Pasión de multitudes 2014 by Editorial Quantum

AntologĂa

Pasión de multitudes Cuento Breve, Antología, Brasil 2014 . Libro formato digital Patrocinado por Club Logos, co.

Producido por Marc Valenz y Editorial Quantum Santiago de Chile, Julio 2014. Información y contacto: editorialquantum@gmail.com

* Todos los textos son de propiedad intelectual de los autores aquí comprendidos , protegidos por Ley n° 17.336. * “Pasión de multitudes” Cuento Breve, antología 2014, es de distribución gratuita para los medios digitales y virtuales. •Prohibida su comercialización. •Propiedad intelectual de fotografías en este e-Book, no corresponden a Editorial Quantum, solo a sus autores.

Pasi贸n de Multitudes Cuento Breve Antolog铆a: Brasil 2014. Pasi贸n de Multitudes Cuento Breve, antolog铆a: Brasil 2014. Libro formato digital Patrocinado por Club Logos, co. Producido por Marc Valenz y Editorial Quantum Santiago de Chile, Julio 2014.

Patrocinado por Club Logos, co. Informaci贸n y contacto: ongclublogos@gmail.com Fecbook: https://www.facebook.com/ongclublogos

Producido por Editorial Quantum Informaci贸n y contacto: editorialquantum@gmail.com Invita Marc Valenz Escritor y Coach Informaci贸n y contacto: editorialquantum@gmail.com

Auspicia

INDICE

Pág

Título

Autor

07………….. Índice 09………….. Prólogo 11………….. Del Productor

15……….…. La historia del Juan 17………….. El fútbol como un sueño 18…….……. Hijos del sol 20……….…. La mano de Dios 23………….. Mi experiencia en algo que desconozco 24……….…. Relato histórico del chi-chi-chi-le-le-le 26………….. Bienvenidos todos turistas 29…….……. Mas que un gol 30……….…. Tan lejos tan cerca 33………….. La confianza es lo primero 34……….…. El rey del mundo 37………….. Siempre faltaba uno 39…….……. Famosos 41……….…. Las mujeres y el mundial 43………….. Un balón abandonado

Carlos Alberto Won Walles Valeria Michea Rivera Genezaret Contreras Delgado Roberto Hofer Oyaneder Jacqueline Rivera Juan Oyarzun Marcos Camilo Andrade Ordóñez Alexsandra Sánchez Marcelo Munch Allan Nicolás Trinidad Zamorano Ibarra Natalia Ortiz Andrés Eduardo Godoy Torres Gabriela Margarita Bustos Nichola Gómez

Prólogo El Fútbol es el deporte con mayor influencia en el presente siglo, en casi todos los rincones del planeta: desde partidos profesionales, a improvisados partidos en el barrio, sin más recurso que dos piedras como arco, y un espacio cedido involuntariamente por la calle o esquina con el terreno sobrante del lugar.

En tiempos como el nuestro, el mundial es un aliciente. Muchedumbres se unen a ver a sus equipos favoritos, y diríamos que, se forma un especie de hermandad en torno a un simple balón. Por otra parte, la literatura se ha observado en las últimas décadas, como algo frio, lejano, elitista inclusive. Sin embargo, lo que permite la literatura, es la empatía con grupos humanos interpretando su sistema social y cultural. El fútbol, es parte de la cultura de la presente civilización, no nos podemos enajenar de su presencia en millones de personas del mundo que vibran en la cosmovisión de su cultura futbolística. Hay miles de experiencias en torno al deporte rey, desde mujeres que gustan del mismo, como las que lo odian por no entenderlo. También, cientos de jóvenes que sueñan con ser goleadores en su equipo favorito. Todas estas historias, que son parte de su cultura, bien merecen ser oídas o leídas. Por esa razón, hicimos la invitación al público con y sin experiencia en el arte de escribir, para que participaran contando alguna de sus propias impresiones de la efervescencia del fútbol. Podrán leer aquí, situaciones cotidianas del fútbol, como también relatos fuera de lo común, como por ejemplo; el ladrón homicida que viaja desde Chile al mundial en Brasil, sin más recursos que su oficio de ladrón y homicida, con eso le basta para conseguir todo lo que crea en forma detallada en su mente. O bien, la mujer que no le gusta el fútbol, que decide ir a leer y recorrer la ciudad porque, aprovechando que todos están viendo el partido, ella tiene a toda la ciudad para sí misma, por eso se siente el rey del mundo. El arte de la literatura, debe interpretar a los otros, más allá de nuestros propios gustos e intereses diversos y personales: de otra forma, no cumpliría su misión que es, eternizar los tiempos y su historia multicultural en el papel.

