BOLETIN OFICIAL DE AMEC • CASA DE ALABANZA 31 de marzo de 2019 • Volumen XIV • No. 685
NUESTRO HORARIO
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as reflexiones anteriores nos permitieron comenzar el análisis de las herramientas que nos ofrece la Palabra de Dios para capacitarnos para lidiar con los escenarios tenebrosos que enfrentamos en este tiempo. Los lectores de esas reflexiones se habrán percatado de la importancia que le hemos dado al Libro de Proverbios como parte de esta capacitación.
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l lector debe haber visto que ese libro (el de Proverbios) nos ofrece herramientas ilimitadas para esta tarea. Tengo que confesar que este libro fue utilizado con mucha frecuencia por casi todos aquellos adultos que Dios puso en mi camino para adiestrarme y velar por mí durante mi infancia. Es por esto que ocupa un lugar preferencial en el estante de referencias y herramientas que guardo celosamente en mi corazón. Tal vez no cito sus pasajes con frecuencia, pero sus axiomas y declaraciones informan casi todos los ejercicios exegéticos, homiléticos, parenéticos (de consejo moral) y prácticos que realizo.
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a reflexión publicada el 24 de julio de 2011 nos abre las puertas para las discusiones y el análisis que queremos desarrollar en esta ocasión utilizando las enseñanzas del libro de Proverbios para apuntalar las enseñanzas que queremos compartir. Veamos algunos párrafos de esa reflexión: El Heraldo, 24 de julio de 2011 “En esta reflexión nos ocupamos de otro de esos monstruos; el de la sensualidad. En la reflexión anterior observamos que darle rienda suelta a los monstruos que ya hemos considerado, nos coloca en el mismo escenario de los
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poseídos por el demonio y en el de aquellos que se rinden ante el frenesí provocado por la corrientes escatológicas sacadas de contexto y que operan sin sobriedad. El monstruo que analizamos aquí nos coloca en escenarios de irracionalidad y conductas destructivas.
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s muy cierto que hay que aseverar que la sexualidad humana es un don de Dios y que ella no es una debilidad o un pecado. Pero hay que reconocer que cuando ella es practicada fuera de las reglas bíblicas la misma abre puertas para que desaten una serie de ataques y de tormentas que son capaces de llevar a cualquiera a la ruina y a la destrucción.
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os escritores del libro de los Proverbios nos regalan una infinidad de recursos para tratar este tema. Por ejemplo, en Proverbios 2 encontramos una invitación a reflexionar sobre la necesidad de procurar la sabiduría e inclinarse a la prudencia (el concepto debe ser traducido como “inteligencia:” H8394), como alguien que busca oro o plata. En esa invitación se identifica que la fuente de toda esa riqueza es el Señor, porque todos esos tesoros salen de su boca. El resultado de ese esfuerzo es que seremos preservados y guardados de algunas amenazas. Entre ellas se encuentran los seres humanos que patrocinan y viven de la corrupción. También encontramos en esa lista a alguien que el proverbista llama la “mujer extraña,” concepto que puede ser ampliado en la post-modernidad para incluir al “hombre extraño.”
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n esfuerzo similar a este lo encontramos en Proverbios 6:20-25, cuando el escritor de ese pasaje nos conmina a guardar los mandamientos (Dt 5:21-22), y no dejar las enseñanzas y las reprensiones de nuestras madres para que podamos ser capaces de ser guardados de lo que él llama “la mala mujer,” de la “blandura de la lengua de la mujer extraña,” y de las
capacidades que tiene esta de capturarnos con su hermosura y con su mirada (nota: no olvide incluir aquí al hombre).
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ay muchos otros pasajes similares a estos en ese libro, algunos de los cuales serán considerados un poco más adelante. Del análisis de estos se desprende algo muy obvio; que los escritores de ese libro están describiendo y definiendo un campo de batalla que tiene que ser estudiado con cuidado y entendido de manera racional. En otras palabras, hay que conocer dónde están los frentes de batalla en este conflicto y cómo se opera allí. Esa es la primera clave para vencer esta manifestación del monstruo; hay que entender cómo opera ese campo de batalla.
