Hoya de Huesca Turismo 2023

Guía de Turismo

Introducción

La Comarca de la Hoya de Huesca es una zona de transición entre las sierras prepirenaicas y el valle del Ebro, donde un tercio del territorio se sitúa en zona de montaña, con amplias zonas forestales, y el resto ocupa una gran llanura cerealista, cuyo núcleo central es la ciudad de Huesca, capital comarcal y provincial.

Ocupa una extensión de 2525 km2, en la que se ubican 40 municipios con más de 120 núcleos de población, que aglutinan a más de 66.000 habitantes, de los cuales en torno a 54.000 se encuentran censados en Huesca capital.

Fruto de su situación en plena transición geográfica de la montaña al llano, la Hoya de Huesca cuenta con gran variedad de recursos turísticos naturales y patrimoniales.

Atalaya de Santa Eulalia la Mayor ante la Sierra de Guara.

Mapa

La ciudad de Huesca, centro de la comarca, cuenta con muy buenos accesos por carretera. Se llega a ella con solo 4 horas de trayecto en coche desde Madrid, 3 desde Barcelona o 3’5 de Bilbao y 1 de la frontera con Francia. Huesca es ciudad AVE y la Hoya es atravesada por la línea de ferrocarril de media distancia Zaragoza-Canfranc.

Cultura y Patrimonio

La situación de la Hoya de Huesca, como punto de encuentro de las estribaciones pirenaicas con la llanura que se extiende hacia el valle del Ebro, ha impreso a esta comarca un carácter de tierra de fusión de culturas y modos de vida a lo largo de su historia.

Restos prehistóricos y época antigua

Hay constancia de presencia humana desde el Paleolítico. Algunas de las muestras más sobresalientes de la cultura prehistórica se pueden visitar en el Museo de Huesca, de Arqueología y Bellas Artes. Sobre el territorio, podemos visitar destacadas manifestaciones de monumentos megalíticos, como el dolmen de Piatra en Belsué o el Palomar en Nocito.

La llegada de Roma (siglo III a. C.) supuso un impulso definitivo al proceso de urbanización. La Osca romana fue un importante municipio de la Hispania Citerior. Acuñ ó moneda, contó con soberbias infraestructuras (murallas, templos, teatro…), con villae en su entorno e incluso impuls ó la construcción de acueductos y canalizaciones que garantizaban el abastecimiento de agua para sus habitantes y campos de cultivo, como el que aún se puede ver en Quicena.

Sin lugar a duda, las calzadas fueron uno de los elementos más distintivos y estratégicos para el proceso de romanización. Toda la Hoya se encuentra atravesada por rutas, con algunos tramos conservados, como el perteneciente a la vía Osca-Ilerda en la localidad de Pertusa.

Colegiata de Bolea.

Notable legado medieval en tierra de frontera

Las sierras del norte desempeñaron un importante papel de frontera en la Edad Media entre cristianos y árabes, los primeros, circunscritos a la zona montañosa, y los segundos, dominando la fértil llanura sur.

Las montañas fueron aprovechadas para la construcción de castillos defensivos y atalayas de vigilancia en aquellos tiempos de avance del Reino de Aragón.

La Hoya cuenta con notables ejemplos de románico militar, como el castillo de Loarre, el de Marcuello, el de Ordás y la torre de Santa Eulalia la Mayor, que controlaba el paso de las gargantas del río Guatizalema. Fuera de la línea montañosa, el castillo de Montearagón fue decisivo para la reconquista de la Huesca musulmana; otras fortalezas de esta época son el castillo de Almudévar, el de Novales y la muralla de Antillón.

El de Loarre, considerado como el castillo románico mejor conservado de Europa, ofrece el contraste

entre los caracteres del románico lombardo del recinto inicial y el románico jaqués posterior. El castillo-abadía de Montearagón, albergó una importante comunidad de monjes durante siglos y fue panteón real hasta el siglo XIX.

Son citas ineludibles del románico religioso la iglesia de Santiago, en Agüero, la iglesia de San Pedro el Viejo, en Huesca, que conserva su hermoso claustro, donde se abre el segundo y último Panteón de Reyes de todo el territorio aragonés. Ambas ostentan la catalogación de Monumento Nacional.

Castillo de Loarre vigilando la Hoya de Huesca.

En la ciudad de Huesca se encuentran las dependencias del Palacio de los Reyes de Aragón, que suponen uno de los más destacados elementos de arquitectura románica civil de La Hoya, que a su vez mantienen la lúgubre Sala de la Campana, el presunto escenario de la leyenda medieval de La Campana de Huesca.

Como testimonios de la cultura árabe, además de la propia muralla de la capital, datada en el siglo IX, hay interesantes ejemplos de ruinas de fortalezas árabes como los restos del castillo de Los Muros, en Ayerbe, o el de Tan Wa Man, en lo alto del Salto de Roldán. El castillo árabe de Piracés es el mejor exponente de este tipo de

fortalezas que aprovechaban roquedales en sitios estratégicos para la edificación con ahorro de recursos.

Avanzando en el tiempo, el monasterio de Santa María de la Gloria, en Casbas de Huesca, es el único exponente de arquitectura cisterciense en la provincia. Por su parte, el arte Gótico tiene su máximo exponente en la catedral de Huesca. Fue iniciada en el siglo XIII y por diferentes avatares no pudo ser acabada hasta el XVI. En su diáfano interior destaca sin duda su retablo mayor, obra maestra de la escultura renacentista realizada en alabastro en el siglo XVI por Damián Forment. En un lateral, aprovechando la anterior Sala Capitular

y el antiguo Claustro, se ha habilitado el Museo Diocesano.

La pintura gótica se mantiene en los muros de iglesias y ermitas en pueblos a los pies de la Sierra de Guara, como Barluenga, Liesa, Arbaniés e Ibieca. San Miguel de Foces, en esta última localidad, es el máximo exponente de esta “Ruta del Gótico Lineal”.

El arte Mudéjar también tiene su representación en esta comarca. En Huesca se mantienen varios artesonados excepcionales, como el del Palacio Villahermosa y el del Salón del Tanto Monta de la Catedral. También destacan las torres de las iglesias de Alcalá de Gurrea, Montmesa y Nueno.

Torre de la iglesia de Montmesa. Ermita de San Miguel de Barluenga.

