Areíto
Zona de la Cultura y de las ideas
www.hoy.com.do Editor: Bavegado Diseño: Carla González SÁBADO 3.11.2012
EL ÁLBUM DE LA PUCMM
Viaje con gráficos y textos a los inicios de una respetable institución universitaria Pág 3
VÍCTOR MATOS GARCÍA De refinada ironía y lucidez en la plástica dominicana Un notable representante de la “Generación del 80” expone su colección “Nudos” en la galería Bodden
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Invitación al retorno
Mocanos con mocanas
(carta a un emigrante)
en aquellos tiempos
La fe ante un desafío a la lógica
La vida en el exterior puede hacernos sentir apátridas y aunque tengas residencia o nacionalidad, pagues impuestos y tus hijos hayan crecido allá, nunca serás uno de ellos, nunca.
La endogamia caracterizó a la sociedad mocana del siglo 18, revelada a partir de la gran cantidad de actas en las que se señala la consanguinidad entre contrayentes.
Reflexión profunda y convincente sobre el misterio de la “Santísima Trinidad” a cargo de Leonardo Boff, teólogo y filósofo brasileño premiado por su lucha a favor de los débiles.
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HOY
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Sábado 3 de noviembre de 2012
Zona Areíto Areito
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Rafael García Romero (escritor y periodista) El dominio pleno de la lengua es clave, ya que ayuda al escritor a convocar las palabras correctas y los giros expresivos que inciden en la labor creativa. LA GUÍA
LEONARDO BOFF
LIBROS
En el principio está la comunión, no la soledad
E
scribíamos anteriormente que Dios es misterio en sí mismo y para sí mismo. Para los cristianos se trata de un misterio de comunión, no de soledad. Es la Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo. La ortodoxia afirma: hay tres Personas y un solo Dios. ¿Es eso posible? ¿No sería un absurdo 3=1? Aquí tocamos en lo que los cristianos sobrentienden cuando dicen “Dios”. Es diferente al monoteísmo absoluto judío y musulmán. Sin abandonar el monoteísmo, es necesaria una aclaración de esta Trinidad. El tres es con seguridad un número. Pero no como resultado de 1+1+1=3. Si pensamos así, matemáticamente, entonces Dios no es tres sino uno y único. El número tres funciona como un símbolo para indicar que bajo el nombre Dios hay comunión y no soledad, distinciones que no se excluyen sino que se incluyen, que no se oponen sino que se componen. El número tres sería como la aureola que colocamos simbólicamente alrededor de la cabeza de las personas santas. No es que ellas anden por ahí con esa aureola, sino que para nosotros es el símbolo que indica que estamos delante de figuras santas. Lo mismo ocurre con el número tres. Con el tres decimos que en Dios hay distinciones. Si no hubiese distinciones reinaría la soledad del uno. La palabra Trinidad (número tres) está en lugar de amor, comunión e inter-retro-relaciones. Trinidad significa exactamente esto: distinciones en Dios que permiten el intercambio y la mutua entrega de Padre, Hijo y Espíritu. En rigor, como ya lo vio el genio de san Agustín, no se debería hablar de tres personas. Cada Persona divina es única y los únicos no se suman porque el único no es un número. Si digo uno en términos de número, entonces no hay como parar: siguen el dos, el tres, el cuatro y así indefinidamente. Kant erróneamente lo entendió así y por eso rechazaba la idea de Trinidad. Por lo tanto, el número tres tiene valor simbólico y no matemático. ¿Qué es lo que simboliza? C. G. Jung viene en nuestra ayuda. Él escribió un amplio ensayo sobre el sentido arquetípico-simbólico de la Trinidad cristiana. El tres expresa la relación tan íntima e infinita entre las distintas Personas que se unifican, es decir, se hacen uno, un solo Dios. Pero si son tres Únicos ¿no resultaría el triteísmo, es decir, tres
Dioses en vez de uno, el monoteísmo? Así sería si funcionase la lógica matemática de los números. Si sumo una manga + una manga + una manga, resultan tres mangas. Pero con la Trinidad no es así, pues estamos delante de otra lógica, la de las relaciones interpersonales. Según esta lógica, las relaciones no se suman; ellas se entrelazan y se incluyen, formando una unidad. Así, padre, madre e hijos constituyen un único juego de relaciones, formando una única familia. La familia resulta de las relaciones inclusivas entre los miembros que la componen. No hay padre y madre sin hijo, ni hay hijo sin padre y madre. Los tres se unifican, se hacen uno, una única familia. Tres distintos pero una sola familia, la trinidad humana. Cuando hablamos de Dios-Trinidad entra en acción esta lógica de las relaciones interpersonales y no la de los números. En otras palabras: la naturaleza íntima de Dios no es soledad sino comunión. Si hubiese un solo Dios, reinaría verdaderamente la soledad absoluta. Si hubiese dos, uno frente a otro, habría distinción y al mismo tiempo separación y exclusión (uno no es el otro) y una mutua contemplación. ¿No sería egoísmo a dos? Con el tres, el uno y el dos se vuelven hacia el tres, superan la separación y se encuentran en el tres. Irrumpe la comunión circular y la inclusión de los unos en los otros, por los otros y con los otros, en una palabra: la Trinidad. Lo que primero existe es la simultaneidad de tres Únicos. Nadie es antes o después. Surgen juntos comunicándose siempre de manera recíproca y sin fin. Por eso decíamos: en el principio está la comunión. Como consecuencia de esta comunión infinita resulta la unión y la unidad en Dios. Entonces: tres Personas y un solo Dios-comunión. ¿No nos dicen exactamente eso los modernos cosmólogos? El universo está hecho de relaciones y no existe nada fuera de ellas. El universo es la gran metáfora de la Trinidad, todo es relación de todo con todo: un uni-verso. Y nosotros dentro de él.
ANTE UNA OBRA DE FINO ALIENTO Circula desde la semana pasada el libro de poemas “Pájaros del olvido”, de Ofelia Berrido, narradora y ensayista. De esta su última obra nos dice Bruno Rosario Candelier que la poesía de Ofelia se funda en una convicción metafísica cuyas raíces remontan a un claro concepto del ordenamiento de lo existente. En el prólogo explica que la creación poética de Berrido es una expresión de la dimensión espiritual y de su sensibilidad trascendente con una orientación hacia el sentido de la vida y el vínculo con lo sagrado. El libro “Pájaros del olvido” es presentado por la autora en tres partes: “Versos de asfalto”, “Extracto de amores y desamores” y “Lo inmutable”.
