historias de amor del siglo XX by elena yuguero

Textos: Patricia Alonso de Agustin Maquetaci贸n e ilustraciones: Elena Yuguero Martinez Imprime: Naturprint

â&#x20AC;&#x153; El amor es aquello que dura para siempre y a la vez es tan efimero como la flor de primaveraâ&#x20AC;?

Introduccion El amor, como todo, tiene su historia y la Historia está llena de historias de amor. Pero de todos los períodos dentro del proceso de evolución humana no encontramos un siglo tan “rápido” e intenso como el siglo XX; un siglo de extremos, donde la guerra se lleva al máximo exponente, pero también el amor; cien años de enfrentamientos y conflictos pero también de grandes pasiones sentimentales. A partir de 1900 los condicionamientos sociales en materia amorosa se transformarán a un ritmo vertiginoso y el amor encontrará progresivamente nuevas formas de expresión, sin que tengan apenas que ver los usos amorosos de principios de siglo con los de la década de los noventa. El “hasta que la muerte nos separe” tan usado en las uniones matrimoniales, ha ido perdiendo sentido a medida que la esperanza de vida se ha incrementado en los últimos cien años. Amar para toda la vida era un tipo de compromiso más factible en 1900, cuando la media de vida de una persona era de cincuenta años, que en 1990, donde se situaba alrededor de los ochenta. A partir de ahí, ya en los albores del siglo XXI, la humanidad ha podido comprobar cómo lo que en realidad separa a los amantes no es ya la muerte si no la vida, con sus propios “revolcones”.

Aún así, todavía hoy a muchos hombres y mujeres del siglo XXI, les cuesta aceptar la evolución de sus propios sentimientos, de sus cambios psicológicos y morales y, en consecuencia, los de sus propias relaciones sentimentales, cuando la esencia innegable de la vida es precisamente esa: el cambio constante; y como dice la historiadora Florence Montreynaud “La experiencia enseña a desconfiar de las celebridades (y no celebridades) que adoptan la pose del gran amor ya que con frecuencia se revela en publicaciones póstumas el reverso de la moneda oficial”. Nos resultan mucho más creíbles, pues, las personas que viven sus relaciones de pareja inventado lenguajes nuevos, códigos de amor inéditos; que son creativos con sus propias vidas y que consiguen librarse de la tiranía de la idea de “relación amorosa eterna e inamovible”, tan irreal; personas que se alejan por tanto de la infelicidad que provoca negarse a sí mismos y conformarse con una vida sentimental basada más en el temor que en el amor. La teoría cuántica habla de que el objeto observado no tiene sentido si no se tiene en cuenta quien lo mira. En muchas de las relaciones de a dos que mostramos en este libro encontraremos algunos casos de parejas que supieron mirar

bien al otro y se dejaron también mirar bien, aunque fuese sólo por un período de sus vidas; otros casos de amores que se desvanecieron al poco de iniciar su convivencia, como los de Jackie y John Kennedy, y que de manera absurda se convirtieron en icono amoroso durante años; parejas que consiguieron que su amor se mantuviese hasta el final de sus vidas, como el del compositor Bejamín Britten y su compañero Peter Pears; relaciones atemporales como la del matrimonio Curie, basada en el amor respetuoso, en la igualdad y la complicidad en todos los aspectos de su vida, a pesar de haber vivido en la estrecha década que va de 1900 a 1910. Se trata de mujeres y hombres con una imagen pública mítica, tras la cual han vivido y vibrado seres de carne y hueso. Personas que, al margen de que su relación de pareja funcionase a largo plazo o no, nunca perdieron su identidad dentro de ella, y su forma de interpretar y reinterpretar el

amor ha tenido también su influencia en la vida privada de todos nosotros. Afortunadamente el amor es concebido de una forma mucho más amplia y completa en la actualidad. André Malraux ya había hablado de “la posibilidad de un suceso espiritual a escala planetaria que marcaría el siglo XX”. Muchos creen, sin embargo, que su predicción es más aplicable al siglo XXI. Pero ninguno de los cambios que se vienen produciendo en los últimos años en cuanto al AMOR como concepto, como la vibración más positiva y expansiva que puede experimentar una persona hacia todo lo que le rodea, en vez de la conquista y posesión a veces depredadora de “el otro”, ninguno de esos cambios hubiesen sido factibles sin la posibilidad de experiencia que nos ofreció el siglo anterior.

