Entretiempo - Segunda edición

STAFF Directores Aylen Escamilla y Rodrigo Bússolo Periodistas Camilo Santoni, Mauro Laben y Manuel Maliandi Fotógrafos Julián Calvete y Carolina Perea Diseñadores Nicolás Acha y Juan Ignacio Santillan Ilustraciones Zorro

PRÓLOGO Cuando te recuestes en tu cama y mires el techo. Cuando te sambullas en el sillón, con el control en la mano, a cambiar infinidades de veces los canales y no encuentres nada. Cuando te prepares el primer mate y huntes la primer tostada del día.

Cuando esperes dos horas un vil colectivo que no quiere llegar. Cuando te sientes en ese frío y duro asiento del tren y enchufes a tus oídos los auriculares que te hacen escapar un rato del Mundo. Cuando mires por la ventanilla del subte, las paredes negras, oscuras y sin gracia de su recorrido.

Cuando llegues antes a la cancha, esperando un preliminar que jamás va a empezar. Cuando vayas el vacío bar de la esquina, a mirar el partido, porque no te alcanza para la entrada. Cuando esperes a que llegue tu amigo, sentado en el cantero de siempre, para partir rumbo al estadio.

Cuando estés en la concentración y tu compañero de cuarto se quede dormido. Cuando estés en la pensión, solo entre tantos pares, extrañando. Cuando viajes en el micro al partido de tu vida, o al amistoso menos importante.

Ahí queremos estar. En cada casa, a cada momento, en cada cabeza. Queremos llegar. Les prometemos que en algún instante de la vida, nos vamos a encontrar. Pero no queremos salir nunca de sus mentes. Queremos trascender. Queremos acompañarlos cuando nos necesiten -y cuando no también-.

Cualquiera sea el formato, cualquiera sea el momento: Vamos a llegar.

SUMARIO

6.7

EFEMERIDES

8.11

LA HISTORIA DESDE ADENTRO - AGR

12

FÁBULA TUCUMANA

13

CONOCIENDO EL ASCENSO

14.15

DE LOS LAURELES A LA PARRA

16.21

ENRIQUE HRABINA

22.27

LUIS ISLAS

28.29

RECORDAR PARA VIVIR

30.31

POESIA DE GOALKEEPER

32.33

ARGENTINOS EN LA LIGA MX

34.37

ALL STAR GAMES 2017

1 de marzo de 2006 Lionel Messi marcó su primer gol con la Selección Argentina. Fue en la derrota ante Croacia por 3 a 2.

05 DE MARZO de 1904, se fundó el Club Atlético San Telmo.

15 de marzo de 1981 debutó con la camiseta de River, Mario Alberto Kempes.

06 DE MARZO de 1902 se fundó el Real Madrid Club de Fútbol.

07 DE MARZO de 1947 nació Rubén “Chapa” Suñé. de 1974, en Ituzaingó, nació Facundo Sava.

08 DE MARZO de 1951 la Selección Argentina de fútbol ganó la medalla de oro en la primera edición de los Juegos Panamericanos.

02 DE MARZO de 1983 nació Lisandro López , en Rafael Obligado, provincia de Buenos Aires.

03 DE MARZO de 1945, se fundó el Club Atlético Brown de Adrogué. de 1947, en Montevideo, Uruguay, nació Oscar Washington Tabárez.

09 DE MARZO de 1975, en La Plata, nació Juan Sebastián Verón.

10 de marzo de 2016 falleció el “Mariscal” Roberto Perfumo.

17 DE MARZO de 1944, en La Plata, nació Juan Ramón Verón. de 1981 nació Leandro “Pipi” Romagnoli.

04 DE MARZO de 1928 Independiente inauguró la Doble Visera.

18 DE MARZO de 1931 se fundó el Club Atlético Gimnasia y Esgrima de Jujuy. de 1987 nació Mauro Zárate.

04 de marzo de 1973 debutó en Primera División, con 19 años, René Houseman. En la goleada de Huracán ante Argentinos Juniors por 6 a 1.

19 DE MARZO de 1905 se fundó el Club Atlético Belgrano de Córdoba 11 DE MARZO de 1936 nació Oreste Osmar Corbatta, en Daireaux, provincia de Buenos Aires.

12 DE MARZO de 1933 debutó en San Lorenzo, Petronilho Do Britos. Primer futbolista brasileño que jugó en un equipo argentino.

14 DE MARZO de 1955, en Bahía Blanca nació Ricardo Daniel Bertoni. de 1988 nació Lautaro Acosta, en Glew.

04 DE MARZO de 1974, en Ledesma, Jujuy, nació Ariel Arnaldo Ortega.

16 DE MARZO de 1939 nació Carlos Salvador Bilardo, en La Paternal. de 2014, Lionel Messi se convirtió en el máximo goleador del Barcelona (con 371 goles), al convertir tres tantos en la goleada ante el Osasuna por 7 a 0.

15 DE MARZO de 1913 se fundó el Club Atlético All Boys.

20 DE MARZO de 1935 se fundó el Club Social y Deportivo Defensa y Justicia.

21 DE MARZO de 1978 se disputó la primera final de la Copa Intercontinental, en donde Boca recibió en la Bombonera al Borussia Mönchengladbach. de 1980 en Porto Alegre nació Ronaldo de Assis Moreira, mejor conocido como Ronaldinho.

23 DE MARZO de 1978 nació Walter Samuel, en Laborde, Córdoba.

24 DE MARZO de 1965 se cruzaron por primera vez en

29 de marzo de 1905, en Rosario, se fundó el Club Atlético Tiro Federal Argentino.

24 de marzo de 1991 Diego Maradona jugó su último partido con la camiseta del Napoli en la derrota por 4 a 1 ante la Sampdoria, donde hizo un gol de penal.

29 DE MARZO de 1913 se fundó Aldosivi.

30 DE MARZO de 1905 se fundó la Liga Rosarina de Football, actualmente conocida como Asociación Rosarina de Fútbol. de 1915 en Asunción del Paraguay nació Arsenio Erico, máximo goleador histórico del Independiente.

1903

se

25 DE MARZO fundó Racing Avellaneda.

31 DE MARZO de 1985, Pinino Más disputó su último partido en Primera División en el empate entre Huracán Las Heras de Mendoza (equipo del goleador de River) y San Lorenzo por 3 a 3.

Club

de

27 DE MARZO de 2011 el arquero brasilero Rogerio Ceni anotó su gol número 100. Es el portero más goleador de la historia.

28 DE MARZO de 1979 nació Daniel “Rolfi” Montenegro.

28 de marzo de 2001 Diego Simeone cumplió 100 partidos con la Selección Argentina, fue en la victoria sobre Venezuela por 5 a 0 por las Eliminatorias para el Mundial de Corea-Japón.

18 de marzo de 1973 Eduardo Maglioni, delantero chaqueño de Independiente, hizo tres goles en 1 minuto y 50 segundos en la goleada ante Gimnasia de La Plata por 4 a 0. El primero fue a los 4’, el segundo a los 4’ 35’’ y el tercero a los 5’ 51’’. (7).

El mismo día, seis años después, pero esta vez a favor de Gimnasia, Carlos Seppaquercia convirtió el gol más rápido en la historia del fútbol argentino a los 5 segundos de comenzado el partido.

la historia dos equipos argentinos por la Copa Libertadores. Fue en la Semifinal que disputaron Boca e Independiente. de 1973 en Capitán Bermudez, Santa Fe, nació Marcelo “Chelo” Delgado.

de

La Bombonera fue suspendida y el Xeneize fue descalificado.

20 de marzo de 1979 Quilmes recibió dos goles olímpicos en la derrota por 3 a 2 ante Deportivo Cali por Copa Libertadores, ambos fueron marcados por los argentinos Ángel María Torres y Ernesto Álvarez.

21 de marzo de 2016 Racing venció a Atlético Rafaela por 6 a 3 y se convirtió en el primer equipo en ganar dos partidos consecutivos como visitante por 6 a 3 (el anterior había sido frente a Unión).

CURIOSAS

-

7 de marzo de 1999 Racing debía disputar el primer partido del torneo ante Talleres de Córdoba y, como había quebrado economicamente cuatro días antes, no le permitieron disputar ese encuentro. Los simpatizantes del equipo de Avellaneda, colmaron su estadio a pesar de que no jugaba su equipo, para evitar el remate de la sede. En esa fecha se conmemora el “día del hincha de Racing”.

22 de marzo de 1996 El arquero, José Luis Chilavert, le convirtió un gol a River de tiro libre desde la mitad de la cancha. El partido terminó 3 a 2 a favor de Vélez.

11 de marzo de 1971 A los 8 minutos del Segundo Tiempo del partido de Reserva que disputaban Independiente y Plantense, los jugadores del Calamar debieron retirarse para jugar en el cotejo de Primera, ya que no se logró resolver un conflicto con los jugadores del primer equipo. El encuentro principal terminó con una goleada del Rojo por 11 a 1.

17 de marzo de 1971 En el empate entre Boca y Sporting Cristal por 2 a 2 por la Copa Libertadores, el árbitro Alejandro Otero debió expulsar a 19 de los 22 jugadores. Se armó una batalla campal entre los dos equipos, por una patada en el pecho del peruano Gallado a Suñé.

24 de marzo de 1976 Argentina disputó un amistoso en Chorsov, Polonia mientras sucedía el Golpe de Estado en el país. La Junta Militar sólo autorizó que se transmitiera este partido por televisión.

26 de marzo de 2006 Boca y River se enfrentaban en un nuevo Superclásico. El encuentro terminó 1 a 1, pero lo más recordado de ese partido fue la expulsión de Juan Krupoviesa por una tremenda patada a Daniel Montenegro.

29 de marzo de 1967 La Selección Argentina Sub 20 empató 2 a 2 con Paraguay y, por sorteo, se quedó con el Sudamericano Sub 20, disputado en Asunción.

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LA HISTORIA DESDE ADENTRO. -

AGR-CLARIN EL RELATO DE DANIEL

E

sta era una empresa que perseguía a la gente. Nosotros creemos y, estamos convencidos, de que están queriendo meter gente contratada sin respetar el Convenio Colectivo de Trabajo: Sin respetar paritarias, sin respetar Organización Sindical. Siempre fue una empresa que, por el poder que tiene, ha intentado barrer con la Organización Sindical.

Hace doce años que laburo acá y siempre es lo mismo. Hubo un antecedente cuando a un compañero lo han despedido porque lo vieron comiendo un choripan con un delegado.

Así que imaginate el nivel de persecución que hemos sufrido acá adentro. De a poco nos empezamos a organizar. Creamos una lista, que es la Lista Naranja, una lista de delegados.

Finalmente, esa lista gana y de a poco recuperamos el salario. Logramos que la empresa respete el Convenio Colectivo de Trabajo, que antes no hacía.

Estamba muy acostumbrada a que salía el Jefe de Producción y por poco te metía un chirlo y te mandaba a laburar. Terrible. A partir de la conquista de esta comisión interna combativa. Pero todo esto fue muy de a poco. Al principio, en las primeras asambleas, la gente tuvo miedo de participar. De hecho, las tuvimos que hacer afuera del taller. Finalmente, determinamos un sueldo por encima del convenio. No mucho, pero bueno. Era una conquista. También bonos de fin de año.

Lo que nosotros denunciamos es eso: La empresa quiere barrer con la organización, pagar paritarias a lo que les plazca en las cuotas que ellos quieran, y trabajar con contratos basura. Antes la empresa trabajaba cib una agencia que contrataba a los empleados. Ellos hacían el mismo laburo que nosotros y cobraban la cuarta parte de lo que cobrábamos.

Logramos que eso no se haga más. Que cuando contraten empleados eventuales, los contraten con la misma obra social de nosotros, con el mismo convenio, con el mismo valor hora. Veíamos injusto que los compañeros que hacían lo mismo que nosotros cobren muchísimo menos. Y que después de determinado tiempo de estar contratado, quedes efectivo. Eso era algo que no podían. La empresa te contrataba y estabas años y años y no te efectivizaban, y por ahí venían de un día para el otro y te echaban y reclamale a la agencia.

