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ANEMIA Y CORONAVIRUS

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DIABETES Y PIEL

DIABETES Y PIEL

La anemia es la consecuencia de tres procesos fundamentales: disminución de la producción de hemoglobina o hematíes, aumento de la destrucción de los hematíes y pérdida de sangre. De acuerdo con el contenido de los hematíes puede ser normocrómica o hipocrómica y por la diferencia de tamaño macrocítica, normocítica y microcítica.

Los principales síntomas de anemia son la palidez, conjuntivas, lecho ungueal, surcos palma, taquicardia, soplos funcionales, palpitaciones, tinnitus, taquipnea, disnea, dolor óseo o sensibilidad en huesos hematopoyéticos. Por su parte algunos signos de hipoxia celular son: angina, claudicación intermitente, fatigabilidad, cefalea, falta de concentración y mareos. La cifra de Hb para establecer la existencia de anemia es igual o menor a 12 g/dl para las mujeres y 13 g/dl en los hombres. La anemia se relaciona con el aumento de la mortalidad, mayor incidencia de trastornos cardiovasculares de graves repercusiones, trastornos cognoscitivos y conductuales, disminución de la capacidad física y aumento del riesgo de caídas y fracturas.

¿QUÉ ES EL COVID-19?

Es la enfermedad infecciosa causada por el coronavirus que se ha descubierto más recientemente.

SÍNTOMAS

Fiebre, tos seca, cansancio, molestias, dolor de garganta y cabeza, diarrea, conjuntivitis, pérdida del sentido del olfato y/o del gusto, erupciones cutáneas, difcultad para respirar, dolor o presión en el pecho, incapacidad para hablar o moverse.

El ARN del virus SARS-CoV-2 codifca 4 proteínas estructurales: la proteína S (spike protein), la proteína E (envelope), la proteína M (membrane) y la proteína N (nucleocapsid). La proteína N está en el interior del virión relacionada al RNA viral y las otras cuatro proteínas están asociadas a la envoltura viral. La proteína S contiene el dominio de unión al receptor celular y, por lo tanto, es la proteína determinante del tropismo del virus y la que tiene la actividad de fusión de la membrana viral con la celular. De esta manera permite liberar el genoma viral en el interior de la célula que va a infectar.

El SARS-CoV-2 penetra en la célula empleando como receptor a la enzima convertidora de angiotensina II (ACE-2), una exopeptidasa de membrana presente fundamentalmente en el riñón, los pulmones y el corazón, el sistema renal y tracto gastrointestinal. Se ha observado que los casos graves de COVID-19 presentan niveles de Angiotensina II muy altos.La glicoproteína S de la envoltura del virus interacciona con el receptor celular ACE2: enzima 2 que convierte la angiotensina, una proteína de la membrana celular que cataliza la conversión

¿QUÉ ES UNCORONAVIRUS? LOS CORONAVIRUS SON UNA EXTENSA FAMILIA DE VIRUS. EN LOS HUMANOS, SE SABE QUE VARIOS CORONAVIRUS CAUSAN INFECCIONES RESPIRATORIAS QUE PUEDEN IR DESDE EL RESFRIADO COMÚN HASTA ENFERMEDADES MÁS GRAVES

de angiotensia I, en el nonapéptido angiotensina 1-9 o de angiotensia II en angiotensina 1-7. El virus entra por endocitosis. Una vez en el endosoma ocurre una baja de pH mediada por lisosomas, que promueve la fusión de la membrana del endosoma con la envoltura del virus, lo que libera la nucleocápside al citoplasma. El virus puede pasar a través de las mucosas, nasal y laríngea, luego ingresa a los pulmones a través del tracto respiratorio.Cuando existe anemia u otra

DR. JULIO RUÍZ CUEVAS Diabetólogo condición, el virus comienza un segundo ataque, causando que la condición del paciente empeore alrededor de 7 a 14 días después del inicio. La reducción de linfocitos B puede ocurrir temprano en la enfermedad, que puede afectar la producción de anticuerpos en el paciente.

El período de incubación, oscila entre 2 y 14 días después del contagio.

Además, el COVID-19 puede predisponer a la enfermedad tromboembólica arterial y venosa debido a la infamación excesiva, hipoxia, inmovilización y coagulación intravascular diseminada.A nivel inmunológico, se ha evidenciado niveles elevados de IL-6 y otras citoquinas proinfamatorias en pacientes con COVID-19 grave. Esta observación, junto con otros parámetros clínicos asociados a casos graves como linfopenia e hiperferritinemia ha llevado a hipotetizar que un subgrupo de pacientes de COVID-19 puede sufrir un síndrome de liberación de citoquinas.Un estudio demostró que la mortalidad era el doble en pacientes ancianos con anemia en comparación con aquellos que tenían niveles normales de Hb y el riesgo de mortalidad entre tales pacientes aumentaba a medida que la Hb disminuía.

La anemia ferropénica está caracterizada por la reducción o ausencia de depósitos de hierro, bajas concentraciones séricas de hierro y Hb, disminución del hematocrito, incremento en la cantidad de plaquetas, ferritina sérica baja y un aumento marcado en la capacidad de transporte del hierro en plasma.

Cualquier paciente con niveles de hemoglobina y hematócrito por debajo de los rangos de referencia tiene mal pronóstico ante cualquier enfermedad y cuando el virus en este caso el COVID-19 es muy agresivo le afecta porque existe una respuesta inapropiada del sistema inmunitario, lo que ocasiona un peor pronóstico para los afectados.