PARA NO PERDERSE DE LEERLO “Confidencia en torno al oscuro destino de la única mujer fatal”. Así titula sus “cuentos reunidos” el autor Roberto Marcallé Abreu, una colección de “Ediciones Ferilibro”, órgano editorial de la Feria Internacional del Libro de Santo Domingo. Una obra que el cultor de la buena lectura debe procurar en el mercado de los libros. Esta producción incluye los relatos de “Las dos muertes de José Inirio”, ganadora de un Primer Premio Jacques Viau del Movimiento Cultural Universitario. Marcallé ha escrito numerosos libros de cuentos y novelas. Es también autor de varios ensayos. Estudió economía, letras y periodismo en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). _ ____________________________________________________________________________
TESTIMONIOS MUY PERSONALES A PROPÓSITO DEL LEONISMO Salió de imprenta una recopilación de las actividades que anualmente realiza el leonismo dominicano. El impreso se titula “Conferencia de Otoño Elizardo Pérez Espinosa”. Su autor es Persiles Ayanes Pérez Méndez, doctor en derecho con ejercicio de diversas funciones en la Magistratura y en el Ministerio Público. Profesor jubilado de Unibe. Ha recibido condecoraciones y reconocimiento de diferentes países. Es autor de otra obra leonística titulada “Leonismo es fe en la convivencia humana”. Este nuevo trabajo viene a ser testimonio del reconocimiento y aprecio de los miembros del Club de Leones a don Elizardo Pérez Espinosa. _ ____________________________________________________________________________
Tere Vale, comunicadora y escritora con más de 20 años destacándose en el periodismo mexicano, tiene en circulación el texto “De frente y de perfil”, una notable reunión de testimonios de diez mexicanos de excepción. Su labor no solo consistió en lograr estupendos perfiles sino también en seleccionar a diez sobresalientes hombres y mujeres. Es un acierto conocer cómo piensan sobre diversos temas personas con historia como Silvia Pinal, Cuauhtémoc Cárdenas, Fernando del Paso, Mario Molina, Angélica María, Juan Ramón de la Fuente, José Woldenberg, Guillermo Arriaga, Alejandro Soberón y Alondra de la Parra. Dice Vale: “Ha sido una de las tareas más apasionantes y divertidas que he emprendido”.
LA HISTORIA/Fuente: Portal El Bibliófilo Enmascarado
1856
NACIÓ EL 3 DE NOVIEMBRE. Marcelino Menéndez y Pelayo, erudito español, traductor, filósofo y poeta, que escribió sobre temáticas diversas aunque se consagró fundamentalmente a la historia de las ideas y de la literatura. FALLECIÓ EL 4 DE NOVIEMBRE Ezequiel Martínez Estrada, ensayista, poeta y cuentista argentino. Dos veces Premio Nacional de Literatura, en 1933 por su obra poética y en 1937 por el ensayo “Radiografía de la Pampa”.
1964
_1964FALLECIÓEL4DENOVIEMBREEzequeilMartn íezEstrada,ensaysita,poetaycuentsitaargentn io.DosvecesPremoi NacoinaldeLtieratura,en1933porsuobrapoétciayen1937porelensayo“Radoigraafí deal Pampa
1943
NACIÓ 5 DE NOVIEMBRE Sam Shepard, considerado uno de los dramaturgos contemporáneos más importantes de Estados Unidos. Ganó el Premio Pulitzer en 1979 por su obra “Buried Child”. _
1880
NACIÓ 6 DE NOVIEMBRE Robert Musil, escritor austríaco. Es, junto con Thomas Mann y con F. Kafka, uno de los más importantes novelistas en lengua alemana del siglo XX. Su primera novela, “Los extravíos del alumno Törless”, le dio gran popularidad.
1990
FALLECIÓ 7 DE NOVIEMBRE George Lawrence Durrell, escritor británico. Su obra más conocida es la tetralogía “El cuarteto de Alejandría”. _
1847
NACIÓ 8 DE NOVIEMBRE Abraham Stoker, conocido como Bram Stoker, literato irlandés que se halla indisolublemente ligado a su obra “Drácula“, el más famoso de los vampiros.
Libros
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HOY
Un viaje al gran pasado de PUCMM Bernardo Vega
Eulogio Santaella
Jesús (Piño) Portela
Artagnan Pérez
José León
César García
Ramón Flores
Guillermo Caram
ÁNGELA PEÑA
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u objetivo es narrar la historia de 50 años de vida de una institución pero a través de sus imágenes y textos es posible apreciar el comportamiento general de la sociedad dominicana y parte del desarrollo global porque la mayoría de sus protagonistas y actores ha trascendido el mundo. Tras cada página hay fotos y nombres que se han hecho familiares por su presencia constante en la televisión, pronunciamientos en radio o prensa escrita o por la excepcional calidad que los ha hecho sobresalir en sus profesiones y especialidades. El Álbum Cincuentenario 1962-2012 de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra se puso a circular hace apenas una semana y la edición, auspiciada por Banreservas, debe estar al agotarse porque miles de egresados, profesores, vicerrectores, obreros, secretarias, choferes, jefes administrativos y docentes quieren evocar esos nostálgicos comienzos y volver a verse en esas tempranas fotos de sus años más jóvenes, resplandecientes pese a ser en blanco y negro, cuando se estrenaban como estudiantes o maestros en aquel Santiago que se abría al conocimiento recibiéndolos desde el interior, como bachilleres, o llegados del extranjero finalizando posgrados para incorporarse como docentes al naciente organismo que debutaba en la educación superior privada. El reconocido historiador, escritor, pintor y catedrático universitario Danilo de los Santos rescató fotografías postergadas en portafolios familiares, desempolvó archivos documentales, revivió colecciones artísticas, investigó en cajones de papeles inactivos y construyó el impresionante recuento de las Bodas de Oro de esta Universidad más allá de sus valiosos aportes educativos, científicos, económicos, sociales, culturales y de su singular comunidad que ha permanecido unida. Desde la elegante indumentaria de Ana Tavares de León, Caperusa Díaz de Almonte, Consuelo Imbert de Jorge, Claudina Tavares de Pastoriza, Ana Antonia Álvarez de Haché y Margarita Luna de Espaillat hasta “egresados líderes” como Abel Martínez, Tom Lluberes, Adriano Miguel Tejada, Aura Celeste Fernández, Bruno Rosario, Eduardo Trueba, Giuseppe Bonnarelli Schiffino, Francisco Domínguez Brito, Guillermo Moreno, Julio César Castaños Guzmán, Miriam Germán Brito, Mariano Rodríguez Rijo, Susy Pola, Rafael Emilio Yunén y otros cientos, los ojos no se alejan de esta publicación que es además deleite, evocación, enseñanza. De los Santos escribió cuanto aconteció en el principio y llegó hasta 2012 pero es probable que pocos estén reparando en sus ricos, profundos, sustanciosos relatos porque muchos buscan adivinar y adivinarse en esa
Obispos fundadores: Beras, Polanco, Pepén, Panal, O’Reilly.
