Vida Diocesana Julio Agosto 2018

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Vida Diocesana Un periódico para la Nueva Evangelización

Diócesis de Sonsón Rionegro - Año 47 - Número 199 - Julio/Agosto de 2018 - 3000 ejemplares - ISSN 2248-8324

Una tierna

visita de

nuestra

Madre Nuestra Señora de Fátima en la diócesis

Fátima en la diócesis Especial

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Especial

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Especial

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50 años Parroquia San Cayetano 100 años Parroquia San Julián


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Nuestro Plan

En camino hacia la

ASAMBLEA DIOCESANA DE PASTORAL “Invito a todos a ser audaces y creativos en esta tarea de repensar los objetivos, las estructuras, el estilo y los métodos evangelizadores de las propias comunidades”. (Evangelii Gaudium n. 33) Por Javier Otálvaro Álvarez, Pbro. Vicario de Pastoral de la diócesis vicariopastoral@diosonrio.org.co Estamos próximos a realizar, una vez más, la Asamblea Diocesana de Pastoral, a la cual están invitados sacerdotes, religiosos, religiosas, seminaristas y laicos de cada una de las comunidades parroquiales e instituciones que hacen parte de nuestra iglesia particular. Esta será una valiosa oportunidad para encontrarnos en la fraternidad, compartir la etapa operativa de esta etapa del plan de pastoral y encaminarnos hacia el cumplimiento de un objetivo común, el cual pondremos en marcha y llevaremos a cabo por medio de la implementación de unas líneas de trabajo, unas metas y unas actividades que nos unifiquen en el quehacer pastoral y nos vayan guiando hacia el deseo de lograr que nuestra diócesis sea renovada en la manera de vivir su vida cristiana. Hemos venido haciendo un camino de preparación que nos ha permitido encontrarnos en distintos espacios con los diferentes agentes de la pastoral, en reuniones y encuentros que nos han conducido a la formulación de unos retos para responder a las necesidades pastorales de nuestro tiempo. Todo esto partiendo de una misión que une la tarea de la Iglesia Universal, la cual bien describía el Beato Pablo VI cuando afirmaba: “…la tarea de la evangelización de todos los hombres constituye la misión esencial de la Iglesia; una tarea y misión que los cambios amplios y profundos de la sociedad actual hacen cada vez más urgentes…” (Evangelii Nuntiandi n.14). Es por ello que nos reafirmamos en la misión de ser una iglesia evangelizadora: Somos la Iglesia de Jesucristo, que peregrina en Sonsón Rionegro, en la fe, la esperanza y el amor; prolongamos la experiencia de Cristo, viviendo su evangelio y extendiendo el Reino de Dios, para que los habitantes del oriente antioqueño conozcan al único Dios verdadero y a su enviado Jesucristo y así puedan anunciarlo a todos los hombres con el impulso del Espíritu Santo. En sintonía con la misión nos hemos planteado un sueño, un ideal en nuestro caminar pastoral, una visión que nos ayude a unir esfuerzos en la tarea ingente de extender el Reino, logrando que cada cristiano pueda tener una experiencia con

Cristo que le ayude a transformar su vida, a renovarla desde lo profundo de su ser. Por tanto la visión hacia la cual queremos avanzar en nuestra tarea pastoral es: En el año 2025, la Diócesis de Sonsón Rionegro, será una Iglesia renovada y desde la vivencia de la fe, logrará impulsar itinerarios de evangelización que conduzcan a la conformación de pequeñas comunidades, dando como fruto una Iglesia dinámica, con esperanza contagiosa y corazón misericordioso, que aporte a la promoción integral del ser humano, por caminos de paz y reconciliación. En esta etapa del plan de pastoral nos hemos trazado como objetivo emprender un camino de renovación, el cual permita avanzar hacia una conversión pastoral, una transformación de los agentes (sacerdotes, religiosos, religiosas, seminaristas y laicos), las estructuras (institucionales, asesoras, de planeación, logísticas y físicas) y el pueblo de Dios (pastoral con grupos poblacionales, con sectores estratégicos, procesos de evangelización y pastoral específica). Es así como nuestro objetivo general es: Renovar la vida cristiana en la Diócesis de Sonsón Rionegro, atendiendo a las necesidades pastorales de nuestro tiempo, a fin de ser mejores discípulos misioneros de Cristo, en comunidades evangelizadas y evangelizadoras. Esperamos que todo este proceso que hemos venido realizando desde la última asamblea diocesana, llevada a cabo el 20 de julio de 2016, contribuya al fortalecimiento de la acción pastoral en la diócesis. Que el fruto del trabajo aportado por las mesas de trabajo en los nueve programas, los comités de las áreas de pastoral y las delegaciones, los aportes del equipo de pastoral, los vicarios foráneos y las reuniones vicariales, permitan encaminarnos hacia una renovación de nuestra iglesia diocesana, a la vez nos impulse a hacer de nuestras parroquias e instituciones unas comunidades evangelizadas y evangelizadoras, que vibren por la escucha, la vivencia y la proclamación del Evangelio “fuerza de Dios” (cfr. Rm 1,16). De esta manera nos encaminamos hacia la Asamblea Diocesana de Pastoral del próximo 15 de octubre del presente año.


Editorial

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¡HAZ SEÑOR QUE COMPRENDAMOS¡ A propósito de la “crisis sacerdotal” Monseñor Alfonso Uribe Jaramillo. Editorial Vida Diocesana, agosto de 1968 25 años de su Pascua (1993-2018) Estas fueron las palabras que reiteradamente expresó S.S. Pablo VI en su homilía a los nuevos sacerdotes, pronunciadas en Bogotá el 22 de agosto de 1968. Tenemos la impresión de que la crisis sacerdotal que aún conmueve a la iglesia obedece fundamentalmente a un concepto muy pobre de la misión sacerdotal. El secularismo que ha destruido tantos valores en la Iglesia ha creado una atmósfera muy densa de desprecio por el Sacerdocio Ministerial, que ha influido negativamente en los seglares y en los mismos sacerdotes. Hoy el ministerio no tiene para muchos el halo de grandeza y dignidad de antes. Se requiere, por tanto, una visión muy profunda de su valor sobrenatural para abrazarlo con amor y vivirlo con gozo en el Espíritu y en actitud constante de servicio desinteresado. Pero esto no se consigue sin la acción iluminadora del Espíritu Santo. Solo la fe puede descubrir los tesoros sobrenaturales y las posibilidades ilimitadas que encierra esta misión. Por eso debemos orar con el Santo Padre, para que el Espíritu de Jesús nos haga comprender lo que quiere decir sacerdote y sacerdote para siempre. Solamente con su luz podremos “entender el efecto sicológico que el carácter representativo de nuestra misión debe producir en nosotros y la doble polarización de nuestra mentalidad, de nuestra espiritualidad y también de nuestra actividad hacia los dos términos que encuentran en nosotros el punto de contacto y de simultaneidad: Dios y el hombre, en una analogía viviente y magnífica contigo, Dios y el hombre”.

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La renovación Espiritual debe abarcar, primero que todo, nuestra mentalidad. San Pablo lo pide a los Efesios y a los Romanos. “No os acomodéis al mundo presente, antes bien, transformaos mediante la renovación de vuestra mente, de forma que podáis distinguir cuál es la voluntad de Dios: lo bueno, lo agradable, lo perfecto”. (Romanos 12, 2). “En Cristo habéis sido enseñados a renovar el espíritu de vuestra mente y a revestíos del hombre nuevo”. (Efesios 4, 23) Solamente con una visión nueva, regalo del Espíritu, podremos comprender el valor y las exigencias de un sacerdocio que los vincula tan profundamente con Cristo y con su Iglesia. El problema de los Apóstoles, antes de Pentecostés, fue el de tener una visión temporalista de su misión: “Señor es ahora cuando vas a restablecer el reino de Israel”, le preguntan momentos antes de su Ascensión. Solamente cuando el Espíritu de la verdad “los llenó” el día de Pentecostés, descubrieron su función profética, santificadora y hodegética y comprendieron que debían ser testigos de Jesús en todas partes. Nos asemejamos mucho a esos Apóstoles cuando aún no habían sido “bautizados con el Espíritu Santo”. Por eso tenemos criterios muy humanos, carecemos de valor y conseguimos muy poco. Ojalá descubramos la causa de nuestra pobreza ministerial y la verdadera solución.

Área Comercial: María Esther Otálvaro. Impresión: Casa editorial La República.