VITAMINAS Y MINERALES

claves para fortalecer el sistema inmune en épocas de COVID-19

A

la fecha más de 7.5 millones de personas se han infectado en el mundo por COVID-19, más de 3 millones están activas y ha cobrado la vida a más de 400 mil; afortunadamente se han recuperado más de 3 millones. Los tratamientos médicos, autocuidado y condiciones especiales han logrado salvar muchas vidas.La malnutrición, los adultos mayores y otras comorbilidades como VIH, tuberculosis, hipertensión, diabetes y obesidad se consideran un factor de riesgo de complicaciones en personas con COVID-19, debido a un sistema inmune comprometido o al riego de contagio en aquellas personas que no padecen esta terrible enfermedad.

El SARS-CoV-2 por ser un nuevo virus, nuestro organismo antes de su aparición no había creado anticuerpos para combatirlo, en ausencia de una vacuna y sin un tratamiento específco efectivo, la única arma que tenemos para defendernos del coronavirus es nuestro sistema inmunitario.

El sistema inmune contra los virus tiene dos objetivos principales: uno es tratar de neutralizarlos y evitar que entren dentro de las células y el otro, si el virus logró atravesar esa barrera y penetrar la célula, es destruir esa célula infectada por un mecanismo que se conoce como apoptosis, que es una muerte celular programada.

Veamos entonces cómo está compuesto, cómo funciona y cómo combate al SARS-CoV-2 nuestro sistema inmune.

El sistema inmunitario es una compleja red de células, tejidos y órganos que trabajan en conjunto para defendernos de los microorganismos y sustancias tóxicas externas que podrían enfermarnos como los hongos, parásitos, bacterias y virus que están presentes a nuestro alrededor; pero en algunos casos particulares ese mismo sistema inmunitario por razones desconocidas puede atacar a nuestras propias células sanas por error y generar enfermedades autoinmunes como artritis, diabetes tipo 1, lupus, Síndrome de Guillain-Barré, entre otros.

Las células inmunitarias se originan en la médula ósea (ver fgura 1) y por medio de la sangre (en los leucocitos, que son los glóbulos blancos) y la linfa (el líquido transparente que recorre los vasos linfáticos) llegan y se depositan en mayor cantidad en el bazo, el timo y los ganglios linfáticos, pero también en las mucosas, los pulmones, la piel y el intestino delgado, otra parte se quedan en la sangre y la linfa. (ver fgura 2)Cuando nuestro organismo es atacado por algún microorganismo o sustancia tóxica, como el SARS-CoV-2, nuestro sistema inmune responde

de dos formas de manera simultánea.

Una es la llamada respuesta innata, que es la primera que se desarrolla en nuestro cuerpo, no es específca. Ataca en este caso al virus por medio de células llamadas monocitos que aumentan la temperatura corporal para por medio del calor logar neutralizarlo, pero esto no es sufciente. Nuestro organismo libera entonces unas sustancias químicas llamadas citoquinas que producen infamación y en algunos casos el virus no muere y se hace necesario activar un segundo mecanismo, la inmunidad adaptativa.

La inmunidad adaptativa es una respuesta inmunitaria mayor, desarrollada por los linfocitos T y B, que produce anticuerpos capaces de destruir determinados microorganismos o células infectadas. Esta respuesta puede demorarse en llegar entre cuatro y siete días, por eso la respuesta innata tiene que tratar de mantener la primera línea de batalla, hasta que se desarrolle la respuesta inmune específca para atacar al virus.Una característica bien importante de la respuesta adaptativa es que deja memoria, es decir, recuerda los patógenos con los que tu cuerpo ha entrado en contacto en el pasado y por ello sabrá cómo combatirlos en el futuro.

Por ser un virus nuevo, no queda totalmente claro si genera inmunidad y si

lo hace, por cuánto tiempo dura.

Cuando nuestro sistema inmune (actuando con la respuesta innata y la respuesta adaptativa) no es capaz de combatir el virus, este penetra nuestras células, las infecta y se multiplica de manera exponencial. (Ver fgura 3).

Debemos saber que virus solo se puede replicar si tiene una célula en donde hacerlo, de lo contario morirá.

Por ser un virus respiratorio, comienza infectando la garganta, antes de seguir su recorrido por los conductos bronquiales y alcanzar los pulmones donde se presenta una infamación generalizada que requiere de ventilación mecánica (artifcial).

En el 80% de los casos, la respuesta del sistema inmunitario al coronavirus es efectiva y por eso las personas son asintomáticas o sufren síntomas leves. En el 20% restante no. El virus entra en las células porque el sistema inmunitario no lo pudo bloquear.

El resultado fnal puede ser leve o severo (que puede llevar a la muerte) y esto depende principalmente de la respuesta de nuestro sistema inmunitario.

CÓMO FORTALECER NUESTRO SISTEMA INMUNE

El consejo general es tener una nutrición saludable, diversa, completa, balanceada, rica en frutas y verduras de varios colores (esto aumenta la ingesta de antioxidantes y nutrientes asociados) para apoyar así la función inmune innata. Hay mucha evidencia con estudios en animales y humanos que demuestran que la nutrición antioxidante, con ciertas vitaminas y minerales ayudan al sistema inmunitario a funcionar correctamente. (Ver fgura 4). Aunque no hay evidencia específca de que estas medidas nutricionales puedan ayudar a proteger contra o incluso disminuir los efectos de la infección por COVID-19, tiene sentido pragmático apoyar nutricionalmente tanto la salud normal como el sistema inmunitario (con dosis que probablemente no sean dañinas) antes, durante y después de la infección por SARS-CoV-2.

Las vitaminas y minerales juegan un papel fundamental en el metabolismo, ya que actúan como reguladores de las actividades enzimáticas y mantienen en equilibrio nuestro microbioma (trillones de microrganismos que pueblan nuestro intestino), considerado nuestro segundo cerebro.

El 70% de las células de nuestro sistema inmune viven en el intestino, es por esto por lo que al hablar del sistema inmune se deba hacer alusión necesariamente a la nutrición. (Ver fgura 5).

Vitaminas y minerales que impactan de manera positiva nuestro sistema inmune.