Marc Valenz Escritor, coach, productor.

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Acerca del productor Marc Valenz, es escritor, coach, y productor. En el 2011 llega de Santiago a la región de Los Ríos. Es miembro de la Sociedad de Escritores de Chile (filial Valdivia), ha publicado en antología “Prosistas y poetas de Valdivia”, “Cantos de agua y luna” y en formato e-book´s, dos de sus producciones. Además, ha sido publicado en medios digitales en: Honduras, España, Portugal, y otros países. Semanalmente publica “Texphot´s” (textos breves) en páginas online, llegando a un promedio de 7.000 lectores semanales por publicación.

Marc Valenz

Escritor, Coach, productor y comunicador motivacional.

Fundador de Club Logos, organización privada de servicios de desarrollo humano, con un alto sentido de responsabilidad social empresarial. Impartió el taller “Verano en letras”, biblioteca municipal de Valdivia (2014). Impartió un taller para escritores jóvenes “Aleph” en la biblioteca municipal de Valdivia (2013). Fue parte del 1er encuentro Internacional de escritores e ilustradores en la Región de Los Ríos, exponiendo junto a autores internacionales y nacionales. Además, ha creado los primeros “Clubes de lectura de autoayuda de Latinoamérica”, uniendo su trabajo de escritor junto a la labor de comunicador motivacional. En junio del año 2013, para el encuentro mundial de escritores, se publicó en Venezuela una antología en honor al poeta Andrés Eloy Blanco, en el cual una de sus obras “Angelito negro”, apareció junto a otros escritores del mundo. Poesía, meta poesía, relatos, cuentos, paremias, ensayos, reflexiones sociales y metafísicas; son parte de los escritos de su autoría.

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Alguna de sus obras escritas son: “Te Deum”(Madrid, España), “El diamante de América”(Tegucigalpa, Honduras), “40 E-mail´s de amor” (Melilla España), “Otro tiempo” (Valdivia, Chile), “Filosofía para aprender a ser feliz”, entre otras. Imparte cursos de Oratoria , lleva veinte y tres años de experiencia en liderazgo, fue maestro de escuela de líderes en fundación internacional. siete años liderando grupos de caravanas sociales en distintas ciudades del país, Consejero juvenil por más de catorce años, ex Fundador y presidente de la ONG, “Avance social” Santiago de Chile.

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Forma y capacita a líderes sociales, es orador en temas motivacionales y de liderazgo. Dirigió operativos sociales en la región metropolitana, grupo de voluntarios para hogares de niños y ancianos, grupos de jóvenes para ayuda social en terreno. Creó los programas en Santiago: “La fonda de los niños “, “Te regalo mi navidad”, “Niño + cultura”, "G100" (operativos sociales). Organizó el programa “Niño + deporte” en el estadio Bicentenario de La Florida, donde el jugador Gary Medel, fue uno de los invitados al proyecto. Valenz, es un permanente investigador de la física cuántica, metafísica, y sistemas de lenguaje ontológico. Cursa “Exploración cuántica”, University of Marylan, USA.

SITIOS REFERENCIA de Marc Valenz FLICK http://www.flickr.com/marcvalenz PINTEREST http://www.pinterest.com/marcvalenz FACEBOOK www.facebook.com/marcvalenz

Editorial Quantum

Pasi贸n de Multitudes Cuento Breve Antolog铆a: Brasil 2014.

