DIARIO DE PRÁCTICAS CUARTO SEMESTRE
JARDÍN DE NIÑOS “MIGUEL RAMOS ARIZPE”. BENEMÉRITA ESCUELA NORMAL “MANUEL ÁVILA CAMACHO”. LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR. DIANA SUSANA GARCÍA RAMOS.
JARDÍN DE NIÑOS
El siguiente diario de trabajo fue realizado con base a mi jornada de práctica que se suscitó en el jardín de niños “Miguel Ramos Arizpe” con clave “32DJN0034P” ubicado en la colonia Buenavista en la Zona A, en la calle Jesús Reyes Heroles #209 en la zona urbana del estado de Zacatecas. Dicho plantel actualmente tiene una matrícula de 206 alumnos correspondientes a ocho grupos, el total del personal de la institución son 15 individuos, de los cuales ocho son educadoras, un agente directivo, y el resto corresponde al personal de apoyo, los cuales se desempeñan en áreas como educación física, música, canalización USAER, comedor o intendencia de la institución. El edificio cuenta con ocho aulas para clase, dos áreas de sanitarios, un salón de música, una biblioteca equipada, un comedor, dirección, plaza cívica y áreas de juegos en buen estado. Cuenta con los servicios públicos básicos y espacios diseñados para la seguridad de las personas de la institución, entre ellas rutas de evacuación, salidas de emergencia, y zonas de seguridad que contienen señales de protección de civil. Su población escolar proviene de un nivel socioeconómico medio-bajo, en su mayoría los padres se muestran participativos en actividades del plantel.
VISITA PREVIA (26 DE FEBRERO DEL 2018) Acudimos mis compañeras y yo a las 8:30 a la institución mencionada, fuimos recibidas por la directora de la institución “Francisca Gabriela Medina García” la cual nos solicitó que nos sorteáramos los grupos existentes, a mí me tocó trabajar con el único grupo de primero, lo cual de cierta manera me alarmó un poco,
debido a que mis anteriores prácticas sólo se habían suscitado en grados de segundo o tercero. Sin embargo la docente titular “Bertha Minerva Ríos López” a cargo del grupo de 1° “A” inmediatamente me dio una calurosa bienvenida tan pronto cruce las puertas del aula, y los alumnos por igual. Ambas nos presentamos y platicamos un poco acerca de mi experiencia frente a grupo, enseguida me presentó con los niños y los niños hicieron lo mismo. La maestra me comentó que todos los grupos se encontraban trabajando en talleres de los lábaros patrios, cada una de las educadoras trabajaba con algo diferente para cada grado, la docente me comentó que ella trabajaba canto pero que ese día a los niños les correspondía trabajar con la maestra Norma en repostería, la maestra al explicar a los niños lo que harían ese día les pidió que obedecieran las indicaciones de la maestra Norma y se portaran bien, hacía énfasis en que ellos compartieran y fueran atentos al taller. Una vez que los niños pasaron a la otra aula yo los acompañé, la maestra se presentó con los niños y viceversa, después les preguntó sí alguno conocía qué era la repostería, sólo uno de ellos levantó la mano pero al cuestionarlo nuevamente, decía que no sabía la respuesta. Daniela levantó la mano y respondió que era hacer pasteles, después la docente explicó los materiales que se emplearían para hacer las banderillas (bombones, gelatina en polvo, platos desechables, agua y palos) también les explicó el procedimiento y les indicó que todo lo hicieran con sus debidas precauciones. Los formó en equipos y repartió los materiales necesarios en los equipos los niños iniciaban a llenar de gelatina sus bombones, pero se dio la hora de su refrigerio así que algunos acudieron al comedor y otros se quedaron en el salón con su lonchera, los niños sólo tienen permitido comer fruta, mientras que en el comedor les dan frijoles, soya o avena en ocasiones. Los niños salen a las 10:30 am y terminan de comer alrededor de 15 minutos después. Ya que los niños regresaron, siguieron llenando sus bombones y yo acompañé en el proceso a algunos, y los ayudé a que le colocaran sus palos en las banderillas, los niños iniciaron a comerse la gelatina, enseguida la docente les preguntó ¿a qué se parecía lo que habían realizado? Algunos niños dijeron que a la bandera mexicana, la maestra pidió que recogieran sus materiales y me pidió que la ayudara, enseguida les pidió que hicieran un círculo y cantaron juntos una canción del nombre de los dedos y la de naranja dulce, sólo algunos niños se mostraron entusiasmados. El único niño que no trabajó fue Kiran. Enseguida salieron al receso, la docente Minerva me comentó acerca de las guardias y la importancia de éstas, así que acudimos a la guardia según correspondía, mientras los niños estaban en los juegos, el tiempo terminó y los niños regresaron al salón, pero luego fueron a la clase de música donde el maestro ensayó con el grupo el baile que presentaran en el festival de la
primavera, después los niños fueron recogidos por sus padres y al final de la jornada la docente y yo hablamos sobre mi plan de trabajo y algunos niños.