Las vitaminas y minerales en su gran mayoría son compuestos químicos esenciales para nuestro cuerpo porque no los podemos sintetizar (producir) mediante el metabolismo; con pocas excepciones como las vitaminas D, K, B1, B2 y ácido fólico, las demás las debemos tomar de los alimentos.

El mantenimiento y el reemplazo constante de la mayoría de las células

inmunes dependen en gran medida de un suministro adecuado de energía, nutrientes y micronutrientes (vitaminas y minerales).

Los estudios han demostrado que las principales vitaminas que actúan de manera directa para el buen funcionamiento del sistema inmune son las vitaminas liposolubles: A, D, E y las hidrosolubles: B6, ácido fólico, B12 y C; los minerales (llamados también elementos trazas): magnesio, hierro, cobre, selenio y zinc.Sin embargo, la ingesta inadecuada de estos micronutrientes es bastante común al menos en el caso de ciertos micronutrientes y su presencia no se limita sólo a los países de bajos ingresos. Paradójicamente se ha evidenciado un bajo nivel de varios micronutrientes en personas con sobrepeso y obesidad. Las razones no siempre son obvias, pero las dietas ricas en alimentos altamente procesados con alto contenido de grasa y azúcar no solo promueven el aumento de peso, sino que generalmente también son pobres en vitaminas, minerales y elementos traza.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) defne los micronutrientes como “varitas mágicas” que permiten al cuerpo producir enzimas, hormonas y otras sustancias esenciales para el crecimiento y desarrollo adecuado. “Tan pequeñas como son sus cantidades, sin embargo, las consecuencias de su ausencia son graves”.

Funciones principales y fuentes de las vitaminas y minerales

Vitamina A: Potencia la acción de los linfocitos T y B, importante para la respuesta inmune intestinal; regula la producción de sustancias proinfamatorias. Fuentes principales: hígado (cerdo, ternera), zanahoria, batata, calabaza, espinacas, col rizada, melón, pimiento dulce (rojos).

Vitamina D: Regula las proteínas antimicrobianas, responsables de modifcar el microbiota intestinal; protege los pulmones contra la infección, los riñones y la córnea; regula el efecto de sustancias proinfamatorias; regula la acción de los linfocitos T. Fuentes principales: Jurel (aceitoso), salmón, anguila, arenque del Atlántico, trucha de cultivo y la luz solar.

Vitamina E: Protege las membranas celulares del daño causado por los radicales libres; regula los efectos proinfamatorios; mejora el funcionamiento de los linfocitos T. Fuentes principales: aceite de germen de trigo, aceite de semilla de girasol, aceite de colza, aceite de oliva extra virgen, avellanas, almendras sin piel, col rizada y garbanzos.

Vitamina B6: Regula la función inmune del intestino; necesaria para la síntesis de proteínas productoras de citoquinas; regula la infamación; participa en la activación de linfocitos T. Fuentes principales: hígado (res), salmón del Atlántico, pechuga de pollo con o sin piel, papas cocidas con piel, pimientos dulces (rojos), plátano, atún, repollo chino, pistachos, amaranto, semillas de girasol y lentejas.

Ácido fólico: Regula la función inmune del intestino; necesaria para la síntesis de proteínas productoras de citoquinas; refuerza la actividad de los linfocitos T; participa en la producción de anticuerpos. Fuentes principales: espinacas crudas, hígado (res), frijoles rojos, coles de Bruselas crudas, garbanzos, quinua, fresas, semilla de girasol secas y yema de huevo.

Vitamina B12: Regula la función inmune del intestino; necesaria para la síntesis de proteínas productoras de citoquinas; refuerza la actividad de los linfocitos T; facilita la producción de células T; participa en la producción de anticuerpos. Fuentes principales: hígado (res), riñones (res), mejillones, atún, caballa del Atlántico, arenque del Atlántico, trucha arcoiris, alga nori (seca), carne de res, huevo entero, leche de vaca entera y queso.

Vitamina C: Promueve la síntesis de colágeno y protege las membranas celulares del daño causado por los radicales libres; a dosis altas ejerce efectos antimicrobianos; regenera sustancias antioxidantes como la vitamina E; regula la producción de linfocitos T. Fuentes principales: guayaba, pimientos dulces crudos (amarillos), grosellas negras, col rizada (cruda), brócoli crudo, kiwi (verde) y cítricos (naranja, mandarina, limón).

Magnesio: Cofactor de enzimas del metabolismo de los ácidos nucleicos; protege el ADN contra el daño oxidativo; cofactor en la síntesis de anticuerpos. Fuentes principales: cacao en granos y en polvo, salvado de trigo, hinojo (semillas), cúrcuma (semillas), café en polvo, té, calabaza (semillas), linaza (semillas), almendras (semillas), caracol, soya, cardamomo (semillas), maní, huevo de gallina (blanco), acelga, borraja, aguacate, bananas, frescas (sin piel), brócoli, espárragos, hígado (ternera), jugo de mango, piña y zanahoria.

Hierro: Involucrado en la muerte de bacterias; implicado en la síntesis de ADN; regula la producción de sustancias proinfamatorias; importante en la proliferación de linfocitos T. Fuentes principales: hígado (cerdo), semillas de sésamo enteras (ajonjolí), semillas de calabaza, amaranto, frijoles, lentejas, corazón (pollo), linaza, avena, espinacas y carne de res.

Cobre: Ejerce efectos microbicidas; elimina radicales libres; mantiene el equilibrio antioxidante intracelular; regulador de la respuesta infamatoria; importante en la proliferación de linfocitos T. Fuentes principales: hígado (oveja, ternera, res, cerdo), champiñones secos, ostras, soya (proteína), semillas de girasol, anacardos y salvado de trigo.

