La Voz Católica Diciembre 2021

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ISSN: 2462-9979

AÑO XXX

No 256

“Centrar la vida y la historia en una persona, en la persona de Cristo Viviente, es la gracia de la encarnación de Dios, que adoramos en la noche y el día de Navidad, al recitar el Credo y doblar la rodilla en el “et incarnatus est” y el “et homo factus est” (se encarnó, se hizo hombre)”. † Darío de Jesús Monsalve Mejía, Arzobispo de Cali

SANTIAGO DE CALI, DICIEMBRE DE 2021

VALOR $1000.00

Tiempo de Sínodo Esperando al salvador >> Detalles página 3

Feliz

Navidad y próspero año nuevo

Gratitud a una vida de servicio en el mundo carcelario >> Detalles página 9

Sinodalidad y pueblo negro >> Detalles página 15

“Que la Navidad sea para todos una oportunidad para redescubrir la familia como cuna de vida y de fe; un lugar de amor que acoge, de diálogo, de perdón, de solidaridad fraterna y de alegría compartida, fuente de paz para toda la humanidad”

Papa Francisco


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Editorial

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Luces en la noche

Apresurar la llegada del Reino de Dios que Él consolidó sobre el trono de su cruz, sobre la humanidad que acepta crucificar manos y pies, actitudes y palabras, para poner el cimiento más radical, el de la no violencia del amor, es el secreto íntimo de la “cultura de la vida” en todo tiempo y circunstancia.

Año 2021 No. 256 de Diciembre de 2021 Publicación Mensual ISSN: 2462-9979 Arzobispo de Cali Monseñor Darío de Jesús Monsalve Mejía DEPARTAMENTO DE COMUNICACIONES Delegado Arzobispal Pbro. José Over Gallego Londoño Comunicador Social Periodista Oscar Andrés Orejuela Valero Diseño y Diagramación Bernardo Arcila Parra Impresión Casa Editorial El Tiempo ARQUIDIÓCESIS DE CALI Curia Arzobispal Cra. 4 No. 7-17 PBX: 889 0562 medios@arquicali.org www.arquicali.org

Los escritos de los colaboradores solo comprometen a quienes los firman.

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n tiempos de incertidumbre, la noche extiende su oscuridad sobre el horizonte de nuestras consciencias. Vemos solo el instante en que vivimos. Y una inseguridad, tejida de temores apocalípticos, diezma el ímpetu emprendedor y la fuerza interior de la esperanza. Caminar a oscuras, sin horizonte y sin brújula, sin guía y sin metas, en las diásporas del “sálvese quien pueda”, es ser arrastrados por la vorágine de la autodestrucción, en la que estamos instalados hoy. Pandemias, guerras, economías ilícitas, cambio climático, torrentes migratorios, manipulación mediática, control político y policial, robo e inseguridad, escasez y carestía: todo un cuadro crítico que presiona la psiquis humana de esta generación. Depresión y fatiga, proyectos de muerte y pánico colectivo están al acecho. No es necesariamente el Apocalipsis del fin del mundo. Podría ser mejor el amanecer de una conciencia global, de casa común, de solidaridad interhumana, de convivencia pacífica y amistad social. Un amanecer que trasponga los meridianos entre las tinieblas y la luz; que suscite el bíblico “canto del gallo”, es decir, la frontera entre noche y día, la hora de recobrar la fidelidad perdida y de llorar la amargura de nuestras cobardías y traiciones: aquellas que disocian la libertad de la verdad, la vida del amor, haciéndonos incapaces del bien que labra un mundo mejor, un mañana que ilusione. En estos escenarios de contrastes, irrumpe la luz de Navidad, con las esperas del antes y del después de Cristo. Es la esperanza de la Encarnación de Dios que recorre las sendas de la vida, desde las entrañas de María hasta la “humanidad sin entrañas” de la Cruz y del Calvario, desde las entrañas de la noche de Navidad, hasta las entrañas mismas de la noche de Pascua y el amanecer definitivo de la vida en la resurrección. “¡El pueblo que andaba en tinieblas ha visto gran luz! A los que habitaban en tierra de sombra de muerte, la luz ha resplandecido sobre ellos” (Isaías 9,2). Centrar la vida y la historia en una persona, en la persona de Cristo Viviente, es la gracia de la encarnación de Dios, que adoramos en la noche y el día de Navidad, al recitar el Credo y doblar la rodilla en el “et incarnatus est” y el “et homo factus est” (se encarnó, se hizo hombre). Apresurar la llegada del Reino de Dios que Él consolidó sobre el trono de su cruz, sobre la humanidad que acepta crucificar manos y pies, actitudes y palabras, para poner el cimiento más radical, el de la no violencia del amor, es el secreto íntimo de la “cultura de la vida” en todo tiempo y circunstancia. Hay luces en la noche. No estamos solos en Por: † Monseñor Darío de Jesús el devenir de la historia. Un devenir que Dios Monsalve Mejía Encarnado, Jesús de Belén, de Nazareth y de Arzobispo de Cali Jerusalén, puso en positivo. No caminamos hacia el fin apocalíptico del mundo, sino hacia la segunda venida de Cristo como Señor que somete a los “enemigos del hombre” y a la muerte misma, al poder pacificador de su resurrección. ¿Cómo encender estas “luces en la noche” de la actual travesía humana? Desde el gesto personal de llamar e invocar a Jesús con el “Marana Tha” (“Ven, Señor Jesús”), convertido en plegaria de Adviento y gozo de la Novena de Navidad; hasta la adoración del misterio encarnado en la Noche Buena y fiesta del Nacimiento, el símbolo de la luz en las noches, de las velas encendidas y las alegrías compartidas en viandas, músicas, pesebres y regalos que se intercambian, sin la pólvora aguafiestas ni las estridencias paganas, ayudan a “socializar” la esperanza y a reintegrar familias y vecindades, generaciones y marginalidades. Y más allá de estas tradiciones, busquemos con ellas y entre todos ese caminar juntos, la disposición de ser sínodo, peregrinos y caminantes que hacemos parte de quienes procuran soluciones y no de quienes agravan los problemas y tienden a la destrucción apocalíptica de los desesperados. La coyuntura de desafíos globales y de época preelectoral y apremio de protesta social y de paro nacional en Colombia, exigen luz y lucidez de todos, hombres y mujeres, para avanzar unidos por la vida, la reconciliación, las garantías de derechos y de democracia, la convivencia entre diversos y los acuerdos de paz entre adversarios. Sin violencia alguna, con presencia colectiva de pueblo sin más armas que la dignidad, la voluntad y la palabra, sin más estrategia que la de la “unidad superior al conflicto”, con unidad espiritual y firmeza moral, podremos vencer toda tentación de destrucción y muerte, toda imposición de injusticia y engaño. Me uno en oración a todas nuestras comunidades y a todos los hogares. Y los bendigo como pastor y obispo de esta Iglesia que peregrina en Cali. ¡Navidad y Año Nuevo 2022 llenos de luz y esperanza!


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Para reflexionar

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Esperando al salvador

Opinión † Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo Auxiliar de Cali

Tips Pastorales

Sinodalidad en Navidad

Navidad es esperanza

Por: Pbro. Germán Martínez R. Vicario Episcopal de Educación

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iciembre es el mes de la esperanza. Sí, así como suena. La esperanza no es resignación fatalista, derrumbamiento ante poderes desconocidos. La esperanza no es un sueño ni una ilusión difusa de una mañana mejor, eso es utopía, la mirada sin un lugar concreto. Tampoco es esperanza la construcción de un futuro ideal, al margen de la dolorosa realidad actual, eso es mera fantasía. Esperanza es la capacidad de ver aquí y ahora, en el acontecer cotidiano, la realidad que permanece detrás de todos los fenómenos. Esperanza es captar la profundidad de todos los acontecimientos, origen y sustento de lo que acontece diariamente. Esperanza es poder ver la fuerza trascendente que, en medio del sufrimiento, el dolor y las frustraciones del presente, impulsa la vida y la historia hacia una realización nueva. Esperanza es la capacidad de comprender que el universo no surgió al azar, ni es un montón de energía dispersa, ni va a la ruina; sino que es

un todo integral que, por la vía de la complejidad creciente, se encamina hacia la plenitud espiritual. Esperanza es saber leer en la aparente insignificancia de las existencias más pequeñas y de los hechos más pasajeros, la manifestación de la vida, una y única, que se patentiza poderosa en el acontecer más elemental. Navidad es la esperanza invencible de que Colombia podrá ser un país digno, porque en la humanización de Dios todo mal ha sido destruido de raíz. Más que carreras, pólvora y montones de luces, navidad es la contemplación del Dios que entra en nuestra historia para llevarla a su plenitud. Paremos un momento en esta navidad, hagamos un poco de silencio interior y se nos revelará algo grande. Cuenta el evangelio apócrifo de Santiago, del siglo II, que cuando Jesús nace, la creación suspende la respiración durante un instante. Según el capítulo 18, la creación “contiene el aliento”, está por un instante en calma y quieta, hasta que Jesús nace. Es decir, cuando Dios entra en el mundo por medio de Jesucristo, la creación experimenta su presencia en su Hijo como un verdadero descanso. Santa navidad, porque el que nace es el Santo de Dios, el hijo amado que salva a la humanidad de todo sinsentido, de toda desesperanza.

