En tinieblas y bajo tierra
En un pequeño libro publicado al principio del Adviento de 2005, Corrupción y pecado, el cardenal de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio sj, escribió el retrato hablado de un corrupto: “tiene cara de yo no fui, ‘cara de estampita’, como decía mi abuela”. Habla de las características del corrupto: “Ante cualquier crítica se pone mal, descalifica a la persona o la institución que la hace, procura descabezar toda autoridad moral que pueda cuestionarlo (…) desvaloriza a los demás y arremete con el insulto a quienes piensan distinto”.
Pero hay más: los corruptos “le tienen miedo a la luz porque su alma ha adquirido características de lombriz: en tinieblas y bajo tierra”. En el Evangelio le ponen trampas a Jesús; en la vida pública de nuestros días, le ponen trampas a la verdad y cuentan “verdades alternativas” que solo ellos conocen o creen conocer. Son personas que no perciben la luz.
Como el personaje aquel del chiste cuando va en sentido contrario frente a una multitud de automóviles, su primera reacción es pensar que todos los demás van en sentido contrario. Un complot en su contra.
Contra “la filosofía porteña” (de Buenos Aires) de que “el que no afana es un gil” (o sea, el que no roba es un idiota), el cardenal Bergoglio invitaba a los argentinos, nos invita a cada uno, a gritar con fuerza “¡Pecadores sí, corruptos no!” Para, luego, “abismarnos en la misericordia del Padre que nos ama y en todo momento nos espera”. Qué lindo, diría el actual Papa Francisco, entrar así en el Adviento.
Ya está en México lamisioneradesanJosé cine
La misionera de San José , largometraje biográfico realizado por Goya Pro ducciones y Stellarum Films, cuenta la poco di fundida historia de Ana Josefa Pérez Gonzáles, más conocida como Petra de San José. La interpretación de los personajes retrata la vida y entorno de esta religiosa española que nace el 6 de diciembre de 1845 en el Valle de Abdalajís (Málaga).
El film, que ya se puede disfrutar en las salas de México a través de Cinemex, es dirigido por Pablo Moreno, producido por Andrés Garrigó y protagonizado por Marian Arahuetes y Rafa Jiménez.
Los saLmos, aLma de mi oración
Por Prisciliano Hernández cHávez, corcUna escuela segura
Los salmos adoptan un lenguaje poético que puede traducirse en cantos acompañados de música; constituyen la cima de la experiencia religiosa de Israel, joya preciosa de la literatura universal y, por supuesto, alma de la oración de la Iglesia católica.
Necesitamos acercarnos a la sensibilidad poético-religio sa donde se dan formas semíti cas de paralelismos de carácter sinonímico, antitético y sinté tico; se dan juegos de palabras y variedad de imágenes. Se da propiamente el ritmo de pen samiento donde se repite una, dos y hasta tres veces.
Pueden dividirse en (a) himnos de alabanza a Dios Creador y Señor de la Alianza; salmos mesiánicos y cánticos de Sión que exaltan a Jerusalén y al Templo; (b) salmos de sú plica, lamentaciones, confian za, acción de gracias; (c) sal mos didácticos, para enseñar un modo de comportamiento con un toque histórico, litúr gico o sapiencial.
Hay que tomar en cuen ta el contexto histórico del Antiguo Testamento, pero su culminación es el Nuevo Tes tamento. Cristo Jesús usó los salmos y los vivió y, en los tiempos de la Iglesia, fiel a Jesús, continúa orando con ellos. Son un manantial para la vida de oración de todo cristia no. De cierta manera, consti tuyen la síntesis oracional de toda la Biblia.
Los salmos hablan a Dios, de sus atributos e intervencio nes; de su presencia o su au sencia. En ellos se dialoga de “tú a tú” con gran libertad de espíritu. Notamos cómo Israel va madurando progresivamen te su relación con Dios. El cristiano tiene que ir más allá de orar con los salmos como un israelita; debe ir hacia la plenitud de la Revelación en Cristo, porque como nos in dica la Carta a los Hebreos 1, 1-2: “Muchas veces y de mu chas maneras Dios habló en la antigüedad a nuestros padres por medio de los profetas, y ahora, en este tiempo final, nos habló por su Hijo, a quien constituyó heredero de todas las cosas, por quien también hizo todo cuanto existe”.
San Agustín en sus co mentarios a los Salmos, dice que Cristo ora por nosotros (co mo nuestro sacerdote); ora en nosotros (como nuestro jefe); es objeto de nuestras oraciones (por que es nuestro Dios). Al escu char un salmo o leer un pasaje del Antiguo Testamento, debe mos “ver a Cristo y entender a Cristo”. Ante ciertas expresio nes violentas que pueden es candalizar a una mente sensi ble, ha de tomarse en cuenta el proceso histórico hacia la ple nitud de la madurez en Cristo.
En suma, es acertado considerar a los salmos como escuela segura de verdadera oración. No sólo interviene nuestra disposición humana, sino el Espíritu Santo quien nos conduce a la verdad completa y a la contemplación oracional.
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Conocerse a sí mismo para no perder la libertad
Redacción
Conocerse a sí mismo no es un trabajo sencillo pero, aunque cueste, el hecho de detenernos y profundizar en lo que hacemos, sentimos y pensamos nos ayuda a caer en la cuenta de todo aquello que nos condiciona y que limita nuestra libertad para dar la vida por Cristo y ser así verdaderamente felices.
CONOCERSE A SÍ MISMO
No es fácil conocerse a sí mismo, comienza diciendo Francisco, “el discernimiento de hecho involucra a nuestras facultades humanas: la memoria, el intelecto, la voluntad, los afectos. A menudo no sabemos discernir porque no nos conocemos lo suficiente, y así no sabemos qué queremos realmente. Habéis escuchado muchas veces: ‘Pero esa persona, ¿por qué no arregla su vida? Nunca ha sabido lo que quiere…’. Sin llegar a ese extremo, pero a nosotros también nos sucede que no sabemos bien qué queremos, no nos conocemos bien”.
En la base de dudas espirituales y crisis vocacionales, continúa, “suele haber un diálogo insuficiente entre la vida religiosa y nuestra dimensión humana, cognitiva y afectiva. Un autor de espiritualidad señaló que muchas dificultades en materia de discernimiento remiten a problemas de otro tipo, que deben ser reconocidos y explorados”.
“Conocerse a uno mismo no es difícil, pero es fatigoso: implica un paciente trabajo de excavación interior. Requiere la capacidad de detenerse, de ‘apagar el piloto automático’, para adquirir conciencia sobre nuestra forma de hacer, sobre los sentimientos que nos habitan, sobre los pensamientos recurrentes que nos condicionan, y a menudo sin darnos cuenta”.