Selenio: Potente antioxidante celular; importante en la proliferación de linfocitos T; ayuda a mantener los niveles de anticuerpos. Fuentes principales: nueces de Brasil, riñón (cerdo), bacalao, yema de huevo cruda, granos de trigo, semillas de sésamo y maní.

Zinc: Ayuda a mantener la integridad de la piel y la membrana mucosa; ayuda a la renovación de células inmunes; agente antiinfamatorio; regula la producción de sustancias proinfamatorias; antioxidante celular; ayuda a la activación de linfocitos T; participa en la producción de anticuerpos, particularmente IgG. Fuentes principales: ostra, semillas de calabaza, corazón (pollo), hígado (cerdo); semillas de sésamo enteras (ajonjolí), carne de res, avena y lentejas.

¿POR QUÉ SE PRESENTAN DEFICIENCIAS DE VITAMINAS Y MINERALES?

Las causas principales de la defciencia de vitaminas y minerales son: dietas de baja calidad, baja biodisponibilidad, escaso conocimiento, prácticas de autocuidado, bajos ingresos económicos, variación estacional en la disponibilidad de alimentos, factores y creencias culturales, aumento del requerimiento debido a pérdidas e infecciones.

FUTURO DE LA HUMANIDAD ANTE LA PANDEMIA POR COVID-19

Según las estadísticas mundiales y la observación de que hay más posibilidades de que los seres humanos no saludables

se vean afectados por el coronavirus. Las personas poco saludables son mucho más vulnerables. Las razones son: sistema inmunitario débil, falta de vitaminas y minerales, alimentación no saludable, falta de higiene, principalmente llevan a un mayor riesgo de infección.Las personas poco saludables tienen más probabilidades de contraer el COVID-19, con lesión pulmonar aguda, enfermedad cardíaca, hipertensión, diabetes o enfermedades renales, lo que debilita la capacidad de su cuerpo para combatir las enfermedades infecciosas. La mortalidad es directamente proporcional a la malnutrición.

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES:

1. Limitar el consumo de alimentos procesados (comida “chatarra”), comer con atención (comer cuando tenga hambre y parar cuando esté lleno), hidratación, estilos de vida saludable (deporte moderado para no dejar sin reservas al sistema inmune, sueño, control del alcohol, evitar el tabaco y buenas prácticas de higiene). 2. Consuma suplementos de vitaminas y minerales siempre que sean recomendados por un especialista en nutrición. 3. Recuerde que la vitamina D la produce nuestro cuerpo utilizando la luz solar. El uso de bloqueadores solares y la no exposición al sol infuye de manera directa en su síntesis. 4. Ningún producto, por maravilloso que parezca, suple los benefcios de una dieta sana, variada y equilibrada. Esta fortalecerá nuestro sistema inmune. 5. Las sustancias lo sufcientemente potentes como para ayudar, también pueden ser lo sufcientemente potentes como para hacer daño. 6. Los micronutrientes (vitaminas y minerales) siempre han estado presentes en la naturaleza. 7. Hay productos que han tenido un gran éxito comercial, pero eso no es garantía de nada. 8. El precio de algunos suplementos nutricionales llega a ser el doble o el triple que el producto “natural”.9. Acuda a un terapeuta para manejo de factores psíquicos como las pérdidas, la angustia y el estrés, ya que afectan el funcionamiento normal del sistema inmune. 10. Que el alimento sea tú medicina, y tu medicina sea tú alimento.

DR. JAVIER RESTREPO, Q.F Químico Farmacéutico de la Facultad de Ciencias Farmacéuticas y Alimentarias de la Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia | Profesor de la Facultad de Química Farmacéutica de la Universidad de Antioquia en el área de Farmacia Magistral (1996-2004) | Profesor del Diplomado Soporte Nutricional del Centro de Educación Continua | Diplomado en Farmacoepidemiología del Instituto de Ciencias de la Salud (CES).

EJERCICIO EN CUARENTENA

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El sedentarismo es una pandemia que mata a más de 5 millones de personas por año en el mundo, lo que según la revista Lancet de Inglaterra sigue aumentado, ya que se vive una situaciónn sin precedentes que, de paso, para de golpe todas las actividades recreativas y deportivas que mantenían a gran parte de la población activa físicamente.

a pandemia del coronavirus afecta a todo el mundo y el confnamiento es una de las medidas que se implementaron en varios países para hacerle frente a este virus que difculta las actividades al aire libre.

Si le sumamos a esto el constante ataque de noticias de última hora y las falsas informaciones, además del hecho de no poder salir, pueden generar estados de pánico, estrés, ansiedad o depresión. La generación natural de endorfnas que se produce en el cuerpo aumenta al realizar actividades físicas, contribuyendo a mejorar el estado de ánimo y reduciendo el estrés y la ansiedad.

Una de las recomendaciones de la OMS para mantener y mejorar la salud es realizar actividad física.

En su página ofcial ha comunicado que la actividad física regular es benefciosa tanto para el cuerpo como para la mente. Reduce la hipertensión arterial, ayuda a controlar

el peso y disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, diabetes de tipo 2 y diversos tipos de cáncer. También mejora la resistencia de los huesos y la fuerza de los músculos, así como el equilibrio, la fexibilidad y la aptitud física.

Una vez descartadas condiciones médicas de base, así como defciencias nutricionales se comunicó una serie de consejos para permanecer activos en casa.

EVITAR ESTAR SENTADO LARGOS PERIODOS DE TIEMPO:

Cada 20-30 minutos puede levantarse durante 3-5 minutos. Basta con levantarse y estirarse, o mejor aún, dar un paseo por la casa, subir y bajar escaleras, o caminar por el jardín. Solo con moverse y estirarse un poco mejorará su salud y bienestar Establecer una rutina de ejercicios

Fijar una hora concreta para hacer ejercicio ayuda a mantenerse activo todos los días.

Marcar objetivos de actividad física para usted y su familia:

Elegir un tipo específco de actividad, una hora del día y/o una duración determinada. Intente que cada miembro de la familia se fje su propio objetivo, un objetivo ambicioso pero realista con un poco de motivación y la ayuda de la familia y los amigos. Anote los progresos realizados en una tabla semanal de actividades.

GRUPO DE EDADES

PARA MENORES DE 5 AÑOS

Juegos activos con carreras y saltos para cansar a los niños.

PARA NIÑOS Y ADOLESCENTES DE 5 A 17 AÑOS

Juegos activos, individuales y en familia.

Participe en clases de actividades o juegos activos en línea, o en clases de educación física en línea, o en rutinas de ejercicios adecuados para adolescentes.

Aprenda una nueva habilidad, por ejemplo, malabares.

Realice actividades de entrenamiento de fuerza muscular, como levantar pesas o pesos improvisados, por ejemplo, botellas llenas de agua o arena.

PARA ADULTOS

Suba escaleras el mayor número de veces posible; considérelo como una oportunidad para mantenerse activo.

Utilice las tareas domésticas para mantenerse más activo físicamente.

Realice actividades divertidas, como bailar.

Siga clases de ejercicios físicos en línea o invente una rutina con música en la que se utilicen los principales grupos musculares y se incremente el ritmo cardíaco. Realice actividades de fortalecimiento muscular, levantando pesas o botellas llenas de agua o utilizando su propio peso corporal (fexiones, abdominales y sentadillas). La actitud física está positivamente asociada con la salud mental y el bienestar

El ejercicio está enlazado con la reducción del stress emocional

Los ejercicios de larga duración generalmente están relacionados con la disminución de cargas como la neurosis y la ansiedad.

REALIZAR EJERCICIO EN CASA:

Es un buen modo de mantenerse en forma para los que entrenan de manera rutinaria, pero también para personas que no hacían ejercicio previamente, que tenían como excusa la falta de tiempo y quieren disfrutar de sus benefcios durante el confnamiento.

El factor psicológico de la pandemia contribuye al deseo de muchos de mantenerse activos en sus casas.

Contrario a lo que se piensa el aislamiento no signifca la interrupción de la actividad física, sino que es una oportunidad para iniciar o continuar con ella, mantener la sensación de normalidad y proteger la salud mental. No se requiere un amplio espacio, si se eligen los ejercicios adecuados basta con el propio peso corporal y un equipo mínimo.

Hay estudios que indican que ejercitarse de forma regular contribuye a mejorar el sistema inmune, mejorando la capacidad corporal de combatir enfermedades comunes.

La actividad física tiene efectos comprobados por la ciencia tanto en la prevención como en la curación de las enfermedades y específcamente en las respuestas agudas y crónicas del sistema inmune ante el ejercicio.

DR. RICHARD MARINE Nutriólogo Clínico / Medicina Deportiva | Coaching de Salud

FINANZAS EN TIEMPOS DE PANDEMIA

Mucho se ha hablado en estos días acerca de cómo mantener a fote nuestras fnanzas personales, dado este cambio abrupto e inesperado que ha sacudido nuestro mundo. Antes de comentarles algunas ideas y consejos prácticos en este sentido, quiero iniciar con la principal refexión, “la mente es un arma poderosa, debemos usarla inteligentemente”. Esta es una frase que me digo a mi misma constantemente, pues la mente, la loca de la casa, como la llamaba la Madre Teresa, muchas veces nos lleva a crear situaciones y especulaciones donde no existen. Debemos pensar adecuadamente, mantener paz mental para dejar forecer la creatividad que abunda en tiempos de crisis. Dejándoles con este pensamiento, permítanme enumerarles los 7 consejos que entiendo pueden aplicar en estos tiempos para mantener su tranquilidad fnanciera:

SÉ REAL. EXPECTATIVA VERSUS REA

LIDAD. Lo primero que debes hacer es una relación real de tus nuevos ingresos, en caso de que hayan variado, y tus gastos para poder iniciar con una foto exacta a la hora de realizar ajustes.

Conviértete en detective. Sí, detective para investigar todas aquellas cosas que solías incluir en tu presupuesto y que en este momento carecen de importancia o necesidad. Se honest0/a con este análisis.

AJUSTA TU CINTURÓN. Es tiempo de ajustar nuestros gastos y ahora más que nunca debemos revisar todos aquellos que teníamos pautados para que se cobraran directamente de nuestras tarjetas de crédito o cuentas. Permanece con los que defnitivamente representan una necesidad básica. En caso de tener muchas deudas, busca orientación para consolidarlas en una sola, en base a tu capacidad de pago.

EVITA LAS COMPRAS COMPULSIVAS.

Los momentos de incertidumbre nos llevan a tomar decisiones que afectan nuestro bolsillo. Evita llevarte de especulaciones y sobre abastecerte o comprar compulsivamente, no es el fn del mundo, aunque lo parezca.

REVISA TU FONDO DE EMERGEN

CIAS. Claro, si lo tienes. La mayoría de las personas se nos olvida crearlo. Si lo tienes, es el momento de revisarlo e incluirlo como parte de tus ingresos, en caso de ser necesario, para cubrir tus necesidades de supervivencia. Si no lo tienes, aún en momentos como éste, puedes empezar a crearlo. El inicio está en tu mente, solo decídete y arranca, aunque sea desde lo poco. Gota a gota se llena el vaso.

ACTIVA TU CREATIVIDAD. Crea, fuye, identifca talentos escondidos o dormidos que te permitan generar ingresos adicionales. Es en las crisis donde afora lo mejor de cada uno/a. Permítete forecer.

SONRÍE Y MANTÉN LA ESPERANZA.

Al mal tiempo, buena cara. Sólo una actitud positiva te llevará a afrontar esta situación y tomar las mejores decisiones para mantener a fote y en balance tu

vida, hasta que lleguen tiempos mejores.