Revisión y diseño: Diócesis de Sonsón Rionegro - Colombia Javier Ocampo Zuluaga. Dirección: Calle 51 # 47- 31 Teléfono: 531 52 52 ext 114 E-mail: vidadiocesana@diosonrio.org.co Imágenes: Web: www.diosonrio.org.co Delegación de Comunicaciones Facebook: www.facebook.com/diosonrio goo.gl/NmJx Twitter e Instagram: @diosonriocol

Asesor General: Monseñor Fidel León Cadavid Marín. Obispo de Sonsón Rionegro. Director: Pbro. John Fredy Córdoba Bedoya. Consejo Editorial: Pbro. Javier Otálvaro A. Pbro. Wilson Botero Serna. Sr. Juan Diego Agudelo Sr. Diego Alfonso Giraldo Sr. Claver David Quintero


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LA PEDAGOGÍA RETADA POR EL TIEMPO

Por Jorge Armando García García, Pbro. Especialista en teología, Magister en teología, Magister en Gestión Humana y organización de empresas Universidad Católica de Oriente Hoy hablamos de un mundo cada vez más exigente y dentro de sus exigencias complicado. Un mundo que no se queda quieto; cada minuto hay cosas nuevas e impactantes; la innovación es uno de los pilares de esos cambios frenéticos. Se pone como un imperativo que aquellas organizaciones que no tengan esa innovación y la sostengan responsablemente en el tiempo, se quedarán “out”, es decir, fuera de la competencia. Una de esas organizaciones que necesita innovar, no solo en este momento histórico, sino a cada momento es la educación. El contacto de la educación con el hombre hace exigente su trabajo. El hombre contemporáneo es cada día más hambriento de conocimiento y no bajo techos y en medio de tableros, sillas y libros, sino a través de caminos que le permitan seguir gozando de los bellos y sanos placeres de la vida sin enclaustrarse. El mundo contemporáneo a nivel de educación sabe que el reto es poderoso. Necesita poner una luz en medio de un mundo que se ve oscuro por las carreras en que vive. El hombre clama y reclama por una

pedagogía que lo forme, pero que en su estructura se vea impresa una innovación que lo enganche, lo convenza y le ayude a progresar. La vida contemporánea lo sabe, la pedagogía también, e intenta a su vez esforzarse por integrar el pasado, pronosticar un futuro y así formar el hombre del presente. El hombre contemporáneo no es un hombre raro, solo que necesita una atención especial por las circunstancias que lo rodean. Una de ellas es la intercomunicación. El mundo ya no se desconecta, es una aldea global donde todo lo que sucede se sabe. Hay flujo de datos que se pueden convertir en información a cada instante y… ¿la pedagogía qué debe hacer? Lógicamente no podrá ir en contra, pero tiene la obligación de hacer que la comunicación no sea cuestión de datos impersonales, prescindiendo del contacto con el otro. La pedagogía alemana del siglo XIX luchó contra el individualismo y hoy se puede caer en él a causa de los aparatos que nos sustraen del ambiente comunitario. La educación debe rescatar lo comunitario y el trabajo en equipo. El hombre debe aprender con la experiencia que: “dos cabezas piensan más que una”.

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Junto a este reto mencionado está el de la sensibilidad y la formación de los sentimientos. Retomando nuevamente la pedagogía alemana, en tiempo del Káiser, la educación intentaba enseñarles a los estudiantes que no todo era razón. Había otros componentes en el hombre que también debían desarrollarse como la capacidad de relación y de ayuda en la comunidad; aprender de su cultura y sus componentes. Esto, hoy más que nunca, es urgente. El uso de los dispositivos ha encorvado al hombre sobre sí mismo, sus ojos están en las pantallas olvidando las necesidades de sus cercanos. Hoy día los jóvenes poco conocen los gestos del rostro y lo que pueden indicar. Están imposibilitados para interpretarlos. La pedagogía debe ayudar a subir la mirada del hombre para que se cruce con las miradas de otros; a volver a usar las palabras a través de la voz, a usar las manos, no para prender o apagar algo y manipularlo, sino para mostrar afecto a través del abrazo, de un tierno espaldarazo que signifique: “tranquilo, todo estará bien”. Algo más con respecto la sensibilidad y al sentimiento que la pedagogía debe tener en cuenta y buscar métodos innovadores que lleven a educar en estos valores, y ese algo más es la exigencia exagerada de los datos demostrables y de los indicadores. Se enseña al hombre a tener archivos fílmicos, fotográficos o textuales para demostrar su trabajo y su producción. Todo debe estar sistematizado y bien organizado. Si no se muestra, no existe. Eso ha vuelto más frías las relaciones y se olvida el hombre de ser hombre. Solo por poner algunos ejemplos: pasa más tiempo en la consulta el médico frente al computador preguntando datos, que lo que puede oscultar al paciente. En las oficinas con atención al usuario, se preocupan más por anotar en el archivo lo que se necesita, que poner atención del por qué de la necesidad de la persona que solicita el servicio. La pedagogía contemporánea debe entender que todo esto es necesario, pero no puede olvidar de formar al hombre en su dimensión social y cultural. Es verdad que la pedagogía tiene mucho por hacer y que cada vez el futuro es más incierto, pero no puede bajar la guardia, ni dejar de hacer su tarea. Es su deber hacer al hombre contemporáneo crítico, hábil técnicamente y socialmente. En palabras de Kant, debe ayudar a que pase de la niñez a la adultez. La pedagogía debe formar un hombre maduro, íntegro, que cuida de sí, de su libertad y de las libertades ajenas.


Familia

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¿Qué pasa en la actualidad con el papel de la familia? Vivimos en una época en la cual se ha ido distorsionando el sentido de familia, los valores que la caracterizan y la importancia que esta tiene. A través del tiempo se ha venido desdibujando el ideal de lo que debería ser la familia. Anteriormente, se concebía como aquella donde los padres expresaban su autoridad o rol a través de reglas y normas, por medio de hábitos y altas exigencias que, aunque en ocasiones no estaban sustentados en argumentos claros para ser trasmitidos, aun así se asumían y se tenía respeto por las figuras de autoridad (padres, abuelos, etc.), por ser estos quienes trasmitían las bases fundamentales y necesarias para mantener una vida en comunidad y promover la adaptación a la cultura. Actualmente, las interacciones entre los padres e hijos ya no suelen estar caracterizadas por la calidad, frecuencia e intensidad de antaño. Se podría reconocer que algunos de los factores más influyentes en estos cambios son: el exceso de trabajo y responsabilidades por parte de los padres, por un lado; la tecnología, el uso excesivo y desorientado de medios de comunicación, por otro. Conduciendo a que la comunicación sea reemplazada por otras formas de relación menos directas y desprovistas de afecto. El contraste entre experiencias anteriores y presentes se refleja en situaciones concretas, como el tiempo para cenar o los espacios para compartir un programa familiar juntos. Tales condiciones amenazan la armonía de las relaciones familiares y representan un desafío que exige volver a los pilares que mantenían unas mejores condiciones en la experiencia familiar. Recuperar el sentido de la función de la familia. Tal como se mencionó anteriormente, el cambio en las dinámicas familiares ha venido variando a través del tiempo. Diversos aspectos como lo económico, lo social, político y cultural, inciden en dicha trasformación. Los padres deben estar en función de múltiples responsabilidades o por asuntos varios se des-responsabilizan de la educación de sus hijos. Ante la ausencia de los padres, algunas situaciones familiares están orientadas a priorizar actividades por fuera del hogar. Se buscan como alternativas para los hijos: pasar la

mayoría del tiempo con otro cuidador, en una institución, o en otras actividades distractoras (deporte, la música, arte), realizando actividades académicas o empleando el tiempo en dispositivos electrónicos, intentando así suplir la falta de tiempo, comunicación y compañía de los padres con los hijos. Frente a ese panorama, es adecuado hacer un llamado para reconocer la necesidad de trabajar por enriquecer las interacciones familiares y la comunicación en familia. Es una necesidad apremiante redescubrir la

REDESCUBRIR EL PAPEL DE LA FAMILIA EN LA SOCIEDAD Por Liliana Muñoz y Esteban Ocampo Practicantes de Psicología Pastoral Familiar Diócesis de Sonsón Rionegro caf@diosonrio.org.co

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función de la familia en la sociedad. Este aspecto puede entenderse mejor si reconocemos que el sujeto al nacer tiene el primer vínculo de relación con un otro, es decir, con una familia. Esta cumple el papel de ser la primera sociedad en la cual este se desenvuelve. Es la familia y las relaciones significativas que allí se entablan, el medio para nutrirse de la cultura. La familia es la responsable de instaurar al sujeto culturalmente, a partir de valores, creencias, leyes y prácticas. Los padres, por medio de acciones y palabras, son los primeros encargados de comunicar la cultura. Por eso cada familia, como institución, debe recordar que son ellos quienes encarnan la cultura propia en la que se desarrollará ese hijo, y que son quienes tienen la principal responsabilidad de trasmitirla. En línea con lo anterior, es preciso recordar que la educación de una persona no solo es tarea de una escuela o colegio, estos son colaboradores, constructores, apoyos en dicho proceso. La familia debe valorar que su función a nivel psicológico en el desarrollo y educación de sus integrantes, está orientada a proporcionar estrategias de adaptación social, seguridad afectiva, manejo de las responsabilidades a través de hábitos cotidianos, el control y reconocimiento de emociones y sentimientos, guiar hacia la independencia, la instauración de valores morales y éticos, etc. Tal responsabilidad nos obliga a resaltar que la familia es para el sujeto no solo el entorno educativo por excelencia, sino también el principal referente que aporta en el desarrollo emocional, comportamental y cognitivo de cada miembro; su compromiso está direccionado a trasmitir la cultura, brindar educación y aportar en el desarrollo psicológico de sus integrantes. A modo de cierre La familia debe brindar el acompañamiento necesario para que se genere un clima acogedor. Ella es el primer espacio en el cual se interioriza la importancia del reconocimiento del otro, de sus particularidades y capacidades. No solo puede ser visualizada como una estructura desconectada (papá - mamá hijos), sino que exige que se le reconozca como aquella institución indivisible que vela por el desarrollo psicológico y social, como principal transmisora de la cultura.