sobreabundancia de ilustraciones tan espléndidamente conservadas, en el caso de los fundadores, o con tanta luz, color, brillo, ajuste, perfección, las del presente. Agripino Núñez Collado, rector desde hace 49 años, es mostrado desde sus años mozos, casual o formal, solemne o relajado, felizmente deportivo pedaleando una bicicleta, entregando diplomas, tomando juramentos, firmando acuerdos. Es, de los precursores, el único activo. Originalmente fue profesor y luego vicerrector. Está todo el alto clero nacional, el de aquellos comienzos y el actual pues la universidad es católica y además fue fundada por la Conferencia del Episcopado Dominicano el nueve de septiembre de 1962 haciendo honor, con su denominación, a una encíclica del papa Juan XXIII. Allí están por tanto los nuncios que han representado al Vaticano en la República en ese Rafael Acevedo medio siglo. Protagonistas. Miguel Sang, Tomás Pastoriza, Vicente Rubio, Flavio Espinal Hued, Alejandro Grullón, Víctor Espaillat, José Ángel Simón Zouain, Jorge Gobaira, Juan Antonio Haddad, Caonabo Almonte, Ramón Lorenzo Perelló, Francisco Augusto Lora, Orlando Menicucci, Juan Ferrand, Juan Cestero, Manuel José Cabral, Julio C. Estrella, Rafael Eleazar Cáceres, Juan Guillermo Franco, José María Hernández, Ramón García, Mercedes María Estrella, July Bisonó, Ramón Antonio Jiménez adornan con su fisonomía las historias como catedráticos, colaboradores, estudiantes, graduados, miembros de juntas o grupos. En esas calidades están Luis Gómez Cárdenas, Obdulia Estrella, Luis Crouch, Gabriel Aldebot, Mario Peralta, Jorge Rincón, Ramón Flores, Eduardo Latorre, Rafael Acevedo, Frank Moya Pons, Federico Carlos Álvarez, Luis y William Arthur, Mario Bonetti, Miguel Ángel Heredia, Dámaso Bello, Luis Bircann, Julio Cross, Norma Castillo, Iván García Guerra, Sonia Guzmán, Armando Hoepelman, Rafael Martínez, las hermanas Joaquín, Fer-
nando Pérez Memén, Dinápoles Soto Bello, Asunción Comas de Midence, Apolinar Núñez, Rafael Veras, Pedro Borrell, Pedro Porrello… Los padres César Hilario y Vinicio Franco, como autores de letra y música del Himno de la Ucamayma, y Herminio Alberti, Francisco González (Chico), Martha Beato, Zaidy Zouain, como actores y actrices; Federico Villamil, Jesús (Piño) Portela, Guillermo Caram, Miguel Gil Mejía, Zoila Valdez, Juan Jorge y otros miles, como catedráticos. El personal administrativo es un desfile interminable: Iris Pérez, Miriam Cerda, Natalia Benoit, Edmundo Pichardo, Matilde Thomén, Lourdes Escuder de Núñez, Emigdia Ramírez, Alberto Howellemont, Xiomara Pimentel, Gilberto Lora, Lucy Dalmau, Lourdes Beato, Alicia Guerra, Milito… Sacerdotes aún activos, como Richard Bencosme, y otros que después colgaron sotanas como Macario Aparicio Palanca, Job Luis Blasco Urigen, Emilio Lapayese del Río, están ahí luciendo todavía sus hábitos al igual que los padres Juan Montalvo, Felipe Arroyo, Luis Oraa y otros. Grandes coloquios a los que asistieron intelectuales de la estatura de Max Henríquez Ureña, Ramón Francisco, Freddy Gatón Arce, Pedro René Contín, María Ugarte, Alberto Baeza, Lupo Hernández, Héctor Incháustegui, Mariano Lebrón, quedan tan ampliamente consignados como las “novatadas”, reinas universitarias y tunas, los grupos de baile y cantos, primeros vehículos para transportar estudiantes y empleados. Una extensa galería de “Inolvidables” conforma esta novedosa publicación a la que no han escapado gobernantes que han tenido que ver con sus momentos más significativos, y los doctorados Honoris Causa desde los otorgados a Flérida de Nolasco y Heriberto Pieter hasta los de Carlos Fuentes y el cardenal Martínez Sistach. Las biografías de muchos, lo hacen útil, valioso. Es también himno a la unidad porque ningún miembro de esta familia que se formara allí quedó excluido, están los egresados de todos los años, de todas las carreras, de todos los recintos.
La obra tiene 579 páginas, mide 11 pulgadas de ancho por 13 y medio de largo. Pesa 10 libras.
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HOY
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CÁPSULAS GENEALÓGICAS www.idg.org.do/ Edwin Espinal
Encuentros
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¿Fue mejor el tiempo pasado?
Los archivos parroquiales de Moca
U
n elemento característico de la sociedad mocana de la época era la endogamia, revelada a partir de la gran cantidad de actas en las que se señala que los contrayentes eran dispensados por la consanguinidad existente entre ellos, en segundo, tercer o cuarto grado. Aparecen casos en los cuales los novios eran dispensados en dos y hasta cinco impedimentos, lo que revela que eran parientes en varias generaciones y a través de diferentes líneas. A partir de esas dispensas, queda claro que eran evidentemente reconocibles los entronques familiares en más de tres o cuatro generaciones. Por supuesto, en las actas no se precisa cuáles eran los parientes que los vinculaban consanguíneamente, ya que ello constaba en documentos previamente instrumentados. En una comparecencia personal por ante el cura párroco, los contrayentes declaraban quiénes eran sus padres, abuelos, bisabuelos, etc., hasta llegar a su ancestro común, información que era ratificada por terceros no vinculados familiarmente, conocedores de estos parientes, con lo cual el testimonio sobre su parentesco resultaba debidamente contrastado. El expediente formado con esas declaraciones era remitido a Santo Domingo, donde la máxima autoridad eclesiástica “dispensaba” entonces el impedimento que constituía su vínculo filial a fin de permitir el casamiento. Esas dispensas constituyen un riquísimo filón de datos genealógicos, no suficientemente estudiado hasta ahora, que permiten establecer parentescos insospechados y remontar orígenes familiares al siglo XVIII. En algunos casos, y como exponente del amancebamiento que era nota característica en determinada clase social, en las actas de matrimonio se hace mención de que los cónyuges eran dispensados por haber cometido “cópula incestuosa” previo a la ceremonia. Esas dispensas eran denominadas “de pública honestidad”, y hacían cesar el impedimento perpetuo que existía por la cuasiafinidad, esto es, el vínculo entre el varón y los consanguíneos de la mujer y viceversa, por su público y notorio concubinato. Los concubinos que aparecen casados “en artículo mortis”, es decir en un momento en que su muerte era inminente, no eran objeto de dispensa previa.
Conclusión La oportunidad de asegurar la fidelidad de informaciones orales sobre el origen de primigenias familias mocanas encuentra un apoyo fundamental en los libros de la parroquia de Nuestra Señora del Rosario. Es indudable que sus requisitos formales -día, mes, año, nombres, apellidos, nacionalidades, calidades, domicilios- constituyen un valioso conjunto de informaciones primarias para un investigador, pero sus referencias colaterales a los aspectos genealógicos aportan un valor agregado y permiten adentrarnos no sólo en la vida de un personaje o una familia, sino también en la de la comunidad toda. El material atesorado en estos libros de bautismos, matrimonios y defunciones es variado y rico. Su importancia para la Historia y la Genealogía se descubre como vital, pues, abarcando las minucias de la Historia Cotidiana, la Pequeña Historia, alcanzan la Gran Historia, la Historia Oficial.
