Memorias en versos
Autores bibliotecarios
La siguiente obra es resultado del trabajo colaborativo entre jóvenes autores, quienes a su vez se desempeñan como bibliotecarios y embajadores de la lectura y escritura en un centro de inserción social de ISNA. Cada pieza representa una memoria significativa en la vida de cada autor y se convierte un vehículo de expresión y conexión con la audiencia que les lee.
En colaboración con:
Memorias en verso Autores bibliotecarios
Oda a mi hijo B. Velásquez Ortiz A ti, que le devolviste la alegría a mi corazón y que siempre estás bien plasmado en mi mente y corazón. Tú me diste una razón para seguir luchando en este laberinto sin salida, lleno de sonrisas y lágrimas. Eres como la luz que me alumbra mi alma, como el sol que ilumina esta oscuridad en que me encuentro. Me has enseñado que la vida tiene un lado diferente y que el amor no tiene limite cuando es puro y sincero. Te necesito porque me animas a seguir luchando en este callejón sin salida. Desde el día en que tú naciste, me cambiaste la vida por completo y día con día extraño tenerte a mi lado. Sin ti, no tendría razón para seguir luchando, porque tú eres el motivo por el cual estoy en pie. Sin ti, la vida no tiene sentido. Sin ti, no soy nada. Por ti, haría todo lo que en esta vida es posible. Soy capaz de dar mi vida por ti, porque te amo y nunca te quiero perder. Gracias por hacer que mi vida cambiara de una manera inesperada. Gracias por cada uno de los besos sinceros que me has dado. Gracias por existir. Prometo darte todo mi amor sin limite y demostrartelo día con día. Te prometo que pronto estaré a tu lado y no me separaré de ti. Todo mi corazón lo dejo en está dedicación, pidiendole a Dios que nos de su bendición, que cuide a mi familia, especialmente a mi hijo y a mi esposa. Te amo y te amaré siempre mi hermoso hijo Axel.
A ti, querido padre N.O. Tachín A ti querido padre, cuanto quisiera que estuviera a mi lado para poder contarte la falta que me hace no poder estar contigo. Te tengo en lo más profundo de mi corazón y en lo interior de mis pensamientos. Me acuerdo cuando salíamos con la familia a pasear a la playa. Eran momentos especiales de mucha diversión contigo y con la familia. Me acuerdo que mi hermano Daniel se golpió el pie y estuvo varios días en cama, pero gracias a Dios se recuperó muy pronto. Aun con el golpe de mi hermano, ese día en la playa fue el mejor día con la familia. Siempre fuiste para mí un buen padre, honesto y muy educado. Nunca nos educaste para hacer cosas malas. Nos distes solo buenos consejos, a mí y a mis hermanos, Blanca y Daniel. Fuiste para nosotros un padre perfecto y responsable. Te extraño Papá.
Eres la luz del sol J. V. Garcias A ti que me ayudaste cuando más lo necesitaba y que nunca voy a dejar de amar. Cuando te pedía un consejo, allí estabas, y ahora no estoy cuando me necesitas. Tú me diste el amor que necesitaba cuando estaba pequeña. Eres como la luz del sol cuando sale en la mañana iluminando mi camino. Te necesito porque eres como el motor para seguir caminando en este camino que nunca se le encuentro el final. Sin ti, me siento solo, porque eres la luz de mi vida. Te prometo que mientras tenga vida, te voy a respetar y te voy a dar gracias por el apoyo que siempre me has dado. Alguién día voy a estar contigo, mamá. Te amo y que Dios te bendiga.
A ti, alegría D. Sagastizado A ti alegría, que has estado en muchos momentos de mi vida. Te agradezco por la felicidad que has puesto en mí. Te doy gracias por las risas que me has sacado. Acepto que no siempre has sido solo tú. A tu lado ha estado el miedo acompañándote, porque él hace que yo agarre impulso para proyectarme hacia mis metas. La tristeza también ha hecho de las suyas, pero después de cada caída puedo tomar más valor para no rendirme nunca. A veces su amigo rencor quiere que hable en mal de ustedes, pero lo que sé es que los necesito a todos, porque el rencor ha hecho que pueda perdonar y querer. Gracias, alegría, y a tus amigos, miedo, tristeza y rencor por estar a mi lado siempre. Espero que muchos se den cuenta que ustedes son necesarios en nuestras vidas.
Oda a My Father S. Gómez A ti que siempre estás a mi lado apoyándome en los momentos de tormenta. Tú me das siempre tu eterno cariño, tu amor y tu fuerza cuando las mías se agotan. Eres como el lucero brillando en mi oscuridad. Me has enseñado a ser paciente y amoroso y a salir adelante cueste lo que cueste. Te necesito porque no puedo vivir sin ti, sin tus consejos, sin tu cariño. Sin ti, siento que mi vida no tiene sentido. Te extraño mucho, Pá. Te prometo que voy a hacer todo lo posible para estar juntos nuevamente. Te quiero mucho y siempre vas a estar en mi mente y en mi corazón. Te agradezco porque a pesar de que no he sido el mejor hijo, tu siempre has estado apoyandome, haciendome entrar en razón. Nunca perdistes la esperanza que un día iba a cambiar. Le doy gracias a Dios por regalarme un padre tan cariñoso y comprensivo. Te doy gracias a ti, padrecito, porque nunca me has abandonabo, a pesar de que te he dado muchos dolores de cabeza. Gracias por apoyarme siempre. Te amo con todo mi corazón.