1° SEMANA DE PRÁCTICAS (6 DE MARZO AL 9 DE MARZO DEL 2018) DÍA 1: 6 DE MARZO DEL 2018 Llegué puntualmente a la institución, coloqué mis planeaciones y algunos de los materiales que ocuparía a lo largo de la jornada de trabajo, y le entregué mis planeaciones a la docente titular. Una vez que los niños comenzaron a entrar preguntaban a la maestra que sí podían bajar colchonetas para sentarse, la maestra les dijo que me preguntaran a mí, sin embargo me di cuenta de que la organización espacial fue algo que no había pensado y que sin duda influiría en el ambiente de aprendizaje. Decidí que los niños se sentaran en las tres colchonetas pues la actividad inicial requeriría de movimiento por parte de los niños. Una vez que todos los niños entraron decidí cuestionarlos acerca de las figuras que conocían, y después apunté las que había pegado en el pizarrón junto con las bolsas que representaban los monstruos come figuras, la mayoría de los niños reconocía cada una de las figuras y el color correspondiente. Les expliqué que colocaría unas figuras parecidas a los monstruos y que ellos debían colocarlas en donde encontraron una figura igual, sin embargo hice énfasis en que no empezaran hasta que yo colocara todas las figuras y que no aventaran a sus compañeros. Los alumnos se emocionaron cuando les conté que alimentaríamos a los monstruos, en un primer momento algunos niños colocaban las figuras correctamente pero ya que se pararon todos los niños empezaron a colocar donde cayeran y a querer tener todas las figuras para ellos solos ““Desde el punto de vista cognoscitivo Jean Piaget dice que los niños hasta los 3 o 4 años tienen dificultades para retomar la perspectiva de los otros cuando no coincide con la propia. Ellos fácilmente tienden a ver las cosas desde su propio interés y no se percatan de que pueden existir otros” (Federación de enseñanza de Andalucía, 2011) , así que una vez que las colocaron les pregunté ¿qué figuras creen que tiene más cantidad? Algunos niños contestaban y a la par señalaban la figura, debido a que los niños requieren de un apoyo iconográfico “Va a depender de la edad y nivel de abstracción de cada niño. Generalmente, los objetos reales en miniatura se utilizan con niños pequeños que muestran una limitada capacidad representacional y de simbolización” (JULEN, 2008) ya que eso facilita la conceptualización de sus ideas. Colocamos en conjunto cada una de las figuras
en el monstruo comefiguras y contamos cada una de ellas, apunté el numero en el pizarrón y pasé algunos niños a colocar la figura en el número, cuando uno no sabía pedía al grupo que lo apoyara. Después pedí que los niños realizaran equipos de cuatro o cinco integrantes, repartí a cada uno de los equipos material didáctico, enseguida pasé a cada uno de los equipos a indicar el número de conjuntos debían formar y después de ellos les pedí que observaran en donde había más objetos y en donde menos, ésta indicación sólo la realizaban cuando yo les brindaba acompañamiento individual, ya que cuando acudía a otro equipo se olvidan de todo y empezaban a jugar, formando casitas y trenes, así que la actividad no resultó como yo esperaba porque los niños poseen características de exploración-manipulación y por ende el juego está en sus necesidades. Así que decidí pedirles que me ayudaran a recoger el material en su lugar correspondiente, enseguida llegó la hora del refrigerio, algunos niños loncharon en el salón y otros acudieron al comedor. Una vez que regresaron volví a hacer equipos y repartí unos envases de leche, pedí que los apilaran y contaran pero después la historia se repetía ya que estaban jugando nuevamente. El maestro de educación física acudió por el grupo y jugaron con aros, mediante su cuerpo, manipulándolo de diversas maneras, los niños iban proponiendo la forma, una vez que los niños terminan la actividad física se forman y les reparten jabón líquido para lavarse las manos, una vez que todos terminan la maestra y yo contamos a los alumnos y pasaron al salón. Llegó la hora de receso y los niños sacaban sus juguetes, algunos asistieron al arenero, otros a los columpios y unos cuantos acompañaron a la maestra a todos lados. La docente y yo fuimos a la guardia en el espacio donde se encuentra un aljibe protegido por una malla y candado, no se suscitó ningún percance. Ya que terminó el recreo todos acudimos al salón nuevamente, pedí a los niños que recogieran las colchonetas y tomaran una silla mientras yo acomodaba las mesas, una vez sentados les expliqué que con las figuras debían formar un rostro como ellos quisieran, después les repartí figuras de papel, hojas de máquina y resistol el cual pedí que compartieran, André colocó a su rostro cada parte donde correspondía incluso le colocó orejas, cabello y barba. El único niño que no trabajó fue Kiran, sólo en pocos niños no se distinguían las partes de su rostro, sin embargo la mayoría conoce las figuras y supo qué figura predominaba más en su creación. Ya que terminaron los padres de familia los recogieron, ese día me quede escuchando las observaciones de la docente y algunas recomendaciones, y al comparar nuestros puntos de vista coincidimos en las observaciones.
