Lorde, la cautautora adolescente neozelandesa convertida en nueva niña mimada del mundo del espectáculo, venció a veteranos de la música el domingo en Los Ángeles al ganar el Grammy a la Mejor interpretación solistapop con su exitosa canción «Royals».
Lorde, de 17 años, agradeció a sus competidores, entre los que estaban Justin Timberlake y Katy Perry, al recoger su gramófono dorado en la gran gala anual de la industria musical en Estados Unidos. «Esta es la única cosa que no me esperaba para nada esta noche», dijo Lorde y, dirigiéndose a sus rivales, agregó: «Me he inspirado mucho en todo su trabajo vocal en algún momento de mi vida, así que gracias». Lorde, cuyo verdadero nombre es Ella Yelich-O'Connor, irrumpió en los rankings internacionales el año pasado con «Royals». Con esta canción, Lorde fue la primera artista solista de Nueva Zelanda en encabezar la lista Billboard 100 en Estados Unidos. Lorde también fue nominada a los Grammy de Grabación del Año, Mejor canción y Mejor álbum vocal pop.