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El Juan soñaba con ser futbolista. Un día, nos cambiamos de casa. ¡Por fin tendríamos un pasaje y vecinos con los que jugar! Cada tarde, salíamos los hermanos, hasta que ocurrió eso del asalto. Hasta ahí no más llegaron nuestras pichangas y tuvimos que conformarnos con el estrecho patio trasero. Una vez, el Juan pateó la pelota tan fuerte que cayó en el techo. De tanto uso, la pobre pelota había perdido toda dignidad. Cuando fuimos a sacarla, nos dimos cuenta de que había una malla verde que sostenía las hojas. Entonces, al Juan se le prendió la ampolleta. A la malla le hicimos unos cuantos hoyos del tamaño de la pelota, y la colgamos entre dos árboles. Ese fue nuestro entrenamiento durante unos meses. Hasta el día en que al papá se le quitó la idea esa de que nos iban a robar y nos dejó volver al pasaje. Unos días después, se armó un partido con todos los ases para el fútbol. Al término, todos quedamos conformes con nuestros desempeños, aunque el marcador estuvo empatado. Mientras nos despedíamos, un viejo que estaba sentado mirando, se acercó a felicitarnos y a diez amigos, incluyendo al Juan, les dio su tarjeta. Resulta que el viejo era ayudante del DT del Cobreloa, y los estaba invitando a un campeonato el sábado. Ese día había muchos jóvenes como el Juan, todos muy buenos, pero solo algunos serían escogidos. Cuando empezó el partido, los jugadores mostraban mucho talento, pero nadie metía el gol. De pronto, Juan se barrió para quitar la pelota, corrió y, desde fuera del área, tiró un cañonazo cruzado hacia el ángulo, que terminó en gol. Los que estábamos en las gradas enmudecimos. Los compañeros lo miraron y él solo agachó la cabeza para sonreír. Al rato, el otro equipo obtuvo un corner. El arquero salió a cortar y un delantero hizo un globito. En eso, el Juan corrió toda la cancha y antes de que la pelota entrara, hizo una chilena. Entonces, sonó el pitazo del árbitro: su equipo ganó 1 a 0. Nadie se sorprendió de que el Juan fuera el primer seleccionado.

La historia del Juan Autor: Carlos Alberto Won Walles Edad: 16 años Ciudad: Santiago, Chile.

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El fútbol como un sueño Autor: Valeria Michea Rivera Edad: 23 años Ciudad: Calama, Chile.

Mi padre era una pelota de fútbol. Mi hermano era una cancha de cuidado césped. Mi hermano (el menor) era un efectivo guante de arquero. Mi madre, una triste tarjeta roja. Mi hermana, una hermosa porrista. Mi descendencia iba a ser de fervientes hinchas de la camiseta salmón, como yo. ………………………………………. El fútbol era más que una distracción de fin de semana, era un sueño, un lindo sueño.

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El corazón se le detuvo. Habían ganado. El sudor corrió por su frente al pecho descubierto a la polvareda. Unas pocas estrellas se habían asomado para ver a sus hermanos de barro disputar el gran honor de unírseles. Él no lo podía creer. Creyó haber muerto cuando la pelota, bendita hija del Sol atravesó su destino. Era el ocaso y pronto los brazos de sus compañeros se volvieron un capullo que lo envolvió por completo. La tribuna estalló en aplausos, en honor a su victoria. Nuevamente, el silencio.

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Llegó el hombre. Vestía de colores y una piedra de jade coronaba su diadema de plumas. Era hora de la recompensa, y por ser el autor de la triunfo en la hora decisiva, a nuestro jugador le correspondía ser el primero en recibirla. El joven dio un paso adelante. Apoyó su espalda contra la fría roca. Desde allí, podía ver el balón. No era una esfera, exactamente. De su superficie accidentada, dos fosas profundas y un corte inferior, reconoció el rostro de aquel muchacho, el goleador que les había truncado sus sueños de recibir el trofeo con anterioridad. Habían perdido contra su equipo el último juego. Sonrió, saludando a su nuevo padre. El Sol ocultó su corona de rayos para dar cabida a la noche. El hacha cortó vértebras y la daga atravesó el esternón. La cabeza salió rodando y del pecho brotó la sangre cual barriles de vino, bañando la tierra de escarlata. El jugador, ya inmolado, aún mantenía los ojos abiertos. La cabeza seguía despierta, aún mirando cómo su corazón era arrancado de entre las costillas, ofrendado al Astro Rey, ante la mirada perdedores, con la envidia encendida en el pecho. Una nueva pelota surcó desde entonces la polvorienta cancha… Y una estrella se sumó a sus millares de hermanas.

Hijos del sol Autor: Genezaret Belén Contreras Delgado Edad: 16 años Ciudad: Valdivia, Chile

Marc Valenz Escritor, coach, productor.

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Autor: Roberto Andrés Hofer Oyaneder Edad: 47 años Ciudad : Punta Arenas, Chile