CONOCER LAS “CONTRASEÑAS”
Viviendo en la era de la informática, compara Francisco, “sabemos lo importante que es conocer las ‘contraseñas’ para poder entrar en los programas donde se encuentran las informaciones más personales y valiosas. Pero también la vida espiritual tiene sus ‘contraseñas’: hay palabras que tocan el corazón porque remiten a aquello por lo que somos más sensibles. El tentador, es decir el diablo, conoce bien estas palabras-clave, y es importante que
las conozcamos también nosotros, para no encontrarnos ahí donde no quisiéramos”.
Por esto, sugiere, es importante conocerse, porque “muchas veces lo que se dice en un programa en televisión, en alguna publicidad que se hace, nos toca el corazón y nos hace ir a esa parte sin libertad. Estad atentos a eso: ¿soy libre o me dejo llevar por los sentimientos del momento, o por las provocaciones del momento?
EXAMEN DE CONCIENCIA
Una ayuda para esto es el examen de conciencia, “pero el examen de conciencia general de la jornada: ¿qué ha sucedido en mi corazón en este día? Hacer el examen de conciencia, es decir, la buena costumbre de releer con calma lo que sucede en nuestra jornada, aprendiendo a notar en las valoraciones y en las decisiones aquello a lo que damos más importancia, qué buscamos y por qué, y qué hemos encontrado al final”.
En la cuarta entrega de su catequesis sobre el discernimiento, el Papa Francisco resalta la importancia de conocernos a nosotros mismosFoto: Andrea Piacquadio / Pexels.com
“El problema es que los buenos no hacemos nada, no participamos”
Por Rubicela MuñizUriel Esqueda es un es tudiante de Derecho de 22 años de edad, que busca todos los escenarios posibles para alzar la voz en defensa de la vida, la familia, la democracia y la libertad religiosa. Conocedor de las leyes y su impacto en la sociedad, a través de su cuenta de Twitter con once mil seguidores, denuncia y protesta contra aque llas iniciativas que buscan coartar derechos básicos y universales.
Su acción más reciente fue ante el amparo de revisión 216/2022 que pretende prohibir la colocación de nacimientos na videños en espacios públicos en el municipio de Chocholá, Yuca tán, luego de que un ciudadano manifestó haberse sentido discri minado por ello.
El asunto será votado en la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), pero hasta el cierre de la edición nada estaba definido. Uriel, quien además realiza su apostolado en la Pastoral de Vida en la arquidió cesis de León, Guanajuato, habla de lo preocupante que resulta es to para la libertad religiosa, pero más preocupante aún, resulta la tibieza de los católicos para de fender su fe.
Uriel, hoy tenemos sobre la mesa un tema que preocupa y que nos debe de ocupar como católicos, porque abre la puerta para afectar otros aspectos de nuestra fe, ¿no es así?
que se les permite, pero es una realidad que a través de sus úl timas sentencias ha asumido un papel de activismo judicial y eso es muy preocupante.
El dato:
» La primera sala de la Corte tuvo su sesión el 9 de noviembre pasado, pero el asunto del amparo de revisión 216/2022 se pospuso hasta el miércoles 16 de noviembre.
* El término Amicus Curiae se refiere a un informe técnico de personas, grupos o instituciones interesadas en una discusión jurídica presentan en este caso ante la Corte sin ser parte del litigio es decir, como “amigos de la Corte” (como Amicus Curiae)
¿La palabra discriminación se ha desvirtuado?
▶ R
El proyecto de amparo en revisión 216/2022 es un atenta do gravísimo contra la libertad religiosa, aunque pareciera que únicamente le va a afectar al mu nicipio del Estado de Yucatán. La realidad es que si la mayoría de los que integran la Primera Sala de la Corte vota a favor del pro yecto, se podría generar un ante cedente en materia judicial que se pueda ser utilizado en cualquier otro municipio. La Corte no es tá facultada para ir más allá de lo
¿Es un criterio muy ambiguo? ▶ R Sí, muy ambiguo porque lo dejan abierto a cualquier objeto religioso en espacios públicos. Cada día van avanzando y van mi diendo cómo está respondiendo la sociedad mexicana. Por eso es im portante presionarlos. Inclusive, Arturo Zaldívar, el presidente de la Corte, decía en Twitter: “A mí no me molesten, yo no integro la Pri mera Sala para el tema de los Na cimientos”. Pero obviamente sabe que existe la presión social, que estamos ahí.
▶ R Sin duda alguna. Yo creo que uno de los más grande conflictos con los cuales nos encontraremos como sociedad mexicana, es el te ma del libre desarrollo de la per sonalidad, que es un criterio que tiene la Corte. Esto se explica así: lo que hago es correcto siempre y cuando no afecte al otro, pero lo que haga el otro sí me puede afec tar a mí…, por eso puedo decir que eso afecta mi libre desarrollo. Son términos muy ambiguos que la misma Corte abrió y que no se da cuenta de los extremos en los que podemos caer.
¿Tiene esto que ver con “la igualdad sustantiva”?
▶ R La otra vez me decían: “Bueno, están impulsando el tema de igualdad sustantiva”, que es un tema donde quieren eliminar el carácter de hombre mujer, o sea, que únicamente seamos personas. Pero, a ver, ¿y la lucha de años que han hecho, inclusive los grupos feministas por impulsar a las mujeres a que tengan espacios? Quedaría sin uso. Es un discurso doble el que utiliza la Corte y el que utilizan los legisladores.
¿Y es grave?
▶ R Es gravísimo porque yo puedo decir que “me siento agraviado”. Luego, voy y pongo mi denuncia para que me reparen el daño moral que sufrí. Parece absurdo, pero esto es lo que sucedió en Yucatán. Pero eso también nos habla de que los grupos católicos no hemos estado preparados en relación a ello. Hemos dicho que esos temas judiciales o legislativos son aparte y no,no lo son.
A muchos la Suprema Corte de Justicia de la Nación les parece una fortaleza inexpugnable…
▶ R La otra vez me preguntaban: “¿Con la Corte qué se puede hacer?” Pues, promover, por ejemplo un Amicus Curiae.* Pero la realidad es que casi nadie conoce lo que es y que se pueden poner ese tipo de recomendaciones. La Suprema Corte lo tiene que recibir.
¿Como sociedad civil?
