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us objetivos eran bien diferentes, si se tienen en cuenta sus capacidades y las de los rivales. De todas formas, los marplatenses que representaron al país en los Juegos Olímpicos cumplieron sus expectativas con creces. Su participación en suelo británico generó una especie de fiebre olímpica entre sus coterráneos. Desde estas latitudes, los marplatenses madrugaron para apoyar al remero Cristian Rosso, los brazos en alto de Marita Peralta tras cruzar la meta se multiplicaron por miles en "La Feliz" y los partidos de la Generación Dorada tuvieron como condimento adicional la inclusión de Marcos Mata por algunos minutos. Qué más podríamos pedirles a estos deportistas que presenciaron sus primeros Juegos Olímpicos. Sumaron experiencia, vivieron en carne propia la máxima cita deportiva mundial. Ellos disfrutaron a pleno cada momento, cada segundo en las isla británica. Llegar hasta ahí no les fue fácil. Por eso es meritorio la garra y el cumplimiento con su nación. Defendieron la bandera Argentina sin duda alguna. Cristian Rosso tuvo en sus manos, junto a Ariel Suarez, la posibilidad de obtener la primera medalla para argentina aquella mañana del jueves 2 de Agosto. Un jueves no tan cobarde -en alusión al tema de Iván Noble- para el marplatense que en cada remada estaban sus familiares, amigos y espectadores ayudándolos a concretar los metros restantes para alzarse con la gloria. Un podio que no pudo ser pero ese cuarto puesto se deleitó como una medalla. Estar entre los cuatro mejores del mundo no es nada sencillo, sabiendo el poderío de sus rivales. Para los Juegos Olímpicos de Río 2016, los remeros argentinos, con esta experiencia increíble en su haber, intentarán superarse. El caso de María de los Ángeles Peralta es particular. Ella, a sus 34 años, se clasificó por primera vez a un Juego Olímpico. Madre de dos niñas y una vida dedicada al deporte, “Marita” se propuso bajar su marca mínima y disfrutar. El objetivo no se cumplió pero pudo culminar el maratón en la posición 82º. Tal vez aparezcan los exitistas y reprochen la labor de la atleta marplatense. Sin embargo, ella manifestó la dificultad de la carrera y el nivel de los especialistas en este tipo de eventos -kenianos y etíopes-. Por el lado de Marcos Mata, el joven jugador de Peñarol de Mar del Plata se agrupó a la generación dorada. Sumó minutos en partidos importantes y mamó mucha experiencia de juego y actitud de los referentes del equipo: Ginóbili, Scola, Nocioni. Él junto a Campazzo serán parte de la nueva camada de jugadores del seleccionado argentino de básquet. Marcos demostró estar a la altura. Si su nivel sigue en aumento podría ser un pilar fundamental para el futuro. El fin de los Juegos Olímpicos deja un vacío en el espacio/tiempo para los amantes del deporte. Pero a no dormirse que dentro de muy poco arrancan los Juegos Paralímpicos también en Londres. Hacía allá viajarán David Coronel, Mauricio Ibarbure y Nahuel Gutiérrez. Ellos intentarán dejar bien parado al país en lo deportivo con su espíritu de lucha. Su ideología es clara. Nunca bajar los brazos y finalizar cada torneo con la frente bien alta.
Domingo 19 de agosto 10° edición de los 10 Km de ADUM (Agremiación Docente Universitaria Marplatense). La carrera iniciará a las 10, en la Plaza España. Competirán caballeros, damas y también se desarrollará un prueba de integración de 3 km. Sábado 18 de agosto En el salón ADUM (Roca 3865), se despedirá a los marplatenses que nos representarán en los próximos Juegos Paralímpicos de Londres 2012. Los dos deportistas que viajarán son Mauricio Ibarbure, David Coronel y Nahuel Gutierrez. Además de los entrenadores Pablo Iocca, Matías Bernatene, Cristian Rosado, los clasificadores Andree Sasain y Marcelo Sanchez, el árbitro Adrián Altuna, Lautaro Cheppi como staff del IPC y José Luis Campo como miembro del GB del IPC. Sábado 18 de agosto – lunes 20 de agosto Primer Torneo de Fútbol Femenino de Mar del Plata, organizado por el Club Al Ver Verás con el apoyo del EMDeR. El cotejo se llevará a cabo en las canchas ubicadas detrás del Estadio "José María Minella". Sábado 25 de agosto – domingo 27 de agosto Se realizará el Curso de Iniciación al Nado Sincronizado que dictará la licenciada Beatriz Serratto. Así lo informó el Instituto “Arístides Hernández” del EMDeR. Este curso se llevará a cabo en los siguientes horarios: el sábado de 9 a 12 y de 14 a 18, y el domingo de 9 a 12 horas.
Sábado 1 de septiembre Se iniciará el curso de formación “Herramientas de Recreación” a través del Instituto “Arístides Hernández” del EMDeR, y bajo la tutela profesional de la Dirección de Deporte Social. El curso brota ante la necesidad de una formación profesional competente para dar respuesta a las exigencias de los diferentes ámbitos donde el juego se hace presente. El mismo constará de seis encuentros los días jueves de 19 a 21 y los sábados de 9 a 12 horas, teniendo como destinatarios a estudiantes y profesores de Educación Física, trabajadores sociales y docentes en general.
A diferencia de otras chicas, Las Duquesas -el equipo de rugby femenino del club Biguá, único conjunto marplatense conformado por mujeres-, eligen un punto estratégico de “La Feliz” para despuntar una de sus pasiones. La Bahía Varese es la locación elegida por este grupo de amigas, cita obligada para cualquier turista que visite la ciudad balnearia. Con las olas y el viento como banda sonora y ante la atenta mirada de la arquitectura típica que posa sobre la costa marplatense, ellas se sacan los tacos por un rato y se calzan los botines por amor al deporte.
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Quien tiene un porqué, seguramente encontrará el cómo", expresó alguna vez el reconocido filósofo alemán Friedrich Nietzsche. Y esta historia tiene un porqué y su protagonista todos los días intenta buscar el cómo. Matías de Andrade es un joven nadador de 19 años nacido en Avellaneda. Vivió siete años en Córdoba y hace cuatro años que está radicado en Miramar. Él, como muchos chicos, es un ejemplo a seguir. No amaina su marcha y todo lo que se propone lo realiza. Matías posee una malformación congénita de nacimiento en sus miembros inferiores. Le faltan las dos piernas. La izquierda desde la rodilla y la derecha desde la cadera. Compite en categoría 7 a nivel paralímpico -las categorías van del 1 al 10, dependiendo de la discapacidad del deportista. En 1 compiten los que mayores dificultades de movimientos tienen y en 10 los que menos-. Sin embargo, no tiene escollos a la hora de realizar el deporte que tanto le apasiona: la natación. “Nunca me sentí limitado. Siempre me lo dijeron y me compararon con algún convencional: `mirá, el esfuerzo que hace él es mayor´. Realmente yo no lo considero así. Considero el esfuerzo que yo hago, el mismo que cualquier persona convencional. Tal vez es más difícil llegar en el deporte convencional por la cantidad de personas que hay. Llegar al número uno es muy complicado. Pero mi esfuerzo es igual que el de otro”, expresó Matías con una voz particular. Comenzó nadando de chico y hace nueve años que entrena para competir a gran escala. Uno de los pilares fundamentales que ayudaron a Matías para optar por la natación fue su padre. “Me enganché por mi papá y los primeros años son los más difíciles para sostenerse en el deporte. Entonces, me bancó mi viejo hasta llegar a una posición de ranking donde ya me empezaron a apoyar con becas”, declaró y luego remató: “Yo no quería saber nada con las competencias. Como todo chico, a los 11 años recién empezaba esto y tenía miedo a realizarlas. Por eso, el miedo hacía que no viera ese futuro. Realmente lo veía muy lejos, como algo imposible. Fueron pasando los años, seguí nadando y le perdí ese miedo a la competencia. En el 2009 salí por primera vez del país, fui a Colombia para un Panamericano Juvenil. Ese mismo año también fui al mundial de pileta corta. Y ahí ya se me abrieron las puertas para la natación competitiva al máximo nivel. Y fue
