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La carta. Alcanzamos el número cien
from Revista EC 100
Manuel de Castro _ Secretario General de EC entre 2001 y 2009
ALCANZAMOS EL NÚMERO CIEN
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Nuestra revista de Escuelas Católicas alcanza el número 100. Un hito que habla por sí solo de la vitalidad y la buena salud de la que goza. Nació hace 16 años con un doble objetivo. El primero de ellos, ser un instrumento más de consolidación de la “unidad funcional” establecida entre FERE-CECA y EyG recientemente iniciada. El segundo, modernizarla lo más posible poniéndola a la altura de las revistas más prestigiosas del momento.
La consecución del primero de los objetivos no fue una tarea fácil. Suponía la desaparición de las revistas que tanto FERE-CECA como EyG publicaban desde hacía ya bastantes años, para fundirse en una única y nueva revista. Una fusión que nacía como consecuencia lógica de la “unión funcional” entre ambas instituciones y que tenía como objetivo el consolidarla. La nostalgia, las dudas, las desconfianzas y los temores (muchos de ellos infundados), pero también la ilusión, la empatía y las ganas de trabajar juntos eran parte de los sentimientos que afloraban espontáneamente entre el personal de los departamentos de comunicación de ambas instituciones y de quienes teníamos la responsabilidad de hacer realidad la unidad institucional. La labor de entendimiento entre Victoria Moya y Eva Díaz, responsables de las anteriores revistas, fue determinante para superar todos los obstáculos.
El segundo de los objetivos, la modernización de las anteriores revistas, cuya estructura llevaba tiempo sin cambiar, se ha alcanzado de manera notable. La Revista EC, como el buen vino en las barricas, ha ido mejorando con el paso del tiempo. Nos encontramos ante una revista moderna, equilibrada en el sumario y con artículos de alto interés para su público, los centros educativos. Una revista bien maquetada y proporcionada entre el texto y la imagen, con papel de calidad y sin exceso de publicidad. Características todas estas que la hacen atractiva y que explican la vitalidad que la ha hecho llegar a su número 100 plena de salud.
La percepción que los centros educativos tenemos de la misma coincide fundamentalmente con lo que acabo de exponer. En ella encontramos valoraciones e informaciones sobre el devenir de la política educativa nacional vista desde nuestros legítimos intereses como escuelas católicas, artículos de fondo, tanto de temas educativos como otros más propios de la gestión de los centros, y noticias de las actividades más relevantes y significativas que realiza la sede, las instituciones y los centros educativos católicos. En definitiva, se trata de una revista ideada y construida pensando en las entidades titulares y en la vida de sus centros. En este sentido completan las revistas autonómicas que se ciñen más a su propio entorno.
La publicación del número 100 es, por tanto, una buena oportunidad para felicitarse por trabajo realizado, pero, sobre todo, para seguir con el mismo empeño y aún mayor, si cabe, en la mejora continua de este instrumento tan necesario para la buena guía de las instituciones titulares y de los colegios que les pertenecen.