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COMUNICACIÓN, REGIÓN Y CONSTRUCCIÓN DE PAZ Hemos configurado caminos desde la lectura crítica de la realidad, propiciando y promoviendo espacios formativos y comunicativos en el territorio. Por Programa Desarrollo para la Paz comunicaciones@prodepaz.org El pasado 29 de agosto de 2018 se realizó el evento de cierre del Diplomado en “Comunicación, Región y Construcción de Paz”, espacio donde se propició una conversación con el periodista Alfredo Molano Jimeno sobre la comunicación, la formación de la opinión pública y su aporte a la construcción de paz. Al finalizar este conversatorio, también se hizo entrega de la certificación a los 21 jóvenes participantes del Diplomado. En la apertura del evento el Pbro. Óscar David Maya, director ejecutivo de Prodepaz, mencionó: "creo en una comunicación que es capaz de construir ciudadanía y sociedad, que es capaz de cohesionar. Valoro y me complace que este haya sido el horizonte que ha querido tener esta experiencia académica y conservo la esperanza en que el despliegue que se va a hacer de los conocimientos adquiridos redunde en bien del territorio. La paz se construye cuando todos le apostamos a una cultura del encuentro, a comunicar la verdad y las esperanzas del territorio”. Los Acuerdos de Paz, la reconciliación, el rol de la mujer, la ética y el cuestionamiento del lenguaje en el abordaje del conflicto, la política y la sociedad fueron los principales temas de discusión durante el conversatorio al que fue convocado el periodista Alfredo Molano Jimeno, con la moderación de Edgar Calderón Sanín, coordinador del Programa de Comunicación Social de la UCO. El periodista de El Espectador compartió su conocimiento, experiencias y aprendizajes en torno al papel de la comunicación y el ejercicio político en las transformaciones culturales. En este espacio se abordaron los retos de la reconciliación y el papel de los jóvenes en la construcción de la paz, con la conciencia de que en este país hay mucho por contar, en un reconocimiento de lo que somos, hemos sido y queremos ser como sociedad y con la convicción de impulsar una comunicación para el cambio social en nuestro territorio.

Acerca del proceso formativo en Oriente Antioqueño El “Diplomado en Comunicación, Región y Paz” fue una propuesta formativa encaminada a fortalecer las apuestas y contenidos locales y regionales a partir del diálogo, el reconocimiento de la historia y la comunicación para el desarrollo y el cambio social. En este espacio participaron comunicadores y periodistas de Marinilla, Rionegro, La Unión, El Carmen de Viboral, La Ceja y Medellín. En palabras de Begoña Quintero, estudiante del Diplomado, este “fue un acercamiento importante a los procesos de construcción de paz. Me voy con mucha sensibilidad respecto al reconocimiento de las transformaciones necesarias que debemos asumir como comunicadores”. Esta propuesta académica se llevó a cabo desde el mes de abril y fue impulsada conjuntamente por la Universidad Católica de Oriente, la Universidad de Antioquia Seccional Oriente, el medio de comunicación Enfoque de Oriente y la Corporación Prodepaz.


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Por Jorge Andrés Tabares Ríos, Pbro. Director Asociación Sacerdotal San Pablo joantari@yahoo.es

LA IGLESIA COMPROMETIDA CON LAS VÍCTIMAS DE ABUSO Y SUS FAMILIAS El papa Francisco publicó el pasado 20 de agosto, una Carta dirigida al Pueblo de Dios en la que condena los abusos sexuales, de poder y de conciencia sufridos por muchos menores y cometidos por un notable número de clérigos y personas consagradas, después de conocer el informe de Pensilvania (EE.UU) donde se detalla lo vivido por numerosas víctimas durante setenta años, aproximadamente. El Sumo Pontífice comienza la Carta con unas palabras de San Pablo: “Si un miembro sufre, todos sufren con él”. Con ello señala que el dolor de estas víctimas «durante mucho tiempo fue ignorado, callado o silenciado. Pero su grito fue más fuerte que todas las medidas que lo intentaron silenciar o, incluso, que pretendieron resolverlo con decisiones que aumentaron la gravedad cayendo en la complicidad». Además, reconoce «con vergüenza y arrepentimiento que no supimos estar donde teníamos que estar, que no actuamos a tiempo reconociendo la magnitud y la gravedad del daño que se estaba causando en tantas vidas». El papa Francisco, como Pastor de la Iglesia Católica, es consciente que «mirando hacia el pasado nunca será suficiente lo que se haga para pedir perdón y buscar reparar el daño causado. Mirando hacia el futuro nunca será poco todo lo que se haga para generar una cultura capaz de evitar que estas situaciones no solo no se repitan, sino que no encuentren espacios para ser encubiertas y perpetuarse». Eso sí, el Papa quiere dejar bien claro que el dolor de las víctimas y sus familias es también el dolor de la Iglesia, por eso urge reafirmar una vez más nuestro

compromiso para garantizar la protección de los menores y de los adultos en situación de vulnerabilidad. En dicha Carta, el Papa no solo ratifica la posición de la Iglesia frente a los abusos de menores de tolerancia cero y tampoco se limita a pedir perdón por los daños causados, Él quiere ir más allá, hace un fuerte llamado a la solidaridad. Tal solidaridad exige, a su vez, «denunciar todo aquello que ponga en peligro la integridad de cualquier persona. Solidaridad que reclama luchar contra todo tipo de corrupción, especialmente la espiritual, porque se trata de una ceguera cómoda y autosuficiente donde todo termina pareciendo lícito: el engaño, la calumnia, el egoísmo y tantas formas sutiles de autorreferencialidad, ya que “el mismo Satanás se disfraza de ángel de luz” (2 Cor 11,14)». Como creyentes es bueno dejar claro que el mal no se justifica desde ningún punto de vista. Se puede comprender, ayudar, perdonar pero no justificar los pecados y delitos que degradan lo humano. El pecado no humaniza, deshumaniza; por eso conviene subrayar que no todas las equivocaciones son humanas. Las hay que tienen mucho de degradantes, que son una vergüenza para la humanidad. Y no pueden excusarse bajo el calificativo de “humanas”, sino que deben ser calificadas como lo que son: pecados graves para un creyente, delitos ante toda ley digna de este nombre, y escándalos mayúsculos cuando son cometidos por aquellas personas que denuncian en público lo que se permiten hacer en privado.

Lastimosamente todavía hay cristianos que piensan que pecar es “humano”. En realidad, es todo lo contrario: el pecado rebaja al ser humano, impidiéndole lograr su propia plenitud. El pecado deshumaniza, daña a la naturaleza propia o ajena. El Concilio Vaticano II afirma que la perfección de lo humano está en asemejarnos a Cristo. En el seguimiento de Cristo, Hombre perfecto, nos perfeccionamos cada vez más en nuestra propia dignidad de personas. El pecado es inhumano. Lo humano es la santidad. De lo anterior se comprende que no se puede ser un buen discípulo de Jesucristo o pastor de la Iglesia desde el ocultamiento y la mentira. Como bien enfatiza el papa Francisco: «Es imprescindible que como Iglesia podamos reconocer y condenar con dolor y vergüenza las atrocidades cometidas por personas consagradas, clérigos e incluso por todos aquellos que tenían la misión de velar y cuidar a los más vulnerables. Pidamos perdón por los pecados propios y ajenos. La conciencia de pecado nos ayuda a reconocer los errores, los delitos y las heridas generadas en el pasado y nos permite abrirnos y comprometernos más con el presente en un camino de renovada conversión». No podemos dejar de resaltar que el bien es más fuerte que el mal, que en la Iglesia y en el mundo hay más gente buena que mala, que el trigo que hay en cada uno supera con creces la cizaña, que este mundo se mantiene en pie porque hay más gente que ama, construye y siembra esperanza. También somos conscientes que estos detalles no arreglan los graves problemas que acarrean a nuestra sociedad. Pero son ejemplos de que si cada uno hace lo que puede y trata de hacerlo bien, podemos construir un mundo más humano. Por último, el Papa nos invita para que con actitud orante y penitencial entremos en sintonía personal y comunitaria con esta exhortación para que crezca entre nosotros el don de la compasión, de la justicia, de la prevención y reparación. Y que el Espíritu Santo nos brinde la gracia de la conversión y la unción interior para poder expresar, ante estos crímenes de abuso, nuestra compunción y nuestra decisión de luchar con valentía.


