: Esta es la señal del pacto que he establecido entre mí y toda carne que está sobre la tierra.” Confieso que me encanta el estilo tan didáctico que usa muchas veces nuestro Creador para dejarnos clarísimas sus nuevas reglas de juego con sus criaturas. Este pasaje es tan reiterativo y tan sencillo, que es a prueba de tontos. Dios le repite a Noé a sus hijos varias veces las mismas verdades:

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1. Su nuevo pacto lleno de compasión incluye a todo animal debajo del mar y encima de éste, y a todo animal que se mueve sobre la tierra firme. Por supuesto incluye a todas las personas presentes y futuras del género humano. 2. Nunca volverá a decretar un diluvio que destruya a todas las criaturas. Podrá haber catástrofes que destruyan a una parte de su creación, como ha ocurrido varias veces en la historia registrada. 3. Estableció una señal de su nuevo pacto: El arco iris. 4. Afirma que el arco iris es suyo. Es su señal. En términos científicos el arco iris es un fenómeno óptico y meteorológico que se puede disfrutar cuando la luz solar entra en un ángulo de 138 grados sobre algunas gotitas de agua que están suspendidas en la atmósfera. Después de una lluvia o tormenta quedan muchas gotitas suspendidas y la luz solar produce el arco iris, para el deleite de todos. Por eso es que Dios le dice a Noé que cuando “él traiga las nubes”, es decir cuando haga llover, aparecerá su arco iris. 5. La aparición del arco iris es otra evidencia física de que la atmósfera pre diluviana fue modificada. Antes del diluvio no existía el arco iris. 6. Nuestro Creador dice de manera poética que cuando vea su arco iris entonces se acordará de su pacto. Evidentemente Dios no necesita recordar algo, pues él lo sabe todo. Dios es el inventor del lenguaje poético. 7. Este pacto no incluye la nueva manera en que el soberano del universo volverá a destruir nuestro planeta: Con fuego, como se lo reveló a Pedro y a Juan en 2ª de Pedro 3: 10 y Apocalipsis 20: 9 y 21: 1. Génesis 9: 18, 19 “Y los hijos de Noé que salieron del arca fueron Sem, Cam y Jafet; y Cam es el padre de Canaán. Estos tres son los hijos de Noé, y de ellos fue llena toda la tierra.” Recordemos que el que está recibiendo la revelación de Dios es Moisés, 2,380 años después del diluvio.

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Por esta razón es que Dios le aclara a Moisés de donde vienen los cananitas, porque fueron los enemigos que ocupaban la tierra que Dios prometió a los judíos a través de Abraham. La verdad fundamental de este pasaje es que Dios afirma que de los 3 hijos de Noé venimos todos los seres humanos posteriores al diluvio. Una vez más Dios nos dice que así como todos los pre diluvianos provienen de Adán y Eva, los post diluvianos provenimos de los 3 hijos de Noé. No existe otra posibilidad. Cualquier teoría que lo niegue es pura fantasía. La genética nos ha permitido comprobar que en las instrucciones codificadas de nuestras células, que es el ADN, está contenido todo el poder otorgado por Dios para producir una inmensa variedad de modificaciones morfológicas en todos los animales y el ser humano. En el ADN de cada individuo está contenida toda la información genética para desarrollar piel oscura, ojos claros, cabello rizado, dependiendo de las combinaciones genéticas de los padres y del medio ambiente. La teoría de que existen varias razas humanas es falsa. Solo hay una raza, que viene de Adán. Los grupos étnicos que hoy conocemos son evidencias del proceso de las combinaciones genéticas, que Russel y Darwin llamaron “selección natural”. Las ligeras diferencias en el contorno de los ojos de chinos y japoneses con los europeos, la mayor estatura de ciertos grupos de población, los distintos tipos de cabello, son el resultado de miles de millones de combinaciones genéticas, del impacto ambiental y de los hábitos alimenticios, a lo largo de los siglos. Son pequeños cambios dentro de una misma especie o género, como Dios lo ordenó en Génesis 1 a todos los seres vivos. Génesis 9: 20 – 23 “Después comenzó Noé a labrar la tierra, y plantó una viña; y bebió del vino, y se embriagó, y estaba descubierto en medio de su tienda. Y Cam, padre de Canaán, vio la desnudez de su padre, y lo dijo a sus dos hermanos que estaban afuera. Entonces Sem y Jafet tomaron la ropa, y andando hacia atrás, 93