▶ R Justamente es la preocupación. Debemos de prepararnos en relación a lo que están haciendo y estudiar las sentencias y criterios que están estableciendo. Es una realidad que debemos buscar la manera de participar ya sea en la Corte, en los congresos, o en donde nos toque hacerlo.
Diferentes organizaciones, de las cuales eres parte, presentaron en la Suprema Corte más de 40 mil firmas en contra de este proyecto de amparo, ¿cómo se recolectó esta participación?
▶ R Un día antes de que iniciara la votación se presentaron ante la Suprema Corte más de 40 mil firmas que fueron recolectadas a través de la plataforma de activate.org.mx. La agrupación “Hazte sentir” subió a la plataforma Actívate, de la cual soy el encargado, una campaña con el tema de los nacimientos y ahí se generó la participación ciudadana.
¿Y después?
▶ R Después le dimos sebuimiento y puaimoa un Nacimiento afuera de la Suprema Corte en CDMX. Un mensaje claro, un símbolo en pro del respeto a la libertad religiosa. También hicimos entrega de un pliego petitorio en relación a los argumentos que debería de atender la Corte. Hay que recordar que el artículo 24 constitucional establece la libertad religiosa, y los tratados internacionales de los que México forma parte y que debería la Corte acatar. La recibieron y esperemos que todo esto haga presión a los ministros en relación a su votación.
En el supuesto caso de que el amparo de revisión sea aprobado, ¿qué nos toca a hacer a nosotros como católicos?
▶ R Creo que es fundamental, sin importar la votación o el resultado de la votación, participar. El mayor problema es que los buenos no hacen nada y, aunque los malos son poquitos, la realidad es que la mayoría se queda silenciada. Vivimos ante una mayoría silenciada, que permite y que no participa en temas sociales y políticos porque lo ve alejado. Debemos de estar ahí, participando en donde se toman las decisiones porque ya vimos que sí nos afecta. Antes a quién se le ocurría preguntar: “¿Me afecta una decisión de la Corte?” ¡Pues sí, sí te afecta! Afecta tu fe y se están metiendo con tu fe porque no hiciste nada durante años y porque no ven presión social y se les hace fácil prohibir algo que es parte de nuestra fe, de nuestra cultura.
¿Hay esperanza?
portante es entender que esto que está sucediendo es porque no hacemos nada; porque no estamos ahí; porque no estamos presionándolos; porque los demás grupos, aunque son cinco, no dejan de estar ahí y nosotros somos muchos, pero no va nadie. Los que hicieron esto son miembros de una ONG chiquitita y nos va afectar a millones. Nos queda participar e involucrarnos, porque si no estamos ahí participando activamente mañana no nos podemos lamentar.
¿Estamos viviendo una nueva persecución a baja escala?
▶ R Sí. La puerta a las limitantes se va a abriendo poco a poco al estar sancionando a las personas que hacen sus demostraciones de fe. Me gusta mucho la analogía de cómo se cocinan ranas: primero las meten en agua fría y les van subiendo poco a poco la temperatura para que cuando menos se lo esperen, ya están siendo cocinadas. Es una realidad, poco a poco están subiendo el fuego. Ahorita estamos en agua tibia, ya no fría, pero va llegar un punto en que va a estar hirviendo y no vamos a poder salir de la olla. No vamos a poder hacer nada.
¿Qué sigue, según tu opinión?
▶
R Aunque la votación no sea favorable, se puede acudir a instancias internacionales porque es una violación al derecho humano, a la libertad religiosa. No está perdida la batalla. Lo im-
▶ R Se van a ir a leyes secundarias, a decretos, a meterles miedo a los ayuntamientos, a los gobiernos estatales. Poco a poquito están metiendo presión y va a llegar un punto en que no vamos a saber cómo llegamos hasta ahí. La clave es que en este tipo de situaciones nos despertemos y levantemos la voz y activemos a las personas que nos rodean; que les podamos informar, porque esto no se transmite en los medios tradicionales.
“Con la vejez se terminan las ganas”, escuché a un sacerdote decir, y sinceramente, me sacó una sonrisa, porque me hizo pensar en todos los esfuerzos que realizamos para conservar los bienes materiales, creyendo que un día, cuando lleguemos a viejos, podremos disfrutarlos como no lo estamos haciendo ahora.
Y es cierto, cuando vamos despertando a la vida todo se antoja: un niño desea dulces y juguetes; un adolescente, fiestas y amistades; un joven, paseos y amores; un adulto, viajes y compañía; un anciano, paz y tranquilidad. Pero, si somos realistas, no siempre obtenemos lo que deseemos en el momento en que lo queremos, quizá la vida nos trate con dureza y a destiempo llegará eso que anhelamos durante muchos años.
Pero, como reza la sabiduría popular, todo llega a su tiempo, o como se suele decir: “los tiempos de Dios son perfectos”, refiriéndose a que hay veces en que sentimos que no encontramos solución a los problemas, pero si nos fiamos de la palabra del Señor, Él se encargará de nuestras necesidades. Esa ha sido mi experiencia durante toda mi vida. Y me gustaría que todos pensaran igual, al menos en ese sentido. Dios está pendiente de ti y de mí y no debemos preocuparnos. Sin embargo, a todos nos ocurre que, de repente, nos llega la duda y hasta la ansiedad por los problemas y tambalea nuestra fe. Es normal, pero deberíamos aprender a confiar más.
DEJAR DE AMBICIONAR
Y dentro de esa confianza, podríamos incluir en las manos de la providencia divina lo que pasará con nosotros y nuestros seres queridos
¿Guardas algo para una ocasión especial?
Dios está pendiente de ti y de mí y no debemos preocuparnos
en el futuro y dejar de ambicionar objetos que no podremos llevarnos a la tumba. Un amigo querido me platicó que en casa de sus papás no querían sacar las copas de cristal fino que habían pertenecido a su mamá, hasta que la persona que colabora en las labores domésticas dijo “¿y cuándo las van a usar? Tu mamá ya se murió y ahí se quedaron sus copas”.
No quiero decir con esto que debemos derrochar lo que con tanto esfuerzo ganamos para mantenernos y sostener nuestros hogares, sobre todo si los padres y madres de familia trabajan para dar lo necesario a sus hijos y ayudar a sus padres, que, dicho sea de paso, es una obligación de todo buen hi-
jo, sino que no debemos irnos a los extremos, porque tanto es dañino caer en el despilfarro como lo es hacerlo en la pichicatería, extraña palabra que poco se usa, pero que se refiere a la tacañería en la que incurren ciertas personas que no solo quieren ahorrar sino que no sueltan nada de sus bienes materiales, ni siquiera para hacer un bien a sus familiares o amigos. Esa actitud también ofende a Dios.