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ANTE UNA AGRESTE REALIDAD, UNA INTRUSA E INDÓMITA SANTIDAD El 9 de abril de este año se dio a conocer la exhortación apostólica del papa Francisco, Gaudete et exultate («Alégrense y regocíjense»), con el objetivo de «hacer resonar el llamado a la santidad, procurando encarnarlo en el contexto actual, con sus riesgos, desafíos y oportunidades» (p. 2, 2018). Quizás, la santidad es un tema en desuso en la Iglesia, otras temáticas son las que acaparan y convocan la atención de muchos fieles. Para un amplio sector de la sociedad es de poca valía e interés hablar de santidad, se concibe y se confunde como tema de mojigatos o de personas «raras» que en vez de asumir la vida con seriedad, suspiran por una levitación extraña y malintencionada como la del padre Nicanor, narrada en «Cien años de soledad». ¿Cómo describir este contexto donde la santidad se presenta como intrusa e indómita señora del momento? Agreste, enrarecido e intempestivo. La santidad como propuesta antropológica es percibida por ciertos actores sociales de sospechosa, absurda y enemiga; supuestamente como un ataque retrogrado e infundado a las pretensiosas aspiraciones del hombre contemporáneo. La expresión «renuncia de sí mismo», parecería ser la más cruda ofensa a los derechos humanos. Incluso, mencionar la santidad en este enrarecido ambiente, donde lo normal y natural riñen frontalmente con lo correcto, argumentando que es cultural, dado que la cultura se ha convertido en el ídolo y en la panacea momentánea que no permite ser cuestionada ni por un mínimo canon del sentido común. Estamos estremecidos por este invierno: a la par que se padecen las bajas temperaturas en Chile, se vive, no con menor intensidad, el invierno-infierno eclesial. Los fríos estremecedores de los escándalos, han dejado a la intemperie y en cuidados intensivos a la Iglesia que busca abrigarse, curarse y sobreponerse al calor de la santidad, donde los medios de comunicación, sin ninguna conmiseración y recato alguno, quieren cobrar justicia por cuenta propia, desnudando cada una de las infidelidades eclesiales. Ante esta agreste realidad, surge como emperatriz seductora, la imperiosa santidad como riesgo, desafío y oportunidad. El término riesgo, proviene de risco, peñasco de

gran altura y de difícil acceso para los barcos que navegan. La santidad no significa navegar pasivamente sin peñascos, tampoco, lo profundo de la santidad se manifiesta en la vida serena; se revela, más bien, en la forma espiritual y creativa en que se afrontan cada uno de los peñascos personales y comunitarios. Con el riesgo, lejos de hacernos sabiondos, descubrimos la presencia tenue pero profunda de ese Alguien que satura de sentido nuestro existir. Sin riesgo, no hay santidad, habrá conformidad, bienestar, pero no santidad. La santidad implica aventura, mas no toda aventura se mide por el éxito o el fracaso, esas son categorías seculares, sino por el crecimiento personal y relacional en todas sus dimensiones. Desafío es una palabra compuesta por dos expresiones: des y afiar, donde afiar significa darle garantía y des, quitarla. La santidad como desafío implica quitarle garantía a los pseudo valores propuestos como ideales existenciales. El desafío requiere destreza y valentía para desenmascarar a tantos señoritos que hacen ver la apariencia, el dominio del otro y la absolutización del presente como dioses que sacian los deseos furibundos de alocados personajes del momento. La santidad es autenticidad, no apariencia; reconocimiento del otro, no dominio ni desprecio; responsabilidad y cuidado del tiempo en aras del mañana, no mercaderes del presente. Oportunidad: palabra proveniente de los marineros. Los navegantes utilizaban la expresión ob portus para referirse a la combinación de viento, corriente y marea, como la mejor manera de aprovechar las condiciones climáticas cuando el capitán avizoraba el puerto de llegada. La santidad como oportunidad nos hace perspicaces y sabios con el entorno, nos encamina a discernir lo bueno, verdadero y bello que hay en la realidad para dimensionarnos y afianzarnos en la vida trascendente asumiendo cada responsabilidad del momento. Si la santidad no muestra el puerto de llegada, es una falsa y engañosa doncella que solo engatusa y perturba el presente con halagos lisonjeros de felicidad. POSDATA: la santidad es riesgo que complica la vida. Dios es el totalmente auténtico que no se repite en la santidad de las personas.

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Por José Raúl Ramírez V., Pbro. jotaraulramirez@gmail.com


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REPENSAR EL DESARROLLO DESDE LA LAUDATO SI Cinco condiciones para lograrlo 3/5

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3ra: Globalización de la solidaridad

Por Luis Ferney López Jiménez, Pbro. Secretario Fundación Populorum Progressio lf.lopez@humandevelopment.va

Otro de los temas centrales y recurrentes de la Encíclica Laudato Si es el tema de la solidaridad, pues “En las condiciones actuales de la sociedad mundial, donde hay tantas inequidades y cada vez son más las personas descartables, privadas de derechos humanos básicos, el principio del bien común se convierte inmediatamente, como lógica e ineludible consecuencia, en un llamado a la solidaridad” (#158). Ante este panorama, el papa Francisco es enfático en afirmar que “Necesitamos una solidaridad universal nueva” (#14). Esto se aplica aún en el ámbito del medio ambiente pues “Cualquier menoscabo de la solidaridad y del civismo produce daños ambientales” (#142). Es necesario tener presente que “Todo está conectado, y eso nos invita a madurar una espiritualidad de la solidaridad glo¬bal” (#240). El llamado a la globalización de la solidaridad es urgente, entendida como “la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común; es decir, por el bien de todos y cada uno, para que todos seamos verdaderamente responsables de todos. Esta determinación se funda en la firme convicción de que lo que frena el pleno desarrollo es aquel afán de ganancia y aquella sed de poder” según afirma el papa Juan Pablo II en la Encíclica Sollicitudo Rei Socialis (#38). Contrario a la solidaridad sería la indiferencia, que es “la actitud de quien cierra el corazón para no tomar en consideración a los otros, de quien cierra los ojos para no ver aquello que lo circunda o se evade para no ser tocado por los problemas de los demás” según lo afirma el papa Francisco en el Mensaje para la XLIX Jornada Mundial de la Paz 2016 (#3). En el mismo mensaje, advierte el Papa que la indiferencia ha estado presente en cada época de la historia “Pero en nuestros días, esta tipología ha superado decididamente el ámbito individual para asumir una dimensión global y producir el fenómeno de la «globalización de la indiferencia»” (Ibid #3). Esto hay que tomarlo en serio, pues “La indiferencia representa una amenaza para la

familia humana” (Ibid #2). Contrarrestar la globalización de la indiferencia con la globalización de la solidaridad es un reto ineludible en función de un desarrollo según lo plantea la Laudato Si. ¿Por dónde comenzar? El Cardenal de Tegucigalpa Mons. Oscar Rodríguez Madariaga M, S.D.B. en su texto Globalización de la Solidaridad insinúa que hay que comenzar por lo básico, “Lo más elemental es evitar acciones insolidarias, por ejemplo: la contaminación medioambiental, erosionar la confianza o fomentar la corrupción en los negocios, etc” (2004: pág 4). Por su parte el papa Francisco habla de una solidaridad en dos sentidos: a) Solidaridad inter-generacional (#162). La cual se refiere a qué tipo de planeta y herencia le queremos dejar a las generaciones del mañana, pues “La tierra es esencialmente una herencia común” (#93) y “No puede hablarse de desarrollo sostenible sin una solidaridad inter-generacional (#159); esto exige una actitud responsable, pues “A las próximas generaciones podríamos dejarles demasiados es¬combros, desiertos y suciedad” (#161); b) Solidaridad intra-generacional (#162) la cual hace relación al sentido de responsabilidad por nuestros semejantes so¬bre el cual se funda toda sociedad civil (Cfr, #25). Esto implica que no se puede perder de vista que “El medio ambiente es un bien colectivo, pa¬trimonio de toda la humanidad y responsabilidad de todos. Quien se apropia de algo es sólo para ad¬ministrarlo en bien de todos. Si no lo hacemos, cargamos sobre la conciencia el peso de negar la existencia de los otros (#95). Lo que plantea el Papa con relación a la necesidad de globalizar la solidaridad está muy en sintonía con lo que propone el exdirector del Banco Mundial James Wolfensohn, quien insiste, entre otras cosas, que mientras exista pobreza, los ricos no tendrán paz y que el tema de la inequidad entre los ricos y los pobres no es un tema que se pueda seguir esquivando. Ante la Asamblea General de la Sociedad

