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Nicaragua TRAS RECUPERARSE VOLVERÁ A DESACELERAR
from Edición E&N-277-Capitanes de la Aviación: centroamericanos que conquistan los cielos de América
Optimismo Por Ied
La economía nicaragüense ha venido marcada por una crisis política interna y la pandemia que la llevó a tres años de recesión, entre 2018 y 2020, los primeros dos de ellos con retrocesos superiores al 3%. Ovidio Reyes, presidente del Banco Central de Nicaragua, pronostica que la economía crecerá entre 3,5% y 4,5% en 2022, luego de un incremento del 10,1% en 2021.
Los rubros de servicios y el turismo experimentaron una recuperación, tras el parón de la pandemia.
Pero el buen momento de 2021 y 2022 no seguirá replicándose. El Banco Mundial estima que Nicaragua creció alrededor del 4,1% en 2022 y desaceleraría al 2,0% este año.
La inflación permanece como uno de los grandes desafíos. Nicaragua sería el país con los mayores niveles de aumentos de precio en 2022 10% según el Fondo Monetario Internacional y el indicador desaceleraría al 5,5% en 2023.
En el aspecto positivo, las exportaciones de Nicaragua se beneficiaron de los precios de las materias primas agrícolas y del sector primario, como el oro y el café.
Los agentes económicos exportaron US$7.284,1 millones, un 15,5% de salto anual. Sin embargo, las importaciones aumentaron a un mayor ritmo, del 21,3%, a US$9.315,2 millones, en datos a noviembre del BCN.
Reyes celebró una recuperación de la Inversión Extranjera (IED) tras una caída que adjudicó al Covid.
Según información de la Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano (SECMCA), al tercer trimestre de 2022 Nicaragua captó US$1.160,6 millones en IED.
“La pandemia puso nerviosos a muchos inversionistas y es claro que se haya desacelerado”, analizó. Sin embargo, datos de SECMCA muestran que la IED nicaragüense en el año prepandemia 2019 (US$503 millones) fue menor que la de 2020 (US$746,5 millones).
La expectativa del BCN es que al cierre del año ingresen de US$1.300 a US$1.400 millones, cifra impulsada sobre todo por la reinversión de empresas ya establecidas en el país.
Además, Nicaragua está beneficiándose de los ingresos por remesas, que hasta septiembre habían subido en 45% según la Comisión Económica para América Latina (CEPAL).