ahí cuando me cayó la ficha y decidí que me iba a dedicar 100% a esto”. De Andrade comenzó nadando bajo las órdenes de la técnica nacional Edith Arraspide, del Club Atlético Independiente -uno de los clubes federados a nivel paralímpico en Argentina-. En el 2010 fue al Mundial de Natación en Holanda, donde sacó una buena marca pero necesitaba estar a un nivel más alto. Entonces tuvo que buscar un entrenador a un buen nivel competitivo acá en Mar del Plata y así fue como conoció a Paula Fernández, su entrenadora actual. Matías maneja desde Miramar 96 kilómetros aproximadamente (43 de ida y 43 de vuelta) en su auto adaptado casi todos los días para entrenarse en el natatorio Alberto Zorrilla de Mar del Plata. La especialidad de Matías son los 100 metros espalda. Sin embargo, él dijo que “estoy apuntando a buscar para los Juegos Olímpicos de Río 2016, la posibilidad de competir en otras carreras. Porque sé que este es mi primer juego y voy agarrar experiencia, la emoción de competir”. Además contó que nunca se imaginó competir en la máxima competencia deportiva mundial: “Cuando era chico siempre con mi papá veía los Juegos Olímpicos, lo veía como algo tan lejos y tan imposible de llegar. Incluso hace pocos años lo veía como algo muy imposible. Estar a ese nivel de competencia porque es lo máximo que hay en el deporte. Después de Holanda me propuse dar todo lo posible para clasificar a los juegos. En los Parapanamericanos en Guadalajara me fue muy bien -medalla de plata-. Hice la marca necesaria y este año me la confirmaron”. A veces se tienen que dejar de lado algunas cosas para poder enfocarse de lleno en otras. Matías, por su parte, estudiaba Licenciatura en Biología en la Universidad Nacional de Mar del Plata. Según él “no pude seguir con la carrera porque estoy haciendo doble turno, además del complemento del gimnasio. Las ´jodas´, por así decirlo, no existen demasiado. Sí las juntadas con amigos pero no bebo alcohol y me cuido en las comidas, algo realmente sacrificado. Pero si a uno le gusta ese sacrificio no lo siente, porque es lo que uno quiere. Ahí fue donde me di cuenta que el deporte es lo mío”. Igual nada está dicho y el joven nadador piensa seguir estu-
estudiando: “La idea es que el año que viene hacer más tranquilo la carrera con menos materias pero nunca descuidando el deporte. Yo me estoy enfocando para Brasil 2016 y ahí quiero dar lo máximo de lo máximo mío para llegar a pelear por una medalla”. A Matías después de volver de Colombia le dieron su primera beca. Actualmente posee dos becas, una por estar en el ranking entre los diez mejores nadadores del mundo y la otra beca es rumbo a Londres. Una se la otorga la Secretaría de Deporte de la Nación y la otra el Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD). “El año pasado mejoró muchísimo la ayuda al deporte, tanto para el paralímpico como para el olímpico,” expresó el nadador. También opinó sobre el nivel actual de los nadadores argentinos. “Tenemos un nadador muy bueno que es Guillermo Marro -será el abanderado de la delegación paralímpica en Londres- que es triple medallista olímpico y va a tratar de conseguir la cuarta medalla en Londres. Los cinco nadadores masculinos que viajamos, vamos con la mentalidad de llegar a una final. Tal vez no adquirir una medalla porque el nivel es muy bueno, salvo Guillermo Marro que tiene la posibilidad. Y de las mujeres van tres que también van a intentar colocarse en la final”, confesó De Andrade. Luego señaló su orgullo por compartir equipo con Marro: “Guillermo es compañero mío y cada vez que vamos a Buenos Aires, porque siempre nos citan, entrenamos con él. Es una persona excelente. Yo lo veo como mi meta a superar en este momento. Superarlo sería un gran logro. Es un orgullo y sé el esfuerzo que hace y que hizo todos estos años. Es un excelente deportista y se merece ese puesto 100%. Lo considero la mejor per-
sona para estar de abanderado y representar al país”. Pese a haber nacido en Avellaneda, Matías confesó que “realmente en todos los lugares que estuve nunca me sentí tan cómodo como estoy en Miramar y en Mar del Plata. En realidad no soy de un lugar ni del otro, estoy en ambos lugares al mismo tiempo. En Mar del Plata tengo a mi entrenadora que la súper quiero y al equipo de natación que siempre entrenamos que son unos grandes amigos, grandes compañeros. Y en Miramar tengo a la gente que me abrió los brazos cuando recién vine porque no conocía nada. En ambos
lugares tuve mucho apoyo, por lo tanto, no puedo decir este lugar sí y éste no”. El nadador, que lo adoptamos como nuestro, cree que a la natación le debe todo. “El solo hecho de hacer deporte de pequeño y tener algo con qué invertir el tiempo y en qué enfocarse sabiendo que tenés un futuro, te ayuda a abrir la cabeza de otra manera. No sé si a madurar más rápido pero sí a ver la importancia a ciertas cosas”, expresó y luego explicó que “cuando tengo un tiempo libre disfruto con mis amigos pero siempre la prioridad la tiene el entrenamiento. Aprendí mucho sobre otras discapacidades y realmente a ver que casi nada es imposible en este mundo. Con lo que uno ve, yo considero que lo mío es bastante leve porque he visto muchas cosas peores.” Para Matías de Andrade su familia es todo y al mencionarlos le brillaron los ojos: “Mi familia está muy orgullosa. Mi mami, saben cómo son las madres, siempre se emociona y mi papá siempre estuvo de chico conmigo en el deporte. Lo siente como un logro personal para él porque hizo mucho sacrifico para llevarme a nadar. Ese sacrificio valió la pena porque sin mi familia no hubiese llegado a donde
llegué.” Culminando la charla, este “hidalgo de la natación” nos dejó la sensación que en la vida todo se puede y que nunca hay que bajar los brazos. Las metas están para cumplirlas y Matías es un claro ejemplo de valoración, esfuerzo y amor propio. Por eso, él tiene las palabras justas para aconsejar a otros chicos con capacidades diferentes que todavía no se involucran en el deporte: “Primero que siempre que pueda hacer algo sin necesitar de una silla de ruedas o está limitado a algo y ve que puede hacer una cosa distinta de lo que le recomiendan, que lo haga. A mí de chico me dijeron que nunca me ponga en una silla de ruedas y realmente le agradezco a eso porque hoy me puedo manejar de una manera totalmente independiente y libre como cualquier persona normal. Segundo que haga lo que quiera porque puede realizar cualquier deporte siempre que se lo proponga. Uno si busca la vuelta, la manera de hacer algo lo va a logar más allá de las limitaciones. Hay básquet en silla de ruedas, vóley y fútbol adaptado, tenés prácticamente de todo. Uno realmente tiene que animarse a hacer esto. Por ahí lo más complicado es darse a conocer y competir a un alto nivel. Pero las limitaciones no existen, las limitaciones se las pone uno mismo”.
E-
l pasado domingo 12 de agosto se realizó la ceremonia de despedida de los Juegos Olímpicos Londres 2012. Pero a diferencia de lo que muchos creen, no finalizó la actividad deportiva. El grueso de los atletas convencionales que participaron en suelo británico ha regresado a su país de origen. Sin embargo, aún restan quince días a puro deporte. Desde el 29 del corriente hasta el 9 de septiembre se celebrará el otro Londres. En realidad, el mismo Londres pero con un cargado calendario de disciplinas adaptadas a los deportistas con capacidades diferentes: los Juegos Paralímpicos.
Mauricio Ibarbure, miramarense de nacimiento y radicado en Mar del Plata desde su infancia, representará al país por cuarta vez consecutiva en boccia -bocha adaptado- en un Juego Paralímpico. A los 31 años, “Coqui”
-practica la disciplina desde 1992 con una marcada experiencia en certámenes internacionales- participará en la modalidad individual (categoría BC1) y por equipos junto a Gabriela Villano, Pablo Cortez y Sebastián González (categorías BC1 y BC2). La historia de Mauricio es conmovedora. Padece desde el parto una parálisis cerebral que le generó una afectación de cuadriplejía. No puede mover sus extremidades, salvo su pie izquierdo, y tiene muchas dificultades para hablar. Pese a la adversidad, “Coqui” aprendió a utilizar su pie izquierdo y es su nexo para comunicarse con el mundo. Con él juega boccia, saluda a los invitados, pinta cuadros, utiliza su celular y hasta chatea en su computadora. Se trata de una persona perseverante y exigente que siempre supo lo que quiso. “Mauricio es una persona que cuando se propone algo busca la forma, le encuentra la vuelta y eso es lo que lo mantiene: la actitud que tiene de enfrentar las cosas. En su vida personal armando una familia, proponiéndose, por ejemplo, entrar a Pintores sin Manos, seguir prendido al deporte de élite y dedicarle muchas horas”, comentó Pablo Iocca, Jefe Técnico de Boccia de la delegación paralímpica argentina, entrenador y amigo de “Coqui”. De hecho, Mauricio utiliza las nuevas tecnologías y se lo suele ver conectado en Facebook durante horas. A través de la red social mencionada, y luego de una visita al entrenamiento, dialogó en línea con Deportivamente Hablando. -Mauricio, ¿cuál es tu objetivo en Londres 2012? -Mi objetivo para Londres es llegar a estar entre los primeros 6 u 8 jugadores del mundo. Pero mi sueño más grande es traerme una de las tres medallas, no importa cuál. -¿Cómo encarás los últimos entrenamientos antes de partir a Londres?