DISFRUTA LO QUE TIENES
Ese mismo sacerdote que mencioné antes, comentaba que estaba bien no quedarse con las ganas de algo que deseamos, como una prenda de vestir, una comida, un coche o un viaje.
Cómpratelo ahora que puedes gozarlo, insistía, porque con la vejez se terminan las ganas. La persona que trabaja honradamente, que cumple con sus obligaciones y se organiza para no cometer injusticias con el dinero que le pertenece a su familia, legítimamente puede darse el gusto de gastar en lo que desee. Por supuesto que no debe olvidar que todo lo que Dios le permite tener es para que lo administre y lo comparta con otros menos afortunados, por eso Él devuelve el ciento por uno y ama al que da con alegría, pero puede también disfrutar de la vida, porque es parte de la belleza y del plan de Dios.
Por eso, está bien que seamos previsores y guardemos algo para cuando ya no podamos trabajar porque, aunque los ancianos poco necesitan en cuanto a comida y vestido, con el desgaste físico llegan las enfermedades, casi siempre un paso inevitable en el ocaso de la vida. Pero, mientras llega ese momento, no seamos avaros y vivamos con alegría.
Y tú, ¿qué guardas en tu casa para una ocasión especial? Ese día es hoy porque estás vivo, no desperdicies tu vida y energías pensando en el futuro que aún no llega, el día con el que debes dar gracias y gloria a tu Creador es este. No lo olvides.
La unidad familiar: tesoro que debemos proteger
Por Jaime SeptiénEl sentido de la película española Tengamos la fiesta en paz es, a la vez, muy sencillo y extremadamente complejo. Lo explica su director, Juan Manuel Cotelo: “Que remos ayudar a que las familias se quieran más”. Una tarea difícil en un mundo que privilegia el indivi dualismo, la libertad sin compro misos y el “amor” sin sacrificio ni dolor alguno.
Escrita y dirigida por Juan Manuel Cotelo y producida por su esposa Simona Puscas, la cinta se estrena el 1 de diciembre en se es trena en México, Paraguay, Puerto Rico, Panamá, Costa Rica, El Salva dor, Guatemala y Nicaragua.
Juan Manuel, G. K. Chesterton decía que quienes atacan a la familia no saben lo que hacen porque no saben lo que deshacen. ¿Tú así lo consideras?
▶ R Juan Manuel Cotelo. Es evi dente que hay ataques tremendos y descarados a la familia, desde la política y los medios de comuni cación. Son ataques disfrazados de bondad, de libertad, incluso de amor. Pero con una carga des tructiva enorme, en la práctica. Sin embargo, prefiero concentrar mis esfuerzos en descubrir cómo pue do amar más y mejor a mi esposa, a mis hijas, a mi madre y hermanos, a mis suegros... sin detenerme de masiado en quejarme de esos ata ques externos a la familia.
¿Cuál piensas tú que es el “peor” ataque que sufre la familia?
▶ R El peor ataque a la familia surge del propio egoísmo. Podríamos teo rizar mucho sobre la familia, sobre el amor... y aunque la teoría fuera correcta, no basta, pues nos jugamos la verdad sobre nuestra propia fami lia en los actos concretos de servicio que practicamos cada uno en nues tro propio hogar. Por eso, en lugar de pensar en quienes atacan a la fami lia, procuro pensar en cómo amar a mi familia, hoy.
¿En tu película, cómo planteas esta que podríamos llamar «escuela de paz» que es la familia?
▶ R Un escritor del siglo IV dijo algo muy sabio: “Si deseas la paz, prepárate para la guerra”.* En cualquier familia, si deseamos al canzar la paz, hemos de plantear
una guerra sin tregua contra el pro pio egoísmo. La unidad familiar no se alcanza por buena suerte, ni se rompe por mala suerte. La uni dad familiar se logra gracias a pe queños actos de servicios diarios: escuchar, compartir comidas y di versión sin presencia de teléfonos o pantallas, luchar por conquistar objetivos preciosos, comunes, per donar y pedir perdón constante mente, servir al más necesitado, rezar juntos, sufrir juntos, celebrar juntos... Todo eso refuerza la uni dad familiar, día a día.
Hay quien argumenta que “ya es suficiente sacrificio” vivir bajo el mismo techo… ▶ R No, desde luego no basta con vivir bajo el mismo techo. Es darse a los demás, sacrificarse por los de más. Y el premio de esos sacrificios diarios, constantes, es la unidad familiar. No hay ruptura familiar,
nunca, si en la familia reina el espí ritu de servicio. Y si aprendemos a servirnos en casa, lo normal es que sigamos sirviendo a los demás al salir a la calle.
¿Qué significa, en la práctica cotidiana, ser activista por la familia y por la vida?
▶ R En primer lugar, ser activista del amor en el propio hogar. Atrevernos a responder a la pregunta individual: ¿qué he hecho hoy, en concreto hoy, por mi familia, por mi esposa, por mi marido, por mis hijos, por mis padres, por mis hermanos? La pre gunta exige una respuesta concreta, manifestada en hechos.
Si la familia es “Iglesia doméstica”, ¿también podemos pedir, “una familia en salida”?
▶ R Claro. Hemos de tener ini ciativas en la comunicación, en la educación, en la sanidad y en la vi da política. Salir de nuestra zona de confort, sin conformarnos con pro teger nuestro propio hogar.
¿Cómo explicas en tu película que solo lo que tiene raíces puede elevarse hasta el cielo?
▶ R El mensaje de la película es muy sencillo, porque no procede de teóricos intelectuales, sino de la visión sencilla y pura de los niños. El amor no se explica, el amor se vive. Todos los niños del mundo desean lo mismo de sus padres: que se amen. Y todas las personas del mundo desean que los amores perduren para siempre. Cada rup tura amorosa es la historia de una herida dolorosa. La buena noticia es que podemos amarnos para toda la vida, no es una utopía. De hecho, todos conocemos a personas que se han amado toda la vida, supe rando las dificultades que atrave saron en el camino.
*Flavio Vegecio Renato (383-450) contenida en su obra De re militari
Cristo Rey, la autoridad pública y la Iglesia
Por Arturo Zárate RuizPor supuesto, Cristo es Rey. Y todo debe estar ordenado y sometido a sus mandatos. Así lo proclama san Pablo: «Dios lo exaltó y le dio el Nombre que está sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús, se doble toda rodilla en el cielo, en la tierra y en los abismos, y toda lengua proclame para gloria de Dios Padre: “Jesucristo es el Señor”».