cubrieron la desnudez de su padre, teniendo vueltos sus rostros, y así no vieron la desnudez de su padre.” El castellano antiguo, de hace 400 años, describe la escena de una manera muy distinta al lenguaje que usamos hoy. El castellano es un idioma que trata de esconder los crudos hechos de la vida, disfrazándolos con palabras suaves y neutras. Nuestra hipocresía cultural se manifiesta también en nuestro idioma. Nos gusta disfrazar con palabras nuestros actos vergonzosos. Decimos una cosa pero hacemos otra. La escena es penosa. Noé se pasó de copas. Con seguridad no estaba solo, sino con su esposa. Tal vez estaba celebrando la primera cosecha de su vid y su primer vino. A todos nos gusta celebrar el fruto de nuestro trabajo. Los santos como Noé lo hacen con prudencia, pero en esta ocasión se le fue la mano. Algunos expertos creen que el cambio en la atmósfera propició la fermentación de las uvas guardadas y Noé pudo embriagarse sin conocimiento de causa. Es la primera vez que se habla de bebidas alcohólicas. Por ende, es posible que no hubiese fermentación antes del diluvio. En ningún pasaje bíblico hasta este momento se han mencionado a las 4mujeres de estos 4 varones. Es el estilo, pero no quiere decir que ellas no participaran en todos los eventos relatados. Algunos eruditos dicen que “ver la desnudez” de otra persona significa tener sexo con ella. En este caso, puede implicar que Cam tuvo sexo con su madre, pues la desnudez de Noé incluye a su esposa. Lo importante de este pasaje es la enorme diferencia entre la conducta de Cam y la de sus dos hermanos. Cam pecó contra Dios al ofender a su padre. En cambio, Sem y Jafet cubrieron la desnudez de Noé y se negaron a disfrutar la penosa escena de ver a sus padres dormidos y borrachos. También es posible que en esta celebración participaran las 8 personas y tal vez todas se emborracharon involuntariamente. Lo cierto es que Cam actuó pecaminosamente, mientras que los otros varones no. 94


Génesis 9: 24, 25 “Y despertó Noé de su embriaguez, y supo lo que le había hecho su hijo más joven, y dijo: Maldito sea Canaán; siervo de siervos será a sus hermanos.” Debió ser muy grave el pecado de Cam, que trajo como consecuencia una maldición sobre un hijo que todavía no ha nacido: Canaán, que es el 4º hijo de Cam. Con base en esta terrible sentencia de Noé, algunos eruditos deducen que Canaán es hijo de la relación de Cam con su madre, la esposa de Noé. En este pasaje Dios nos afirma por primera vez en la Biblia que los descendientes arrastramos maldiciones generacionales de nuestros padres. ¿Por qué Noé maldice al 4º hijo de su hijo y no al primogénito? He aquí otra evidencia de la elección divina que guió a Noé. Es un misterio esta doctrina de la elección. Pero la parte positiva y misericordiosa es que todos los demás hijos de Cam no fueron incluidos en esta maldición generacional. Solo un hijo y su descendencia. Otra evidencia de la misericordia divina. Si el pecado de Cam hubiera sido únicamente burlarse de su papá al verlo borracho, desnudo, y tirado en el piso de su tienda; no parece razonable que su pecado arrojara una maldición tan terrible sobre su hijo: Ser siervo de bajo nivel frente a la descendencia de sus hermanos. Esto significa se esclavo. No disfrutar de libertad como individuo. Terrible maldición cayó sobre Canaán. Génesis 9: 26, 27 “Dijo más: Bendito por Jehová mi Dios sea Sem, y sea Canaán su siervo. Engrandezca Dios a Jafet, y habite en las tiendas de Sem, y sea Canaán su siervo.” Este pasaje es la primera profecía sobre la elección de Dios sobre individuos, predeterminando sus destinos individuales y colectivos por miles de años. Teólogos ortodoxos consideran que en este pasaje quedó sellada la elección de los judíos como la nación que en el futuro Dios elegiría para comenzar su revelación escrita. Moisés es descendiente de Sem. Abraham es descendiente de Sem. Este es el linaje judío. 95


