INTRODUCCIÓN
En el libro “El Perú está Calato”, los autores Carlos Ganoza y Andrea Stiglich (2014) plantean que el crecimiento tan importante que ha tenido el Perú en los últimos años es un “falso milagro económico” porque hay un conjunto de fallas institucionales que no se aprecian en épocas de bonanza y felicidad, pero que serán de gran importancia cuando decrezca la economía. Coincidimos que la institucionalidad es fundamental para el desarrollo de un país porque sin ella no se podrá consolidar el crecimiento económico. Esta idea está muy bien sustentada por Douglas North (premio Nobel de Economía 1993); es por ello fundamental (y creo que se debe destacar y propiciar) que en nuestro país existan organismos públicos capaces de mantener un nivel significativo y respetado de institucionalidad que les permita diseñar y desarrollar políticas públicas en el marco de sus competencias, tanto para el corto como para el mediano plazo; es así que el Perú ha contado y cuenta con una entidad primordial para el desarrollo económico del Perú como es el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi). El Indecopi es una institución única a nivel mundial, con un modelo de organización muy particular, a veces difícil de comprender, pero que le ha permitido generar una serie de sinergias que han potenciado sus áreas. Su autonomía, tanto para la toma de decisiones como en materia presupuestal, es fundamental para mantener el modelo, junto a la permanente capacitación y reclutamiento de cuadros profesionales de alto nivel técnico y experiencia. Cuando asumimos el encargo de dirigir esta importante institución en el 2011, si bien el Indecopi no estaba “calato”, podemos decir que, luego de 19 años, su ropa lucía desgastada y los recursos con los que contaba para cambiarla y servir a los ciudadanos del milenio eran limitados. El Perú económico de los últimos años es muy diferente al de 1993 cuando entró en funcionamiento el Indecopi; por ejemplo, el Producto Bruto Interno (PBI) de ese entonces era
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