Ayer nos llegó una carta del A.C.A. Una orden por trabajo por tres millones de pesos. Esto es una prueba más de lo que denunciamos: La empresa sigue operando. Lo que hacíamos acá lo hace con otras treinta gráficas de Buenos Aires. Por ejemplo: La revista “Viva!” la está haciendo en Chile. Y también está operando en una gráfica en Santa Fe. Todo nuestro trabajo está distribuido por un montón de lugares, pero sigue estando. Siguen siendo clientes de AGR. El trabajo está.

Eso es lo que denunciamos. Porque no es que los clientes se fueron o se dejaron de hacer las revistas o los libros. Los laburos se siguen haciendo. Incluso nos ha pasado de ir a comprar al puesto de diarios el laburo que hacíamos nosotros y en algunos casos sigue diciendo que se hace en Artes Gráficas Rioplatenses. Es un poco absurdo, porque si se supone que la empresa está en quiebra o la intención de ellos es cerrarla, ¿por qué siguen pasando estas cosas?.

El domingo 15 de enero, previo al cierre de la empresa, ellos habían argumentado que les estaba yendo mal, que es algo que constantemente se decía. De que yo laburo acá que se dice. Esta es una empresa lider. Creo que es la gráfica más grande del país. Y empezaron a decir que algunos clientes se le habían ido, como el caso de “Running”. Nos llamó la atención de porqué tan de golpe. Y empezamos a hacer un seguimiento, y descubrimos que la empresa estaba tercerizando el trabajo. Empezó a hacer un vaciamiento interno.

Damos con esa revista en un puesto de diarios y vemos que decía AGR. Cuando la empresa argumentaba que el cliente no pertenecía más a esta gráfica. ¡La mandaron a otro lado!

Juntamos una cantidad de ejemplares de casos iguales e hicimos una denuncia en el Ministerio de Trabajo por vaciamiento. Porque preveíamos que iba a pasar algo de esto. No que cerraba, pero sí que iban a despedir. Y cuando vamos al Ministerio a hacer la denuncia y la empresa nos dice: “No, acá no pasa nada. Ustedes están haciendo una película”. En el Ministerio nos dicen que si no hay despidos, no pueden hacer nada. Que si hay despidos, sí. Bla bla bla. Finalmente, el lunes 16 de enero, se produce el cierre de la empresa.

Nosotros habíamos visto maniobras raras el viernes previo al cierre y habíamos montado una guardia acá, porque teníamos miedo que se lleven las máquinas. Cosa que no pasó, pero finalmente ese lunes a la madrugada, aproximadamente a las 5, personal de seguridad pone un cartel en la puerta que decía: “A partir del día de la fecha la empresa cierra y todos sus empleados quedan despedidos”, pusieron un número donde llamar para reclamar las indemnizaciones. En ese momento ya se estaba formando un cordón de infantería acá a la vuelta.

Finalmente, ese día terminamos haciendo una asamblea. Convocamos al gremio y votamos hacer una permanencia adentro del taller. Decidimos entrar. Una asamblea que fue votada por los subdelegados, su propia base, los trabajadores y el gremio gráfico. Hicimos una permanencia y ahí es cuando comienza todo. Al otro día tenemos una audiencia de urgencia en el ministerio. Fuimos y le dijimos: “Nosotros habíamos venido con el miedo que haya despidos y nos dijeron que mientras no despidan no podían hacer nada. Bueno, acá están los despedidos.” El Ministerio nos dijo que no podían hacer nada, que era una decisión política y que a ellos los excedía. Es algo que no pasa por ellos. Ahí claramente se ve lo que todo el mundo sabe: El alineamiento que hay entre Clarín y el gobierno.

Tuvimos audiencias después, pero sentíamos que hablábamos con la Patronal. Los argumentos, los términos... era como poner un cassette de la Patronal en el Ministerio de Trabajo. Así que al día de hoy, más de dos meses después, no hemos tenido ningún tipo de respuesta del Ministerio. Incluso, hemos hecho una acción (una de las tantas) que fue hacer un piquete en Acceso Oeste, Panamericana y Puente Pueyrredón, donde autoridades del Ministerio se habían comprometido a que si levantábamos los cortes, nos iba a atender Jorge Triaca (Ministro de Trabajo). Cosa que nunca pasó. Nos dieron un acta firmado, donde

decía que él nos iba a dar una audiencia para esa semana y nunca recibimos una notificación de nada. Nos mintieron. Nadie se hizo cargo.

En cuanto al Estado, no ha intervenido para nada. La única intervención que tuvo fue mandarnos a la policía. Esto que ven (dos camionetas de infantería) no es nada. El primer día de la permanencia, que hacemos la toma, esas vallas que están ahí, y más, que se pudieron llevar, son de un vallado que armaron para que los compañeros que estén adentro no tengan contacto con la gente que estaba afuera. Se terminó provocando una represión, porque todos nosotros estábamos adentro, y acá afuera teníamos a familiares. Acá hay carpas de familiares. La policía reprimió a nuestros familiares que están afuera. De eso no se hizo cargo nadie.

Al día de hoy, por vías legales, hemos exigido a la Gendarmeria que expliquen porqué habían intervenido de esa forma y nadie se hace cargo. Gendarmeria dice que nunca desplegó ningún operativo acá. Policía Federal, lo mismo. De hecho, tenemos cámaras. Esa camioneta -señala hacia la esquina de Av. Perito Moreno y Del Barco Centenera- pensábamos que era de un canal, pero no. Son de los servicios. Si vos te acercas, golpeás la puerta, sale un policía. También hemos denunciado la situación esta, pero nadie se hace cargo. Para que eso está funcionando ahí, tendría que haber una orden judicial. Un juez tuvo que haber firmado eso. Nadie se hace cargo. Nadie sabe cómo está eso ahí, pero hace 66 días que eso está ahí. Y hay otra más que va y viene. Acá, básicamente, hay una complicidad terrible por parte del Estado. Lamentablemente, quien debe hacer cumplir la ley a un grupo económico como este, exigirle o forzarlo, termina siendo su socio.

Además, está el “cerco mediático”, que es difícil, pero yo creo que de a poco lo estamos quebrando. Hemos protagonizado cortes en la 25 de Mayo, en las puertas de Canal 13 y han cambiado las imágenes. Ellos transmiten con el Autopista de fondo y han puesto pantallas Led en el fondo para que no se vea nuestra movilización. Hubo un acontecimiento que fue muy gracioso: Habíamos cortado toda la 9 de Julio, de punta a punta, salíamos en un paneo que hacían ellos y pusieron: “Choque en Av. Corrientes y 9 de Julio”. Sin ir más lejos, la semana pasada, hicimos una acción en Av. Corrientes y Callao, TN lo levantó y a la nota la sacó, pero con otra foto. Puso una foto de otra movilización, creo que de “Barrios de Pie”, en vez de una de nuestra marcha. Sacó la nota: “Demoras por cortes”, pero con otra foto de otro piquete, que nada que ver...

Después, los grandes medios están alineados. Nadie se quiere tocar. Entre ellos se cuidan.

A pesar de que son rivales, nadie quiere sacar los platos fuera del pie. Es así. Tenemos muchos medios alternativos, muchas radios alternativas, que nos siguen sacando, que les hacemos notas frecuentes. Hay muchos periodistas independientes que nos dan su espacio y nos ayudan a difundir nuestro conflicto. Por otra parte, las redes sociales. Tenemos un Facebook con aproximadamente 17.000 seguidores. Eso también permite que no tenga que pasar todo por la televisión, porque estamos perdidos. Así que, de a poco, vamos quebrando el cerco.

Lanzamos una revista, la “Viva De los Trabajadores”. Que es la versión de los trabajadores. Es muy similar al diseño de la “Viva!” pero el contenido es sobre nuestra lucha. La escribimos nosotros.Esto creemos que está bueno, porque, en un punto, va a ayudar a difundir nuestra pelea. Y también va a aportar al fondo de huelga, porque ya van pasando dos meses de esto, y hay que sostener algo tan prolongado como esto. La “Viva!” que sale en el diario se hace en Chile. La mandaron a hacer allá para que nosotros no la hagamos.

El material este es para desmentir a la empresa, que dicen que “no pueden operar porque ya todo el Mundo arregló y se fue”, que somos “20 gatos locos”, así que acá está la prueba.

Hemos podido hacer una revista, con todas las dificultades que implica no tener luz, la hicimos igual. Juntamos gasoil para los generadores. La hicimos íntegramente nosotros.

Tenemos material para tirar para arriba. Acciones, cortes, nos juntamos con la CGT, con la CTA, con Moyano, con un montón de gremios.

Yo, particularmente, he viajado a Mar del Plata a reunirme con sindicatos. Hemos hecho muchísimas cosas. Tenemos el apoyo de algunos gremios. Es como todo. Tenemos muchas organizaciones políticas que están acá, haciéndonos el aguante con el acampe, porque hay un rumor de un posible desalojo, pero por ahora es solo eso: un rumor. Nos ha llegado de muy buena fuente que la empresa estaba reclutando barras bravas para llevar adelante un desalojo. Ante esa situación, lo que nosotros hacemos es difundirlo. Tratar de que todo el mundo sepa lo que estaba sucediendo. Creemos que en un punto, el vuelo que ha tomado eso, ha hecho retroceder a la empresa con la idea de hacer su propia ocupación a la fuerza.

Nos pareció un acto muy burdo. Nos dio muchísima bronca la situación.

Nosotros recibimos aportes de organizaciones de DD.HH, de sindicatos combativos, de organizaciones políticas. Organizamos festivales; armamos un buffet que va directamente al fondo de huelga. Nos manejamos con una cantidad de compañeros afuera, donde hacemos recorrida por diferentes lugares. Por ejemplo, nos llama un delegado de FATE. Nos dice “Compañeros, estamos al tanto de su lucha. Queremos que vengan a contar su situación y aportar para el fondo de huelga.” Entonces, se manda una delegación de compañeros, ellos cuentan nuestra situación y se les permite pasar con una caja y recaudar guita para el fondo de huelga. Está bueno, porque además nos permite difundir el conflicto y la gente puede hacer un aporte para contribuir a nuestro fondo de lucha.

Es muy difícil pasar tanto tiempo acá. Uno extraña mucho a su familia, a sus hijos. El encierro también. Pero yo creo que la causa es justa, porque, lo que estamos reclamando, es justo. Y eso nos da mucha fuerza. A parte, nosotros venimos de tener una experiencia de una organización sindical o gremial. Ya es muy fuerte la organización. A estos compañeros no los van a quebrar. Es un grupo muy sólido. Y pensamos seguir hasta las últimas consecuencias.

E

l fútbol tiene miles de datos curiosos. Es un mundo completamente diferente al que vivimos nosotros. A millas de distancia de la vida cotidiana, no es para nada monótono. Siempre surgen hechos nunca imaginados ni por el mejor escritor de literatura fantástica. Ni Borges, ni Bioy Casares, ni Cortázar podrían haber escrito semejantes relatos sobrenaturales. Claro está que en todos los países donde se practica este deporte, hay fenómenos extraordinarios, pero nunca similares a los que ocurren en nuestro suelo. Argentina siempre tuvo hechos increíbles, no hace falta enumerarlos a todos para comprender de lo que se está hablando. Hay uno particularmente que tiene nombre propio: Atlético de Tucumán.

Noticias de un avión, ya tuvimos bastantes, la mayoría muy tristes. Es extraño que cuando un avión es noticia, termine con un final feliz como éste. Un equipo que la peleó desde abajo, que ascendió hace menos de dos años y en ese interín, consiguió el 5to lugar en el Torneo de Transición 2016 y así la clasificación a la Copa Libertadores por primera vez en su historia. Pero entrar a la competencia más importante de América, no fue tan fácil. Al parecer, todo lo ocurrido para este club en relación con la Copa fue una “conspiración fantástica”.

Primero, tuvieron que renunciar los equipos mexicanos a la participación de la edición 2017, luego de 19 años siendo parte. Dejando tres cupos a la deriva y sin dueño. Hubo varias idas y vueltas, que este quería por tener más copas, que el otro por el mejor promedio. Hasta que la Conmebol anunció que la nueva plaza sería para el quinto del

Torneo 2016, lugar que se disputaban el Decano con 30 puntos en la Zona 2 e Independiente con 27 en la Zona 1. Se discutió la posibilidad de jugar un partido desempate para definirlo, pero, finalmente, el organismo que regula el fútbol en Sudamérica se decidió por los tucumanos.