Y Jafet recibe una bendición distinta: Que será grande entre las naciones y que algún día habitará bajo las mismas tiendas de la nación bendecida. Este anhelo de Noé se cumplió cuando nació la Iglesia en Pentecostés, en junio del año 32. Los hijos de Jafet, que son los que no somos semitas ni cananitas, fuimos alcanzados de manera colectiva por la bendición del Creador, gracias al Dioshombre, Jesucristo, y comenzamos a habitar bajo las mismas tiendas de los judíos, que es el lugar santísimo que Cristo le abrió a todos los que lo acepten como Dios y Señor. Y nuevamente Noé reitera por segunda y por tercera vez la maldición sobre Canaán. Génesis 9: 28, 29 “Y vivió Noé después del diluvio 350 años. Y fueron todos los días de Noé 950 años; y murió.” Por enésima vez Dios le informa a Moisés que los seres humanos al principio vivieron mucho más tiempo que los 120 años que Moisés vivió. El hecho de que Noé sobreviviera 350 años después del diluvio, es una evidencia de que el deterioro atmosférico fue lento y gradual. Cuando veamos las siguientes genealogías vamos a verificar cómo la edad de las personas fue disminuyendo gradualmente. Génesis 10: 1 – 5 “Estas son las generaciones de los hijos de Noé: Sem, Cam y Jafet, a quienes nacieron hijos después del diluvio. Los hijos de Jafet: Gomer, Magog, Madai, Javán, Tubal, Mesec y Tiras. Los hijos de Gomer: Asquenaz, Rifat y Togarma. Los hijos de Javán: Elisa, Tarsis, Quitim, y Dodanim. De estos se poblaron las costas, cada cual según su lengua, conforme a sus familias en sus naciones.” Dios le anticipa a Moisés que cada nieto y bisnieto de Noé serían dispersados a nuevos territorios y hablarían nuevas lenguas, como se lo revela en el capítulo 11.

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Gomer se trasladó al norte y centro de la actual Turquía, y después al occidente de Rusia, y es el padre de los alemanes, armenios, gálatas, franceses, españoles y galeses. Magog se trasladó más al norte que su hermano Gomer y es el padre de los rumanos y ucranianos. Madai se trasladó al oriente del río Tigris a la misma altura del actual Israel, y es el padre de los medos. Javán se trasladó al sur y occidente de Turquía y es el padre de los griegos. Tubal se trasladó cerca a su hermano Magog y es el padre de los georgianos. Mesec viajó al extremo norte y es el padre de los rusos. Tirás se trasladó al norte de su hermano Javán y es el padre de los macedonios y yugoslavos. Es intrigante que Dios solo mencione la descendencia de Gomer y Javán. En textos posteriores del AT Dios nos hablará de algunas de estas naciones, en la medida que tuvieron alguna relación con su pueblo elegido: Israel. Génesis 10: 6 – 12 “Los hijos de Cam: Cus, Mizraim, Fut y Canaán. Y los hijos de Cus: Seba, Havila, Sabta, Raama y Sabteca. Y los hijos de Raama: Seba y Dedán. Y Cus engendró a Nimrod, quien llegó a ser el primer poderoso en la tierra. Este fue vigoroso cazador delante de Jehová; por lo cual se dice: Así como Nimrod, vigoroso cazador delante de Jehová. Y fue el comienzo de su reino Babel, Erec, Acad y Calne, en la tierra de Sinar. De esta tierra salió para Asiria, y edificó Nínive, Rehobot, Cala, y Resén entre Nínive y Cala, la cual es ciudad grande.” Mientras que de los hijos de Jafet apenas se revela que poblaron las costas, en este pasaje se dan detalles importantes sobre Nimrod, nieto de Cam e hijo de Cus. Si repasamos el orden de los 4 hijos varones de Cam, vemos que Canaán fue el último. Y sobre este hijo fue que recayó la maldición decretada por Noé. Nimrod fue el fundador de varias ciudades y reinos en la tierra de Sinar, al sur de Iraq, donde fundó a Babel. Pero también se trasladó a Asiria, que queda al norte de 97


Sinar, donde fundó Nínive. Ambas ciudades tienen gran importancia en la historia bíblica. Desde el punto de vista humano, los hijos de Cus, el primogénito de Cam, tuvieron más éxito terrenal que sus primos hermanos, los hijos de Jafet. Nuevamente debemos recodar que cuando Dios menciona nombres y da coordenadas geográficas, nos quiere decir que todas estas ciudades existieron en sitios concretos, en un momento determinado de la historia. Este lenguaje divino es una advertencia de que no debemos alegorizar el texto bíblico. Pero veamos qué pasó con los hijos de Cam: 1. Cus, se trasladó al sur de Egipto, y es el padre de los etíopes. 2. Mizraim, se trasladó a Egipto y es el padre de los egipcios. 3. Fut, se trasladó al occidente de Egipto y es el padre de los libios. 4. Canaán, se trasladó al occidente del río Jordán y es el padre de los palestinos. Génesis 10: 13, 14 “Mizraim engendró a Ludim, a Anamin, a Lehabim, a Naftuhim, a Patrusim, a Casluhim, de donde salieron los filisteos, y a Caftorim.” Este pasaje nos demuestra que Dios es un contador de historias igual que un papá con sus hijos pequeños, pues nos precisa que los terribles filisteos son descendientes de Mizraim, el 2º hijo de Cam, y que fue el padre de los egipcios. Moisés no lidió con los filisteos, pues estos jugaron un papel importante contra Israel 200 años después, en los tiempos de los jueces. Por lo tanto, esta pista que Dios nos da sobre los filisteos es para los judíos posteriores a Moisés, entendiendo que sus enemigos venían de Egipto. Ignorar nuestro contexto histórico nos trae serios problemas sociales. Los colombianos hemos ignorado nuestro contexto histórico y por eso estamos como estamos.

