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Entrevista con el Director General
Entrevista con Pedro Malla, Director General de ALD Automotive España
Tras lo vivido en los últimos años se hace evidente que la recuperación económica y social tiene que ser necesariamente verde. ALD Automotive se proyecta como proveedor de la movilidad del siglo XXI, siendo cada vez más sostenibles y más digitales, impulsando la electrificación del parque automovilístico, abriendo camino a iniciativas de economía colaborativa y ofreciendo soluciones personalizadas y de valor para el cliente. Nos lo cuenta su Director General en España, Pedro Malla.
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En 2021 hemos visto cómo el sector de la movilidad sostenible acelera su crecimiento, ¿cuáles han sido los principales retos o desafíos este año para ALD Automotive? ¿Qué hitos destacaría de este año?
Afrontamos una realidad muy compleja, con acontecimientos que jamás habíamos vivido en nuestra vida, no solo como compañía, también como personas. Cuando todavía no nos hemos recuperado de la crisis sanitaria y sus consecuencias, estalla la guerra de Ucrania, con la crisis humanitaria y las consecuencias económicas que supone.
En el mundo del automóvil todas estas circunstancias han tenido su repercusión, consecuencias entre las que se encuentran los problemas de producción, un gran obstáculo para una industria que hasta ahora ha centrado su crecimiento en el incremento de las ventas. A esto se añaden las tendencias en el consumo, que cada vez integran con más peso el factor de la sostenibilidad, sobre todo entre las nuevas generaciones.
Esta transformación en los hábitos de consumo también viene acompañada por un giro en las políticas a nivel nacional y la normativa europea de movilidad, que animan al mercado hacia una movilidad más sostenible, que es hoy más estratégica que nunca.
Por tanto, el contexto nos dice que el modelo productivo actual es inviable y que no hay opción: hay que ser flexibles, adaptarse y transformarse. Este es sin duda el gran desafío, transversal a toda la compañía, que nos ha acompañado en 2021 y nos acompaña actualmente.
El Plan Move 2025 es nuestro camino hacia un negocio más sostenible, es la forma de alinear con objetivos medibles lo que está pasando en la sociedad y los cambios que queremos liderar desde la compañía. El Plan sitúa la sostenibilidad como elemento estratégico y transversal en ALD, para abordar una transición que es imprescindible”
Los retos nos hacen ser una compañía capaz de convertir los retos en hitos. Prueba de ello son los logros que hoy vemos desde el retrovisor. Como facilitar el uso del vehículo compartido, o el haber aprovechado la crisis de los componentes electrónicos, que afectó al desarrollo de implantación de mejoras y al retraso de entrega de vehículos, para apostar por la reutilización, alargando su vida útil a través de nuevos contratos en el mercado de segunda mano, con nuestro nuevo servicio ReDrive.
En el ámbito ambiental, este año hemos abordado el impacto de nuestras flotas en el cambio climático y la contaminación. Nuestro objetivo es que en 2025 el 30% sobre el total de vehículos en alquiler sean eléctricos. Este año, hemos alcanzado el 18%.
Por último, desde ALD vemos en la digitalización otro reto, una tendencia que ha llegado para quedarse. Creemos que no solo debe implicar hacernos más eficientes y mejorar procesos internos, sino también aportar valor a nuestros clientes, que perciban en esta transformación de los servicios una ventaja para mejorar su calidad de vida. En este ámbito, ha sido un éxito el lanzamiento, entre otros, del Acta de Entrega Digital, un servicio innovador que contribuye a optimizar los procesos de digitalización de la empresa y la experiencia del cliente a la hora de recibir su vehículo.
Estas acciones se enmarcan dentro de nuestro propósito de garantizar la movilidad en el día a día, de manera segura y sostenible, mediante soluciones innovadoras de movilidad. Un gran objetivo que nos llevó en 2020 a lanzar nuestro Plan Move, a 5 años. ¿En qué consiste esta hoja de ruta a 2025 y cuáles son los principales objetivos y acciones que recoge el Plan Move 2025? Tras su primer año en marcha, ¿cuál es el balance de los resultados?
