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PILARES FUNDAMENTALES
Seguimiento continuo del tumor: Los tumores suelen moverse durante la ejecución del tratamiento de radioterapia, aún estando el paciente inmovilizado. Movimientos involuntarios como el de la respiración o, en el caso de tumores en la próstata, el movimiento de la misma, pueden ocasionar variaciones en la posición del tumor durante la administración de la radiación, generando que el tejido sano circundante sea irradiado.
El CyberKnife® posee un software que permite la detección automática del movimiento y facilita el seguimiento continuo del tumor mediante la corrección de la posición del brazo robótico, readecuando la dirección del haz de radiación sin tener que interrumpir el tratamiento o reposicionar al paciente. No es necesaria la colocación de fiduciales ni marco estereotáxico.
Tratamiento no coplanar: El CyberKnife®, gracias a su manipulador robótico, permite realizar tratamientos no coplanares sin la necesidad de cambios en la posición de la camilla.
Los haces de radiación son entregados desde diferentes planos, pudiendo atacar al tumor desde distintos ángulos.
Imágenes de planificación del tratamiento con CyberKnife que muestran los ángulos potenciales del haz (azul), distribuidos en el espacio de trabajo 3D
Flexibilidad para entregar haces no isocéntricos de radiación: CyberKnife® es el único sistema capaz de ofrecer tratamientos isocéntricos y no isocéntricos sin la necesidad de mover al paciente, proporcionando tratamientos más adecuados a lesiones con formas irregulares, preservando el tejido sano circundante.
El CyberKnife® ofrece más opciones de tratamiento, proporcionando una nueva esperanza a los pacientes con tumores inoperables o a aquellos que rechazan la cirugía.
Con CyberKnife se pueden planficar radiocirugías en cualquier parte del cuerpo.
Efectúa un seguimiento continuo de la posición del tumor, detecta la localización de los mismos y corrige el movimiento del tumor y del paciente a lo largo del tratamiento.
Administra una dosis alta de radiación con precisión submilimétrica, minimizando el daño al tejido sano circundante.
Este tratamiento es indoloro y no requiere la utilización de anestesia, eliminando eficazmente el riesgo de complicaciones tales como infecciones, hemorragia y otros efectos colaterales de la cirugía tradicional.
Menor tiempo de recuperación en comparación con la cirugía abierta tradicional, ya que se realiza de forma ambulatoria.
En el caso de los tratamientos intracraneales, los pacientes reciben la radiación de forma cómoda, gracias a la ausencia de un marco estereotáxico, y por lo tanto sin ser invasivos.
El paciente puede recibir su tratamiento en un número de sesiones que oscila entre 1 y 5.