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na de las claves hermenéuticas que se ofrecen en estos pasajes la obtenemos analizando el concepto “codiciar” (Proverbios 6:25). Este concepto (H2530) es usado en Gn 3:6 para describir una reacción peligrosísima que llevó al ser humano a desafiar a Dios comiendo de la fruta prohibida. Es usado en Dt 7:25 para alertar al pueblo sobre la necesidad de cuidarse de esto cuando comenzaran a contemplar las esculturas de oro y de plata de los pueblos que conquistarían en el camino a la tierra prometida. Es usada en Jos 7:21 para describir la reacción inicial que provoca que un hombre llamado Acán decida retener y esconder un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos; “lo cual codicié y tomé.” También es usado en Miq 2:2 para describir el génesis de las conductas de los líderes corruptos (“porque tienen el poder”), quienes no vacilan en orquestar planes para robar heredades, robar cas y oprimir seres humanos, familias enteras y las herencias de estas.
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l énfasis de Proverbios 6 es no hacerlo y no hacerlo en el corazón, entre otras cosas porque
la vida mana de allí (Pro 4:23). Es importante señalar que la Biblia identifica esta actitud o este sentimiento como un tipo de idolatría y por lo tanto de soberbia.
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s interesante que cuando comprendemos esto nos percatamos de que el problema comienza cuando deseamos lo que vemos, luego lo queremos para nosotros y terminamos queriéndolo a cualquier precio. El problema se complica cuando comprendemos que hemos llegado a otro nivel en la generación postmoderna; ahora deseamos lo que imaginamos. Y con la ayuda de la Internet no se necesita de mucha imaginación para la construcción y el desarrollo de aberraciones.
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ara entender esto tan solo basta articular algunos de los deseos secretos en una sociedad “airbrushed,” (sin faltas), en donde todo se retoca por computadora para que luzca perfecto y las crisis de los artistas ante una televisión de alta definición (HD), en la que las arrugas y las faltas ya no se pueden disimular. Hay que aceptar que las fantasías sobre la mujer o el hombre perfecto ya no se imaginan, sino que se adquieren o se ensamblan por internet. Esta conducta nos lleva a fantasear y fantaseamos tanto que terminamos rechazando la verdad, porque no podemos distinguir entre la fantasía y la realidad. ¿Un ejemplo?: la película Avatar. Esto nos lleva cada vez más lejos de la realidad. Casi siempre nos justificamos creyendo que las fantasías no nos harán daño.
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jemplo de esto son los juegos con videos pornográficos entre parejas. Los cónyuges no se percatan que ambos terminan aceptando los roles de los actores de esos videos. Todo esto sin ni siquiera mencionar las líneas de mercadeo televisivo. ¿Se ha preguntado usted por qué hace falta una mujer o un hombre con poca ropa en un anuncio de ron o de automóviles, o de una tarjeta de crédito como Visa Black Card? Es un intento velado, que busca aprovecharse de la tendencia moderna a relajarse de las tensiones valiéndose de las fantasías.
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as fantasías a este nivel apuntan a una falta de salud mental. O sea, que esto trata entre
otras cosas de falta de cordura. La Biblia toca esta área con una sabiduría insuperable. Tomemos como ejemplo lo que dice Pro 9:13-18. Allí se nos dice que la mujer (podemos añadir al hombre) insensata hace mucho tumulto y ruido (“hâmâh” H1993), que son fáciles de seducir (lo traducen como “simple”: “pethayûth” H6615), que no saben nada o que son un fracaso, y que se aprovechan de aquellos a los que la falta la cordura o que no tienen corazón. Luego de estas frases de advertencia el proverbista inserta unas frases lapidarias: 17 Las aguas hurtadas son dulces, Y el pan comido en oculto es sabroso. 18 Y no saben que allí están los muertos; Que sus convidados están en lo profundo del Seol. (Prov 9:17-18)
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a Biblia nos enseña a mantenernos lejos de las fantasías y muy cerca de la realidad. En la carta a los Filipenses, el capítulo 4 y los versos 8-9 nos dicen en que cosas debemos pensar; particularmente de cara a situaciones de mucho estrés. Esto es entonces una batalla de la mente y siendo esto así y sabemos la receta paulina que encontramos en Romanos 12 y en 2 Cor 10:3-5. ¿Qué armas adicionales poseemos para enfrentar este campo de batalla? Esa es la segunda clave para vencer esta manifestación del monstruo: tenemos que conocer y entender las armas que poseemos y cómo es que estas operan en ese campo de batalla. El proverbista dice que es un asunto de sabiduría y que aquellos que caen en esto es porque están faltos de ella (Pro 2:1-6). ¿Cómo se puede mantener uno puro?: guardando la Palabra de Dios (Sal 119:9). El proverbista dice que la sabiduría nos guarda, que Dios preserva el camino y que Él es nuestro escudo (Pr 2:6-8). Dios es un escudo contra los ataques sensuales y lujuriosos, porque la sabiduría que él da es un antídoto contra el entendimiento embrutecido.
