Poemas Simples Gaby Mena
Editorial SubpoesĂa 3
Poemas simples Gaby Mena Editorial Subpoesia Buenos Aires, Noviembre 2012 www.subpoesia.com.ar
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I Los amores largos los amores advertidos los amores posibles e imposibles y todo el resto de amores que ahora no se me ocurren
han comenzado a llevar tu nombre.
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II Nadie sabe cuántas puertas se abrieron para que vos llegaras hasta aquí. Anduve a ciegas este laberinto sin centro. Anduve desnuda a la intemperie de este desierto. Anduve sola y rabiosa en esta ciudad de corderos. Anduve sosteniendo mi equipaje hasta que un día lo eché todo por la borda. Y al cabo de tanto dolor de tanto tiempo llegaste vos golpeaste mi puerta y te abrí.
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III Un animal que se arrastra en cuatro patas. Un animal que huele tu deseo. Un animal que quiere ser atado. Un animal que se devora las patas sin tu amor.
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IV No sé si vas a irte o seré yo la que un día apagará las velas y cerrará la cama más como un ataúd que como una puerta no sé quién de los dos tendrá el coraje de dejar de lado tanto amor o acaso por esta sola vez
nadie se vaya y dejemos crecer esta locura.
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V Viven los adultos sus adultos amores como ratas creo quién quiere la medida si el exceso está a la mano así que por favor no te vayas todavía y agotemos esto cuanto antes.
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VI Para Juan
Soy impaciente y tu paciencia es un muro donde mi mar va y viene sin que yo pueda ver que sucede con las piedras de los cimientos. Soy impaciente y como vos decís no he tenido una vida fácil no ha sido fácil perseguir mis sueños que siempre se han parecido más a los fantasmas que a las hadas.
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Soy impaciente y sin embargo vos pein谩s con tu paciencia mi obsesi贸n de verte tenerte tocarte poseerte El fin mismo de mi sangre se estrella contra tu piedra y su espuma es roja roja como las amapolas que nunca he visto.
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VII Y después de la espera pasado el vendaval está la certeza que llega y se instala como una lluvia leve que al final me empapa. Está la certeza que me trae el tiempo cuando lo dejo hacer su trabajo. Y sin prisas y sin pausas todo llega. Llega pasa y a veces se queda. Vos ojalá te quedes 12
VIII Tengo tanto miedo de perderte que ya no s茅 c贸mo maniatarlo. Tal vez la soluci贸n sea arrastrar el miedo al sol degollarlo a cielo abierto y comer de su carne hasta convencerme de que ese animal s贸lo sirve para eso.
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IX “ Te deleitabas en el rojo yo lo encontraba duro – como los bordes crujientes de gasa de una herida reseca... – “ Ted Hughes.
¿ De qué color me ves ? Yo he vestido el negro como resolución única y posibilidad primera negro sobre negro las alas son blancas y yo he vestido a mi mujer de negro enlutada sin hombre enlutada antes de ti
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que me vuelves celeste marfil hasta dejarme desnuda y ante mĂ sin saber nada.
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X Huella de patas de pájaro gota de agua en el ángulo de un vidrio pestaña sobre mejilla diente contra diente imágenes de mí
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XI El poema invertebrado como un Ăcono de saliva de semen de trapos viejos.
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XII Dos ovarios un cerebro cóctel incomprensible para más de un hombre que anda por ahí.
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