La Hoya renacentista y barroca

Algunas de las expresiones escultóricas y pictóricas renacentistas se pueden admirar en el Museo Diocesano de Huesca. Por su parte, la Colegiata de Bolea, del siglo XVI, es sin duda el monumento más emblemático de esta época, con un fantástico retablo mayor de pintura flamenca con influencia italiana.

En la etapa renacentista se desarrolla la construcción civil de casas de la ciudad y casas solariegas. Buenos ejemplos son el Ayuntamiento de Huesca; el antiguo Ayuntamiento de Loarre; el Palacio de los Urriés, de Ayerbe; el Palacio Villahermosa, la Casa Oña y la Casa Claver, en Huesca. También caracterizan esta etapa las numerosas torres alzadas exentas o sobre las iglesias, constituyendo los puntos más emblemáticos de

nuestros pueblos. Destaca como ejemplar único en Aragón la torre de Pertusa, de tipo herreriano.

Del Barroco sobresalen en la ciudad de Huesca la Basílica de San Lorenzo (patrón de la ciudad, con fachada simulando una parrilla en honor al martirio del santo), la iglesia de Santo Domingo y San Martín y la de San Vicente el Real (segundo patrón de Huesca). En la misma capital, el edificio del Museo Provincial, construido para albergar las aulas de la Universidad de Huesca, es un referente civil de la época. En la zona rural destacan el conjunto de pinturas murales del santuario de la Virgen de Casbas, cerca de Ayerbe. A diferencia de otras regiones, el barroco aragonés es sobrio en los exteriores, guardando todo el despliegue artístico en los interiores.

Iglesia de Santo Domingo y San Martín (Huesca).

Torre de Pertusa.

Santuario de la Virgen de Casbas (Ayerbe).

Desde el siglo XIX a nuestros días

La arquitectura historicista es especialmente visible en Huesca en el colegio de Santa Ana, delegación de Hacienda, edificio de Correos y teatro Olimpia. También Huesca cuenta con el Casino (1901), el mejor exponente del Modernismo en este territorio, así como con buenos ejemplares de obra civil de estilo racionalista y actual.

Dentro del programa Arte y Naturaleza, hay dos interesantes manifestaciones de escultura contemporánea ubicadas en los enclaves naturales de La Hoya: “Árboles como arqueología”, en el mirador de las estepas de Piracés y “Los árboles florecen en Huesca”, en la chopera de Belsué. La ciudad de Huesca cuenta con una buena muestra escultórica por paseos, plazas y parques, así como la obra pictórica “Elegía”, de Antonio Saura, en el techo del hall del edificio de la Diputación de Huesca. La arquitectura contemporánea también tiene sus buenos representantes en la ciudad de Huesca, con edificios como el palacio de deportes, de Enric Miralles o el edificio del CDAN, obra de Moneo.

Huellas de la Guerra

Durante la Guerra Civil española ambos bandos cavaron trincheras, excavaron refugios subterráneos, construyeron búnkeres, casamatas, polvorines o refugios antiaéreos.

En Siétamo y Tierz se han conservado y señalizado algunos de los más completos sistemas de trincheras republicanos, lugares donde combatieron ilustres intelectuales europeos integrados en las Brigadas Internacionales como George Orwell, Willy Brandt o John Cornford. También en Pilatos (Gurrea de Gállego) se conserva un entramado de trincheras y refugios subterráneos, en este caso del bando franquista.

Destaca también el conjunto de elementos que se pueden visitar en la localidad de Vicién, que ejerció como centro de mando de las fuerzas anarquistas en la zona.

"Árboles como arqueología" (Piracés).

Trincheras de Tierz.

del invierno para su posterior utilización en época estival; entre ellos destacan en La Hoya los de Vicién, Almudévar, Salillas, Casbas de Huesca y Nueno. La búsqueda del agua de manantiales subterráneos tiene los mejores ejemplos de pozos–aljibe en los de Albero Alto, Piracés, Antillón, Blecua, Ola, Velillas y Angüés. Estos pozos-aljibe han sido recientemente declarados Bien de Interés Cultural.

Las bodegas subterráneas son especialmente numerosas en las localidades de Almudévar, Alcalá de Gurrea, Puibolea, Bespén, Blecua o Antillón. El Centro de Interpretación de la vid, las bodegas y el vino, de Almudévar, nos acerca a este tipo de patrimonio popular.

La ruta de las piedras fecundantes, vinculadas a rituales de fecundidad de origen remoto, se encuentra en el sector sureste de La Hoya, en las localidades de Piracés, Ayera, Fañanás, Ibieca, Sesa, Tramaced y Velillas.

Pozo de hielo (Salillas).

Pozo-aljibe (Albero Alto).

Puente medieval (Nocito).

Piedra Mora (Ayera).

Monumentos Indispensables

Castillo de Loarre

En las cercanías del pueblo de Loarre, sobre un espolón rocoso y dominando la llanura, se encuentra el castillo románico mejor conservado de Europa. Construido en el siglo XI, resultó ser pieza clave para el rey Sancho III el Mayor en la reconquista cristiana a los musulmanes. Durante el periodo altomedieval el castillo de Loarre, junto con el próximo de Marcuello, ostentaban una importancia estratégica fundamental dentro del sistema defensivo aragonés. Mantiene las dependencias originarias, en la parte superior, construídas en románico lombardo o primitivo y la ampliación del siglo XII hecha por Sancho Ramírez en románico pleno o jaqués, destacando la Capilla Real, coronada con una cúpula de una altura sorprendente para su época.

Su belleza, singularidad, buena conservación y excelente ubicación han motivado que haya sido elegido en numerosas ocasiones como escenario de películas y documentales, algunas tan universales como “El Reino de los Cielos” dirigida por Ridley Scott. Este castillo es Monumento Nacional desde 1906 y se encuentra en la Lista indicativa de la UNESCO, aspirando a ser definitivamente declarado Patrimonio de la Humanidad.

www.castillodeloarre.es

Hoya de Huesca

Catedral de Huesca

Templo gótico levantado sobre el emplazamiento de la antigua mezquita mayor musulmana y mandado construir por Jaime I el Conquistador en 1273. La portada se halla profusamente esculpida y protegida por un gran alero típico aragonés tallado de madera incorporado en el siglo XVI. Muestra diferentes estilos: gótico primitivo en su parte inferior (XIII) y flamígero en la superior (XVI). Destaca la fachada por su espléndida decoración, coronada por pináculos.

