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~ La Marmita de Lola ~
Por Lola Narváez
C��� de Albaida
El pueblo, pequeño, es en sí todo un espectáculo con su laberinto de callejones que se enredan a distintos niveles y está rodeado de una vegetación rica en pinos, monte bajo y alcornoques. De pronto una acequia da vida a unos bancales cubiertos de árboles frutales, naranjos, limoneros, albaricoques e higueras. La cercanía de las sierras de Tejeda y Almijara hace que el pueblo quede protegido de los vientos fríos del norte, creando un microclima casi subtropical que favorece las condiciones óptimas para el cultivo de frutales y vegetales. Como edificios singulares, destaca la iglesia de Ntra. Sra. De la Expectación, que data de los siglos XVI-XVII, de aspecto macizo y torre de ladrillo y mampostería, sito en la plaza del Generalísimo, núcleo central del pueblo. Asimismo, las ermitas de San Antón, también del siglo XVII, con su retablo rococó, y la de Santa Ana, del mismo siglo, desde cuya explanada se divisan espléndidas vistas de las sierras cercanas. Es importante el edificio del Ayuntamiento, en la plaza principal. Existe una leyenda muy popularizada en el pueblo que tiene como protagonista a la Virgen del Rosario. Se ha ido transmitiendo de padres a hijos y relata un hecho milagroso que se atribuye a la Virgen.
Un terremoto que asoló la comarca de la Axarquía y parte de la provincia de Granada en la vertiente norte de las sierras Tejada y Almijara, cuyo epicentro se localizó al este de Ventas de Zafarraya, causó graves daños en el pueblo. Llenos de pavor, los vecinos se concentraron ante la ermita invocando la protección de la Virgen cuya imagen decidieron sacar a la calle. Afirma la leyenda que cesaron los temblores de tierra. Desde entonces, todos los años se organiza una romería con la salida en procesión de la Virgen, que es la Patrona del pueblo. Como si se tratara de las estaciones de un vía crucis, al llegar a determinados lugares orientan la faz de la Virgen hacia las montañas como un rito ancestral. Como cocina típica en este pueblo encontramos el potaje de hinojos, el ajo blanco, el choto aliñado y la calabaza frita. Son exquisitos los roscos que fabrican artesanalmente durante sus fiestas. En estas fiestas encontramos las de San Antón que se celebran el domingo anterior al 17 de enero. San Juan el 24 de junio y las fiestas en honor a su Patrona, Ntra. Sra. Del Rosario, el primer fin de semana de agosto. Lola Narváez