Considero que el aprendizaje esperado “Identifica por percepción, la cantidad de elementos en colecciones pequeñas y en colecciones mayores mediante el conteo” no fue totalmente exitoso, y que se encuentra en proceso, ya que algunos niños no logran visualizar el conteo sin necesidad de interferir con manipulación sobre los objetos, sin embargo creo que hay cuestiones que debo tener más en cuenta para mejorar mi práctica como tener en cuenta que los niños a esa edad son muy inquietos y el juego se encuentra como parte de su naturaleza, lo cual me hace pensar que debí seleccionar otro material para que observaran los conjuntos o ver estos mismos mediante alguna dinámica atractiva para ellos, también creo que desde el momento de mi planificación debo visualizar la organización espacial según el estado de ánimo de los niños y la actividad a trabajar. Entre las observaciones de la docente se encontraron las puntualizaciones que mencioné y me pidió que usara alguna estrategia para que los niños volvieran a centrar su atención como algún coro, o una dinámica. Y que cuando brindará acompañamiento individual debía observar a los demás niños por su seguridad.
DÍA 2: 7 DE MARZO DEL 2018 Me dirigí temprano al salón para esconder imágenes de ratones que iba usar para una actividad, después de un rato, los niños empezaron a llegar en su mayoría entran entusiasmados con sus juguetes, pero Mateo cuando estaba a punto de entrar se detenía en la pared del otro salón y tenía que ir hasta donde estaba y pedir que pasara al salón. Les pedí a los niños que se sentaran en las colchonetas debido a que inicié con unos cuestionamientos sobre el conteo. Les pregunté sí recordaban que vimos el día anterior, y algunos niños contestaron que vimos las figuras, al momento de preguntar ¿qué podemos contar dentro del salón o de casa? Lo único que respondían era los números y decían el nombre de las figuras, así que yo les pregunté sí podíamos contar objetos o frutas, ante este cuestionamiento algunos niños dijeron que sí y otro cuantos que no. Enseguida les pregunté ¿podemos contar ratones? Los niños respondieron que sí, así que les pregunté cómo eran los ratones, empezaron a contar que tenían cola, que eran grandes y malos, etc. Les dije que leeríamos un cuento llamado “Cuenta ratones” que necesitaban poner mucha atención y me ayudaran a contarlos. Los niños escucharon atentamente, así que pregunté ¿qué hicieron los ratones para escapar? ¿Qué cosa era el ratonzote? Lo cual contestaron adecuadamente. Luego los alumnos se acomodaron en una silla y pedí que realizaran un dibujo del cuento, la mayoría dibujó algunos ratones y serpientes, otros a el ratonzote y unos tres niños dibujan otra cosa ajena al cuento, sin embargo les preguntaba acerca
del cuento y sus respuestas eran acertadas, además platicaron al compañero de al lado lo que habían dibujado. Una vez revisados los trabajos, saqué un frasco de mi bolsa y les conté que la serpiente era mi amiga y me había pedido que le ayudara a encontrar a los ratones porque tenía mucha hambre, les dije ¿en qué lugar creen que estén escondidos los ratones? Ellos contestaron que en su casa, sin embargo les dije que estaban en el salón, y debíamos atraparlos. Los niños emocionados se pararon de sus lugares y observaron el salón para atrapar a los ratones, poco a poco algún niño encontraba un ratón, cuál fue mi sorpresa cuando Mateo quien no quería trabajar, decide unirse a la búsqueda, y encuentra algunos ratones. Después de un rato los niños ya no encontraban ratones y faltaban dos, así que la docente me ayudó a darles algunas pistas como “frio, tibio o caliente” y de esta manera los niños los encontraron todos. Coloqué el frasco al centro de una mesa y pedí que los niños me ayudaran a contra los ratones al mismo tiempo que los depositaban en el frasco, pero como eran muchos niños todos discutían por meter algún ratón, así que decidí meterlos yo y que ellos me ayudaran a contar, los niños pudieron contar todos ratones, una vez encerrados en el frasco se pusieron muy felices y aplaudieron por haberlo logrado. Pedí que los niños se sentaran y me ayudaran a contar nuevamente, lo cual hicieron con gusto, aunque algunos de ellos, después del número 5 se les dificulta el conteo, pero poco a poco lo lograban hasta el 10. El tiempo de refrigerio había llegado así que unos loncharon en el salón y otros fueron al comedor, una vez que regresaron la maestra ensayó con ellos el baile de la primavera para el festival, el cual los niños realizan con gusto aunque olviden sus posiciones. Después de ello, jugamos a “el barco se hunde” y de principio los niños no entendieron la consigna así que hice una demostración y los niños empezaron a jugar, pude observar que los equipos los hacían entre los que más se juntaban y a veces excluían a otros, sin embargo traté de que eso no pasara. Se llegó la hora del recreo y fui al lugar donde debía hacer guardia, afortunadamente no sucedió algún accidente, después regresamos al salón. Organice cinco equipos y a cada uno le repartí un rompecabezas de un número, sin embargo sólo lograron armar el número uno y el dos, debido a que según observé el rompecabezas se encontraba lejos de su zona de desarrollo próximo según Vigotsky “se refiere a la distancia que existe entre el desarrollo psíquico actual del sujeto y su desarrollo potencial” (López, 2011) llegó la hora de salir y recogimos las cosas, los padres entraron por sus hijos.