Esta es información previamente conocida, consejos simples que con solo decidirlo puedes poner en práctica de inmediato.

GINA BÁEZ SUSAÑA Administradora. Máster en Finanzas Corporativas

ES MOMENTO DE HACER PAUSA, REFLEXIONAR Y BUSCAR EL CAMBIO QUE SE REQUIERE DE TI EN ESTE MOMENTO.DE LAS GRANDES PRUEBAS DEBEMOS SALIR MEJORES O PEORES, NUNCA IGUALES. ESPERO QUE ESTA PRUEBA AFLORE TU MEJOR VERSIÓN Y TE PERMITA MANTENERTE EN CONTROL, NO SÓLO DE TUS FINANZAS, SINO DE

TODA TU PERSONA .

EDUCACIÓN Y COVID-19

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"Todo en la vida tiene una razón de ser y obra para bien"

a vida es un rompecabezas y cada pieza representa un lugar, una razón y un porqué.

COVID -19 llega inesperadamente a nuestras vidas en diciembre 2019, para alterar al mundo, dando paso a la incertidumbre y a cuestionamientos, pero sobre todo para dejar lecciones de vida para aprovechar y optimizar. “En tiempos de crisis, se abre una oportunidad al cambio”.

Es necesario hacer una pausa y dar paso a un nuevo modo de pensar y actuar. Nuestros hábitos, costumbres y convivencia han de cambiar...…para bien. Es tiempo de reconectarnos, tomar riesgos, inspirarnos y navegar en aguas de esperanza para enfrentar esta nueva realidad, sin perder nuestra verdadera esencia.

A las escuelas les corresponde acompañar a sus alumnos en la transformación de su pensar y actuar...Es el momento preciso para abrazar una nueva modalidad de enseñanza, con la fnalidad de generar un impacto signifcativo para nuestros educandos.

¡LA EDUCACIÓN DEBE REINVENTARSE!

El COVID-19 abrió una puerta importante, dando apertura a la implementación de nuevos cambios a través de la escuela inteligente, cuyo eje central consiste en proveer las estrategias del futuro, rediseño de la escuela, liderazgo renovado y desarrollo de competencias, habilidades y destrezas en los alumnos/as para prepararlos a enfrentar los retos que la vida les presente.

Es el momento preciso para reformatear el sistema educativo y una oportunidad extraordinaria para descubrir nuevos retos, desarrollarnos y ampliar los horizontes del saber.

La pandemia ha logrado digitalizar la escuela, innovación educativa, promover el pensamiento crítico, respeto a la diversidad y proyectos individuales para obtener un aprendizaje efectivo. Actualmente estamos inmersos en una “nueva normalidad” en nuestro diario vivir, gracias al COVID -19, impactando la educación con nuevas tendencias de aprendizaje remoto. El futuro pinta un panorama en el cual el diseño de las lecciones difere con las del pasado. La escuela asumirá el compromiso de ofrecer un currículum que promueve el desarrollo integral de sus educandos a través del aprendizaje mixto. Experimentamos una crisis educativa global, donde los alumnos carecen de habilidades fundamentales para enfrentar la nueva realidad de vida.

El COVID-19 llega con una misión: Revolucionar al mundo con optimismo, oportunidades y crecer con esta lección de vida, logrando educandos funcionales, exitosos y felices.

El COVID - 19, crea un balance entre la vida y la escuela, destapando una nueva puerta educativa para construir la educación ideal, a través de una modalidad más renovada que la existente antes de la pandemia, a pesar de que la escuela perfecta no existe.

El impacto de esta crisis sanitaria ha conllevado a asumir nuevas formas de enseñar, el rompimiento de paradigmas y promoción de aprender a aprender. Esta cuarentena nos ha enseñado el gran valor que tiene la escuela y reconocer la importante labor que realiza el docente con pasión, entrega, dedicación, amor, tolerancia y mucho más.

El futuro asegura el momento de explorar nuevas maneras de enseñanza y afrma la hipótesis de que, como sociedad, necesitamos a los maestros/as.

El COVID-19 abrió una gama de oportunidades, logrando una modalidad positiva a largo plazo: Desarrollo de habilidades socioemocionales Aprender a contribuir con la sociedad como ciudadanos responsables Los maestros potenciaron sus habilidades tecnológicas

Los padres se involucraron más con la educación de sus hijo/as Fortalecimiento del sistema educativo Calidad de la enseñanza Valores Revalorización de las relaciones familiares La llegada del COVID-19 también logró el desarrollo de habilidades en las personas: Destrezas digitales Perseverancia Paciencia Empatía Solidaridad Autorregulación Organización Compasión Creatividad Adaptabilidad Desarrollo del pensamiento crítico Resiliencia Inteligenciemocional Comunicación Desarrollo personal Flexibilidad Esperanza

Esta pandemia también logró una revolución positiva, incrementando la importancia y consciencia de la salud física y emocional de los alumnos. Implementación de equipos de saneamiento Currículo fexible Horarios escalonados Protocolos sanitarios Distanciamiento social

Reducción de alumnos por aul(enriquece linstrucción individualizada) Reglas y pautas nuevas

Garantizar más lseguridad, bienestar y protección de los alumnos Apoyo socio-emocional

El COVID-19 fortaleció la formación integral de las personas logrando: la capacidad de pensar por sí mismos, tomar decisiones propias, aceptación de la diversidad, enfrentar adversidades de la vida, desarrollar o fortalecer habilidades socioemocionales y a contribuir positivamente con la sociedad.

Existen preguntas sin respuestas en el área educativa. Con esta nueva modalidad, los educadores seremos más estratégicos, proactivos, apasionados, fortaleceremos nuestras destrezas de enseñanza y con perseverancia y sabiduría enfrentaremos las nuevas demandas educativas actuales, tomando en cuenta las necesidades de las familias y la de nuestros protagonistas: los educandos.