Hemos insistido mucho en el significado de la palabra sínodo, descrita como caminar juntos. La Iglesia quiere que en este tiempo tan especial, tomemos conciencia de la importancia de este caminar juntos. Por otra parte, es clave hacer caer en la cuenta, de que la dinámica de la sinodalidad no es exclusiva de la Iglesia, aunque se use más en ella, porque para que la familia, el barrio, la ciudad, el país puedan crecer y superar mejor las adversidades, se necesita aprender a caminar juntos, haciendo a un lado intereses personales, que a veces se vuelven mezquinos cuando afectan el bien común. Si el ejercicio sinodal, que estamos invitando a hacer en la Iglesia, deja como fruto que las familias y la sociedad civil en general entiendan la importancia de recuperar ese caminar juntos, buena parte de la tarea se ha hecho. Así las cosas, las parroquias, las familias católicas y las pequeñas comunidades en los sectores, salones sociales, urbanizaciones o centros comerciales, tienen en la realización de la Novena de Navidad la mejor de las oportunidades para hacer el ejercicio sinodal que tiene dos componentes importantes: la escucha de la palabra de Dios y la escucha de la palabra de los hermanos. Una escucha que hoy se vuelve tan necesaria para descubrir lo que Dios quiere de cada uno. Por tanto, sugiero que se acoja y aproveche la Novena de Navidad que la Arquidiócesis de Cali ha preparado, con reflexiones apropiadas a la sinodalidad, acercándonos al espíritu de lo

que ella significa e invitándonos a poner la mirada en un grupo especial de personas, que no solo entendieron lo que era ese caminar juntos -sínodo-, sino que lo pusieron efectivamente en práctica. Me refiero a la Sagrada Familia de Nazaret. Primero los esposos José y María, estuvieron dispuestos a escuchar la palabra de Dios a través del ángel Gabriel; ambos fueron capaces de acoger su mensaje; ambos se pusieron en marcha, caminaron juntos a Belén, a Nazaret, a Egipto… Y luego, nacido Jesús, expresaron el fruto de la sinodalidad, en el servicio solidario al Hijo de Dios. Sugiero pues, que el esquema de la Novena de Navidad en Cali, sirva para el diálogo sinodal entre los que asistan, niños, jóvenes y adultos: ¿qué nos dice el mensaje?, ¿a qué nos comprometemos con dicho mensaje? Finalmente, ojalá seamos capaces de ponderar, en su justa medida, la realización de las novenas. Que el canto de los villancicos y las panderetas, las maracas y los gozos, no apoquen el momento del silencio, la escucha y el diálogo, de forma tal que de las celebraciones navideñas no queden solo los regalos, la natilla y los buñuelos, quede sobre todo el compromiso de ser mejores y de dejar que el Niño Dios nazca efectivamente en corazón de todos. Puede ser que celebremos Navidad y que Jesús nazca solo en los pesebres y no en los corazones de quienes lo invocamos cantando: “Ven, ven, no tardes tanto”. Feliz navidad y venturoso año 2022.


Vicaria para el Servicio del Desarrollo Humano Integral

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Santiago de Cali, Diciembre de 2021

La esperanza que no se apaga

“Jesús, nace para nosotros, con Él regresa la esperanza a un presente y futuro prometedor para nuestra ciudad”

Por: Pbro. Dagoberto Cárdenas Artunduaga Vicario Episcopal para el Servicio al Desarrollo Humano Integral

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legamos al último mes de este año 2021 tan atropellado y lleno de situaciones difíciles ocasionados por la pandemia, que aún no se ha ido y un paro nacional que mostró las desigualdades e inequidades que afronta nuestra ciudad. Un mes de balances y propósitos, pero también, el tiempo preciso donde nace la esperanza para todos, Cristo Jesús, que es verdaderamente quien trae la paz que tanto buscamos. Cali viene atravesando situaciones graves de violencia, de intolerancia, pobreza y exclusión, situaciones que no han permitido un desarrollo coherente y adecuado en todo su territorio. La intolerancia, el microtráfico, los robos están a la orden del día. Pero en medio de este caos y oscuridad, del dolor de los muertos que han dejado todas estas situaciones, también resplandece la luz, reflejada en cientos de personas, hombres

y mujeres, en especial de los jóvenes de las distintas comunas, que salieron de ese letargo e indiferencia en que vivián; comprendieron que esta no es la sociedad que quieren, que no pueden vivir más en la exclusión, en la pobreza y la marginación, que ellos son realmente el motor para que Cali surja, florezca como la ciudad pujante y sea un territorio de esperanza. Este surgimiento de la Cali soñada depende de muchas circunstancias externas, pero sobre todo de una reflexión personal, real, verdadera y consciente, sobre lo que somos como personas, como ciudadanos, capaces de auto evaluarnos, de reconocer qué tanto he dado para que la paz sea posible en este territorio, qué tan abierto estoy para mirar al otro como una persona distinta, con pensamientos muy contrarios a los míos, pero con la misma dignidad y los mismos derechos, siendo todos hijos de Dios. Para realizar una reflexión a conciencia de manera individual y colectiva de lo que, a lo largo de este año hemos vivido y de lo que vendrá, se hace necesario tener una experiencia viva y concreta con Dios, con aquel que nace en una pesebrera y que viene a iluminar nuestra existencia, pero, sobre todo, llega para traernos la paz.

Por ello, es necesario dejar que el corazón sea el lugar predilecto para el nacimiento del niño Jesús, es en esencia sembrar el amor, porque Jesús es amor, que se concreta en la paz que nos lleva luego a hacerla tangible en la relación que tenemos con los demás, por tanto, no podemos olvidarnos de hacer lo que Jesús quiere que hagamos: ser disponibles, generosos y solidarios con los demás, especialmente con los pobres, los enfermos, los que sufren las diversas violencias y marginación. Jesús, nace para nosotros, con Él regresa la esperanza a un presente y futuro prometedor para nuestra ciudad, por ello debemos dejar de lado los intereses individualistas, mezquinos, y violentos, comprometernos con seriedad, honestidad y transparencia a realizar nuestras tareas como ciudadanos responsables, teniendo en cuenta que iniciamos un año electoral donde todos debemos participar democráticamente si queremos que nuestro país cambie. Soñamos con una Colombia y en particular una Cali reconciliada, en paz, equitativa y con oportunidades. A propósito, recordemos al Papa Francisco en su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz del año

2019 quien nos decía: “es deber de cada persona, de toda persona, de conocer cuál es el contenido y el valor de la opción que se le presenta y según la cual se busca realizar colectivamente el bien de la ciudad, de la nación, de la humanidad.” Así mismo, invita a tener muy claro a la hora de la toma de decisiones y de participar en la elección de quienes dirigirán la nación, que “la buena política está al servicio de la paz; respeta y promueve los derechos humanos fundamentales, que son igualmente deberes recíprocos, de modo que se cree entre las generaciones presentes y futuras un vínculo de confianza y gratitud”. Como Vicario Episcopal, agradezco a cada una de las personas, organizaciones, instituciones públicas y privadas por el esfuerzo y el trabajo para lograr que a través del dialogo, la escucha, el reconocimiento del otro, en especial de los más vulnerables, han sembrado la semilla del desarrollo humano integral en este terruño vallecaucano. Que el niño Jesús que nace de lo alto, ilumine el camino que emprendemos hacia la paz y la reconciliación en nuestra ciudad-región. Feliz Navidad y próspero año 2022.