El conjunto interior tiene una atmósfera diáfana. Las naves laterales, de menor altura que la central, albergan 14 capillas. Una de las piezas más valiosas es su Altar Mayor, que acoge un retablo renacentista de gran belleza (1520 y 1534) obra maestra esculpida en alabastro por Damián Forment en el que se representa la Pasión de Cristo.

Al lado de la catedral se encuentra el Museo Diocesano que está instalado en el antiguo Claustro y Palacio Episcopal, con obras destacadas, como el Retablo de la Abadía de Montearagón. En el Salón del Tanto Monta destaca su espléndido artesonado mudéjar.

https://sites.google.com/view/museodiocesanodehuesca

Catedral de Huesca. Fachada.

Artesonado del Salón del Tanto Monta.

Museo diocesano

Retablo mayor.

Iglesia de San Pedro el Viejo

Declarado Monumento Nacional en 1885, su claustro románico es visita obligada en la ciudad de Huesca. Es un puro exponente del románico aragonés y una de las joyas arquitectónicas del patrimonio monumental de la ciudad y del Alto Aragón. Situada en el casco antiguo de la ciudad, fue erigida sobre el que había sido el templo del barrio mozárabe de la ciudad musulmana. En 1117 fue donado a la orden benedictina y comenzaron las obras del monasterio bajo la traza románica que hoy podemos admirar.

Es notable el tímpano de la portada norte, con un crismón trinitario sujeto por dos ángeles. Uno

de los elementos más bellos y conocidos es su claustro, que data de 1149, si bien se restauró en el siglo XIX. Sobresalen los labrados capiteles románicos, 18 originales y el resto fieles reproducciones realizadas en el XIX.

En el mismo claustro se encuentra la capilla de San Bartolomé, que alberga el Panteón Real, donde se encuentran los restos de los reyes Alfonso I “El Batallador” (traído aquí de la abadía de Montearagón en 1845) y Ramiro II “El Monje” (que tras la creación de la Corona de Aragón retomó su vida religiosa retirándose en este monasterio).

www.sanpedroelviejo.com

Panteón real.

Claustro de San Pedro el Viejo (Huesca).

Colegiata de Santa María de Bolea

Bolea, situada sobre un promontorio que irrumpe en el paisaje y domina el llano, luce en su punto más elevado la Colegiata de Santa María, construida por Pedro de Irazábal entre 1541 y 1559 sobre el antiguo templo románico del siglo XII.

Con un diáfano interior de planta de salón coronado por bóvedas estrelladas, la joya más valiosa de este templo es el retablo del altar mayor. Una obra maestra que combina escultura y pintura del XVI (1490 y 1503), en gótico mudéjar, perteneciendo al anterior templo. Se compone de 20 tablas pintadas al temple y 57 tallas en madera policromada, de ciprés, nogal cerezo y pino de Flandes. Destacan las pinturas realizadas por el Maestro de Bolea, que presenta importantes novedades en el arte pictórico español de la época provenientes de influencias flamencas e italianas, como la expresión del sentimiento de los personajes, el dominio del espacio y de la perspectiva, la iluminación o el sombreado.

www.colegiatadebolea.es

Colegiata de Bolea. Retablo mayor.

Iglesia de San Miguel de Foces

A pocos kilómetros de Ibieca, como perdida entre campos de cereal, olivares y carrascales y con la sierra de Guara como telón de fondo, se alza esta monumental iglesia de transición del románico al gótico. Levantada por iniciativa de Ximeno de Foces en 1249, es el último vestigio del desaparecido poblado de Foces, que perteneció a la familia propietaria.

Monumento nacional desde 1916, es distinguida y célebre por las pinturas murales que guarda en su interior, pertenecientes al estilo gótico lineal de principios del siglo XIV, que llenan los arcosolios de los brazos laterales del templo. El autor, el Maestro de Foces, utilizó una técnica mixta, con comienzo al fresco y terminación a seco con los colores disueltos en aceites, que conferían gran intensidad a las pinturas.

http://amigosdesanmigueldefoces.org/

San Miguel de Foces (Ibieca).

Pinturas murales.

Iglesia de Santiago de Agüero

A pocos kilómetros de Agüero, en medio del monte, se alza este impresionante templo románico declarado Monumento Nacional en 1920. Por motivos desconocidos, su construcción se interrumpió repentinamente y por ello se encuentra inacabada, conservándose los tres ábsides y el arranque de las tres naves correspondientes. Es magnífica su portada, en la que se observa el relieve de la epifanía en el tímpano.

La decoración de los capiteles es figurativa y abstracta, de gran valor. Los trabajos escultóricos del templo se relacionan con los maestros de los claustros de San Juan de la Peña y San Pedro del Viejo.

El numeroso conjunto de marcas de cantero que se pueden ver en los sillares da idea de la magnitud de este proyecto.

En el solsticio de invierno se produce en su interior un curioso fenómeno lumínico.

Iglesia de Santiago (Agüero).

Planetario de Aragón y Museo de las Matemáticas

El Planetario de Aragón aúna en una misma instalación el entretenimiento y el aprendizaje. Ubicado en el parque tecnológico Walqa, en Cuarte (Huesca), los visitantes pueden descubrir los misterios de la astronomía. Cuenta con un espacio expositivo amplio, de acceso gratuito. Cuatro potentes telescopios permiten asomarse al cosmos en primera persona. También se puede recrear un divertido viaje espacial mediante un simulador 4D. En el corazón de este centro expositivo espera un planetario de última generación, capaz de generar sensaciones únicas.

La experiencia didáctica se puede completar con una visita al Museo de las Matemáticas, localizado en el edificio contiguo María Josefa Izuel. Se trata de un espacio temático que presenta estas ciencias de una forma lúdica a través de módulos interactivos mediante juegos, habilidades y conceptos matemáticos. Las sensaciones visuales, táctiles, digitales y sonoras de sus diferentes espacios ayudan a vivenciar las matemáticas de una manera divertida.

www.planetariodearagon.com

Museo de las Matemáticas.

Planetario de Aragón.