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s importante destacar que las tentaciones sexuales son un ataque contra lo que se hace bien y que no somos sabios cuando cedemos. Satanás es un experto usando un vocabulario seductor, que suena bien y que nos parece bien rendirnos ante éste. Satanás es un experto
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crea las oportunidades; el texto bíblico del capítulo siete (7) del libro de Proverbios describe a una mujer que estaba sola, que ha abandonado al marido (Prov 7:7-27). Ese capítulo señala que aquellos que caen en estas redes carecen de entendimiento (vs 7) y que al caer en esta trampa van como buey al degolladero y como necio a las prisiones para ser castigados (vs 22).
señalado volverá a su casa. 21 Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras, Le obligó con la zalamería de sus labios. 22 Al punto se marchó tras ella, Como va el buey al degolladero, Y como el necio a las prisiones para ser castigado; 23 Como el ave que se apresura a la red, Y no sabe que es contra su vida, Hasta que la saeta traspasa su corazón.
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s importante destacar el valor que los pasajes bíblicos le conceden a la sabiduría como herramienta fundamental para obtener la victoria en ese campo de batalla. El análisis de Proverbios 7 nos permite llegar a esta conclusión con absoluta certeza. 4 Dí a la sabiduría: Tú eres mi hermana; Y a la inteligencia llama parienta; 5 Para que te guarden de la mujer ajena, Y de la extraña que ablanda sus palabras. 6 Porque mirando yo por la ventana de mi casa, Por mi celosía, 7 Vi entre los simples, Consideré entre los jóvenes, A un joven falto de entendimiento, 8 El cual pasaba por la calle, junto a la esquina, E iba camino a la casa de ella, 9 A la tarde del día, cuando ya oscurecía, En la oscuridad y tinieblas de la noche. 10 Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro, Con atavío de ramera y astuta de corazón. 11 Alborotadora y rencillosa, Sus pies no pueden estar en casa; 12 Unas veces está en la calle, otras veces en las plazas, Acechando por todas las esquinas. 13 Se asió de él, y le besó. Con semblante descarado le dijo: 14 Sacrificios de paz había prometido, Hoy he pagado mis votos; 15 Por tanto, he salido a encontrarte, Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado. 16 He adornado mi cama con colchas Recamadas con cordoncillo de Egipto; 17 He perfumado mi cámara Con mirra, áloes y canela. 18 Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana; Alegrémonos en amores. 19 Porque el marido no está en casa; Se ha ido a un largo viaje. 20 La bolsa de dinero llevó en su mano; El día
n la próxima reflexión contextualizaremos este pasaje y ofreceremos otras armas y otras herramientas para este combate. Mientras tanto, permítame ofrecer aquí algunas alternativas provisionales y providenciales para la lucha contra el monstruo de la sensualidad: En primer lugar procure evite situaciones y ambientes cuestionables (Prov 5:4-8). Un alcohólico que quiere romper vicio no se sienta en una barra. Así mismo no se juega con las tentaciones sexuales. Evite las revistas “subiditas de color” y los programas de TV que juegan con esto. No explore esos lugares de Internet en los que esto se insinúa para luego explotarlo. Usted puede terminar siendo un adicto sexual. Resista la tentación de alquilar “videos sexys.” Huya de la inmoralidad sexual (1 Cor 6:18).
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n segundo lugar, trabaje en la construcción de una buena relación Matrimonial (Pro 5:1520). Si está casado, procure que su cónyuge lo “intoxique de amor.” En tercer lugar confiesen sus faltas unos a los otros (Sal 32:5; Pro 5:21). Por último, determine y decida ser obediente (Pro 5:7). Sabemos que aquellos que valoran su relación con Dios entienden que es mejor huir de una situación que poner en riesgo nuestra relación con el Eterno.