El Plan Move 2025 es nuestro camino hacia un negocio más sostenible, es la forma de alinear con objetivos medibles lo que está pasando en la sociedad y los cambios que queremos liderar desde la compañía. El Plan sitúa la sostenibilidad como elemento estratégico y transversal en ALD, para abordar una transición que es imprescindible y que busca un equilibrio económico, social y medioambiental, crítico para el bienestar de las personas.
El plan persigue ambiciosos objetivos divididos en 4 ejes. Cada uno desarrolla acciones muy claras, para seguir avanzando y “moviéndonos”, porque movernos es vivir: la movilidad es una necesidad en sí misma pero también es una forma de vivir. Como primer eje está “Move for Customers”, queremos ser reconocidos como los proveedores de movilidad más innovadores.
Por otro lado, “Move for Growth” es un eje que nos sitúa en la dirección correcta para ser líderes globales en soluciones de movilidad sostenible, entendiendo el crecimiento desde el valor añadido que podemos aportar a nuestros clientes con nuevas soluciones y aliarnos con nuevos socios en el ecosistema de la movilidad. En este sentido, a nivel internacional nos hemos marcado alcanzar los 2,3 millones de vehículos para 2025.
Con el siguiente eje, “Move for Good”, situamos a las personas en el centro y eso nos lleva a asumir también un rol social, a través, por ejemplo, de medidas con las que nos comprometemos a ser un empleador responsable y contar con una cultura inclusiva. Lo hacemos a través de un gobierno ético que integra los criterios ASG (ambientales, sociales y de buen gobierno) en el 100% de las políticas, procesos y controles con partes interesadas externas. En este pilar de nuestra estrategia se engloban las medidas para reducir nuestra huella ambiental.
Por último, “Move for Performance”, para generar valor durante el ciclo económico, para crecer de forma rentable. Las personas y el compromiso corporativo se sitúan en el centro de la actividad de ALD. ¿Qué destacaría del papel que han tenido los profesionales de ALD durante este año, complicado a la hora de retomar el ritmo en un año de incertidumbre todavía marcado por la pandemia?
En ALD nuestro valor diferencial son las personas y la calidad humana que aportan a nuestros servicios. Ese factor personal se desarrolla con los clientes en función de cómo se desarrollan las personas en su ambiente laboral. Es crucial lograr el bienestar de las personas y por ello trabajamos cada día, por ser ese lugar atractivo para que las personas hagan crecer su talento. En este sentido, algo que nos enorgullece es haber sido nombrados Top Employer por quinto año consecutivo. Esto supone los más altos estándares de calidad en la gestión de personas, en aspectos como el desarrollo y la gestión del desempeño, el liderazgo y la cultura de empresa, entre otros aspectos.
Creemos que, si personalmente buscamos generar una sociedad más justa, humana y sostenible, el entorno laboral, al que dedicamos ocho horas diarias, también debe reflejar esta voluntad y, en la medida de lo posible, ser ejemplo. En este sentido, este año hemos trabajado, entre otras cosas, para conseguir un mínimo del 35% de mujeres en puestos directivos; actualmente la cifra es del 33%.
La digitalización está cada vez más presente en nuestras vidas y el sector de la movilidad. ¿Qué soluciones tecnológicas e innovadoras se están desarrollando desde ALD para mejorar el servicio y la experiencia del cliente?
La digitalización es una clave en la movilidad del futuro. Como decía antes, por la calidad de nuestros servicios y la experiencia del cliente. La digitalización es sinónimo de personalización, adaptabilidad y flexibilidad. Un ejemplo de los esfuerzos que estamos haciendo en telemetría y conectividad es el lanzamiento de ALD ProFleet en España, una solución mejorada de automóvil conectado, que brinda a los administradores de flotas y conductores el acceso a los datos de su vehículo conectado en tiempo real. La digitalización aporta innovación en todas nuestras áreas, desde el renting tradicional hasta los servicios a la movilidad. Desde la contratación digital hasta el portal para clientes, colaboradores y conductores y también su versión de aplicación para móvil (My ALD Drive), que hace posible realizar de forma rápida y sencilla trámites administrativos, análisis de flotas o cualquier otra consulta referente a los vehículos. ALD busca ser el proveedor líder global de servicios de movilidad sostenible. ¿Qué compromisos de mejora continua relacionados con el impacto ambiental supone este propósito?
Tenemos la responsabilidad de integrar el cuidado del medioambiente de forma transversal, adquiriendo compromisos en todas las áreas de la compañía, a través de medidas recogidas en nuestro sistema ambiental. Precisamente este año hemos renovado la certificación ISO 14001, evaluando y modificando los objetivos ambientales en abril y en noviembre.
Ser sostenible es en sí un proceso, y siempre es mejorable. Por ello, constantemente estamos buscando la circularidad en nuestra cadena de valor, como por ejemplo con la reutilización de los motores de vehículos siniestrados o el reciclaje de neumáticos. Como hito destacaría el gran logro que supone habernos certificado por la agencia internacional de calificación de la sostenibilidad Ecovadis, con categoría Platinum, el mayor rango que se puede alcanzar en esta certificación. Este reconocimiento responde al compromiso de la compañía con aspectos tales como el medioambiente, prácticas laborales, ética empresarial y las compras sostenibles.
La digitalización es una clave en la movilidad del futuro. Es sinónimo de personalización, adaptabilidad y flexibilidad”
Otro hito relevante es la serie de esfuerzos realizados para la medición de nuestra huella de carbono. Nuestro compromiso con el clima es reducir un 40% las emisiones de la compañía sobre la base de 2019. En la sede de España estamos poniendo en marcha un procedimiento de cálculo de huella de carbono para agilizar la toma de decisiones.
En lo referente a la gestión interna y gobernanza de ALD, en 2021 se han aprobado e incorporado 10 nuevas políticas y procedimientos internos para garantizar la gestión ética y responsable del negocio. ¿Qué aporta al desarrollo del negocio contar con herramientas de autorregulación, gestión y buen gobierno? ¿Cómo traslada ALD esta responsabilidad también a sus proveedores?
Integrar criterios ASG en la compañía es imprescindible para generar valor compartido con la sociedad a largo plazo. Los aspectos ambiental, social y de gobernanza son interdependientes y, por tanto, aportan las herramientas para llegar a ser una compañía del s. XXI y poder responder a lo que nos demandan los grupos de interés. Vivimos en un mundo cada vez más diverso. Esa diversidad se traduce en futuros managers, clientes y accionistas. Si yo en mi propia compañía no les doy su espacio, si no les doy oportunidades a todas estas personas, mi empresa será la que no tenga cabida en el futuro.
Entre la decena de nuevas políticas y procedimientos internos aprobados en 2021 para garantizar la gestión ética y responsable del negocio se pueden mencionar la actualización del Código de lucha contra la corrupción y el tráfico de influencias o los procedimientos para la declaración y gestión de conflictos de interés; para la gestión y aprobación de acciones de patrocinio, donaciones y mecenazgo; sobre el ejercicio del derecho de alerta y gestión del canal de denuncias; sobre gestión de regalos, comidas de negocios y eventos o el procedimiento de sanciones y embargos internacionales.
No solo es importante contar con políticas de buen gobierno internamente, sino trascender estos principios fuera de la compañía generando relaciones duraderas y de confianza con nuestros grupos de interés. En el caso de los proveedores, por ejemplo, se ha realizado la centralización del departamento de compras en 2021, para facilitar la transmisión de los criterios y unificarlos. Por tanto, significa asumir nuestro papel como líderes y el rol pedagógico que nos corresponde. La buena gobernanza es una cuestión de sentido común y de coherencia. No hay otra alternativa que ser sostenible. Para que avance no solo la compañía sino todo el sector, la colaboración entre todos los agentes es clave. En 2021 se han firmado numerosos acuerdos de colaboración tanto con entidades privadas como en el ámbito público. ¿Por qué incide tanto ALD en la colaboración? ¿Qué convenios destacaría de este año?
Si queremos ser líderes en la transición que queremos ver en el sector, no podemos caminar solos. Por eso, en
2021 hemos firmado una serie de alianzas con agentes clave del sector, como Automotive Glass Europe (AGE), Seguros Bilbao, Lynk & Co, Smart o ChargePoint. En este sentido, me gustaría destacar el acuerdo de colaboración con la start-up tecnológica especializada en servicios avanzados de movilidad eléctrica, Ozone Drive, para impulsar un nuevo servicio de consultoría que va a ayudar a reducir las emisiones de las flotas de sus clientes, a disminuir los costes de combustible y a potenciar la eficiencia energética de sus vehículos. Además, hemos avanzando en la colaboración públicoprivada, acelerando las tendencias de la participación de los ayuntamientos en la configuración de smart cities y nueva movilidad.