Vicaria para el Servicio del Desarrollo Humano Integral

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

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De los odios y la polarización Por: Luz Adriana Lozada Vidal Vicaría para el Servicio del Desarrollo Humano Integral

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stamos en un momento bastante difícil, además de las violencias, la pobreza, las desigualdades, el desempleo que están al orden del día, la polarización y los mensajes de odio que circulan en las redes sociales son una realidad de demuestra la manipulación de quienes de una u otra manera ostentan el poder hacia las personas, en especial las más vulnerables. Denigrar, insultar, acosar, deshonrar a quien opina distinto han sido el arma más utilizada como argumento para “debatir” un tema y en especial de carácter político. En estos mal llamados debates o discusiones, las personas no tienen en cuenta que pueden tener puntos comunes, sino que resaltan las diferencias, las divisiones, creando dinámicas

hostiles, agresivas, estigmatización y discriminación. En Twitter, Facebook Instagram y WhatsApp se producen discursos de odio y es cada vez más preocupante debido a su carácter extremo pero lo más delicado es que, muchos de ellos vienen de los mismos dirigentes y periodistas reconocidos, olvidando que tanto la política y el periodismo son un vehículo fundamental para edificar la ciudadanía, para la construcción de la unidad y de la paz. Por el contrario, se convierten en un instrumento de opresión, marginación, violencia e incluso de destrucción de la honra y la vida de las personas. Los ejemplos abundan y se van incrementando en la medida que se va acercando el tiempo electoral, según J.M. Berger, investigador y analista de actividades extremistas y el uso de las redes sociales, expresa que “la polarización social es un detonante del discurso de odio y lo que lo legitima. Estos mensajes agresivos son más notables cuando hay picos mediáticos a raíz de he-

chos concretos que generan debate y alarma social”. Los odios que se reflejan en las redes sociales tienden a ser más frecuente hacia personas vulnerables como los migrantes, el colectivo LGTBI, personas en situación de discapacidad, así como agresiones verbales por razones ideológicas, políticas, religiosas, deportivas o culturales, alimentando la xenofobia, la misoginia y otras formas de discriminación, esto que ha empezado en las redes sociales, traspasa las pantallas, pasa a las calles, y tiene consecuencias que pueden llegar a afectar a quienes los reciben y a incitar a otras personas a la violencia, incluso al asesinato, porque sin más ni más, se criminaliza y estigmatiza a quien no comulgue con sus ideas. La reflexión debe ir más allá, y preguntarnos ¿qué es lo que hace que brote en el corazón de los colombianos tantos odios? El odio es un sentimiento negativo, que conlleva a la estigmatización y a la intolerancia que ha ido calando en muchas de

los ciudadanos, enfrentado incluso a miembros de la misma familia. Entre tanta maldad y sufrimiento, la fe en aquel que nace y nos trae la paz verdadera, es el mejor antídoto ante tantos sufrimientos, guerras y odios, ella permite fortalecer los lazos sociales, la fraternidad y sobre todo la capacidad de diálogo, de reconocer al otro como hermano, hermana, distinto, pero con igualdad de dignidad, ella es ante todo el motor para vivir una fraternidad abierta a todos, al distinto, distante, indiferente, pero hermano, hermana, es decir, nos frena para no considerar al prójimo un enemigo o un adversario al que hay que eliminar, sino más bien, con quien poder construir, crecer, amar y transformar este mundo. Al finalizar este año 2021, respondamos estas dos preguntas sinceramente: ¿estoy contento con todo lo que está pasando en la ciudad y en el país? Y ¿qué estoy aportando para que la fraternidad sea el antídoto para estos odios que se carcomen a Colombia?

Dirección de Reconciliación y Paz

Conmemoración de la no violencia contra la mujer Por: Dirección de Reconciliación y Paz

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el 21 al 26 de noviembre de 2021, el proceso de Empoderamiento Ciudadano para la disminución de la violencia contra la mujer de la Dirección de Reconciliación y Paz se unió a la Conmemoración del día internacional de la NO violencia contra la mujer, enmarcada en una semana, la cual buscó promover un lenguaje incluyente, la equidad y el empoderamiento de los y las ciudadanos de Santiago de Cali. Se realizó la conmemoración de la no violencia contra la mujer, con las herramientas que todos y todas tenemos para la prevención, una de ellas, es la posibilidad de transformar nuestro lenguaje, no para negar que hay violencia, sino más bien para resaltar el empoderamiento de nuestras comunidades compuesta por hombres y mujeres que trabajan juntos por la equidad. Cabe resaltar que al utilizar un lenguaje discriminatorio y excluyente generamos brechas de

Equipo de la Dirección de Reconciliación y Paz

desigualdad que siguen perpetuando las violencias en los entornos de nuestra vida cotidiana, es necesario reflexionar sobre nuestros discursos y empezar a posicionar un lenguaje restaurativo, que nos reconstruya. Es por esto necesario reconsiderar aquellas frases micro machistas que día a día escuchamos en nuestro diario vivir, las cuales se han naturalizado y normalizado en nuestra sociedad, donde sutilmente va aumentando las violencias. Estas violencias generan distorsiones en el auto concepto, la autoestima y la autoimagen limitando nuestro crecimiento personal, por

lo tanto, es necesario pedir ayuda, pues mereces ser valorada o valorado desde lo que eres, entendiendo que podemos construir desde las diferencias y evolucionar desde aquello que nos hace comunes. Es necesario propiciar relaciones basada en el respeto, la equidad y la comunicación; así como renunciar a toda violencia hacia la otra persona, así mismo es importante entender que la masculinidad no es sinónimo de incapacidad de sentir, estas giran en torno a la corresponsabilidad familiar, donde los hombres son corresponsables del trabajo del hogar, tiene la capacidad para vivir, expresar, comunicar y

manejar adecuadamente sus emociones humana, además practican una paternidad afectiva en donde se involucran en el cuidado y la vida cotidiana de las/os hijas/os. Entre otros aspectos donde se resignifica los lenguajes poco incluyentes y se busca primar la equidad, la igualdad y la inclusión. Hoy queremos resaltar el empoderamiento de hombres y mujeres que se suman a la transformación de sus discursos, en discursos que sanan, resignifican y que construyen territorios equitativos y de paz. Es por esto que esta semana de la conmemoración de la No violencia contra la mujer, queremos hacer un llamado contundente “Tú haces parte de la transformación, la prevención de las violencias nos compete a todos”. Síguenos en nuestras redes sociales para más información: Dirección de Reconciliacion Y Paz de la Arquidiocesis de Cali Instagram: @proyectomujeres.arquicali Facebook: @mujeresymasculinidadesequitativas Correo electrónico: mujeresreconciliacionypaz@ gmail.com


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Observatorio de Realidades Sociales

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Ciudadanías que reflejan la esperanza de un mundo mejor Por: Observatorio de Realidades Sociales Arquidiócesis de Cali

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Seremos capaces de ser compañeros de camino? De mantener la sinodalidad, de tomar la palabra, de llegar a consensos y sobre todo de comprometernos en una construcción contra reloj”. Monseñor Darío Monsalve. 9 de nov. 2021. Conversatorio Cali 200 días despues. Próximos a cumplir dos años en los que las ciudadanías del mundo han tenido que enfrentar un escenario de profunda inestabilidad, donde sus formas de relacionarse, sus economías e incluso los procesos de construcción de comunidad, fueron puestas a prueba -ya sea por el impacto de la crisis biológica provocada dada la propagación del Covid-19, por las cada vez más masivas y sorpresivas migraciones, por la profundización de conflictos e insatisfacción social o por las posturas bélicas que azuzan enemistades y el mercado de armas–, lo cierto es que hemos transitado sobre un camino doloroso con la certidumbre de la pérdida, pero con nuevas fuerzas para andar y edificar juntos. En medio del acumulado de indicadores negativos que se expresan en nuestra realidad particular de ciudad-región, los diferentes actores sociales, institucionales y eclesiales, hemos podido retomar de la experiencia, elementos significativos para trabajar de forma mancomunada en la dignificación de la vida, en la motivación de unas ciudadanías que son determinantes para rectificar formas de interacción, asumir nuevos desafíos, incluso tienen el potencial de promover la transformación de las instituciones y remover los anquilosamientos. Esto se materializa en diferentes apuestas de territorio que tejen el diálogo, propician el pensamiento colectivo, buscan el mínimo común para el cuidado de la vida y encuentran nuevas formas de afrontar los conflictos sin la imposición de la violencia. A propósito (1) traemos a la memoria el mensaje de monseñor Gerardo Valencia Cano; (2) reconocemos lo que hemos sembrado este año en atención a la conflictividad social; y (3) esbozamos el desafío de gobernanza que tenemos de cara al futuro. 1. Nos habla el hermano mayor Providencialmente, en enero del 2022, conmemoraremos 50 años de la partida de Monseñor Gerardo Valencia, quien desde este territorio Pacífico, se dejó evangelizar por los desposeídos y encarnó mensajes que