Que sea así no quiere decir que Dios tenga que encargarse directamente de todos los asuntos humanos. Aun cualquier papá espera que sus hijos, desde pequeños, se
abrochen por sí mismos las agujetas de sus zapatos, y les da la libertad para que escojan, si saben hacerlo, los nudos que se les dé la gana: el de la abuela, del cirujano, el doble corredizo, etc.
De hecho, cuando un seguidor de Jesús le pidió «Maestro, dile a mi hermano que comparta conmigo la herencia», el Señor le respondió «Amigo, ¿quién me ha constituido juez o árbitro entre ustedes», y señaló: «Ustedes saben discernir el aspecto de la tierra y del cielo… ¿Por qué no juzgan ustedes mismos lo que es justo?»
AUTORIDAD
Por lo que conviene reconocer a la autoridad pública. El mismo Catecismo lo dice: «Toda comunidad humana necesita una autoridad para mantenerse y desarrollarse». Y que así lo diga se funda en san Pablo: «Sométanse todos a las autoridades constituidas, pues no hay autoridad que no provenga de Dios, y las que existen, por Dios han sido constituidas. De modo que, quien se opone a la autoridad, se rebela contra el orden divino, y los rebeldes se atraerán sobre sí mismos la condenación».
Que sea así no quiere decir que si Nerón gobierna, a perseguir y quemar cristianos, o si Hitler, judíos. Por ello el Catecismo también indica: «La autoridad se ejerce de manera legítima si se aplica a la prosecución del bien común de la sociedad. Para alcanzarlo debe emplear medios moralmente aceptables». Precisa que el bien común requiere el respeto de cada persona en cuanto tal, el bienestar social y desarrollo del grupo, y la estabilidad y la seguridad de un orden justo. Y dice que el «orden tiene por base la
verdad, se edifica en la justicia, es vivificado por el amor». De cumplirse todo esto, el Catecismo señala, «La diversidad de regímenes políticos es legítima, con tal de que promuevan el bien de la comunidad».
Ahora bien, es cierto que no hay gobierno humano perfecto. Aun los países nórdicos en Europa, con bajísimos índices de corrupción, se permiten sobornos jugosos en el extranjero para avanzar en su dominio económico en países pobres. ¿Quiere decir esto que no se debe reconocer de ningún modo a sus gobiernos?
LA IGLESIA
Frente a la injusticia uno no debe cruzarse de brazos. Puede uno, por los medios pacíficos existentes, corregir lo que anda mal. También puede uno rechazar el participar en la iniquidad mediante la objeción de conciencia. Si a uno lo envían a la cárcel, puede uno dar testimonio de rectitud desde allí. Lo que no se debe hacer es que, por un quítame esta paja, se manden al carajo todas las instituciones. El Catecismo advierte que la rebelión, «el empleo de las armas no entrañe males y desórdenes más graves que el mal que se pretende eliminar». La opción más probable sería ésta: así como uno no es perfecto personalmente y debe educarse y crecer en virtud con el tiempo, del mismo modo deben hacerlo los grupos sociales y las naciones.
A la Iglesia no le correspondería sustituir el gobierno civil. Después de todo, nuestros jerarcas son también humanos, pecadores como cualquiera de nosotros, por lo cual no garantizan por sí mismos un paraíso en este mundo. A la Iglesia le corresponde anunciar el Evangelio y ser ministra de la gracia de Nuestro Señor Jesucristo. Con esa Buena Nueva y con esa gracia es que ya personalmente, ya como grupo, ya como nación podemos crecer en virtud y alcanzar gobiernos civiles óptimos.
Por supuesto, a la Iglesia le corresponde también defender su ámbito y no autorizar que los gobiernos civiles se arroguen funciones suyas, como el nombrar obispos, como ocurre cuando se da el “conflicto de las investiduras”. Pero eso es otro tema para otra ocasión.
¿Cuál es el “arma secreta” de un monasterio en España?
Por José Antonio Varela Vidal*Siguiendo la regla de san Benito, su fundador, las monjas de clausura del Monasterio de la Ascensión de Zamora (España), intercalan entre sus largas horas de oración un trabajo muy valioso: la edición de libros bajo el sello de Monte Casino.
Es así como, el “Ora et labora” benedictino, se cumple de forma adecuada en esta tarea de escribir, seleccionar y editar textos para otros monasterios que lo requieren, así como para presbíteros, religiosos y laicos que hacen sus pedidos on line.
Una de las impulsoras de este “faro” de intelectualidad y espiritualidad que emana desde los muros del monasterio es Concha Galán de Mera, OSB. Una monja de profunda espiritualidad y simpatía evangélica quien además escribe sobre los temas más variados.
¿Cómo surge la iniciativa de fundar una editorial, al interior de un monasterio?
▶ R Madre Concha. La fundación del monasterio de las benedictinas en Zamora tiene lugar en 1961. Tras diversos ensayos, en 1967 aceptan el traspaso de una imprenta local. Los talleres abiertos al público también comienzan a hacer trabajos para la comunidad y para otros monasterios. Por ejemplo los libros de rezo ya desde 1969 llevan el nombre de Ediciones Monte Casino.
¿Y seguiría la edición de nuevas publicaciones, referidas a la vida monástica?
▶ R Sí. Posteriormente, surge la idea de difundir la espiritualidad monástica. Así en 1974 se imprimen y publican Recuerdos y sentencias de los monjes de Oriente y en 1975 se inicia la colección Espiritualidad
Monástica. Fuentes y estudios con la Vida de San Antonio Abad escrita por san Atanasio.
Vemos entonces que a la oración y al trabajo diario (Ora et labora), los monjes y las monjas deben reservar tiempo para la lectura…
▶ R San Benito da mucha importancia a la lectura. Ciertamente se privilegia la Escritura y sus comentarios transformados en teología monástica. Se puede contrastar en nuestra Regla que siempre se dedican tiempos a la lectura en las jornadas diarias. Igualmente dentro de los monasterios hay amantes de la cultura en general que encuentran momentos no reglados para dedicarle tiempo.
Volviendo a ediciones Monte Casino, ¿nos puede describir su oferta editorial?
▶ R Somos una editorial muy pequeñita. Toma su nombre de la famosa abadía italiana fundada por San Benito alrededor del año 529.
En ella destacan dos colecciones de libros, una de espiritualidad monástica y otra de patrología.
Generalmente, estas obras están escritas por monjes y monjas que las ofrecen a la editorial.
No será fácil decidirse por una obra o por otra…
▶ R En comunidad valoramos su posible interés y procedemos o no a la aceptación, maquetación e impresión (en nuestros talleres de imprenta) y posterior difusión a otros monasterios o a alguna distribuidora.