-Te voy a decir la verdad. Los últimos entrenamientos son jodidos porque tenés que entrenar mucho tiempo y se vuelve casi una rutina, lo que te lleva a un cansancio mentalmente. Terminás medio quemado de la cabeza (risas). Pero, a la vez, en estos últimos entrenamientos tengo mucha adrenalina. Es como que cada vez sentís más cerca de Londres y eso te llena de felicidad, realmente no podés creer estar ahí. ¡Es una cosa increíble! -¿Qué significa para vos representar al país por cuarta vez en un Juego Paralímpico? -Para mí representar al país siempre es un orgullo. En cualquier viaje internacional, sea paralímpico o no, llevo la celeste y blanca puesta en el corazón. Y saber que este es mi cuarto paralímpico me hace sentir, más que orgulloso, feliz porque no es fácil llegar a un paralímpico. Imaginate lo que es llegar al cuarto (risas). -¿Qué es lo que más te gusta de jugar boccia? -Lo que más me gusta es lo estratégico y lo táctico que es el juego de boccia. Cada día aprendés más estrategias y más técnicas de juego. O sea, para mí jugar a las boccias es un juego divertido pero a la vez difícil. Y eso me encanta porque soy una persona que le gustan mucho las cosas difíciles y, aunque siempre está la presión, el cansancio, la rutina, etc., lo disfruto igual. -¿Qué apreciás de tu entrenador Pablo Iocca? -Pablo Iocca es una persona importante en mi vida. Él es como un padre para mí, ya que estuvo siempre, no sólo como mi entrenador, sino también como amigo. Compartimos muchas cosas con él. Como amigo es una persona buenísima y como entrenador es muy dedicado, muy exigente, y muy atento a lo que necesita el jugador. Aunque a
veces tenemos diferencias porque los dos llevamos mucho tiempo en el deporte, aunque yo llevo 4 años más (risas), pero la verdad es que llegué hasta acá en parte gracias a él. Justamente Pablo Iocca es quien nos abrió las puertas de PAMI, locación donde entrenan y comparten el espacio con un grupo de jubilados que practican bailes tradicionales, y nos introdujo en la historia de vida de “Coqui”. Pablo trabaja desde hace años en el Círculo Deportivo de Lisiados (CIDELI). Primero comenzó como profesor de básquet en silla de ruedas y luego, ante la propuesta de José Luis Campo (Coordinador Deportivo de CIDELI), arrancó a trabajar en boccia, un deporte que no conocía en profundidad pero se fue especializando con el paso de los años. “En boccia no hay muchas capacitaciones. Sí transferimos cosas de otros deportes y vemos videos. En los viajes internacionales hablamos con los técnicos permanentemente. Buscamos siempre sacar información de los países líderes. Éste es un deporte que no está muy difundido. Pero fundamentalmente a través de las charlas con otros técnicos y la experiencia que te dan los torneos internacionales, filmar partidos, sentarse y jugar este deporte, se buscan variantes y se piensan permanentemente situaciones para entrenar. Es una actividad muy gratificante. Me enganché con este deporte y, de hecho, seguimos con la actividad”, apuntó Iocca. Al mismo
tiempo, el técnico recordó que “la difusión es fundamental. Por eso viene muy bien el tema de los Paralímpicos para que se genere algo de información del deporte. Ahora está incluido en los Juegos Bonaerenses y a través de los bonaerenses, que es deporte social, hay muchos profes que están implementando este deporte a otro nivel, pero con sus alumnos en toda la provincia. De hecho, en los Juegos Bonaerenses hay un número cercano a 90 deportistas que van a participar. Sería muy importante que también se incluya en los Juegos Evita y, de esa forma, se lograría una difusión importante”. En relación a la preparación que realiza Mauricio para la cita paralímpica, Pablo expresó: “En este momento estamos trabajando bastante fuerte. Hay días que hacemos doble turno y trabajamos para las dos modalidades de juego: individual y en equipo. Mauricio está clasificado junto a Gabriela Villano (Capital Federal, categoría BC1) como Mauricio, Pablo Cortez (San Juan, categoría BC2) y Sebastián González (San Juan, categoría BC2). Ellos integran el equipo y, a su vez, Mauricio y Pablo Cortez compiten en la modalidad individual, cada uno en su categoría”. E indicó que “la expectativa es tener un buen desempeño, más allá del resultado. Esperemos que se nos den los resultados. Básicamente es pasar a la etapa de eliminatorias en equipo, Y en juego individual, el sistema de competencia es como en tenis ahora, por eliminación directa. Todavía no tenemos los rivales, entonces, es muy difícil plantearnos un objetivo claro con respecto al juego individual. Pero la expectativa es avanzar un par de rondas en las llaves, saber los rivales que tenemos y en función de eso establecer las
pierde las esperanzas porque “hace poquito fuimos a un test match en Inglaterra y tuvimos una muy buena actuación. Nos sirvió para probar algunas variantes tácticas e hicimos contra Gran Bretaña un partido muy ajustado. Lo perdimos pero realmente fue un partido muy cerrado, muy buen nivel y ya tenemos algunas estrategias para enfrentarlos en Londres”. En boccia por equipos, Mauricio cumple una función específica en la cancha. Se desempeña como lateral porque tiene un buen desplazamiento de juego que le permite, desde su perspectiva en diagonal, bochar o romper el juego del rival. Y por su temperamento y autoexigencia, que a veces le genera un fastidio pasajero, tiene una función muy importante en el equipo. “Mauricio es un jugador que funcionalmente es muy bueno para la categoría. Es un jugador que puede desplazar muy bien el juego, tiene mucha fuerza y es muy perseverante. Tiene los objetivos bien claros. En el test match en Inglaterra jugamos un partido con Irlanda. Fue un partido muy cerrado y muy complicado y él fue el que se mantuvo más fuerte hasta último momento. Estuvo concentrado, todo el tiempo buscando y con una actitud muy buena”, señaló el entrenador nacional. Consultado sobre los beneficios de la práctica deportiva en los jóvenes lisiados, Pablo Iocca expuso que “estos chicos que tienen una afectación de cuadriplejía no tienen muchas opciones deportivas. Y este es un deporte en el cual ellos pueden manifestar o evidenciar un rendimiento, una performance similar a un deportista convencional. Es un deporte adaptado específicamente para este tipo de discapacidad. Está
estrategias. Así que estamos muy ansiosos porque estamos próximos a la competencia y generalmente es una etapa de ansiedad. Estamos con todas las ganas”. En la modalidad por equipos, la clasificación no será una tarea sencilla. Divididos en cuatro zonas de tres equipos, a la Argentina le tocó un grupo sumamente fuerte, integrado por Gran Bretaña y Portugal -dos ex número uno del ranking y actualmente mejor posicionados que la Argentina en el escalafón mundial-. Sin embargo, Pablo no
adaptado el material, la cancha, en función de las posibilidades físicas de los deportistas. Y si se ve un partido a nivel internacional, uno lo que está viendo es un buen espectáculo. Anteriormente, ellos participaban en otros deportes como atletismo. Hacían algunos lanzamientos o carreras. En natación carreras cortas. Básicamente este deporte tomó un gran auge justamente en todos los países porque les da a los chicos la posibilidad de tener una buena performance”.