Interamericana de Prensa en Washington el 13 de Octubre 2001 –a algo más de un mes del atentado de las Torres GemelasWolfensohn tuvo una conferencia valiosa de la que vale la pena mencionar algunos apartes (www.mercaba.org/ARTICULOS/P/pobreza_riqueza.htm): - Si no tendemos una mano a la gente viviendo en la pobreza y no creamos una mejor distribución de la riqueza, no habrá paz. - Antes mucha gente pensaba que habían dos mundos: el mundo desarrollado y el mundo en vías de desarrollo. Pero esa idea es falsa: "La pobreza en un lugar es pobreza en todos lados". - Los dos mundos han desaparecido. Hay sólo un mundo. Y en la comunidad internacional, debemos pensar cómo ajustarnos para ser ciudadanos globales y preparar a nuestros hijos para ser ciudadanos globales. - Ese "único mundo" en el que vivimos es tan interdependiente, que la pobreza en otro continente, a miles de kilómetros, puede significar la muerte de los que viven en países desarrollados. - Para 2025, los líderes del G7 seguirán representando al exacto mismo número de personas que representan hoy, en cambio en los países en vías de desarrollo habrá 2.000 millones de personas más. - Tenemos que acostumbrarnos a pensar más allá de nuestras narices, a pensar globalmente. Y eso significa muchas cosas. Para los que crecieron en Occidente, significa que tienen que comprender que no están solamente viviendo en una cultura occidental, sino en una cultura global. - El tema de la inequidad entre los ricos y los pobres no es un tema que se pueda seguir esquivando. Quizás nuestra generación pueda evitar el tema, pero nuestros hijos no podrán. En definitiva, globalizar la solidaridad es una urgencia y compromiso de todos; esta tiene que ser una clave y condición para un mundo en paz y propiciar un desarrollo según lo propone el Papa en la Laudato Si.


Una tierna visita de nuestra

Madre

El martes 14 de agosto llegó al Aeropuerto José María Córdoba de Rionegro, la imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima, que iba a visitar, en esa semana, la Arquidiócesis de Medellín y luego nuestra iglesia diocesana. Los niños del Oratorio de Marinilla cantaron para la Madre del Señor, en este pequeño acto de bienvenida.

Martes 21 de agosto La imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima, iniciando el recorrido por nuestra jurisdicción, visitó el municipio de Sonsón, allí, en la Catedral donde nació nuestra diócesis, se hizo la consagración de este territorio eclesial a la madre del Salvador. En la tarde, la imagen peregrina de la Virgen de Fátima llegó hasta el municipio de la Unión; allí se vivió una gran fiesta de amor a la madre de Cristo; la Eucaristía, como centro de la vida del cristiano y un lucernario para despedir la visita a esta comunidad. En la noche, la imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima descansó, a los pies de Jesús Sacramentado, en el monasterio de las Hermanas Mercedarias en La Ceja; un verdadero momento para acercarnos a Cristo Eucaristía, a través de la Santísima Virgen María.

Miércoles 22 de agosto En la mañana, la imagen peregrina de Señora de Fátima, visitó la Universidad Católica de Oriente; allí fue recibida por los niños y jóvenes que estudian en el Colegio monseñor Alfonso Uribe Jaramillo. Una gran fiesta se vivió en el municipio de El Santuario en la tarde; allí, las diferentes parroquias se unieron para darle la bienvenida y rendir un homenaje a la madre del Señor, en la advocación de la Virgen de Fátima que peregrinaba por nuestra tierra diocesana. Un acto mariano en la Parroquia Nuestra Señora de Chiquinquirá - El Santuario, visita al monasterio de las hermanas Concepcionistas, Eucaristía, Lucernario y Concierto en la Basílica Santuario de San Judas Tadeo El Santuario Antioquia, con Eider Giraldo. Una manifestación del amor a la madre de Dios.


Jueves 23 de agosto Como cada año, al término del retiro Latinoamericano de Sacerdotes, se realiza en el municipio de La Ceja, la Asamblea de Oración por los Enfermos; este año se realizó el jueves 23 de agosto en la Institución Educativa Bernardo Uribe Londoño. Se contó con la presencia de sacerdotes de la diócesis y de otros lugares del territorio nacional, incluso de algunos sacerdotes del extranjero, participantes del retiro. La celebración Eucarística fue presidida por monseñor Fidel León Cadavid Marín, obispo diocesano. En la celebración, estuvo presente la imagen peregrina de Nuestra Señora, la Virgen de Fátima. Al término de la celebración, se realizó la consagración de los sacerdotes a los inmaculados corazones de Jesús y María. Después de la participación en la Asamblea de Oración por los Enfermos, la réplica de Nuestra Señora de Fátima, estuvo dispuesta para la veneración de los fieles en la Basílica Nuestra Señora del Carmen, en La Ceja; se celebró la Eucaristía y se inició un lucernario que terminó en el monasterio de las Hermanas Carmelitas, donde se realizó una hora santa con la presencia de Jesús Eucaristía; allí, junto a los seminaristas que estudian en el Seminario Nacional Cristo Sacerdote, se consagraron las vocaciones a la vida sacerdotal y religiosa, al amparo de la virgen de Fátima

viernes 24 de agosto Marinilla vivió una jornada especial, en presencia de la réplica de la Virgen de Fátima, que visitó, inicialmente la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción; posteriormente, en desfile, llegó a la parroquia San Juan Pablo II, a bendecir el proyecto de construcción de templo y en la noche, después de un lucernario, se encontró con las hermanas de la Visitación, donde se realizó un momento muy especial para la comunidad.

Sábado 25 de agosto En la mañana, la réplica peregrina de Nuestra Señora de Fátima, visitó el municipio de Guarne. En la Parroquia de Nuestra Señora de la Candelaria se vivió una especial jornada de veneración y oración, pidiendo la intercesión de la madre de Cristo, por la salvación de todos los hombres. La Concatedral San Nicolás el magno de Rionegro, acogió la visita de la réplica de la virgen peregrina de Nuestra Señora de Fátima, al mediodía. Se vivió la celebración Eucarística, centro de nuestra vida cristiana y un momento de veneración y oración a la Madre del Salvador. En la tarde, la imagen visitó el municipio de El Carmen de Viboral, donde se vivió una gran fiesta en torno a la madre de Cristo y a la Eucaristía. En la noche, la virgen llegó hasta el proyecto del templo de la parroquia La Divina Misericordia en el sector Barro Blanco de Rionegro; una oportunidad para bendecir a todos los proyectos de construcción que se vienen adelantando en nuestra iglesia diocesana. En la última visita del sábado, la comunidad de las Siervas del Plan de Dios, en Marinilla, acogió la imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima. Oramos por las comunidades religiosas y todos sus carismas.

Domingo 26 de agosto Al mediodía, la réplica de Nuestra Señora de Fátima, visitó el Santuario Diocesano María Madre de Dios, en el sector Sajonia de Rionegro; una oportunidad especial para orar a la madre del Señor, por todas las madres. En la tarde, con motivo de esta grata visita de la virgen, los movimientos laicales se reunieron en el Ave María, para celebrar juntos la Jornada Mariana, en la que se tuvo la presencia de la Hermana Inés de Jesús, cantante católica.


Parroquia

1968-2018 Reseña Histórica “Gracias sean dadas a Dios, autor de todo bien, porque ha hecho posible que un nuevo templo se levantara en este hermoso valle de La Ceja, para proporcionar a las almas todos los tesoros espirituales de la redención. La Santa Misa, sacrificio de acción de gracias, celebrada en el altar consagrado será suficiente para agradecer a Dios tantos beneficios y para impetrar bendiciones sobre todos los que colaboraron a la realización de este templo. Las manos maternales de Nuestra Señora del Carmen reciban nuestros sentimientos de gratitud, ya que, si todos cuantos beneficios hemos recibido por ella han llegado hasta nosotros, por ella queremos volver nuestra gratitud a Dios”. (Palabras del padre Javier Piedrahita, decano del bachillerato de la universidad Pontificia Bolivariana en la consagración del altar, agosto 15 de 1965). El 4 de abril del año de 1964, después de las respectivas consultas al Señor obispo de la época y al venerable cura párroco de la parroquia de nuestra Señora del Carmen de La Ceja, se dio inicio a la construcción de un templo, con el fin de conformar una comunidad parroquial en la zona norte del municipio. La dedicación del templo se realizó el 15 de agosto de 1965 y el 22 de agosto del mismo año, con el decreto número 030 de 1965, se declaró la iglesia de San Cayetano como iglesia filial de la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen de La Ceja. El 21 de mayo de 1968 monseñor Alfonso Uribe Jaramillo, Obispo de Sonsón – Rionegro mediante decreto número 17 crea la parroquia de San Cayetano con territorios desmembrados de las parroquias de La Ceja, El Carmen de Viboral y El Retiro. El 29 de mayo de 1968, monseñor Alfonso Uribe Jaramillo nombra como primer párroco de nuestra comunidad al Padre Mario Toro Rodríguez. El 7 de Julio de 1968 tuvo lugar la solemne inauguración de la parroquia y la posesión canónica de su primer párroco en una ceremonia que presidió el obispo diocesano Monseñor Alfonso Uribe Jaramillo. Eterna gratitud a todos los sacerdotes que, a lo largo de estos 50 años con su testimonio de fe, con su ministerio y su denodado trabajo condujeron con ejemplar entrega nuestra comunidad parroquial de San Cayetano.