Habrá también un público externo, interesado en este tipo de ediciones ¿no?
▶ R Fuera de los monasterios hay muchas personas interesadas en este tipo de escritos. Por ello tenemos el envío directo a personas o librerías que los solicitan a través del correo electrónico o por teléfono.
¿Cuál es la “joya de la corona” de la editorial?
▶ R Nosotras reservamos la “joya” para unos libros fuera de colección: el Breviario y Leccionarios Bienales de la liturgia monástica, que en muchos lugares fuera de los monasterios se adoptan como base de la Liturgia de las Horas.
¿Qué es aquello que no debería faltar en la formación permanente de la vida monástica?
▶ R Nunca debería faltar la sabiduría que proviene de la lectura meditada de la Sagrada Escritura, la historia y espiritualidad monástica así como un conocimiento amplio de la vida consagrada actual e interreligiosa. Sin perder de vista la actualización cultural que se sigue fuera del monasterio.
¿Siente que las jóvenes interesadas en la vida contemplativa son hoy más exigentes sobre el nivel intelectual y espiritual al interior de la clausura?
▶ R En general, sí. El nivel cultural en España ha crecido en las últimas generaciones; por tanto, el salto adaptativo para una persona con estudios superiores a una comunidad de estudios primarios, por ejemplo, es un salto a un mayor vacío. Aunque cuando en una vocación existe una auténtica llamada de Dios, cualquier dificultad se acaba sorteando.
Se ve que ustedes, están dispuestas a llenar estas expectativas… ¿Qué diría a las jóvenes que sienten inquietud por una vida monástica?
▶ R Venid a conocer esta forma específica de vivir la relación con el Dios de Jesús y la relación entre hermanas, en comunidad, basada en esa relación primera. No tengáis miedo a este viaje interior de vuelta a Dios. Proporciona una felicidad diferente, duradera e intensa.
*Periodista peruano. Miembro del Consejo Editorial Internacional de El Observador.
POR MARIO DE GASPERÍN GASPERÍN OBISPO EMÉRITO DE QUERÉTARO
México, algo para pensar
Ante la presencia subyugante de la naturaleza que lo envolvía y bajo el resplandor del cielo que lo deslumbraba, el hombre, para contar su historia, recurre al auxilio de los “dioses”, tanto a los celestes para su protección como a los terrenos para su sustento. Tarea fatigosa fue esta pues tuvo que enfrentarse a la muerte y al inframundo, que terminaron por engullirlo. Lo confiesa Juan Diego ante la presencia inesperada de la Señora del cielo, buscando justificar su ausencia, le dice con cierta presunción filosófica: “En realidad, para ello nacimos, los que venimos a esperar el trabajo de nuestra muerte”, alusión sin duda al espantoso Mictlán*, ahora tan festejado.
Esfuerzo descomunal se necesitó para conectar ambos mundos y hacer convivir en armonía la tierra con el cielo, el mundo con el inframundo y lograr así el hombre la supervivencia. Aunque, bien visto, eso de girar en torno al sol incandescente debería parecer muy poco apetecible. Así nacieron la astrología, la adivinación, la magia y sobre todo los mitos, verdaderos sistemas de pensamiento en busca de comprensión del enigma del hombre y su mundo. La religiosidad azteca llegó hasta el punto más
alto y, a la vez, el más costoso del pensamiento humano que hace exclamar a su conocedor cualificado, fray Bernardino de Sahagún: “No creo que haya corazón tan duro que oyendo una crueldad tan inhumana… no se enternezca y mueva a lágrimas y horror y espanto” al narrar el sacrificio de niños, acompañados por sus padres. Lo que a los conquistadores faltó de mesu-
ra, sobreabundó en los misioneros de compasión y de amor.
Santa María de Guadalupe dio cabal respuesta al fatalismo mágico de Juan Diego, no sólo asegurándole la salud recobrada de su tío Juan Bernardino, sino volcando en él todo su amor y ternura maternales: “Escucha, ponlo en tu corazón, Hijo mío el menor, que no es nada lo que te espantó, lo que
te afligió; que no se perturbe tu rostro, tu corazón” y continúa aquí con la declaración de amor maternal, suplicando aceptación: “¿No estoy yo aquí que soy tu Madre?”. Ante esta declaración de amor y no ante la espada, se derrumbó el mundo mitológico indígena –las “sollozantes mitologías” del poeta-, y el indígena quedó elevado a la misma dignidad del Hijo de María. Se inauguró así la fraternidad, el amor y la alegría del nuevo pueblo que nacía.
Al tocar con su planta nuestra tierra la “Piadosa Perfecta Virgen Santa María de Guadalupe”, reverdeció el erial, germinó la semilla misteriosa de la Fe en su Hijo y Ella asentó su Casa para asistencia, consuelo y salud de sus nuevos hijos. Así apareció aquí la Iglesia: “El Obispo, en presencia de Juan Bernardino y Juan Diego, trasladó la amada Imagen de su oratorio y la expuso a la veneración pública”. Con su Hijo en sus entrañas, María santísima entró en la cultura azteca sólo acompañada del canto de las aves, de las aclamaciones y súplicas del pueblo devoto y de la guía de sus pastores. La fe cristiana se hizo cultura en nuestra Patria, sin estruendos ni rompimientos, sin menosprecio de nada, purificando y elevando todo. Se hizo carne y sangre en la piel mestiza de estas tierras y quedó impresa no sólo en la tilma de Juan Diego, sino en el corazón y cultura del pueblo. Por eso, los misterios de la vida de Cristo –Nacimiento, Bautismo, Milagros, Pasión-Muerte-Resurrección y Glorificación- son ya parte integrante de la cultura popular y responden a los anhelos más profundos del corazón humano: la Vida en plenitud. Quien los toca, se equivoca.
*El lugar de los muertos en la mitología náhuatl
EL INDOCRISTIANISMO DE AYER Y HOY
Por Tomás de Híjar ornelas, Pbro.Los centros ceremoniales del altiplano central
Labelleza esesemisteriohermoso quenodescifrannila psicologíanilaretórica. Jorge Luis BorgesLas evidencias tangibles de los centros ceremoniales de Mesoamérica agrupados en sus cinco áreas: la del Altiplano central, la Maya, la de Oaxaca, la de la Costa del Golfo y la de las culturas de Occidente–, nos merecen especial atención.
Comenzamos aquí con los del altiplano central en el lapso de nominado por los estudiosos ‘ho rizonte preclásico’, y que va del 2500 a. C., al 200 d. C., sirviéndole de base la producción de cerámica hasta la ruina de Cuicuilco, hoy al sur de la Ciudad de México.
