Ordóñez Acosta, Eduardo “Eduardo Ordóñez”

Aranjuez en solitario con dos toros de “La Herguijuela” y otros de Amparo Valdemoro, en un festejo organizado por él mismo que desgraciadamente le ocasionó cuantiosas pérdidas económicas: “Fueron tantas que no rendí en el ruedo lo que debía, aún sin estar mal; porque la cabeza no se cansaba de echar números en lugar de torear”. El balance de su actuación fue de ovación, silencio, oreja y silencio. Toreó solamente 3 corridas de toros en su nueva aventura de matador de toros y volvió a las banderillas que le aportarían mucha más seguridad.

OrdóñEZ acOsta, eDuarDo “EDUARDO ORDÓÑEZ”

Matador de toros nacido en Arriate, pedanía de Ronda (Málaga), el 19 de marzo de 1945, perteneciente a la dinastía de los “Ordóñez”, ya que es sobrino nieto del célebre Cayetano Ordóñez Aguilera “Niño de la Palma”. Su padre, José Ordóñez, era primo de los Ordóñez Araujo: Cayetano “Niño de la Palma”; Juan “Juan de la Palma”, Antonio, Pepe y Alfonso, todos toreros, y además de Ana. Sin duda alguna, el ambiente familiar debió influir en su decisión de ser torero, y en 1963 vistió por primera vez el terno de luces, en Guadalajara, con Curro Serrano, en la lidia de novillos de Mariano García. Fue el 23 de mayo. Le debieron ir bien las cosas, porque al año siguiente –1964– ya estaba anunciado en la plaza de Carabanchel (Madrid), el 26 de enero, en un festejo picado con Eugenio Vaz “Curri de Camas” y José Segura y toros de Domingo Ortega. Gustó mucho su actuación en su primer oponente, por lo que el público pidió con fuerza la oreja, que al no ser concedida por el presidente, fue obligado por el respetable a dar tres vueltas al ruedo. Este triunfo le valió para repetir paseíllo en el mismo coso el domingo inmediato, 2 de febrero, donde volvió a demostrar sus excelentes cualidades para ser torero al cortar los dos apéndices auriculares al segundo oponente de su lote de la vacada de Molero Hermanos. De nuevo repitió en la carabanchelera plaza el domingo siguiente, día 9, con novillos toros de “Los Campillones” y de Hernández Plá, sin que esta vez pudiera redondear la tarde. Precedido de tales triunfos, se presentó de inmediato en Las Ventas, el 15 de marzo del mismo año, con novillos de “El Pizarral de Casatejada” junto con Rafael Corbelle y Francisco Martínez “El Botines”. Ovación y palmas fue el balance de su actuación, balance que no hacía justicia en absoluto a sus excelentes cualidades

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toreras. Terminó la temporada con 25 novilladas picadas, la última, la de su presentación en Sevilla, el 4 de octubre, festejo en el que resultó herido de cierta consideración por un novillo del Marqués de Ruchena, como todos los del encierro. Sin embargo, pese a tan brillantes inicios con picadores, la temporada de 1965 marcó un claro declive en su carrera y solamente se pudo vestir de luces en 6 ocasiones, que se redujeron a 5 novilladas en 1966, y parecida tónica fue la que marcó sus siguientes temporadas, por lo que Eduardo, optó por abandonar espada y muleta y cambiar el oro por la plata y coger el capote de brega y las banderolillas. En 2001, cuando ya era Director de la Escuela Taurina de Jerez de la Frontera, saltó a la prensa la sorprendente noticia de su alternativa, con 37 años. En este caso se produjo el cambio de la plata al oro, a la antigua usanza. El festejo se celebró en Olvera (Cádiz), el 26 de agosto de 2001, con Ruiz Miguel de padrino, que en presencia de Antonio Lozano le cedió el toro “Reposado”, negro, herrado con el número 156 de Núñez del Cuvillo. Eduardo Ordóñez, que vestía de pistacho y oro, fue aplaudido con el toro de su alternativa y cortó las orejas al último del festejo, saliendo a hombros de la plaza con sus compañeros de terna. Esta corrida fue su única actuación como matador de toros. Se dijo entonces, que Eduardo Ordóñez, funcionario, necesitaba tener la alternativa de matador de toros para poder dirigir la Escuela Taurina de Jerez, y que la corrida fue organizada por la misma Escuela, como lo demostraba el hecho de que Antonio Lozano que actuó de testigo fuese al mismo tiempo Director Técnico de la misma. Sin embargo, el 17 de marzo de 2014, Victoria Ordóñez aclaró en telegrama el hecho pidiendo que se rectificasen las declaraciones vertidas por algunos medios en ese sentido: “...después de ver la ficha de Eduardo Ordóñez deben hacerse modificaciones. La corrida la organizó la Asociación Cultural Taurina de Jerez “Ajoba”. No se tomó la alternativa por necesidad del cargo ya que el reglamento andaluz de Escuelas contempla que se puede ser Director de Escuelas habiendo toreado veinticinco novilladas con picadores y esa condición la tenía Eduardo Ordóñez. Atentamente, Victoria Ordóñez”. Ignoramos si el apellido de dicha señora es mera coincidencia. Así pues, Eduardo Ordóñez no solo continuó siendo el Director de la Escuela Taurina de Jerez, sino también Presidente de la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas. Ese mismo año, en la Memoria del Proyecto de FOMENTO DE LA CULTURA TAURINA ANDALUZA correspondiente al Año 2001, que fue presentada por Alfonso Perales Pizarro, Consejero de Gobernación y el ya retirado matador de toros Manuel Vázquez Garcés, Presidente de la Fun-

