Infancia sin fin
Para Pablo, Alejandra y Raffaella Fontanot Para Naitzá y Tilemy
Dirección editorial: Ana Laura Delgado Editor: Omar de la Luz Diseño: Ana Laura Delgado y Elba Yadira Loyola Cuidado de la edición: Sonia Zenteno y Rosario Ponce Primera edición, 2006 Primera reimpresión, enero de 2010 © 2006. Rodolfo Fonseca, por la selección de los textos © 2006. Álvaro Santiago, por las ilustraciones D.R. © 2006. Ediciones El Naranjo, S. A. de C. V. Cerrada Nicolás Bravo núm. 21-1, Col. San Jerónimo Lídice, 10200, México, D. F. Tel./fax (55) 5652 1974 elnaranjo@edicioneselnaranjo.com.mx www.edicioneselnaranjo.com.mx ISBN: 978-968-5389-30-3 Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta obra, por cualquier medio, sin el permiso por escrito del titular de los derechos. Impreso en México • Printed in Mexico
Francisco Cervantes Prólogo
Rodolfo Fonseca Selección de textos
Álvaro Santiago Ilustración
Pessoa: La infancia, la poesía y la libertad* La existencia del mundo y la infancia El mundo puede existir porque todavía hay niños, o porque hay infancia. El mundo es un infante. El día que el mundo deje de ser un infante, desaparecerá. Yo diría que la infancia es la sangre de la existencia y creo que una vida en la que no hay infancia no tiene sentido, ni es buena para nadie. La infancia es la esencia del mundo y de la naturaleza. La libertad del niño y la poesía Cuando dices poético y dices infancia, dices lo mismo. Lo que significa poesía en la infancia es “lo que está por hacerse y se puede hacer todavía”; cuando cancelas esa posibilidad es cuando la gente empieza a ser adulta. Los niños eligen la poesía La buena poesía, si la leíste bien de niño, se te queda, sin que hayas hecho un esfuerzo. Para que los niños se acercaran más a leer poesía, yo no los *N. del E.: Entrevista realizada por Rodolfo Fonseca a Francisco Cervantes, editada por Carlos Sánchez Gutiérrez.
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presionaría. Dejaría que se acercaran a cualquier tipo de libro, y es seguro que si los pones a elegir entre matemáticas, química, biología y poesía, eligen la poesía, y no porque sea más sencillo; creo que es mucho más complicado leer poesía. Pessoa y la infancia Pessoa es toda su infancia, todo el tiempo habla de su infancia, no porque él tuviera la idea de que hay que referirse a la infancia, pero los grandes poemas de Pessoa siempre tienen mucho que ver con la infancia, si no es que toda su obra. Yo no creo que Pessoa escribiera pensando en su infancia. Pessoa siguió siendo un niño hasta que murió, no necesitaba recordar que era niño: vivía, nada más. Era un hombre que vivía muy naturalmente, es decir, vivía como niño.
f Francisco Cervantes nació en Querétaro, en 1938. Fue poeta, escritor de telenovelas y trabajó como publicista durante treinta años. Fue el primer traductor de la Oda marítima, de Fernando Pessoa (1888-1935). 6
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La infancia de Pessoa
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Cuando me muera, hijo mío, sea yo el niño, el más pequeño. Cógeme en brazos y llévame adentro de tu casa.
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Cuando el luar da en la hierba, no sé qué cosas me recuerda… Me recuerda la voz de la criada vieja contándome cuentos de hadas y de cómo la Virgen vestida de mendigo andaba de noche por los caminos socorriendo a los niños maltratados…
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Si yo muriera joven, oĂd esto: Nunca fui sino un niĂąo que jugaba.
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Me acuerdo de mi infancia, aquel día en que yo jugaba junto al muro del patio, tirando una pelota, que tenía a un lado un perro verde deslizándose y, al otro lado, un caballo azul corriendo con un jockey amarillo… La música sigue, y he ahí mi infancia, de repente, entre el maestro y yo, el muro blanco, va y viene la pelota, ahora un perro verde, ahora un caballo azul con un jockey amarillo…
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Todo el teatro es mi patio, mi infancia está en todos los lugares, y la pelota viene tocando música, una música triste y vaga que pasea en mi patio vestida de perro verde volviéndose jockey amarillo… (Tan rápido gira la pelota entre los músicos y yo…). Arrojo la pelota contra mi infancia y ella atraviesa todo el teatro que está a mis pies jugando con un jockey amarillo y un perro verde y un caballo azul que aparece por arriba del muro de mi patio… Y la música arroja pelotas a mi infancia… 13
Para jóvenes lectores
En esta antología encontrarás fragmentos poéticos en los que Fernando Pessoa define, recuerda y evoca las sensaciones y vivencias de su infancia. Los poemas de Pessoa están plagados de versos en los cuales convoca o se refiere a su niñez, todo el tiempo se remonta a ella. Él era un hombre que vivía jugando, es decir, como un niño. Rodolfo Fonseca es editor creativo desde 1987. Ha realizado numerosas antologías de poetas como Sor Juana Inés de la Cruz, Ramón López Velarde, Efraín Huerta, Homero Aridjis y José Juan Tablada. Álvaro Santiago miró el mundo desde niño de una manera especial; las formas y los colores de su ciudad, Oaxaca, lo invitaban a dibujar su asombro. Muy pronto supo que lo que más deseaba era pintar, esculpir, grabar y construir objetos que hablaran de sus emociones, deseos y pesares. Ahora que es mayor, sus obras se han exhibido en muchas galerías y museos de México y el mundo. Y él sigue haciendo lo que más le gusta.
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