Puertas Abiertas

“Puertas abiertas” fue galardonado como finalista de los “Premios Eden” por la Secretaría de Estado de Turismo en Fitur 2018, y por ello forma parte de la red europea de Destinos EDEN, de destinos emergentes de excelencia y sostenibilidad.

Interesantes museos, templos y espacios de la Comarca de la Hoya de Huesca no siempre accesibles al gran público, se descubren al visitante a través del programa “Puertas Abiertas”, que se desarrolla cada año desde primavera hasta el mes de octubre.

Explicados por guías locales y como complemento a la oferta cultural fija de la comarca a lo largo del año, este programa es una sugerente experiencia turística en el entorno rural y una nueva forma de acercarse a las joyas histórico-artísticas que albergan pequeños núcleos de nuestro territorio.

Monumentos de la arquitectura medieval como las iglesias de Santiago de Agüero, Murillo de Gállego, San Urbez de Nocito, Casbas de Huesca o la Torre Medieval de Santa Eulalia la Mayor; conjuntos pictóricos murales como San Miguel de Foces en Ibieca, San Miguel de Barluenga o la Virgen de Casbas de Ayerbe; espacios para conocer formas de vida de antaño como el Museo del Traje y del Calzado de Alerre, el Centro de Interpretación “El Bodegón” y Pozo Chelo en Almudévar o el Molino y ermita del Viñedo en Castilsabás o entornos evocadores como el santuario rupestre de la Ermita de la Virgen de la Peña de Aniés son algunas de las propuestas que “abren sus puertas” al visitante.

Comenzamos temporada en junio. ¡Te esperamos!

Molino del Viñedo.

Monasterio de San Úrbez (Nocito).

Ruta del Silencio

Ruta del Silencio: santuarios rupestres

Un espacio propio y destacado merecen las ermitas rupestres de la Hoya, un rosario de eremitorios edificados en época medieval a lo largo de las sierras prepirenaicas aprovechando oquedades o resaltes de la orografía. Llegar a ellas exige un pequeño esfuerzo senderista por parte del visitante – practicable por toda la familia en la mayor parte de los casos–, pero la triple dimensión del valor que reúnen –cultural, etnográfico y natural– hace a estas ermitas rupestres merecedoras de dicho pago.

Ermita de San Julián de Andriá y Gorgas de San Julián (desde Lierta, Nueno o Arascués)

Desde las tres localidades está señalizado y balizado el acceso a este eremitorio, ubicado en una cueva y con una pequeña explanada. Desde allí el paisaje se estrecha hasta el fondo del barranco, las Gorgas de San Julián, un bello paraje en la Sierra de Gratal que alberga un Belén montañero.

Ermita de la Virgen de la Peña (desde Aniés)

El emplazamiento de este eremitorio, colgado sobre unos enhiestos conglomerados rocosos de la Sierra Caballera, sorteando el vacío, ofrece como premio las increíbles vistas sobre la Hoya de Huesca. Un empinado sendero adaptado con escaleras permite un acceso más o menos cómodo y sin peligro.

Ermita de San Cristóbal del Barranco (desde Bolea)

También en la Sierra Caballera, la ruta asciende en un primer momento por el GR 1 y después toma en todo momento el PR-HU 111. En el camino pasa junto a la ermita de Santa Quiteria, ubicada entre olivares y luego, entre almendros y en paralelo al río Sotón, sigue en ascenso hasta el roquedo donde se encuentra la ermita de San Cristóbal. Este lugar es un impresionante balcón desde el que se aprecia gran parte de la Hoya de Huesca.

Ermita de San Julián y gorgas.

Ermita de San Cristóbal del Barranco.

Eremitorio de San Chinés (desde el embalse de Vadiello)

En el corazón de la Sierra de Guara. Circuito circular en torno al paraje de Vadiello y la ermita rupestre de San Chinés, enclavada bajo unas espectaculares paredes de conglomerado. El circuito no presenta dificultades técnicas especiales.

Ermita de San Cosme y San Damián (desde el embalse de Vadiello)

En el mismo entorno del embalse de Vadiello, en la sierra de Guara. Paseo muy recomendable para todo el público que recorre un conjunto de ermitas y un paraje de conglomerados con las curiosas formaciones de los Mallos de Ligüerri y el Huevo de San Cosme, espacios todos ellos habitáculo para la nidificación de gran cantidad de aves rupícolas (quebrantahuesos, buitre leonado, alimoche…). Tras atravesar el túnel que conduce a la presa del embalse, se sigue hasta el santuario de San Cosme y San Damián y se regresa por el Alto de la Carrasca.

24 Ruta del Silencio Hoya de Huesca

Ermita de la Virgen de la Peña (Aniés).

Ermita de San Martín de la Val d’Onsera (desde San Julián de Banzo)

Este antiguo monasterio, datado ya en 1075, se encuentra en uno de los parajes más espectaculares del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara. Desde la Puerta de Cierzo, lugar hasta donde se accede siguiendo el GR 1 desde San Julián de Banzo, el recorrido continúa por la senda de los Burros hasta el collado de San Salvador, y de allí en bajada hasta el fondo del barranco donde se encuentra el eremitorio en un circo de roca y junto a una cascada de 30 metros.

Esta es la ermita cuyo acceso requiere más forma física, por los desniveles de acceso de subida y luego de bajada, si bien el recorrido está bien equipado.

Ermita de San Martín de la Valdonsera.

Camino de Santiago

Este ramal del Camino Catalán, que nace en el monasterio de Montserrat, penetra en la Hoya de Huesca por Pertusa, continúa por Antillón, y sigue por Pueyo de Fañanás, Fañanás, Ola, Tierz, el santuario de Santa María de Salas –a la entrada de la capital oscense–, la ciudad de Huesca, Bolea, Aniés, Loarre –a la sombra de su castillo–, Sarsamarcuello –y a las ruinas de su fortaleza–, los Mallos de Riglos, la Foz de Escalete y conecta con la estación de ferrocarril de Santa María, a la que se accede tras pasar por La Peña.

Superados Santa María, Triste y Ena, el Camino de Santiago deja la Hoya de Huesca en dirección a Botaya, en las proximidades del Monasterio de San Juan de la Peña (y desde allí enlaza con el Camino Francés.)