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Comprobamos que Dios les regaló pistas históricas de manera anticipada para que como nación no se metieran en problemas con enemigos viscerales de los israelitas. Su amor compasivo manifestado una vez más. Génesis 10: 15 – 20 “Y Canaán engendró a Sidón su primogénito, a Het, al jebuseo, al amorreo, al gergeseo, al heveo, al araceo, al sineo, al arvadeo, al zemareo y al hamateo; y después e dispersaron las familias de los cananeos. Y fue el territorio de los cananeos desde Sidón, en dirección a Gerar, hasta Gaza; y en dirección de Sodoma, Gomorra, Adma y Zeboim, hasta Lasa. Estos son los hijos de Cam por sus familias, por sus lenguas, en sus tierras, en sus naciones.” Esta es la fotografía completa de los cananitas, los herederos de la maldición de Noé. La rebeldía de estas naciones contra Dios fue juzgada por el Soberano cuando destruyó con fuego del cielo a Sodoma y a Gomorra, en los tiempos de Abraham. Y como no se arrepintieron, su santo juicio continuó a partir del tiempo en que Josué comenzó a echarlos de sus tierras, casi 500 años después de Abraham. Un lector de la Biblia puede llegar a la falsa conclusión de que Dios es iracundo e injusto con estas naciones rebeldes; pero si avanzamos a Génesis 15:16, cuando conversando con Abraham le notifica que Él tendrá paciencia durante 400 años con estos cananitas, y solo hasta aquel momento dejará que los judíos los despojen de sus tierras y los derroten militarmente. La paciencia de Dios con las naciones que se rebelan contra Él es muy prolongada en el tiempo, en cambio sus bendiciones para las naciones que lo honran son rápidas y monumentales. Este es el caso de Alemania después de Lutero, Suiza después de Calvino e Inglaterra y Escocia después del triunfo de los reformadores en el siglo XVII. La conclusión que podemos extraer de estos pasajes es que la misericordia de Dios siempre es más grande que los múltiples pecados de una persona o nación, y que es el hombre el culpable al no atender los llamados de un Dios santo que nos quiere llevar al arrepentimiento. Génesis 10: 21 “También le nacieron hijos a Sem, padre de todos los hijos de Heber, y hermano mayor de Jafet.” 99


Solo hasta este versículo es que podemos saber que Sem fue el hijo mayor de Noé, Jafet fue el segundo y Cam fue el menor de los tres. También destaca este pasaje a Heber, anticipándole que algo importante hará Dios con este personaje. Génesis 10: 22 – 25 “Los hijos de Sem fueron Elam, Asur, Arfaxad, Lud y Aram. Y los hijos de Aram: Uz, Hul, Geter y Mas. Arfaxad engendró a Sala, y Sala engendró a Heber. Y a Heber le nacieron dos hijos: el nombre del uno fue Peleg, porque en sus días fue repartida la tierra; y el nombre de su hermano, Joctán.” Este pasaje es espectacularmente intrigante al decirnos que cuando vivió Peleg fue repartida la tierra. Dios nos está anticipando que en algún momento en el futuro Él dispersará a la gente y organizará las futuras naciones post diluvianas. Cuando analicemos el capítulo 11 descubriremos con mayor detalle este anuncio sobre la conformación de las primeras naciones. He aquí una vez más la evidencia de que el relato bíblico avanza de manera progresiva y que las verdades de Dios se van conociendo poco a poco y su revelación alcanzó su plenitud cuando Jesús se encarnó y el Espíritu Santo terminó de revelarles a los profetas el NT. La revelación progresiva nos impide interpretar correctamente un texto del AT sin textos concordantes del NT. Por esta verdad es que los judíos posteriores a Cristo andan medio ciegos, pues les falta la plenitud de la revelación escrita. Algunas verdades del AT pueden no tener validez para la Iglesia, como lo demostró Pablo en varias de sus cartas, anulando el pacto mosaico y la circuncisión ordenada a Abraham. Recordemos que Dios va modificando sus reglas de juego con sus elegidos a través del tiempo. Pero sepamos quienes fueron estos hijos de Sem:

