Alternativamente Roberto Valadez Pineda Página

Por: Roberto Valadez Pineda Fotografía: Oskar Ruizesparza

rvp67@yahoo.com ! LLENAZO ! … PERO EN EL CALLEJÓN DE LA NUEVO PROGRESO

Sin duda alguna la expectativa por ver a la primerísima figura del toreo ibérico y mundial, Morante de la Puebla, desbordó todos los pronósticos el pasado fin de semana en Guadalajara, ya que pocas veces se genera este interés entre los taurinos y no taurinos por ir a ver a un torero al coso tapatío.

Morante arribó a Guadalajara desde el viernes con un retraso en su vuelo de 4 horas, aún así ni medios, ni aficionados, ni La Peña Taurina Guadalajara declinaron en su espera por ver llegar al Maestro Morante al aeropuerto tapatío y tras hacer su arribo, las notas del mariachi con Guadalajara, Guadalajara, recibieron al diestro ibérico que conmovido hasta tener un nudo en la garganta, manifestó que nunca se imaginaba este recibimiento de la gente de Jalisco. prácticamente se dio el lleno en la parte de sombra, sol con un buen aforo y las partes generales del coso tapatío registraron también buena entrada, en resumen hubo tres cuartos de entrada en los tendidos de La Nuevo Progreso.

Pero donde menos debe haber sobrecupo, donde más estrictas deben ponerse las autoridades para controlar el ingreso es en la zona del callejón de la plaza y fue justamente ahí en donde entró “Juan de Las Pitas” a hacer absolutamente “Nada” que tenga que ver o con las labores del personal que acompaña a los diestros, o de las cuadrillas, o de los monosabios o los representantes de la prensa.

! Llenazo entonces en el callejón de la Nuevo Progreso como nunca! Lástima que esos ingresos no cuentan ni en la taquilla porque todos los que no tenían nada que hacer, “Entraron de Gorrita Café” a

estorbar, o a hacer bola, o a hacer yo me pregunto ¿qué?

Desde el tendido comencé a contar las personas que había en el callejón y solamente desde las que alcancé a ver por la óptica de mi tendido (es decir, medio ruedo porque el otro medio me queda abajo sin ángulo de visión), conté al menos 150 personas, entre ellas los que ahí abajo deben trabajar como monosabios y cuadrillas, pero mucha gente que no tenía absolutamente nada que hacer ahí abajo, entre ellos ex-matadores de toros, o matadores de toros en activo que entran como en su casa al callejón cuando no tienen en verdad nada que hacer ahí adentro.

Si a esto le sumamos que también se colaron amigos de los amigos de los amigos, que la pregunta sería ¿quién les dio permiso de meterse al callejón?, entonces podemos ver claramente que hubo un sobrecupo impresionante el domingo en esta zona de la plaza y que es responsabilidad total del nuevo juez, Arnulfo Martínez Rodríguez y del Jefe de Callejón, “El Peque” Barbosa quien bajo sus hombros cargan con esta obligación y responsabilidad. no nada más las vidas de los que están profesionalmente por trabajo ahí, sino también las vidas propias de esos colados que no saben ni cómo actuar ante un percance.

Y en serio que no estoy exagerando porque el domingo estuvo a punto de suceder una tragedia cuando en el toro de regalo de Silveti corneó a Diego, entró mucha gente al ruedo a asistirlo, pero cuando abrieron las puertas del callejón, más de 25 personas lo querían cargar y de pronto el astado enfiló hacia las puertas abiertas y de no ser por la intervención milagrosa de uno que sí cumplía con su labor y pudo cerrar la puerta, el toro hubiera hecho chuza embistiendo a innumerables personas que trabajaban pero otras muchas más que nada tenían que hacer ahí.

En fin, que esta sea una lección reflexiva y profunda en verdad para que autoridades de callejón y juez de plaza, se fajen los pantalones y no permitan que nadie que no esté trabajando allá abajo en el callejón, se introduzca en él como suelen hacerlo matadores de toros, amiguitos y cuanto colado puede pasarse. Basta de poner en riesgo a los que trabajan cada festejo y basta de colados en el callejón.

Y el problema realmente no es el que estén ahí o no, el problema es que obstruyen la labor de quienes trabajan en el callejón, de los periodistas que están haciendo su trabajo y peor aún, ponen en riesgo Y como dijo Sócrates con su frase célebre que yo aplico al mundo taurino: “Yo sólo sé que no sé nada por eso sé más que el que cree saber que todo lo sabe”. Nos leemos hasta la próxima. Saludos