El obispo del pueblo - Monseñor Gerardo Valencia Cano, 1971 - 1972

permanecen vigentes, en los que nos invita a escuchar: “el clamor de quienes sufren violencia y se ven oprimidos por sistemas y mecanismos injustos (…) también los interrogantes de un mundo que con su perversidad contradice el plan del Creador”; nos invita a dar lugar a cambios sociales sin violencia, fundamentales para construir verdadera comunión; en especial por lo que se refiere al poder transformador de lo que él llamaba un “movimiento íntimo” o “conciencia nueva”, en las que se gesta la acción para poner en cuestión las injusticias y los pactos inequitativos. En sus palabras, tomadas del encuentro Sinodal del año 1971: “Percibimos (…) un movimiento íntimo que impulsa al mundo desde abajo. En efecto, no faltan hechos que constituyen una contribución a la promoción de la justicia. Nace en los grupos humanos y en los mismos pueblos una conciencia nueva que los sacude contra la resignación al fatalismo y los impulsa a su liberación y a la responsabilidad de su propia suerte. Aparecen movimientos humanos que reflejan la esperanza de un mundo mejor y la voluntad de cambiar todo aquello que ya no se puede tolerar. 2. Lo que venimos sembrado… Reconociendo, que la explosión social ha hecho más visibles las profundas brechas socioeconómicas acumuladas durante años en escenarios de inequidad, abandono y exclusión sobre muchos seres humanos, hoy podemos rescatar tres capacidades, fortalecidas como sociedad, que nos ayudarán a trabajar en nuestro futuro compartido: (a) La capacidad de escucha y disposición para dialogar de forma asertiva. A través de la estrategia Tejiendo vida, con la que se vienen recorrien-

do puntos territoriales altamente impactados, en el marco de las manifestaciones ciudadanas, por la represión y las violencias que tuvieron lugar en el primer semestre del año, llevamos a cabo siete jornadas centradas en el diálogo social y abordando la necesidad de reconocer el potencial de cada territorialidad, sus liderazgos y su disposición para construir puentes entre actores. Sobre esto, resultan pertinentes las palabras del padre Dagoberto Cárdenas, expresadas en el evento de ciudad, Cali 200 días después, “Reconocer ese pensamiento diverso nos permite construir en medio de una sociedad que no sabe escuchar, en donde para poder avanzar ha sido necesario escuchar. Los empresarios, la ciudad, institucionalidad, han tenido que saber escuchar a la comunidad que se manifestó, escuchar realidades diversas, escuchar que quizá el pensamiento de que si uso mi beneficio el otro puede ser perjudicado. Toda acción será inútil si no parte de esa escucha, y esa escucha es en el territorio”. (b) Capacidad de resiliencia y fortalecimiento de los liderazgos comunitarios Diferentes hombres y mujeres están retomando hoy, desde sus barrios y comunas, las redes de apoyo que ayudaron a edificar durante los tiempos convulsos que nos afligieron, para emprender procesos propios de sanación, formación ciudadana para la vida en democracia y sobre todo, espacios de protección a la integridad del otro. Las Escuelas pal barrio, de la Escuela Entre Vecinos y Vecinas, o iniciativas como Universidad pal barrio, Escuela Comunitarias o Huertas por la paz, colectivos con los que hemos venido relacionándonos, son apenas algunos ejemplos del potencial trasformador de los liderazgos y de los esfuerzos micro-territoriales

que se emprenden todos los días por unas ciudadanías más conscientes, participativas y transformadoras. (c) Conexión permanente con nuestro entorno. Esto nos sugiere, entender la vida en sociedad como un equilibrio permanente con las diferentes esferas de la realidad. Por un lado, seguir tejiendo vínculos entre los diferentes espacios que reflejan ciudadanías diversas; por otro, y esto es una lección para los gobiernos, sobre todo los locales, insistir en la pertinencia de construir plataformas de participación reales, transparentes y eficientes. Además, de esto, hay un llamado a pensar en cómo construir estrategias de desarrollo económico que armonicen con la preservación de nuestra casa común, nuestro entorno natural. 3. Parte del desafío… Las capacidades mencionadas, nos llevan a pensar en sinodalidad, en articulación entre los actores que hacen posible la construcción de nuevos pactos ciudadanos orientados al bien común y la preservación de la vida y la dignidad. Esto en clave de gobernanza para la paz, es en últimas la búsqueda procesos relacionales para la interacción, mediación y acción (PNUD, 2012), en el que se promueve la conexión entre actores de la sociedad civil y las instituciones públicas, de tal forma que hagan posible la construcción de agendas viables para afrontar escenarios de conflicto que permitan el empoderamiento ciudadano y la estabilidad institucional de forma simultánea. Para ello requerimos: (I) promover instituciones responsables y realmente en capacidad de reflejar la diversidad del entorno social; (II) ciudadanías activas, empoderadas y en disposición de apoyar pactos resilientes; (III) promoción a los procesos de inclusión política y social para aquellos marginados de los espacios de incidencia; y finalmente, (IV) fomentar articulaciones estratégicas, donde, consideramos que, además de los sectores económicos, las organizaciones de la sociedad civil, las instituciones del Estado, hoy la Iglesia es fundamental en estos acuerdos como promotora de la hermandad, la reconciliación y el cuidado de la casa común. En palabras de monseñor Darío Monsalve, “La Iglesia seguirá siendo acompañante, servidora del diálogo, espacio de refugio humanitario de reencuentro y reconciliación”. Finalmente, les invitamos a llevar sus jornadas decembrinas en paz, atendiendo siempre al llamado de servir al quién lo necesita y a la reflexión permanente sobre los vínculos que estamos construyendo en cada una de nuestras comunidades.


Santiago de Cali, Diciembre de 2021

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Unicatólica

Bettyna Franky de Franky, primera mujer consiliaria de UNICATÓLICA

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a educadora Bettyna Franky de Franky, es una honorable mujer que ha destacado a nivel regional y nacional, por su entrega e interés al aportar su conocimiento y experiencia en el crecimiento del sector educativo del departamento del Valle del Cauca; fue la primera mujer consiliaria quien, en 1996, junto a Monseñor Isaías Duarte Cancino, ayudó a crear lo que hoy conocemos como Fundación Universitaria Católica Lumen Gentium – UNICATÓLICA. Con un título como magíster de educación de la University of Delaware (Estados Unidos), hoy día, Bettyna tiene una extensa historia de logros académicos que ha conseguido en pro de la comunidad caleña y vallecaucana, y diferentes cargos que la han posicionado como un elemento primordial en el desarrollo educativo del Pacífico colombiano. Por eso, en el marco de la celebración de los 25 años de UNICATÓLICA, hemos querido resaltar la labor de la doctora Franky de Franky; por lo que, en entrevista con la Institución, nos contó un poco más de su vida profesional y de la concepción que tiene de la Universidad en la actualidad. ¿Cómo llegó a ser parte de UNICATÓLICA? Yo conocí por medio del Cardenal Rubiano el Instituto Lumen Gentium y sus planes de convertirlo en una universidad. Posteriormente, Monseñor Isaías Duarte Cancino tuvo la gentileza de invitarme a prestar mi colaboración y apoyo a la Universidad en razón de mi amor y servicio a la educación. ¿Cuál fue su contribución en la construcción y desarrollo de la Universidad? Fui la primera mujer consiliaria de la Universidad y trabajé en su desarrollo porque necesitaba ampliar y abrir oportunidades a los estudiantes de Cali y del Valle del Cauca. También, hice algunas de las gestiones que se requieren en las primeras etapas de un proyecto universitario como este, entre ellas buscar auxilios y ayudas de las entidades gubernamentales para lograr su aprobación y recursos que se requirieron en el inicio.

