LA SOCIEDAD BALLENERA DE MAGALLANES TEXTO Y SELECCIÓN DE FOTOGRAFÍAS: DANILO TOBAR SALINAS ARCHIVO FOTOGRÁFICO PATRIMONIAL DEL INSTITUTO DE LA PATAGONIA
De todos estos proyectos y sociedades, la empresa ballenera chilena más relevante del período, tanto por las implicancias económicas de su explotación como por la ocupación geográfica de territorios escasamente explorados y mucho menos ocupados, fue la Sociedad Ballenera de Magallanes. Formada por decreto supremo en el año 1906, con la firma del presidente Germán Riesco, fue presidida por Mauricio Braun, Pedro de Bruyne como gerente y por el noruego nacionalizado chileno Adolfo A. Andresen, que cumplió el rol de administrador .
Andresen ya se había asociado al empresario Mauricio Braun en 1903, realizando el primer viaje de cacería de la ballena, desde Punta Arenas hasta el cabo de Hornos, el cual tuvo mucho de exploratorio, ya que no se sabía a ciencia cierta cuán fructífera sería la empresa. Si bien el viaje en cuestión no reportó ninguna ballena cazada, Andresen emprendió una nueva aventura ballenera, previo contrato de una tripulación adecuada para las faenas que se proyectaban, en el puerto de Ancud. Esta vez los resultados fueron mejores. Ello movió a los socios a intentar la formación
de una empresa con mayores capitales, que facilitara un mejor rendimiento, de modo que se atrajo al proyecto a Pedro A. de Bruyne. La Sociedad en comandita inaugurada se titulaba Sociedad De Bruyne, Andresen y Cía. y fue establecida a fines del año 1904, obteniendo los permisos oficiales de parte del gobierno para ocupar Bahía Águila, treinta millas al sur de la ciudad de Punta Arenas, donde se estableció un centro de operaciones para la recién montada compañía. Bahía Águila fue acondicionada con caldera, herrería, tonelería, cocina, varios edificios para fábrica y alojamiento
para los trabajadores. Completaba el paisaje un varadero destinado a que los barcos pudieran, mediante cabrestantes, bajar las ballenas cazadas a tierra. La descripción de la infraestructura con la que se dotó la planta de Bahía Águila indica que la empresa se estaba proyectando en el tiempo y que además tenía la capacidad de inversión que hiciera posible mayores ganancias en el futuro. En este primer intento por desarrollar seriamente la cacería de la ballena, Andresen exploró el estrecho de Magallanes, así como mares cercanos a su desembocadura, tanto del Pacífico como del Atlántico.
TEXTO Y SELECCIÓN DE FOTOGRAFÍAS: DANILO TOBAR SALINAS ARCHIVO FOTOGRÁFICO PATRIMONIAL DEL INSTITUTO DE LA PATAGONIA
LA SOCIEDAD BALLENERA DE MAGALLANES TEXTO Y SELECCIÓN DE FOTOGRAFÍAS: DANILO TOBAR SALINAS ARCHIVO FOTOGRÁFICO PATRIMONIAL DEL INSTITUTO DE LA PATAGONIA