Al finalizar la jornada de trabajo, platiqué con la docente acerca de sus observaciones y nuevamente coincidimos. El aprendizaje esperado “Usa y nombra los números que sabe, en orden ascendente, empezando por el uno y a partir de números diferentes al uno, ampliando el rango de conteo” fue exitoso, debido a que los niños durante las actividades emplearon el conteo y lo fueron ampliando poco a poco, sin embargo ese día fue exitoso aunque aún esté en proceso. En cuestión a las actividades la del rompecabezas se encontró demasiado alejada de su zona de desarrollo próximo, debí emplear algún apoyo iconográfico o cambiar el grado de dificultad, además necesito hacer el cierre de la situación adecuadamente. Las observaciones de la docente también fueron hacia el rompecabezas, y me dijo que la actividad de los ratones fue totalmente exitosa, sin embargo que debía darle a los niños una pequeña introducción de lo que se haría durante el día.
DÍA 3: 8 DE MARZO DEL 2018 Por la mañana los niños se encontraban muy inquietos, estaban sentados en las colchonetas pero no dejaban de jugar, así que decidí platicarles un poco de lo que lo que haríamos ése día, es decir la introducción. Indiqué a los niños que tomaran una silla y se sentaran para hacer los objetos correspondientes, les repartí las figuras de papel y pintura roja, identificaron las figuras usadas y aplicaron el conteo, sin embargo aplicaron demasiada pintura y después las figuras no se podían distinguir. Debido a que tardarían bastante en secarse los objetos, llevé al grupo a que lavara sus manos para no ensuciar el material. Una vez que regresamos, me di cuenta de que esa actividad se alargó bastante, y ya era hora de lonchar, así que los niños salieron al comedor. Ya que los niños regresaron la maestra ensayó con ellos el baile de la primavera, ensayaron varias veces pero los niños se encontraban bastante distraídos, después del ensayo llegó la hora de recreo, los niños salieron a jugar y nosotros a la guardia. De regreso en el aula, noté que me faltaban varias actividades por realizar, como el circuito matemático, el stop de animales y las hojas de conteo, así que decidí empezar por el circuito matemático, ya que supuse que despertaría el interés de los niños. Pedí que se sentaran en las colchonetas, y prestaran atención a las reglas del juego, les mostré los materiales que usaríamos y expliqué la consigna, sin embargo sirvió más para ellos observar el ejemplo. Primeramente el niño debía lanzar el dado y contar el número de puntos, una vez localizado debía encontrar la tarjeta que tenía el número de animales que indicó el dado, después tomar el número de abate lenguas correspondiente y buscar en el bebeleche el número y colocar ahí sus palos, saltar y de regreso recoger sus palos.
Los niños estaban muy interesados, todos querían pasar al mismo tiempo, sin embargo les dije que pasaría el que estuviera en su lugar, algunos niños como André e Iker realizan la actividad de manera autónoma, algunos necesitan apoyo. Cuando fue el turno de Emily al momento de saltar dijo que no podía hacerlo y empezó a llorar, y aunque intentamos animarla sólo hizo la actividad caminando. El tiempo llegó su fin y no todos los niños alcanzaron a pasar, así que les dije que mañana terminaríamos de jugar, idea que les agradó mucho, la jornada terminó y la docente me comentó que me vio mejorar en la práctica y más segura frente a grupo. El aprendizaje a favorecer fue “Utiliza estrategias de conteo, como la organización en fila, el señalamiento de cada elemento, desplazamiento de los ya contados, añadir objetos o repartir uno a uno los elementos por contar, y sobre conteo (a partir de un número dado en una colección, continúa contando: 4, 5, 6)” a mi parecer fue exitoso, debido a que durante las actividades los niños hicieron uso de diversas estrategias de conteo pero especialmente pude observar esas estrategias de conteo en la actividad del circuito matemático, creo que para mejorar mi práctica debo eliminar los tiempos muertos empleados a repartir material “al no prever anticipadamente recursos y tratar de obtenerlos al momento en que se desarrolla la situación, provocando desde tiempos muertos, desinterés en los niños, hasta riesgos de seguridad al dejarlos solos en el aula” (SEP, 2011) , ya que eso me roba tiempo de las demás actividades.