Bettyna Franky de Franky, magister de educación de la Universidad de Delaware

¿Cómo percibe usted la Universidad hoy en día? Es muy satisfactorio ver su crecimiento en calidad y número de estudiantes en estos 25 años. La oferta de planes de estudio, las diferentes sedes y el número de egresados, todos son indicadores del impacto que tiene en la comunidad y de cómo ha logrado sus objetivos. ¿Cuáles han sido sus aportes en materia de educación para la ciudad de Cali y para la región? Como educadora, he trabajado siempre en beneficio de la educación y especialmente en la formación de los jóvenes de mi país. Tuve el privilegio de ser una de las primeras mujeres en el Valle de Cauca en obtener un Máster en Educación de una universidad extranjera; ese privilegio, fue también un reto al retornar a Colombia para prestar servicios en mi país. Fui fundadora y directora del Liceo Femenino de Bachillerato de Palmira, decana fundadora de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Santiago de Cali, secretaria de educación del Valle del Cauca, directora del Icetex; y congresista de Colombia, cargo en el que también aporté al sistema educativo del país, y representé al país en foros internacionales en materia de educación. ¿Podría darle un mensaje a la Institución teniendo en cuenta la celebración de sus 25 años? Mi mensaje, a más de mi emocionada felicitación por los resultados alcanzados en los 25 años, es que sigan adelante en la formación de la Colombia que todos amamos y que luchen por ella con Dios como nuestro guía. Todos los que han participado

de esta obra, administradores docentes y estudiantes deben estar orgullosos de ver crecer la Universidad, y desarrollar y sentir su impacto cada día más trascendental en la comunidad.

Es muy importante continuar con fe en esta tarea siempre defendiendo y mejorando la calidad de la educación, que es la que forma los profesionales que Colombia necesita.


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Lo que celebramos

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Fundaciones educativas Santa Isabel de Hungría y Alberto Uribe Urdaneta recibieron la certificación de calidad

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l pasado viernes 29 de octubre, en un acto protocolario que contó con la presencia del Secretario de Educación de Cali, José Darwin Lenis, el Arzobispo de Cali, Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía, el Rector de Unicatólica, Harold Enrique Banguero y la Directora de los Colegios Arquidiocesanos, Martha Isabel Gómez, las Fundaciones Educativas Santa Isabel de Hungría y Alberto Uribe Urdaneta recibieron la certificación ISO 9001:2015 a manos del Director Regional de ICONTEC, Juan Felipe Mora. “Quiero, junto a esta expresión de alegra, manifestar el agradecimiento más profundo. Esto es obra de liderazgo y tarea que todos han emprendido y en la que cada uno de ustedes, queridos rectores, personal de los centros administrativos, personal directivo se han comprometi-

Fundaciones educativas, trabajando por el mejoramiento continuo

do y lo han logrado”, expresó Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía. La certificación otorgada, da cuenta del trabajo que realizan las instituciones educativas de la Arquidiócesis

de Cali por cumplir con los mayores estándares de calidad y brindar el mejor la mejor educación y servicio a la comunidad, con los valores propios de esta Iglesia particular.

ORDENACIONES DIACONALES

“Esperamos que este camino lo podamos extender lo más amplio posible a las instituciones de la Arquidiócesis de Cali” afirmó el Arzobispo de Cali.

Transmisión por:

LIVE

18 de diciembre de 2021 - 10 a.m.

Arquidiócesis de Cali

Quienes por la gracia de Dios y para el servicio de la Iglesia recibirán el Sacramento del Orden por imposición de manos y oración consecratoria de Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía, arzobispo de Cali.

DIÁCONOS

Juan Pablo Castaño Cárdenas

Cristian Camilo Rebellón Rendón

DIÁCONOS PERMANENTES

Juan Carlos Gómez Gómez

Hernando Antonio Cantin Cortés

Javier Zorrilla Figueroa

Orlando Charry Tapiero

Orlando Rodríguez López


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Pastoral Penitenciaria

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Gratitud perenne a una vida de servicio en el mundo carcelario

La Pastoral Penitenciaria agradece por la labor del Pbro. Francisco José Rodríguez Díaz del Castillo

Por: Pbro. Carlos Alberto Usma Giraldo. Delegado de Pastoral Penitenciaria

E

n un sentido homenaje organizado por el Establecimiento Penitenciario Carcelario de Villahermosa y junto al Arzobispo de Cali, Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía y acompañado por el Director del Establecimiento, Dr. Edgar Alexander Mina Pérez; el Pbro. Eliécer Montañez Grimaldos, Capellán General del INPEC; Pbro. Carlos Alberto Usma Giraldo, Delegado Arzobispal para la Pastoral Penitenciaria; Pbro. José Dimas Orozco, Capellán

Regional Occidente; Pbro. Eiser Lucumí Chará, Capellán del Establecimiento de Jamundí; Dragoneante Lizeth Obregón Coordinadora de Atención y Tratamiento; Hermana Olga Lucía Arroyave Gómez, junto a directivos, dragoneantes, reclusos y voluntarios del establecimiento expresaron su más profunda gratitud al Pbro. Francisco José Rodríguez Díaz del Castillo, quien se desempeñó a lo largo de 30 años como capellán de dicho centro de reclusión, toda una vida pastoral de entrega y generosidad en beneficio de los hermanos privados de su libertad, sus familias y proyectos de vida; es así como su Padre y Pastor expresó “Es una alegría y un honor muy grande saber del reconocimiento que se hace hoy aquí, en este centro penitenciario, darle

gracias a Dios por tu labor y por tu testimonio y entrega, que nos ha bendecido a muchos y nos seguirán bendiciendo”. A su vez, el director del establecimiento agradeció al capellán saliente por su trabajo abnegado, expresando que “pese a la pandemia desde la distancia siempre sentimos el apoyo y ayuda humanitaria de su parte, ese es el fruto de su trabajo como servidor de la Iglesia”. Desde la Pastoral Penitenciaria le desean al padre Francisco sus mejores deseos en este inicio que

él mismo llamara “empezar a ser párroco” sin que se desvincule totalmente de su rol de pastor en el mundo carcelario como lo expresó el Pbro. Eliecer Montañez. Por otra parte, la Pastoral Penitenciaria extiende su abrazo y bendición a su querido hermano, Pbro. Yersón Mauricio Marmolejo Borrero, quien asume como su cargo como nuevo Capellán de Villahermosa; continuar los pasos del padre Francisco será un nuevo reto y una tarea ardua que junto a toda la Pastoral Penitenciaria seguiran apoyando.

08 de diciembre

Feliz Cumpleaños Excelentísimo monseñor

Luis Fernando Rodríguez Velásquez 30 años de servicio por los hermanos privados de la libertad


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Dirección de Reconciliación y Paz

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Navipaz Semillas y frutos de paz Por: Dirección de Reconciliación y Paz

L

NaviPaz, oportunidad para vivir el Adviento en reconciliación y paz

z a P i v de

paz

.