Se trata, por su antigüedad y relevancia, de la perla negra de la arqueología mesoamericana. 600 años antes de Cristo ya se había labrado su primer basamento de
piedra, siendo por ello el pionero y decano entre sus congéneres estu diados hasta el día de hoy. Se trata de una pirámide troncocónica de 4 cuerpos escalonados y unidos por tramos de escaleras y rampas. La erupción del volcán Xitle, 400 años después de la primera de las fechas señaladas arrasó con esta cultura, dejándonos en contraparte eviden cias notabilísimas para conocer el nivel de vida de quienes vivieron allí hace más de dos mil años.
Le sigue el centro ceremonial de Totimehuacán, en Puebla, que data también del siglo VI a.C. A quienes se establecieron allí se les denomina tepalcayos no porque hubieran usa do jamás ese nombre, sino por una zona arqueológica que así se deno mina. Las muestras de su cerámica
les emparenta con las culturas de Monte Albán y de Guatemala y las evidencias de su entorno nos per miten saber que hacia el siglo II a.C. sostenían una organización social teocrática y contaban con un sistema de irrigación avanzado.
El sitio de Cholula se trazó ha ce 1300 años luego que una avan zadillas de olmecas-xicalancas fue tomando el control de la comarca antes dominada por las culturas antiguas del Valle de Puebla, prin cipalmente los tepalcayos. Caída que fue Cholula, estos olmecas-xi calancas sostuvieron su hegemonía hasta el año 1174, en el que fueron aplastados por los toltecas-chichi mecas y sus aliados totomihuacas, que tomaron por capital el cerro del Chiquihuite para nosotros y para
ellos el de Totimehuacan ( lugar de pájaros ), dejándonos un centro ce remonial que consta de platafor mas troncopiramidales escalona das hasta de 150 metros de largo y túneles para conectar con cámaras subterráneas.
Relevante a todo lo dicho es el vínculo que articulará los señoríos de Cholula, Totimehuacan, Tlaxca la y Cuautinchan en una zona fran ca o Cuetlaxcoupan, que mucho después servirá de sitio para fundar la Puebla de los Ángeles.
Los mexicas aplastaron la hege monía de estos aliados en el año de 1486, obligándoles a pagar tributo. Fue así como concluyó una era para dar comienzo a otra, la postrera res pecto a los antiguos ocupantes del macizo continental americano.
Detectores de agravios
Por Alejandro Cortés González-BáezTodo en este mundo —en definitiva— se mueve por amor, por desamor, por placer y por dolor. El amor puede dirigirse a los demás o a uno mismo, a la patria, a unos ideales, a Dios, a la fama, al arte, al saber, al dinero y lo que con él se compra. Puede ser: amor sincero; egoísta; patriotismo; virtud; piedad; vanidad, amor a la sabiduría o por avaricia. De igual forma podemos encontrar motivos como gula; alcoholismo; drogadicción; lujuria; como también: resentimientos; odio y venganza. El dolor puede ser físico, moral, sentimental, simple miedo, pavor, delirio de persecución, soledad; en fin, puede ir del temor más sencillo a las patologías psíquicas más complicadas.
Dentro de este inmenso panorama pasional podemos encontrar a esas personas que suelen vivir con su detector de agravios encendido todo el día. Los detectores de agravios son similares a los detectores de metales instalados en los aeropuertos. Existe, también, otra semejanza entre unos y otros, pues así como los policías pueden ajustar el grado de sensibilidad en los busca-metales hasta hacerlos sonar por una pequeña
aleación en la dentadura de los pasajeros; hay personas quienes al sentirse ofendidas en asuntos de pequeña importancia suelen armar un gran escándalo con el consabido nerviosismo y mal humor de todos los que están a su alrededor.
Es cierto que el carácter puede estar influido por motivos genéticos, educativos, climáticos y hasta por el tipo de alimentación, sin embargo, resulta evidente que hace falta el esfuerzo personal para no dejarse dominar por esa hipersensibilidad que hace sufrir al sentimental y a quienes lo rodean, pues convivir con alguien así, resulta tan incómodo como caminar por un campo minado, con la preocupación constante de hacer o decir algo que pueda ofenderlos.
La experiencia demuestra que
San Josemaría Escrivá anota: “No digas: ‘Es mi genio así..., son cosas de mi carácter’. Son cosas de tu falta de carácter...”. Este punto del libro “Camino” nos da mucha luz en el tema de la educación de los afectos, pues con frecuencia pensamos que una persona con mal humor tiene un carácter fuerte, cuando en realidad, su falta de dominio personal refleja una voluntad tan débil que no le permite controlarse a sí mismo.
Todos, tarde o temprano, somos víctimas de ofensas y son muy pocos quienes por ser sinceramente humildes e inteligentes, no quedan resentidos. Por principio, todos hemos de luchar contra nuestros rencores sabiendo que el umbral de los resentimientos es distinto en cada persona. No se trata de no darnos cuenta de las ofensas que nos hagan o de no “sentir” —hasta aquí nos movemos en el ámbito sentimental— sino de decidir perdonar, pasando al nivel de la voluntad. Claro que esto es muy difícil, pero si lo conseguimos habremos dado un enorme paso en nuestra madurez y aprenderemos a vivir con una paz maravillosa.
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los resentimientos o rencores son una especie de toxina que hace mucho más daño en las personas que los padecen que en los demás.Foto : Gino Crescoli/Pixabay
Escuchar a las partes en conflicto
Por Fernando PascualHay muchos tipos de confl ictos. En algunos salta a la vista quién es el culpable. En otros no parece fácil identifi car culpas y responsabilidades, quién tenga la razón y quién esté en el error.
Constatar lo anterior explica la importancia de escuchar a las partes en conflicto, lo cual no resulta fácil, máxime en un mundo de prisas como el nuestro.
Sabemos, sin embargo, lo que ocurre cuando escuchamos solo a una parte y silenciamos o malinterpretamos sistemáticamente a la otra parte: en ese caso, será casi imposible identificar las razones y las sinrazones de unos, de otros, o de ambas partes.
Entonces, ¿cómo escuchar a las partes que chocan entre sí? Primero, con una actitud de serenidad, que facilite el que unos y otros expongan sus razones y defiendan sus intereses.
Después, con un sentido crítico que permita distinguir entre argumentos basados en las causas del conflicto, y argumentos construidos simplemente para imponerse sobre la otra parte a cualquier precio.