Sorteo mediante, se conoció que su rival en la Segunda Fase iba a ser El Nacional de Ecuador. La ida terminó 2 a 2. El detalle más curioso fue que corría el primer minuto de juego cuando se puso 1 a 0 con gol de Zampedri. Con dos goles de visitante y 2800 metros de altura jugándole en contra a los nervios, tuvieron que viajar hacia el segundo encuentro. Martes 7 de febrero a las 21.15, era el horario estipulado para el inicio de la definición. Pero, como desde que empezó todo el sueño, no podía faltar

el detalle sobrenatural: El chárter en el que iban a viajar desde Guayaquil a Quito se demoró tres horas. ¿Puede pasar? Sí. No es algo extraño que un vuelo se atrase.

Lo que lo vuelve extraño es que, sabiendo que tenían que viajar sí o sí a esa hora para llegar con tiempo para ir al estadio tranquilos, reconocer el campo, entre otros rituales que se realizan cuando uno juega de visitante, las autoridades del aeropuerto no permitan la partida del avión porque no tenían la autorización para realizar vuelos de cabotaje. Eran las 21.30 cuando, por fin, pudieron contratar otro vuelo para partir. El encuentro debería haber comenzado hacía 15 minutos. Al principio, la comisión directiva y cuerpo técnico de El Nacional se negaba a aguardarlos. Luego de una charla con Luis Juez (embajador argentino) y los jugadores ecuatorianos, se decidió esperarlos, sea cual sea el tiempo que tarden.

Aterrizaron 40 minutos después de empezado el partido, cuando son 45 los que permite la Conmebol como máximo. Llegaron al estadio a las 22:10 y, para mayor sorpresa de los presentes en el Estadio Atahualpa, ¡no traían los cajones de utilería! Habían quedado varados en el trajín de la travesía que realizaron. Se dijo en un primer momento que iban a pedir las camisetas a los hinchas que habían viajado y se encontraban en la tribuna. Luego, que iban a jugar con la vestimenta suplente del rival.

Pero al encontrarse la Selección Argentina Sub20 disputando el Sudamericano en Ecuador, le fueron cedidas las camisetas, pantalones y botines de los juveniles. Agarraron lo primero que encontraron en el bolso y se lo pusieron, no importaba talle, número, nombre. El único que vistió la camiseta de Atlético de Tucumán fue Luchetti. Vaya uno a saber por qué, un dirigente había llevado su indumentaria en un bolso. Zampedri con la 9 de Lautaro Martínez.

Leandro González con la 10 de Barco. Cristian Menéndez con la 11 de Brian Mansilla.

Nery Leyes con la 5 de Ascacibar. Hecho histórico: Atlético de Tucumán jugó con la camiseta de Argentina en la Copa Libertadores y, además, ganó 1 a 0.

-conociendo el ascenso-

SPORTIVO DESAMPARADOS Por Aylén Escamilla

E

l 24 de febrero de 1407, el padre Jofré caminaba rumbo a la Catedral por una de las calles de Valencia, cuando observó que golpeaban a un hombre con problemas mentales mientras lo burlaban. Se interpuso y lo llevó con él. Este hecho fue un incentivo para dar un sermón en misa sobre el maltrato a los jóvenes inocentes.

También incentivó al comerciantes y artesanos a construir una imagen que materialice lo dicho y así fue como se construyó la estatua de la Virgen de los Inocentes, Mártires y Desamparados.

A mediados del siglo XVIII, los misioneros jesuitas, con el afán de educar a los indígenas en la fe cristiana, arribaron a un pequeño pueblo de San Juan, portando la imagen de esta virgen. Tan arraigados se sintieron los oriundos de esa región que levantaron una basílica que lleva su nombre y nombraron a esa tierra como “Desamparados”.

Un grupo de estudiantes de la Quinta Agronómica se reunía en la Plaza Desamparados, a metros de la iglesia. Todas las charlas tenían algo en común: El fútbol.

Apasionados por ese deporte que, no hacía mucho, era furor en suelo argentino, decidieron fundar un club. El 10 de septiembre de 1919, apoderándose del nombre de aquella plaza donde se juntaban todas las tardes, se fundaba Sportivo Desamparados de San Juan.

Luego de varios años yendo y viniendo entre terrenos donde poder oficiar de local (siempre jugando partidos amistosos), en 1926 se trasladaron a un espacio que ocupaba la Escuela de Fruticultura y Enología de San Juan. Doce años después, el gobierno de San Juan les cedió un baldío para que

levanten su cancha. Sin embargo, en 1944 y tras un terremoto que acechó al pueblo y terminó con la vida de miles de personas, lo entregaron para que las familias afectadas se asienten y formen el hoy conocido como Barrio de Emergencia Ameghino.

Sin destino fijo, optaron por ingresar a un terreno perteneciente al Consejo Nacional de Reconstrucción Nacional. En 1960

se firmó un acta de propiedad en que la que, finalmente, se le otorgaban de manera definitiva esos metros de tierra donde construyeron el Estadio Pablo Jose Nehín. El “Serpentario” lleva su nombre en honor a un grupo de tres hermanos que formaron parte del plantel del club a finales de la década del 20: Pablo “Pito”, José “Mundialista” y Naún Nehín, apodados “los víboras”. Fueron figuras en el primer campeonato oficial obtenido en la Liga Sanjuanina de fútbol de 1928.

No fue el único grupo de hermanos que se desempeñó en el club. Por los ‘50 aparecieron Pablo (defensor), Julio (enganche) y Orlando (lateral) Roldán, que pertenecieron al equipo que ganó, en 1959, la Copa a la Caballerosidad, por no contar con ninguna expulsión en todo el campeonato. Luego, se convirtió en el único club de América Latina sin que le expulsen jugadores por tres años. Más tarde se destacaron Ismael (lateral), Vicente (mediocampista) y Ángel (delantero) Vega, apodados como “La Dinastía”. En 1969 participó por primera vez en la Primera División. Su último año en la máxima categoría fue 1973 (tras consagrarse tricampeón de la Liga Sanjuanina en el ‘71, ‘72 y ‘73). Y la última vez que permaneció en el Nacional B fue en 1974. Obtuvo 12 títulos en la liga regional y desde 2004 se encuentra ocupando una plaza en el Argentino A, intentando conseguir el tan ansiado ascenso a la B.

Por Rodrigo Bússolo

V

iernes 15 de Junio de 2015. Un nuevo fracaso se paraba frente al Seleccionado Argentino Sub20. El fracaso en el Mundial de Nueva Zelanda, volviendo en fase de grupos y siendo incapaces de ganar UN partido dejaba al otrora intocable Humberto Grondona, sobre la cuerda floja.

La repentina vuelta del Mundial desarrollado en tierras Oceánicas era la oportunidad única de terminar de erradicar la Monarquía Grondona dentro de AFA. Y así se hizo. Más tarde que temprano, rodó la cabeza del hijo del fallecido dirigente. Y así comenzaron las suspicacias sobre su sucesor. Parecía que la muerte del perro acabaría con la rabia.

Pero...

Dirigentes nuevos, inexpertos, puja de intereses, “amigos de”. Se juntaron todas las miserias del ser humano en una sola oficina y se llegó a una sola conclusión: Un casting. Como lee. La puja de intereses personales de nuestros dirigentes pudo más que el sentido común, y te llames César Luis Menotti, Hugo Tocalli o Juan Pérez, ante los ojos de esta “Comisión Normalizadora” tenías las mismas chances de apoyar una carpeta con un proyecto sobre la mesa chica de Viamonte.

Argentina nunca se caracterizó por darle importancia a los jóvenes. A integrar. El fútbol argentino, en ese sentido, se aleja mucho de la gran Sociedad Civil que es, o debería ser. Tanto en la Selección, como en los clubes, siempre se “priorizó” la Mayor, (como si darle importancia a los seleccionados sub... no se diera la mano con éxitos a futuro con su Seleccón. ¡Ja!) maquillando el poco trabajo de las juveniles con las individualidades típicas de un país que respira fútbol. Ahora, ¿se ganan torneos sólo con individualidades? Para muestra, sobra un botón...

Hace unos días se disputó el Sudamericano Sub-20, llevado a cabo en Ecuador. No vamos a detenernos en pequeñeces como las de alzar la voz al enterarse que todo el certamen iba a disputarse en un solo estadio, este de pésimas condiciones, y per-

judicando la idea de juego de los equipos, motivo por el cual se crean estas selecciones, llevar a cabo una idea de juego “desde el vamos”.

Vayamos a lo que realmente nos compete y aglomera en estas líneas y estas circunstancias: Argentina consiguiendo pasaje a Corea por la ventana, producto de la impericia ajena, más que por mérito propio. La falta de puntería de Brasil (otro seleccionado víctima de la falta de compromiso de inferiores) hizo que el conjunto albiceleste alcance la instancia mundialista. De otro modo, el papelón iba a ser aún mayor.

Despotricar contra 20 chiquilines que van a buscar un sueño sería propio del más despreciable de los seres. Recordemos que, del escaso vello púbico de estos chicos que no hacen más que cumplir un sueño, el de la mayoría de nosotros, es de donde se mantienen en pie estos dirigentes. De su individualismo y de sus ganas, arriesgando su puesto en sus clubes, muchas veces enfrentandose a ellos para poder representar a su país, es de donde se agarran estos “salvadores”. ¿Despotricar contra un técnico? Puede ser.

A caso, ¿la inexperiencia de Javier Cantero no fue uno de los grandes motivos por los

cuales Independiente penó con la B Nacional? Por citar un ejemplo. Sin embargo, recaemos en lo mismo que antes criticabamos, una persona con buenas intenciones, pero con poco tiempo para llevarlas a cabo.

Haciendo paralelismos, todos sabemos que Olarticoechea la pasó peor que nunca, comenzando con un plantel de cinco jugadores y armandose con lo que pudo. Úbeda la tuvo un poco más fácil. O menos difícil, mejor dicho. Pero no muy lejos de la realidad que pasó el Vasco hace unos meses. ¿Presentó un proyecto en el bizarrísimo casting que se llevó a cabo en calle Viamonte? No. ¿Tiene relación con Fernando Marín? Puede ser. ¿Es momento para criticar su proyecto? Rotundo no.

Ahora, podemos pensar, ¿Era momento para confiar en un proyecto a largo plazo, con una eliminatoria y un Mundial tan próximos? Volvemos a lo citado con anterioridad: Se confiaron en que estos chicos los iban a salvar. Confiaron, en el mal sentido de la palabra, en que los chicos ganaban la eliminatoria caminando, por el sólo hecho de ser Argentina. Sentaron su autoridad sobre pibes de hasta 17 años, sin importarles la presión que ejercían. Primerizos, más un DT que, respetando sus pergaminos, no tenía la experiencia necesaria para agarrar un seleccionado juvenil y hacer maravillas en algunos pocos meses. Dio como resultado esto: Depender de la puntería de Brasil para clasificar a un Mundial. Últimos en los puestos de privilegio. Dando lástima. Pero ojo, lástima a nivel dirigencial. A estos chicos hay que ovacionarlos de pie. Dejaron la vida por una camiseta. Lejísimos están de representar a estos dirigentes que luchan por sus intereses, más que por salvar la Asociación de Fútbol Argentino.

Enrique Hrabina

Caminando desde Sucre y Dragones hasta el Lago de Palermo, hablando como si nos conociĂŠramos de toda la vida. Nosotros lo conocemos bien: un personaje dentro y fuera de la cancha. Un vehemente que arriesgaba hasta la cabeza por su verdadero amor: Boca Juniors.

Por AylĂŠn Escamilla y Rodrigo Lambarri

pensás?

- ¡Que loco que era! Veo otras jugadas y me río. Era un loco que no pensaba, un vehemente. No pensaba, no medía la fuerza. Me pasa siempre. Mis amigos me muestran videos míos y yo digo: “Jo jo qué jugador”. Por suerte terminé sano, pero tuve mis lesiones. Una que me dejó un año afuera, por no parar. Estuve con un desgarro. Estábamos primeros en el campeonato, yo era el capitán del equipo, empezaba la Libertadores.