La mano de Dios

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A su papá le decían “El Maradona”, así que Dieguito la tuvo difícil desde potrillo. Apenas caminó, debió aprender a correr con una pelota. Ante menuda presión familiar él no podría haber sido menos que una versión corregida y aumentada del papá futbolero, pero a qué costo… Con decir que, estando recién en primero básico, el trajín e intensa competitividad que se le inyectaba terminaron por tirarlo a la lona. La razón: un molesto esguince de tobillo en un agitado match en categoría mini. Su padre se quiso morir cuando le dijeron que el niño, delantero estrella de su equipo, debería “calzarse” ocho semanas de yeso. Y justo cuando se venía una copa interescolar. Pero Dieguito estaba para cosas grandes, y “El Maradona” lo aleccionó y se las arregló para hacerlo jugar, aun cuando le faltaban dos semanas de recuperación. El poder (o miseria humana) de un pariente “profesional” en el hospital hizo el resto. Claro, su retoño debía ganar o ganar en esta contienda de dos tiempos, y él le implantó el chip de cómo dejar el alma en la cancha. A poco del pitido inicial, un bramido aún más odioso se iría colando de fondo en el inconsciente del pequeño crack. Él sabía que su progenitor no le perdonaba cada pelota perdida o tiro mal ejecutado, y en reiteradas ocasiones tan ejemplar “modelo” le recriminó en el peor acento su disconformidad, al punto de “chuchetearlo” a viva voz desde la tribuna. En más de una salida de madre casi le salió pelea, y no sólo con el árbitro. Aquello fue lo de menos, al lado de la gloria que significó alzar la copa. En esto de chutear siempre hacia adelante, poco le importó que su hijo quedara con una leve cojera -como secuela del esfuerzo- y creciera para adentro. A continuación de tan espartana iniciación, Dieguito siguió rindiendo con la pelota, aunque nadie sabe cómo de un día para otro engordó en su pubertad. Y, como quien se quiere sacar una sombra de encima, al final derivó brillantemente a guardameta.

Desde mi punto de vista jamás me ha interesado el fútbol, de hecho siempre me ha dado miedo el balón sobre todo cuando va por el aire y tengo la sensación de que me caerá a mí, aunque me encantó ver los súper campeones admito. Desde niña me vi obligada a ver los partidos: solo tuve hermanos, la emoción y sus gritos me contagiaban aunque no entendía nada, recuerdo que golpeaban las tapas de la basura metálica de afuera del departamento ¿ya se imaginan el ruido? Mi mejor amiga de infancia solo pensaba en practicar sus goles y siempre me ponía al arco; Dios como odiaba que hiciera eso, me daba terror. La gente se pone como loca cuando se trata de futbol, de tanta carne que comen como no van a parar al hospital, aunque me aterra la idea de que algo que vaya por el aire me caiga en la cabeza. Una vez jugué un partido con chicas del trabajo, me anote porque no éramos muchas mujeres, ya saben cómo es la presión de grupo, bueno fui un desastre me arrepentí de jugar y no lleve zapatillas ni nada, habían arrendado una cancha en el esporteen de viña y de curiosa fui a ver qué pasaba y me hicieron jugar por sonsa, las chicas son más duras que los varones me quede en un solo lugar al lado del arco contrario, sin saber que hacer el balón iba y venía, de repente me lo lanzaron. De tanto susto, lo único que hice fue cerrar los ojos y patear hice un gol que jamás vi, solo escuché los gritos de mi equipo y se lanzaron encima mío, fue una extraña experiencia muy graciosa por cierto. Mi amiga sigue soñando en entrar a un gran equipo femenil, me dice que soy anti futbol solo porque lo veo con mi esposo si no quién sabe, él intenta explicarme pero aun no entiendo mucho, este año al menos conozco a los jugadores eso es un avance. Supongo que ellos lo han hecho tan bien que hasta yo sé quiénes son que sorpresa la gente está loca.

Mi experiencia en algo que desconozco Autor: Jacqueline Rivera Edad: 24 años. Ciudad: Valparaíso, Chile.

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Relato histórico del chi-chi-chi-le-le-le Autor: Juan Luis Oyarzun Marcos Edad : 52 años Ciudad: Rio Bueno. Chile.

Sras. y Sres. bienvenidos al deporte mas esquizofrénico del mundo donde se une la pasión y los sueños de cada selección que han llegado a las semifinales del mundial: “Rusia 2018”. Recordemos que hace 4 días atrás, chile pudo imponerse a Francia con tantos de Sánchez y del “griego” chileno otixê Martínez que juega en el futbol helénico. Hoy nos recibe Moscú y el estadio lokomotiv cobija a 7.000 compatriotas en una fiesta de la marea roja. Frente a los nuestros, se encuentra la hinchada verdeamarela que viene a revalidar su favoritismo. ¡Chile y Brasil!. Es como una bofetada 100 al destino, a la conciencia y a la historia”. Momentos: ¡¡¡me-mo-ra-bles!!!

