6 minute read

Diana Droulers

Next Article
Empresarial

Empresarial

LAGUNITA • ENTREVISTA

Diana Droulers Una vida entre el derecho y el arbitraje

Advertisement

En estas líneas conoceremos más sobre una mujer que ha sabido aportar la visión multicultural en sus distintas labores y nos acompaña en la compleja tarea de formar parte de nuestra Junta Directiva

Textos y fotos: Anabella Capiello

Diana Droulers es Abogada de la UCAB, CEO de Dispute Resolution Data y árbitra internacional. Es miembro de la Corte Internacional de Arbitraje, presidente de la Asociación Venezolana de Arbitraje, vicepresidenta del Club Español del Arbitraje y de la Alianza Francesa en Venezuela. También es miembro de la junta directiva del Arbitral Women’s Group.

Desde hace 42 años está casada con José Jimeno Hernández Urdaneta con quien tuvo dos hijos, Jimeno José y Cristina Elena. Actualmente integra la Junta Directiva de Lagunita Country Club como vicepresidenta. ¿Qué la motivó a asumir el cargo de vicepresidenta de la Junta Directiva de Lagunita Country Club? –Un grupo de gente interesada me contactó para conformar una Junta Directiva de consenso, cuyo objetivo es interponer los intereses del club por encima de todo. Creo que fue mi experiencia en el tema de resolución de conflictos lo que los motivó a hacerlo. Yo no estaba nada convencida, porque si uno asume compromisos es para cumplirlos y yo siempre tengo la agenda full. Pero la verdad es que, bajo el liderazgo de Miguel, me convencieron y hemos formado un equipo multidisciplinario que está enfrentando todos los retos que implica administrar una asociación civil, un club social y deportivo como el nuestro. En este corto tiempo que lleva la actual Junta Directiva ¿Cómo considera que se ha desarrollado la gestión? –La gestión es un trabajo increíble porque uno no se imagina lo que conlleva la administración de un club. El apoyo y la profesionalidad del equipo gerencial es lo más importante. La Junta Directiva no debe estar involucrada en cada detalle, eso es oficio del plantel profesional del club. La Junta debe dirigirlo y planificar hacia dónde queremos ir, qué deseamos tener como club y qué debemos hacer para lograrlo. Espero que esto lo podamos conquistar muy pronto.

“El reto de ser padres es quizás el más complejo de todos, es de las pocas cosas que nadie le puede enseñar a uno. Es un reto que se nutre de aprendizajes constantes y que uno asume en pareja, por lo cual, es más complicado aún”

LAGUNITA • ENTREVISTA

¿Cuál es la meta que se propone cumplir como miembro principal de la Junta Directiva? –Mejorar los procesos internos para que tengamos una administración de todas las áreas del club que sea coordinada, eficiente y nos permita un manejo racional de los recursos en aras de prestar los servicios debidos a los miembros. ¿Cuál considera que ha sido el reto más complejo que ha enfrentado en su vida? –Los retos en la vida son de diversas índoles dependiendo de la época que uno esté pasando. El reto de ser padres es quizás el más complejo de todos, es de las pocas cosas que nadie le puede enseñar a uno. Es un reto que se nutre de aprendizajes constantes y que uno asume en pareja, por lo cual, es más complicado aún.

Los retos intelectuales y profesionales son asumidos con conciencia, sabiendo que uno se está enfrentando a dificultades que le entusiasma resolver, abriendo horizontes y navegando en aguas desconocidas, pero siempre con energía y mucha curiosidad. Volver a la Universidad luego de 10 años de retirada fue un gran reto, mayor que mis compañeros y casada con hijos, sin posibilidad de trabajar como ellos. Asumir cargos en la administración pública fue otro reto.

Quizás el mayor fue montar el Centro de Arbitraje, insertarlo en el mundo internacional del arbitraje y por ende actuar en ese ámbito me impulsó hacia actividades que requieren un enorme esfuerzo y que a veces son difíciles de compaginar con la vida de hogar. Siempre he tenido mucho apoyo, tanto de mis padres, quienes me enseñaron que podemos hacer todo lo que queramos y de mi esposo, que siempre me ha acompañado a pesar de su pesada carga de trabajo y su intensa actividad gremial (hoy en día ya bastante retirado) y la paciencia de mis hijos. Es por ello que he logrado hacer las cosas que hago.

¿Cuál ha sido el mayor cambio en su vida personal desde que asumió el compromiso con el club? –Que el club se ha convertido en parte de mi oficina en vez de ser solo un lugar de esparcimiento. Es mucho el tiempo que nos ocupa, son tiempos difíciles para tratar de volver a una normalidad luego de la pandemia. Creo que los miembros no apreciamos la labor de quienes dedican su tiempo y esfuerzo por el bien de todos. ¿Participa en alguna disciplina del club? ¿Cómo ha sido su trayectoria en este? –De pequeña montaba caballo, aprendí a jugar golf, y lo que más hacíamos era disfrutar de la

piscina y el parque. Siempre fuimos miembros del club. Yo me acuerdo de la antigua casita y de gente que ya nadie menciona, como Chuchín Marcano, quien jugaba con mi papá. Luego, nosotros nos fuimos a vivir en el exterior, pero todos los veranos veníamos de vacaciones y la pasábamos en el club. Hoy en día juego golf con las damas y con parejas de amigos. ¿Cómo ha sido la relación de trabajo con los otros miembros de la Junta Directiva? –Formamos un buen equipo. Quienes no nos conocíamos, ahora trabajamos todos halando la carreta hacia el mismo sitio, que es el orden y la eficiencia. Los grupos interdisciplinarios suelen lograr muchas cosas porque tienen puntos de vista muy diversos con respecto a los temas y lograr acuerdos no siempre es fácil, pero los que se logran suelen ser bien sólidos. ¿Qué valores suyos podría compartir o añadir a la institución? –Creo que más que valores es un tema de aportes. Aporto mis conocimientos a través de mi trabajo. Me caracteriza la calma y ser una persona directa y práctica.

¿Cuáles son sus tres lugares favoritos del club? –El campo de golf, debajo de La Ceiba y la vista de las caballerizas. Esa es nueva, tenía mucho tiempo que no iba y ahora me encanta. El hoyo 19 siempre es agradable. ¿Cuáles son sus expectativas como vicepresidenta de la Junta Directiva en lo que resta del año? –Mi función, según los estatutos, es suplir al presidente en lo que haga falta. Miguel y yo trabajamos muy bien, de manera que mi expectativa es poder hacer lo que haga falta, dentro de mi capacidad, para que logremos los objetivos que nos hemos planteado como Junta Directiva. ¿Cómo maneja su vida personal y laboral con todas sus tareas dentro de la Junta Directiva? –Con dificultad. A veces no me alcanza el tiempo, me la paso trabajando de noche, y menos mal que hoy en día lo hago en casa, pero se me acumula todo siempre. Presido la Asociación Venezolana de Arbitraje, soy vicepresidenta de la Alianza Francesa y pertenezco a tres juntas en el exterior. Además, ya no quiero que todo sea trabajo, juego golf y cartas, tengo otros hobbies y muchos amigos, me encanta cocinar y recibir en casa y, además, viajo mucho para cumplir con compromisos. ¿Alguna frase que quiera compartir? “Uno no se fija en lo que ya hizo, uno solo puede ver lo que falta por hacer”. Marie Curie

“Formamos un buen equipo y quienes no nos conocíamos ahora trabajamos todos halando la carreta hacia el mismo sitio, que es el orden y la eficiencia”

This article is from: