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Yo voy a los toros! ¿y tú?
54 ¡YO VOY A LOS TOROS! ¿Y TÚ?
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Días atrás asistí a la presentación del cartel del festival taurino con picadores que se va a celebrar en nuestra Ciudad de los Almirantes el día de nuestro patrón, con una persona que además de un excelente periodista y buen conversador es un gran aficionado, Santos García Catalán. Huelga decir que fueron muchos los recuerdos que se me agolparon en la cabeza del recordado y ya lejano festival que durante cinco lustros los hermanos Peralta vinieron organizando en el Coso del Carmen. Otros nombres, otras figuras del toreo, otros empresarios pero sobre todo otra época. Nunca el devenir del tiempo y sus circunstancias han sido tan crueles como lo están siendo con la Fiesta Nacional, jamás una expresión artística ha sido tan vapuleada y maltratada como lo está siendo el toreo, pero no esto no debe ser más que un acicate para que los aficionados y el público en general estemos, cual toro bravo, luchando contra las prohibiciones y la sinrazón, envueltas en la bandera de la demagogia, la discriminación y el sectarismo, amparado todo ello por su concepto de la libertad de expresión. Ha llegado el momento en que Rioseco, como lo están haciendo otras muchas ciudades y pueblos de la geografía nacional, de un paso adelante en pro de la Fiesta y acuda el día de San Juan, de nuestro patrón, a la llamada de la más bella de las expresiones artísticas: el toreo. Como riosecanos tenemos la obligación de asumir y mantener vivo el legado taurino que hemos recibido de nuestros antepasados y sentirnos orgullosos que la historia del toreo no se entendería sin Medina de Rioseco. Su peculiar plaza de toros, próxima a ser declarada BIC y ordenada construir por mi tatarabuelo D. Antonio Martínez Salcedo en 1858 e inaugurada en 1861 por el matador de toros Francisco Arjona Cúchares, es una de las más bonitas y antiguas del orbe taurino no dejando a nadie indiferente no sólo por ser la única decagonal sino también por ser la única en la que se puede acceder a la presidencia en automóvil. Por la misma han pasado todos los figurones del toreo sin excepción alguna, y en algunas ocasiones su arena y sus piedras han sido testigos no sólo del tributo de sangre que hay que pagar en esta profesión sino también de la Verdad desgarradora e inherente al traje de luces: el picador El Árabe y el Chico de Basurto. DEP. Pero no sólo podemos presumir de patrimonio artístico sino también de patrimonio humano, pues son numerosos los toreros que ha parido nuestra India Chica a lo largo de su historia, unos con más suerte y otros con menos, unos en unas circunstancias y coyunturas económicas y civiles más favorables y otros luchando contra la adversidad: así se me vienen a la mente, (y que me disculpen si se me olvida alguno) Bernardino Cabañas, El Búfalo, el Chaca, Gumer Galván (hombre que desprendía bonhomía y recientemente fallecido), Raúl Manrique, Paquito Cabañas (con el que tuve la suerte de compartir alguna conversación de toros) el maestro, apoderado, empresario y gerente de la Plaza de Toros de Valladolid Jorge Manrique, César Manrique, Tomás Escudero, Hermi,… además de otros. Gentes del toro como el incombustible y gran aficionado Chema Rueda, el que fue ganadero de bravo por un breve espacio de tiempo Wences Berrocal, Jesús Cabañas, Junquerillo y un sinfín de ellos, pero no quisiera olvidarme de una gran persona y gran aficionado recientemente fallecido con el que tuve el placer de ver y comentar alguna que otra corrida de toros: Antonio Galván. Y en nuestras tierras pastaron también una de las ganaderías con más solera y prestigio: la del Marqués de Villagodio. Es por todo ello, por lo que he atendido la solicitud que se me ha hecho desde el Ayuntamiento para a través de estas líneas hacer un llamamiento desde mi humilde tribuna para que, paso a paso, lance a lance, Rioseco se sitúe taurinamente en el lugar que nunca debió abandonar, y la tarde de nuestro patrón sea el primero de un largo historial de festivales. No podemos abandonar a mejor suerte este legado que nos han dejado nuestros antepasados, no podemos permitir que seamos una minoría y lo que es peor, que nos traten como tal, porque si algo tenemos es que sabemos conservar y mantener nuestras tradiciones, porque no sólo la Semana Santa es tradición en Medina de Rioseco, también lo es la Fiesta Nacional. Y como colofón, tenemos un cartel acorde con la categoría de nuestra plaza. El empresario taurino Julián Alonso con la colaboración del Ayuntamiento de Medina de Rioseco, con David Esteban al frente, y con la inestimable ayuda de la Asociación Taurina Riosecana, con Iván San José a la cabeza, ha confeccionado un cartel de indudable mérito e interés para el aficionado y público en general. Abre el mismo un rejoneador en ciernes y con una prometedora carrera, Mario Pérez Langa; le sigue a pie Miguel Abellán, torero de valor y raza y de intensa presencia mediática; Manuel Escribano, torero de ferias y que el año pasado vivió la cara y la cruz del toreo indultando a Cobradiezmos en Sevilla y recibiendo un cornalón en Alicante; David Mora, torero de clase y gusto que conoce la cara más amarga del toreo para posteriormente tocar el cielo en Madrid descerrajando la Puerta Grande de Las Ventas; César Manrique, nuestro César, el cariño, el respeto y la admiración que le profeso no me ciega para decir que es un torero con mayúsculas, de un gusto y corte exquisito, es el claro ejemplo que el toreo y su sistema no es perfecto, anhelo que emule al maestro Roberto Domínguez en su tardía explosión; y por último Marcos Pérez, novillero de Salamanca con grandes cualidades. El toro que abrirá plaza, de Agustínez, y del hierro de Valdeterrazo propiedad del maestro Domínguez para los de a pie. YO VOY A LOS TOROS. ¿Y TÚ?