Instituto Dominicano de Genealogía
MU-KIEN ADRIANA SANG
Grabado de la ciudad de Moca en 1871.
Si el sueño fuera (como dicen) una tregua, un puro reposo de la mente, ¿por qué, si te despiertan bruscamente, sientes que te han robado una fortuna? ¿Por qué es tan triste madrugar? La hora nos despoja de un don inconcebible, tan íntimo que sólo es traducible en un sopor que la vigilia dora de sueños, que bien pueden ser reflejos truncos de los tesoros de la sombra, de un orbe intemporal que no se nombra y que el día deforma en sus espejos. ¿Quién serás esta noche en el oscuro sueño, del otro lado de su muro?, El sueño,
Jorge Luis Borges
N
o sé si es ley de vida. Dicen algunos que nacemos rebeldes, y a medida que pasa el tiempo, nos vamos convirtiendo en conservadores; vamos acomodándonos y los sueños juveniles de ayer se olvidan, se entierran y se envían al rincón de los olvidos y los intereses. No pretendo contestar a mi hijo Alejandro Peña. Solo quiero hacer algunas reflexiones a partir de sus planteamientos y de los comentarios que generaron los artículos. Armando Paulino, buen amigo y fiel lector de mis Encuentros, me expresó, después de haber meditado largamente sobre el debate, que en el fondo yo, como la mayoría de los adultos, defendía el tiempo pasado como algo mejor que el presente. La opinión de Armandito, el diminutivo que usamos sus amigos, me hizo reflexionar. Volví a leer las ideas de Alejandro. Releí mis opiniones expresadas en el artículo sobre la juventud de hoy, y, autocríticamente reflexioné. He aquí mis conclusiones. Es posible que no pueda sustraerme de mi condición de mujer de mediana edad, que nació en un tiempo determinado y en un mundo distinto. Es posible que tal vez quiera inyectar a los jóvenes que me rodean mis viejas ilusiones y esperanzas maltratadas por la realidad de hoy. Es posible. Soy de las que piensa que las grandes transformaciones de la historia se han producido porque ha existido una masa crítica de su herencia, que no aceptó pasivamente lo que recibió, sino que soñó y luchó para cambiar y transformar. Los ejemplos sobran. Es cierto, como ha dicho el gran Claudio Sánchez Albornoz, que somos hijos de nuestros padres y nietos de nuestros abuelos, condenados a arrastrar por siempre las cadenas que nos atan a nuestros antepasados. No lo niego. Aceptar el pasado es para conocerlo, no para repetirlo. John Locke se dio cuenta que el absolutismo monárquico de Thomas Hobbes solo salvaba a la monarquía y a la burguesía emergente de la revolución burguesa, no al pueblo llano. Esa fue su herencia. Pero, haciendo uso de esas herramientas, pensó y propuso una transformación. En sus propuestas teóricas diseña de forma magistral una intermediación entre la sociedad civil y el Soberano. De ahí nacen las monarquías constitucionales que todavía hoy coexisten con la ideología liberal, republicana y antimonárquica. Toussaint Louverture era esclavo. Vivió co-
mo esclavo. Su herencia fue el dolor, la sobreexplotación de la gran masa de trabajadores sin derecho alguno, que ni siquiera podían reponer su fuerza de trabajo. Luchó y fue el padre de una de las revoluciones más emblemáticas de la historia de la humanidad. Juan Pablo Duarte nació poco antes de que se produjera la ocupación haitiana. Vivió bajo el gobierno de mano dura de Boyer. Y, aún reconociendo el derecho que tuvo Haití a luchar por su soberanía, fue el principal ideólogo de la nacionalidad dominicana. Salomé Ureña era una jovencita adolescente que se atrevió a incursionar en el mundo de la poesía. Vivió los enfrentamientos de los caudillos de turno por asaltar el poder, el incipiente y débil Estado dominicano. Pero no lo aceptó. Y con los recursos que contaba, su poesía batalladora, dejó piezas inolvidables como Ruinas, en las que expresaba una crítica mordaz al estado caótico en que los políticos de entonces habían convertido a la sociedad dominicana. Minerva Mirabal era una bella mujer muy acomodada. Prefirió entregar su vida, abandonar a sus hijos por los ideales de libertad. Vivió toda su vida bajo la férrea dictadura de Trujillo. Eso fue lo que conoció, pero no se conformó, y luchó. Podríamos seguir señalando otros ejemplos. La historia está plagada de héroes y heroínas, destacados y anónimos, que no se conformaron con los valores de la sociedad que los vio nacer, sino que fueron capaces de romper las cadenas, soñar y transformar. Ninguno de ellos, cuando osaron soñar y luchar eran viejos. Todo lo contrario. Salomé murió de afecciones pulmonares con apenas 47 años, después de haber sido declarada Poeta Nacional y de haber hecho los grandes aportes a la educación dominicana. Minerva Mirabal tenía 36 años cuando fue asesinada por los enviados del sátrapa asesino. Duarte apenas alcanzaba la treintena cuando fue enviado al exilio. ¿Tiene precio ser crítico? Sí, cuesta y mucho. Algunos pagan con sus vidas la osadía de ser rebeldes y contestatarios de su herencia. Otros, por querer ser ejemplos de vida, no pueden alcanzar los beneficios pecuniarios de los insensatos, arribistas y oportunistas. Ya no tengo las fuerzas para enarbolar un proyecto nuevo. Sólo me queda la energía para seguir siendo crítica de esta sociedad que, repito hasta el cansancio, se ha quedado sin alma, porque ha privilegiado el camino del TENER, porque ha pisoteado los principios elementales de la ética y ha enseñado a la juventud que si aceptan ser conformistas serán premiados con cosas, muchas cosas, que por un tiempo podrán acallar sus conciencias, pero al final de los días, cuando los jóvenes de hoy pasen balance, se darán cuenta que están vacíos, intrascendentes y desalmados. Así no quiero ser joven. Prefiero ser la cincuentona que todavía sueña con un mundo mejor. Finalizo este artículo con una hermosa frase del gran Ernesto Sábato: La Historia no es mecánica porque los hombres son libres para transformarla. ¡ He ahí el dilema!