“Mauricio está estimulado en todo lo que es el deporte desde muy chico. Y la natación es fundamental para ellos. No sé exactamente desde qué edad, pero yo he visto videos y filmaciones de cuando era muy chico. Desde los 4 años me está diciendo acá Mauricio (N de la R.: “Coqui”, atento al diálogo, le indicó a su técnico desde qué edad practica natación). Ha trabajado con José Luis Campo en natación durante mucho tiempo, más kinesiología. Para ellos es fundamental la rehabilitación a través de la parte acuática y kinesiológica, que las tiene en este momento un poco dejadas de lado porque está dedicando mucho tiempo a boccia”, explicó el profe y añadió: “El deporte es una herramienta fundamental no solamente para personas con discapacidad, sino para cualquiera, para el desarrollo físico y está relacionado con el desarrollo integral de la persona”. Cuando se hace referencia al deporte, no se puede obviar su importancia como herramienta de sociabilización. En ese sentido, Pablo resaltó que “es fundamental a través del deporte el tema de contactarse, de salir, de viajar, de relacionarse con la gente que nos acompaña, con gente de otras instituciones. Ir a natación y encontrarse en la pileta con otra gente. Venimos acá a boccia, donde compartimos la cancha con PAMI, y gente de la tercera edad que hace gimnasia acá se acerca para saludar”. En esta área, deportiva y social, es muy importante el trabajo realizado por CIDELI. “Con CIDELI trabajamos acá de lunes a vier-
nes, con todas las categorías. Son cuatro categorías, veinte deportistas. Están separados en dos grupos. Están los deportistas más severos que trabajan lunes, miércoles y viernes. Y el resto de los chicos, entre los cuales está incluido Mauricio, trabajan martes jueves y viernes. CIDELI es la institución referente a nivel nacional, que más torneos organiza, que tiene profesores a cargo de las actividades. Estamos un poquito más organizados que otros clubes pero, en este momento, la gran falencia que tenemos es la falta de torneos, que eso también es un factor que estamos tratando de modificar. Pero ahora es bastante complicado porque organizar un torneo nacional es bastante costoso en este deporte. Porque si llevamos, por ejemplo, diez deportistas son diez personas más por el nivel de discapacidad y la asistencia que precisan ellos”, expresó Pablo Iocca, profesor de la entidad. En el desarrollo de las disciplinas adaptadas y la organización de actividades deportivas, la institución recibe escaso apoyo. CIDELI se sustenta principalmente con los ingresos de su centro de día y a través de las obras sociales. En algunas oportunidades, la Municipalidad o alguna empresa privada colaboran con dinero, pero no cuentan con muchos recursos. En lo que respecta al deporte de élite, Pablo reconoce que con la creación del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD) mejoró el apoyo a los deportistas paralímpicos pero aún restan cosas por mejorar. “Los viajes que hemos tenido son
todos pagados por Secretaria de Deporte. Y desde que empezó el ENARD se nota un poquito más el apoyo y es menos burocrático. De todas formas, cada vez es mayor la brecha con los países de élite, los países que dedican 6 o 7 horas diarias a entrenar, que mantienen todo el grupo, el equipo técnico y deportivo durante todo el ciclo. Nosotros tenemos el mayor apoyo económico a través de las becas, por una cuestión de rendimiento. Eso se otorga de acuerdo a la posición del país en el ranking. La gran dificultad que tenemos en este momento es el espacio para concentrarnos y entrenar, que es el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CeNARD), el único del país y está muy sobrepasado de actividades. Hay muchos eventos y es bastante complicado. Siempre estamos planificando concentraciones o entrenamientos que van cambiando de fecha, que se van corriendo. Y otro de los puntos que no podemos lograr, es conseguir la superficie de juego, que es el taraflex”, aclaró. El Taraflex es una superficie sintética, similar a una carpeta de goma. Iocca reconoció que “como boccia es un deporte de precisión es fundamental entrenar con el piso de competencia. Lo que te da el taraflex es un juego más trabado, más cerrado porque se frena más la bocha. Y nosotros en este momento entrenamos en piso de madera”. Más allá de algunas limitaciones y gracias al apoyo económico, Mauricio Ibarbure y todo el equipo de boccia, en general, representarán al país en los venideros Juegos Paralímpicos de Londres 2012. La historia de “Coqui” es de superación y perseverancia. Y el deporte, la pintura y sus amigos forman parte de su presente. “Mauricio va con el psicólogo deportivo. Y para relajarse también hace mucha vida social. Está yendo a Pintores sin Manos y a veces se nos escapa un poquito para San Jerónimo, un club donde tiene un grupo de amigos. Son chicos del colegio que están integrados en la actividad y él tiene conexión también con ellos”, finalizó su entrenador.
E
l pasado mes de julio, en la sede del Ente Municipal de Turismo (EMTur), se presentó oficialmente la realización de los XX Juegos Mundiales de Trasplantados Mar del Plata 2015. La elección de la candidatura de Mar del Plata sobre Berlín (Alemania) y Tokio (Japón) -dos grandes urbes primermundistas- le agrega valor a la confirmación de la localidad balnearia como sede de este acontecimiento deportivo, social y que propone una fuerte campaña de concientización y promoción de la donación de órganos. Se estima que más dos mil deportistas de más de 50 países llegarán a la ciudad para participar de los XX Juegos Mundiales de Trasplantados 2015, los primeros en suelo latinoamericano. En ese sentido, “La Perla del Atlántico” contó con el apoyo de algunos países de la región como Brasil, Uruguay, Perú, Venezuela y México. La entidad internacional organizadora de este magnífico evento es la Federación Mundial de Juegos de Trasplantados (WTGF), por sus siglas en inglés, y su Consejo Directivo está integrado por 13 personas de 11 países diferentes: Francia, Reino Unido, Holanda, Japón, Irlanda, Alemania, Australia, Sudáfrica, China, Suecia y Suiza.
Participaron de la conferencia de prensa Pablo Fernández, presidente del EMTur, Horacio Taccone, presidente del Ente Municipal de Deporte y Recreación (EMDeR), Graciela de Errea, Coordinadora del Centro Único Coordinador de Ablación e Implante Provincia de Buenos Aires (CUCAIBA) y referente de la Asociación Marplatense de Apoyo al Trasplantado (AMAT), Carlos Nirio, deportista trasplantado del corazón desde 1995 y pertenece a la Asociación de Trasplantados desde sus comienzos en 1997, Diego Fernández, titular de la Fundación Mar del Plata Trasplante, el Dr. Gustavo Rodríguez, director de Zona Sanitaria Octava, y Valeria Méndez, vicepresidente del EMTur.
“La decisión sucedió en una asamblea que se llevó a cabo en la ciudad sudafricana de Durban la semana pasada. Fue un trabajo conjunto entre la Nación, la Provincia, la Municipalidad, y organizaciones vinculadas al tema como la Asociación de Deportistas Trasplantados, AMAT, ADETRA y CUCUAIBA para presentar la candidatura de Mar del Plata”, expresó Pablo Fernández, titular del EMTur. El funcionario agregó que “es un evento muy importante por el debate de la donación de órganos. La idea que Mar del Plata sea sede significa una gran caja de resonancia a nivel nacional de este tema tan importante”. Y señaló: “A partir de hoy comienza un nuevo trabajo como es la organización de los Juegos Mundiales de Trasplantados, cuya tarea nos llevará mucho trabajo para poner en marcha los distintos ejes deportivos, médicos e infraestructura, con nos servirá para promocionar no sólo Mar del Plata sino también la donación de órganos, el cuales es el gran objetivo de estos Juegos”. Horacio Taccone, presidente del EMDeR, por su parte, indicó: “Para el Mundial se van a usar todos los escenarios del Parque Municipal de los Deportes, excepto el Estadio Minella. Además, se utilizarán clubes con canchas de golf y Squash e instalaciones de los clubes Náutico y Once Unidos”. “Las instalaciones del EMDER están preparadas para recibir al Mundial aunque seguramente recibirán las mejoras necesarias para ser nuevamente muy buenos anfitriones”, finalizó el dirigente. Argentina tiene desde hace algunos años la ley de Donante Presunto, que significa que todos los residentes son donantes salvo que lo especifique su negativa por escrito. Rodolfo Wetzel, presidente de ADETRA y deportista trasplantado, dijo que "es una emoción muy grande que Argentina sea la sede de los Juegos Mundiales, que representan el momento en el que se juntan las personas trasplantadas de todo el mundo para agradecer y difundir la importancia que tiene la donación de órganos". Estos Juegos incluyen en su programa trece diferentes disciplinas deportivas, entre las que se destacan atletismo, natación, tenis de mesa, bádminton, bowling, ciclismo y vóley.