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minuto 1: castillo para Sánchez quien desde lejos intenta sorprender a Raúl y la pelota sale apeniiiitas desviada. minuto 15: Neymar gana la marca de Andia, dispara al aaaaarco y atrapa toseli como “un gato a un ratón”. minuto 23: Robertinho frente al arco, achica toseli y el balón ¡zummmm! “peina” el travesaño. minuto 43: el niño maravilla hace un parque de diversiones y Raúl logra desviar. minuto 53: Tandem perfecto, entre Sánchez y Vidal, tuya, mía, para ti, para mi ¡tac! ¡tac! chile domina. minuto 64: ¡goooooooool de Brasil!, 100 ¡a-nu-la-do!. Posición adelantada de quemao. ¿leía la bomba 4 cerca de toseli?. minuto 77: lamentablemente sale lesionado Sánchez y en su lugar ingresa el “griego” otixè martinez minuto 86: sigue atacando Brasil y se agiganta “el pitbull” Medel que como una momia luce sus particulares vendajes que arrastran por el césped. minuto 94: ¡vamos rey!, desborda Vidal por derecha, el centro lo baja el “griego” otixê, con hábil finta elude a David Luis, remata al arco y gooolpea la pelota en el travesaño toca la espalda del arquero y gooooooool de chile. Un goooool a la bestia negra, un 100 goooooool a tantos triunfos morales. Chile 1 Brasil 0. partido ¡¡¡ter-mi-na-do!!!. otixê regala su camiseta al público y en el reverso de su nombre se puede leer la palabra éxito, en uno de los festejos más dulce de nuestra historia futbolística: ¡¡¡chile, finalista, busca el titulo, frente a los invencibles alemanes!!! 48

Bienvenidos todos turistas Autor: Camilo Andrade Ordóñez Edad: 20 años. Ciudad: Valdivia, Chile.

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El balón estaba en su poder, y comenzó a correr desde el área chica, mientras esquivaba al equipo contrario con gran facilidad. Entonces, se acercó poco a poco al centro mientras dos grandes y corpulentos mediocampistas intentaron cubrir su paso, pero no bastó, pues la pequeña contextura del joven Rodrigo le jugó a su favor y logró escabullirse... se veía más cerca esa puerta a la gloria. La portería contraria estaba a unos pocos metros y correr era lo único que quedaba por hacer. Corrió como nunca antes lo había hecho, pues se estaba jugando el todo por el todo, en lo que él reconoció enseguida como el partido de su vida. CORRIÓ. CORRIÓ. CORRIÓ. SE ACERCÓ. ¡PAM! Un certero balazo acabó con la vida del pequeño ciudadano de la calle... ahora las vías están limpias, ya no hay vagabundos, bienvenidos todos turistas. Erase una vez, un niño esforzado que soñaba con superar la pobreza. Erase una vez, un mundial de fútbol en su tierra. Erase una vez, un crimen auspiciado por el gobierno.

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Mas que un gol Autora: Alexsandra Sánchez Edad: 16 años Ciudad: Santiago Chile.

El estadio pedía a gritos que metiéramos un gol, sus cánticos nos ensordecían. El equipo contrario tenía el balón, sus pases eran perfectos. Mis compañeros trataban de quitarlo, hasta que por un error del delantero del otro equipo, la pelota llegó a nosotros. Este era mi primer partido, como todos soñaba con meter el gol de la victoria. Empecé a recrear las tácticas practicadas en el entrenamiento, mientras el público enardecía con cada pase. Llegué al área chica, preparado para cabecear la pelota y hacer el gol. Salté con todas mis fuerzas, golpeé la pelota y caí al suelo. Vi cómo la gente se ponía de pie, algunos rezaban para que la pelota entrara, y otros simplemente miraban musitando un “¡oh!” con los ojos desorbitados. El rebote de la pelota contra el travesaño los sacó de su trance y estallaron de euforia. Era una mezcla de gritos, saltos y expresiones inentendibles, y justo en ese momento me di cuenta que el fútbol va mucho más allá de meter un gol. Para mí, la verdadera misión es provocar el desenfreno de nuestros hinchas y devolverles las mismas esperanzas que ellos nos entregan en cada partido.

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Tan lejos, tan cerca. Autor: Marcelo Munch Edad: 42 Ciudad : Quillota, Chile.

