DEPARTAMENTO DE
MÚSICA
SERGIO UMBARILA VIOLÍN (COLOMBIA)
CONCIERTO DE GRADO
OBRAS DE J.S.BACH, DVORAK, GINASTERA, ATHORTÚA Y PAGANINI. VÍCTOR OJEDA, PIANO
VIERNES 30 DE NOVIEMBRE DEL 2018 6:00 P.M. AUDITORIO LLERAS UNIVERSIDAD DE LOS ANDES Entrada libre hasta completar aforo
FOTOGRAFÍA: ARCHIVO UNIANDES Universidad de los Andes – Vigilada MinEducación – Reconocimiento como Universidad, Decreto 1297 del 30 de mayo de 1964 Reconocimiento personería jurídica Resolución 28 del 23 de febrero de 1949 MinJusticia. Pregrado en Música – Resolución de aprobación 17083 del 27 de diciembre de 2012 – Vigencia 7 años – SNIES 1529 Duración del programa: 10 semestres – presencial – Bogotá. Información de otros programas puede consultarse en facartes.uniandes.edu.co
SERGIO UMBARILA, VIOLÍN Inició sus estudios musicales en la Fundación Nacional Batuta y comenzó
sus estudios de violín con Juana Pinilla en la misma institución. Integró la Orquesta Batuta Bogotá bajo la direción de Juan Felipe Molano en 2008. Fue seleccionado para representar a la Fundación Nacional Batuta en el VI Encuentro de Orquestas de Cámara organizado por la Pontificia Universidad Javeriana, bajo la dirección del maestro M. H. Wood. Participó en coproducciones con la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia y la Orquesta Filarmónica de Bogotá, siendo esta última donde conoce al violinista Mauricio González y comenzó sus estudios preparatorios para la educación superior. En 2011 ingresó a la Universidad Central donde tomó clases con Maximiliano Jaramillo. En el 2014 ganó una beca de la Universidad de los Andes donde continuó sus estudios con el maestro Gustav Kolbe (Q.E.P.D). Fue finalista del II Concurso de Interpretación Rodrigo Querubín Londoño 2016. Ha integrado el Conjunto de Música Antigua dirigido por Armando Fuentes, el Conjunto de Música Colombiana dirigido por Luis Fernando “El Chino” León y la Orquesta del Departamento de Música de dicha universidad. Ha tomado clases magistrales con los violinistas Sergio Allendes (Chile), Manuel Druminski (Alemania), Stephanie Bibbo (Estados Unidos) y Alex Robson (Inglaterra). Actualmente se encuentra finalizando sus estudios de violín en calidad de becario de la Universidad de los Andes con el maestro Mauricio González.
VÍCTOR OJEDA, PIANO Inició sus estudios de piano en la Orquesta Sinfónica Juvenil de Colombia
bajo con el maestro Leonardo Zambrano. Es músico pianista con profundización en música de cámara del Conservatorio de Música de la Universidad Nacional de Colombia bajo la dirección de la maestra Mercedes Cortés. Ha dado recitales como solista y pianista acompañante en diferentes escenarios de Bogotá y el país. Fue invitado cómo pianista acompañante en el II y IV Festival Internacional de Música de Cartagena. Fue galardonado por su colaboración y participación en la inauguración del I Festival de Piano realizado en la Universidad Nacional de Colombia en la sede Palmira (Valle). Es magister en pedagogía del piano de la Universidad Nacional de Colombia bajo la dirección del maestro Mac McClure. Actualmente se desempeña como docente de piano en la Universidad Central y la Universidad de Cundinamarca, y es pianista acompañante en la Universidad de los Andes.