San

Peregrinando


Cayetano 50 años

bajo la providencia divina

Al celebrar nuestras bodas de oro, llenos de gozo y esperanza, acogemos el llamado de la Iglesia universal y particular que nos invita a una renovación de nuestros métodos de Evangelización. En esta hora de nuestra existencia, suplicamos la gracia de Dios que no nos negará las virtudes que requiere la misión que nos confía, en la fidelidad del Evangelio que debemos anunciar con audacia apostólica, propia de quienes han quedado ungidos por el Espíritu, para llevar a cabo la renovación de la vida cristiana. En los retos pastorales de nuestra vida parroquial, el punto de partida, como lo presentan los documentos de la Iglesia, es el cuidado de la familia, como lo ha dicho San Juan Pablo II, donde se fragua el futuro de la humanidad. Sin el calor de su amor, sin su pedagogía incomparable, sin su servicio específico insustituible a la vida y a la persona, sin su aporte a la Horizonte Pastoral formación religiosa y moral, resulta imposible tener hombres y mujeres, honestos, responsables y libres, que sean un aporte y no una carga para la El llamamiento en el día del Bautismo es el amor inconmensurable que se sociedad. derramó sobre los hijos de Dios, para salir de las aguas lustrales, renacidos a la vida Eterna. En el sacramento de la confirmación fuimos asociados más Otro espacio para iluminar es la escuela que complementa la formación del estrechamente a Cristo, el Ungido por el Espíritu, para quedar hogar, que enseña junto a las primeras letras, el ejercicio de los valores comprometidos a ser testigos por la Palabra y por las obras, para ser esenciales para navegar en la existencia, que ayuda en la integración administradores de los tesoros de la Salvación, profetas del Reino, guías del armoniosa de las personas en la realidad cultural, cívica y social, sin la cual pueblo de Dios. Es el cumplimiento del programa cristiano descrito por San no podemos soñar un justo y verdadero desarrollo de los pueblos. Pablo: “reflejando como un espejo la gloria del Señor, nos transformamos en su misma imagen, de gloria en gloria, bajo el influjo de su Espíritu”. La realidad social, en la doctrina social de la Iglesia, para promover el desarrollo humano integral de los habitantes de nuestra comunidad Ante la belleza y la grandeza de este llamado, recurre inquietantemente la parroquial, buscando que las personas, las familias, las comunidades, las pregunta: ¿por qué este don tan grande en nuestra pobreza? ¿Por qué ésta instituciones públicas y privadas, se solidaricen en el compromiso del bien gracia tan sublime regalada a nuestra pequeñez? Es preciso entender, común, a través de diagnósticos, que permitan detectar la realidad e entonces, que lo que se nos ha conferido es un ministerio, una misión y es identificar las necesidades para salir al encuentro como una Iglesia una dignidad que se justifica tan sólo en el ejercicio de la caridad. samaritana. Recibir y dar es la trayectoria del designio divino que se ha cruzado en nuestras vidas, haciéndonos un signo personal de Cristo; si el recibir es causa de gran alegría porque se refiere a la riqueza de Cristo, el dar nos llena de temor porque pone en evidencia nuestra limitación ante los retos de la sociedad actual.

Trabajar en la defensa de la vida, la justicia y la paz no es algo facultativo, sino un apremiante deber que es preciso asumir, puesto que estos valores configuran la forma de ser de la persona humana y de la sociedad que están llamadas a caminar en la historia, para superar con un nuevo humanismo la preeminencia técnica del producir sobre el convivir en paz y el construir una vida para todos.


El nacimiento de Argelia de María data de 1.891, bajo el nombre de San Julián con el poeta don Gregorio Gutiérrez González. El nombre de Argelia de María se debe al poeta Antioqueño Tomas Carrasquilla. Argelia de María cuenta actualmente con 8.699 habitantes. El templo se construye entre los años 1.903 y 1.935. En el mes de agosto de 1918 fue creada la Parroquia de Argelia por decreto del Ilustrísimo Señor D. Manuel José Cayzedo, y nombrando como su primer párroco al Pbro. Salvador Vargas quien venía desempeñándose como vicepárroco desde 1913. Ya desde el 11 de agosto de 1918 figuran las partidas con el encabezamiento de “en la iglesia parroquial de Argelia de María”. Argelia de María es un pueblo de Fe, su vida espiritual marcada por generosos sacerdotes que han dado un testimonio de vida cristiana son bases fundamentales para que la comunidad asuma la propuesta del evangelio. Tal vez este es el sitio del mundo donde Dios se sentó a descansar. Raza altiva de prístino ancestro Gente hidalga de buen corazón, Campesinos que en el Padre Nuestro Cifran siempre su fe y su ilusión. Oh terruño de Antioquia Florido Paradigma del bello existir, Pedacito de cielo querido Fiel preludio de un gran porvenir. Como versa el himno precioso de este pueblo. Generosas obras de progreso espiritual y material han visto y ven en el tiempo los Argelinos. La historia de este pueblo ha estado forjada por líderes espirituales, 36 párrocos en estos 100 años, 52 veredas que se atienden en su mayoría a lomo de mula, 10 sectores, instituciones educativas, Administración Municipal y otras entidades han visto la huella de hombres de fe que marcaron un hito en familias e individualmente. Vivimos un año de gracia en el Señor. En el primer semestre la misión rural. Ahora en el segundo

100 años

Parroquia


semestre la Santa Misión en la zona urbana, la celebración de las cuarenta horas, los jubileos por grupos y gremios han hecho parte en este centenario. Con una dedicación especial a los pobres, donde 100 de ellos han sido atendidos en un desayuno el día del centenario, y como obra de caridad de este año jubilar se construye una vivienda que se dará a una familia en extrema pobreza, unida a la obra del mejoramiento de 2 viviendas más que ya se han entregado. Culminaremos la celebración del Centenario con el día del campesino el 13 de octubre donde recibiremos, Dios mediante, el programa de Serenata de Tele Antioquia. Finalmente en nombre de la comunidad parroquial, nuestro agradecimiento a quienes han contribuido a la obra de restauración del templo, que ha incluido: techos, cielo Raso, sonido, redes eléctricas, pintura y un retablo estilo gótico que unido a la sede, ambón y altar que hacen parte del presbiterio. También el mantenimiento general al frontis, incluido la iluminación del mismo. A quienes han aportado a la obra de restauración de los techos de la casa pan y vida en su primera etapa. Casa donde se tiene el proyecto “a más reciclaje más mercado”, el cual favorece a personas de escasos recursos económicos. La obra de ampliación del cementerio pronto a iniciar. A la administración municipal al señor Alcalde con quien muy de la mano venimos trabajando, a todas las instituciones y al amado pueblo de Dios Miramos el pasado a la luz de Dios y hacemos memoria de nuestros mayores que han legado un camino de Fe, digno de admirar y de seguir. Vivimos el presente y desde el trabajo pastoral de la construcción de pequeñas comunidades eclesiales, seguimos la fidelidad al evangelio. Proyectamos el futuro y lo vemos con esperanza de la mano de nuestra madre, la Virgen Santísima y bajo el patrocinio de San Julián

Por Samuel de Jesús Martínez Marín, Pbro. Párroco de San Julián, Argelia

San Julián


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Vida Diocesana

Acontecer Pastoral

Fueron ordenados cuatro nuevos sacerdotes

Nuestra diócesis cuenta con 10 nuevos diáconos

Masiva participación en la Asamblea de Oración por los Enfermos

El viernes 20 de julio, en la catedral San Nicolás el Magno, Rionegro, se realizó la solemne Eucaristía en la que cuatro jóvenes de nuestra diócesis, recibieron el ministerio del sacerdocio, por imposición de manos y oración consecratoria de monseñor Fidel León Cadavid Marín, obispo diocesano. La Eucaristía se realizó a las 10:00 a.m. y contó con la presencia de más de 130 sacerdotes, provenientes de diferentes lugares del territorio y muy buena participación de fieles, que se dieron cita para acompañar a estos jóvenes, en el día en que recibían la unción como otros Cristos.