Me infiltraban para que juegue igual. De un desgarro se me hicieron cinco. Terminé con todos los músculos posteriores rotos. Me recuperé pero no era lo mismo. No podía meter un pique de 50 metros que no llegaba, entonces me pusieron de segundo marcador central, puesto donde jugué todas las inferiores y cuando llegué a primera me pusieron de 3.

- ¿Hubo algún momento en que te diste cuenta que el fútbol dejó de ser un juego y pasaba a ser un trabajo?

ENTREVISTA - ¿Cómo fueron tus comienzos?

- Yo juego al fútbol desde que tengo memoria. Jugaba desde chico en el barrio de Devoto con una banda de muchachos hasta 5 años más grandes, yo tenía 4 o 5 años y estaba patenado con ellos, trataba de imitarlos y de integrarme a ellos. Eso tuvo mucho que ver con mi formación, el cómo me hice agresivo para jugar, el siempre tratar de dar un poco más y exigirme al máximo porque sino no podía pertenecer al grupo.

Uno aprende la técnica con la práctica y encima con gente más grande, eso ayuda mucho a forjar una personalidad, el juntarte con gente con otras experiencias, y así uno va quemando etapas.

patadas adrede, sí jugaba con vehemencia, pero siempre con buena leche. A veces incluso exponía mi físico, pero nunca pasó por mi cabeza el lesionar a alguien o hacerle mal. Yo iba fuerte, siempre. Y sí, a veces se me escapaba una patada de más. Por eso sigo teniendo buena relación a día de hoy con ex rivales, porque sabían que no tenía malas intenciones. En el fútbol nos conocemos todos. Está bueno trascender por ser metedor o buen jugador. Que hablen de vos es importante. Son cosas que pasan en los Boca - River que hay en el fútbol. Cada uno defiende lo suyo adentro de la cancha.

- Si hoy te sentás en tu casa, prendés la televisión y están pasando un video tuyo de cuando fuiste a trabar con la cabeza, ¿qué

- ¿Qué recuerdos tenés de esa época?

- Muchos. Podíamos jugar tranquilos en la calle, pasaba sólo un auto cada 15 minútos, había denuncias de los vecinos porque no dejábamos dormir la siesta, hasta que llegaba la policía y rajábamos todos, hasta agarraban a todos. Si no, íbamos al potrero de General Paz y Nazca, al costado de la General Paz. Antes era eso, la bolita, el poli-ladron, el cajón con rulemanes.

- ¿Tu viejo te llevaba a probarte a diferentes clubes?

- Mi viejo me acompañaba siempre, toda la vida, aún con el miedo de mi vieja, que ya sabía que era medio kamikaze y podía volver a casa lastimado (risas). También me acompañaba mi hermano, que no le gustaba mucho el fútbol, era medio patadura.

Cuando llegué a las divisiones inferiores, ya me acompañaban los dos juntos.

- ¿Eras un “kamikaze” en la vida en general o solo para el fútbol?

- No, sólo para jugar. No fui nunca de dar

Me había llamado Daniel Arcucci para una producción de El Gráfico. Nos encontramos y me comentó que querían hacer una nota junto a unas fotos mías, disfrazado de vikingo. “¿QUÉ? ¿Vos estás en pedo”. Yo era un tipo serio, resio, con barba, porte . “¿Qué me vas a poner? ¿Cómo me voy a disfrazar? ¿Cuernos, pollerita? Vos estás loco, vos querés que mis compañeros me destrocen”.

Estuvo una hora para convencerme.

Finalmente me convencieron y, dicho y hecho, muchas cargadas, pero me las banque. Me juntaba con tipos que tenían 7 años más que yo, que andaban con chumbos y droga. ¡Y yo disfrazado de vikingo! Hasta Di Stéfano me llamó y me dijo: -lo imita- “Eh Hrabina. ¿Usted anda vestido de vikingo?.

- Yo creo que siempre me lo tomé muy en serio. Desde que tengo memoria me gustó entrenar. Como era muy “flaquito” me gustaba exigirme para estar a la par del resto.

Siempre me gustó la concentración, todo lo que tenía que ver con la Primera División, y me fue llevando naturalmente, no tenía otra cosa en la cabeza. Recuerdo que era adolescente, estaba en la época de tener novia, salir, pero yo priorizaba siempre ser jugador. Por suerte cuando tuve de técnico a Oscar Allegrini, que me fue llevando por varios clubes hasta llegar a Atlanta, donde debuté.

- ¿Cuál fue el técnico que más te marcó?

- Todos te marcan de alguna manera. Con Allegrini estuve casi 10 años, desde los 5.

Recuerdo a Mellizo, un petiso chueco, que estuvo toda la vida en Atlanta siendo entrenador de inferiores, imagínate la experiencia que tenía. Ya en primera tuve al Bambino Veira, que tenía muchísimas cualidades, podía cambiar la óptica en un entretiempo, si la cosa andaba mal cambiaba algunas variantes y cambiaba totalmente el partido.

Era un formador de grupo, elegía jugadores con personalidad. También tuve a Rogel, Pastoriza, Alfredo Di Stefano, el “Cai” Aimar.

El “Toto” Lorenzo, tenía una didáctica digna de su profesión, fue el más ordenado en cuanto a la organización de trabajo junto con el profe Herrera y fueron los que más experiencia me dejaron en ese aspecto., el “Maestro” Tabárez, todos con una experiencia increíble, eran los mejores del país en ese momento...

(Silencio) ¡Ah, me olvidaba del Flaco Menotti! El Flaco es una biblia, un motivador, un tipo que te agranda, que te hacía sentir importante, era un encantador de serpientes, ¿no?. Te transformaba la cabeza con un par de palabras. Era un filósofo, como Ángel Cappa.

- ¿Fue lo mejor de tu carrera haber jugado en Boca?

- Definitivamente. Jugar en Boca y ser reconocido te marca para toda la vida. Hace 25 años que dejé de jugar pero sigo ligado al club, yendo a peñas del interior, dirigiendo el equipo senior y esperando que se abra alguna posibilidad laboral que mejore

mi posición y que sirva para ayudar al club.

En cualquier momento se puede dar de ocupar otra posición donde me sienta más útil. Creo que soy una persona coherente, que ha mantenido siempre una línea. Tendría que estar en otra situación: Trabajando adentro del club.

- ¿Cómo vivieron la crisis deportiva de Boca en los ’90?

- Yo estuve 11 años consecutivos en Boca, desde 1985 hasta diciembre del ’95. Fueron 11 años donde viví desde adentro esa etapa, y siento un profundo orgullo porque significó renacer de las cenizas y volver a poner a Boca en una situación de prosperidad, del club saneado y preparado para seguir creciendo. Hubo momentos muy difíciles: enfrentamientos con la hinchada. Teníamos que viajar a los partidos en barco o tren porque no había un mango. Íbamos a hoteles medio pelo. Íbamos a jugar amistosos a cualquier lado para sacar un peso. Fue difícil.

- ¿Cuál considerás que fue tu mejor torneo?

- Para mí, como equipo, el ’91. La Supercopa del ’89, fue bárbaro. Recuerdo también

- Es lo natural. Uno quiere destacarse, que lo conozcan. Pienso que el jugador es como un artista, tiene ganas de trascender naturalmente. Si bien no hace las cosas adrede para alcanzar la fama, inconscientemente la busca. Uno está haciendo cosas para un gran público, por eso hay muchas similitudes entre actores y jugadores, porque se mezcla el tema de los egos, la popularidad, etc. En ese sentido yo nunca me la creí, por suerte. Aunque me emocionaba cuando la hinchada me gritaba “Ruso, Ruso, Ruso… huevo, huevo, huevo!”. Que toda una cancha te cante y que reconozca lo que estás haciendo, a uno lo llena de orgullo. Cuando salía a la cancha, era algo increíble. Boca era local en todos lados. Te agranda en el buen sentido, te hace sentir más seguro. Es verdad que el Jugador Nº 12 está siempre.

Cuando la cosa va mal, te alienta. Aunque hay muy buenas hinchadas, San Lorenzo, Racing... ¡No, no te voy a nombrar nunca la otra, esa es distinta!

- ¿Sentiste el vacío que sienten varios jugadores al retirarte?

- Fue terrible. Pero por suerte seguí ligado al fútbol. Gracias a Dios ya estaba encaminado porque sabía que me iba a termi-

profesión era todo, estaba un poco relegado de todo lo demás, por eso me permití avocarme más a mi familia. El “bajón” que produce que todo el mundo esté pendiente de vos, y que de un día para el otro, ya no te llame nadie, es muy grande. El “Mundo Boca” es atrapante. Me llamaban a las 9 de la noche, a las 7 de la mañana, para hacer una entrevista, y después quedás a un costado. No quise seguir jugando porque me quería retirar en Boca. Gracias a dios con el apoyo de mi familia, hasta psicológico, porque recurrí a la ayuda profesional, logré salir adelante. Más aún cuando volví a la actividad con la profesión a la que me quería dedicar, encima en Boca, que era mi casa.

- ¿Cómo fue tu última experiencia como entrenador de Independiente Rivadavia de Mendoza, en 2012?

- Yo me equivoqué en agarrar a Independiente. Lo hice una semana antes de empezar el campeonato, con el equipo sin una buena pretemporada, con jugadores que uno no eligió y encima necesitaba una muy buena campaña para salvarse del descenso.

Yo estaba acostumbrado a estar en clubes que peleaban los primeros puestos. No se dieron las condiciones necesarias para trabajar y había gente en el club con la cual no me sentía cómodo, por eso tomé la decisión de renunciar. Lamentablemente es una mancha que me quedó, y una vez que quedas fuera del circuito es difícil reinsertarse. Después me ofrecieron puestos que no me llamaron la atención, en categorías que no conozco, que se juegan de otra manera y no me gusta.

- ¿Crees que el fútbol argentino es ingrato con los técnicos, al ser siempre los primeros apuntados si hay que echar a alguien?

la Liguilla del ‘86, dirigidos por Mario Sanabria fue épica. Veníamos perdiendo. Jugamos de local el primer partido con Newell’s, perdíamos. Vamos a Rosario, perdiendo 1 a 0, lo damos vuelta y terminó 4 a 1. Entramos a la Libertadores. Fueron cosas impensadas. En lo futbolístico hacíamos lo que podíamos, con mucha garra, con mucho corazón. Eran equipos agarrados de los pelos. Con jugadores que venían de todos lados, todos a préstamo. Una situación complicada. Eso pegó en la gente. El hincha de Boca valora mucho el esfuerzo, por eso es que me valoran a mí. Yo no era un jugador con grandes habilidades, pero dejaba todo en la cancha.

- ¿Siempre fuiste hincha de Boca?

- De chiquito era de San Lorenzo. Cuando nací era de San Lorenzo. Igualmente cuando jugaba en las inferiores de Atlanta los enfrentábamos y los quería matar, les quería ganar como sea. Luego jugué para San Lorenzo, pero no me fue como a mí me hubiese gustado. Cuando llegué a Boca, donde me transformé y me convertí en el hincha n°1. Los colores de Boca los llevo en la sangre, me hicieron una transfusión. Sos o sos. Se te mete en el cuerpo, en la sangre.

Vivir todo eso es una de las mejores cosas que te puede pasar. Que el hincha te tenga ese reconocimiento. Yo soy el fanático más grande de Boca.

- ¿Te gustaba ser reconocido?

nar dedicando a esto, la motivación la tenía ahora como director técnico. Yo era como un técnico adentro de la cancha, desde mi posición se ve todo. Los ordenaba a todos.

Además, siempre me peleaba con los árbitros. Me echaron más veces por protestar que por ir fuerte. Cuando me retiré la pasé mal, pero por suerte me llamó rápidamente Tabarez para ser veedor de los partidos de los rivales. El famoso “espía”. Usaba dos días, tres horas, para hacer mi laburo: Ir a los entrenamientos del rival, hacía el informe y después se lo llevaba al “Maestro”.