PROGRAMA Preludio No. 1 para violín solo, Op. 165 Blas Emilio Atehortúa (n. 1943) No. 2 Sonata No. 1 en Sol menor para violín Johann Sebastian Bach (1685 - 1750) solo, BWV 1001 I. Adagio IV. Presto Pampeana No. 1 para violón y piano Alberto Ginastera (1916 - 1983) Op- 16
INTERMEDIO Concierto para violín en La menor, Op- Antonín Dvořak (1841 - 1904) 53 (B. 108) Capricho No. 9 para violín Niccolò Paganini (1782 - 1840)
NOTAS AL PROGRAMA Por: Sergio Umbarila
Atehortúa Blas Emilio Atehortúa Amaya alternó desde temprana edad sus estudios de música: piano, violín y solfeo; con los de dibujo en el Instituto de Bellas Artes de Medellín. Las primeras clases de violín las tomó con Buhuslav Harvaneck y tiempo después con Josheph Matza. Finalizando la década de los 50´s conoció al violinista Frank Preuss, quien lo invitó a trabajar con la Orquesta Colombiana de Música de Cámara dando como resultado el Ensayo concertante para violín, viola y violonchelo y cuerdas, Op. 5, con destino a la Radio Nacional en 1960. En 1963 llegó a Buenos Aires con el primer grupo de becarios del Instituto Torcuato Di Tella, lugar donde estudió con Alberto Ginastera y otras cátedras orientadas por Aaron Copland, Luigi Dallapiccola, Luigi Nono, Oliver Messiaen, Maurice Le Roux, Iannis Xenakis y Bruno Maderna, entre otros. A partir de 1968 Atehortúa evoluciona hacia un estilo propio y maduro donde su personalidad se conjuga con una visión americanista desligada del nacionalismo obvio. En sus composiciones, Atehortúa hace constantes referencias a la tradición barroca, evidentes no solo en los títulos, sino en el contenido de estas. Es el caso del Preludio Nº 1 para violín solo, compuesto en 1990 poco después de las Tres piezas para clarinete solo y fue estrenado por el violinista F. Preuss. El preludio se caracteriza por las variaciones que el compositor hace sobre el tema principal, a través de un contrapunto lleno de impulso rítmico por medio de la desconstrucción de acordes. Aunque el violín es un instrumento esencialmente melódico, la complejidad técnica de la obra radica en la exigencia de no separar las notas, es decir, de no interrumpir el sonido en el momento del cambio del arco y mantener su expresividad en los acordes. Todos estos elementos enmarcados dentro de la melodía reconocible, cuyo tema principal se presenta una vez más para finalizar la obra. Bach El objetivo de producir una textura polifónica regida por las reglas del contrapunto para instrumento solo está influenciado por las primeras obras de este tipo como las Partitas para violín solo de Johann Paul von Westhoff (1656-1705) compuestas en 1696. El repertorio para violín solista estaba creciendo activamente en ese momento: el célebre Heinrich Ignaz Franz Biber (1644-1704) publicó su passacaglia alrededor de 1676. Las colecciones de música de violín solo de Westhoff se publicaron en 1682 y 1696, mientras Johann Joseph Vilsmayr (1663-1722) publicó su Artificiosus Concentus pro Camera en 1715, y la sonata para violín solo de Johann Georg Pisendel (1688-1755) se compuso alrededor de 1716. Finalmente, Georg Philipp Telemann (1681-1767) publicó sus 12 Fantasías para violín solo en 1735. Aunque no hay una fecha certera del momento en que Johann Sebastian Bach comenzó a escribir las sonatas y partitas para violín solo, las terminó en 1720, tal como indica la fecha del manuscrito. Para ese momento el compositor se desempeñaba como maestro de capilla al servicio del príncipe Leopold de Anhalt, en Cöthen. Bach dividió la colección en dos grupos de tres piezas cada uno: tres sonatas y tres partitas. Las tres partitas ejemplifican el género de la sonata da camera o sonata de cámara, cada una de las cuales está conformada por una suite de danzas que funcionan como movimientos. Mientras que las tres sonatas son el ejemplo el género de la sonata da chiesa o sonata de cámara que conserva la simetría de cuatro movimientos: lento, rápido, lento y rápido. Aunque las sonatas y partitas están alternadas en el orden original propuesto por Bach, en cada una de ellas es notable como el compositor hace un trabajo meticuloso de la textura polifónica y explota la línea melódica de diversas maneras. En el caso de la primera sonata, esta se caracteriza porque el violín abre con un acorde de sol menor. Estas cuatro notas del acorde del Adagio son el elemento icónico y conductor durante toda la sonata, que durante el primer movimiento se combinan con recursos del estilo francés de la época, como la expresividad y la libertad en el tempo