Oda a mi madre F. Lima Flores Te escribo esto porque tú me distes la felicidad. Tú me has cuidado siempre. Eres tan hermosa como un ramo de rosas, tu cara tan linda como el cielo. Me has enseñado lo bueno y lo malo, y a respetar a los demás. Te necesito porque eres tan especial y eres lo que más amo en la vida. Sin ti, no puedo vivir. Mi vida no tiene sentido si tú no estás, porque eres la persona que me da aliento para seguir adelante y hacer mejor las cosas. Te prometo que no me meteré en cosas malas. Te voy a ayudar siempre y estaré contigo cuando me necesites.
A mi preciosa hija K. D. Flowers A mi preciosa hija, mi mundo entero eres tú. Quiero que sepas que eres como una inmensa estrella que illumina mi camino aunque no he podido ver ni estar contigo. Quiero que sepas que te extraño y te adoro. Quisiera estar contigo sin separarme. Quiero enseñarte a hablar y a caminar. Quiero dártelo todo, hasta mi vida, porque lo vales, mi chiquita. Sé que pronto estarás en mi brazos y te voy a demostrar que tienes un padre que lo da todo por ti, sin pensarlo dos veces, amor. Por eso, bebé, te escribo esta carta para que tu madrecita te la lea, y lea lo que haré por ti, mi bebita hermosa. Te deseo lo mejor para ti, bebé. Deseo que crezcas y puedas conocer el mundo. Espero que aprendas mucho y que estudies para superarte. Espero que nunca andes por estos lugares donde yo estoy por no querer estudiar y por vago. Te deseo todo lo mejor, mi pequeña Alicia. Te prometo que al salir de este lugar que no me permite estar al lado tuyo, te buscaré y te demostraré lo mucho que te amo, y estaré siempre contigo para cuidarte.
A ti, María G. Castillo A ti querida María, me haces mucha falta. Quisiera tenerte a mi lado y decirte muchas cosas lindas. Eres como una piedra preciosa que he perdido y no la encuentro. Me has enseñado a amar y a perdonar. Todo lo puedo en ti. Te necesito, porque si tú no estás a mi lado, no sé como podría vivir. Sin ti, siento que la vida se me va. Te prometo que algún día vamos a estar juntos y aprovecharemos el tiempo perdido.
Mi consejero O. Campos Portillo A ti que siempre estuviste conmigo en los momentos más duros. Tú me distes mucha confianza y felicidad, aun en los instantes que pensé que mis errores no tenían vuelta atrás. Mi desconfianza me hacía imaginar que ya no podía seguir. Pero siempre me alentabas, y me dejaste la moreleja que me ha servido mucho hasta el día de hoy. Ahora que no estás conmigo, eres como un recordatorio constante. Antes de actuar, tú piensas por mí, sin decirme una sola palabra. Me has enseñado a salir adelante aunque hayan muchos obstáculos en la vida. Te necesito porque tú eres esa alegría que le hace falta a mi ser. Eres mi consejero. Sin ti, me siento más solo, más sumergido en la profundidad de un hoyo oscuro. Te prometo que tus consejos y tus enseñanzas siempre las llevo presente y prometo cumplirlas. Gracias por todo lo que me diste, papá, y por todo lo que me enseñaste.
Ángel de mi guardia J. E. E. Campos A ti que nunca te conocí y fuiste mi mejor regalo. Tú me distes la alegría que con nadie me había pasado. Eres mi mejor recuerdo. Me enseñaste a madurar. Daría mi vida por tenerte en mis brazos, pero tu mamá no quiso. Me sentí como el peor padre del mundo porque no te pude chiñear. Te prometo que jamás volverá a pasar, porque jamás te olvidaré. Eres el ángel de mi guarda, mi hijo. Te amo.