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Pero yo le dije al tío Yeyo que le diéramos no más, que cómo no íbamos a hacer un esfuerzo por la roja, pero el tío Yeyo no estaba ni ahí porque no le gustaba el fútbol y según él no teníamos por dónde, Pero tío… le dije, Cómo no vamos a ir si íbamos a estar tan cerca… aunque tan cerca no íbamos a estar ná porque de Montevideo pa’ llá era una tiráh bien relarga, ¿Cómo que cerca…?, me replicó, y yo le respondí, Pero tío, si no es tanto, a cada rato nos tocan viajes largos…, ¿Tú sabíh lo lejos que está cabro, y cuánto nos saldría la gracia…?, Pero tío, lo que nos echemos en petróleo me lo saca del sueldo…, Chih, del sueldo, si te lo saco del sueldo me quedaí debiendo diez viajes más puh cabro…, Pero tío… le insistí, Si es la roja, de Alexis y Vidal, cuándo más vamos a ir a un mundial…, ¿Y qué tanta cuestión…?, me gruñó, Pegarnos el medio viaje pa’ qué, pa´ puro perder y por goleáh…, Pero tío, si esta roja es distinta, tiene otra mentalidad, esta roja va a llegar lejos y está pa’ salir campeona…, y me lo quedé mirando, y él se me quedó mirando y frunció las cejas y como que se enojó, Campeona, qué campeona ni que na’, nos van a volar la raja, como siempre no máh… como siempre, sí, tenía razón el tío Yeyo, pero esta vez era distinto, yo sabía que era distinto, estaba tan seguro que era distinto que había que ir, aunque fuera solo. Pero no seguí insistiéndole al tío Yeyo, y el tío Yeyo se me quedó mirando, y dejó de fruncir el ceño, y al final dijo que sí. Y nos pegamos el pique a Belo Horizonte, y llegamos al Mineirao, y nos conseguimos dos entradas que nos salió cuatro veces más, y cuando nos sentamos en la galucha, cuando empezó el partido, nos miramos con el tío y sonreímos, y estábamos contentos de que le hubiéramos dado no más, porque pasara lo que pasara, no se nos iba a olvidar nunca.

La confianza es lo primero Autor: Allan Nicolás Edad: 13 años Ciudad: Valdivia, Chile. Era junio del 2014, como cada cuatro años yo estaba emocionado; pero cómo no iba a estarlo si llegaba el mundial, y más si jugaba mi selección donde disputé y defendí con orgullo esos colores. Ah! Por cierto, mi nombre es Marcelo Salas. Chile no venía con buena racha del mundial del 2010, tras ser eliminado en octavos de final por Brasil. Pero ya había pasado tiempo y todo comenzaba de nuevo, no nos tocaba un grupo muy favorable: España, Holanda y Australia. Ya tenía los pasajes listos para apoyar a los muchachos en su debut contra Australia en el cual caerían 5-0. La desesperación se hacía presente en el plantel chileno, ya que no tenían muchos chances de clasificar a octavos. Por mi parte traté de alentarlos vía twiter, sorpresivamente me encontré con Arturo Vidal en el aeropuerto, no lo pensé dos veces y le dije: “hijo mira, con estos chuteadores metí hartos goles y quiero que tú los uses para que le rompas el arco a Casille, y te lleves en velocidad a Robben, quiero verlos en octavos muchachos” y así fue, los resultados jugaron a favor de nuestro país, pasó segundo en la tabla compartiendo lugar con Australia. Chile iba con esperanzas a la ronda de los dieciséis mejores, pero no contaban que les tocaría con Brasil, se veía negro. Llegó el sábado en que jugaban los octavos y la selección entraba con Vidal a la cabeza usando los “chuteadores mágicos del matador Salas”. Para sorpresa de muchos, Chile le ganó a Brasil por un contundente 3-0 y avanzó a cuartos, avanzó hasta llegar a la final contra Alemania. Nuestra selección salió sin miedo a la cancha, confiadamente Alemania dio el primer golpe con el gol de Thomas Müller, reinaba la tristeza y la desesperación entre los nuestros, hasta que Vidal la tocó y anota un gol de cabeza. El primero tiempo terminaba igualado, el segundo tiempo sin goles dando pasó a la prórroga. Vidal como capitán dio el 2- 1 para Chile, y aun imponiendo este doblete, Alemania no se rindió luchando hasta el final. La emoción y el orgullo me embargaban como a todos mis compatriotas, no dudé en felicitar a la selección, sobre todo a Vidal y le dije: “estos chuteadores no tienen magia tienen confianza en ti mismo”

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El rey del mundo

Autor: Trinidad Zamorano Ibarra Edad: 23 años Ciudad: Puente Alto, Chile.