Día 4: 9 DE MARZO DEL 2018 Inicié el día con la pregunta ¿Con qué hemos trabajado estos días? Los niños respondieron que con los números, les dije que con esos números cantaríamos la canción de los diez perritos y qué si alguien la conocía, Tadeo dijo que sí pero no quiso cantarla, una vez que todo el grupo la cantamos, los niños pidieron cantar nuevamente y así fue, al momento de contar de manera descendente algunos niños se confundían, pero en su mayoría pueden hacerlo apoyándose en los dedos de la mano. Le pregunté al grupo sí ellos conocían el sabor de la luna, pero André dijo que él se imaginaba que sabía a bananas, pedí que los niños se sentaran en las colchonetas e inicié por contar el cuento “a qué sabe la luna” pegué una representación del cielo y la luna. Según contaba el cuento iba pegando un animal en el lomo del anterior, pero antes de hacerlo les decía a los niños alguna característica del animal para que adivinaran de quién se trataba. Gracias a la representación de los animales y algunos movimientos que realicé los niños se mostraron muy atentos, cuando los animales lograron alcanzar la luna se pusieron muy contentos y aplaudieron por ello. Después contamos de manera ascendente y descendente a los animales, pero en cuestión de minutos los niños estaban
bastante inquietos y querían ir al baño, así que llevé a todo el grupo al baño y ya de regreso seguí con la actividad. Pregunté algunas cosas relativas al cuento y los niños contestaron adecuadamente. Les comenté que daríamos de comer a uno de los animales del cuento, que tomaran lugar en una mesa y que por favor compartieran el material repartido. Debido a que olvidé las bananas que pegarían decidí que las sustituyeran con papel china amarillo, no indiqué un número correspondiente dejé que ellos lo decidieran, Oliver hizo los dientes del chango, en su mayoría los niños realizaron correctamente la actividad y contabilizaron las bananas, solamente Kiran y Kalel no realizaron el trabajo debido a que se encontraban jugando. Después llegó la hora de educación física y trabajaron la psicomotricidad gruesa “todas aquellas acciones que realizamos con la totalidad del cuerpo como caminar, correr, saltar, girar, … y para las que se requiere el control de nuestro cuerpo en relación a sí mismo y con los objetos y el espacio, así como la coordinación de las diferentes extremidades del cuerpo manteniendo el equilibrio” (Fuentes, 2016) trabajaron con rollos de cartón, moviéndolos con diversos movimientos. Ya que los niños llegaron al salón fueron al comedor y cuando terminaron ensayaron su baile de primavera y después salieron a recreo donde jugaron con sus juguetes. Cuando entramos nuevamente al salón seguimos jugando al circuito matemático, y a pesar que a los niños les llamó la atención algunos se encontraban muy inquietos, pero todos trabajaron y emplearon el conteo. Ya que visualicé que no me alcanzaría de tiempo para el rompecabezas de la tortuga, decidí encargarlo de tarea, con la condición de que el niño lo armara con sus padres y ellos le contaran acerca de ése animal, hubo disposición para hablar por parte de los padres de familia. La docente me indicó que le gustaron mis actividades y que notó mejoría en mi práctica, pero que debía emplear más estrategias para centrar la atención de los niños. Respecto a éste día el aprendizaje esperado fue “Usa y nombra los números que sabe, en orden ascendente, empezando por el uno y a partir de números diferentes al uno, ampliando el rango de conteo” El cual ya había trabajado anteriormente y nuevamente considero que fue exitoso, debido a que en todas las actividades los niños fueron capaces de aplicar el conteo, además el realizarlo mediante diversos propósitos fue de gran ayuda para ellos y gracias a la improvisación no hubo alguna actividad sin cumplir. Como alternativa para mejorar mi práctica creo que debo buscar alguna dinámica para cuando el grupo se distrae o está muy inquieto, además estar siempre centrada y mentalizada en lo que se va a trabajar para no olvidar el material necesario.