Fuente: https://caminodesantiago.consumer.es/los-caminos-de-santiago/camino-catalan-por-san-juan-de-la-pena

En total son 40 km de recorrido, que aprovechan el trazado de la calzada romana que unía Ilerda (Lérida) y Osca (Huesca) y que desde Huesca ascienden de Sureste a Noroeste atravesando paisajes muy contrastados entre el llano y la media montaña prepirenaica.

El camino transcurre por seis etapas y cuenta con una red de albergues de peregrinos equipados y atendidos, al final de cada etapa, en Pertusa, Pueyo de Fañanás, Huesca, Bolea, Sarsamarcuello y Ena.

Ecos en el paisaje. Rutas literarias

El proyecto Ecos en el paisaje es una nueva forma de adentrarse en los paisajes, pueblos y leyendas de la zona, una nueva guía para recorrer sus rincones a través de siete emocionantes narraciones.

Se trata de una aplicación gratuita en la que se escuchan siete apasionantes relatos inéditos, narrados por personajes imaginados vinculados al territorio, y que sirven de hilo conductor para recorrer los municipios, parajes, monumentos y la historia que se revelan en las rutas.

A través de las miradas de estos profundos personajes que van desde el siglo XIII hasta el siglo XXI, se hilvanan estas historias que nos conectan con rincones de la Hoya de Huesca de gran interés patrimonial y antropológico.

“Más allá de mi mundo”, “El mapa del tesoro al interior”, “El pincel de la vida”, “Creciendo entre piedras”, “Viaje hacia lo que no se ve”, “La memoria de la infancia” y “A la sombra de los mallos” son las siete propuestas intimistas que invitan a acompañar a los personajes mientras se recorre la comarca, generando una experiencia turística singular y diferenciadora que cautiva a amantes de la lectura, familias y viajeros dispuestos a embelesarse por los secretos escondidos de un rico entorno rural.

Estos relatos cuentan con ilustraciones artísticas y están locutados por actores, de modo que la app puede utilizarse también como una audioguía.

Naturaleza

Naturaleza diversa

La Hoya de Huesca se encuentra en la zona intermedia del Alto Aragón, enmarcada entre las sierras prepirenaicas de Santo Domingo, Loarre, Caballera, Gratal, Gabardiella y Guara, al norte, y las llanuras meridionales que suponen la antesala de la Estepa Montegrina, al sur. Esta situación de transición garantiza una gran diversidad natural.

Diversidad en piedra

Sorprenden especialmente las formaciones geológicas denominadas “mallos”, farallones de conglomerado que evocan enormes torreones de vertiginosas paredes verticales, paraíso de escaladores y hábitat frecuentado por numerosas rapaces. Destacan los mallos de Riglos, Agüero y Murillo, en el entorno del río Gállego, y los del Salto de Roldán y Vadiello, en el Parque Natural de Guara.

Las sierras prepirenaicas albergan otras formaciones de relieve abrupto de indudable belleza, fruto de la erosión fluvial en el terreno: se trata de las foces, cañones, barrancos y gargantas, además de numerosas cuevas y simas en un mundo subterráneo lleno de belleza y misterio.

La foz de Salinas, próxima al río Gállego, y la de Escalete, en las inmediaciones del pantano de La Peña, son los mejores exponentes de este tipo de caprichos naturales, aptos para el disfrute en sencillos itinerarios senderistas.

Los cañones y gargantas más espectaculares se abren en el Parque Natural de Los Cañones y La Sierra de Guara, siendo los de los ríos Formiga, Flumen, Guatizalema y Calcón los más practicados por los amantes del barranquismo. De fácil acceso y sin desmerecer en belleza es el barranco de La Pillera, en las proximidades de Nocito, en la cara norte de la Sierra de Guara, así como las gorgas

Embalse y mallos de Vadiello.

de San Cristóbal, en la cabecera del río Sotón, y las gorgas de San Julián de Lierta.

En la parte meridional de La Hoya, sorprenden los escarpes de Piracés y Tramaced, resultado de un intenso efecto erosivo sobre tierra arenisca que ha modelado un paisaje evocador. Por otro lado, los sasos y llanos de la Violada, en Alcalá de Gurrea y Almudévar, contrastan por tratarse de un territorio suavemente ondulado con oteros escasamente elevados.

Diversidad acuática

Varios ríos surcan esta comarca de norte a sur, ofreciendo agradables riberas en sus cursos medios hacia el Ebro: el río Gállego, en el Reino de los Mallos, es el río más vital, recorrido por numerosos amantes del rafting y otros deportes en aguas bravas; otros ríos son el Sotón, el Isuela, el Flumen, el Guatizalema y el Alcanadre, que originan en su curso alto sugestivos cañones y barrancos y agradables sotos en el medio.

El agua está presente también en los embalses que garantizan el baño y agradables paseos por su entorno: los embalses de La Peña, Arguis, Belsué, Cienfuens, Vadiello y Calcón. El de La Sotonera posibilita asimismo la práctica de deportes náuticos. De notable belleza son también las albercas, sistemas de regulación de agua de origen árabe que son parada obligada de numerosas aves acuáticas; de estos humedales cabe destacar la alberca de Cortés, en Chimillas, las albercas de Castilla y de Alboré, en Montmesa, la alberca de Loreto, próxima a Banariés y la alberca de Valdabra, en las proximidades de Huesca.

Flora y fauna

Este variado relieve es cubierto por diversas especies vegetales, sobresaliendo las carrascas –encinas– y los pinos por los campos de cereal y de cultivos leñosos, especialmente olivos y almendros. Además, las plantas aromáticas y rupícolas, que

Caballos en Nocito.

Foz de Escalete.

Escarpes de Piracés.

arraigan sus raíces en las abundantes paredes de roca del paisaje de La Hoya, destacando la corona de rey, las siemprevivas o los zapatitos de la virgen. Por su parte, los chopos siguen las riberas fluviales, mientras en las áreas montañosas abunda la vegetación de tipo atlántico y pirenaico, como el abeto y el hayedo.

El mundo animal también es diverso en esta comarca, destacando el jabalí y el corzo, el conejo, la perdiz y el gato montés.

Los cielos de La Hoya son frecuentados por aves rapaces y necrófagas, como el buitre leonado, el milano y el quebrantahuesos. Por su parte, las aves acuáticas hacen escala en las albercas de este territorio en su trayecto migratorio a lo largo de la península.