Na

a sociedad es atravesada por coyunturas sociales, políticas y de salud pública, que ha cambiado la vida de muchas personas, ha sido un año de altos y bajos, con dificultades y situaciones adversas de las cuales podemos resaltar la resiliencia, la acogida hacia el otro, la solidaridad y la sinodalidad, permitiendo rescatar la sana convivencia, la reconciliación y la paz en nuestros territorios. Navidad es el escenario perfecto para seguir en la esperanza de la lucha y la re-existencia que nos compete a todos, pues celebramos el nacimiento y la luz de Cristo que llega para alumbrar nuestro camino, es la oportunidad de un nosotros, sin exclusiones, donde cada persona como territorio de paz puede transformar con acciones su entorno desde lo individual hasta lo colectivo. Como Dirección de Reconciliación y Paz, desde el lunes 22 de noviembre hasta el miércoles 22 de diciembre, se vive un recorrido de las cuatro semanas de Adviento. La palabra latina “adventus” significa “venida”, refiriéndose a la venida de Jesucristo. La Iglesia da el nombre de Adviento a las cuatro semanas que están antes de la Navidad, como una oportunidad para prepararnos en la esperanza y en el arrepentimiento para la llegada del Señor, cabe resaltar que este tiempo tiene una triple finalidad, los cuales son: - Recordar el pasado: Celebrar y contemplar el nacimiento de Jesús en Belén. - Vivir el presente: Se trata de vivir en el presente de nuestra vida diaria la “presencia de Jesucristo” en nosotros. - Preparar el futuro: Se trata de prepararnos para la segunda venida de Jesucristo en la “majestad de su gloria “. De esta forma, cada semana tendrá una semilla que da lugar al tiempo de adviento; éste se desarrollará por medio de preguntas y actividades que irán acompañadas de un fruto reflejado con una acción comunitaria, invitando a los territorios a una introspección y a una mirada de iglesia, lo anterior se realizará en el marco de una estrategia llamada NaviPaz, la cual contará con las siguientes herramientas: - Camino de Adviento: Cada día, todos los beneficiarios recibirán vía redes sociales una pregunta de reflexión y una frase iluminadora para la vida en este camino. - Semillas y frutos: por grupo acompañado se hará un encuen-

S e m ill as y frutos

tro semanal donde se desarrollarán reflexiones en torno a la persona, la familia, la comunidad y la institución que propicien los territorios en paz, sembrando aquello que nos permitirá posteriormente recoger un fruto en lo común. - Encuentro del Centro de Paz: el 22 de diciembre habrá un encuentro de todos los grupos acompañados por la Dirección de Reconciliación y Paz, donde honraremos al Dios de la vida, celebraremos la vida, y daremos gracias por la vida. ITINERARIO El itinerario ha sido planteado desde el modelo de la Dirección, el cual trabaja en un espiral que conecta e interrelaciona a la persona, la familia, la comunidad, la institución y la casa común en un todo, que permite llevar una respuesta colectiva a los territorios, de esta manera las semanas se desarrollaran teniendo en cuenta el modelo anteriormente mencionado: SEGUNDA SEMANA DE ADVIENTO “Familia esperanza de vida” En la segunda semana se abordará la familia como valor fundamental de la sociedad, siendo representado en el camino de adviento por el color verde. Semana: lunes 29 de noviembre al viernes 3 de diciembre. Mensaje: Familia esperanza de vida

Semilla: Esperanza Fruto: Unidad TERCERA SEMANA DE ADVIENTO “Comunidad fuente de alegría” En la tercera semana se abordará la comunidad como fuente de alegría y de paz, siendo representado en el camino de adviento por el color rosado. Semana: lunes 6 al viernes 10 de diciembre. Mensaje: Comunidad fuente de alegría Semilla: Alegría Fruto: Lo común CUARTA SEMANA DE ADVIENTO “Institución cuidadora de la vida” En la cuarta semana se abordará la institución como cuidadora

de la vida, siendo representada en el camino de adviento por el color blanco. Semana: lunes 13 al viernes 17 de diciembre. Mensaje: Institución cuidadora de la vida Semilla: La vida Fruto: cuidado de la vida Te invitamos a vivir ese encuentro personal desde tu espiritualidad, junto a tu familia y tu comunidad, donde se espera propiciar un espacio de reflexión personal y social en los territorios que acompaña la Dirección de Reconciliación y Paz de la Arquidiócesis de Cali por medio de acciones comunitarias, que celebren y defiendan la vida y la paz.

Encuentros llenos de espiritualidad


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Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Entre compras y fiestas Por: José Luis Guzmán Ríos Integrante del grupo base de la Pastoral Juvenil Cali

S

iguen avanzando los días y el 2021 cada vez está más próximo a terminar, se avecina la navidad y el cuerpo lo sabe, el barrio lo sabe, todo el mundo lo sabe. Los locales del barrio y los centros comerciales comienzan a exhibir todos los artículos para decorar la navidad, arboles, luces, renos, muñecos de nieve; en fin, toda clase de adornos que nos llaman la atención para colocar en nuestras casas, probablemente en casa ya esté en temática de navidad o se están disponiendo para hacerlo. La mayor parte de la ciudad se está preparando para comprar y festejar, los almacenes están preparando su mejor mercancía para vender las mejores pintas y regalos para esta navidad, mientras que nosotros en casa pensamos desde ya ¿cuál va a ser esa pinta con que nos queremos lucir el 24 y 31?, pensamos en la lista de los regalos que más queremos, con la ilusión de encontrarlos debajo del árbol, se nos viene a nuestra cabeza los recuerdos de la novenas y los banquetes de manjarblanco y buñuelo que nos regalan, en las fiestas de la cuadra y en finalizar el año con las personas que más queremos. Mientras un ambiente navideño lleno de nieve, renos y un señor gordito vestido de rojo demasiado alegre se apodera de nuestro entorno, la Iglesia termina su año litúrgico y comienza un tiempo de meditación para prepáranos para la llegada del niño Jesús de Belén, comienza el tiempo de adviento. Como católicos es un tiempo lindo, porque el adviento no nos invita a no celebrar, nos invita a preparar nuestra celebración, a recordar, anhelar y esperar al cordero de Dios y es justo por eso que el corazón se llena domingo tras domingo de más gozo. El tiempo de adviento inicia el 28 de noviembre y dura cuatro semanas hasta el 24 de diciembre, los templos adoptan el co-

Disfruta el tiempo de Adviento desde la profundidad de la oración

lor morado que significa la espera, comenzamos a ver la famosa corona de adviento que trae tres velas en color morado (que representan la espera) y una vela rosada que significa alegría, algunas tienen una vela blanca en el centro que está reservada para prenderla el día de la navidad. Comenzar el año litúrgico con el adviento es comenzar un año llenos de esperanza, por eso recordamos el nacimiento de Jesús, por eso es tiempo para recordar la tradición, agradecer por el año que vivimos, discernir y poner en manos de Dios el año que viene; pero sobre todo es un tiempo para hacer de nuestro corazón una cuna para el niño Jesús. La invitación para ti que lees esto es a que disfrutes este tiempo de adviento desde la profundidad de la oración, en los templos, pero sobre todo en casa, aprovecha este tiempo para acercarte y acercar a los que más quieres a Dios. Tarea en tiempos de adviento: Arma tu propia corona de adviento, con las personas de tu casa, tu grupo juvenil o tus amigos más cercanos, reúnete con

ellos para prender cada domingo una velita, compartir algo de comer, reírse un poco, contarse

como han estado y meditar semana tras semana este tiempo de adviento.


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Vicaría para la Familia y la Cultura

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Seis razones para celebrar en familia la navidad

Celebremos la Navidad compartiendo en familia

Por: Vicaría para la Familia y la Cultura Fuente: www.blog.elroble.com

N

avidad es, sin duda, una época para compartir en familia. Es casi la única época del año en la que sentimos esa emoción por los recuerdos de las cenas en casa, el abrir regalos con nuestros padres y hermanos, el reventar cohetes con los primos y demás. Sin embargo, para muchos se convertirá en una experiencia dolorosa al recordar aquellos seres amados que partieron a causa de la pandemia y que han perdido también con esto, la motivación para celebrar tan hermoso acontecimiento. No es fácil festejar con el corazón adolorido, pero se hace necesario recordar que hay otros que caminan a nuestro lado y que merecen esa oportunidad de sonreír, porque quizás también, algún día partirán y no los habremos disfrutado lo suficiente. Otra realidad es que con el trabajo, los quehaceres diarios, las deudas, estudios y demás, muchas veces nos olvidamos de la importancia del tiempo en familia. Debido a la exigencia en la vida laboral y estudiantil y la competencia en el mercado, olvidamos dedicarle tiempo a las cosas que son verdaderamente importantes. A muchos, incluso, les pasa que llega el 24 de diciembre y ni siquiera han caído en la cuenta que es víspera de Navidad. Sí, lamentablemente con el paso del tiempo se ha perdido el

verdadero sentido de la Navidad entre los mil pendientes que tenemos y al final terminamos festejando de manera inconsciente el nacimiento del salvador. Sin embargo, es importante que cambien las cosas y celebremos la Navidad en familia y le devolvamos el valor que se merece, incluso podemos aprovechar para hacer un homenaje a nuestros seres queridos ausentes, entendiendo que eso sería lo que ellos más quisieran, vernos reunidos en familia disfrutando de esta bella época. A continuación te decimos por qué: 1. Ejemplo y amor La Navidad es una época en la que la solidaridad y el afecto se fomentan. Esto es vital para las familias porque los niños pueden aprovechar estas fechas para afianzar su identidad, estima y valía. Al formar parte de las celebraciones y los rituales familiares, su sentido de pertenencia y acercamiento crece y hace que se sientan mejor y seguros. Además, los pequeños que viven

la Navidad en familia fomentan en valor de la solidaridad, seguridad y unión. Aprenden a dar, recibir y compartir con los demás. 2. Podrás recuperar el tiempo perdido Si bien es cierto, el año pasa como si nada y pasan meses sin que hables lo suficiente con tus hermanos o demás familiares. Así que, una buena razón para celebrar y preparar la cena juntos, es que podrás ponerte al día con todos; podrás conversar, reír y disfrutar de todos. Incluso, podrás conocer a nuevos integrantes de la familia como sobrinitos o primitos.