(rubato), además del uso de ornamentos, en particular las appoggiaturas, lo que confiere a este movimiento la ilusión de polifonía y linealidad común en la música francesa. El último movimiento: Presto. Sugiere una velocidad rápida. Donde los elementos de virtuosidad y euforia se combinan en este movimiento, junto con marcados cambios de armonía cuyo movimiento finaliza con el acorde de sol menor, es decir, las mismas cuatro notas con las cuales inició la sonata. Ginastera La pampeana, también conocida como milonga pampeana, campera o sureña, es una modalidad del género musical folclórico rioplatense conocido como milonga. Este ritmo de compás binario, pero a menudo acompañado de guitarra en 6/8, proviene de la cultura guachesca que se ubica en la región comprendida entre Argentina y Uruguay. Este acervo folclórico argentino fue el que inspiró a Ginastera una serie de pampeanas en diferentes formatos. La primera, escrita para violín y piano en 1947; la segunda, para violonchelo y piano en 1950; y la tercera, escrita en 1954 para orquesta que a diferencia de las dos primeras es un poema sinfónico en tres movimientos que el compositor tituló Pastoral sinfónica. Dvořak El concierto para violín hace parte de los mejores logros en el ámbito de la estética nacionalista de Dvorak. Compuesto muy cerca de su primera serie de Danzas eslavas, la Suite checa, las Rapsodias eslavas y la Sinfonía nº 6 en Re mayor, obras con las que comparte melodías folklóricas y su expresión nacionalista en general. Dvorak comenzó a trabajar en el concierto desde julio de 1879 y finalizó la composición en mayo de 1880, e hizo una revisión posterior en 1882 para que fuera publicado por Fritz Simrock. Aunque el concierto en principio fue dedicado a Joseph Joachim (1831-1907), distinguido violinista, fundador y director de la Hochschule fur Musik de Berlín; la obra fue estrenada por Frantisek Ondricek (1857-1922) en el Rudolfinum de Praga el 14 de octubre de 1883 con la Orquesta del Teatro Nacional de Praga bajo la dirección de Moric Anger (1844-1905). El primer movimiento del concierto suele describirse como una combinación de principios de sonata y rondo. Luego de una introducción de varios compases que anticipan la idea principal por parte de la orquesta, el violín aparece con el tema principal. El desarrollo Paganini Paganini escribió entre 1802 y 1827 los 24 caprichos para violín en forma de estudio, explorando en cada uno de ellos diferentes técnicas del violín. En el capricho Nº 9 la primera frase del tema debe imitar el sonido de la flauta, por lo cual debe ubicarse el punto de contacto del arco sobre la región del diapasón o tastiera del violín para simular la corriente de aire o general el efecto flautado. Mientras la segunda frase debe imitar al corno, cuyo efecto se logra ubicando el punto de contacto del arco en su posición natural, es decir, entre el diapasón y el puente, para lograr el efecto deseado toda la frase se interpreta sobre las dos cuerdas graves del instrumento. El tema principal se intercala con una sección de acordes y con otra de gran contenido de octavas, golpes de arco (ricochet y spiccato) y cambios extremadamente rápidos de posición y cuerdas. AGRADECIMIENTOS Mauricio González Velázquez Armando Fuentes Ronald Perilla María Constanza López Óscar Aquite
musica.uniandes.edu.co Universidad de los Andes | Vigilada MinEducación - Reconocimiento como Universidad: Decreto 1297 del 30 de mayo de 1964 - Reconocimiento personería jurídica: Resolución 28 del 23 de febrero de 1949 Minjusticia