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PUBLISHED BY ACCIÓN LATINA
Vol. 51 No. 23
November 18-December 1, 2021
SAN QUENTIN’S WALL CITY MAGAZINE GIVES VOICE AND OPPORTUNITY TO PRISONERS LA REVISTA WALL CITY DE SAN QUINTÍN DA VOZ Y OPORTUNIDADES A LOS RECLUSOS
Periodismo
y
Prisión
Cover illustration: Eva Moschitto Eva Moschitto
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El Tecolote
t the age of 46, Eddie Arredondo, a prisoner at San Quentin State Prison, thought second chances were for the young. “I’ve been incarcerated since I was 16—juvenile hall, county jail, prison,” said Arredondo. Yet the team at Wall City Magazine—the Spanish-language quarterly publication of San Quentin News—“[saw] something I didn’t see in myself,” Arredondo remembered. “They always used to tell me I had potential, even at my age.” One such mentor was Juan Espinosa, who enrolled in San Quentin’s Spanish Journalism Guild as a prisoner and helped spearhead Wall City in 2018. “My journalism experience was basically zero,” said Espinosa. But, “with the help of the other people there, I began writing.” Before long, Espinosa was reporting, layout designing, and even recruiting for Wall City. “I tried to bring people to the paper, so they could see how important we were as Spanish speakers,” said Espinosa. He hoped to “help those who had no idea, like me … how a paper worked or what people did there.” That’s how Espinosa met Arredondo, See PRISON, page 8
Eva Moschitto
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sus 46 años, Eddie Arredondo, recluso de la prisión estatal de San Quintín, pensaba que las segundas oportunidades eran para los jóvenes: “He estado encarcelado desde que tenía 16 años, en el reformatorio, en la cárcel del condado y en la prisión”. Sin embargo, el equipo de la revista Wall City —la publicación trimestral en español de San Quentin News— “[vio] algo que yo no veía en mí”, recuerda. “Siempre me decían que tenía potencial, incluso a mi edad”. Uno de sus mentores fue Juan Espinosa, quien se inscribió en el Gremio de periodismo en español de San Quintín y ayudó a fundar Wall City en 2018. “Mi experiencia periodística era básicamente nula”, dijo Espinosa. Pero, “con la ayuda de las otras personas allí, comencé a escribir”. En poco tiempo, Espinosa estaba informando, maquetando e incluso reclutando para la revista: “Traté de traer gente al periódico, de ver lo importante que éramos nosotros cómo hispanos” (…) “ayuda a las personas que no tenían ni idea, cómo yo… de qué se trataba el periódico, de qué era lo que se hacía [allí].” Así fue como Espinosa conoció a Arredondo, y ambos compaginaron de inmediato. “A Espinosa le gustó el hecho de que siempre buscaba oportunidades para ser-
Juan Espinosa, fue alumno del Gremio de periodismo en español en San Quintín y ayudó a integrar la revista Wall City en 2018, fue liberado el 3 de diciembre de 2020 luego de permanecer 28 años en prisión y fue deportado a México el mismo día. Juan Espinosa, who enrolled in San Quentin’s Spanish Journalism Guild as a prisoner and helped spearhead Wall City in 2018, was released after 28 years on Dec. 3, 2020, and was deported to Mexico the same day. Courtesy: Juan Espinosa vir. Así que me contrató en el acto”, dijo Arredondo. “Cuando entré en la redacción, fue como ‘esto es un periódico de verdad... [fue] lo más cerca que he estado de la libertad, y de tener una oportunidad real de acceder a tanta gente [de carrera], y a un trabajo de verdad”. Arredondo trabajó junto a Espinosa y Lourdes Cárdenas, que impar-
tía la clase de periodismo en español de San Quintín. Cárdenas fue reportera durante 25 años antes de convertirse en profesora de periodismo bilingüe en la SF State, donde el profesor de Berkeley, William Drummond, la conectó con Wall City en 2018. Cárdenas llegó a San Quintín con la intención de enseñar “redacción periodístiVea WALL CITY, página 8