Asumir el liderazgo implica la responsabilidad de dar ejemplo y apoyar la sensibilización social de los distintos grupos de interés, como camino hacia el cambio. ¿Qué acciones de sensibilización se han emprendido desde ALD para hacer crecer la comunidad de conductores responsables, tanto en lo referente a la seguridad vial como a la formación ambiental?
El compromiso de ALD Automotive con la sociedad se refleja en el Plan de RSC, que nace del análisis de materialidad y está alineado con el Plan Move 2025. Pero no solo es algo que se recoge en planes y documentos escritos, sino que ese propósito da paso a la acción, como las iniciativas que llevamos a cabo para, por ejemplo, impulsar la seguridad vial con una jornada específica, un estudio y la promoción de la carrera Ponle Freno, la encuesta de movilidad realizada a toda la plantilla o el apoyo a la campaña “Límite de velocidad de 30 km/h”. En agosto se renovó la certificación de la norma ISO 39001 de Sistemas de Gestión de la Seguridad Vial. Respecto a la comunicación de ALD con sus grupos de interés, ¿qué acciones destacaría como ejemplo de transparencia y buen hacer?
Estamos decididos a generar valor compartido y, por ello, para nosotros la escucha a nuestros grupos de interés es imprescinsible para guiar la dirección que toma el negocio. En el segundo trimestre de 2021, ALD Automotive desarrolló un análisis de materialidad estratégica para establecer las directrices que deberán marcar la hoja de ruta del Plan de RSC 2025, basado en el Plan Move. Se trata de un análisis que integra un proceso de escucha activa, del que formaron parte 518 personas representantes de clientes, proveedores y empleados. De acuerdo con los resultados de este análisis, se propusieron una serie acciones a realizar para cada uno de los cuatro ejes indicados en el Plan Move 2025.
Por otro lado, en nuestras comunicaciones queremos incidir en la inclusión real de los ODS en la estrategia corporativa, como parte del modelo de negocio de ALD. Los compromisos con el Pacto Mundial a nivel de Grupo nos hace elevar la mirada como “empresa glocal”, que combina el liderazgo y compromiso global a través de Société Générale y ALD Internacional con el impacto y la estrategia local. Se trata de un proceso en constante evolución y mejora continua, basado en el equilibrio y la escucha activa de nuestros grupos de interés. Las mesas de movilidad, que queremos impulsar en 2022 son otra muestra de nuestro compromiso para hacer avanzar el sector de la mano de nuestros grupos de interés.
Mirando hacia el futuro, ¿cuáles son o serán los próximos retos de ALD? ¿Cómo se proyecta ALD para superarlos?
Somos parte de una recuperación económica y social que se promueve a través de los fondos Next Generation y el plan España Puede. Esta recuperación tiene que ser necesariamente verde, por lo que nos proyectamos como proveedores de la movilidad del siglo XXI, siendo cada vez más sostenibles y más digitales. ¿Cómo? Impulsando la electrificación del parque automovilístico, abriendo camino a iniciativas de economía colaborativa y ofreciendo soluciones personalizadas y de valor para el cliente. Vivimos en un mundo cambiante, donde los clientes van evolucionando también. El contexto global, las tendencias del sector y las exigencias de un consumidor consciente de su impacto, nos obliga a repensar nuestro modelo de negocio y ampliar la mirada hacia alternativas más sostenibles, hacia la diversificación. Por ejemplo, la electrificación cambia el modelo de fabricación de los vehículos y amplía su vida útil, porque su desgaste es menor. Los vehículos duran mucho más y nos hacen tener menos impacto.
Otro reto complicado es el que asumimos cuando hablamos de “regeneración”, que no se trata solamente de reducir o reciclar, sino de reutilizar. Para nosotros, reutilizar es algo vital. Desde el punto de vista empresarial, optimizo mis activos, pero si además esto está alineado con lo que quieren y necesitan mis usuarios, cumpliré sus expectativas. Por supuesto, también los accionistas tienen sus expectativas y hay que cumplirlas y para ello es importante ser grandes y estar a la altura, porque la inversión para el cambio también lo es.