En la caseta como en casa
E
l ambiente de la fiesta, la alegría y el buen tono, se viven de pleno en las casetas. Son el lugar ideal para tomar un buen vino de la tierra y degustar una gastronomía tradicional, que durante estos días apetece más que nunca. A nivel estructural, la caseta está construida en metal y cubierta con una lona a rayas, decorada con los típicos farolillos andaluces. Jerez de la Frontera se ha desvivido desde sus primeras ferias, por la esmerada decoración, profusa en detalles y de ambiente delicado, donde se pretende crear una atmósfera acogedora, persiguiendo incluso la osadía de sentirse mejor en la caseta que en tu propia casa. Las casetas jerezanas visten además portadas alegóricas a monumentos o lugares característicos de la ciudad. También es frecuente encontrarse con aquellas que adoptan la estética tradicional andaluza. Por ejemplo, las hay que recrean el típico cortijo de la campiña, con aperos de labranza y escenas de campo, y otras que representan a los típicos patios andaluces, con ventanales, diversa decoración floral a base de geranios, claveles o gitanillas, e incluso se simulan pisos o pozos antiguos. Lo cierto es que cada año la decoración es más esmerada, alcanzando niveles de gran comodidad y originalidad. Por este motivo, el Ayuntamiento convoca cada año un concurso en el que se premia a las mejores casetas instaladas en el Real, finalizando con la entrega de premios en el Templete Municipal.
Feria del caballo 2018 | 7