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El Ángel de la Independencia

El Monumento a la Independencia o Columna de la Independencia conocido coloquialmente como El Ángel o El Ángel de la Independencia, se encuentra en la Ciudad de México, en la glorieta localizada en la confluencia de Paseo de la Reforma, Río Tíber y Florencia. Inaugurado en 1910 para conmemorar el Centenario de la independencia de México por el entonces presidente de México, Porfirio Díaz. Es uno de los monumentos más emblemáticos de la urbe y usado actualmente como un icono cultural de la Ciudad de México.

Realizado como una columna honoraria rematada con una estatua de la Victoria Alada sosteniendo una corona de laurel y una cadena rota de tres eslabones, esta columna se levanta a su vez sobre un pedestal escalonado completado por diferentes estatuas e inscripciones alegóricas a la independencia de México.

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En 1886, a veinticuatro años de la celebración del centenario, se convocó un concurso internacional para construir un monumento a la independencia, pero ahora en una de las glorietas del Paseo de la Reforma, mismo que ganó la firma estadounidense Cluzz and Shultze de Washington, D.C. En enero de 1887 el gobierno resolvió posponerlo, por lo que vendieron al gobierno sus derechos, retirándose de la construcción y quedando sin construir al final.

En 1891 la entonces Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, a cargo de Francisco Z. Mena, se encargó de la obra, pero hasta 1900 no se nombró a Antonio Rivas Mercado como encargado del proyecto, quien designó al italiano Enrique Alciati como encargado de realizar las esculturas y bajorrelieves, y a Roberto Gayol como encargado de la obra civil.

Durante el gobierno de Porfirio Díaz comenzaron las obras de cimentación y la primera piedra del monumento fue colocada en una ceremonia el 2 de enero de 1902, colocando dentro de ella un cofre dorado con el acta de independencia de México y una serie de monedas de cuño corriente de la época. Empero, en mayo de 1906, cuando ya se habían construido las bases de hormigón y colocado unas 2.400 piedras con una altura de 25 metros, se hizo notorio el hundimiento de uno de los lados del monumento, por lo que se creó una comisión de estudio compuesta por los ingenieros Guillermo Beltrán y Puga, Manuel Marroquín y Rivera y Gonzalo Garita, los cuales

Para reiniciar la obra se nombró una Comisión Directiva, integrada por los ingenieros Guillermo Beltrán y Puga, Manuel Marroquín y Rivera y el arquitecto Manuel Gorozpe, quedando al cuidado de la obra artística Antonio Rivas Mercado. Estos trabajos se iniciaron el 13 de junio de 1907, aprovechando la demolición para hacer los estudios de suelo necesarios para calcular y construir los nuevos cimientos. Para estos se usó el método de pilotes de hormigón con punta, que se hincaron con un martinete de vapor que enterraba los pilotes con un émbolo de una tonelada de peso. Esta fue una de las primeras obras en la ciudad con este tipo de cimentación, ya que hasta entonces se utilizaban pilotes de madera, que no alcanzaban mucha profundidad. El monumento tuvo un costo de 2 millones 150 mil pesos de la época. El 16 de septiembre de 1910, el presidente Porfirio Díaz encabezó la inauguración.

En 1923 se iniciaron los trabajos de adaptación del interior del pedestal de la columna y la construcción de tres nichos para albergar en urnas los restos de diferentes héroes de la independencia que se trasladaron desde la Catedral Metro politana de la ciudad de México y de otros puntos del país en 1925, por lo que se convirtió además en un mausoleo.

El 6 de abril de 1929, el presidente Emilio Portes Gil manda construir por decreto en la cara poniente del pedestal un nicho para una lámpara votiva a gas, la cual debería permanecer siempre encendida en recuerdo de los héroes cuyos restos están ahí depositados. Esta flama la inauguró el presidente Portes Gil, el 12 de mayo de 1929, quedando la obra a cargo del Ing. Federico Mariscal.

El 28 de julio de 1957, un terremoto azotó a la ciudad de México y la Victoria Alada cayó del pedestal, quedando destrozada al pie del mismo, por lo que debió restaurarse el monumento, quedando los trabajos bajo el mando de Ernesto Sodi Pallares, quien reforzó el interior de la columna con placas de metal y reemplazó la escalera de piedra del interior por una metálica, además de construir una nueva victoria alada, la cual fue colocada en la cima. De la antigua solo está expuesta al público la cabeza aplastada en la entrada del Archivo Histórico de la Ciudad de México. Fue reinaugurado el 16 de septiembre de 1958.

En 1985, luego del terremoto de la ciudad de México, quedó dañada la estructura y varias de las obras artísticas del monumento, pero bajo la dirección de Ramón Bonfil se llevaron a cabo obras de restauración, entre las que se cuenta la construcción de las gradas oriental y occidental que llegan hasta la calzada.

DESCRIPCIÓN DEL MONUMENTO

Inspirada en las columnas honorarias de los romanos, como la Columna de Trajano, es muy similar a otros monumentos modernos como el dedicado a la victoria o columna de la victoria en Berlín, Alemania. La altura de la columna incluyendo el ángel es de 45m, más 1,5 m que tienen las gradas construidas en 1910 y 3m adicionales que tienen las gradas construidas en 1986, para un total de 49,5 m, y que muestran el hundimiento de la ciudad. Este monumento tiene para fines prácticos una orientación oriente–occidente.