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1. Elam, se trasladó a la Persia actual, que ahora llamamos Irán. Los iraníes son primos de los judíos. 2. Asur, se trasladó a la antigua Asiria, que ahora es al oriente de Babilonia, arriba de Iraq. 3. Arfaxad, se trasladó al norte de la ciudad de Nínive, arriba de la antigua Asiria. 4. Lud, se trasladó a la antigua Lidia, cerca de la ciudad de Anatolia. 5. Aram, convivió cerca de su hermano Asur y sus familias se casaron entre sí, consolidando el futuro imperio Asirio. 6. Heber, el nieto de Arfaxad, es el padre de los hebreos o judíos. Génesis 10: 26 – 30 “Y Joctán engendró a Almodad, Selef, Hazarmavet, Jera, Adoram, Uzal, Dicla, Obal, Abimael, Seba, Ofir, Havila y Jobab; todos estos fueron hijos de Joctán. Y la tierra en que habitaron fue desde Mesa en dirección de Sefar, hasta la región montañosa del oriente. Joctán y sus 13 hijos mencionados acá son los padres de las naciones árabes. Como podemos apreciar, todas las naciones que hoy son acérrimas enemigas y quieren aniquilarse entre sí, son primos. La historia se encargó de enemistarlos, cultivando rencores y amarguras de padres a hijos. La ausencia de perdón entre nosotros es la raíz de muchos pecados que cometemos como naciones y entre nuestras familias. Nuestra condición pecaminosa nos lleva a odiarnos entre hermanos. Solo cuando nos rendimos arrepentidos al poder de Dios, Él transforma nuestros odios y rencores en perdón, paz y mansedumbre. Ponte de rodillas y pide a Dios que te ayude a perdonar a los que te han maltratado. Es fundamental para que puedas llevar una vida sin amargura. Génesis 10: 31, 32 “Estos fueron los hijos de Sem por sus familias, por sus lenguas, en sus tierras, en sus naciones. Estas son las familias de los hijos de Noé por sus descendencias, en sus naciones; y de éstos se esparcieron las naciones en la tierra, después del diluvio.” 101


Me gusta mucho ver cómo Dios repite varias veces una verdad, con el fin de que a nadie le quede la más mínima de que Él es Soberano sobre toda su creación, incluyendo el destino de ciudades y naciones. En este pasaje afirma que las naciones y sus territorios son el resultado de su perfecta voluntad, después del diluvio. Génesis 11: 1, 2 “Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí.” Debemos regresar al capítulo 10 para interpretar este pasaje, porque el primero en llegar a Sinar fue Nimrod, nieto de Cam. La otra verdad que nos descubre este pasaje es que desde Adán hasta Nimrod todos los seres humanos hablaban una sola lengua y usaban un mismo alfabeto. Las teorías evolucionistas no ofrecen una buena explicación sobre el origen de los idiomas. En cambio la Biblia afirma con sencillez que fue Dios el que insertó en Adán el primer idioma de la historia, y éste le enseñó a sus hijos. Génesis 11: 3, 4 “Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla. Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de la tierra.” El castellano antiguo no logra expresar la rebeldía que hay en este pasaje. Nimrod no quiso cumplir con la orden de Dios de llenar todo el planeta, porque le gustó la llanura de Sinar. Pero Nimrod no se limitó a desobedecer a Dios, sino que lo desafió al decirles a sus parientes que elevaran una torre que llegara al cielo, que es el lugar de Dios. Y el cínico de Nimrod dijo que sabía que iban a ser esparcidos por el Soberano. Aquí queda demostrado que el hombre no obedece por temor. La única manera de obedecer a Dios es por amor. Solo cuando aceptamos su amor compasivo somos capacitados para dar amor desde nuestro corazón arrepentido. 102


Y lo triste es que nadie se enfrentó a Nimrod. Todos los de su clan lo siguieron como borregos. Génesis 11: 5 – 7 “Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres. Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos estos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer. Ahora, pues, descendamos, y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero.” Me impresiona ver la reacción tranquila, analítica y firme de Dios frente a nuestra rebeldía. Nunca reacciona por impulso ni con ira. ¿No les parece un alivio saber este atributo divino? El acto de descender en Dio es un antropomorfismo, pues Dios no necesita trasladarse de un lugar a otro. Es una figura del lenguaje para que a nuestra mente le quede fácil entender la acción del Creador. En un solo instante nuestro Hacedor cambió en los cerebros de miles de personas el lenguaje original de Adán e incrustó nuevos alfabetos, nuevas palabras, nuevas frases; diferentes las unas de las otras y Nimrod y sus rebeldes tuvieron que desistir de su desafío arquitectónico. Esta es la explicación sencilla del origen de todos los idiomas conocidos. Dios insertó un chip con una lengua nueva y distinta en los habitantes de aquel entonces. Dios es el inventor de las naciones, con sus lenguajes distintos. A nuestro Creador nada le queda difícil. Todo es posible en su infinito poder. Cuando uno lee las hipótesis humanistas que tratan de explicar el origen de las naciones y etnias, descubre que son argumentos puramente especulativos, sin evidencias arqueológicas que permitan conocer el momento histórico ni su raíz genealógica. Génesis 11: 8, 9 “Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad. Por esto fue llamado el nombre de ella Babel, porque allí confundió Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra.” 103