- Son las reglas de juego. Por suerte siempre tomé yo la decisión de irme de los lugares donde dirigí. No me banco diferentes situaciones que otro quizás sí. En ese sentido tengo valores y principios bien marcados, prefiero estar sin trabajo que bancarme algunas cosas. Es así, siempre va a ser más fácil echar al técnico que a 20 jugadores. Históricamente fue así, por los a manejos dirigenciales que no son lógicos ni coherentes, por eso uno decide dar el paso al costado. Trabajar en malas condiciones no es grato.

- También fuiste Secretario Técnico..

- ¿Como referente de Boca, cómo cayó la decisión de Carlos Tevez de ir a jugar a China?

- Sí, lo de “Secretario Técnico” lo inventé yo. En realidad ayudaba al profe Herrera en la organización e infraestructura, haciendo reserva de los hoteles, lugares de entrenamiento, ocupándome de las comodidades de los jugadores. De esa manera fui conociendo la cocina de cómo funciona todo el cuerpo técnico para mi objetivo que era ser entrenador. En cuanto me ofrecieron dirigir la Reserva, me tiré de cabeza. Estaba haciendo el curso. Aunque eso no te ayuda demasiado. Te sirve más la experiencia.

Tuve la suerte de tener un interinato. Tenía 33 años, debo haber sido el técnico más joven de la historia de Boca.

- Son decisiones personales. Yo no lo hubiese hecho. También me pongo a pensar que si te ofrecen la mitad de la fortuna que hiciste en 15 años, se la están dando el doble en 2 años, es entendible. Para mí el dinero está en segundo plano. Además teniendo toda la que hizo él. Tiene que ver tu enterno, o el representante. Por eso yo nunca tuve representante, tomaba las decisiones con mi hermano. Pero tener a tu representante diciéndote: “Andá, andá y andá”, debe pensar. El club que también gana su parte...

- ¿Qué cosas hiciste cuando te diste cuenta que tenías más tiempo libre?

- Apenas me retire decidí ser papá y formar una familia. Cuando estaba jugando, mi

- ¿Entonces no te irías a dirigir a China?

- Y nose, capaz que ahora sí, hace 5 años que no laburo (risas). Ahora justamente estoy mandando un proyecto a China de divisiones inferiores, pero hay que ver, no es

fácil, una cosa es dirigir en Paraguay, en el interior. Pero China es otra cosa, otra cultura, otro idioma. Yo tuve la posibilidad de ir a Arabia Saudita, pero no me fui. Después no sé cómo hacés para desenvolverte en un lugar que es completamente diferente.

- ¿Cómo fue tu experiencia en Paraguay?

- Buenísimo, similar a nuestro paso por Almagro. Lo agarramos con Juan Amador Sánchez, que estaba último, lo sacamos campeón y ascendimos a Primera División.

Guaraní que estaba último, tenía 0 puntos.

Había perdido 5 partidos al hilo y terminamos saliendo segundos, a tres de Cerro Porteño, que nos llevaba 15 puntos. Hasta clasificamos a la Sudamericana, que nos eliminó Cerro por penales. Sino hubiésemos seguido y nos enfrentábamos a Boca.

El club dejó a todos los jugadores en libertad de acción, nosotros no estábamos de acuerdo de que se vayan.

- ¿El modo de trabajo en Paraguay es similar al argentino?

- Creo que los argentinos marcamos una diferencia. En cualquier lugar del mundo el argentino tiene un nivel de competencia, exigencia, preparación, historia y conocimientos como para marcar la diferencia. Yo no sé si en todos lados se trabaja como en la Argentina, estando actualizados, con lo último en modos de entrenamiento, en trabajos físicos, técnicos. ww - ¿Creés que se busca “europerizar” el fútbol argentino, con énfasis en la preparación física y los cambios de calendario?

- Yo tan de acuerdo en esas cosas no estoy.

En Costa Rica, por ejemplo, se trató de copiar el modelo holandés y alemán. Yo estuve dando un curso a los técnicos de Costa Rica. Se usan modelos muy estructurados y marcados. El costarricense es un jugador latino. Son más habilidosos que los europeos, salvo alguno que otro como Zidane y Platiní. Tiene otra forma de vivir y jugar al fútbol, por eso no estuve tan de acuerdo en su momento. A mí no me gusta copiar cosas de Europa. Claro que tiene que haber un orden táctico. Puede haber corrientes más ofensivas. Eso que los partidos ganados sumen 3 puntos, o que el arquero se pasaba 20 minutos con la pelota en la mano adentro del área, hoy tiene que jugar más con los pies; que la pelota sea más liviana. Todo esto ha cambiado mucho la forma de juego.

- ¿Cómo ves a la defensa de Boca hoy?

- Complicada. Hay que ajustar algunas cosas, como tener centrales más agresivos. El Mellizo tiene que encontrar la dupla central justa, que se complemente bien. Los laterales también. Fabra se acomodó un poco mejor, tiene buenas y malas. Cuando dejan dudas en la marca se siente mucho y se paga muy caro. Me gusta, conceptualmente, armar los equipos de atrás hacia adelante. Darle seguridad defensiva al equipo, con jugadores de mucho temperamento, que transmitan esa seguridad. Fundamentalmente, hay que tener una línea de 4 y un 5 tapón. El arquero, los defensores y el volante central son cosas esenciales para que, de mitad de cancha para adelante, los demás puedan jugar tranquilos. Boca ultimamente no está logrando eso del todo.

HUGO GATTI VICENTE PERNÍA, JULIO MELENDEZ, ROBERTO MOUZO, SILVIO MARZOLINI JORGE BENITEZ, RUBÉN SUÑÉ, CARLOS TAPIA DIEGO MARADONA GUILLERMO BARROS SCHELOTTO Y MARTIN PALERMO DT: CARLOS BIANCHI

LUIS ISLAS

Impuso su carácter y rebeldía desde los 15 años cuando debutó. Le dijo que no hasta a su gran maestro, Carlos Bilardo. Confiesa ser un agradecido al fútbol y resalta su amor por el hincha de Independiente, club que lo formó y del cual es ídolo. Hace un repaso sobre su carrera debajo de los tres palos y habla de la actualidad del Rojo.

Por Rodrigo Bússolo y Matías Magnético

- ¿Cuál fue tu mejor etapa como jugador de Independiente?

Todas. Todas tuvieron un plus distinto. La primera era atrapar al hincha de Independiente. Responderle a ese arco fantástico que es el de Independiente. Y de entrada la gente empezó a ver eso. Entonces, ese primer paso no lo puedo dejar pasar como normal. Yo ahí marqué una tendencia. La segunda etapa fue por el cariño.

Sabían lo que había hecho en mi primera etapa, entonces ya venía con un plus, que en la primera tuve que ganarmeló. En la segunda vine con un nivel muy alto, muy fuerte. Ahí se hizo algo extraordinario. Un reconocimiento muy profundo que ya estaba marcado a fuego en mi vida. La tercera vez, cuando vuelvo, ese fuego que había quedado se reavivó. Se reafirmó.

ENTREVISTA - ¿En qué momento te diste cuenta que te gustaba el arco?

De chiquito, 8; 10; 12 años, no jugaba en el arco yo. En el potrero, con los amigos, jugaba en el medio o de delantero. Y lo hacía bastante bien. Después fui a jugar a un equipo de Baby Fútbol, Coronel Mon, me ponen un día en el arco y ahí empecé como a agarrarle el gustito, a sentirme cómodo. Si bien era chiquito, me empecé a sentir cómodo, feliz de lo que hacía cómo lo hacía. Después, tampoco tuve mucho tiempo para pensarlo, porque a los 15 años ya estaba jugando en Primera. Fue todo muy de golpe.

Me empecé a enamorar del arco a partir de que empecé a ser profesional.

- ¿Hasta qué edad jugaste en otros puestos? Porque si debutaste a los 15...

Como te decía, yo a los 12 ó 13 no jugaba de arquero. Jugaba de nada. O de todo.

Pero el arco no me llamaba. Hasta que una vez sí. No me acuerdo ni el momento ni las circunstancias por las cuales fui al arco. Y me gustó. Me apasionó. Me di cuenta que arquero se nace, no se hace. Porque a penas me metieron me tiraba de cabeza, no me importaba que me pegaran un pelotazo en la cara. Después, a los 15 empecé a jugar profesionalmente.

A partir de ahí le empecé a dar una seriedad y un profesionalismo muy fuerte y me atrapó enormemente del arco.

El hincha de Independiente y el club están grabados a fuego en mi vida. Recuerdo un partido contra Estudiantes, que me ovacionaron por más de un minuto. Se me caían lágrimas de la emoción. Y después, cuando uno va como entrenador, (que fuimos con Gallego) es raro. Porque uno, entrenador, cuando aparece y pisa una cancha de fútbol, la gente lo empieza a ovacionar. Eso se da más con el jugador.

Esto es algo muy fuerte que lo sigo viviendo día a día hoy con el hincha. Por más que esté trabajando en otro club, el hincha me lo hace notar a diario.

- Qué te dio más bronca ¿El gol de arco a arco recibido contra Táchira en Venezuela, o cuando reventaste el travesaño contra Racing y quedaron de local eliminados por la Supercopa?

El tiro contra Racing en el travesaño hasta el día de hoy se recuerda, si hubiese entrado hubiera sido algo histórico. El de Táchira me queda como un blooper, no me marcó.

- ¿Recordás aquella tarde donde Independiente gana 1 a 0 en la Bombonera y la hinchada de Boca te aplaude?

Si claro, era un partido enorme. Yo defendía al más grande, que era Independiente. Boca fue superior a nosotros sin duda. Cuando termina el partido voy caminando para el túnel donde está “La 12” y yo veía que empezaban a aplaudir. “Deben estar aplaudiendo a alguien atrás”, pensé. Pero al final la ovación era para mi, así que agradecido al hincha de Boca.

- Un tema del que se habla hoy es del ambiente de la cancha de Independiente. La sequía de títulos está acabando con la paciencia del hincha. En su momento, si bien estabas lejos de pasar por una sequía de títulos, si pasaban un par de partidos y el equipo no andaba, ¿la cancha se ponía como ahora?

to o séptimo. No, la verdad que no existe la palabra ‘Descenso’ en un club como Independiente.

¡Sí! La presión existió siempre. La presión en el fútbol existió siempre. Y en Independiente siempre tenes que ganar. Y al contrario: yo creo que la gente hoy es más dócil. Aceptan más que no se gane. Independiente no pasaba tanto tiempo sin ganar nada. No era normal. Cuando vos tenías uno o dos partidos que no conseguías los resultados, la gente te lo hacía sentir. ¡Y está bien que así sea!

Exactamente. Claro que me ayudó mucho la personalidad. Yo tenía 15 cuando, hacía días jugaba con mis amigos en el potrero, y pasé a jugar en Chacarita, con 30.000 personas, profesionalmente... Tenés que tener un caracter y una personalidad muy fuerte para contener eso, porque si no, te sobrepasa. Y no tenés que olvidarte que, yo tenía 15, y en frente lo tenía al Pato Fillol, con 30. Entonces había mucha competencia. Yo competía con el Loco Gatti, con Fillol, que eran tipos sólidos y consagrados, y yo era un pibe que no me conocía nadie.

Que te lo haga sentir desde una puteada o un malhumor. No de la agresión. Esto está claro. Por eso digo que, ahora, el hincha está más dócil. No sale campeón y sigue o sigue. Y antes no peleabas un campeonato, o ganabas un partido y no lo hacías jugando bien y la gente te lo hacía sentir. Así que, eso de que existe más presión ahora, no.

Lo que sí existe, es que antes teníamos las cosas más claras. Teníamos una personalidad importante. Yo particularmente tengo un sentido de pertenencia muy grande con el club. Y sabíamos realmente la camiseta que teníamos puesta. Y también sabíamos que el resultado se tenía que dar y los títulos tenían que llegar. Si no se iba a hacer sentir. Esto está claro.

- ¿Vos cómo te sentirías, como jugador y como técnico, si hubieras estado en Salta cuando Independiente perdió el Clásico?

