HERMANDAD PENITENCIAL DE NUESTRO PADRE JESÚS ATADO A LA COLUMNA (1930) En 1930 don Remigio Gandásegui, prelado de la ciudad, conociendo el interés devocional de los congregantes de San Estanislao de Kostka y de San Luis Gonzaga, les encomendó el alumbramiento de los pasos de ”La Flagelación del Señor”, ”El Señor atado a la Columna”, y ”El Camino del Calvario”.
Dolor con su imagen titular; la misma que el Martes Santo, en la Peregrinación de la Promesa, procesiona al barrio de la Pilarica, donde los cofrades renuevan su voto de silencio. En la Procesión General de la Sagrada Pasión del Redentor, acompaña a su titular, y a los pasos “Preparativos para la Flagelación” (Hernández Navarro, 2004) y “La flagelación del Señor” (Escuela castellana, 1650).
Esta sección disciplinante desfilaba con sus insignias y distintivos propios de la Congregación Mariana, hasta que en 1942, adoptan el hábito actual.
Entre las actividades religiosas de la Hermandad, destacan en Cuaresma, el Triduo a Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, y en diciembre la Novena a la Inmaculada Concepción.
Al extinguirse las mencionadas congregaciones marianas, a punto estuvo de desaparecer, pero tras permanecer un tiempo en la Iglesia Penitencial de las Angustias, encontró acomodo definitivo en la Real Iglesia de San Miguel y San Julián, y con ello logró subsistir. Su imagen titular es la de ”El Señor Atado a la Columna”, perteneciente a la Cofradía de la Vera Cruz y realizada por el escultor Gregorio Fernández en 1619, y que representa a Cristo Flagelado.
HÁBITO Capa y túnica blancas con bocamangas de encaje, capirote y cíngulo azul celeste, guantes y calcetines blancos y zapato negro con hebillas.
La Hermandad participa el Lunes Santo en el Santísimo Rosario del 15