Al leer este relato, me parece necio pretender ignorar a nuestro Creador. Él siempre se sale con la suya. Cualquier desafío que el hombre plantee, Jehová encuentra la manera de que su voluntad se cumpla, así sea con algún retraso en el tiempo. Las ruinas de Babel fueron encontradas al norte de Iraq, muy cerca del Éufrates. El hombre con su soberbia retarda los planes divinos, y nuestro Padre anhela que en este tiempo de espera el hombre se arrepienta y se reconcilie con su Creador. Lamentablemente, esto ha ocurrido muy pocas veces en la historia. ¿Tú ya te pusiste de rodillas y pediste perdón por tu rebeldía? Es el momento de hacerlo. Desde el punto de vista de Dios, la vida de las naciones ha sido una tragedia recurrente, con algunas milagrosas excepciones en algunos momentos de Israel, de Europa y de Norteamérica. Pero desde el punto de vista humano, nuestra historia nos llena de orgullo y complacencia. La historia que nos enseñan en las escuelas y universidades destaca los logros humanos, las conquistas de los grandes guerreros que asesinaron a millones y dejaron huérfanos y viudas por doquier. Esta visión de nuestra historia es incompleta e insuficiente, porque el punto de vista del Creador es el que verdaderamente importa, pues Él es nuestro Juez. Si los gobernantes y naciones reconocieran que al morir físicamente tienen que regresar a su Hacedor a rendirle cuentas, los actos de la humanidad serían distintos. Habría más compasión, habría menos codicia y más generosidad. Habría más justicia y menos violencia. Pero estos 11 capítulos de Génesis nos enseñan de manera inequívoca que la mayoría de las personas toman la decisión de ignorar a Dios y actuar en rebeldía contra sus mandatos. Génesis 11: 10 “Estas son la generaciones de Sem: Sem, de edad de 100 años, engendró a Arfaxad, 2 años después del diluvio. Y vivió Sem, después que engendró a Arfaxad, 500 años, y engendró hijos e hijas. Arfaxad vivió 35 años, y engendró a Sala. Y vivió Arfaxad, después que engendró a Sala, 403 años, y engendró hijos e hijas. Sala vivió 30 años, y engendró a Heber. Y vivió Sala, después que engendró a 104


Heber, 403 años, y engendró hijos e hijas. Heber vivió 34 años, y engendró a Peleg. Y vivió Heber, después que engendró a Peleg, 430 años, y engendró hijos e hijas. Peleg vivió 30 años, y engendró a Reu. Y vivió Peleg, después que engendró a Reu, 209 años, y engendró hijos e hijas. Reu vivió 32 años, y engendró a Serug. Y vivió Reu, después que engendró a Serug, 207 años, y engendró hijos e hijas. Serug vivió 30 años, y engendró a Nacor. Y vivió Serug, después que engendró a Nacor, 200 años, y engendró hijos e hijas. Nacor vivió 29 años, y engendró a Taré. Y vivió Nacor, después que engendró a Taré, 119 años, y engendró hijos e hijas. Taré vivió 70 años, y engendró a Abram, a Nacor y a Harán.” Si sumamos todas estas edades, comenzando con Arfaxad dos años después del diluvio y avanzamos hasta Abram, al que Dios le cambió el nombre por Abraham, estableceremos que el padre de la fe en el Dios de la Biblia, que también es el padre de los judíos, nació 292 años después del diluvio, 1,948 años después de Adán. Es muy significativo que Dios solo le reveló a Moisés las edades del linaje que invocaba su santo nombre. El primer linaje fue el de Set en el capítulo 5 y ahora el de Sem. La otra verdad significativa que nos regala este pasaje, es que se comenzó a cumplir la sentencia divina de que la vida humana sería acortada a un máximo de 120 años. Sem, que nació 99 años antes de comenzar el diluvio, vivió 600 años. Esto quiere decir que Abraham debió conocerlo. En cambio, Peleg solo vivió 239 años. Recordemos que este período de la vida de Peleg Dios dispersó a las recién nacidas naciones. Algunos científicos del planeta creen que en esta afirmación también está incluido el momento en que las nuevas porciones de tierra firme cuando Dios fracturó el fondo marino, ya estaban separadas unas de otras. Los nuevos continentes empezaban a separarse. Hoy sabemos que estas masas continentales se mueven unos 5 metros por año. Posiblemente al comienzo de esta fractura inicial el desplazamiento fue mucho más veloz. El continente original comenzó a convertirse en los que hoy tenemos. La dispersión de la humanidad fue un decreto divino, y se cumplió cabalmente. El hombre con toda su tecnología nada puede hacer frente a los designios del Soberano del universo. 105