La agresión no da. Esto está claro. En la vida no da la agresión. Ahora, sacando la agresión, yo, como jugador o como entrenador, diría que mal, pero por lo que estoy realizando como jugador o como entrenador. Me sentiría mal. Sé de las consecuencias que se dan al perder rotundamente con tu clásico rival 3-0. Personalmente me sentiría muy mal. Analizaría un montón. Me plantearía un montón de cosas. Escucharía un montón de críticas, para ver qué puedo mejorar. Sacá la violencia, eh. Eso no. Pero entiendo el disgusto, la gente... Es más, te lo dije recién. Antes no se hubiese permitido tan fácilmente un descenso, no salir campeón...

El descenso en Independiente yo pensé que jamás iba a existir. En mi vida, en mi cabeza nunca estuvo. Ni se me pasaba. Cuando existió lo del descenso yo estaba dirigiendo en Córdoba. Estuve 3 ó 4 meses sin poderlo entender. Si bien sabía que había llegado el descenso, en mi mente no había ese click.

Inclusive lo fui a ver en el descenso un par de partidos. Veía equipos que normalmente son del Nacional B, y veía a Independiente y decía ‘no, esto no’. En mi vida jamás pensaba ver a Independiente en el Nacional B. - ¿Y si en una de tus etapas como jugador te tocaba un descenso?

Imposible. Te digo que era imposible porque, yo dirigiendo otro equipo, no pensaba en el descenso de Independiente. ¿Te imaginas, como parte del grupo? No, imposible.

Es más, nunca estuvimos en esa. Siempre estuvimos peleando el campeonato. Algún torneo que no se daba pero quedabas sex-

- Vos siempre tuviste una personalidad muy fuerte. Eso te ayudó mucho a debutar a los 15 años, pero te llevó a no jugar el Mundial ‘90.

Entonces, tenía que tener una personalidad. Bueno, a parte de la capacidad y todo eso. Después, lo del ‘90 fue una decisión personal, de un técnico que creo que fue el mejor en mi carrera, como Bilardo. Para mí fue el mejor, lejos. Yo estaba en España en ese momento. Fui elegido mejor arquero de España. Y Nery, que estaba en ese momento, se fue al descenso con el Betis.

Entonces, por nivel, había una diferencia a mi favor. Quizás, por edad, era más sólido llevarlo a Nery. Yo no lo entendí así, así que le dije a Carlos que si yo no tenía la oportunidad de jugar prefería no ir. Quizás, un error personal, ¿no?

- ¿Te arrepentís?

Arrepentirme, no. Quizás hoy, con esta edad, hubiese tomado otra decisión. Yo ahí era muy chiquito. Pero en ese momento no lo creía conveniente. Hoy, con 30 años más, creo que me equivoqué.

Y siendo Bilardo el mejor entrenador que tuviste, ¿cómo te paraste adelante de Carlos y le dijiste ‘yo, si no soy titular, no voy’?

Yo estaba en España y él me llama. Me acuerdo, porque lo quiero mucho. Tengo relación con él a diario. Y cuando me convoca telefónicamente, él me dice ‘el primer partido no lo vas a jugar’. No me dice que no iba a jugar. Me dice que el primer partido lo iba a jugar Nery. Y mis ganas, mi ilusión de ir a un Mundial a jugarlo le dijeron ‘¡No, me sacas la ilusión de ir a jugar!’ Entonces le digo ‘No, Carlos.

Si usted me dice eso antes de arrancar un Mundial, prefiero no ir.’ El presidente del Logroñés de España, que me quería mucho, y yo mucho a él, me decía ‘¡No, portero, vaya al Mundial!’ Y yo que no, no, no y no.

Y no fui. Erroneamente, claro.

- ¿Un exceso de personalidad? ¡Nooo, la edad! Yo tenía 18 años, estaba en Europa, atajaba muy bien, y quizás esa personalidad de querer ir por más, me llevó a tomar esa decisión. Me costó mucho ir en el ‘86 al banco. Y después

me cuesta volver a la Selección. Yo después vuelvo con el Coco Basile. Después del ‘86, vuelvo. Pero en el ‘90 yo estaba más sólido. Estaba en Europa, atajaba muy bien. Por eso te digo que no aceptaba lo de Bilardo.

Era más razonable, quizás, en el ‘86 no atajar, por edad, que en el ‘90.

- Como técnico, ¿te sentís identificado con Bilardo?

Sí. Yo, como técnico, cuando me recibí, estuve un año hablando con entrenadores que consideraba que me podían aportar muchas cosas. Y con quien más hablé, fue con él. Tengo muchas cosas de él, como el trabajo o la manera. Pero hay otras que no. Por ejemplo, yo considero que vos no podes ser un obsesivo, y tener a un jugador, de 24 horas del día, 16 trabajando con lo mismo. Eso yo no lo hago. Trato de tener un equilibrio. Cosa que, con Bilardo, llegaba un momento que te saturaba.

Pero, en líneas generales, he aprendido mucho de él. Desde la manera, desde lo táctico, desde lo sistemático. Después, hablé mucho con el Pato Pastoriza, que en paz descanse. El Coco Basile fue otro técnico que me ayudó mucho, en lo grupal, en el manejo del equipo, me ayudó mucho.

Viajé a México a hablar con Enrique Meza, un técnico que tuve en el Toluca. Hablé con los técnicos que yo creía que me podían aportar. Después, tuve como manager a Cesar Luis Menotti, cuando estaba en Independiente. Entonces, de todos saqué cosas buenas, pero obvio que está mi estilo.

- ¿Bilardo es tan así, como él dice, que en su casa desde su señora hasta los tenedores tienen que ver con el fútbol? ¡Sí, es un obsesivo! Sólo que es el único error que tiene. Es tan obsesivo que hay un momento que te pasa de rosca y decís ‘¡Bueno, ya está!’. Y él sigue.

Entonces, llega un momento que, todo lo bueno que te explica, como persona te hace decir ‘Bueno, ya basta’. Pero es un número uno. Yo lo quiero muchísimo. A mí, me enseñó muchísimo.

- Actualmente hay mayoría de técnicos jóvenes. ¿Cómo ves eso?

Ricardo Centurión, o el de Silva e Insaurralde?

Creo que tiene que haber un equilibrio.

Tampoco decir que los técnicos de 70 años no sirven. Para mí, eso está mal. Es un grave error. Hay tipos de 70 años que tienen una gran capacidad. Y hay tipos de 45 o 50 años que también. El equilibrio está bueno. Lo que sí está claro, es que vos, como entrenador, tampoco podes tener una diferencia muy grande de edad con los jugadores. No podes estar manejando un grupo de personas de 20 años teniendo 70.

La pelea no está buena, pero, de vez en cuando sucede. Un hecho aislado lo corregís con alguna sanción. No está bueno, pero no es dramatico. Ahora, cuando empieza a ser algo natural, por ejemplo, que se agrega lo de Centurión, lo del coche, o lo del video, evidentemente, a mí me empieza a molestar, porque está habiendo un desequilibrio en el grupo. Lo de Centurión fue en una concentración. No pasó en la casa.

Entonces, si empiezan a marcar tendencia, yo tomo decisiones. No hay dudas.

El jugador es un ser humano. Hay que tener un dialogo, un montón de situaciones que tenes que tener un ida y vuelta. Pero una persona de 70 puede dirigir acompañada de una persona más jóven, para que esté en estos detalles. Pero también un jóven puede dirigir. No hay mejores ni peores, pero la edad del jugador no puede ser muy diferente a la del entrenador. En el día a día, para el tácto, puede ser agresivo que una persona no entienda que un pibe puede terminar un entrenamiento e irse a ver una minita. Y para el entrenador de 70 eso puede estar mal. Entonces, tiene que haber un equilibrio. Como para poder decir ‘Mirá, no lo hagas hoy. Hacelo mañana’. Y cosas así. ¿Se entiende?

- ¿Y vos cómo manejarías el caso que acaba de suceder en Boca, con

- Hace poco volvió a la cancha Brian Fernandez. ¿Vos cómo actuarías con un caso como el de él?

Hay que acompañarlo. Acompañarlo totalmente. Obviamente que sé de qué se trata, pero estando en el club vos tenes un ida y vuelta muy distinto. Pero a un chico que está en esa situación, lo primero que hago, es ponerle un profesional. Esto está claro. Y después, acompañarlo permanentemente, junto con el profesional. Hablaría permanentemente para saber si está para meterlo, si está para acompañarlo...

No lo dejaría de lado. No lo alejaría de las canchas. Hablaría con el profesional para saber cómo manejarlo. Si el médico o el profesional me dicen ‘metelo’, lo metería. Si me dice ‘guardalo’, lo guardaría. Pero siempre buscaría el beneficio del chico. Y si hay que meterlo con un plantel y llevarlo, lo llevaría. No lo dejaría jamás.

- En la actualidad de Independiente, hasta hace poco, era el arquero. ¿Qué opinión tuya tiene el Ruso Rodriguez? Siempre hablando desde lo profesional.

Yo lo tuve al Ruso. Era el cuarto arquero con nosotros. Un pibe que trabajaba bien.

Buen pibe. Cuando empezó a jugar, empezó respondiendo al arco de Independiente.

Empezó a atajar, respondió... hablé varias veces con él. Lo que tiene el arco de Independiente es que vos tenes que responder permanentemente.

No te permite tener ‘partidos buenos’. Y hubo partidos de él muy puntuales donde no tuvo buen nivel, y el hincha de Independiente te lo hace saber. Por eso hoy no está más en el club. Y, con respecto a lo de Martín (Campaña), para mí, fue la mejor decisión que tomó esta comisión a nivel deportivo. Martín es un arquero que ha respondido. Fue de menor a mayor. Ataja bien. Realmente me pone muy feliz que el arco de Independiente esté cubierto.

- De hecho, el Ruso fue el último de una seguidilla de Santoro: Ustari, A s s -

mann, (la cortó Hilario) Gabbarini... ¿Vos ves el trabajo de un entrenador ahí o pensas que fue una seguidilla de buenos arqueros?

Primero, que a Pepé lo adoro. Le tengo un respeto enorme. Pero, yo no creo que en esos arqueros haya un arquero ‘distinto’. No creo que haya en esos arqueros, un arquero deslumbrante. Independiente necesita tener arqueros distintos. Equipos grandes necesitan tener arqueros distintos. Yo creo que esos que nombraste son buenos arqueros, que hoy uno ataja en Central, otro en Velez, el otro en Banfield... El arquero de Independiente es arquero de Independiente, de Selección, o se va a Europa. Esto es así.

- Y en esos lugares que nombraste, ¿qué lugar ocupa Martín Campaña? Él está haciendo un trabajo enorme. Te repito: de las tantas incorporaciones que han hecho estos dirigentes, es el mejor refuerzo, sin dudas. Está respondiendo muy bien.

Yo deseo de corazón que este semestre que viene repita su nivel, entonces él va a empezar a ganarse un respeto más consolidado. Para mí, está haciendo un trabajo muy, pero muy bueno.

- ¿Sentís que además de sus condiciones, lo ayudó que el Ruso sea tan resistido?

No, porque si él hubiese tenido malas actuaciones, lo hubiesen criticado. El hincha es muy sano. Muy leal. Y cuando las cosas no van, se lo hacen saber al jugador y al entrenador. Si el jugador responde, si se identifica, el hincha lo va a querer. Y si no responde, lo va a resistir. Martín se ganó el respeto y el cariño del hincha de a poco.

Fue creyendo, fue de menor a mayor, y hoy, para mí, es titular inamobible.

- En Independiente asumió hace poco Ariel Holan. ¿Qué ves de nuevo en Independiente con la llegada del nuevo entrenador?

Veo lo que veo cuando llega cualquier entrenador: desearle lo mejor. Desearle lo mejor al nuevo técnico, que, en este caso, es Ariel, porque, que le vaya bien a Ariel, es que le vaya bien a Independiente. Después, son distintos estilos. Yo no considero que un entrenador que tenga drones, 14 ayudantes o lapiceras biónicas, sea mejor entrenador que el tipo que tiene 2 ó 3 ayudantes, una video cassettera... No lo considero mejor que el otro.