L
as callecitas de Necochea tienen ese qué sé yo ¿viste? Salís por la avenida 58 dejando atrás la Terminal, hasta que ves la Plaza Dardo Rocha. Lo de siempre, en la calle y en vos. Ahí va caminando el cronista, cerca del mediodía. Pasa por el Nacional y se vislumbran bandas urbanas. Un pibe está rapeando. Le bate algo a alguien. Lo hace por desencanto, por transgredir, por hacerse notar. El agite es para un par, parece. Quizás es para alguna institución que no le da ni le dará oportunidades. El narrador sigue caminando hasta doblar por la 71. Todo marcha sobre ruedas. A la altura del 3042 hay un señor esperándolo. Sweater azul oscuro y mirada de buen tipo. Tiene el semblante del típico hombre que ya se hizo todas las preguntas. Es un campeón del mundo de patín. El primero de todos en una tierra que vio deslizarse a Nora Vega, Andrea González, Raúl Scafatti o Adalberto Lugea, entre otros. Se llama Hugo Ibarguren. Nos invita a pasar. Y a recordar grandes hazañas. “Yo nací en esta casa. A los 4 años, mi familia se mudó a Mar del Plata. Por cuestiones políticas, mi padre decidió irse. Una vez allá, puso una carnicería y yo enseguida comencé a ir al colegio Don Bosco. Luego de chico empecé a trabajar en diversos lugares. Así fue como me financié toda mi carrera”, inició su relato. Hugo estaba predestinado a hacer historia desde niño, y tal vez por ello es que comenzó a tener contacto con gente importante: “A los 8 años salgo campeón argentino de patín infantil en el piso de deportes de la ciudad y Perón -por ser el chico más pequeño en ganar un título- contesta a una carta de mi madre mandándome patines y diciendo: ´Hijo. Si este deporte te ha dado un título, no lo abandones. Seguí que te va a servir para ser un buen alumno, un buen papá y un buen dirigente el día de mañana.´” Y vaya si siguió. El trajinar sobre ruedas no se detuvo, y ese otrora pequeño que recibía cartas de amigos famosos era ya todo un hombre con sed de gloria en el año 1962, cuando empezó a dar que hablar en Italia: “En Venecia nos entrenaron los italianos. Íbamos con 35 años de atraso. Tuvimos que cambiar los patines y las botas. Los chicos del barrio nos prestaron patines mientras esperábamos a que llegaran los nuestros. Nos preparábamos de noche. Ellos nos decían qué teníamos que hacer, cómo había que doblar, cómo poner el cuerpo, etc. Tuve el orgullo de salir cuarto en los 1000 metros por eliminación, después de correr alrededor de 16 series. El director italiano no lo podía creer. Para Miguel Alfieri, que fue nuestro delegado siempre, esa carrera fue más importante que el título mundial. Sentó precedente para lo que vendría luego”. En 1964 logró su primer podio mundial en España, culminando tercero en los 1000 metros. “Siempre lamento que me perdí de llegar segundo porque Román me tocó en una curva, me abrí un poquito y ya no lo alcancé mas. En los 500 metros de velocidad en Pamplona
arribé segundo”, indicó. Y el 4 de Julio de 1965 en Wetteren, Bélgica, Hugo Ibarguren se transformaría en el primer campeón mundial argentino de patín carrera en la prueba de los 10.000 metros con un tiempo de 23'10''. Era el primer americano que vencía a los europeos en este deporte. Por si fuera poco, también obtuvo el subcampeonato mundial de los 1000 metros. Sus compañeros de equipo, Raúl Scafatti y Manuel Narciande obtuvieron también muy buenos resultados. Con notable sencillez recuerda que “en Bélgica ni yo supe que había ganado. No sentía nada, me venía cuidando los pies para que no me hicieran caer. Ese día estaba lloviendo. Se había formado un charco de agua en una de las curvas, pasando la recta final. Todos lo esquivaban por atrás continuadamente. Y yo, que venía octavo en ese momento, veo que dos italianos saltaron el charco y salieron rápidamente. Y a mí me quedó justito para engancharme atrás de ellos así que salté también y me fui.” Fue en aquél instante en el que Hugo Ibarguren estuvo iluminado por el fuego… De los grandes campeones: “Me dije ´si me quedo acá salgo tercero… ¿Y si me arriesgo? De última tendré que hacer una vuelta solo´. Comencé a pasarlos por el costado y cuando me vieron que yo estaba al lado de ellos dirían '¡¿y este de dónde apareció?!' Me manoteaban, los fui pasando y mirando de costado como para seguir. Una vez primero, seguí corriendo. Pero no vi la bandera. Sólo estaba cuidándome para que no me pasaran. Quería llegar primero en esa vuelta por si era la última. Miguel Alfieri cruzó la pista y me quiso parar. Yo me solté cuando me quiso agarrar y, por si acaso, seguí corriendo toda la otra vuelta hasta el fondo y ahí me di cuenta que estaba solo. Gané sin enterarme”. Fue el mismísimo Miguel Alfieri (referencia obligada del periodismo local y dirigente de este deporte), quien logró que a partir del año 2002 la Confederación Argentina de Patín instaurara todos los 4 de julio como el “Día del Patín Carrera Argentino” en homenaje a la gesta de Ibarguren, ese mismo que ahora degusta un sabroso mate alcanzado gentilmente por su mujer. Después de un sorbo sigue maravillando al cronista con sus anécdotas: “Luego de la consagración, nos sobraron unos días y con Narciande nos fuimos a Madrid. Se nos ocurrió tomar un taxi y pasar por la Puerta de Hierro, donde estaba Perón. Yo quería conocerlo y agradecerle todo lo que hizo por mí”. Pero la única verdad es la realidad y ésta a veces supera a la ficción: “Luego de hablar con uno de seguridad, estaba el mismísimo general abriendo las puertas de su casa para nosotros. Nos llevó abrazados hasta el interior y estuvimos con él desde las 9 de la mañana hasta las 9 de la noche. Era un abuelo de campo”. Ibarguren le hizo recordar lo de la carta y le dijo: “Le vengo a dedicar el triunfo y decirle que es por culpa suya”. Perón
se levantó emocionado con lágrimas en los ojos y me abrazó dejando totalmente de lado su investidura”. Hoy día, Ibarguren entrena chicos sin lugar propio. Le prestan un lugar frente al Supermercado Toledo. Tiene el orgullo de que Santiago Roumec, joven al que formó desde los 8 años, esté seleccionado para representar al país en el Mundial de Italia dentro de un mes. Pero a Ibarguren hay cosas que le molestan: “El año pasado no lo llevaron y merecía ir. Hay cosas raras. Llevaron a un solo cadete y muchos mayores. ¿Para qué llevás a tantos mayores? ¿Para pasear? Hay cuestiones que veo muy mal. Un director técnico que elige él los jugadores y no a los mejores ranqueados. Es una vergüenza. Yo le dije al Comité de carreras que es increíble que no se corra aunque sea una carrera de campeonato marplatense. Que vayan y se sienten a la tribuna un par de veces para hacer una preselección es inverosímil. ¿Quiénes son?
No son nadie, van a un mundial y entran en el puesto treinta y cinco… El campeonato marplatense lo debe correr todo el mundo y el director técnico nacional o quien sea, como es el hijo de Adalberto Lugea hoy día; debe tener en cuenta los primeros puestos de cada categoría y trabajar con ellos. Nada de ir y sentarse a la tribuna y llamar al que mejor me cae. Esto pasa en Mar del Plata desde hace diez años. Están manejados a dedo. Por eso me dedico a las escuelas, porque lo demás está podrido. Ver que en Mar del Plata se viene abajo el patín porque hay una comisión de carreras que no obliga a correr el campeonato marplatense. No saben ni de Scafatti, ni de mí, no tienen idea de nada”. El cronista se aleja. Vuelve por el mismo camino. La meta es la Terminal nuevamente, y mientras fuma, escucha las últimas palabras del campeón: “Por eso quiero al amateurismo, porque no le debés nada a nadie. Lo hacés de base, a pulmón. Y a mí no me pueden parar la lengua porque yo quiero al patín. Yo quiero formar buena gente para una ciudad. Estoy volcando a los chicos lo que aprendí en mi vida. Esto funciona como hacíamos nosotros. Colectas, rifas… Para ir a competir a Mar del Plata cada quince días hay que juntar 2000 pesos. Imaginate lo que se trabaja para poder presentar a los chicos. Y yo por más campeón del mundo que sea, no les cobro. Lo hago gratis porque además me sale del alma”. El cronista se aleja como en el comienzo, rodando. No se puede ser indiferente al ver tanto sacrificio y tamaños logros. Pasa por el Nacional y ve al pibe que sigue rapeando. Le bate que hay un hombre que es una institución, un campeón del mundo de patín que enseña y forma. El pibe lo manda a rodar. No se dan importancia. La indiferencia es mutua. Quizás sea porque no conocieron a tiempo al campeón y formador Hugo Ibarguren.
