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Cofrade desde Siempre
Semana Santa 2018 La Línea de la Concepción Cofrade desde Siempre
Nos acercamos a través de este artículo a una persona de Hermandad y a un cofrade de los de siempre. Cofrade que con su saber hacer y dedicación ha sido es y será referente en nuestra Semana Santa. Formó parte de ese grupo de cofrades que empezaron a trabajar para cimentar nuestro mundo cofrade. Fue allá por el año 1959, con solo once años de edad cuando empezó sus labores de monaguillo en la Parroquia del sagrado Corazón en la Colonia siendo Párroco el querido Padre Junco, labores que le iban a facilitar el acercarse a su hermandad de toda la vida la Hermandad del Stmo Cristo del Abandono y Nuestra Señora del Mayor Dolor. Ayudando como monaguillo en Misa ya iba empapándose de los aires cofrades que en aquella añeja barriada de la colonia existían. Por aquel entonces la Hermandad salía la tarde-noche del Viernes Santo. Durante ese tiempo que pasaba en la Parroquia D. Pedro Moreira Montañés, primer Hermano Mayor de la Hermandad ya había puesto sus ojos en este humilde y joven cofrade para que formara parte de la Hermandad, lo cual sucedió al año siguiente cuando a la llegada del nuevo párroco, precisamente el querido y recordado Padre Diego Rafael desempeñó el papel de Cruz Parroquial (ya que en esa época apenas había cruces de Guía) que abría el cortejo. Durante seis años siendo la cruz parroquial la tarde-noche del Viernes, nuestro joven cofrade iba cogiendo protagonismo en su Hdad a modo de constancia, disposición y disponibilidad. Era un joven para todo, ayudaba en todo y cuanto se le requería. Así hasta que en 1962 pasa a ser hermano de número y hay que recordar que a fecha de hoy es el hermano número 1. Durante estos años y por coincidencia con la celebración de los oficios, la Hermandad acertadamente cambio su día de salida del Viernes al Miércoles Santo. En sus casi sesenta años a servicio de su Hermandad Rafael no ha dejado de colaborar y desempeñar funciones que han ido fortaleciendo la historia de esta bendita y humilde corporación, desempeñando cargos como vocal, albacea, tesorero, mayordomo, hermano mayor, etc., pero en definitiva ha sido es y seguirá siendo persona de hermandad, persona de Iglesia, de su Iglesia del Sdo. Corazón. Jamás ha dejado de colaborar con todo aquel que le ha pedido ayuda y menos aún ha dejado de dedicar su tiempo aportar su granito de arena en distintas Hermandades de nuestra ciudad (Silencio, Angustias, etc.). Formo parte del Consejo Local de Hermandades y Cofradías de nuestra ciudad siendo presidente D. Luis Mañasco Lara y coincidiendo en dicho estamento con cofrades como Emilio Villar, Manuel Gimeno o Paco Villalta entre otros. Como anécdota nos contaba Rafael una muy curiosa y que en el mundo cofrade siempre “chocaba” un poco y era la razón por la que este cofrade jamás se puso un trae de nazareno. Pues bien nos argumentaba que por problemas severos de visión no podía dejar de usar las gafas y por esta razón solicito a la autoridad eclesiástica autorización para salir en su Hermandad sin vestir el hábito nazareno, autorización que concedió por escrito poco después de solicitarlo. Para finalizar con esta “pequeña entrevista” le solicitamos a Rafael que nos diera su visión de la Semana Santa desde que el la conoce. Argumenta que ha evolucionado mucho y que gracias al trabajo de muchos cofrades linenses tiene la identidad que merece pero manifiesta que de unos años acá ha habido un estancamiento. Su deseo es fortalecer más aun la unión entre las Hermandades por el bien de nuestra Semana Santa. Y expresa que le gustaría menos capillitas (que solo aparecen en Cuaresma) y más hermanos cofrades. Finaliza con la petición de trabajar más por y con los jóvenes de nuestras Hermandades que sepamos darle el sitio que merecen y la formación que necesitan ya que son el presente, el empuje y el futuro de nuestras Cofradías.
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