mu-kiensang@hotmail.com
Aporte
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Rivalidad y abusos entre hermanos 5. Rivalidad y abusos entre hermanos alentados por uno de los padres
DIÓGENES CÉSPEDES
E
n el capítulo 7, titulado “Padres irresponsables”, paso por alto el tema, pues ya se ha visto la responsabilidad de los padres en la formación de la programación emocional o guión de vida del niño y de estos depende que en la edad adulta los hijos sean sanos o sicópatas. Debe leerse con detenimiento el punto sobre la rivalidad y abusos entre hermanos, la cual es alentada a menudo, irresponsablemente, por uno de los padres, pero el Dr. Romero aporta la solución acerca de cómo debe tratarse sana y adecuadamente este problema. En un apartado anterior el Dr. Romero habló de la sociedad patriarcal como la responsable del machismo y este a su vez de la violencia intrafamiliar, tema retomado en el capítulo 8 desde la perspectiva sicoanalítica y socio-cultural. El autor entra en el análisis de los estadios de cambios para los hombres abusivos y concluye con las siguientes palabras: “los hombres abusadores no se presentan necesariamente como tales fuera del seno familiar. De hecho, muchos proyectan una imagen de cariño, ternura y comprensión hacia su pareja. Por esa falsa imagen proyectada son admirados y respetados en su comunidad y su lugar de trabajo, ya que su inflexibilidad y su comportamiento de maltrato solo ocurren en la intimidad del hogar contra la mujer y, a veces, contra sus hijos.” (p. 117). En el capítulo 9 hay algo que casi todo el mundo, a partir de Freud conoce: que el sadismo y el masoquismo son fenómenos complementarios, es decir que uno no existe sin el otro. Pero lo que realmente debemos interiorizar de esta sicopatología es lo siguiente, tal como lo expone el Dr. Romero: “Los sentimientos infantiles de abandono y rechazo por los padres crean sentimientos de rebelión’, así como odio y resentimiento. [Pues son partes de la programación emocional, DC]. El masoquista se defiende de estos sentimientos y de la necesidad de castración, pero ‘simbólicamente se castra él mismo y así evita ‘ser castrado por otros’. El sádico, por su parte, se identifica simbólicamente con el agresor, y de esta manera inconscientemente cree que él es el castrador y no el castrado. En la práctica clínica encontramos múltiples ejemplos de mujeres que son ‘sádicamente maltratadas’, abandonan a su cónyuge y vuelven a la relación malsana creyendo que el abusador ha cambiado o cambiará, sin reconocer que su problema está basado en la psico-dinámica de la psicopatología que aquí explicamos. Esta es la respuesta a la pregunta de ¿por qué tantas mujeres maltratadas por su cónyuge supuestamente olvidan el maltrato, le creen que él se va a regenerar al oír que él le pide perdón por sus abusos, para poco tiempo después volver a sus viejas conductas de maltrato? En realidad, debido a su psicopatología el individuo no puede cambiar a menos que sea tratado psicoterapéuticamente.” (p. 121) Esto que dice el Dr. Romero es para nunca olvidar. Una guía para detectar al abusador o violador intrafamiliar es lo que ofrece la obra en el capítulo 10. Si usted está involucrado o involucrada en una relación con una persona que tenga estos 15 comportamientos es motivo de harta preocupación para su vida: 1) pobre control de los impulsos, 2) baja autoestima, 3) egoísta, 4) narcisista, 5) siempre necesita del tiempo suyo y nunca le corresponde a usted, 6) pocas habilidades sociales, 7) dificultad en establecer relaciones interpersonales ya sean sexuales o sociales, 8) es un alcohólico o drogadicto, 9) tiene historia de haber sido abusivo (física, verbal y sexualmente como joven o adulto), 10) tiene historia de enfermedad mental, 11) es persona dependiente de otras y es incapaz de mantenerse por sí sola (financiera y emocionalmente), 12) tiene comportamiento antisocial (no cree en las reglas de la sociedad y tiene sus propias reglas que le permiten acomodar inadecuadamente sus deseos y defectos), 13) necesita sentirse en control de todas las actividades familiares y ser el mandamás en todas las relaciones sociales, 14) es persona
agresiva, temeraria y desconsiderada, 15) está preocupada con el sexo todo el tiempo. Requiere de su pareja actividades sexuales todo el tiempo. Es una persona verdaderamente preocupada por el sexo. Cuando no lo obtiene de su pareja por estar ausente, se masturba compulsivamente. En este capítulo hay dos puntos cruciales para la vida sana: 1) Los padres deben aceptar a sus hijos tal como son; y 2) El respeto mutuo entre padres e hijos es prueba de una vida sana en cualquier hogar. En el capítulo 11, se abunda un poco acerca de lo que el Dr. Romero estudió cuando trató el tema de la relación sadomasoquista, o sea, por qué seleccionan las mujeres a los abusadores para sus relaciones íntimas (p. 130). El capítulo 12 trata del homicidio en niños y jóvenes. Está muy relacionado con la experiencia del Dr. Romero en los Estados Unidos. Pero el tema y su tratamiento son de interés para la sociedad dominicana porque en los últimos ocho años se ha desatado una fiebre inusitada de crímenes entre niños y adolescentes y en algo ha de servir a los padres dominicanos el desarrollo que de ese problema realiza el Dr. Romero. De todos modos, es importante leer las posiciones de dos grandes sicólogos norteamericanos sobre el tema (el Dr. Wittman y sus socios, en la página 138, y la del Dr. Douglas Sargent en la página 139). El propio Dr. Romero concluye en que “desafortunadamente, hasta ahora no hay ninguna solución para las diferentes controversias [sobre el homicidio en niños y jóvenes] y no la habrá hasta que se encuentre un sentido unitario de lo que el término ‘causa’ significa cuando se aplica al comportamiento humano.” (p. 136) Otro problema, tratado en el capítulo 12, el de la violación de niños, es de interés capital para la sociedad dominicana, pues en los últimos ocho años hemos asistido a una inédita ola de violaciones sexuales de niños, incluso de
recién nacidos, que muchas veces terminan en infanticidios, como si fuera imposible no dejar huellas de tanta atrocidad humana. Como la prensa dominicana pasa en esta época por un amarillismo sangriento debido a la cultura frívola o “light” que se ha enseñoreado del país, el sensacionalismo es responsable de que la sociedad dominicana conozca muchas de estas violaciones a niños y adolescentes, las cuales se mantenían en el más hermético secreto familiar o en un velo de misterio que encubría la realidad. Esta le ha dado una galleta sin mano a la sociedad que creía que estas monstruosidades no sucedían y de ahí la tendencia a negarlas. Pero el Dr. Romero nos explica cómo debemos entender ese fenómeno y cómo debemos encararlo: “El abuso sexual de los varones es un acto sexual que no puede ser ignorado. Sin embargo, es algo más que un acto sexual, porque si el adulto lo que quiere es utilizar a los niños para su propia satisfacción sexual, puede obtenerlo en otras circunstancias. También debemos señalar que en estos casos el abuso sexual es una ‘expresión de poder’, ‘deseo de control’ o un ‘acto de venganza’ que muchas veces por razones inconscientes son confundidos con un acto de amor, tal como se describe extensamente en los casos aquí tratados.” (p. 141). En este capítulo se tratan dos casos de violación de niños: el de Jorge y el de Enrique, por parte de los padres, hermanos y un vecino. Pero en el capítulo 12, titulado “Incesto”, el tratamiento es mucho más extenso dada la gravedad de este problema que ocupa hoy las páginas de la crónica roja de los periódicos. Hasta hace poco ni el Ministerio de Salud Pública ni los profesionales de la salud mental de nuestro país se preocupaban de este tema, al decir del Dr. Romero.