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or último, un consejo preliminar para aquellos que aún no se han casado. El matrimonio no es necesariamente la medicina para vencer en esta lucha. La prueba de esto la encontramos en que la mayoría de las conductas sexuales aberrantes
son practicadas por gente que está o ha estado casada.”
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omo hemos visto, esa reflexión nos señalaba la necesidad de encontrar herramientas adicionales para vencer ese monstruo. Ya sabemos que hay muchas de ellas diseminadas en toda la Biblia y en particular, en el libro de los Proverbios. Veamos a continuación uno de esos pasajes que nos regala ese libro y detengámonos a leerlo en varias versiones bíblicas: 1 Hijo mío, si recibieres mis palabras, Y mis mandamientos guardares dentro de ti, 2 Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; Si inclinares tu corazón a la prudencia, 3 Si clamares a la inteligencia, Y a la prudencia dieres tu voz; 4 Si como a la plata la buscares, Y la escudriñares como a tesoros, 5 Entonces entenderás el temor de Jehová, Y hallarás el conocimiento de Dios. 6 Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia. 7 El provee de sana sabiduría a los rectos; Es escudo a los que caminan rectamente. 8 Es el que guarda las veredas del juicio, Y preserva el camino de sus santos. 9 Entonces entenderás justicia, juicio Y equidad, y todo buen camino. 10 Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, Y la ciencia fuere grata a tu alma, 11 La discreción te guardará; Te preservará la inteligencia, 12 Para librarte del mal camino, De los hombres que hablan perversidades, 13 Que dejan los caminos derechos, Para andar por sendas tenebrosas; 14 Que se alegran haciendo el mal, Que se huelgan en las perversidades del vicio; 15 Cuyas veredas son torcidas, Y torcidos sus caminos. 16 Serás librado de la mujer extraña, De la ajena que halaga con sus palabras, 17 La cual abandona al compañero de su juventud, Y se olvida del pacto de su Dios. 18 Por lo cual su casa está inclinada a la muerte, Y sus veredas hacia los muertos; 19 Todos los que a ella se lleguen, no volverán, Ni seguirán otra vez los senderos de la vida. 20 Así andarás por el camino de los buenos, Y seguirás las veredas de los justos; 21 Porque los rectos habitarán la tierra, Y los perfectos permanecerán en ella, 22 Mas los impíos serán cortados de la tierra, Y los prevaricadores serán de ella desarraigados. (Prov 2:1-22, RV 1960).
DHH Haz tuyas mis palabras, hijo mío; guarda en tu mente mis mandamientos. 2 Presta oído a la sabiduría; entrega tu mente a la inteligencia. 3 Pide con todas tus fuerzas inteligencia y buen juicio; 4 entrégate por completo a buscarlos, cual si buscaras plata o un tesoro escondido. 5 Entonces sabrás lo que es honrar al Señor; ¡descubrirás lo que es conocer a Dios! 6 Pues el Señor es quien da la sabiduría; la ciencia y el conocimiento brotan de sus labios. 7 El Señor da su ayuda y protección a los que viven rectamente y sin tacha; 8 cuida de los que se conducen con justicia, y protege a los que le son fieles. 9 Sabrás también lo que es recto y justo, y estarás atento a todo lo bueno, 10 pues tu mente obtendrá sabiduría y probarás la dulzura del saber. 11 La discreción y la inteligencia serán tus constantes protectoras; 12 ellas te librarán del mal camino y de los hombres perversos, 13 de los que dejan el buen camino y se van por senderos oscuros, 14 que se divierten haciendo daño y festejan sus malas acciones, 15 que andan por caminos torcidos y se han desviado del recto sendero. 16 Te librarán también de la mujer ajena, de la extraña de palabras seductoras 17 que abandona al compañero de su juventud y olvida su compromiso con Dios. 18 Tomar el camino que lleva a la casa de ella es tomar el camino que lleva a la muerte; 19 los que entran en su casa ya no vuelven, jamás vuelven a recorrer el sendero de la vida. 20 Anda, pues, por el buen camino, y practica la conducta de los justos. 21 Porque los que viven rectamente y sin tacha vivirán para siempre en la tierra; 22 pero los malvados y traidores serán arrancados y expulsados de ella. NTV Hijo mío, presta atención a lo que digo y atesora mis mandatos. 2 Afina tus oídos a la sabiduría y concéntrate en el entendimiento. 3 Clama por inteligencia y pide entendimiento.4 Búscalos como si fueran plata, como si fueran tesoros escondidos. 5 Entonces comprenderás lo que significa temer al Señor y obtendrás conocimiento de Dios. 6 ¡Pues el Señor concede sabiduría! De su boca provienen el saber y el entendimiento. 7 Al que es honrado, él le concede el tesoro del sentido común. Él es un escudo para los que caminan con integridad. 8 Él cuida las sendas de los justos y protege a los que le son fieles. 9 Entonces comprenderás lo que es