Contemplar y aprender: miradores y museos de la naturaleza

Toda esta diversidad bien merece un paseo y la contemplación pausada desde miradores de excepción. Algunos de los que más recompensan sin exigir demasiado esfuerzo en su acceso son el Pico del Águila en Arguis; el Salto de Roldán, junto a Santa Eulalia de La Peña; la torre medieval de Santa Eulalia la Mayor; el monte de San Miguel, en Ayerbe; el castillo de Marcuello y el Mirador de los Buitres, en Linás de Marcuello; la ermita de la Virgen de la Peña, en Aniés; el mirador de la Reina, en el Castillo de Loarre; el mirador de la Colegiata, en Bolea; el cerro de La Corona, en Almudévar; la Piedra del Mediodía, en Piracés.

Alberca de Alboré (Montmesa).

Mirador de los Buitres.

Por otro lado, la Hoya de Huesca cuenta con varios espacios museísticos e interpretativos relacionados con la naturaleza: el Centro “Arcaz”, sobre las aves rapaces y carroñeras, en Riglos; el Museo Naturalista «La Casa de los Buitres», en Santa Cilia de Panzano; el Centro de la Naturaleza «Alberca de Alboré», en Montmesa, centrado en las aves migratorias y acuáticas; y el Espacio “Salto de Roldán”, en Sabayés.

Un sorprendente hallazgo

Hace dos años, por casualidad, se dio con un hallazgo sorprendente: el mayor yacimiento de huevos de dinosaurio de España, en la Sierra de Loarre.

Desde 2022, en la localidad de Loarre se encuentra el Laboratorio de Paleontología, perteneciente al Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de Zaragoza. Este Laboratorio está abierto al público todo el año, alternando sus actividades científicas con las divulgativas.

Salto de Roldán.

Corona de rey.

Rincones Especiales

Los Mallos

Espectaculares a la vista e inmejorables para la práctica de la escalada son estas grandes paredes verticales o redondeadas formadas por conglomerados, que aquí se denominan “mallos” y que son característicos de la Hoya de Huesca e icono paisajístico del Prepirineo.

En el sector noroeste de la Hoya de Huesca, conocido como “Reino de los mallos”, se encuentran los Mallos de Riglos -que alcanzan los 300 metros de absoluta verticalidad-, Peña Ruaba en Murillo de Gállego y mallos de Agüero. Los tres fueron declarados Monumento Natural en 2016. En el sector del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara destacan el Salto de Roldán y los mallos de Ligüerri abrazando el embalse de Vadiello.

Pasear por estos entornos permite observar numerosas aves rapaces, disfrutar de la naturaleza en perfecto estado de conservación, practicar escalada y relajar la vista con un espectáculo único.

Parque Natural de Guara

La espectacularidad del Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara reside en la originalidad de sus parajes y en la inusitada belleza de sus cañones, foces, barrancos y gargantas. Hoy en día es la meta de muchos turistas de toda Europa, que atraídos por su rica red de cañones y barrancos surgida de la acción de las aguas bravas de los ríos Flumen, Calcón, Formiga o Guatizalema, llegan para practicar el barranquismo, una actividad que nació precisamente en los espacios más profundos de estas montañas

y a través de la cual, debidamente equipados -y con guías especializados si no se domina la técnica-, permite a sus practicantes recorrer estos parajes deslizándose por rápidos o sumergiéndose en las inundadas cuevas naturales.

Este Parque es uno de los pocos reductos de Europa donde se puede ver al quebrantahuesos, rapaz en peligro de extinción. Acompañando a este disfrutaremos de la presencia de alimoches (en aragonés denominados “boletas”), águilas y una extensa colonia de buitres leonados.

Desde Arguis se accede a la cara norte de Guara, recorrida por los valles de Belsué y Nocito, de tipología pirenaica. Valles solitarios y de gran autenticidad.

Mallos y pueblo de Riglos.

Peña Mediodía (Piracés).

Embalse de la Sotonera.

La Sotonera y la alberca de Alboré

En la parte central de la Hoya, uno de los principales atractivos son sus humedales, albercas y embalses. Entre ellos destaca con luz propia Alberca de Alboré, en Montmesa, una laguna que forma parte actualmente del embalse de La Sotonera, que se extiende hasta Alcalá de Gurrea, como un mar interior.

Su situación a los pies de los Pirineos le otorga un inmenso valor estratégico, sobre todo en el contexto del fascinante y enigmático fenómeno de las migraciones de las aves. En la denominada migración prenupcial, a finales del invierno, se concentran decenas de miles de grullas que

utilizan La Sotonera y Alboré como descansadero, antes de sobrevolar la cordillera con destino al norte de Europa.

Peña de Mediodía en Piracés

Esta roca es un inmenso banco de arenisca de 80 metros de largo y 25 metros de altura. Desde su posición privilegiada en la localidad de Piracés, domina un inmenso territorio, un emplazamiento estratégico que ha sido utilizado como atalaya para la construcción de una fortaleza árabe en los siglos IX y X. Merece la pena subir a la cima para descubrir sus vestigios y, por supuesto, para disfrutar de la estupenda panorámica.

Vadiello.

Roble de San Úrbez (Nocito). Mallos y pueblo de Agüero.

Observación de aves

El mosaico de ambientes de la Hoya de Huesca configura enormes posibilidades de paisajes y hábitats para las aves. La comarca cuenta además con seis ZEPAs (zonas de especial protección para las aves), lo que le otorga un prestigio nacional e internacional en cuanto a turismo ornitológico.

Dentro de los barrancos calizos de la Hoya mora una de las mayores concentraciones de aves rupícolas de toda Europa, así como una nutrida presencia de aves rapaces. Las más relevantes son los buitres leonados por su número, y el quebrantahuesos por ser una especie en vías de extinción, que aquí disfruta de uno de los pocos reductos europeos en los que aún permanecen.

La sierra de Guara y el denominado Reino de los Mallos se han convertido en verdaderos paraísos para la observación de rapaces rupícolas. Alimoches

(boletas, en aragonés), buitres leonados, águilas, el citado quebrantahuesos o el elanio azul.

En diferentes puntos de la Hoya se han habilitado espacios, tanto cerrados como al aire libre, que constituyen verdaderos observatorios para el disfrute y estudio de estas aves. Puedes encontrarlos en las localidades de Riglos, Santa Eulalia de la Peña y Santa Cilia de Panzano.