Ojalá le vaya bien, pero yo considero mucho la capacidad del entrenador. La lectura del juego, el armado del grupo... Ojalá sea un entrenador que pueda darle algo a Independiente. Este año juega tres copas. Una tiene que meter. De la manera que sea, una tiene que meter.

- Y de la limpieza de referentes, ¿qué pensas?

A mí, me sorprende. Por qué entrenadores y jugadores se van. Si vos analizás, Almirón se va, y después parece que encuentra la felicidad. Pellegrino se va y encuentra la felicidad. Milito estaba dirigiendo en reserva, se va peleado, vuelve y se vuelve a ir. Jugadores que se quieren ir. Pellerano, Ortíz, Vera, Cuesta que se quiere ir. Méndez...

A mí, eso me llama la atención. Eso me llama poderosamente la atención.

- ¿A esos buzos te los daba el club o vos los personalizabas?

A los buzos los mandaba a hacer yo. Eso sí, siempre con el escudito en el pecho de Independiente. Eran extravagantes, sí. Pero me gustaba, ¿viste? No era un tema menor para mí la ropa.

- ¿Los tenés todavía?

Sí. Hará cosa de 7 u 8 años atrás, me robaron. Se llevaron muchísima cantidad de ropa. Hasta la medalla de campeón del mundo me llevaron.

Se llevaron mucho. Algunos tengo, otros no.

Tengo buzos, guantes... de todo.

Tratamos de sacarle a Luis un once ideal de Independiente.

Pudo nombrarnos a unos 15. Pero hubo uno que no nos pudo decir.

Y no te imaginas cual... ¿Y si tenés que armar un once ideal de lo que hayas visto en Independiente?

- Hablando de Campaña, él tiene la particularidad de usar buzos de colores llamativos, como vos. ¿Pensas que eso puede distraer o darle algún punto de referencia al rival?

No, para nada. Yo jugaba con buzo verde, amarillo, rojo... No. Yo, a un arquero, lo que le veo es la capacidad, el rendimiento, la ubicación, el achique de espacios, la personalidad... Eso está por arriba de jugar con un buzo verde o blanco. No es para nada punto de referencia. Se dice ‘un buzo llamativo se hace ver, se ve como una luz ahí’, pero el jugador de fútbol sabe donde está el arco... Yo, en ese aspecto, no le presto mucha atención. De hecho, usé esos colores toda mi vida. Jugaba con buzo negros, y al otro día jugaba con un buzo naranja.

DE LA PERSONALIDAD A LA MODESTIA.

Huguito Villaverde, Trossero, el Loco Enrique y el Negro Clausen; Maranga o Perico; Giusti... van a sobrar, eh.

Porque hay jugadores que no puedo dejar afuera. Burruchaga, López, el Palomo Usuriaga, el Bocha...

- Cuando vos estabas en Independiente pasaba todo lo contrario... ¡Sí! Pero algo pasa, eh. Algo pasa. Yo no creo que todos se quieran ir de Independiente.

Algo internamente pasa. Cuando no se piensa parecido o se tiene una opinión distinta, es muy raro. Me es muy raro que se quieran ir a Independiente. Yo muero por ir a Independiente y me cuesta entender que todos se quieran ir. ¿Me entiende?

Entonces, cuando van a un club y después están felices y triunfan, hay algo que a mí no me cierra en todo esto. Económicamente tienen la suerte de ir a buscar a Erviti, Domínguez, Gigliotti... Pero si no tenés esa posibilidad económica, ¿qué hacés? Te fundís...

- ¿Cual fue el mejor equipo con el que compartiste equipo?

Y... El Bocha fue uno. Después, el Palomo Usuriaga.

¿Y en el arco? ¡Ah no! El arco no sé...

Por Aylén Escamilla

“Una brisa suave le revolotea por el cabello. La melena rubia flamea con el viento, encandilando con su brillo a ese infeliz que lo viene siguiendo desde mitad de cancha. Está podrido de sentir tirones en la espalda de aquel ser anti fútbol que quiere opacarle la jugada perfecta. Intenta parar la oreja para escuchar de dónde vienen los gritos de Díaz, que repite y repite que está solo. Pero lo único que escucha son los hilos de su camiseta que se rompen. No puede levantar la cabeza. No quiere dejar de mirarla, de verla rodar entre sus lustrados botines de cuero negro. Apaga todos sus sentidos. Cierra los ojos y agudiza los oídos. Escucha que a la derecha está murmurando el central de ellos con el arquero, amenazando con que no lo va a dejar cruzar el área chica. Por atrás, siente los pasos cansados del 5, que ya no puede más, luego de intentar una y mil veces, en vano, que no avance. Díaz grita por última vez y el 10 acaricia la pelota hacia la izquierda, dejándosela servida para que golpee la red.”

Hoy me desperté algo triste, vaya uno a saber por qué. Creo que la edad se convirtió en el juez más macabro de todos y me saca amarilla por insultar al viento. Se piensa que tengo algo en contra de ella, pero no se imagina el amor que le tengo. La edad me enseñó mucho. Me enseñó que todo puede cambiar. Todo menos la esencia. Mis piernas ya no son las de antes, mi cabeza tampoco. Mi mente se confunde, se enreda y se esfuerza por recordar, aunque ciertas veces se torne complicado. Pero por suerte está Él. Siempre trayéndome sus historias. Cuando la tristeza invade mis entrañas, como ahora, me acuerdo de que existe y encuentro un motivo más para disfrutar. Hoy me habló de la mejor asistencia que hizo en su carrera. Esa que lo llevó a conventirse en el mejor jugador de Europa. Porque por más que haya sido el principal artífice de la gloria de su club, esa jugada lo fue todo. Llevó a su equipo a anotar el gol en la final de la Intercontinental.

El cielo está completamente nublado. Las nubes están más negras que los botines que Él siempre solía lucir. La lluvia se desparrama sobre mi boina y me inunda el rostro, parecido a las gotas de transpiración después de los primeros 30 minutos de un partido a la tarde al rayo del sol. Igualmente, nada me detiene y me dispongo a ir al club.

De eso nunca me olvido, no lo anoto en la pizarra como todo lo demás. Eso sale solo. Todos los días salgo de mi casa con el afán de volver a encontrarlo. De recorrer los pasillos del estadio donde muchas veces caminó, cargado de medallas, envuelto en banderas y con copas de todos los tamaños, colores y materiales. Cuando llego, me tiemblan las piernas. “Otra vez esta maldita edad acechándome” -pienso-. Pero no es la misma sensación, porque continúa cuando cruzo el portón principal e ingreso al playón, donde comienzan a temblarme los brazos. Los latidos se aceleran y mi sistema nervioso maneja los hilos de mi cuerpo obligándome a cruzar la puerta 10, que me lleva a la platea.

“Gira sobre su eje, cubriendo la pelota con su cuerpo, protegiéndola de esos malvados enemigos que la quieren herir.

La defiende como si fuera una extensión suya, como si formara parte de Él. Corre, como nunca antes lo había hecho.

Elude a uno, a dos, a tres y los deja agonizando en el centro del campo de juego. No se la desata. Es increíble, nunca antes imaginado. Pareciera que es mágico ese momento en el que la lleva entre sus pies. Esta vez ignora a Díaz, al Flaco, a Luis, hasta al técnico. Todos aclaman que la suelte, que se la preste un rato, pero no está entre sus planes regalársela a nadie. Mira el arco, lo tiene entre ceja y ceja. Está vez no agudiza sus sentidos, si no su pierna. Apunta el cañón hacia el ángulo izquierdo y de zurda define majestuosamente. Inolvidable, mágnifico. Su nombre resuena en todas las noticias. El idilio entre la gente y Él va a ser eterno, porque existen fuegos que no logran extinguirse y éste es uno de ellos.”

Observo todos los detalles que cambiaron, como el tablón se convirtió en cemento. Como la tribuna que faltaba atrás del arco, ahora alberga miles de emociones, hasta una pantalla gigante. Los escalones son más altos. El césped es más verde, no hay huecos tapados con arena. La pequeñas cornetas de la “Voz del Estadio”, son ahora parlantes de última generación. El alambrado no está oxidado, porque ya no pueden treparse como antes al convertir. Hasta me parecen más chicos los arcos, o será que estoy grande. Él volvió para quedarse. Volvió para hacerme sentir. Pienso en el tiempo que perdí sin Él. Porque lo dejé olvidado en un cajón. Lo dejé colgado en un cuadro. Lo dejé en una colección de perchas. Él soy yo, y siempre lo voy a ser. Aunque los años pasen, las grandes hazañas no se olvidan.

Por Aylén Escamilla

E

l amateurismo se caracterizaba por tener muchas cosas fuera de lo común. Desde la vestimenta que utilizaban los jugadores, hasta el estilo de juego. Entre ingleses y estudiantes, (normalmente se jugaba como disciplina en los colegios), comenzaban a nacer los clubes argentinos. Uno de los primeros grandes arqueros que tuvo la Selección y Boca Juniors fue Américo Tesoriere, que utilizaba una polera de lana gruesa de cuello alto para atajar. Tampoco se tenía bien en claro cuál era su apellido y comenzaron a llamarlo Tesoriero. La prensa se sumó a ese error y finalmente transformaron su apellido a Tesorieri, como hoy es conocido. El amor por el fútbol y por la literatura preponderaron en la historia de vida de este personaje.

El descendiente de genoveses, nació en Barracas el 18 de marzo de 1899. Creció y se crió a pocas cuadras de La Boca. Debutó en Club La Aurora, en un partido en el que

el arquero titular del club se había ausentado y él lo remplazó. Ese mismo día atajó un penal y se ganó el puesto. Pasó a las inferiores de Boca en 1916. Dos años más tarde llegó a Primera, donde se desempeñó hasta 1927, con la interrupción de un sólo año (1921) donde jugó en Sportivo del Norte, actualmente conocido como Club Atlético Colegiales.

A pesar de tener una contextura física que no se compara con los jugadores de hoy, ya que medía 1,70 y pesaba 63kg, “Mérico” logró conquistar doce títulos locales y dos internacionales en Boca. Además, participó en seis ediciones de la Copa América con la Selección Argentina, de las cuales obtuvo dos (1921 y 1925). En 1921 y 1924, mantuvo la valla invicta. En la segunda ocasión, pese a haber perdido, el equipo de Uruguay lo levantó en andas para que el público lo ovacione. Era muy querido por los simpatizantes de Boca. Le dedicaban el cántico: “Tenemos un arquero que es una maravilla.

Ataja los penales sentado en una silla”.

Más allá de toda la gloria obtenida como futbolista, siempre tuvo pasión por la escritura. No sólo tenía un desempeño poético abajo de los tres palos. Atajadas magistrales, sacando hasta la pelota más difícil.

También tuvo siempre actitudes dignas de un romántico: En un duelo ante El Porvenir, donde Boca ganaba 3 a 0 con pocas situaciones, el club de Gerli intentó convertir todo el partido. Se quedó con un bombazo en la línea y le pidió al árbitro que les cobre el gol. Terminó su corta a carrera y salieron a la luz muchos poemas escritos por el golero. La más conocida es: “Poema narrativo para Yonedick”, dedicado a un jugador y canchero de River en aquella época. Escribía historias dentro y fuera de la cancha.

Poema narrativo para Yonedick.

Américo Tesorieri

Era un muchacho saquito gris de cambrona, quien, con el “Mochuelo” se iba de rabona camino de la Isla Demarchi, río por medio, donde había dos canchas: la de Boca y la de River; un par de cuadras separaban la agria realidad. Marchaban, peregrinos alucinados, hacia dos catedrales -en realidad dos desnudas casillas de madera- y como pobres mendicantes pedían una gracia: que les prestaran por unos minutos una vieja pelota convertida en nueva y hermosa por ojos de infancia.

De la una los echaban como perros apestados, en la otra los recibían como ángeles traviesos. ¿Para qué recordar ahora el nombre de aquéllos? Pero el tuyo “Yonedick”, bohemio generoso, (tolerante), insider magistral y canchero del River de 1911, vive enternecido en la nostalgia de los años transcurridos. Igual que ayer te vemos de zuecos, con la cortadora, de perfil al gran río con botes pesqueros de vela latina, cortando la gramilla de la cancha de tus hazañas y en tu graciosa jerga anglo-criolla dar la bienvenida y la pelota a dos raboneneros que no olvidan tu nombre ya olvidado.