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correcto, justo e imparcial y encontrarás el buen camino que debes seguir. 10 Pues la sabiduría entrará en tu corazón, y el conocimiento te llenará de alegría. 11 Las decisiones sabias te protegerán; el entendimiento te mantendrá a salvo. 12 La sabiduría te salvará de la gente mala, de los que hablan con palabras retorcidas. 13 Estos hombres se alejan del camino correcto para andar por sendas tenebrosas. 14 Se complacen en hacer lo malo y disfrutan los caminos retorcidos del mal. 15 Sus acciones son torcidas, y sus caminos son errados. 16 La sabiduría te librará de la mujer inmoral, de las palabras seductoras de la mujer promiscua. 17 Ella abandonó a su marido y no hace caso del pacto que hizo ante Dios. 18 Entrar a su casa lleva a la muerte; es el camino a la tumba.[a] 19 El hombre que la visita está condenado; nunca llegará a los senderos de la vida. 20 Tú, en cambio, sigue los pasos de los hombres buenos y permanece en los caminos de los justos. 21 Pues solo los justos vivirán en la tierra y los íntegros permanecerán en ella. 22 Pero los perversos serán quitados de la tierra, y los traidores serán arrancados de raíz.
justicia, la honestidad y la igualdad, y todo buen camino. 10 La sabiduría entrará en tu corazón, y te gustará el conocimiento. 11 La prudencia te protegerá, y el entendimiento te cuidará. 12 La prudencia te pondrá a salvo de la mala vida, de los que tergiversan todo con sus palabras; 13 de los que se apartan del buen camino para andar por caminos tenebrosos; 14 de los que se alegran de hacer el mal y festejan cuando el perverso todo lo echa a perder; 15 de los que andan por caminos torcidos y se desvían del camino recto. 16 La sabiduría te librará de la mujer ajena, de la extraña de palabras seductoras, 17 que se casó cuando era joven, pero abandonó a su marido, olvidándose de su compromiso con Dios. 18 Irse con ella a su casa es como ir a la muerte; si la sigues, te llevará a la tumba. 19 Los que se enredan con ella no regresarán, ni alcanzarán los caminos de la vida. 20 Así que sigue el camino de la gente buena y recorre el sendero de los justos, 21 pues la gente honesta habitará en la tierra y la gente intachable permanecerá en ella. 22 En cambio, los perversos serán exterminados de la tierra, y los traidores serán arrancados de ella.
PDT Hijo mío, acepta lo que te digo y ten siempre presente mis mandamientos. 2 Presta atención a la sabiduría y conságrate de todo corazón a la inteligencia. 3 Llama con todas tus fuerzas a la inteligencia y pide a gritos entendimiento. 4 Busca la sabiduría como si fuera plata, como si fuera un tesoro escondido. 5 Entonces aprenderás a respetar al SEÑOR, y sabrás lo que es conocer a Dios. 6 Porque el SEÑOR es el que da la sabiduría; el conocimiento y la ciencia brotan de sus labios. 7 Él da sabiduría a la gente que es justa con los demás, y protege a los que viven honestamente; 8 cuida el camino de los justos y protege la senda de los que le son fieles. 9 También comprenderás lo que es la
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l análisis de este pasaje será el objeto de nuestras próximas reflexiones.
Pastor Frankie Parilla ........................................................... Hosp. Evelyn Quiñonez...................................................................Hogar Madelyn Fuentes ................................................................Hogar José M. Paniagua................................................................. Hogar Paula Rosario Fuentes....................................................... Hogar Miguel Gutierrez......................................................UPRCA- Hogar Elba Britto................................................................ UPRCA- Hogar
Favor de informar si desean que sus nombres continúen en la lista de enfermos del Boletín El Heraldo, pues serán actualizados semanalmente / (787) 256-3331