Belleza

Hace algunas décadas comenzaron los estudios sobre los beneficios del retinol (vitamina A) y la vitamina E en los tratamientos de belleza. Las propiedades de ambas sustancias han sido investigadas ampliamente, y hoy forman parte de las rutinas y planes, desde los más básicos hasta los más sofisticados, de la industria cosmética.

En lo profundo de la selva

A principios del siglo XXI, unas profesoras de la UCV descubrieron que el fruto de un árbol silvestre poco conocido, llamado palo de nuez (Caryodendron Orinocense), abundante en nuestra selva nublada, es rico en retinol y vitamina E. La nuez de cacay, como se le conoce a este fruto que se cosecha una vez al año, no había despertado tanto interés entre los nativos de la zona, pues poseía poco valor comercial. Sin embargo, en 2015, el venezolano Alberto White, quien trabajaba en Estados Unidos en el área de banca y finanzas, vio el enorme potencial que ambos ingredientes tienen en la industria cosmética internacional, y decidió regresar al país con un solo objetivo: formalizar e industrializar el aceite de cacay para su exportación y como signo de orgullo venezolano en el exterior. Así nace Cacay Pure, la primera y única empresa venezolana dedicada a la extracción y comercialización del aceite de cacay. El aceite es 100% orgánico. En sus inicios, Alberto comenzó a trabajar de la mano con agricultores locales. Cuando llegó, estos agricultores vivían en altos niveles de pobreza y con pocas oportunidades económicas. Hoy en día, la producción de cacay les proporciona una fuente de ingresos estable con la cual no contaban. Son cien los agricultores que junto a sus familias se encuentran cultivando y cosechando cacay con Cacay Pure. Incluso, la empresa respeta el principio de FairTrade, pagando en divisas y a precio internacional el valor del fruto.

Compromiso con el ambiente

Preocupados por el creciente aumento de deforestaciones en selvas venezolanas, para hacer otros cultivos como el cambur y para obtener leña para cocinar, Cacay Pure comenzó un proyecto con vida propia llamado MyCacayTree. El único objetivo de esta iniciativa es replantar –en conjunto con las comunidades– las zonas deforestadas con árboles de cacay. El proyecto estima llegar a 5.000 nuevos árboles para este 2021. La empresa firmó un acuerdo por el cual se compromete a plantar un nuevo árbol de cacay por cada producto vendido. Incluso, los clientes pueden nombrar el árbol nuevo que se va a sembrar por su compra. Hoy en día la compañía se enorgullece en afirmar que gestiona un proyecto de triple impacto en Venezuela. Es una empresa lucrativa, con efecto en las comunidades donde trabaja y el medio ambiente que habita. A su vez, Cacay Pure exporta el 75% de su producción, siendo un ejemplo de esa Venezuela trabajadora, meritocrática y grandiosa, creyente en el principio por el cual se demuestra que la gran ventaja competitiva del país en el mundo es el desarrollo sostenible de sus materias primas.

El aceite de Cacay se destaca por tener una alta concentración en retinol, sustancia nutritiva para la piel, que ayuda a reducir arrugas y disminuir las líneas de expresión, y una gran cantidad de vitamina E que funciona como antioxidante y estimula la renovación celular