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De Señal a Señal
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DELIA BLANCO
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MO YAN Premio Nobel de Literatura 2012
E
s con su realismo alucinante que Mo Yan anuda el cuento, la historia y los fenómenos sociales contemporáneos. Este novelista chino obtuvo el Premio Nobel de Literatura 2012, siendo el segundo chino continental en recibirlo. Le antecedió en el año 2000 Gao Xinggian, disidente naturalizado francés. Es un gran acontecimiento para la literatura china contemporánea, merecedora de mayor conocimiento y crítica literaria internacional. El conjunto de la obra de Mo Yan está sellado por un realismo violento, que responde a las sacudidas y contradicciones de la sociedad china antes y después del comunismo. Su campo de telones literarios es muy amplio si nos referimos a sus frescas historias eróticas frente a los dramas humanos que el autor plantea en pleno siglo XIX, narrando historias de desequilibrados y bipolares, como la de un niño primogénito de una campesina china y un pastor evangélico sueco. Porque este escritor es un fabulador complejo, que ancla la literatura en la China antigua, a través de la tradición popular del cuento. Está claro que Mo Yan es muy polifacético, al igual que otros tremendos escritores, como Yu Hua, cuya obra Brothers tuvo un eco internacional pocas veces observado; así como la novelista Wang Anyi, muy considerada en los medios universitarios. Estos dos últimos pertenecen a la búsqueda literaria experimental, quienes con Ge Fei, por los años 80 desataban la acción en tiempos y lugares indeterminados. Mo Yan pertenece a los escritores que nutren la literatura en la exploración de las raíces, corriente que desaparece a principios de este siglo XXI. Aunque sin embargo, podemos asociarlo a los escritores modernistas. Son sorprendentes y casi desestabilizadores los referentes posibles con Faulkner, pues con estos dos autores podemos acercarnos y comparar dos mundos: el Condado de Yokna Patawpha y el Distrito de Gaomi, donde se desenvuelven la mayoría de las novelas de Mo Yan. Pensamos que su temperamento y enfoque literario están más cerca de la literatura latinoamericana, sobre todo de autores como García Márquez y Edwige Danticat, por la manera de compenetrar la escritura con el imaginario carnal, irracional y carnavalesco que le viene directamente de su experiencia en las campiñas chinas. Mo Yan reconoce la influencia de León Tolstói, William Faulkner y Gabriel García Márquez, en sus obras, pero en sus entrevistas confiesa que sus autores preferidos son Ernest Hemingway, Günter Grass y Yasunari Kawabata. Los chinos, Lu Xun y Wang Anyi. Vale la pena compenetrarse y detenerse, visualizando a fondo el discurso narrativo del autor, pues escribe con una fina y matizada percepción de la sociedad china contemporánea, sin dogmas ni giros panfletarios. Tiene un estilo imponente, impulsivo y vehemente, provisto de un humor vivaz y feroz; salpicado por un gran sentido de lo absurdo, y asumiendo un erotismo truculento. Sus descripciones de los usos y costumbres en la China de Mao Tse Tung no dejan ilesa la hipocresía del poder en un ambiente anárquico comparable al movimiento escénico del Circo de Pekín, con un guiño hacia una estética muy propia que podríamos llamar “kitch mandarín”. Otro elemento revelador del Nobel de Literatura 2012 es que confiesa que le atrae el sincretismo de lo real con lo fantástico, y que justamente tienen por decorado su provincia natal, Shandong, ubicada en el noroeste de China. Escribe con voluntad de libertad y señala las desviaciones y abusos de los caciques corrompidos en las filas del Partido Comunista Chino. Algunos le reprochan y dicen no entender su silencio y falta de solidaridad con los disidentes. Esto se entiende al indagar su historia personal y el proceso de su desenvolvimiento. Su nombre literario Mo Yan significa “el que se calla”, ironía que frente a un hombre con apenas 57 años, ya ha producido 57 libros….. Pero su silencio empezó en
el refugio que encontró en el Ejército Popular Chino después de ser expulsado de la escuela. Lo que significó para su familia una tremenda crisis pues sus padres eran campesinos paupérrimos, cuyo hijo conoció la hambruna hasta el punto de comerse la corteza de los árboles y chuparse las hojas para recibir gotas de resina o mineral nutriente; pues frente a la pobreza y a los años duros de la revolución maoísta, el joven Mo Yan, de nombre de pila Guan Moye, tuvo que exiliarse en el ejército para sobrevivir al hambre y al iletrismo, llegando a alcanzar el grado de coronel que todavía hoy mantiene. Muchos periodistas y críticos literarios de su obra dicen que él tiene un apego a su tierra que no quiere abandonar ni perder. Otros dicen que no toma posturas mediáticas de apoyo a los disidentes por su lealtad y agradecimiento a un sistema del cual señala sus taras, pero del que reconoce todas las oportunidades sociales y de desarrollo que le brindó. Él asegura en muchas entrevistas que se enroló en el Ejército Popular para no morirse de hambre. El hecho de haber llegado al grado de coronel le permite algunos privilegios de palabra satírica, que probablemente no tendría un ciudadano ordinario frente a las autoridades chinas. Más allá del conjunto de todas estas consideraciones, hay que aclarar que recibió el Premio Nobel de Literatura 2012 porque su obra es literatura y responde a los planteamientos literarios de la novela de finales del siglo XX, y principios del siglo XXI. Además, el conjunto de su obra responde plenamente a los enfoques dramáticos y societales de la
literatura posmoderna. En la etapa actual de la sociedad china, Mo Yan es un escritor que responde a los giros contradictorios y, a su vez, valientes que se dan en el seno de su país, y que viven las inmensas mayorías de la China continental. La fuerza de su obra novelística está en una gran capacidad descriptiva con un estilo de inteligencia nutrida de humor y desesperación algo kafkiana, pero que tiene la genialidad de hacernos cómplices de una China más humana, más real, más conmovedora que todos los fantasmas que quisieron dejar esa gran nación callada por los dictámenes del librito rojo… A Mo Yan hay que leerlo con dedicación y reflexión, y las dos obras que nos permiten acercarnos más a su propósito literario son Wa, en español Rana, su novela más reciente, y “La vida y la muerte me están desgastando”. Aconsejamos ver la película Sorgho Rojo, excelente adaptación de su novela hecha por el director Zhang Yimou. De repente, sueño con un coloquio abierto de literatura contemporánea china, invitación lanzada a la comunidad china dominicana, invitado especial: Mo Yan.