l rugby históricamente se lo ha encasillado en el lote de “deporte masculino”. Sin embargo, el siglo XXI ha roto un poco con ese estereotipo. “Las Duquesas” -en la sección Postales de esta edición de Deportivamente Hablandoson un claro ejemplo en nuestra ciudad. Pero no son las únicas. Laureana Pappaterra es una pionera del referato femenino en el país y se ganó el respeto y la admiración de sus pares, dirigentes, entrenadores y jugadores, en base a humildad, trabajo y dedicación. Luego de cumplir su horario laboral en la secretaría de un reconocido club de la ciudad, Laureana recibió a Deportivamente Hablando y, a modo de tercer tiempo, nos introdujo en el mundo del arbitraje. -¿Qué te motivó a hacer el curso para convertirte en referee de rugby? -Siempre explico que no es que me decidí a ser referee de rugby ni empecé por un curso. Siendo estudiante de Educación Física comencé con las prácticas desde primer año y ahí me ofrecieron hacer unas prácticas en el Club Biguá, en Parque Camet. La intención era, como había pasado en otros clubes de Buenos Aires y también en Tucumán, que se incorporarán mujeres profesoras de Educación Física con las categorías más chiquitas, de 5 a 8 años. Entonces, el primer acercamiento que tuve con el rugby fue ése. Y de estar con el rugby infantil, me entusiasmé e hice cursos de entrenador infantil, entrenador juvenil, hasta se puede decir que presencié reuniones de entrenadores de primera, pero nunca con la intención de cumplir alguna función de ésas porque era obvio que no lo iba a poder cumplir. Era el hecho de capacitarme al máximo para entender más del juego. Seguí incorporándome a funciones en el club y me ofrecieron dedicarme a la preparación física de los M-19. Ahí me metí más
fuerte en el juego y como era de las que preguntaban, los árbitros que eran del club, viendo el entusiasmo mío por querer entender un poquito más del juego, me invitaron a las reuniones de árbitros que se hacían todos los lunes. Me incorporé a las reuniones de árbitros pero nunca con la idea de ser árbitro. Estuve un año como oyente. En ese entonces, no había cursos que se estuvieran dando. Entonces, en vez del curso fue largarse a la cancha. Y empecé a acercarme al referato desde ahí. Después, cuando surgió la oportunidad de hacer un curso vino un dirigente de la UAR y durante el curso a él le llamó la atención ver a una mujer, pero creía que no me animaba a dirigir. Al día siguiente, sabiendo que tenía partido, me vio dirigir y me dijo: “Bueno, te felicito porque sos la primera árbitro oficial de la Unión Argentina de Rugby, porque he visto chicas en los cursos, pero ninguna que ya agarrara el silbato y se plantara en la cancha”. -¿Te esperabas esa reacción de la UAR? -No. Pero aparte porque todo fue una sorpresa. Yo cada cosita que fui haciendo era más porque los demás me impulsaban a hacerlo, que por un entusiasmo mío. Después sí. Teniendo esa motivación de saber que era la única mujer y que incluso esta persona que es el “Tano” Osvaldo Ciarrocchi, un alto dirigente de referees, hoy en día en la URBA pero en aquél momento en la UAR, fue el que me planteó un poco que podía surgir algo que ni ellos sabían bien de qué se trataba, porque no había antes una mujer, pero le había gustado la idea. Él me volcó a participar en el Torneo Nacional de M-18 y M-20, que en ese entonces eran torneos muy lindos que se concentraban en una sola ciudad con los seleccionados de cada Unión, y se convocaba a los referees que estaban en desarrollo y algunos de muy alto nivel, y que
justamente eran los nuevos talentos que iban surgiendo en la Argentina. Entonces, para mí encontrarme que me juntaban con esos grosos del referato era una oportunidad única y no la desaproveché en su momento.
-¿En ese recorrido sufriste un poco el estereotipo que tiene el rugby como “deporte masculino”? -Muy poquito porque yo siempre digo que no sufro la discriminación. A veces, por ahí alguno de afuera cree que sí. Yo no la sufro directamente. Al contrario, yo estoy siempre sorprendida y recontra agradecida de las oportunidades que se me dieron porque sé que hasta en otros lugares hay chicas que han intentado y no les dieron la oportunidad. Quizás valoraron la intención mía. Saben que lo hice siempre con una seriedad enorme, saben que fui también muy humilde con los pasos que fui dando. Trataba de manejarlo con un perfil bajo porque sabía que estaba cubriendo un lugar que quería ser
cubierto por muchos más árbitros del país. Entonces, en ese caso tenía que ser muy respetuosa con el resto. -Luego que te convertiste en la primera referee oficial de la UAR, ¿se generó un efecto dominó o sigue faltando la inclusión de chicas en el referato? -Hay de todo un poquito. Yo hace 10 años que dirijo. Yo tuve un acompañamiento de todo el grupo de referees de Mar del Plata siempre excepcional, tanto desde el día que me largué por primera vez a una cancha, que tenía dos árbitros de primera con la bandera cuando jamás en un partido de M-15 hay más de dos oficiales de primera división ayudando al referee. Pero te puedo decir que fueron muchos años de ver algunas con intenciones pero el error fue haber buscado las ganas de las que querían ser referees, en quienes todavía eran jugadoras. Los referees en general son personas que dejaron de jugar por una lesión, porque ya no pudieron por trabajo, por estudio, por familia y se vuelcan al referato como una manera para seguir dentro de una cancha. En el caso de las mujeres, como todavía se está desarrollando el rugby femenino, yo creo que va a ir sucediendo en los próximos años. Sé que actualmente se está haciendo una campaña muy buena por parte de la UAR, donde hace poco concentraron a las referees en progreso. Pero yo al ver los nombres, me encuentro que son todas jugadoras. Así que creo que todavía eso no se va a notar. -En estos 10 años que llevás dentro de la actividad, ¿qué experiencia has adoptado?
-De todos los colores. Tengo unas experiencias lindísimas y cada una tiene su grado de dificultad, porque hasta el juego fácil, el de los chiquitos, tiene su dificultad para poder manejarlo como referee. Y actualmente, la parte más difícil que estoy sobrellevando es esto de integrar un panel de Alto Rendimiento, en el cual somos sólo cinco, y yo soy la única mujer. Pesa un montón por el compromiso que estoy tomando y las exigencias que estoy teniendo. Ahora, justamente me estoy preparando porque el 22 de agosto me estoy yendo a Canadá. Es la primera experiencia que voy a tener para la IRB (International Rugby Board) y, si paso bien esa prueba, que es una eliminatoria del Mundial de Canadá de 2013, estoy accediendo a fines de octubre a participar por primera vez del Mundial Femenino de la IRB que se juega en Dubai. Entonces, esta prueba de ahora es la más difícil por el peso de saber que ya no es que estoy representando a la ciudad, a mi club, sino que estoy representando al país. Y en este caso, a la Confederación Sudamericana de Rugby (ConSuR). -¿Y cómo te tomás esta posibilidad? -Con mucha responsabilidad y hasta, por momentos, con un poco de miedo de fallar a las personas que me están dando la posibilidad, que sé que se la están jugando mucho. Y aparte, siempre digo, el peso de que yo soy la primera. Si yo hago mal las cosas, se le puede cerrar el camino a las que quieran venir atrás. Y eso pesa también. Al contrario, ojalá que, si las cosas me van bien a mí, muchas chicas que tienen ganas de seguir creciendo, por ahí les sirva la puertita que estoy abriendo para que para el resto sea más fácil. -¿Qué esperás encontrarte en ese torneo organizado por la IRB? -En el caso de Canadá, me voy a encontrar por primera vez con estos equipos. Conozco solamente el juego de Canadá y Estados Unidos porque todas las semanas me están mandando material de los torneos que van jugando y es lo mismo que un seven de primera masculino de acá de Mar del Plata. O sea, el nivel de juego es increíble. Veo a las referees y las veo con unas condiciones físicas y un manejo extraordinario. Y sé que estos van a ser los dos países más importantes porque es una eliminatoria regional, el resto son países centroamericanos, lo cual
considero que no deben ser de un muy alto nivel, porque sino alguno llegaría al mundial. Calculo que va a ser bastante variado. Y en cuanto a lo técnico y a lo físico creo que no va a haber diferencias. De hecho, cuando se enfrentan un equipo muy bueno y otro quizás malo es cuando peor la sufrís porque son mucha cantidad de tries que se desarrollan uno tras de otro y eso demanda una exigencia física. -¿Cómo viviste las otras experiencias a nivel internacional que tuviste? -Lindas todas las experiencias, en cuanto a seven sudamericanos. Vengo dirigiendo uno por medio. El primero de todos es el que más recuerdo porque es la primera experiencia, la de más nervios, e incluso porque tuve la gran posibilidad de dirigir la final del Sudamericano de Venezuela en 2003. Y hace dos semanas estuve en Brasil, a modo de preparación para el Seven de Canadá, donde fui a dirigir el circuito Regional Femenino de Seven. Y también fue buenísimo porque ellos de diez equipos tienen seis de muy buena calidad. El torneo realmente es buenísimo, la calidad, el nivel y la velocidad del juego. Y eso a mí me sirve mucho pensando en lo que me voy a encontrar ahora. A su vez, en la preparación, la UAR nos concentra cada 20 días en Buenos Aires, donde ahora el 17 de agosto estoy yendo para hacer una capacitación. Y cada vez que voy me hacen quedar para el sábado estar dirigiendo un partido de M-22 masculino, que también me acerca porque es de mucha velocidad de juego. -¿Esa preparación y capacitación incluye algún tipo de apoyo económico o beca? -De alguna manera sí. Pero no es que yo esté recibiendo una beca, ni nada por el estilo. Me ayudan a solventar los gastos. Por ejemplo, tengo una profesora particular de inglés, a la cual estoy yendo todos los días dos horas y me ayudan a poderle pagar los honorarios a ella. En el panel en el que estoy incluida, junto a Francisco Pastrana, Federico Anselmi, Matías Fresia y Juan Silvestre, como los cinco que tenemos la proyección internacional para dirigir para la IRB; estamos todos en las mismas condiciones, nos ayudan a solventar los gastos, no es que estamos siendo rentados. Acá en Mar del Plata mucho menos que eso porque, en realidad,