2° SEMANA DE PRÁCTICAS (12 DE MARZO AL 16 DE MARZO DEL 2018) DÍA 1: 12 DE MARZO DEL 2018 Ingresé temprano a la institución para recibir con gusto a los niños de primero, después pasamos a formarnos a la plaza cívica para hacer honores a la bandera, los niños se mantienen en orden y cantan cuando deben de hacerlo, ya que los honores terminan la directora entrega el banderín de asistencia y de higiene, y después indica el orden en el que deben pasar los alumnos a sus respectivos salones. Ya en el salón les pedí que se acomodaran en las colchonetas y les pregunté quién había hecho la tarea, y para mi sorpresa la mayoría la había hecho, me contaron que era una tortuga el animal misterioso, y aunque hicieron la tarea, no les contaron mucho sobre la tortuga. No obstante me interesaba conocer sus saberes previos y les pregunté ¿qué conocen de la tortuga? ¿Dónde la han visto? ¿Saben que es lo que puede hacer? ¿Alguien ha tenido en su casa? ¿Saben cuánto tiempo viven? ¿Saben cuántos huevos pueden tener?, los niños sólo se limitaron a contestarme algunas de sus características físicas y anoté las respuestas en el pizarrón. Le comenté a los niños que la tortuga ha evolucionado a través de la historia y que desciende de algunos dinosaurios, mostré las tarjetas que conformarían la línea del tiempo y le dije a los niños que cada una contenía un problema que debíamos resolver para conocer el lugar indicado de esa tarjeta, una vez que resolvimos las operaciones colocamos las tarjetas y pedí que los niños observaran las características de las imágenes y me dijeron que sólo algunas tenían caparazón y otras picos. Después les comuniqué que asistiríamos a la biblioteca, que debíamos cuidar el mobiliario y los libros, que nuestra tarea era buscar alguna tortuga en los libros de ahí y que una vez que terminaran de usarlos los colocaran en su lugar. Nos formamos y nos dirigimos a la biblioteca donde los niños buscaron imágenes de tortugas, sólo unos cuantos encontraron a una tortuga, como Iker, Oasis, Denisse entre otros, en sí había muy poca información ya que solamente en un libro mencionaba que nacían de un huevo. Una vez que el tiempo terminó los niños recogieron los libros y pasaron al salón para comer su refrigerio, la única que tenía boleto y no quiso asistir fue Romina porque no tenía hambre.
Después los niños se sentaron en sus sillas y les repartí la hoja que contenía el laberinto de tortuga, en el cual lo niños debían encontrar el camino correcto y colorearlo, solamente hubo dos niños que lo realizaron correctamente André e Iker, los demás colorearon todos los caminos, excepto Kiran quién no trabajó y ni siquiera quiso sentarse en su silla. Se llegó la hora de recreo y salimos a la guardia correspondiente “lapso de tiempo en el cual los escolares realizan espontáneamente actividades recreativas por gusto y voluntad propias y que merecen una esmerada atención por parte de los maestros de la institución (Álvarez, 2013)”, en esta ocasión nos tocó cuidar el área del arenero, no sucedió algún problema sin embargo sí le dije a algunos niños que no sacaran la tierra fuera del arenero o que en la resbaladilla solamente subieran de uno por uno. Después de que terminó el recreo, ingresamos al salón y enseguida nos dirigimos al salón de música donde los niños ensayaron para el festival de primavera, después los padres de familia los recogieron a la hora de salida. La docente comentó conmigo que debía de cuidar que los niños colocaran las cosas en su lugar y hacer énfasis en las reglas del salón para que no se lastimaran alguna parte de su cuerpo, lo cual sí hacía. El aprendizaje esperado “Usa procedimientos propios para resolver un problema” a mi parecer se encuentra en proceso debido a que no todos los niños son autónomos respecto a ello, sin embargo las actividades de este día cumplieron su propósito. Para mejorar mi práctica me sugiero apartar a tiempo los espacios escolares como la biblioteca, debido a que ni siquiera tenía idea de donde se localizaba y aun así lo planee.
DÍA 2: 13 DE MARZO DEL 2018 Acudí puntualmente al salón y aproveché para pegar en el pizarrón la lámina de la morfología de la tortuga, mi planeación y así mismo esconder los huevos de tortuga, recibí en la entrada a los niños y les pedí que tomaran asiento en las colchonetas, después de que les di una introducción de lo que haríamos ese día pedí que se pusieran de pie y formamos un circulo para saludarnos con las partes del cuerpo. Una vez que terminamos, pasaron al pizarrón a observar la lámina y platicaran al grupo lo que observan comentaron algunas partes y yo mencioné las que faltaron. Les pregunté sí conocían a algún animal con características similares y en qué nos parecíamos nosotros a ellas, comentaron que en que teníamos ojos, nariz, etc.