Aporte
AREÍTO
Sábado 3 de noviembre de 2012
Invitación al retorno (carta a un amigo en el extranjero)
P
FIDEL MUNNIGH
HOY
odrías llamarte Alexis, David o Javier. Podrías vivir en Nueva York, Munich o Madrid. Pero te llamas Ariosto y vives en Praga. Eres uno de los tantos dominicanos de la diáspora. Hace ya muchos años te marchaste a estudiar al extranjero, con sueños, con ilusiones, con deseos de superarte. Eras joven y querías vivir y soñabas con llegar a ser alguien algún día y soñabas con cambiar el mundo. Y como a mí, el país te hastiaba. Un continental no lo puede entender. Para un isleño, la insularidad es una condición difícil de soportar. Es a la vez un límite y una apertura que lo define. Haber nacido y vivido acá toda la vida nos parece ya incomprensible. Hay que salir del país para comprender muchas cosas. Hay que ver y correr mundo para crecer. Tú y yo hemos hecho una experiencia esencial que nadie nos puede arrebatar. La vida nos brindó la oportunidad de estar en el momento preciso en el lugar preciso. Hemos sido extranjeros solitarios, becarios anónimos, desarraigados, testigos privilegiados de una época de grandes cambios y mutaciones. Estábamos allí, en el centro mismo de los acontecimientos, aquel año crucial de 1989. Nos tocó vivir el desencanto del socialismo real y su inevitable derrumbe. Desde entonces no somos -no podemos ser- los mismos. Para bien o para mal, el mundo ha cambiado, y nosotros hemos cambiado con él. Hace más de dos décadas llegaste a Praga con una beca de estudios. Y con el tiempo te quedaste en Bohemia. Y te casaste y tuviste hijos. Todos estos años has elegido la vida en el extranjero, la vida de apátrida, porque aunque tengas residencia o nacionalidad y pagues impuestos y tus hijos hayan nacido y crecido allá, nunca serás uno de ellos, nunca. Has escogido la larga extranjería, el prolongado desarraigo, que no conduce a nada, salvo a la angustia y al ser esquizoide. Y ahora te acosan el desamparo y la soledad, la angustia de saber que no se forma -ni se formará jamás- parte del lugar en que se vive. Esa sensación angustiosa de no pertenecer al lugar donde estás no te suelta, no te deja tranquilo, no te da tregua día y noche. Y sientes como si no pertenecieras a ningún lugar, como si ya no tuvieras patria, o como si el mundo entero la fuera. Y, como nuestro admirado Kundera, crees que la vida está en otra parte. No hay nada que hacer allí, Ariosto, ya todo está hecho. Más allá de la experiencia humana y cultural, Europa tiene muy poco que darnos. Hoy se cierra cada vez más a los inmigrantes, a los transnacionales, se protege, se repliega en sí misma. Ni tú, ni yo, ni tantos otros entramos en el proyecto de los pueblos europeos. La competencia siempre nos colocará en cuarta o quinta fila, y tendremos suerte si se nos toma en cuenta. Los buenos empleos no serán para nosotros, sino para ellos. Dicen que si eres muy bueno en algo puedes quedarte y tener éxito allí. Es posible, pero no hay que exigirle a ningún extranjero ser un genio para poder quedarse y trabajar en Europa o Norteamérica. Un día eso lo comprendí. Me llevó un tiempo comprenderlo, pero al fin lo comprendí. Entonces decidí volver al país. Tú y yo hemos vivido las esperanzas y las dulzuras de un exilio voluntariamente elegido. No fue fácil adaptarse a todo aquello, a la convivencia diaria con gente de tan distinto origen. No fue fácil aguantar un frío de seis meses, sobrellevar la soledad, superar las barreras del idioma, someterse a numerosas pruebas académicas en una lengua intrincada que no es la tuya. Nos hemos hecho fuertes en la batalla. Recuerda a Nietzsche: “Lo que no nos mata, nos hace más fuertes”. Pero la vida es cruel, Ariosto, muy cruel, y no todos llegan a hacerse más fuertes. ¿Te acuerdas de aquel compatriota que estudiaba cibernética en Brno? ¿Cómo se llamaba? Apareció un día muerto. Destrozado. Cayó desde la ventana de la cocina del séptimo piso de la residencia universitaria donde vi-
vía. La policía barajó varias hipótesis sobre el hecho. No sabemos si se tiró, o si lo tiraron, o si resbaló del alféizar donde solía apoyarse. Su muerte nos sorprendió a todos y nos dolió mucho. Era un buen muchacho él, amistoso, afable, deportivo, algo introvertido y reservado. Nunca nos confesó aquello que le atormentaba. Recuerdo que llegó a escribirme varias cartas. En una de ellas me decía que los dominicanos eran buena gente por separado, como individuos, pero que cuando se juntaban eran un desastre, pues nunca llegaban a ponerse de acuerdo en nada. Lo escribía así, en tercera persona del plural, como excluyéndose del grupo: los dominicanos eran. Quizá tuviera razón. Hay que hacerse fuerte para soportar los reveses de la vida, para encarar un fracaso académico o el
PELLETIER
fin de un gran idilio. Ahora estoy acá y tú sigues allá. Yo vivo hace años la experiencia del retorno, mientras tú te debates en interminables dudas. Lo entiendo, después de más de veinte años de ausencia, se hace difícil regresar. Uno termina acostumbrándose al nuevo entorno que llega a conocer bien, aunque le sea hostil, y teme volver al lugar de origen. Por eso aún no te decides a volver, vacilas, quizá por miedo a lo que puedas hallar a la vuelta, mientras pasas tus mejores años en un país en donde ya no quieres vivir y añoras una patria que ya no reconoces como tuya porque en todo ese tiempo ha cambiado demasiado. Y vives escindido, desgarrado, du-
dando entre el acá y el allá, sintiéndote de ninguna parte, harto de todo, harto también de mendigar patria en otros suelos. El retorno es una apuesta en la que arriesgamos todo nuestro ser. La vida misma es una apuesta. Vivimos apostando por algo o por alguien. “Estáis embarcados”, escribe Pascal, a quien releo en estos días. Estamos embarcados, Ariosto. Podemos escoger libremente, es cierto, pero también estamos obligados a escoger. Y hay que apostar. La apuesta por el retorno es algo impostergable. Tienes tantas razones para retornar al país como para permanecer en el extranjero, pero creo que las primeras son más fuertes y determinantes y pesan más en ti. Cuando me preguntan por qué he vuelto, respondo que este es mi país y que aquí nací. Cuando me objetan que critico mucho, contesto que ejerzo mi derecho soberano a la crítica y la disensión. Por eso a veces escribo sobre cosas que no me gustan, porque pienso que no vivimos en el mejor de los países posibles y que esta patria maltratada sería mejor para todos, si de verdad lo quisiéramos. Pero nos falta voluntad de mejoramiento, de orden, de justicia. Vivimos en la cultura del robo, de la mentira y el engaño, de la impunidad. Vivimos arrastrando la herencia de un pasado nefasto y de una tradición autoritaria bajo la cual hemos consumido las mayores fuerzas y los mejores años. Vivimos, como aquella metáfora de Silvio Rodríguez, “arando el porvenir con viejos bueyes”. No todo es malo aquí, Ariosto, pero el mal se nos ha convertido en presencia constante y no nos atrevemos a llamarle por su nombre, ni a encerrar a los culpables, y esto es una tremenda irresponsabilidad moral. No tenemos otro país, y nos duele tanto. Considera ahora tu situación existencial. Considera los años que tienes y los que te restan por vivir. ¿Qué quieres, a dónde vas, qué piensas hacer con tu vida única, irrepetible? Sopesa los pros y los contras. Allí es el orden, la disciplina, las instituciones sólidas, los buenos servicios, el tranvía y el metro a la hora exacta, el tránsito “por el librito”. Aquí, el desorden y el ruido, la basura, la carencia o la deficiencia de servicios básicos, los apagones, el tránsito caótico. Allí, la frialdad y la distancia, la soledad y el desarraigo, la falta de amigos, el racismo, la xenofobia, los “skinheads”. Aquí, la calidez, la solidaridad, los buenos amigos de siempre, la alegría espontánea, el buen humor. Como verás, esta carta es una invitación al retorno. Los muchachos y yo estamos convencidos de que te vendría bien. Los que hemos retornado, mal que bien, seguimos dando la batalla, no tiramos la toalla. Y aunque el mundo sea ancho y ajeno como se dice, sentimos ser más de aquí que de cualquier otro lugar. No te escribo para convencerte de que retornes. Te escribo para que lo medites seriamente. Pero sí te convido a que lo hagas, a que después de tantos años de ausencia retornes al país y pruebes suerte, como lo han hecho otros, como lo he hecho yo mismo. Te perdono aquella ofensa, hermano. Te perdono haber herido mi orgullo intelectual. Te perdono haber ofendido a los muchachos. Sé que aquella noche en Plaza España no estabas en tus cabales y que todos andábamos exaltados. No voy a incurrir ahora en el lugar común de decirte que “el país te necesita” (bien sabes cómo detesto los lugares comunes). Sólo te diré que sería una lástima que perdieras todo este precioso tiempo en un país y un continente en donde no tienes ningún futuro. Estoy casi seguro de que aquí tendrás éxito y te sentirás mejor contigo mismo. Reynaldo y Rafael y Frank, que siempre te recuerdan bien, te animan a volver. Si te decides a hacerlo, puedes contar con nosotros. Te queremos mucho y esperamos tu retorno. Recibe de mí un fuerte abrazo, hermano. Siempre tuyo,
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AREÍTO
Sábado 3 de noviembre de 2012
Arte Contemporáneo
HOY
En la galería Bodden
VÍCTOR MATOS GARCÍA
Sin título.