A la escuela le corresponde iluminar los caminos del saber, ser optimista, dar seguridad, mostrar solidaridad, mantener comunicación asertiva, ser empática con las familias y crear una visión positiva del futuro. ”El mundo cambio para bien, gracias a COVID-19. Llegó el momento de la escuela reinventarse y educar positivamente para la vida”. Aprovechemos la oportunidad.

ELBA D. PORTES DE LEDESMA Lic. en Educación Mención Lenguas Modernas | Postgrado en Dirección General | Postgrado/Maestria en Gestion Escolar | Directora Academica Mindful CommunitySchool (MCS)r

TESTIMONIO

DUELO Y RESILIENCIA en pandemia

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El primer caso "latinoamericano" de COVID-19 se registró en Brasil el 26 febrero del 2020; posteriormente en marzo la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que este brote de COVID-19 es una pandemia.

os signos y síntomas de la enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19) pueden aparecer entre dos y 14 días después de la exposición al virus. Este período entre la exposición y la aparición de los síntomas se llama el período de incubación. Los signos y los síntomas más comunes pueden incluir: febre, tos y cansancio y/o difcultad para respirar; Otros síntomas pueden ser: dolores musculares, escalofríos, dolor de garganta, pérdida del sentido del gusto o del olfato, dolor de cabeza y dolor en el pecho.

La gravedad de los síntomas de la COVID-19 puede ser de muy leve a extrema. Algunas personas tienen solo unos pocos síntomas, y otras no tienen ninguno. Los adultos mayores o las personas que tienen ciertas afecciones crónicas, como enfermedades cardíacas o pulmonares, diabetes, obesidad extrema, enfermedad crónica renal o hepática, o que tienen un sistema inmunitario comprometido, pueden correr un riesgo más alto de enfermarse de gravedad.

Mientras una parte del mundo comienza a relajar las medidas de confnamiento, y poco a poco avanzamos en el plan de reapertura económica en medio de la pandemia por COVID-19. Hoy queremos resaltar el testimonio de un paciente que se infecta de COVID-19 y ante todo pronóstico desfavorable por padecer más de una enfermedad crónica como DIABETES y enfermedad de CASTLEMAN, fue capaz de superar esta circunstancia que le marco la vida con duelo y al mismo tiempo lo hizo ganar esta batalla al sobrevivir al contagio por Coronavirus y nacer de nuevo.

Rolder Geovanny Portillo Núñez, de nacionalidad Hondureña, residente en la ciudad de San Pedro Sula; Es paciente conocido por el servicio de Angiología/Dr. Juan Ramón Barón y Diabetólogia/Dra. María José García de

la Unidad Vascular y Pie Diabético en Honduras. Con 21 años de ser DIABETICO, ha presentado una de las complicaciones más frecuentes de la diabetes; La Neuropatía Diabética Periférica, que le causo la perdida de sensibilidad en los pies que lo ha llevado a desarrollar ulceras y amputación de dedos en ambos pies.

Rolder Portillo de 37 años de edad, comerciante de profesión; casado hace 19 años y padre de 4 niña; recibe una noticia hace 18 meses que complica a un más su estado de salud, al diagnosticarlo con enfermedad de CASTLEMAN; Un trastorno raro que se presenta por lo general en personas con un sistema inmune débil, afecta uno o varios ganglios y puede complicarse al aumentar el riesgo de cáncer (Linfoma maligno).

Lograr con tratamiento médico y quirúrgico, descartar cualquier cáncer maligno, Rolder logra establecer su salud y seguir adelante; pero hasta este momento la vida le tenía preparado otro desafío de salud que tenía que vencer; El pasado 4 de marzo se confrma el primer caso de COVID-19 en Honduras, procedente del extranjero; pocos días después el 14 de marzo, Rolder inicia con síntomas de malestar y picazón en la garganta, dolor de cabeza, que empeoro a los 2 días con febre de 39.5 grados, mas tos seca muy molesta que terminaba en vómitos, en poco tiempo comenta sintió difcultad para respirar y la sensación de falta de oxígeno.

Síntomas que lo alertan a visitar un médico, confrmando por radiografía de tórax un derrame pleural (líquido en los pulmones), confrmando por prueba rápida y PCR positivo, el diagnostico de COVID-19.

Rolder Portillo inicia su batalla al COVID-19, comenta que duro 45 días confnado en su casa bajo supervisión médica por el hospital del seguro social hondureño y todas las medidas de bio-seguridad. Asegura que sintió "Temor" por qué sabia era una enfermedad mortal y "Miedo" de dejar a sus hijas. "hubieron momentos en los que no podía respirar y dar 2 pasos era como si hubiera corrido una maratón; sentía la impresión casi que iba a morir asfxiado y me daba miedo".

Mientras él luchaba, el duelo se presentó en su familia, al perder un primo en el extranjero (Estados Unidos) que también era diabético y desarrolló la forma severa de la enfermedad COVID-19 y murió por una complicación de ranal (colapso del riñón), lo que aumento más su miedo a morir. Asegura Rolder vivió "una situación dura" y que "no es fácil pasarlo".

A pesar de estar aislado en su propia casa, no podía entrar ningún familiar a verlo, los miraba atreves de una ventana a 2 metros, dejaban su ropa y comida en la puerta y se alejaban para él pudiera recogerla. Paso 38 días encerrado,

DRA. MARÍA JOSÉ GARCÍA Diabetóloga & Nutricionista donde refere realizaba terapia de “risa” y escribía diariamente lo que vivía; hasta que salió el 3er hisopado faríngeo negativo para COVID-19, pero permaneció aislado por 15 días más por temor de presentar otros síntomas.

