El Observador O O M I C NT DÉ MIE EL NDA MA
2 de mayo de 2010 AÑO 15 No. 773 $10.00 Fundado en 1995
DE LA ACTUALIDAD
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Rosarios y flores para ti, Madre ¾ PÓRTICO
MAYO, MARÍA POR JAIME SEPTIÉN / jaimeseptien@gmail.com
El décimo mandamiento Esa peligrosa envidia ........ p. 3 La envidia, hermana de la codicia .............................. p. 3 El sano deseo de lo material .......................................... p. 4
Benedicto XVI
Lo apoyamos y oramos por él Continuamos con la campaña de apoyo y oración por el Papa Benedicto XVI. Súmate a ella reuniendo firmas, mensajes, palabras de aliento; pero, sobre todo, orando por el Papa.
El mal no está en los bienes, sino en que el hombre los considere un tesoro absoluto ................. p. 5
Llámanos o envía nombres, mensajes y firmas de las personas que se unan a la campaña a las oficinas del periódico El Observador (Reforma 48 Centro, Santiago de Querétaro, Qro.) Tel. 224-1454 / 214-5475. Tel. fuera de Querétaro sin costo 01-800-253-3501 (Ext. 104 o 109). También en la página de internet se puede firmar: www.elobservadorenlinea.com
El décimo mandamiento en casa .............................................. p. 6
Todos los nombres, firmas y mensajes se los haremos llegar al Santo Padre.
Entender la pobreza ....... p. 4 Una pobreza cristiana y activa ............................................ p. 5
El Papa Benedicto XVI, en estos momentos de turbulencia y de golpeteo mediático, nos da el ejemplo paciente de quien peregrina y nos preside en la caridad «entre las tribulaciones y los consuelos de Dios». __________ página 2 Las seis acusaciones sin base y refutadas una y otra vez, pero que siguen apareciendo en la prensa. ___________________________________ página 7 Periodismo Católico
«¡Por fin trajo el verde mayo!», comienza diciendo el poema de Miguel Hernández. El verde de los campos, el verde de la esperanza. Mayo es María. Los viejos y entrañables recuerdos de los rosarios y las flores, las visitas de la escuela a la Catedral, el uniforme de gala y el calor. «Las tardes de puro verdes, de puro azul esmeraldas / Plata pura las auroras parecen de puro blancas/ Y las ma- Son miles los ñanas son miel de puro y conversos puro doradas…». En todas las iglesias que lo han mayo es el mes de María. Ojalá también lo fuera en sido gracias a nuestro corazón. María es ella, a la Madre la esperanza, la Madre contemplativa del Rostro de Je- de Dios sús. Son miles los conversos al catolicismo que lo han sido por ella. Por su maternidad tan cercana y por su grandiosa humildad. «La actitud del cristiano debe ser la humildad», escribió Guardini en El Rosario de María. Y humildad quiere decir elevación, «callada certeza de invisible elevación». La humildad de María. El verde de los campos de Miguel Hernández es el verde que rejuvenece en nosotros a partir de lo que le sucedió a María, tan cercana a nosotros, tan inalcanzable: que el Hijo de Dios tome forma en nosotros, que se haga uno en nuestra intimidad. «Creer es reconocer interiormente a Jesucristo», dice el padre Chevignard, O. P., en La Doctrina Espiritual del Evangelio. Para que mayo sea María, Cristo necesita hacerse de nuestra existencia entera, crecer, desarrollarse y confundirse con nuestras decisiones, pensamientos, palabras y obras. El mismo padre Chevignard nos recuerda que «para todo cristiano, aunque fuese hombre enfrascado en los asuntos más duros de la implacable vida, no hay fe si la persona de Jesús no está en el fondo del corazón». Y en la superficie de los labios, y en la profundidad de los sentimientos o en la percepción de los sentidos: «si la Persona de Jesús está ausente, todo se hace muerto, todo se hace complicado». María tuvo a Jesús en su seno y, después, en su mirada. Lo que guardaba no era un secreto: era un misterio. El misterio del verde del mayo del amor. El misterio que guía nuestra vida de cristianos: el misterio de que «todo es Gracia».