dación Andaluza de Tauromaquia. (F.A.T), dijo Eduardo Ordóñez en su presentación: “Un año más podemos decir con satisfacción, que las Escuelas Andaluzas de Tauromaquia están siendo apoyadas por las instituciones andaluzas, Ayuntamientos y Diputaciones. En el curso 2001, la Consejería de Gobierno, en el decreto 112/2001 de 8 de Mayo, se aprueba el Reglamento de Escuelas Taurinas, y podemos sentirnos orgullosos, todas las partes, pues en la elaboración de dicho reglamento las Escuelas Taurinas han participado activamente con sus aportaciones para hacer un reglamento consensuado. Por ello reconocemos la sensibilidad que ha tenido la administración con la Fiesta de los Toros a través de las Escuelas de Tauromaquia y tenemos que felicitar al Consejero de Gobernación del Excmo. Sr. D. Alfonso Perales Pizarro, a su Director General de Espectáculos Públicos, Juegos y Actividades Recreativas D. José Antonio Soriano Cabrera y a todo su equipo que ha desarrollado dicha reglamentación de Escuelas Taurinas. Hoy con este Reglamento, tenemos un instrumento para que nuestras escuelas sean cada vez más responsables y más profesionales, pues el futuro de la Fiesta de los Toros dependerá en una parte importante de los profesionales que formemos y de los nuevos valores que salgan de dichas Escuelas. Por cuarto año consecutivo, hemos realizado el Proyecto de la Cultura Taurina de Andalucía, conjuntamente con la Fundación Andaluza de Tauromaquia, y podemos sentirnos orgullosos, ambas partes, de haber llevado un proyecto como el de F.C.T.A. a que sea reconocido por el mundo de la tauromaquia como modélico y potenciador de nuestra cultura taurina. De los trabajos realizados que presentamos en esta Memoria, está el Proyecto de Fomento de la Cultura Taurina de Andalucía, que se ha visto un poco debilitado en el número de festejos del Ciclo de Becerradas, por el problema de la Encefalopatía Espongiforme, pero no obstante el Ciclo de Becerradas se resolvió con brillantez, celebrándose dos Semifinales y una Final, interviniendo alumnos de todas las Escuelas Andaluzas. En el Ciclo de Novilladas sin picadores puede considerarse un año de éxito, tanto en el ganando como en las actuaciones de los jóvenes novilleros. Otro de los proyectos importantes que reflejamos en esta memoria, ha sido el II Encuentro Andaluz de Escuelas Taurinas, celebrado en la ciudad de Jerez, donde ha habido novilladas, ponencias e intercambios de experiencias entre todas las Escuelas Taurinas habiendo constituido un rotundo éxito según todos los asistentes. Uno de los apartados a tener en cuenta en esta memoria, es la programación de Actividades Culturales que han comenzado a realizar algunas Escuelas Taurinas. Quiero finalizar agradeciendo a