1900 - 1910

El principio de la er industrial Nada altera la euforia contenida que vive el PP. Para sus diputados, o al menos eso trasladan en privado, la victoria está hecha, solo falta por saber si logran la mayoría absoluta o no. En ese contexto, la bancada popular y el propio Mariano Rajoy le concedían muy poca importancia al debate de ayer. Por eso, ni siquiera los diputados que admitían que Zapatero tuvo una primera réplica contundente que descolocó a Rajoy, que eran muchos, asumían que eso tuviera alguna importancia fuera del hemiciclo. Hace tiempo que el líder del PP no vive de debates, ni de grandes discursos, ni siquiera de confrontar con Zapatero, a quien todo el PP ve como un cadáver político. Rajoy está en otro registro, aseguran en su entorno. Está convencido de que a la gente ya apenas le importan ni los debates ni los grandes discursos, que lo único que vale son los malos datos económicos, y esos hundirán al PSOE y le llevarán a La Moncloa. En esa estrategia, una de las claves consiste en que los ciudadanos entiendan que Zapatero está en tiempo de descuento, que solo las elecciones desbloquearán la situación. Y es ahí donde los diputados del PP y el entorno de Rajoy salieron muy contentos: creen que la sensación que sale del Congreso de los Diputados es de legislatura agotada, con un presidente que se despidió de todos.

En los corrillos del PP se daba prácticamente por hecho, tras las palabras de Zapatero, que adelantará las elecciones. Y ese es el gran triunfo de Rajoy, por lo que el debate y el resultado de las réplicas, que otros años supuso graves críticas internas para el líder del PP, esta vez era lo de menos. Algunos incluso decían que Rajoy no había querido ser duro con Zapatero por elegancia, y de ahí el último mensaje de consideración personal. Lo llevaba escrito para el discurso inicial, pero se le pasó y lo dijo en la última réplica. Hace tiempo que el líder del PP no vive de debates, ni de grandes discursos, ni siquiera de confrontar con Zapatero, a quien todo el PP ve como un cadáver político. Rajoy está en otro registro, aseguran en su entorno. Está convencido de que a la gente ya apenas le importan ni los debates ni los grandes discursos, que lo único que vale son los malos datos económicos, y esos hundirán al PSOE y le llevarán a La Moncloa. En esa estrategia, una de las claves consiste en que los ciudadanos entiendan que Zapatero está en tiempo de descuento, que solo las elecciones desbloquearán la situación. Y es ahí donde los diputados del PP y el entorno de Rajoy salieron muy contentos: creen que la sensación que sale del Congreso de los Diputados es de legislatura agotada, con un presidente que se despidió de todos.

ace tiempo que el líder del PP no vive de debates, ni de grandes discursos, ni siquiera de confrontar con Zapatero, a quien todo el PP ve como un cadáver político. Rajoy está en otro registro, aseguran en su entorno. Está convencido de que a la gente ya apenas le importan ni los debates ni los grandes discursos, que lo único que vale son los malos datos económicos, y esos hundirán al PSOE y le llevarán a La Moncloa. En esa estrategia, una de las claves consiste en que los ciudadanos entiendan que Zapatero está en tiempo de descuento, que solo las elecciones desbloquearán la situación. Y es ahí donde los diputados del PP y el entorno de Rajoy salieron muy contentos: creen que la sensación que sale del Congreso de los Diputados es de legislatura agotada, con un presidente que se despidió de todos.Ulputatue erosto odolorper aute dolore eugait luptat, conullumsan et lamcore er sed mod magnibh eum augait ulputem vercidunt et accumsa ndipit autet aciliquismod magna facillam, consequisi. Lor atis nim nim in ullum eum digna feuguer sequisit acilit ate

1910 - 1920

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1920 - 1930