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A las 15 horas empezaba el partido de la selección nacional en Brasil, así que se me ocurrió ir a la biblioteca; estaba casi vacía, tenía todos los libros a mi disposición, era mi día. Pensé que si caía una bomba o estallaba una revolución nadie se daría cuenta, por lo que me puse a hablar por teléfono, me reí como un loco y tomé una siesta en un asiento principal, me sentí un anarquista. Terminó el partido con la clasificación a nuestro favor y quise ver qué pasaba en las calles; corrí al centro de la ciudad y comprobé la euforia colectiva, y ya sin miedo crucé un pasaje sin mirar a ambos lados, pasé entre la gente sin pedir permiso, grité en espacios públicos, era el rey del mundo. Creo que, definitivamente, amo el futbol.

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Siempre faltaba uno Autora: Natalia Ortiz Edad: 24 años Ciudad. Valparaíso Chile.

Recuerdo que empecé a jugar al futbol porque en mi pasaje siempre eran tres hombres y al final me animaba a jugar con ellos, si yo la machorra recuerdo que tenía 9 años, así comprendí desde siempre porque a los hombres les encanta jugar futbol, y es por eso el futbol está desde siempre en nosotros desde pequeños que tenemos nuestras experiencias caídas, risas, golpes y siempre uno ha sido arquero, lo típico al gol saliendo, y lo mejor de todo es que todos comparten pueden ser muy malos para la pelota o muy buenos da lo mismo todos juegan y se divierten y se olvidan de los problemas. Al pasar los años yo siempre fui la única mujer que jugaba futbol con hombres, incluso era mejor que ellos me decían Ronaldiña, alcancé a jugar en un equipo profesional, Santiago wanderers femenino, todo bien hasta que un día jugué súper mal y me frustre y me Salí, me arrepiento de eso, debí haber seguido. El futbol es uno de los deportes más lindo del mundo, y siempre estará en mi recuerdo por lo menos tengo 6 medallas 5 de primer lugar y uno de terceros, recuerdo que jugué contra la selección chilena femenina perdimos pero se luchó hasta el final. La pelota ha sido una muy buena amiga para mí, me ha hecho inmensamente feliz quizás vuelva a retomar el futbol, sería lo ideal nuevamente a ser algún gol y gritar con esa adrenalina y euforia, y sobretodo enseñarle a mi hija a jugar futbol porque sé que la llenaría vida y alegría. .

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Famosos Autor: Andrés Eduardo Godoy Torres. Edad: 26 años. Ciudad: Valdivia. Chile.

A Por fin conseguí entradas para ver los partidos del mundial, me ha costado mucho llegar hasta aquí y sin duda no voy a desperdiciar esta oportunidad. Me presento, soy Adolfo Tapia, alias “El Carnicero” un humilde ladrón homicida que se ha forjado un suculento prontuario por diversos delitos, el último de ellos y que me ha traído acá a Brasil y en primera clase, fue el robo de un cajero automático del Banco República, algo fácil, algo simple y salí en las noticias. Me acompaña mi 9mm. siempre fiel y dispuesto a darme la razón en cualquier tipo de discusión que mantenga, siempre dispuesto a matar por mi si es que es necesario, siempre dispuesto a todo con tal de no utilizar mis nudillos, pues mis manos no están para ejercer violencia física en el contrario, no podría lastimar mis herramientas de trabajo. Las entradas? Digamos que amablemente me las entregó un turista holandés ahora fallecido, una pena para él, que luchó por defender sus cosas hasta la última exhalación, un regalo para mí, que lucho día a día para salir adelante y obtener lo que la vida me entrega. En el estadio las cosas no son distintas, pues si te veo descuidado no dudaré en utilizar mis sofisticados métodos y dejarte desposeído de todo y con eso no me refiero solo a lo material, yo te podría robar desde tu dignidad hasta los sueños y esperanzas que albergas con inocencia en tu corazón. Yo me siento orgulloso, mi familia también lo está, este mundo es del más fuerte y si lo dudas tengo una certera bala con tu nombre para meterte en la cabeza. Yo lo doy todo por mi país, todo por mi equipo, pero no hay caso que gane contra Brasil en este mundial, no hay caso, a menos que compre una pistola más grande y acabe uno a uno con todos los jugadores de su equipo, con los hinchas, con la población, y así poder anexar este territorio a mi país. Vaya! Disculpen, a veces me distraigo y comienzo a fantasear. ¿Dónde estaba? -Ah! Sí! Los mataré a todos y seremos famosos, yo y mi 9 mm…

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Las mujeres y el mundial

Autora: Gabriela Margarita Bustos Cuevas Edad: 54 años Ciudad: Río Bueno, chile.