Si Dios se tomó la molestia de darle toda esta información cronológica a Moisés, ¿cómo es posible que durante siglos la Iglesia haya alegorizado casi todos estos 11 capítulos de Génesis? ¿Cómo es posible pensar que todos estos números sobre las edades de los hombres son alegóricos? ¿Cómo es posible que nos cueste trabajo aceptar que Dios hizo todo lo que existe en 6 días de 24 horas? Poner en duda esta afirmación es concluir que nuestro Dios es incapaz. Te invito a que recapacites y logres despojarte de todas las mentiras seudocientíficas que te inculcaron como verdades indiscutibles en la escuela y la universidad y aceptes de manera literal lo que Moisés escribió inspirado por Dios. Génesis 11: 27, 26 “Estas son la generaciones de Taré: Taré engendró a Abram, a Nacor y a Harán; y Harán engendró a Lot. Y murió Harán antes que su padre Taré, en la tierra de su nacimiento, en Ur de los caldeos.” Esta parte final del capítulo 11 es el abrebocas del capítulo 12, en el que Dios eligió a Abraham para ser el padre de una nación especial, los judíos; para que a través de estos descendientes se encarnara la persona en la que “serán benditas todas las familias de la Tierra”. Esta persona es nadie menos que el Mesías, Jesucristo, el Hijo unigénito de Dios Padre. En efecto, Jesús es judío, porque así lo determinó el Padre cuando eligió a Abraham. Nuevamente, nuestro Dios nos regala detalles precisos, en este caso del sitio donde nació Abraham. Ur fue encontrada por los arqueólogos, y sus ruinas están a 24 kilómetros al suroeste de la ciudad de Nasiriya, en Iraq. ¿Cómo es posible que sigamos alegorizando a Génesis? ¿Cómo es posible que haya gente que cuestione la existencia de todos estos personajes? Además nos cuenta que Lot quedó huérfano muy joven, razón por la cual su tío Abraham decidió asumir el rol de padre y se lo llevó cuando Dios le ordenó que se fuera.

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Génesis 11: 29 “Y tomaron Abram y Nacor para sí mujeres; el nombre de la mujer de Abram era Sarai, y el nombre de la mujer de Nacor, Milca, hija de Harán, padre de Milca y de Isca.” Nacor se casó con una sobrina. Imagínense, casi 2,000 años después de Adán la gente todavía se casaba con gente de su misma familia. Era una necesidad, porque la civilización comenzó por 2ª vez con 4 parejas. Los hijos de Sem se tuvieron que casar hermanos con hermanas. Después primos con primas. Posteriormente, Dios prohibió a los judíos casarse entre hermanos, primos y sobrinos con tíos. Una de las razones de esta futura prohibición divina es la degradación genética de nuestras células. La degradación o deterioro de toda la creación es una consecuencia del pecado de Adán. Nuestros genes hoy están más deteriorados que los genes de Peleg, que en la misma atmósfera dañada por el diluvio vivió 239 años. Esta sencilla evidencia histórica es una prueba irrefutable de nuestra gradual corrupción biológica. Desde 1945 a nuestros días han crecido de manera significativa las enfermedades autoinmunes como el cáncer y la diabetes, porque la forma en que nos estamos alimentando es distinta a la alimentación que nuestros abuelos tuvieron antes de la 2ª guerra mundial. La Medicina moderna ha verificado que los judíos padecen xerodermia pigmentosa, que es una enfermedad de la piel que muchas veces degenera en cáncer de piel. La misma enfermedad la padecen otras etnias que también se casan entre parientes cercanos. Definitivamente el Creador se las sabe todas, nada escapa a su infinita sabiduría. Por esto es que en el momento indicado, Él cambió las reglas del juego y estableció esta prohibición. Y su motivación fue la de protegernos de más enfermedades que se presentan si nos casamos entre parientes. Génesis 11: 30 – 32 “Mas Sarai era estéril, y no tenía hijo. Y tomó Taré a Abram su hijo, y a Lot hijo de Arán, hijo de sus hijo, y a Sarai su nuera, mujer de Abram su hijo, y salió con ellos de Ur de los caldeos, para ir a la tierra de Canaán; y vinieron hasta Harán, y se quedaron allí. Y fueron los días de Taré 205 años; y murió Taré en Harán.” 107