Que el amor reine en sus hogares con la llegada del niño Jesús

3. Alimenta tu autoestima La familia es la que mejor te conoce. Te ha visto crecer y ha visto cómo logras tus sueños día a día. A pesar de todo, tu familia siempre te tendrá un cariño incondicional y es bueno que, al menos una vez al año, goces de este amor y de la alegría que tendrán los demás al verte. 4. Hacer feliz a tu familia Además de hacerlos feliz con tu presencia, podrás por fin regalarles algo como ellos lo hacían contigo. Verás que dar a tu familia te llenará de paz y alegría. Imagina por fin regalarles algo a tus papás o a tus hermanitos. Incluso puedes ilusionarte con la elección de los regalos porque te emocionará ver qué cara pondrán al abrirlos. 5. Balance No hay duda que la familia es una parte importante de nuestro bienestar y, estar bien con ellos, es indispensable para nuestro desarrollo personal. Así que, tómate el tiempo para reflexionar al respecto y tratar de mejorar las relaciones con quien lo creas debido este año. 6. Haz un brindis por los ausentes Reconocer la vida del que ya no está, no para revivir el dolor de su ausencia, sino para exaltar todos los bellos momentos que se vivieron con ese ser querido que nos marcó el corazón y nos dejó grandes enseñanzas. De seguro este ser amado también tendrá la posibilidad de disfrutar con notros tan grande celebración, ya sea en la distancia o en la Gloria de Dios. Brinda por ellos con alegría, porque se lo merecen. ¡Salud!


Santiago de Cali, Diciembre de 2021

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Actualidad

600 pesebres de todo el mundo se exhibirán en Cali

Visita la exposición en la parroquia la Inmaculada Concepción

Por: Kelly Sánchez Coordinadora de Comunicaciones Pastoral Social Cali

M

ás de 600 pesebres provenientes de diferentes lugares del mundo serán exhibidos en Cali desde la primera semana de diciembre, en la parroquia de la Inmaculada Concepción, en el barrio Los Álamos, dando entrada así al ambiente sinodal navideño. La muestra tendrá piezas de más de 30 países, entre ellos España, Italia, Perú, China, Colombia, Congo, Filipinas, Ecuador, Argentina, México, Portugal, Chile, Bolivia, El Salvador, Guatemala, Alemania, Honduras, Costa de Marfil, Senegal,

600 pesebres de diferentes países

Camerún, Japón, Madagascar y Bangladesh. Esta colección de pesebres (o nacimientos) ha sido adquirida por el Padre José Eugenio Hoyos, codirector de la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Cali y párroco de la Inmaculada Concepción, a lo largo de 30 años. Según el Padre Hoyos, la idea de coleccionar nacimientos se le ocurrió en Estados Unidos, al ver la necesidad de mostrar a la comunidad inmigrante que la figura de Jesús es universal, y que en torno al pesebre y al rezo de las novenas de aguinaldo podemos unirnos en familia. En esta exhibición, los asistentes podrán apreciar coloridos nacimientos de diferentes tamaños,

a escala normal y en miniatura, elaborados en variados materiales como madera, papel, metal, tela, vidrio, arcilla, cerámica, entre otros. Cabe recordar que fue San Francisco de Asís quien inició esta tradición navideña en el siglo XIII, que se ha extendido por todo el mundo cristiano hasta nuestros días. “Después de vivir días tan difíciles por cuenta de esta pandemia del Covid-19, que bueno sería, para refrescar nuestra fe y nuestra espiritualidad de adviento, recordar el nacimiento de Jesús a través de los tradicionales belenes”, dice el Padre Hoyos. El Presbítero señala que la Navidad no es solamente para rendirle culto al consumismo “y

visitar los centros comerciales, irnos de compras o dar regalos costosos para quedar bien entre amigos; es tiempo también de visitar nuestras iglesias y dejar que Jesús nazca en cada uno de nuestros corazones”. Asimismo, afirma que la razón y el centro de nuestra vida en esta época debe ser recibir a un Jesús solidario y feliz, que camina de la mano de su pueblo para traernos más esperanza y felicidad. Esta exhibición estará abierta al público hasta la segunda semana de enero de 2022. Lugar: Parroquia Inmaculada Concepción, Avenida 2A1N #2CN-02, barrio Los Álamos. ¡Todos son bienvenidos y bienvenidas!

La exposición estará disponible hasta la segunda semana de enero 2022


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Actualidad

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Congregación siervas y siervos de la divina misericordia

Foto: Archivo

Evangelización con los hermanos en condición de calle

Trabajando por los hermanos necesitados de la misericordia

T

odos los jueves, la Congregación Siervas & Siervos de la Divina Misericordia entrega más de 1.000 comidas a las personas en condición de calle, familias desfavorecidas, desplazados, infantes, madres cabezas de familia, adultos mayores en albergues y migrantes de los sectores del Calvario, Sucre, San Bosco, San Nicolas, Santa Rosa y Obrero. Iván Piedrahita, coordinador del ministerio Hijos de la misericordia manifiesta que la misión es llevar el don de la misericordia. Programamos un menú va-

riado, con aporte nutricional a base de proteínas, carbohidratos y vegetales. Nuestra labor comienza desde el mediodía con la preparación de alimentos en la casa de la congregación y también contamos con más de cinco familias que desde sus casas preparan alimentos que posteriormente recogemos. Sobre las 7:30 p.m. salimos de la casa de la congregación, con una previa oración y bendición sobre los alimentos. La vulnerabilidad de los habitantes en condición de calle en tiempos de pandemia es grande. El hambre y el miedo por contagiarse de COVID van en contravía de una población que clama por ayuda. Cada año tenemos una

jornada grande de evangelización y salud, donde atendemos mas de 900 habitantes de calle, con diversas estaciones de comida, enfermería, duchas, ropa y peluquería. Esta labor ha sido posible gracias a Dios y al amor y dedicación que muchas personas han venido entre-

gando, también contamos con el apoyo de la Alcaldía de Cali en sus secretarias de salud y bienestar social, la junta de acción comunal de los sectores donde hacemos la obra y la Policía Nacional. “Dios está presente para darnos esperanza y ánimo en el camino”

Invitamos a todas las personas a que se unan a esta hermosa misión y a los profesionales en ramas de la salud para que nos apoyen desde su profesión a llevar amor y esperanza. Para más información comunicarse al 3173832356 Visita: https://siervosdelamisericordia.com/

RECESO ADMINISTRATIVO CURIA ARZOBISPAL Nuestro último día de atención al público es el 17 de diciembre de 2021 a las 4:00 p.m. y retornaremos el día 14 de enero de 2022 a partir de las 7:30 a.m.