Era el de John Diggs, para nosotros y por siempre, “Yonedick”.

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Por Adalberto Díaz Meraz

INVASIÓN ARGENTINA EN LA LIGA MX

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D

esde la implementación de la polémica regla 10/8 (10 extranjeros y 8 mexicanos en cada convocatoria para un partido) y la eliminación del límite de extranjeros desde el Torneo Apertura 2016, el aluvión de inmigrantes ha ido en aumento, provocando críticas de los medios y los hinchas, que cuestiona la calidad o aporte de algunos jugadores y la eminente pérdida de identidad, además de limitar oportunidades o complicar la salida al jugador originario.

Históricamente, el fútbol mexicano ha sido netamente importador de talento, más que exportador. Contrario a lo que ocurre en otros países, en especial en Sudamérica, donde los clubes se sostienen vendiendo a sus mejores talentos y formando nuevos valores que aspiran a migrar al exterior para ganar más dinero y tener una mejor proyección en su carrera. Algo que en México no ocurre, ante los altos sueldos que se pagan y la poca o nula motivación del futbolista por salir de su zona de confort y lujos.

Para el recién comenzado Torneo Apertura 2017 y después del cierre del mercado de pases el pasado 31 de enero, la cantidad de extranjeros y naturalizados llegó a 208, de los cuales sobresalen mayoritariamente los sudamericanos, con 70 argentinos, 33 colombianos, 22 uruguayos, 18 chilenos, 15 paraguayos, 12 brasileros, 9 ecuatorianos y 4 peruanos.

A diferencia de lo que pasa en otros países latinoamericanos, la cultura deportiva de los hinchas, las expectativas de los medios y directivos mexicanos es muy distinta, con respecto a la exigencia y el rol del jugador extranjero: Tiene que marcar diferencia con el resto del plantel, ser la figura, el líder. Se los contrata para que sean las estrellas o referentes del equipo y claro está, generar el espectáculo que lleve gente a la tribuna.

No son un jugador más, como acá.

No todo lo que Brilla es Oro. Según una encuesta de Marzo de 2016, publicada en el portal Deportivo “Fútbol Total”, los peores refuerzos extranjeros del Torneo Apertura 2016 fueron: El argentino Alejandro Gagliardi del Morelia con 1 gol en 339 minutos, el uruguayo del América Brian Lozano con sólo 116 minutos y el volante chileno Mathias Vidangassy de los Pumas de la UNAM, con 1 gol en 6 partidos.

Otro que no tuvo el desempeño esperado fue Pedro Gallese, arquero de la Selección de Perú (quien fue pretendido por River como reemplazo de Barovero), recibiendo 31 goles en 14 partidos.

LAS JOYAS Los destacados en el Torneo Apertura 2016 fueron cinco sudamericanos. Entre ellos se encontró Silvio Romero, ex Lanús, que jugando para el América convirtió diez goles y dos asistencias en 16 partidos. Además de dos goles en el Mundial de Clubes de Japón.

Otro que la rompió fue Marcelo Barovero, pese a un inicio dudoso y con varios errores infantiles que costaron puntos al recién

ascendido Necaxa. El “Trapito” recibió sólo 21 tantos en 19 partidos de Liga y Liguilla, además de mantener su arco invicto durante cinco partidos.

Cabe destacar también, la buena actuación de Rogelio Funes Mori (Monterrey), con 10 anotaciones en 1241 minutos; y Mauro Boselli goleador y bicampeón de Goleo Individual en 2014 y 2015 con el León, sumando 89 goles desde su llegada a México.

Christian “Chacho” Giménez, ex Boca e Independiente, con 36 años es el jugador extranjero más veterano.

ARGENTINOS EN LA LIGA DE MEXICO América: Agustín Marchesin, Paolo Goltz y Silvio Romero . DT: Ricardo La Volpe.

Atlas: Oscar Ustari y Matías Alustiza.

Chiapas: Federico Crivelli y Jonathan Fabbro.

Chivas: DT: Matías Almeyda.

Cruz Azul: Christian Giménez, Julián Velázquez y Gabriel Peñalba.

León: Guillermo Burdisso, Mauro Boselli, Germán Cano y Diego Novaretti. DT: Javier Torrente.

Monterrey: José María Basanta, Rogelio Funes Mori, Nicolás Sánchez y Jonatan Cristaldo.

DT: Antonio Mohamed.

Morelia: Facundo Erpen, Emanuel Loeschbor y Gastón Lezcano.

Necaxa: Marcelo Barovero, Jonás Aguirre, Claudio Riaño, Maximiliano Barreiro y Fabián Espíndola.

Pachuca: Franco Jara.

Puebla: Alexis Canelo, Damián Schmidt, Iván Centurión, Gabriel Esparza, Cristian Campestrini, Claudio Pérez y Federico González.

Pumas: Franco Faría.

Querétaro: Neri Cardozo, Juan Forlín, Miguel Ángel Martínez y Emanuel Villa.

Santos Laguna: Emiliano Armenteros, Carlos Izquierdoz y Julio Furch.

Tigres: Nahuel Guzmán, Damián Alvarez, Guido Pizarro, Ismael Sosa y Lucas Zelarayán.

Tijuana: Ignacio Malcorra, Milton Caraglio, Juan Manuel Lucero, Damián Pérez, Emanuel Aguilera, Jorge Alberto Ortiz, Matías Pisano y Guido Rodríguez.

Toluca: Gabriel Hauche, Jesus Méndez, Rubens Sambueza, Pablo Barrientos, Enrique Triverio y Rodrigo Gómez.

Veracruz: Martín Bravo, Daniel Villalba, Cristian Pellerano, Cristian Erbes, Rodrigo Noya, Matías Cahais, Luis Ojeda, Lucas Rodríguez y Leandro Velázquez.

GABRIEL HAUCHE

MATIAS ALMEYDA

NAHUEL GUZMAN

NERI CARDOZO

OSCAR USTARI

ROGELIO FUNES MORI

P

repárense y abróchense los cinturones porque la magia de la NBA regresa para tomar vuelo. Y es que el nuevo juego de las estrellas llegó. La edición número 66 de la gran jornada festiva del baloncesto en Estados Unidos se disputará el 19 de Febrero en New Orleans. Será la tercera ocasión que esta sede acoja a los diferentes basquetbolistas sobresalientes de la primera mitad de la temporada regular.

El partido principal lo animarán los jugadores seleccionados que integran las plantillas de las Conferencias Este vs la Oeste.

Además, el viernes 17 se llevará a cabo el Rising Stars Challenge y el sábado 18 habrá distintos concursos de Shooting: habilidades, triples y volcadas.

Por Edgardo Martínez

LA SEDE Los partidos se llevarán a cabo en el estadio Smoothie King Center que presenta una capacidad para 17.791 personas. Las anteriores visitas habían sido en 2008 y 2014. La construcción del pabellón finalizó en 1999 (desde 2002 el equipo de New Orleans Pelicans hace de local ahí). Además, durante el Huracán Katrina, en 2005, equipos médicos lo utilizaron para desarrollar su trabajo.

CALENDARIO DIA 1 Se jugará el “Rising Stars Challenge”. Es la tercera vez que se produce este tipo de partido, integrado por jugadores Rookies (jugadores de primer año) y Sophomores (de segundo año), representando un equipo de USA. Ante un equipo formado por sus pares de primer y segundo año, del MUNDO. El cotejo consta de dos tiempos de 20 minutos. Las plantillas están integradas por 10 jugadores.

Anteriormente, esta competencia era protagonizada, solo, por Rookies vs Sophomores.

El último MVP- jugador más valioso del partido- fue el estadounidense, Zach Lavine.

DÍA 2 Juego de triples: Conocido como “Shooting Stars”. Está compuesto por cuatro equipos y tres jugadores en cada uno que representen a la franquicia (una ex leyenda, un jugador NBA y otra de la WNBA). Consiste en tirar al aro desde diferentes distancias y posiciones.

Deben completar una serie de seis lanzamientos y sólo puede tirar un jugador por posición. En el último, que es desde mitad de cancha, pueden intentarlo todos. Por lo tanto, hay que encestar y hacerlo lo más rápido posible.

Lideran la tabla histórica: San Antonio Spurs y Team Bosh, el último tricampeón, integrado por Chris Bosh, Swin Cash y Dominique Wilkins.

Juego de habilidades: Integrado por cuatro jugadores de diferentes franquicias. Cada uno tiene que superar obstáculos, como driblar y encestar canastas, hasta finalizar la prueba. Debe tenerse en cuenta el factor del tiempo. Pasan dos a la final y se repite la prueba para definir el ganador.

Steve Nash, Damian Lillard y Dwyane Wade comparten el record con más títulos, dos para cada uno.

Concurso de triples: Es uno de los más atrayentes y está compuesto por ocho participantes. El juego consiste en encestar la mayor cantidad de pelotas. Hay cinco balones desplegados a lo largo del arco de tres puntos: uno al principio, otro en el medio, otro al final y dos a 45 grados del aro. De los cinco balones, cuatro valen un punto y el último, el multicolor, cinco. Se desarolla en una primera ronda, de la que los tres sobresalientes compiten en la instancia final.

Los últimos ganadores de la competencia son Curry y Thompson. Ambos integrantes de Golden State Warriors.

Larry Bird (ex Boston Celtics) y Craig Hodges (ex Chicago Bulls) tienen el record con tres concursos ganados.

Volcadas: Cierra la jornada del sábado. Está compuesto por cuatro participantes que deben lograr los mates más espectaculares e ingeniosos para llevarse el premio. La puntuación está a cargo de un jurado, en su mayoría, compuesto por ex jugadores estrellas de la Liga. Luego, en la instancia final de la competición es el público quien participa y puede votar para elegir al ganador.

El último bicampeón es el externo de Minnesota Timberwolves, Zach Lavine.

Los jugadores que se presentan en cada concurso suelen ser invitados en base a sus estadísticas personales durante la temporada. Los únicos que repiten sí o sí, son los campeones defensores de cada concurso.

DÍA 3 La plantilla está integrada por los cinco jugadores titulares (elegidos por aficionados, medios de comunicación y jugadores) Por su parte, los entrenadores de la NBA se encargan de elegir a los suplentes. El All-Star Game es el broche de cierre. En los primeros tres cuartos reluce un juego vistozo y lujoso por parte de los integrantes de las Conferencias. Si bien es un amistoso y se prioriza el entretenimiento, en el último período se vio reflejada la competitividad y el orgullo de los equipos para tratar de llevarse el partido y el premio al jugador más valioso. Este año la plantilla está integrada por:

ESTE KYRIE IRVING (CLE) DEAR DEROZAN (TOR) LEBRON JAMES (CLE) GIANNIS ANTETOKOUMPO (MIL) JIMMY BULTER (CHI) SUPLENTES ISAIAH THOMAS (BOS) KYLE LOWRY (TOR) KEMBA WALKER (CHA) PAUL GEORGE (IND) KEVIN LOVE (CLE) PAUL MILLSAP (ATL) JOHN WALL (WAS)

VS.

OESTE STEPHEN CURRY (GSW) JAMES HARDEN (HOU) KEVIN DURANT (GSW) KAWHI LEONARD (SA) ANTHINY DAVIS (NOP) SUPLENTES RUSSEL WESTBROOK (OKC) KLAY THOMPSON (GSW) GORDON HAYWARD (UTA) DEMARCUS COUSINS (SAC) DRAYMOND GREEN (GSW) DEANDRE JORDAN (LAC) MARC GASOL (MEM)

DATOS El jugador activo que tiene más participaciones es Lebron James. The King tiene 13 actuaciones.

Este año debutan Giannis Antetokounmpo, Kemba Walker, Gordon Hayward y DeAndre Jordan.

El último MVP es el base de los Oklahoma City Thunder, Russell Westbrook. El que más títulos tiene es Bob Pettit y Kobe Bryant con cuatro cada uno.

En 2005 y 2011 participó Manu Ginóbili.

QUE VIVA SIEMPRE LA LUCHA