RECOLETAS SALUD Valladolid
Unidad de Neurología
Dra. Cristina Mª de Miguel Serrano
MIGRAÑA:
L
un problema que se puede tratar
a cefalea es la queja más frecuente en una consulta de Neurología. Es una patología casi siempre benigna, pero puede ser desagradable y deteriorar la calidad de vida de quien la sufre. La migraña es la segunda cefalea más común después de la cefalea tensional. El 11% de la población mundial la padece, y su presencia es mayor en mujeres. Suele aparecer entre los 20 y 40 años, aunque también surge en la infancia y adolescencia. No es una enfermedad grave pero sí causante de ausencia frecuente o limitación en el trabajo y en la vida diaria. ¿QUÉ SÍNTOMAS LA CARACTERIZAN?
Al inicio son inespecíficos como ansiedad, irritabilidad, depresión, cansancio, dificultad para la concentración, sensación desagradable por la luz, el ruido y olores intensos… Después se inicia el aura: es la manifestación de una disfunción benigna y transitoria de la corteza cerebral. Puede durar entre 5 y 60 minutos, aunque a veces se prolonga. La más frecuente, aunque no la única, es la visual: aparecen luces y rayas o puntos oscuros (de pequeño o gran tamaño) en el campo visual. No siempre se manifiesta y generalmente termina cuando empieza el dolor, que puede ser desde leve a incapacitante. La mayoría de los pacientes lo describe como un latido, más intenso cuando hay luces o sonidos agudos. También aparecen náuseas. En general, desaparece progresiva aunque lentamente y deja una sensación de cansancio y malestar que durará horas o días. ¿CÓMO SE DIAGNOSTICA? El diagnóstico se realiza principalmente por los síntomas que presentan. En casos de duda se realizan pruebas como resonancia magnética o escáner y analítica para descartar por completo que se trate de una cefalea debida a otra enfermedad.
10 I RECOLETAS RED HOSPITALARIA
¿CÓMO TRATAR LAS CRISIS? Lo más importante es hacerlas más cortas y menos desagradables. El tratamiento debe ser precoz; si se inicia con más de 1 hora de evolución, será menos efectivo. Son útiles los antiinflamatorios no esteroideos. En las más severas se deberá acudir a analgésicos específicos: los triptanes. En España hay siete de este tipo de fármacos y se pueden probar varios hasta encontrar el mejor para cada paciente. Es importante evitar opiáceos como el tramadol y medicamentos combinados. Otros síntomas como las náuseas deben ser tratados puesto que forman parte de la crisis y también tienen carácter incapacitante. ¿CUÁNDO ACUDIR A URGENCIAS? Se deberá acudir en estos casos: 1. Cuando el dolor persiste más de 24 horas o empeora progresivamente, especialmente si se ha tomado los analgésicos disponibles. 2. Cuando el dolor ha cambiado o aparecen síntomas diferentes como pérdida de fuerza, inestabilidad o dificultad al caminar… 3. Cuando empeora de manera llamativa o despierta por la noche. ¿CUÁNDO SE PONEN TRATAMIENTOS PREVENTIVOS? Los tratamientos preventivos se ponen con el objetivo de disminuir la frecuencia de crisis agudas y hacer que cuando éstas se manifiesten sean más cortas, menos intensas y respondan más rápido a los analgésicos. Habitualmente se indica: Cuando se presenta crisis que limitan la actividad rutinaria, al menos 1 a la semana o más de 4 al mes. Cuando se necesita analgésicos más de 2 veces a la semana. Cuando frecuentemente se prolonga el dolor más de 24 - 48 horas. Cuando es preferido por pacientes porque no toleran los episodios.
Hay disponibles múltiples fármacos para realizar esta prevención. Deberán tomarse a diario durante 3-6 meses, o incluso más si fuera insuficiente. Además, existen otros de diferentes características. En los casos en los que no responden hay otras opciones como la infiltración trimestral de toxina botulínica. Es importante el conocimiento de todas las alternativas y que se sigan los diferentes tratamientos bajo control médico. ¿CÓMO CONVIVIR CON LA MIGRAÑA? La migraña es una enfermedad “para toda la vida”. A medida que pasa el tiempo su intensidad y frecuencia irá cambiando. En general, disminuye la frecuencia con el tiempo. No obstante, es importante aprender a prevenirla y a no estar desprevenido cuando comienza una crisis. En ese sentido, es muy útil apuntar en un calendario las crisis que se sufren y cómo han sido éstas. Esto ayudará a reconocerlas al principio, y así poder tomar el analgésico pronto. ALGUNAS MEDIDAS PREVENTIVAS ÚTILES SON: • Cuidar el ritmo del sueño y descansar suficientemente. •E vitar el estrés en la medida de lo posible y en su caso realizar técnicas de control de la ansiedad. • Evitar el tabaco y las bebidas alcohólicas. • No permanecer períodos prolongados ante pantallas de ordenador o televisión. • Evitar lugares ruidosos, con malos olores y luces brillantes. • Tratar los dolores cervicales. • Evitar alimentos que las desencadenan como chocolate, té, café, quesos maduros, embutidos como el salami, chorizo y salchichón, etc.