Luego les leí a los niños el problema matemático de Carla y sus tortugas, el cual por sí solos no pudieron resolver así que lo resolvimos entre todo el grupo. Los niños querían ir al baño así que llevé a todo el grupo y ya que regresamos continúe contándoles el cuento “la tortuga olvidadiza” una vez terminado el cuento los niños debían encontrar los huevos perdidos de la tortuga e introducirlos en un frasco. La actividad fue interesante para los niños, contamos los huevos y según sacaba algunos también los contaban. Enseguida los niños fueron al comedor y ya de regreso ensayaron para el festival de primavera, cuando terminaron asistieron a educación física y jugaron con aros, al final hicieron un tren con todos los aros lo cual les gustó mucho aunque difícilmente Kalel y Kiran se mantenían dentro de. Los niños salieron a recreo y nosotras asistimos al segundo día de guardia en el área del arenero, donde no se suscitó problemática alguna, ya de regreso en el salón expliqué que jugaríamos a la perinola con palos que simularían los huevos de tortuga, sin embargo al visualizar que no se comprendió la actividad y que se encontraban inquietos, cambié la actividad a “salvemos los huevos” donde diez de los niños tenían un globo y debían cuidar que no se lo quitaran, al principio algunos niños lloraron porque no tenían globo pero después todos estaban contentos y para finalizar contamos los huevos salvados y los robados introduciéndolos en una bolsa de celofán, después les pregunté qué actividad les había gustado más y me comentaron que la búsqueda de huevos. Se dieron las 12:00 y los niños recogieron las colchonetas ya que habían llegado sus padres, nos despedimos y me quedé platicando con la docente Minerva. Hablamos de que le habían gustado mis actividades, y me había visualizado más segura frente a grupo. El aprendizaje a favorecer fue “Comprende problemas numéricos que se le plantean, estima sus resultados y los representa usando dibujos, símbolos y/o números” y creo que se logró pero no en su totalidad debido a que se encuentra en proceso, ya que algunos niños por cuenta propia aún se les dificulta resolver algún problema matemático y sobre todo representarlo, sin embargo pueden comprenderlos. Puedo mejorar mi práctica con el empleo de otros materiales, por ejemplo apoyos iconográficos o incluso realizar un performance a través del cuento para que los niños se muestren más atentos.
DÍA 3: 14 DE MARZO DEL 2018 El miércoles al ingresar al aula de clases, coloqué en el pizarrón la lámina de los tipos de tortugas, recibí a los niños con alegría y entusiasmo como siempre.
Una vez iniciada la mañana de trabajo les pregunté a los niños ¿Sabían qué existen diversos tipos de tortugas? ¿Qué creen que comen cada una de ellas? Después les mostré la lámina y les hablé de ella un poco, me dijeron que les gustaría conocer a la más grande pero después dijeron que a la de tierra. Se sentaron en las colchonetas y les conté el cuento de la tortuga turuga, al final los cuestioné acerca del cuento y sólo unos cuantos respondieron correctamente, comentamos algunas problemáticas y ellos me dijeron que debía hacerse según la técnica de la tortuga. Los niños asistieron al comedor y otros se quedaron en el salón, después de que terminaron, ensayaron el baile de primavera, y seguí con las actividades planeadas. Le repartí vasos y tapas a cada equipo y un dado, sin embargo al momento de hacer la actividad los niños jugaban con las tapas y se disputaban por el dado, así que decidí hacer la actividad grupal y cambiar un poco la dinámica, jugamos a la papá caliente y el que se quemara debía lanzar el dado y colocar el numero indicado de fichas dentro del vaso para simular el alimento de la tortuga, los niños se mostraron más interesados y activos, se realizaron sumas y restas, después de ello, el ultimo niño quemado nos contó un chiste y salieron a recreo. Acudimos a la guardia en el arenero y los niños empezaron a jugar con las llantas de ahí, pasó el tiempo de recreo y regresamos al salón. Los niños se sentaron en las colchonetas, mientras yo leía adivinanzas para encontrar el alimento de las tortugas “grillos” los alumnos escucharon atentamente para encontrarlos, aunque en ocasiones los encontraban antes de leer la adivinanza y se disputaban por ellos, sin embargo una vez que terminaron de encontrarlos, los pegamos en el pizarrón simulando frascos y realizamos adiciones y sustracciones a los frascos mediante el empleo del conteo en cada acción. Al final realizamos una síntesis de lo visto. Sus padres llegaron por ellos y les pedí de favor que se llevaran su bata para que el jueves asistieran con ella porque pintaríamos los envases de leche, accedieron con gusto los padres. Pienso que el aprendizaje esperado de este día “Explica qué hizo para resolver un problema y compara sus procedimientos o estrategias con los que usaron sus compañeros” se encuentra en proceso, ya que sí son capaces de explicar sus procedimientos pero al momento de comparar se les dificulta entender las diferencias de estos. Quizás mejoraría mi práctica al visualizar desde la planificación el acomodo de equipos, ya que usualmente los niños los forman con quienes tienen más convivencia.