yo acá dirijo todos los fines de semana y no tenemos absolutamente nada, ni siquiera un viático por el esfuerzo de la nafta del auto. Entonces, se hace costoso, se hace difícil prepararte para todas las exigencias. Yo hoy en día renuncié a 3 horas de trabajo para poderme preparar para todo lo que se viene porque no llego. -¿A nivel mundial existen mujeres árbitros profesionales? -Sí. A nivel internacional, todas son rentadas. De hecho, fuera de Mar del Plata, todos los referees del país reciben un viático que les sirve para desarrollarse como referee. -¿Y por qué en Mar del Plata no existe ese viático? -Por una decisión de la Comisión Directiva de la Unión que no valora el trabajo nuestro. Creo que es eso. Es muy difícil. Si uno pudiera vivir de esto, por supuesto, que cumpliría con todas las exigencias. Me encantaría pensar en que ya no trabajo y me dedico a entrenarme, a prepararme con un evaluador, a filmarme, todo eso sería muchísimo más fácil. Tiene su cuota de dificultad llegar a todas las exigencias que se piden. -En ese panorama, un buen desempeño en el Seven de Canadá ¿te puede beneficiar camino a la profesionalización o tiene que ver con un tema interno de la UAR? -No lo termino de saber porque realmente yo estoy descubriendo todo esto. Es algo nuevo, no tengo ningún referente adelante. Tengo la idea en la cabeza que si uno representa bien y hace bien las cosas llega un momento en que a una la necesitan. -¿Te has puesto a pensar que la inclusión del rugby dentro del calendario de los Juegos Olímpicos para Río de Janeiro 2016 puede ser una posibilidad en el futuro, si avanzás escalones a nivel
internacional? -Sí, todo el mundo me habla de los Juegos Olímpicos y más hoy en día que se están jugando. Sé que tengo una oportunidad. Va a quedar en mí mantenerme en estos años, en hacer bien las cosas para la IRB. Estamos
en el 2012, yo tengo 31 años. Me cuesta mucho ponerme objetivos a largo plazo. Quiero vivir el ahora. No me gusta ilusionarme nunca con cosas muy grandes ni cosas a futuro. -¿Te hacen sentir uno más? -Sí, totalmente. No hay diferencias conmigo. Siempre dicen que yo soy uno más. Tanto sea desde el elogio hasta el reto. No hay diferencias. Y si me mando una, se me reta como al árbitro de primera. Y soy muy respetuosa de eso. Yo nunca pedí que se me tuviera diferencias. Traté de involucrarme con la misma intensidad que los demás, para sentirlo de la misma manera. Si yo no tuviera la cabeza lo suficientemente fuerte para soportar los retos y las exigencias que estoy teniendo, no podría haber avanzado a lo que estoy haciendo. -¿Cómo es Laureana como referee? -Depende el partido. En un partido de chicos soy una profe, me sale la docente de
adentro. Me gusta mucho enseñarles a los chicos. Trato de frenar y explicarlo para que no lo vuelvan a hacer. En intermedia, no. Ahí no hay docencia, ya están formados. Ahí trato de ser muy seria y muy recta. A veces, hasta me retan por mi seriedad porque dicen que dirijo con “cara de culo” y, en realidad, es que estoy muy concentrada en lo que estoy haciendo y por ahí no me sale demasiado mostrarme relajada. Y después fuera de la cancha creo que soy muy tratable. Es más, me encanta poder terminar un partido, ir al tercer tiempo y poderme sentar tanto sea con el entrenador o con un jugador y explicarle por qué cobré algo o por qué saqué una tarjeta. Me encanta esa interacción porque es una manera de devolverle algo también al equipo, al jugador, que pueda entender las decisiones que tomamos los referees, y ni hablar que si eso lo ayuda a mejorar como jugador, entonces, sabés que le estás haciendo un bien al deporte. -¿Qué razones le expondrías a una chica para que se involucre en el referato? -Si es una persona que se alejó del juego por un problema o algo, lo primero es lo lindo de estar adentro de una cancha. Nosotros los referees decimos que jugamos el partido porque, si bien no estás con ninguno de los dos equipos, te movés a la par de ellos, estás cerca del juego, ves las cosas de cerca, lo único es que vos sos el que marcás la disciplina y conducís el juego. Por otro lado, considerando las pocas que somos, las posibilidades de desarrollarte fuera de tu ciudad, conociendo lugares, interactuando y haciéndote amigos, son más fáciles de lograrlas.
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a época en la que la interrupción divina en las cuestiones humanas era limitada había un período de transición en la que los dioses y los mortales se mezclaban libremente… Ese ciclo es cada cuatro años cuando las personas comunes y corrientes disfrutan de la inspiración divina de seres súper dotados físicamente. En la mitología griega, las deidades que eran nativas de los pueblos griegos se describían como esencialmente humanas pero con cuerpos ideales. Según el profesor en cultura clásica Walter Burkert la característica definitoria del antropomorfismo griego es que “los dioses griegos son personas, no abstracciones, ideas o conceptos”. En el siglo XXI, en los Juegos Olímpicos modernos disputados en Londres, podemos seguir hablando de dioses. Cuando parecía estar todo inventado y que las marcas olímpicas quedarían estancadas, aparecieron ellos: los atletas con un don especial. Es ahí donde las miradas se posaron en la pista de atletismo, la pileta de natación o en determinada superficie. Algunos fueron en busca de una presea dorada, otros lo hicieron por la gloria y el reconocimiento popular. Estos deportistas descienden de su propia genealogía, persigue intereses diferentes, tienen una cierta área de su especialidad y están guiados por una personalidad única. El primer fenómeno es Michael Phelps, el mejor nadador de la historia. Su nombre quedará en la inmortalidad, en los libros y en las retinas de los afortunados que pudieron observarlo en carne propia. Esta deidad del agua podría ser la reencarnación de Poseidón, el dios del mar. El estadounidense con la omnipotencia griega tienen algo en común: la ambición por las cosas. Por eso “el tiburón de Baltimore” se propuso superar a su compatriota Mark Spitz, ostentando ocho medallas de oro en Beijing 2008. En Londres, Phelps -a los 27 añosse despidió de las competencias a lo grande. Con veintidós medallas -18 doradas- es el atleta con más preseas en la historia de los Juegos Olímpicos. Las aguas de las piscinas olímpicas lo extrañaran, salvo que aparezca otro “aquaman” pero eso es algo impensado por ahora. El único que puede llegar a opacar a Phelps en lo mediático es: Usain Bolt, el hombre más rápido del mundo. Con su carisma y su velocidad atrapó a millones de espectadores a la hora de las carreras de 100 metros y 200 metros lisos. Donde el jamaiquino se transformó en el único corredor en ganar las dos competencias en dos juegos seguidos. Además batió su propia marca olímpica en suelo británico. Un personaje excéntrico cuyas cámaras fotográficas se enamoraron de su figura. El relámpago humano si estuviese en la antigüedad sería un gran escollo para Hermes, el dios mensajero y patrón de los atletas. Bolt enfrentaría sin miedo a esta deidad griega porque está convencido de su poderío atlético y su gran velocidad en las pistas. Para culminar los juegos a todo volumen, Bolt con sus compatriotas jamaiquinos- entre ellos el joven Yohan Blake- lograron batir un nuevo récord mundial en la posta 4x100 -otro oro para Usain y testimonio de regalo-. Hasta logró que nos olvidemos del
“hijo del viento”, Carl Lewis -ex-atleta estadounidense, especialista en pruebas de velocidad y salto de longitud que ganó 10 medallas olímpicas-. Ares se considera el dios olímpico de la confrontación, aunque es más bien la personificación de la fuerza bruta. Y alguien que demostró tener un aspecto rústico con su barba rubia y sus músculos al aire fue Tomasz Majewski. El polaco en el lanzamiento de bala revalidó en suelo británico su título al alcanzar los 21,89 metros. Entre esas bestias de peso pesado se alojó Germán Lauro (6° puesto). Una verdadera hazaña para el argentino que se codeó mano a mano con los mejores lanzadores del planeta. A Serena Williams le quedaría bien el atuendo de Atenea, la diosa de la guerra. Ese espíritu de lucha y valentía que tiene la norteamericana es escaso entre las mujeres del tenis. Aguerrida como pocas, Serena aplastó en 63 minutos a María Sharapova (6-0, 6-1). Su raqueta, empuñada como una espada, brilló en el cielo londinense donde su carrera como tenista está completa. Es la segunda jugadora en obtener el “Golden Slam”: ha ganado los cuatro torneos de Grand Slam de tenis y ahora la medalla dorada en singles. Una verdadera guerrera. En este relato no se iba a dejar de lado a los “Titanes”, una raza poderosa de doce dioses que precedieron a los olímpicos. El mote de titanes se lo lleva el nuevo “dream team” de Estados Unidos. Guiados por un experimentado Kobe Bryant, los basquetbolistas de la NBA hicieron lo que quisieron en suelo británico. Lograron vencer con un marcador de 156 a 73 a Nigeria, ostentando así un nuevo record olímpico. La bestia inspirada de esa noche fue Carmelo Anthony que marco 37 puntos entre ellos diez triples. El estado atlético y técnico de los norteamericanos es inigualable. Es así que se consagraron por segunda vez consecutiva en los Juegos Olímpicos con un Lebron James jugando soberbiamente y confirmando su poderío basquetbolístico a todo el mundo. En estos juegos tuvimos la asombrosa aparición de Ye Shiwen, una china de 16 años que nadó los últimos 50 metros de la competencia medley más rápido que el campeón masculino. Esto causó asombro, conmoción y las sospechas de doping. Los ataques contra su logro desencadenaron rápidamente ataques más fuertes en su favor. Los logros de Ye también plantean preguntas sobre las diferencias fisiológicas entre los deportistas varones y mujeres. Una chica súper dotada físicamente que dentro de cuatro años puede llegar a ser una de las deportistas más grandes a nivel mundial. No sólo los mencionados dieron el color a estos Juegos Olímpicos en Londres y tal vez la lista sea aún más grande. Sin embargo, son ellos los que sobresalieron mediáticamente por sus desempeños deportivos. Los dioses del olimpo eran doce y no dejaban a nadie más alojarse con ellos. ¿Será su orgullo y ambición que los hace tan grandes? Habrá que esperar cuatro años para volver disfrutarlos, algunos, en Río 2016. Pero, sin duda, sus nombres retumbarán en la eternidad.