LA VICTORIA ALADA

Sobre todo se encuentra una estatua hueca de bronce, que representa a la Victoria Alada en actitud de vuelo con las alas abiertas, con el brazo derecho extendido y sosteniendo una corona de laurel en actitud de colocarla sobre la cabeza de los héroes; el brazo izquierdo extendido hacia abajo y atrás sos teniendo en la mano una cadena rota de tres eslabones, símbolo de los tres siglos del virreinato y la dependencia política de España. Toda ella revestida por hoja de pan de oro. A esta estatua se le da en específico el nombre popular de Ángel o el Ángel de la Independencia.

LA COLUMNA

Bajo la Victoria Alada hay una caseta con una puerta al oriente que da acceso a una terraza de no más de 0,80 m, que la recorre perimetralmente y está resguardada por un barandal de bronce repujado que antaño tenía escudos de bronce en las cuatro caras con las iniciales R.M. “República Mexicana”. Un capitel formado por cuatro águilas con las alas extendidas, volutas y hojas de acanto en los cuatro lados sostiene a este mirador.

Bajo estas empieza la columna con 2,90 m de diámetro, en cuyos lados están esculpidas guirnaldas de encino, enlazadas por anillos que circundan la columna y medallones florales. En dos de esos anillos se esculpieron los nombres de ocho próceres de la independencia en el lado suroriente, los de Iturbide y Allende, en el surponiente los de Mier y Terán

y Galeana, al norponiente los de Victoria y Rayón y al nororiente los de Matamoros y Aldama. Las guirnaldas nacen de cuatro cabezas de león esculpidas en el anillo más bajo. Bajo este, en el lado oriental, se encuentra un bajorrelieve que representa la fama que lleva una trompeta. Al pie de la columna se hallan dos coronas: una, que simula la piel de una serpiente, y bajo esta una de laurel.

EL PEDESTAL

En el oriente del pedestal, se ubica en su parte superior un grupo escultórico llamado «Apoteosis del Padre de la Patria» compuesto por tres figuras, dos de ellas figuras simbólicas. De pie se ubica, enarbolando una bandera mexicana, el cura Miguel Hidalgo, al sur sentada con un libro y una pluma la musa de la Historia, al norte en actitud de levantarse y ofreciendo a Hidalgo una corona de laurel se encuentra La Patria. El pedestal de base cuadrada tiene en los extremos cuatro estatuas a un nivel un poco inferior que la de Hidalgo, correspondiendo a José María Morelos la del suroriente, a Francisco Xavier Mina la del surponiente, a Nicolás Bravo la del norponiente y a Vicente Guerrero la del nororiente.

Bajo estas, en las caras norte y sur del pedestal se encuentran dos rosetones que permiten la entrada de luz al interior del monumento. En cada cara se muestran en bajorrelieve dos fasces romanos, además de hojas de encino y laurel que representan la fuerza y la victoria, respectivamente.

En el descanso del primer cuerpo del pedestal, del lado de oriente, se encuentra la escultura de un león macho que es conducido por la figura de un genio (un pequeño niño), que simboliza la fuerza y la inteligencia, respectivamente. Todo el borde de este fue decorado por un arreglo llamado escocia, compuesto por hojas. En los extremos de este se ubican cuatro pedestales, sobre los cuales hay cuatro figuras sedentes (sentadas), las cuales corresponden a La Paz la del suroriente, a La Guerra la del surponiente, a La Justicia la del norponiente y a La Ley la del nororiente.

En la cara poniente, se ve el nicho con la llama votiva. Al oriente se encuentra la entrada al interior del monumento, cuya puerta de hierro y bronce tiene un bajorrelieve de un busto con un gorro frigio, cuyo modelo fue la hija menor del arquitecto Rivas Mercado llamada Alicia. A su costado sur hay un bajorrelieve con figuras de origen grecorromano, todas relacionadas con la diosa Atenea, que era la protectora del pueblo romano, además de los símbolos de la república romana como un hato de flechas, un hacha y un bastón de mando con la inscripción latina SPQR (Senatus Populusque Romanus – El Senado y el Pueblo Romano). Del lado norte, otro bajorrelieve con figuras mexicanas, aunque bajo interpretación europea, un Escudo Nacional y la efigie del dios Quetzalcoatl. A los costados de estos y ocultos, un escudo nacional al sur y un escudo de Atenea al norte.

LAS ESCULTURAS

Originalmente todas las esculturas del monumento deberían ser de mármol, pero solo las más altas lo son. Las de bronce se hicieron inicialmente en México en bloques de yeso, para luego llevarlas a Florencia, Italia, donde se tomaron como base para hacerlas por el método de cera perdida. Las esculturas de mármol se empezaron en Francia con mármol de Carrara para lograr transportarlas con el mínimo de peso a México, donde fueron detalladas.

La escultura llamada comúnmente el Ángel es en realidad una representación de Niké, la diosa griega alada de la victoria y se menciona que la modelo para el mismo fue una secretaria del general Porfirio Díaz llamada Ana María Mazadiego Fernández. Por otro lado, se menciona que las figuras sedentes representan a cuatro diosas griegas: la Ley (Diosa Eunomía), la Paz (Diosa Irene), la Justicia (Diosa Dice) y la Guerra (Diosa Atenea), aunque ninguna de estas tiene los atributos propios de estas diosas, como seria el escudo con la cabeza de medusa en la diosa Atenea y el uso de una lanza en vez de una espada.

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