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AMABLE LÓPEZ MELÉNDEZ
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esde la noche del pasado jueves 18 de octubre, la Galería Bodden, localizada en la calle El Buen Pastor 18, del sector Piantini, presenta la exposición titulada “Nudos”, compuesta por más de veinte obras entre pinturas sobre tela y dibujos en técnica mixta sobre papel de la autoría de Víctor Matos García (1947), uno de los más consistentes y destacados representantes de la denominada “Generación del 80” en Santo Domingo. Durante más de dos décadas, he seguido discretamente la trayectoria artística de Víctor Matos García. En este trayecto, él llega a plasmar, con rigor y virtuosismo admirables, uno de los universos visuales más rigurosos, cálidos, sugestivos y enriquecedores de la plástica dominicana contemporánea. En efecto, Matos García procede siempre con refinada ironía y lucidez, reflexionando sensiblemente sobre las circunstancias de la individualidad en una sociedad abismada en los ritos y mitologías cotidianos de la tragedia, la paradoja, el deseo, el amor, la soledad, el desencuentro, la comunicación, las emociones y las relaciones íntimas. En esta nueva exhibición de la Galería Bodden, Matos García se refirma en sus búsquedas formales, técnicas y estilísticas, mediante una dicción plástica de raíces posexpresionistas basada en sus brillantes y emotivos juegos con la línea, el color y las texturas, a través de los cuales intensifica sus lúdicas observaciones sobre los sentimientos, la teatralidad y los gestuales expresivos en los que se desdibujan los perfiles de la individualidad, la “realidad” (el simulacro), la convivencia y la condición humana en medio de los folclóricos e inquietantes escenarios psicosociales de la posmodernidad. Precisamente, sobre esta importante muestra de Víctor Matos García, el reconocido escritor dominicano José Enrique García nos advierte que: “En la tela y papel se manifiestan estos nudos interiores, veamos: en la composición íntegra, cada obra responde a una estructura cerrada y a un impulso imaginario. En ella hay que resaltar la narrativa de la historia. Sí, el drama que palpita en cada una de sus obras está sustentado en un relato en el que participan personas, sucesos, conflictos, y con
Contorsionistas.
Contorsionista II.
VíCTOR MATOS Víctor Matos García nació en la ciudad de Barahona, en 1947. Realizó estudios en la Escuela Nacional de Bellas Artes y en el Centro de Arte Cándido Bidó, donde tuvo como profesores a Pedro G. de Villena, Aída Cartagena Portalatín y al Dr. Mairení Cabral, así como a los consagrados artistas José Ramón Rotellini, Elsa Núñez, Cándido Bidó y Guillo Pérez. Con su obra “Niña hablando por teléfono” obtuvo el Primer Premio de Pintura de la XVll Bienal Nacional de Artes Visuales (1990). Entre sus principales exposiciones individuales destacan: Tercera Exposición Individual, Nouveau Centro de Arte (1985), Cuarta Exposición Individual, Museo de Arte Moderno (1990); “Musicians”, Galería Atelier Gazcue (1993); Obras Recientes-1996-99-(1999); “Metamorfosis después de Kafka”, Galería Elespacio (2001) y Obras Recientes, Galería Elespacio (2005). Víctor Matos García ha exhibido sus obras exitosamente en importantes galerías, museos y centros culturales de Europa, Estados Unidos, el Caribe y América Latina. Es miembro del Colegio Dominicano de Artistas Plásticos -Codap-.
ello, la trama en la que prevalecen lo grotesco y burlesco, la ironía y el sarcasmo, la risa retorcida y la mueca, el gesto que expulsa lo que adentro se esconde: miedo, terror, angustia, dolores de ancestros, anhelo y deseo, imposibilidades, esperanza también… “En composición también se advierten amplios trazos y gruesas texturas, los procurados retorcijones, las contorsiones en los rostros y en el cuerpo, en los objetos, en los espacios. Así, lo que empuja desde adentro se hace visible en el dibujo, en el color, en el blancor y temblor de la superficie que desaparece con la imagen que se cera desde el pulso del pintor…Lo poético arranca con la disposición en la tela y en el papel, personajes, líneas, colores. Existen en estas disposiciones, en la mayoría de las obras, una especie de relato que provoca esa sensación de diálogo o monólogo que se advierte y respira y se asume de ellas…
Contorsionista I.
“En esta nueva exhibición, que titula Nudos, ratifica y profundiza su mundo visual y más aún lo fundamenta y lo pone de manifiesto una misma retórica en la que se privilegia lo inadvertido que convive con lo muy habitual y ordinario: y en la que se pone de manifiesto que lo antológico no pertenece a un momento ni a una escuela, vive y palpita en el transcurrir siempre, se oculta a veces, pero está ardiendo ahí en la naturaleza íntima que sale a la superficie en gestos, formas distintas y distantes de las que el ojo capta habitualmente, interioridades que también es fuego, divertimento en el más puro sentido de lo trágico…Ante una obra de Matos García, la pregunta irrumpe necesariamente: ¿dónde estuvo este hombre? ¿En un ático de Bélgica, en Madrid, Bruselas, o un cuarto-estudio de Nueva York? Pintura cosmopolita, provocada en un filón de tierra de la ciudad de Santo Domingo”.