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lejados del exitismo y pesimismo mediático generado por algunos comunicadores televisivos en las últimas semanas, en relación a la performance de los representantes argentinos en Londres 2012, la mejor opción es mantener los pies en la tierra y analizar la situación global. No se trata de ver el vaso medio vacío, ni de verlo medio lleno. Se trata de ser realistas. El medallero no miente. Argentina finalizó 42° con una cosecha de cuatro medallas: una presea dorada, una plateada y dos de bronce. Sebastián Crismanich ganó el único oro en taekwondo hasta 80 kilos. Las Leonas celebraron el cumpleaños de Luciana Aymar colgándose la medalla de plata. Juan Martín Del Potro superó al serbio Novak Djokovic y se quedó con el bronce -primer singlista argentino que alcanza un podio en el cuadro masculino-. Y Juan De La Fuente y Lucas Calabrese también se llevaron el bronce en la categoría 470 de Yachting, una disciplina que siempre le ha dado alegrías a nuestro deporte. La delegación nacional, al menos en cuanto a podios se refiere, bajó su producción respecto a Atenas 2004 y Beijing 2008, cuando Argentina obtuvo dos medallas de oro y cuatro de bronce. Sin embargo, la escasez de preseas en la capital inglesa se equilibró con diez diplomas olímpicos, algunos de ellos en disciplinas que los argentinos históricamente no han tenido buenos desempeños. Es destacable el sexto puesto de Germán Lauro en lanzamiento de bala. Paula Pareto y Emanuel Lucenti dejaron bien parado al judo argentino. Cristian Rosso y Ariel Suárez llegaron cuartos en la final del doble par de remos cortos. La dupla mixta Juan Martín Del Potro y Gisela Dulko dieron el máximo hasta cuartos de final, pese al desgaste físico de la “Torre de Tandil” unas horas antes en el partido de tenis más largo del olimpismo ante Roger Federer. El púgil Yamil Peralta quedó eliminado en los cuartos de final, luego de un fallo polémico frente al campeón europeo. Federico Molinari logró un histórico octavo puesto en anillas para la gimnasia artística argentina. El vóley masculino no pudo con Brasil -subcampeón olímpico- en cuartos de final. Miguel Correa y Rubén Rézola finalizaron cuartos en la categoría K2 de canotaje. Y la Generación Dorada no pudo con Rusia en el duelo por el bronce. Muchos de estos reconocimientos no hubiesen sido posibles sin el apoyo de la Secretaría de Deporte de la Nación, el Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD) y el Comité Olímpico Argentino (COA). Y esto no lo dice quien escribe estas líneas. Lo han expresado en numerosas oportunidades los mismos protagonistas. El ENARD comenzó a funcionar hace apenas dos años y las políticas deportivas -como suelen hacer las potencias- deben man-
tenerse prolongadas en el tiempo para generar resultados considerables. En ese sentido, los jóvenes deportistas que participaron en Londres 2012, si se mantiene el apoyo y se profundizan las políticas, tendrán cuatro años para ganar experiencia y desarrollar sus aptitudes para la cita máxima. Muchos alcanzarán su pico de rendimiento en Río 2016. Otros recién lo harán en el 2020. Pero lo fundamental es la perseverancia política y deportiva. El impuesto del 1% a las facturas de telefonía móvil supone una buena iniciativa para recaudar los recursos necesarios para atender las necesidades de los atletas, invertir en infraestructura, becar a jóvenes talentos, pagar viajes e inscripciones para competencias internacionales y profundizar el desarrollo del deporte social y de base. De esta manera, la cadena funcionará correctamente. Con el correr del tiempo surgirán nuevos talentos y los que ya están podrán enfocarse full time en el deporte. Se puede afirmar que, Deportivamente Hablando, la Argentina está mejor que ayer pero peor que mañana. Mejor que ayer porque después de mucho tiempo los atletas reciben la ayuda que tanto ansiaban. Y peor que mañana porque lo más coherente sería que el Estado mantuviese el apoyo al deporte amateur. Por ese motivo los diplomas olímpicos adquieren tanto valor. Porque algunos sugieren un futuro prometedor para jóvenes deportistas que tuvieron su bautismo olímpico en Londres. Porque es un premio consuelo al esfuerzo realizado en los últimos cuatros años. Porque las entidad públicas reforzarán el apoyo económico para estos casos. Porque se acercarán sponsors privados a colaborar con la causa. Porque los próximos Juegos Olímpicos se desarrollarán en Río de Janeiro, donde Sudamérica jugará de local por la afición, por los costos de traslados, por la diferencia horaria, entre otras cosas.
P
arís anochecía con una lluvia que humedecía la visión y las retinas de los presentes. Un grupo de personas que fumaban tabaco en pipa y vestían prolijos e idénticos pilotos tomaban pistas con los más diversos métodos: desde la lupa al moderno láser para huellas digitales. Nada librado al azar. Sherlock, un inglés de poco talento que deseaba tener virtudes cinematográficas, encabezaba el operativo. Se acercó a la ventana del consultorio (desde donde nítidamente se podía apreciar la encantadora belleza de la torre Eiffel) y escogió para el psicólogo el procedimiento que consideraba más efectivo: el interrogatorio. -Pierre, recibimos una denuncia que en este edificio hubo un ataque a usted y el portero afirma que el involucrado escapó robando un auto. Los vecinos aseguran que una persona parecida al sospechoso salió de este consultorio y los gritos, desde este lugar en el que estamos parados, se escuchaban desde aquella torre. -Desconozco a qué se refiere. -Le recuerdo que puede ser sancionado por encubrimiento, Pierre. Salieron rápidamente y recorrieron todo el edificio. Ninguna prueba. Frustrado, Sherlock pitó y exhaló una nube negra contaminando el frío aire parisino. Un niño de la calle lo miraba fijamente. El detective decidió interrogarlo. Era un barrio en el que no ocurrían estos hechos. Algo sabría sobre los sucesos que quebraron esa monotonía rutinaria de un lugar de élite como estos. -Sí. Tenía rostro serio, cejas enormes y mirada firme. Era alto y tenía poco pelo. Ahora deme lo que me prometió por el dato. -¿Era famoso? -Yo le debo mucho -dijo el niño que tomó las monedas y siguió pateando una pelota. Sherlock desesperadamente subió al Gordini negro. -Al Stade de France, Hatson. Las personas que habitan en el lugar de los hechos desconocen y detestan las fiestas populares y paganas. Fue allí que lo vieron. Estaba acariciando una pelota al igual que el nene del dato. Simplemente que ahora, los que parecían niños eran los encargados del operativo al ver las delicias que salían de su pie. -Zinedine… Soy el detective Sherlock Wrong, ¿por qué lo hizo? -¿Usted también con eso? -Es que no son maneras de actuar. Mire, yo soy inglés e hincha del Manchester United. Toda mi vida admiré las locuras y el talento de jugadores como George Best o su compatriota, el gran Eric Cantona, al que también se le fue la mano… O la pierna en este caso… Pero usted es alguien pensante, el jugador que mejor usó la mente en estos veinte años. Usted dio funciones acá adentro en el '98 y en el último mundial ante Brasil o España, por ejemplo. Cómo va a actuar así. -Es que ese tano sucio me provocó, qué quiere que le diga. -Pero yo le habló de lo que ocurrió en el edificio Montpellier hace una hora -dijo Sherlock sorprendido. -¿Con el psicólogo Pierre? -retrucó el crack. -Sí. -Me dijo que el penal lo tendría que haber ejecutado fuerte para asegurar. Que la picadita estaba de más. Que era un acto de soberbia. Y para mí son convicciones. Por eso me levanté del diván y lo cabeceé a él también. Lo del cabezazo a Materazzi me hago cargo, fue una locura. Pero al penal lo pateo igual.