Además de aves rapaces, las aves limícolas tienen su hábitat en los humedales del llano de la Hoya: la Alberca de Valdabra, la de Loreto y la de Cortés, en Chimillas, todas a escasos kilómetros al sur de Huesca, y sobre todo el conjunto de la Alberca de Alboré y el embalse de la Sotonera, estas últimas albergando además una importante población de grullas, al ser el descansadero más próximo a la cordillera pirenaica.

aves Hoya de Huesca

Azor.

Ecoturismo en la Hoya de Huesca

La Comarca Hoya de Huesca ofrece cada año unos programas de ecoturismo para dar a conocer, de la mano de educadores ambientales, la riqueza y diversidad medioambiental de este territorio. Estas visitas se desarrollan en grupos reducidos, los fines de semana entre los meses de mayo y noviembre.

El programa “Puntos de Encuentro Naturales”, apto para todos los públicos, se desarrolla en recorridos sencillos por senderos sin apenas dificultad, y su objetivo es conocer y disfrutar aprendiendo del entorno natural y patrimonial mientras se pasea por la naturaleza.

Por otra parte, la Hoya de Huesca es un aula de geología, con una silueta de relieves singulares, formas sorprendentes y llamativos contrastes entre las llanuras cerealistas y las sierras. Para disfrutar de este patrimonio natural y conocerlo

Sierra de Guara y Tozal de Guara.

en profundidad proponemos la experiencia del “Tren Geológico del Prepirineo”. Esta propuesta combina viaje en el tren Canfranero con paradas y tramos de senderismo e interpretación ambiental a cargo de guías especializados, por unos paisajes espectaculares como los Mallos de Riglos, la Foz de Escalete o el embalse de La Peña. Los itinerarios son más exigentes que los de Puntos de Encuentro Naturales y las rutas de más duración.

Estos programas de naturaleza se complementan en calendario con el de “Pueblos Contados”, consistente en visitas a interesantes conjuntos urbanos de la comarca para conocer historia, arte, leyendas y etnografía de localidades poco conocidas, pero con muchos secretos por desvelar.

Interpretación ambiental frente a Peña Ruaba (Murillo de Gállego).

Actividades en la naturaleza

Los contrastados paisajes de la Hoya de Huesca ofrecen numerosas opciones de disfrute activo. Múltiples senderos y rutas BTT señalizados esperan para ser disfrutados en cualquier momento del año.

El Camino Natural de la Hoya de Huesca es la propuesta senderista de mayor envergadura, pues atraviesa la comarca de noroeste a este a lo largo de 132 kilómetros distribuidos en 8 etapas. Este camino está integrado en la red de Caminos Naturales del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

En el visor cartográfico senderos.hoyadehuesca. es se pueden visualizar más de 150 rutas con todo detalle y descargar los tracks.

Además, nuestros ríos, barrancos y montañas ofrecen otras actividades de más adrenalina y cuentan con equipamientos públicos y privados para su disfrute: arborismo, puenting, paintball, paseos a caballo, escalada, descenso de barrancos, actividades acuáticas…

El río Gállego es conocido internacionalmente por la práctica del rafting e hidrospeed en sus aguas bravas, en concreto los tramos que corresponden a la Hoya de Huesca.

En cuanto a la escalada, las mejores vías se encuentran en los Mallos de Riglos, de Agüero, de Vadiello (en el Parque Natural de Guara), así como en las múltiples vías ferratas acondicionadas, como Peña Ruaba (Murillo de Gállego), Riglos y Canal del Palomo (Vadiello).

Senderismo con vistas al Pirineo.

Rafting por el río Gállego.

BTT (Foto: Prepyr365).

Barranquismo en la Sierra de Guara.

Excelentes alternativas para escapadas con niños

Mucho de lo ya comentado en esta guía es idóneo para las escapadas familiares a la Hoya de Huesca: el castillo de Loarre, los senderos, los ríos y pozas, los miradores, las actividades deportivas en la naturaleza, los centros de interpretación de la naturaleza (en Arguis, Sabayés, Montmesa, Santa Cilia de Panzano y Riglos) o el Laboratorio Paleontológico de Loarre.

También los programas de ecoturismo como “Puntos de Encuentro Naturales” gustan a los niños por el descubrimiento y comprensión del medio ambiente que facilitan a través de sus educadores ambientales.

Además, otras infraestructuras de indudable interés para los niños son el Centro Astronómico Aragonés-Planetario, el Museo de las Matemáticas (ambos en el centro tecnológico Walqa, en Cuarte-Huesca), el Museo Pedagógico de Aragón

(Huesca), el Museo de Huesca, y la granja-escuela “Los mundos de Panta” (Bellestar del Fllumen, a 2km de Huesca).

En Ayerbe se encuentra el centro de interpretación de Ramón y Cajal en la casa donde residió el Premio Nobel de Medicina durante su infancia. Esta insigne figura es también el hilo conductor de la APP “Los sitios Cajal” que se desarrolla en distintos rincones de la villa.

Los monumentos de la ciudad de Huesca se pueden recorrer de manera amena a través de la APP “En busca del danzante perdido”. Esta ciudad recibió el galardón de ciudad con más zonas verdes por habitante. De ellos, el más antiguo y corazón de la ciudad es el de Miguel Servet, con espacios como la Casita de Blancanieves en honor a Walt Disney.

Granja escuela.

APP de rutas lúdico-didácticas:

“Las aventuras de Diana y Jonás”

Esta app gratuita presenta siete divertidas rutas llenas de actividades para los niños: rellena-palabras, juegos de parejas, quizz, juegos especiales, leyendas… El reino de los gigantes, La conquista de los guerreros, El guardián de las peñas, La pared cuentacuentos, El viaje de los inmortales, El grito del agua y La llave de la victoria son las siete propuestas para las familias aventureras.

Las rutas se desarrollan en toda la comarca e incorpora funciones de realidad aumentada. Esta APP recibió el Primer Premio de APPs turísticas de Fitur y Segittur en 2008.

Castillo de Loarre.

Laboratorio de Paleontología de Loarre.