El sábado 4 de agosto, en la Con Catedral San Nicolás el Magno de Rionegro, 10 jóvenes de nuestra diócesis que cursan el cuarto año de teología en el Seminario Nacional Cristo Sacerdote, recibieron el sagrado orden del diaconado, por imposición de manos y oración consecratoria de Mons. Fidel León Cadavid Marín, obispo de la diócesis.

El jueves 23 de agosto, se vivió una nueva versión de la Asamblea de Oración por los Enfermos, también conocida como Misa Carismática. El avivamiento inició desde la 1:00 p.m., a cargo de la Asociación Siervos del Espíritu Santo y la Eucaristía, presidida por Mons. Fidel León Cadavid Marín, obispo diocesano, se realizó a las 2:00 p.m. Esta celebración Eucarística se llevó a cabo en el Liceo Bernardo Uribe Londoño de La Ceja.

Los jóvenes que recibieron el ministerio sacerdotal son: Norley de Jesús Gallego Tabares, de Argelia; José Ricardo Gómez Aristizábal, de Marinilla; Luis Ignacio Sánchez Quiceno y Néstor Camilo García López de San Vicente. Nos unimos en oración por estos cuatro jóvenes que recibieron el segundo grado del ministerio sacerdotal; agradecemos a Dios por el regalo de las vocaciones para nuestra iglesia particular de Sonsón Rionegro.

La ceremonia litúrgica, enmarcada en la conmemoración de los 50 años de la Con Catedral de Rionegro, contó con la presencia de más de 120 sacerdotes del territorio diocesano, seminaristas, miembros de las comunidades religiosas, familiares y amigos de los seminaristas que fueron ordenados. Los jóvenes que recibieron el sagrado orden del diaconado son: León Darío Castañeda Osorio, Diego Alejandro Prado Pavas, Juan David Carmona Jaramillo, Manuel Alejandro Garcés Restrepo, Daniel Alberto Quintero Salazar, Oscar Arley Giraldo Ramírez, Edwin Andrés Quintero Clavijo, Jhon Edwar Cotrina Espinoza, Jorge Leonardo Guerra Guerra y Sebastián González Giraldo

La Jornada contó con la presencia de un buen número de sacerdotes, provenientes de diferentes lugares de Latinoamérica, que participaban en el Retiro Espiritual Latinoamericano durante esa semana en La Ceja; además, se tuvo la compañía de la Imagen Réplica Peregrina de Nuestra Señora de Fátima. En la homilía el obispo diocesano fue enfático en que Jesús quiere sanarnos en el espíritu. Él tiene sed de nuestra fe, porque sabe muy bien que la salud de nuestro cuerpo o la tranquilidad de una vida sin problemas no es algo con lo que podamos contar permanentemente. Jesús no nos engaña y no nos ofrece una “religión del bienestar”.

Semana de la Catequesis Con el ánimo de fortalecer la catequesis en nuestra diócesis, desde el área de Evangelización se hizo la propuesta de desarrollar una semana dedicada a la actividad catequética. Con el lema “un cristiano no nace, se hace”; invitamos a todos nuestros fieles a renovar la identidad cristiana y a afianzar el camino de la fe. La semana inició con el encuentro diocesano de laicos que coordinan la catequesis en cada una de las comunidades parroquiales, con la presencia de mas de 100 catequistas y varios sacerdotes. A cada comunidad se envió material para el desarrollo de las actividades y celebraciones; significativo fue el compartir de experiencias que se dio a través de los videos que algunas parroquias nos enviaron y que fueron publicados en las redes sociales. La delegación de Catequesis clausuró la semana en la Parroquia de la Santa Cruz de Puerto Venus, allí nos encontramos con los catequistas, los catequizandos y los padres de familia; a todos ellos les compartimos el reto que tenemos de renovar la vida cristiana a través de itinerarios catequéticos serios que acompañen cada una de las etapas de la vida cristiana. Esperamos que esta experiencia siga creciendo cada año, que nos concienticemos de que la catequesis no es solo para adolescentes y niños, y que todos nos demos cuenta de la necesidad de “pasar de dar catecismo a hacer una catequesis”.


Acontecer Pastoral

Vida Diocesana

La liturgia, tema principal del encuentro de formación de la Vida Consagrada

El domingo 22 de julio se realizó el encuentro de formación y actualización para miembros de la Vida Consagrada de la Diócesis, en el Colegio La Presentación en Rionegro, donde se abordó el tema de la Liturgia. La Eucaristía fue presidida por Mons. Fidel Cadavid, obispo diocesano y se contó con la presencia del P. Juan David Muriel, de la Arquidiócesis de Medellín. El encuentro tuvo como lema “La liturgia, acción silenciosa del corazón”, y responde al trabajo que viene realizando la delegación para la Vida Consagrada, que cada año ofrece un curso de formación en algún aspecto de la teología o de la pastoral. “Hemos querido darle a este curso el tinte de la liturgia, como acción silenciosa del corazón, mirando la importancia de la liturgia en la vida del cristiano y muy concretamente en el campo de los consagrados, para tener una mayor experiencia en el encuentro con el señor, a través de un enriquecimiento personal y comunitario, a partir de las reflexiones que compartió el conferencista y mirando todos los retos y desafíos que se tienen en el campo de la liturgia en las comunidades”, explicó el padre Javier Marín, quien coordina la delegación.

Encuentro diocesano del SINE

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Congreso nacional de nueva evangelización SINE

En la Diócesis de Duitama-Sogamoso se vivió el XII Congreso de Nueva Evangelización, allí se congregaron alrededor de 1200 personas: 18 obispos, 150 sacerdotes y 1000 laicos, todos ellos caminantes del Sistema Integral de Nueva Evangelización. El espíritu de comunión, eclesialidad y renovación de la fe se sintieron fuertemente, al igual que la formación a través de las conferencias, talleres y vivencias SINE. Las 41 jurisdicciones eclesiásticas que implementan este itinerario de evangelización, expresaron y compartieron las diversas experiencias manifestadas en una pastoral orgánica y de procesos que culmina en la maravillosa experiencia de pequeñas comunidades integradas a la vida parroquial. Demos otro paso en la evangelización. Este no solo es un slogan, es el compromiso de los congresistas del SINE. “Para quienes participamos del Congreso nos queda un reto muy grande, debemos replicar en los distintos espacios la temática abordada, pero lo mas importante será el que podamos seguir implementando el sistema en nuestra Diócesis. Allí nos dimos cuenta que si bien hemos aprendido y crecido, también hay algunos aspectos que se deben corregir y otros nos falta implementarlos” P. Edwin Hidalgo. Las intervenciones y testimonios allí expresados, animan a seguir adelante, el SINE es una respuesta a la propuesta del Plan de Pastoral que tiene como política la formación de pequeñas comunidades evangelizadas y evangelizadoras. Estamos seguros que en la fidelidad al itinerario, en la puesta en marcha de cada una de sus etapas, sin prisas pero sin pausas, lograremos llegar a todos para ofrecerles todo, es decir, a CRISTO.

En el colegio La Presentación de Rionegro se realizó, el viernes 20 de julio, el encuentro diocesano del SINE -Sistema Integral de Nueva Evangelización-, uno de los itinerarios pastorales que lleva a cabo nuestra diócesis. Fue una oportunidad para vivir la fe desde la comunión diocesana como Cuerpo de Cristo, enriquecer el proceso de formación discipular, compartir experiencias significativas, motivar el compromiso misionero y la renovación de las promesas del sacramento de la Eucaristía. Se tuvo la participación de más de 600 personas, entre sacerdotes, seminaristas, religiosos y agentes laicos que acompañan esta metodología pastoral. Con este encuentro se terminó la tercera etapa “Comunión”.