A las mujeres no les interesa el mundial, no saben de futbol, me gustaría que vieran como están informadas, quien es el arquero del Milán, de Barcelona, del Real Madrid, de la selección Chilena, los mejores, arman equipos propios, alegan como hombres, saben cuál es el más mino, el que tiene la novia, más bonita, el mejor defensa de la selección chilena, ¿quién es?, el pitbull dicen , otras creen que no es así, Jara , Mena, Albornoz, es que cada uno tiene su estilo de jugar, difícil decidir cuál es el mejor, depende de la táctica del técnico, responde otra, los volantes Aranguiz, Carmona o Vidal, pero está lesionado, Valdivia, Beasejour jugó en otro mundial y bien, tal vez por ahí está la cosa, que se lleven bien Sánchez, Pinilla o Vargas, va a faltar Fernández y Suazo, con esos la roja sería un bombazo, ¿cuánto creen que van a ganar a los canguros?, como estamos, fácil un 2-1,que vamos a hacer para el partido, unas chelitas no estaría mal, pintemos banderas en la cara, nos ponemos las camisetas y pelucas quien trae algo para después, cada una trae lo suyo. Dispuestas para la previa, falta poco para el partido, va a comenzar, se me apretó el corazón con el himno nacional, lo cortaron los hijos de su madre, no puede ser, reclaman, pero igual vamos a ganar, vamos Chile mierda. Comienza el partido uuu, vamos que se puede, por la cresta reclama una dama ¡achúntenle al arco cabros!, me estoy comiendo el dedo de puros nervios, debía haber una mujer jugando ahí dicen entre risas, una chela pasen mejor, se me seca la garganta tanto gritar, ¡goool chileno mierda!, Sánchez, te dije buena. C.H.I. comienza el grito de guerra, y vamos por el otro, vamos chilito lindo, vamos Valdivia, ¡Golazo del mago!, ¡vamos a ganar! Entre tiempo, comentarios…….comenzamos a sufrir, gol de los canguros, gritan ¡igual vamos a ganar!, que sufro con este partido, ¡vamos chiquillos!, arenga otra, no se desconcentren ¡gol mierda el negrito la hizo otra vez!, que termine el partido no más, pitazo final y ganamos todas a gritar C.H.I. CHI…L.E.LE…….

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Un balón abandonado Autor: Nichola Gómez Edad: 22 años Ciudad: Valdivia, Chile.

Esta es la historia de un balón de un mundial pasado, abandonado estoy, gastado y deteriorado. Hace tanto tiempo que no escucho la bulla y pasión de las personas que insistentemente me buscaban para patearme hasta una red. Esos extraordinarios tiempos desde mi creación, como la larga espera, hasta que por fin pude ser usado, cuánto tiempo ha pasado ……..cuánto tiempo. Es increíble que me hayan olvidado como si ya no sirviese. Me encuentro olvidado en un mueble, me han rallado por todas partes y encerrado entre cristales. No se que eh hecho mal (volvió a pensar el balón, ya más desesperado por no entender la situación). En ese momento entró un hombre con otro balón en sus manos, lo puso al lado de este y dijo: tú, balón 2014 tienes el honor de estar junto a los mejores balones los que alegraron a tanta gente, y este en especial, que esta a tu costado fue el primer balón que acompañó a nuestro país en nuestro primer mundial, el más bello de todos. El hombre dio media vuelta y salió del salón. El nuevo balón se quedó mirando fijamente al balón viejo y le dijo: es un honor estar junto a usted. En este momento el balón viejo entendió porque se encontraba en ese lugar desde 1930 y se alegró en saber que no había sido olvidado más bien estaba siendo cuidado para que nuevos balones lo conozcan.…………………….…………… Desde entonces nunca más sintió inútil y abandonado.

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”...El fútbol, es parte de la cultura de la presente civilización, no nos podemos enajenar de su presencia en millones de personas del mundo que vibran en la cosmovisión de su cultura futbolística…”

“…El arte de la literatura, debe interpretar a los otros, más allá de nuestros propios gustos e intereses diversos y personales: de otra forma, no cumpliría su misión que es, eternizar los tiempos y su historia multicultural en el papel…” ( Marc Valenz) Escritor, coach, productor.

”Pasión de multitudes: cuento breve, Brasil 2014. Libro formato digital Patrocinado por Club Logos, co. Producido por Marc Valenz y Editorial Quantum Santiago de Chile, julio de 2014. Información y contacto: editorialquantum@gmail.com