Participa para llevar amor y esperanza


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Pastoral Afro

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Sinodalidad y pueblo negro

L

a diversidad del pueblo afro y la severa desigualdad del país nos interpelan. Las ciudades grandes, como Cali, conocen la gran cantidad de gente que llegó con el desplazamiento forzado, pero todavía invisibilizan a afrodescendientes prósperos o a grupos más pequeños y tan antiguos como la Nación. El llamado del Papa Francisco a la sinodalidad incluye caminar juntos, escuchar y dialogar, incluso a otros grupos cristianos, a otras religiones y a los no creyentes. La realidad latinoamericana denunciar las raíces racistas y excluyentes de la filosofía y la teología tradicional para abrirle paso al diálogo con las religiones afro y, al mismo tiempo, con el pueblo negro cristiano y no católico. Ayudaría recordar la esposa africana de Moisés, al profeta afrodescendiente Sofonías o el cireneo que ayudó a Jesús a llevar la cruz. La Iglesia inició procesos de inclusión desde las primeras conferencias episcopales latinoamericanas hasta Aparecida, pero se está muy lejos de estructuras que celebren los dones del Señor para los pueblos negros en la formación religiosa y sacerdotal. La participación en lectorado y acolitado pueden abrir puertas más amplias, que promuevan el baile espontáneo y los acentos, las entonaciones regionales que recuerden la herencia africana.

Las poblaciones que luchan con la pobreza también pueden evangelizar a las más prósperas.

Celebramos las liturgias y los espacios que ven con alegría los vestuarios propios, vistosos y coloridos, en especial en la mujer. Sin embargo, se necesita aprovechar la formación que los mismos grupos ofrecen para darles su significado real y no dejarlos como algo meramente folclórico o exótico. Del mismo modo, la transparencia y la responsabilidad en las actividades eclesiales requiere un ejemplo especial de parte de la Iglesia en espacios donde la pobreza y la marginación han sido “normales” durante demasiado tiempo. Esfuerzos grandes en estructuras administrativas apenas si llegan como un eco ahí donde la exclusión es estructural.

Acerquémonos a la realidad profunda de los vestuarios más vistosos

La Arquidiócesis de Cali se cuenta entre las pocas que logra establecer una relación entre cultura afrodescendiente y evangelización, de forma que enriquece nuestro estilo de Iglesia. Es imprescindible abrirle caminos nuevos a esa riqueza para superar los muros que establecen las ciudades por temor a la inseguridad o para crear entornos “exclusivos”. Los órdenes coloniales y republicanos que determinaron la forma en que vivimos expulsaron a quien trabajaba duro por su dignidad y dejaron boquetes que originaron la corrupción, el narcotráfico y las formas violentas de resolver los conflictos. La ciudad

excluye de forma expresa a gran parte de sus poblaciones y todavía muchos creen que el racismo es algo ajeno. “Dejarlas ahí” lleva es a permitir el clientelismo, las roscas políticas y el microtráfico en prácticamente todos nuestros barrios. Los vecindarios de mayoría afro practican formas de hospitalidad e inclusión que son ellas mismas soluciones. Ubicarlas en el lugar que les corresponde ayuda, no solo a superar problemas, sino a discernir una Misión renovada, que reconozca que las poblaciones que luchan con la pobreza también pueden evangelizar a las más prósperas.


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Actualidad FELIZ CUMPLEAÑOS

Santiago de Cali, Diciembre de 2021

Celebración del Mes

DICIEMBRE

La Natividad de Nuestro Señor Jesús

Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo Auxiliar de Cali Diciembre 08 Vásquez Zapata William Alberto Martínez Figuerola Juan Miguel Jaramillo Caicedo Bladimir Urrego Parra Cesar Yesid, M.S.A. Otalvaro Palacio Joaquín Ruiz López Jorge Emerson Samboní Jhon Jairo Delgado Luis Fernando Alzate Ramírez Luis Hernando Bermúdez Patiño Cesar Augusto Guzmán Aguirre José Ricardo Restrepo Gómez Felipe Adolfo Cadavid Morales Jorge Humberto Zapata Beltrán Jorge Humberto Cardona Muñoz Jorge Tulio López González Pablo Alberto Carlos Alejandro Pabón Cárdenas, C.J.M.

25 de diciembre

03 03 04 05 08 08 14 15 16 16 19 21 24 27 27 27 28

ANIVERSARIO DE ORDENACIÓN

DICIEMBRE

Día López Villegas Iván Roberto Jaimes Ortiz José Luis Bohórquez Abad Jorge Eduardo Cruz Rendón Luis Hernando Estrada Giraldo Mauricio López Echeverry Luis Alfonso Londoño García Saul, M.X.Y. Navia Rengifo Moisés Alzate Ramírez Luis Hernando Gallego Muñetón Juan Carlos Montes Martínez Diego Alejandro Suárez Maldonado Miguel Adolfo Franky Alzate Álvaro Villanueva Plata Ricardo Antonio, S.D.B. Martínez Rodas Germán Tenorio Peña Gustavo Adolfo Galvis Uribe Julio Enrique Salgado José Ignacio Gallego Arias Daniel, C.M.F. Céspedes Loaiza Raúl Darío Cadavid Morales Jorge Humberto Correa Pareja William Gómez Trujillo José Bernardo Salazar Benítez Rafael Emiro Londoño Aguirre Onésimo de Jesús González José Bernal Burgos Humberto Javier Osorio Castro Elkin Martínez Cortés Octavio Villegas Arenas Efraín Rendón Ramírez Jofred Antonio Leudo Murillo Francisco Nel, O.F.M. Cov Estrada Cifuentes Luis Carlos Urrego Parra Cesar Yesit González Carmona Horacio Seguin Bartolo Roberto José, C.S.B. Ríos Sanclemente Luis Alberto Betancourt García Hernán Pérez Jaramillo Luis Eduardo Gómez Robayo Álvaro Hernando López González Pablo Alberto Riascos Mondragón Rodrigo Ramírez González Juan Manuel Vargas Martínez Juan Antonio, F.P. Carlos Alejandro Pabón Cárdenas, C.J.M. Rivera González Santiago, S.X. Vélez Acevedo Víctor Mauricio Cuervo Pineda Manuel José Albarracín Ávila Gilberto, C.M. Guerrero Cárdenas Efraín Zuluaga Romero John Jaime, S.V.D. Beltrán Ordoñez Alvin Alonso, S.D.B. Zapata Múnera Rubén Dalmiro Martínez Parra Jamer Harud Gómez Montes José Nicolás

1 1 1 3 4 4 4 4 5 5 5 5 5 6 6 7 7 7 7 7 8 8 8 8 8 8 8 9 9 9 10 10 12 12 12 13 15 15 15 17 17 17 18 18 19 19 19 19 20 20 21 21 22 27 27

Años de Servicio

30 17 35 22 28 28 33 28 23 6 6 12 51 24 41 40 35 35 35 35 47 44 38 42 38 33 27 54 43 37 20 26 10 12 34 52 4 42 42 55 27 27 10 13 50 29 14 68 51 40 30 25 22 13 36

FALLECIMIENTOS

DICIEMBRE

Ruiz Gómez Diego Marino Arias Delgado Pablo Emilio Molina Luis Antonio Lasso Mazuera William Mons. Alberto Uribe Urdaneta

03 04 05 10 13

Moreno Araujo Fernando Brynot Botero Londoño Alcides de Jesús

13 21

(Primer Arzobispo de Cali)

Cuando se cumplieron los acontecimientos que debían preceder al advenimiento del Mesías, de acuerdo con los vaticinios de los antiguos profetas, Jesús llamado el Cristo, Hijo de Dios eterno, se encarnó en el seno de la Virgen María y, hecho hombre, nació de ella para la redención de la humanidad. Desde la caída de nuestros primeros padres, la sabía y misericordiosa providencia de Dios había dispuesto gradualmente todas las cosas para la realización de sus promesas y el cumplimiento del más grande de sus misterios: la encarnación de su divino Hijo. Por aquel entonces, el Emperador Augusto emitió un decreto para llevar a cabo un censo en el cual todas las personas debían registrarse en un lugar determinado según sus respectivas provincias, ciudades y familias. Hasta Belén, cerca de la ciudad de Jerusalén, llegaron San José y la Virgen María procedentes de Nazaret, y estando allí, le llegó la hora de dar a luz de la Virgen, trayendo al mundo a su divino Hijo a quien envolvió en lienzos y lo recostó en la paja del pesebre. Oración Dios mío, que eres todo amor, gracias te doy por haber enviado para rescatarnos a tu divino Hijo: haz que comprendamos, amemos y practiquemos las lecciones que nos da en su pesebre. Me propongo amar a Dios sobre todas las cosas, y a mi prójimo como a mí mismo por amor de Dios; y en testimonio de este amor, diré con frecuencia: Divino niño Jesús, haz mi corazón semejante al tuyo. Amén. Fuente: ACI Prensa


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