Condolencias

La comunidad diocesana, en cabeza de monseñor Fidel León Cadavid Marín, eleva una plegaria a Dios por el eterno descanso de todas las personas que han fallecido en los últimos días en nuestro territorio eclesial, especialmente, por los familiares de nuestros sacerdotes: Clara Inés Usme Alzate, hermana de Octavio Usme Alzate, el 16 de julio; Betsabé Grisales, mamá de Mons. José Saúl Grisales, el 26 de julio; Olga Margarita González, mamá de Bernardo Arley Aristizabal González, el 31 de julio y Rosa María Urrea, mamá de Alveiro Giraldo Urrea, el 6 de agosto. Pedimos al buen Dios consuelo para sus familias y las acompañamos con nuestra oración



Opinión

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OJOS, PIES, CORAZÓN Por Esteban Cadavid Gómez Director de proyectos y proyección comunitaria, COREDI planeacionyproyectos@coredi.edu.co

El discípulo es “aquel que hace el decir de un maestro”. La palabra discípulo es una palabra abierta, dinámica, cargada de movimiento, el discípulo tiene que confrontarse una y otra vez con el maestro. Nunca podemos decir “ya llegué”, siempre hay más. Esta palabra discípulo, nos iguala, no hay otra cosa más importante que ser discípulo de Jesús; se pude ser “Religioso”, “laico”, “consagrado”, “integrante de algún movimiento”, “Sacerdote”, “obispo”, o lo que sea, todos estamos invitados a ser discípulos, y nada ni nadie puede garantizar que ya llegó, siempre estaremos en movimiento. La palabra “Discípulo” nos iguala, nos coloca frente al mismo desafío, en cambio, las otras categorías: “Religioso”, “laico”, “Sacerdote”, instan mas en lo que nos diferencia. por eso insisto en esta invitación, este llamado que nos iguala: se discípulos de Jesús.

varón-mujer, es hijo de Dios, todo hombre es mi hermano; sintió que alguien tenía que gritar esta verdad, para que se hagan pequeños ensayos de que este sueño es posible. El Reino es crear relaciones nuevas entre los hombres; si la ley decía: ojo por ojo, diente por diente, hay que odiar a los enemigos, eso tenía que cambiar. Esta lógica, esta manera de relacionarse, donde por un lado están los puros y por otro lado los impuros, los fuertes y los débiles, los amigos y los enemigos, no podía seguir, debía cambiar. Estamos hechos para ser otra cosa, hemos sido creados para ser hermanos. La lógica de Jesús es la lógica del amor, que siempre pide más. Jesús viene a ponerle palabras y gestos al sueño que Dios desde siempre había colocado en nuestro corazón. Jesús puso su mirada en ese horizonte, que está siempre más allá, porque esa es la función de los sueños, de los horizontes, estar más allá para hacernos caminar, para inspirarnos en medio de las dificultades y de las tensiones. Para hacernos caminar…

Quiero reclamar que para Jesús no hay discípulos de primera y otros de segunda, solo hay discípulos. Las otras categorías tienen el peligro de hacernos creer que ya se tiene “asegurado” cierto seguimiento de Jesús, pero no es así; siempre estamos en Segundo símbolo: los pies que nos hablan movimiento. Necesitamos una y otra vez ir al de su origen Maestro, a Jesús, para ver qué no dice de nuevo. Si nos detenemos en el origen de Jesús, podemos decir, en un lenguaje sociológico, Jesús también fue descubriendo su camino; que pertenecía a una familia modesta, él también tuvo que estar en constante asentando en un pequeño poblado movimiento, en constante búsqueda. campesino. Su padre era un carpintero y Apoyémonos en tres símbolos que nos Jesús trabajo con él muchos años de su vida. pueden ayudar a descubrir algunas de las No pertenecía a los estratos superiores de la actitudes de Jesús y ese constante sociedad, integrados por comerciantes, movimiento de búsqueda. funcionarios del templo, o del gobierno. Primer símbolo: los ojos, que nos hablan Jesús tenía sus pies puestos sobre la tierra, de un sueño. era consciente de su origen. Aprendió a valorar su identidad. Estuvo allí en Nazaret Jesús puso su mirada en el Reino. Esa tarde 30 años, después se dedicó a la itinerancia, en el Jordán, cuando fue bautizado por Juan, pero no olvidó su condición social, ni la negó. se le hizo claro lo que intuía, lo sintió en sus Al contrario, supo aprovechar ese pozo de entrañas: “tú eres mi hijo amado, el elegido”. sabiduría popular para comunicar la Buena Esta verdad no se la pudo callar nada, ni Noticia. nadie. Comprendió que todo hombre,

Tercer símbolo: el corazón que nos habla de sus sentimientos y convicciones. Cuando hablamos del corazón, estamos hablando del lugar donde nacen las decisiones, allí es donde están nuestras convicciones. Es el lugar desde donde sentimos la realidad, el lugar donde se reúnen los sueños, la realidad y las convicciones. Tenemos nuestros pies, allí donde está nuestro origen, donde hemos nacido y crecido, es parte de los condicionamientos de nuestra vida. Pero donde colocamos nuestro corazón es una decisión libre. Jesús decidió libremente colocar su corazón entre los más pobres, los oprimidos, desde ahí quiso sentir la realidad. Esta decisión le hacía vivir la vida con intensidad y plenitud, a la vez con tensión y conflicto permante, porque Él era consciente de dónde tenía “los pies”, y al mismo tiempo supo descubrir lo que ya tenía dentro suyo, el sueño de Dios, El Reino de Dios, pero no desde cualquier lugar, sino desde los más excluidos y vulnerables, para que el mensaje sea para todos, es decir, lo hizo con los pies en el presente, atravesado de los dolores y alegrías de su gente y, al mismo tiempo, “sin ser del mundo”, sin compartir la lógica del imperio Romano, que excluía, que mataba y oprimía, ni la lógica del Templo judío que también excluía, oprimía y hasta mataba. Jesús nos invita a estar plenamente en el mundo, con mucha lucidez, sabiendo de donde somos, donde tenemos los pies, con el corazón en los que más sufren, que son excluidos de la sociedad y con la mirada fija en el horizonte, que no lo inventamos nosotros, que es cosa de Dios, pues se trata de su Reino. También nosotros vivimos en una sociedad que tiene una lógica de exclusión y, como discípulos, no podemos dejarnos guiar por el espíritu de este sistema excluyente y opresor. Como discípulos de Jesús dejemonos guiar por su Espíritu, porque solo el Espíritu de Jesús nos humaniza, nos plenifica, como Él se plenificó.


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Vida Diocesana

Especial

EL ACOMPAÑAMIENTO ESPIRITUAL Y SU IMPORTANCIA EN LA VIDA DE LOS ANCIANOS Por Hermano Héctor Garrido Superior Local Comunidad CBA San Bernardo siervosdejesus@fundarias.com La espiritualidad puede ser definida como aquellos acontecimientos subjetivos o particulares de cada ser humano, que se ven reflejados a través de las obras o acciones que este realiza a lo largo de su historia de vida, experiencias que contribuyen a su bienestar individual y enriquecen su área espritual desde la ayuda que se puede brindar a otro semejante hasta la búsqueda de lo divino. Esta espiritualidad puede vivirse en diferentes etapas del ciclo vital del individuo, pero la necesidad de fortalecer esta área, se observa de forma más marcada en la etapa de la vejez, ya que en esta se experimentan situaciones confusas generadas por los cambios de su proceso de envejecimiento, por duelos no elaborados e incluso por situaciones de exclusión y discriminación que vivencian desde su entorno familiar y social. Es así, como los ancianos que experimentan situaciones como las mencionadas anteriormente, buscan refugio y un c o n t a c t o permanente a través de diferentes p r á c t i c a s espirituales con

Dios, para sentirse escuchados y protegidos. La Eucaristía: Se celebra todos los días y es la manera que se tiene para agradecer las Teniendo en cuenta la importancia de bendiciones con las que el Señor bendice a fortalecer el área espiritual como aspecto la Fundación. significativo para la trascendencia del ser, la Fundación Berta Arias de Botero (Fundarias) La Adoración al Santísimo: es encontrarse a través de monseñor Ricardo Tobón, con el mismo Dios quien brinda alimento arzobispo de Medellín, invitó a la Comunidad espiritual y tranquilidad a la vida. Religiosa “Siervos de Jesús de la Caridad” desde el 10 de Octubre del año 2011 a Actos de piedad: se celebran diariamente integrarse al Centro de Bienestar al Anciano con ancianos a través de diferentes San Bernardo, con el fin de ejercer su actividades, entre las cuales se encuentran: pastoral social con los ancianos el Santo Rosario, la Coronilla del Señor de la institucionalizados y brindar apoyo espiritual Divina Misericordia, las procesiones en permanente desde que ingresan a la diversas fiestas de la Iglesia y de la Santísima institución hasta el acompañamiento Virgen María y la fiesta principal del Patrón requerido en el proceso de duelo por de la institución “San Bernardo”. fallecimiento del usuario. Para ello, cada uno de los hermanos de la comunidad religiosa Acompañamiento en salud: los hermanos tiene asignadas responsabilidades también realizan una importante labor en el enfocadas a brindar consejo espiritual, acompañamiento a los residentes que asitirlos en su agonía, acompañarlos en carecen de red de apoyo familiar, a sus citas momentos de enfermedad, ser su compañía médicas, hospitalizaciones y emergencias de en el silencio de la noche y guiarlos durante salud que surgen en el día a día en la el día, brindar no solo el alimento corporal, institución. sino también el alimento espiritual. La Comunidad Religiosa Siervos de Jesús de Estas son algunas de las actividades la Caridad, agradece a Dios y a FUNDARIAS, realizadas en el Centro de Bienestar al por depositar toda su confianza en la labor Anciano San Bernardo, por parte la que se realiza diariamente con los ancianos Comunidad Religiosa “Siervos de Jesús de la institucionalizados en el Centro de Bienestar Caridad”: al Anciano San Bernardo, confianza que se ha logrado con amor y sacrificio a través de la oración.


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