Actualmente Rolder es una de las 1,277 personas curadas hoy en Honduras, el segundo país en Centroamérica con el mayor número de casos por COVID-19. Esto lo hace ser ganador comenta; por que vio personas morir a pesar de no tener las enfermedades que el padece, motivo por lo que lo llaman para preguntarle que hizo y les de consejos cómo sobrevivió al COVID-19.

Su caso es singular, ya que por sus enfermedades su pronóstico de vida no era bueno, logro ganarle la batalla a la muerte; aunque después de 90 días de iniciados los síntomas, continua la difcultada para respirar, debe limitar caminar, levantar cosas pesadas, levantar sus brazos o incluso mirar hacia arriba por que aún siente le falta el aire; una tos leve que persiste.

Aunque venció la enfermedad sigue luchando con lo más fuerte, pues comenta que la discriminación es un reto que está viviendo él y su familia, ya que la información en redes, internet, televisión y radio crea pánico al posible contagio con una persona que tiene o tuvo COVID-19, difcultando la reincorporación a la sociedad.

PANDEMIA SUPERADA

A

lo largo de la historia de la humanidad han ocurrido diferentes pandemias que han generado grandes pérdidas humanas y económicas. Quizás la primera registrada ocurrió en el 430 A.C. durante la guerra del Peloponeso, originada en Atenas y afectando Libia, Etiopía y Egipto. Causó la muerte de aproximadamente dos tercios de la población. Se piensa que puede haber sido un caso de febre tifoidea, una infección que puede ser fácilmente curada hoy en día. La plaga Antonina que azoto a los Hunos, Alemanes y a todo el imperio romano, al punto de que ocasiono la muerte del emperador Marcus Aurelio, probablemente a causa del virus de la viruela, se prolongó durante quince años antes de desaparecer en el 180 D.C. La plaga Cipriana inicio en el 250 y tuvo brotes recurrentes a lo largo de tres siglos. En el 541, fue la plaga Justiniana, se cree ocasionada por la Yersinia pestis, y provocó cerca de 50 millones de muertes en el mundo, cambiando el curso del imperio Romano. ¿Qué tienen en común todas esas pandemias? Ocasionaron numerosas muertes, afectaron la economía y política de las regiones afectadas, pero sobre todo, tarde o temprano fueron superadas, no por una acción específca, sino porque probablemente los que sobrevivieron desarrollaron inmunidad. Otro ingrediente en común es la propagación por diferentes regiones a través de los viajes y migración del ser humano, indicativo de que en el apogeo de una epidemia deben restringirse a lo estrictamente necesario.

Avancemos un poco en la historia, revisemos las pandemias de los últimos 100 años. En el 1918 se presentó la llamada gripe Española, por su lugar de origen. Ocasionada por un virus H1N1 aviar y causando la muerte de unos 50 millones de personas. Esta pandemia introdujo el uso de mascarillas, también se usaba la ingesta de whisky como medida de prevención y tratamiento, a pesar de que en gran parte de los Estados Unidos estaban en vigencia las leyes de prohibición de alcohol. Hay registros de poblaciones y familias que pudieron superar esta infección cumpliendo aislamiento y cuarentenas estrictas, buenas medidas de higiene y uso de desinfectantes. Fue fnalmente superada un año después, en el 1919.

En febrero del 1957, surge en Asia del Este una nueva infuenza ocasionada esta vez por un virus H2N2, también de origen aviar. Tuvo una duración de 1 año y

Una batalla épica y cíclica en la historia de la humanidad

ocasiono muerte en alrededor de 1.1 millones de personas en el mundo. Diez años más tarde, en el 1968 nos enfrentamos a otra pandemia, nuevamente por un virus aviar, esta vez el H3N2 y también causando más de 1 millón de muertes. En la primavera del 2009, se detecta en Estados Unidos una nueva infuenza tipo A por un virus H1N1, que rápidamente se dispersó por todo el mundo causando unos 60.8 millones de personas y cerca de 500 mil muertes. Cada una de las pandemias que hemos sufrido en este último siglo, ha sido ocasionada por un virus diferente y ha afectado poblaciones con características distintas. Los avances de la ciencia nos han permitido investigar y clasifcar cada vez con más precisión al organismo responsable, también hemos podido diseñar y usar vacunas y tratamientos antivirales para prevenirlas y combatirlas. Hemos aprendido comportamientos y hábitos diferentes, que son importantes estrategias para reducir contagio y aumentar supervivencia. Es común ver en varios países asiáticos, sobretodo en ciudades de mucha circulación, a las personas usando mascarillas, ya sea porque están afectados de algún virus o porque no se quieren contagiar de uno, a veces incluso para protegerse de alérgenos como el polen, en las temporadas en que más arrecian. Los hábitos de higiene alrededor del mundo han ido mejorando a través de los siglos, y todo parece indicar que aún tenemos mucho espacio para mejorar en este aspecto.

La pandemia del COVID-19 ha traído muchos cambios a nuestras vidas, quizás no lo sufcientes. Veo en las calles y en las redes sociales mucha gente ansiosa de regresar a la normalidad que vivíamos antes de esta enfermedad, retomando las reuniones sociales, probablemente antes de tiempo y sin tomar las medidas apropiadas. Debemos volver a la normalidad y vamos a superar esta pandemia, sin embargo aún no estamos en el punto de haberla superado, ni siquiera tenemos la certeza de cuando llegaremos a ese punto. Es necesario que algunos de los cambios que nos han acompañado en estos últimos meses permanezcan con nosotros y nos sirvan de aprendizaje, la historia nos demuestra que esta no será la última pandemia y que lo que aprendemos de cada una nos puede servir para combatir la próxima. Mientras, mantengamos el distanciamiento social y reforcemos las medidas de higiene, y así también esta pandemia será superada.

DRA. YAWELIDA GARCÍA MD, MSC @drayawelida

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