Tú, él, y yo H. A. Umaña Lo más linda de mi vida fue cuando me dijiste que íbamos a tener un bebé y me decías que tu querías tener un varón, el cual llevaría mi nombre. Me sentía el hombre más feliz del mundo, pero todo cambió. Nos separaron y nos dejaron en la oscuridad, como un túnel lleno de angustias con una luz de esperanza que me llevará hacia el final. Ahora sigo amándote como si fuera la última vez que te vi. A pesar del tiempo y la distancia mi amor es tan fuerte que siento que están junto a mí. No veo las horas, los días para tenerlos entre mis brazos para siempre. Te prometo que nunca los olvidaré y siempre estaré soñando que estamos juntos. Quisiera poder hablar contigo y explicarte tantas cosas que necesito decirte. Quisiera poder tener una relación hermosa. Ojalá no te hallan cortado las alas desde el lugar donde te encuentras. Espero que pienses en mí y que seas una super mamá para nuestro bebé. Ustedes para mí son como un lucero brillando en la oscuridad, y me han enseñado a ser paciente y amoroso. Me han impulsado a seguir adelante, aunque no están junto mi. Los amo mucho y espero que volvamos a estar juntos. Tú, él y yo
Al miedo J. Reyes Desde que llegaste a mi vida, me has causado tanta inseguridad. Recuerdo haberte conocido cuando participaba en clase, y me decían que mejor me quedara sentado. Me aterraba la idea de que me regañaran cada vez que decía algo. Me has hecho sentir humillado. Quiero que sepas que no te necesito en mi vida, ya que me has causado tantos problemas. Desaparecé de mi vida. Quiero empezar a convivir con los demás sin pensar que se van a burlar de mí. Quiero dejar de sentirme atrapado en mis sentimientos, y contigo en mi vida, siento que no puedo hacerlo. Pero ahora, quiero empezar a ser más libre. Pido que salgas de mi vida, y que venga a mí la seguridad, para comenzar a vivir.
Para la persona que no pensé encontrar K. Navarro A ti que nunca pensé encontrar. Tú fuiste y sos mi apoyo. Te doy las gracias por todo lo que has hecho por mí. Tú me diste emoción y alegría en mi vida. Tú me enseñaste a ser amable, a volver a comprender y a no tener pena. Me has ayudado a valorar y a enfrentar los problemas. Te necesito y cada minuto que pasa, me pregunto, “¿Qué estarás haciendo?” Me siento solo sin ti. Siento un gran vacío, como un desierto. Te prometo que jamás te voy a olvidar. Puedo encontrar otras personas, pero tú siempre vas a estar presente. Que Dios te ilumine y te proteja siempre. Te amo.
Tú eres mi todo W. Espinoza Magaña A ti que siempre has estado apoyándome. Tú que me distes siempre tu amor como madre. Eres como el sol que brilla todas las mañanas. Me has enseñado todos los valores de la vida, madrecita hermosa. Te necesito porque eres mi gran tesoro, el único en mi vida. Sin ti, no sabría que hacer en esta vida, porque tú eres mi todo. Te prometo que al salir de este problema en que me metí, me voy a portar bien y ya no me voy a meter en cosas malas.
Mi amada S. O. Zetino A ti que me llevas a cualquier lugar que quiero conocer sin ningún reproche. Tú me distes la ayuda para llegar a nuevos y divertidos senderos sin ningún tropiezo. Eres como una gran amiga que jamás me niega cuando la necesito. Me has enseñado que siempre me puedo sentir libre disfrutando el viento que me acaricia. Te necesito porque si tú no estás, mi vida no tendría un lugar nuevo para sonreír y avanzar sin temor. Te prometo que te cuidaré y alimentaré mi vida con alegrías siempre que este conmigo. Recuerdo que cuando te conocí me enamoré y dije, “No me importa el precio, pero serás mía.” Mi corazón es el motor que me impulsa a quererte tanto. Mi amada motocicleta.
Oda a mi BFF I. Cortez Reyes Recuerdo que te conocí el primer día de clases de séptimo grado en una tarde cálida como la luz de la luna. Me sabías comprender como ninguna otra persona podría hacerlo. Aun recuerdo la primera vez que te hablé. No sabía que decirte y moría de nervios. Tu me diste tu amistad como ninguna otra persona que haya conocido. Eres como la hermana mayor que nunca tuve. Me has enseñado la alegría de vivir cada día como si fuera el último día de mi vida. Te necesito porque eres la persona en que yo más confío y mi más grande consejera. Sin ti, mis días y mi vida ya no son igual que antes. Te prometo que volveré a estar contigo muy pronto, para seguir creando bellos recuerdos y jamás te olvidaré. A ti, mi Anita.
El cielo y las estrellas K. Artiaga Mejía A ti que siempre has estado conmigo desde que nací. Gracias por cuidarme. Tú me diste el apoyo. Tú eres para mí como la arena que está siempre junto al mar. Me has sacado adelante. Eres el sol que brilla todas las mañanas. Me has enseñado que la noche no siempre es oscura, y que por grande que sea una tormenta, algún día terminará. Gracias a ti, soy responsable y amable con las personas. Te necesito como el cielo necesita las estrellas. Te necesito porque siempre me apoyas y eres una madre súper maravillosa. Gracias a ti, tengo fuerzas para salir adelante. Me impulsas a creer y crecer. Te prometo que siempre estaré contigo y te amaré, porque tú nunca me has dejado solo. A ti, que eres la mujer que más amo en el mundo. Gracias mamá.