Desde una buena escucha, puede resultar posible emprender algún tipo de mediación entre los contendientes, sea en un conflicto en familia, sea en conflictos más amplios, que afectan a gru-
pos sociales, a partidos políticos, o incluso a Estados.
La historia humana ha presenciado, y presencia en nuestros días, un número elevado de conflictos en los que millones de personas sufren, sea por sentirse atacados por la otra parte, sea porque sus corazones se llenan de odio y, en algunos casos, caminan rápidamente hacia acciones dañinas.
Frente a tanto dolor, el esfuerzo por escuchar a quienes tienen un conflicto, y por avanzar a través del diálogo hacia puntos de encuentro que permitan a cada parte ver atendidas sus exigencias de justicia, puede desactivar tensiones dañinas y promover actitudes de apertura y, en algunos casos, de perdón.
En cierto sentido, resulta una gran ayuda recordar cómo Dios invita a abrirse al otro, a escuchar, a perdonar, a avanzar hacia la reconciliación. Jesús, además, explicó lo importante que resulta ponerse en paz con el otro mientras estamos en camino (cf. Mt 5,25).
Una Iglesia con voz y esperanza
Nueve años con Boko Haram: “Las palabras no hacen justicia a lo que he sufrido”
y lo mataron. Le cortaron la cabeza, luego las manos, las piernas y el estómago. Trataron el cuerpo de mi hermano como un pollo antes de ser cocinado. Totalmente desolada, me preguntaba: ¿Quién será el siguiente?”.
de local.
Maryamu Joseph tiene 16 años, tiene 4 meses que escapó de Boko Haram tras haber permanecido cautiva durante nueve años. Junto con otras 21 personas, fue secuestrada en 2014 a la edad de siete años cuando el grupo terrorista atacó su comunidad de Bazzar, Nigeria y se la llevó a un campamento. Dos de sus hermanos acabaron en el campamento; uno de ellos fue asesinado y el otro permanece en cautiverio.
Maryamu, acude al centro de trauma construido con el apoyo de Ayuda a la Iglesia Necesitada. A través de su lengua materna, el hausa, narra al periodista Patience Ibile, el terror que vivió por esos largos años: “Fueron nueve años en esclavitud! ¡Nueve años de torturas! ¡Nueve años de agonía! He sufrido mucho a manos de esa gente despiadada y sin corazón. Vi derramar la sangre inocente de mis hermanos cristianos, asesinados por gente que no valora la vida. Asesinaban sin remordimientos, como si fuera algo normal. Eso tiempo desperdiciado en el bosque de
Sambisa no pueden olvidarse en un abrir y cerrar de ojos. Las palabras no hacen justicia a lo que he vivido”.
En febrero Boko Haram atacó la comunidad de la joven. Después de una matanza que dejó innumerables muertos, se llevaron a 22 niños entre ellos Maryamu. Ellos caminaron durante 22 días antes de llegar a su destino. Encerraron a los cristianos en jaulas, como si fueran animales, lo primero que hicieron fue convertirlos a la fuerza al islam.
Le cambiaron el nombre por el de Aisha, un nombre musulmán y le advirtieron que no rezaran como cristianos o los matarían.
En noviembre de 2019, Boko Haram capturó a dos de sus hermanos. Maryamu asegura que solo Dios sabe lo que sintió cuando vio a sus hermanos en ese lugar: “Estaba llena de una intensa ira, tenía ganas de coger un machete y descuartizarlos uno a uno. Ante mis ojos, cogieron a uno de mis hermanos
Luego de años de sufrimiento, terror y miedo, esta cristiana secuestrada vio fin a su cautiverio la noche del 8 de julio de 2022, el campamento estaba en calma, fue entonces decidieron escapar ella y sus compañeros. Caminó, corrió y finalmente llegó a Maiduguri el 10 de julio de 2022. Cuando llegó, se desmayó y al despertar estaba en los brazos de un buen samaritano que les dio agua y comida para recuperar fuerzas.
Maryamu afirma que lo que pasó la hizo alejar de Dios y que le cuesta recuperar la confianza en Él: “Yo intento convencerme a mí misma de que Él sigue siendo Dios, pero no lo asimilo. Me sentí abandonada por Dios por lo que pasó. Entonces, ¿por qué no me ayudó cuando más lo necesitaba?”
El Centro de Trauma de la diócesis de Maiduguri, al que hoy acude Maryamu, se construyó con la ayuda económica de Ayuda a la Iglesia Necesitada. Este centro, destinado a ayudar a las personas que han sufrido diversas formas de violencia a manos de Boko Haram, ha ayudado a más de veinte personas a superar casos severos de traumas y estrés postraumático, además ofrece asesoramiento y una formación profesional a las víctimas. Te invitamos a unirte en oración y solidaridad por los cristianos perseguidos en el mundo. Tú también puedes ayudar a sanar las heridas de nuestros hermanos.
ADIVINANZAS
Serpentea y no es culebra; sube colinas, las baja; es ancha y a veces breve; como muy pocos trabaja, sin embargo, no se mueve.
Respuesta: La carretera.
Se recortan, se recortan, se vuelven a recortar, se muerden, a veces rascan y hacen al arpa sonar
Respuesta: Las uñas.
Tengo brazos, no soy gente, tengo patas, no soy potro; por mucho que esté cansado le quito el cansancio a otro.
Respuesta: El sillón.
TRABALENGUAS
Benito Benítez vende bonitas botas bien verdes, botas bien bonitas verdes vende Benito Benítez.
LABERINTO (II TESALONICENSES 3, 1)
Acomoda las 10 palabras marcadas en amarillo
“Si tú eres el MESÍAS , sálvate a ti mismo y a NOSOTROS ”. Pero el otro le reclamaba, INDIGNADO : “¿Ni siquiera temes tú a Dios, estando en el mismo SUPLICIO ? Nosotros justamente recibimos el PAGO de lo que hicimos. Pero éste ningún MAL ha hecho”. Y le decía a Jesús: “ SEÑOR , cuando llegues a tu REINO , acuérdate de mí”. Jesús le respondió: “Yo te aseguro que hoy estarás CONMIGO en el PARAÍSO ”.
CHISPITAS
-Papá, hoy en la escuela nos enseñaron a hacer explosivos. -¡Orale! ¿Y qué les van a enseñar mañana en la escuela? -¿Cuál escuela?
Un niño le pregunta a otro: -¿Te gustan mis lentes? Son nuevos. -Pues la verdad es que no mucho. -Son progresivos. -Ah bueno, entonces poco a poco me irán gustando.
¿Qué hace una vaca pensando? ¡Hace leche concentrada!