DÍA 4: 15 DE MARZO DEL 20187 Inicié la jornada cantando el coro del “baila baila” para que los niños se movieran un poco, después que estaban en sus lugares les conté la fábula de la liebre y la tortuga, les pregunté ¿por qué ganó la tortuga y no la liebre? ¿Qué hizo mal la liebre y por qué? ¿Qué harían en el lugar de la liebre? Escuché las opiniones de los alumnos y les expliqué una recta numérica sobre la carrera de la fábula en el pizarrón. Les dije que nosotros haríamos una parecida y que debíamos pegar a la tortuga en la meta, mientras que a la liebre en el número cuatro, pedí a algunos niños que me ayudaran a repartir el material. En su mayoría los niños contaban los saltos de la liebre y de la tortuga, pero sólo uno cuantos colocaron a las pegatinas en el lugar correcto, entre ellos fueron Sofía, André, Oliver y Tadeo. Kiran no quiso trabajar nuevamente. El grupo se encontraba inquieto así que jugamos algunas veces a “la olla de arroz” lo cual les llamó bastante la atención y centró su atención. Se llegó la hora del refrigerio y los niños asistieron al comedor, de regreso les solicité que escogieran alguno de los objetos que querían realizar y anoté las listas en el pizarrón, entrando de recreo después formaron equipos y cada uno pintó su bote de leche. Debido a que algunas actividades se alargaron más de lo que pensaba no fue posible mostrar la tortuga a los niños, y solamente la docente y yo repartimos los botes de leche a los niños con su nombre y hablamos sobre la tortuga. Sus padres llegaron por ellos y les recordé que debían traerlos con su bata para que no ensuciaran su uniforme, la jornada llegó a su fin y la única observación que me hizo la docente fue la de la actividad de las rectas numéricas, me sugirió que para la siguiente intervención solamente trabajara una recta y más grande para que los niños se centren en una sola cosa. El aprendizaje de ese Jueves fue “Usa procedimientos propios para resolver problemas” y aunque ya había sido trabajado considero que se encuentra en proceso aún porque aquel día no se cumplieron con todas las actividades planeadas y fueron pocos los niños que realizaban de manera autónoma los procedimientos. Para mejorar considero que faltó limitar el espacio de las rectas, y mostrar un apoyo iconográfico en el pizarrón para que fuera el propósito mejor entendido.
DÍA 5: 16 DE MARZO DEL 2018 Por la mañana realizamos las actividades del día anterior, armamos el ciclo de la tortuga entre todo el grupo y les mostré a la tortuga de tierra que por cierto yo tenía en casa, la coloqué en un terrario y los niños se acercaban a observarla, mientras yo les hacía preguntas como ¿qué conocen de la tortuga? ¿Dónde la han visto? ¿Saben que es lo que puede hacer? ¿Alguien ha tenido en su casa? ¿Saben cuánto tiempo viven? ¿Qué tipo de tortuga es? ¿De qué se alimenta? Los niños respondían correctamente y estaban emocionados por el animal. Debido a que el tocarla sin protección puede traerles algún tipo de enfermedad, no permití que la tocaran, siguieron observándola y después les di una pequeña introducción de lo que haríamos aquel día. Enseguida pregunté a los alumnos algunos cuestionamientos acerca del dinero ¿dónde usamos el dinero? ¿Para qué sirve? ¿Cómo son las monedas? Contestaron que lo usábamos en las tiendas que servía para comprar algo y que eran de forma circular. Mostré las monedas en grande y les pregunté sí las conocían y dijeron que sí. Pedí que pasaran a observarlas de cerca sin embargo llegó la hora del refrigerio y después la de educación física y ya que el patio se encontraba ocupado, les dieron clase en el salón de música, trabajaron con pelotas y aros simulando una canasta de básquetbol, los niños se divirtieron bastante y ya una vez acabándose la clase, salieron al ensayo general del festival de la primavera. Cuando regresaron al salón inmediatamente salieron a recreo. Al regresar les repartí sus monedas y observé que se estaban distrayendo con las cajas registradoras así que decidí guardarlas y en vez de eso yo les vendería los productos, formaron una fila para comprar lo que requerían, la docente y yo les repartimos bolsas para que guardaran lo que compraran. Cada uno compraba lo que necesitaba y pagaba el precio de cada cosa y de igual manera identificaban las monedas, debido a que no todos los niños alcanzaron a comprar, los padres se acercaban con sus hijos y compraban lo necesario para sus objetos. Todos los niños participaron con sus padres, y por lo tanto se encargó que de tarea ayudaran a sus hijos a construir los objetos elegidos (cámara, celular, camión o cohete) Ese día me quedé en el jardín evaluando a los niños según unas rubricas individuales, con base a las evidencias de desempeño que los niños realizaron durante las dos semanas. Ya que terminé me despedí de la docente y agradecí la atención brindada. El aprendizaje esperado fue “Reconoce el valor real de las monedas; las utiliza en situaciones de juego” el cual considero fue exitoso aquel día debido a que todos los niños que asistieron emplearon el conteo y sus monedas en juego, y por sencillo que fue para ellos significó algo más, porque al ser atendidos decían
“Buenas tardes señorita” “gracias” preguntaban el precio como si de una tienda real se tratase, y el acercamiento con padres de familia, facilitó que algunos niños se sintieran más seguros al observar que se involucraban en lo que ellos hacían. Para mejorar en una futura práctica docente consideraría el incluir en más actividades a padres de familia, debido a que de esa manera los niños se sienten en un ambiente más familiar, confiable y seguro, y así mismo padres de familia observan de manera directa el aprendizaje de sus hijos.
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