e d n ó i c u l o Res o v e u N o ñ A
POR: EVANGELINA SANCHIZ EDITADO POR : LORENA C. BROWN
El año 2020 terminó y dio paso a otro comienzo, que llegóacompañado de nuevas resoluciones. El calendario 2021,con sus 12 meses en blanco, nos invita a visionar un mundo de posibilidades para escribir nuestra historia y nos motiva a planificar los cambios venideros. Para muchos, el año que ya se fue es uno que preferirían olvidar por todo lo que la pandemia produjo, pero no podremos gestionar un buen año por venir sin recordar con agradecimiento todo lo que el 2020 nos ha enseñado. El año de la pandemia fue un maestro universal que desplegó la igualdad para todos y nos obligó a parar y mirar hacia dentro. De una u otra forma, todos tuvimos tiempo y espacio para reflexionar y reevaluar nuestras vidas. Tuvimos que aprender a vivir de nuevas maneras y nos vimos obligados a entender las prioridades globales, y eso nos llevó a reconsiderar nuestras propias prioridades,ayudándonos a dejar ir lo trivial y enfocarnos en aspectos más relevantes de la vida.
Evangelina Sanchiz Nos obligó a reinventarnos y a descubrir en nosotros capacidades que no creíamos tener, pero que se hicieron presentes al tener que ajustarnos a los cambios de una nueva realidad. Aprendimos que podemos vivir con menos cosas y que salir a reuniones es bonito, pero no influye en nuestra capacidad de ser felices, amarnos y mantenernos unidos a pesar de la distancia. Aprendimos a tener empatía y paciencia con nosotros mismos y con los demás. Nos enseñó que la palabra “no” es buena, pues nos ha tocado decir “no quiero visitas porque no quiero exponer a mi ser querido”, “no quiero actividades extra porque ahora valoro mi tiempo”, “no quiero seguir en este trabajo o en esta relación porque no me hace feliz y entiendo que solo viviré una vez”. El 2020 nos enseñó a valorar la vida y la salud y nos regaló ojos nuevos para ver nuestra existencia como lo que es: un verdadero milagro. 22 |EVANGELINA SANCHIZ I GPL MAGAZINE