En un mundo de continuos encuentros con extraños y sumido por el silencio (humano frente al ruido mecánico e industrial), la única forma de anticiparse a hechos es juzgando primero con la mirada. Todo el mundo mantiene el anonimato pues esconden un secreto que los desacreditaria y dejaría fuera de combate, sin poder participar en la vida en sociedad mediante la comunicación.
Hay sujetos que rápidamente perderán en este juego de máscaras venecianas, en el que el as en la manga es el verdadero perfil que se esconde tras el anonimato. Estas pueden ser las que no pueden (o quieren) ocultar transtornos mentales, asi como los fumadores o las que poseen sobrepeso, ya que (aunque en muchos casos no sean así), a estos últimos en el imaginario colectivo echamos mano de la idea de que poseen un nivel de autocontrol muy bajo.
Todos tenemos el derecho reconocido de poder se irreconocibles, pero esto en la era del Gran Hermano no es mรกs que una ilusiรณn. Hielo que se te derrite entre las manos (no puedes sostener el agua eternamente)