La explicación de Dios sobre los orígenes del cosmos, del planeta Tierra y de todos los seres vivos termina con este pasaje lleno de detalles de un pequeño clan descendientes de Sem, que eran los dueños de la bendición decretada por Noé después del pecado de Cam. El relato bíblico se va a enfocar ahora en Abraham y su esposa. Sarai era estéril. Otra evidencia de nuestros desajustes biológicos por el pecado. Taré tomó la decisión de trasladar su vivienda de Ur a Canaán. No se nos dice por qué. Lo cierto es que quiso salir de su ciudad natal. Algún peligro los debió motivar, pues nadie se va de su tierra de buena gana. Tomaron rumbo al norte a una ciudad llamada Harán. Los arqueólogos la encontraron en lo que hoy es el suroriente de Turquía, en una ubicación estratégica porque es el punto de cruce de los viajeros que venían e iban a Nínive, Damasco y Karmemish. Harán quedaba cerca a la frontera de norte de lo que hoy es Siria, siendo el camino para entrar a Canaán. Taré sabía a dónde ir. Harán era y fue por miles de años un punto estratégico para comerciantes y guerreros. Tampoco sabemos por qué Taré se detuvo y se quedó en Harán, en vez de avanzar hacia Canaán. Tal vez logró hacer buenos amigos e hizo excelentes negocios y se quedó hasta morir a los 205 años de edad.

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Reflexiones finales sobre la explicación de Dios sobre los orígenes Al darle un sobrevuelo a estos 11 capítulos podemos extraer algunas reflexiones importantes: 1. Dios le reveló suficientes detalles a Moisés sobre cuándo, cómo y para qué trajo a la existencia al cosmos y al hombre en este planeta. 2. Dios se guardó muchos detalles de cómo lo hizo, porque Él quiere que reconozcamos nuestras limitaciones e insuficiencias humanas y dependamos de su poder lleno de amor, creyendo y confiando el su soberanía misericordiosa. Desde el comienzo de su revelación, nuestro Hacedor quiere que seamos humildes delante de Él y dependamos de su poder soberano. 3. Dios nos regaló suficiente evidencia geográfica y cronológica para asegurarnos que todo lo que escribió Moisés es real, y por ende debemos interpretarlo literalmente. 4. No hay espacio en estos 11 capítulos para alegorizar o espiritualizar el relato. Por ejemplo, el hecho de que Dios hizo en el primer día a la Tierra, y solo en el 4º día hizo al Sol, la Luna y las demás lumbreras, podemos aceptarlo, aunque la cosmología moderna nos diga que la Tierra es una consecuencia de un desprendimiento de masa solar. Recordemos que la cosmología no es una ciencia, pues es pura especulación deductiva de lo que logran observar en el inmenso cosmos. 5. La extinción de casi la mitad de los animales terrestres ocurrió durante el diluvio, que fue un cataclismo mayúsculo que movió el eje terrestre hasta 24 grados y dio origen a nuevas masas continentales, incluyendo las dos masas continentales en los polos. Las últimas parejas de dinosaurios y las casi 18,000 parejas de animales murieron pocos años después de salir del arca, porque la cadena alimenticia comenzó, y porque el hombre comenzó a cazar para comer carne. El hombre y algunas fieras se comieron las pocas parejas de muchas especies que no lograron sobrevivir a esta matanza colectiva. 6. Dios deja muy en claro que Él hizo el cosmos y la vida en 6 días de 24 horas. Lo repitió 6 veces, para que no nos quede duda. No hay espacio para que 109


podamos acomodar dentro del relato a los miles de millones de años que la teoría de Darwin necesita. Dios hizo todas las formas de vida de manera instantánea, con criaturas ya maduras y listas para reproducirse. Adán fue hecho adulto, igual que Eva. No hay espacio para meter dentro del relato la posibilidad de que la especie humana proviene de diferentes familias de simios. 7. El planeta Tierra tiene apenas unos 6,000 años de haber sido traído a su existencia. Igual el Sol y el resto del universo. La ciencia hoy ha encontrado suficiente evidencia empírica que confirma esta juventud de la materia. 8. Un creyente en el Dios de la Biblia no debe poner en duda la veracidad de este relato para tratar de acomodarlo a la teoría de la Evolución, que la ciencia moderna ha demostrado que anticientífica. Si como creyente todavía tienes dudas, te felicito, porque tu mente quiere saber más. Si quieres profundizar sobre lo que la ciencia moderna dice en contra de la teoría de la Evolución, te invito a que me escribas para enviarte un documento puramente científico que explica con gran detalle que las 4 premisas sobre las que se fundamenta la Evolución resultaron ser anticientíficas. Guardo la esperanza de que este análisis expositivo de Génesis 1 al 11 haya edificado la fe de cada estudiante en el Dios de la Biblia. SANTIAGO VILLOTA svillota@hotmail.com

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