Atentos a la diversidad funcional

Muchas infraestructuras y equipamientos de la Hoya de Huesca cuentan con elementos para la accesibilidad motriz o sensorial. Enumeramos algunos de ellos:

Î Catedral y Museo Diocesano (Huesca)

Î Iglesia de San Pedro el Viejo (Huesca)

Î Museo Pedagógico de Aragón (Huesca)

Î Museo de Huesca (provincial y de bellas artes) (Huesca)

Î CDAN-Fundación Beulas (Huesca) Centro de Arte y Naturaleza. Museo de Arte Contemporáneo (Huesca)

Î Iglesia de Santiago (Agüero)

Î Iglesia de San Miguel de Foces (Ibieca)

Î Colegiata de Santa María la Mayor (Bolea)

Comunidad

La Hoya de Huesca es un mundo de experiencias. La infinitud de detalles, la historia, la cultura, el arte … proponen un viaje donde la imaginación se mezcla con la belleza que irradian sus paisajes.

Î Planetario de Aragón y Museo de las Matemáticas (Cuarte, Huesca)

Î Mirador de los Buitres (Sarsamarcuello)

Î Miradores y observatorios de aves del Parque Natural de Guara:

Î Mirador del Salto de Roldán (Santa Eulalia de la Peña)

Î Mirador del Embalse de Guara -o de Calcón- (Aguas)

Î Observatorio de aves (Santa Cilia de Panzano)

Î Mirador de Vadiello (embalse de Vadiello. Loporzano)

Î Centro de Interpretación de aves “Arcaz” (Riglos)

Î Centro de Interpretación “Pascual Garrido” (Arguis. Casa forestal, junto al embalse)

Î Centro de interpretación “Espacio Salto de Roldán” (Sabayés)

Consulta más información sobre los recursos mostrados en esta guía, horarios o condiciones de visita en:

https://turismo.hoyadehuesca.es promocionturismo@hoyadehuesca.es

Así como en las Oficinas de Turismo del territorio:

Oficina de Turismo de Huesca: Tfno. 974292170

oficinaturismohuesca@huesca.es

Oficina de Turismo de Ayerbe: Tfno. 974380554

infoayerbe@gmail.com

Nuestro blog de propuestas es una ventana abierta a un campo de experiencias. Te invitamos a conocer La Hoya de una manera diferente, alternativa, acercándote a detalles maravillosos en los que antes no habías reparado. Un viaje hacia lo que no se ve, propuestas para disfrutar en un puente, para viajar en familia, ¡hasta para buscar huevos de dinosaurio!

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Mirador de los buitres (Sarsamarcuello).

Fiestas y Tradiciones

El invierno trae festejos vinculados a hogueras populares, como la de enero en honor a San Vicente, en Huesca, o en muchos pueblos en honor a San Sebastián o San Fabián.

Las citas de carnaval más destacadas son la de la ciudad de Huesca, por dimensión, y la de Agüero por singularidad, ya que en 2008 recuperó su antigua “Fiesta d’as Mascaretas”. Los protagonistas de este carnaval son las “majas”, los “caracoleros” y los “fieros” o “pozaleros”, con unos trajes elaborados artesanalmente y con ingenio.

La Semana Santa de Huesca está catalogada como Fiesta de interés turístico de Aragón. En Ayerbe, las procesiones se complementan con La Enclavación, representación del calvario de Cristo la noche de Jueves Santo, también Fiesta de interés turístico de Aragón. En Almudévar,

esta catalogación la tiene su Rompida de la Hora, concentración masiva de tambores y bombos sonando al unísono en la medianoche del Jueves Santo.

El domingo más cercano al 23 de abril se celebra el descenso de navatas por el río Gállego, en el tramo comprendido entre Murillo de Gállego y el puente de Santa Eulalia de Gállego. Esta demostración de este antiguo oficio de transporte de madera por los ríos fue declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2021.

Pero sin duda las fiestas más destacadas en verano son las Fiestas de San Lorenzo, en Huesca, declaradas de interés turístico nacional. Entre el 9 y el 15 de agosto, la ciudad se viste de fiesta con una animada programación para todos los públicos.

Fiesta d'as Mascaretas (Agüero).

Descenso de navatas por el río Gállego.

Gastronomía

En una tierra de contrastes como ésta, donde los paisajes se mudan con facilidad de la sierra al llano, es lógico que los recursos primarios que posee se adapten a ella. La Hoya de Huesca sabe a llanos cerealistas, a fértiles y coloridas huertas, a escuadrones de frutales que se alían con estoicos viñedos, a campos de leguminosas. Y todo con el agua cerca, muy cerca. Pero además de agrícola este territorio también es ganadero, por eso sobreviene un gusto

a corderos, a provechosos cerdos, a aves de corral, a piezas de caza menor y a otras muchas especies que posteriormente se convierten en la base de la despensa, en el kilómetro cero de la gastronomía autóctona.

Algunos de los ejemplos de su cocina tradicional más arraigada son las migas a la pastora, el ternasco asado, el pollo al chilindrón, las sopas afogadas de Ayerbe, la sopa oscense o sopa de Aragón, los cardos con salsa de almendra, las borrajas, el salmorrejo de la Hoya o el bacalao al ajoarriero de Huesca.

Los dulces son un apartado destacado en la gastronomía de la Hoya de Huesca: las tortas de Ayerbe, la trenza de Almudévar, las castañas de mazapán y colinetas de Huesca o los empanadicos de Loarre, entre otros, hacen las delicias de los golosos.

La Hoya cuenta con un buen número de bodegas de vino de calidad, algunas dentro de la Denominación de Origen Somontano y otras catalogadas como Vino de la Tierra.

El programa comarcal “Saboreando la Hoya de Huesca” dinamiza el sector agroalimentario con distinto tipo de actividades de la mano de los productores y con la colaboración de los restaurantes, como “el menú de la Hoya”.

Más información de los productores agroalimentarios y de los programas de dinamización en www.saboreandohuesca.es

Agenda gastronómica:

Esta comarca alberga varios eventos gastronómicos de gran interés, como la Feria de la Cereza de Bolea, el domingo más próximo al 13 de junio, la Feria del Vino Ribera del Gállego, en Santa Eulalia de Gállego (en torno al 23 de junio), la Feria micológica de Ayerbe, en torno al 22 de octubre y el Concurso de Tapas, en el mes de noviembre.